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E S P A C I O A B I E R T O

Marina Colasanti

Penélope manda
recuerdos

© Grupo Anaya, S. A., Madrid, 2005


Espacio Abierto
Trabajo realizado por: Ana Pinar
Coordinadora del proyecto: Martha López y Revelles
Director editorial: Antonio Ventura
www.anayainfantilyjuvenil.com
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El espejo no refleja la cara de ese hom-

1A RGUMENTO
bre, al cual sus amigos ya no conocen.
De nada le sirve ir todos los días al mis-
mo bar, ya siempre le miran como a un
Pues se trata de un género que tiene la desconocido... ¿Cómo no si es un extra-
capacidad y la virtud de enfrentarse de ño para sí mismo?
manera abierta y directa con los grandes Unas casas, habitadas por sombras a las
temas de la literatura: la soledad, el mie- que les incomodan las rotundas formas
do, el amor, la venganza, la risa, la co- de los vivos... La presencia y la ausencia
bardía, la locura, la muerte, también la pueden llegar a ser inseparables, más ra-
guerra, o el combate al menos. (MARÍAS, ros amores los vetustos muros han visto.
Javier. Cuentos únicos. Siruela. 1995) Que tu mano izquierda no sepa lo que
hace la derecha, dice la Biblia. ¡Qué será
Así describe Marías las «virtudes» de los de este atribulado caballero cuya mano
cuentos fantásticos y, de todo lo que adquiere vida propia! ¿A quién pertene-
apunta el escritor en el fragmento ante- ció ese guante violeta que se ha posesio-
rior tratan los relatos que conforman nado de la voluntad de su brazo, de su
este libro: mano, y al final, de su vida?
En una villa retirada donde artistas y
científicos sueñan sus invenciones, se Según una teoría moderna, los mitos y
cuela un etéreo gato que nadie ve pero leyendas se inventaron tan solo para
todos oyen... ¿Acompaña a una felina explicar fenómenos naturales. (...) Es
mujer? ¿O acaso es ella misma? imposible creer que nadie hubiera podi-
Una casa extraña, opresiva, un indolente do inventar historias tan complicadas
criado oriental, su señor desaparecido, solo para explicar cuestiones tan mun-
¿quizá tras la llamada de los lobos que danas como el trueno y el relámpago,
aullaban en las frías noches de su infan- las tormentas y los terremotos. El he-
cia? cho es que nuestros antepasados, cuyas
Una partida de dominó... Las fichas con- mentes estaban mucho menos confusas
vertidas en los muros que limitan el ca- que las nuestras, eran capaces de ver,
mino de un insecto que se ha posado en oír y describir todos los misterios de un
la mesa... El insecto escapa volando de mundo invisible para los ojos moder-
esos lúdicos muros. ¿Cómo escapará el nos.(PAGE E INGPEN. Enciclopedia de las
jugador cuando en medio de la noche la cosas que nunca existieron. Anaya. Ma-
puerta de su cuarto se convierta en ficha drid, 1987)
de dominó, en muro infranqueable? Él,
bípedo implume que carece de alas...

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Y hablando de cine —pues difícil es no

2C OMENTARIO
mencionarlo tras la lectura de este libro,
por algún parecido argumental, y por la
forma misma de escritura—, el narrador,
Ni espero ni quiero que se dé crédito a la que se dirige continuamente al lector,
historia más extraordinaria, y, sin em- conduciéndole por las «escenas» de cada
bargo, más familiar que voy a referir. cuento, se comporta como la cámara,
con la que siempre se identifica el espec-
Con esas palabras empieza uno de los tador... Además, lo que ocurre en la pan-
cuentos más conocidos de Edgar Allan talla está en presente de indicativo, por-
Poe: El gato negro. Las mismas podrían que cada vez que las imágenes llenan la
aplicarse a cualquiera de las narraciones blanca superficie todo ocurre de nuevo y
de este libro que comentamos y que tam- se vuelve actual. Así sucede en estas pá-
bién se abre con un relato inquietante- ginas en las que el presente es el tiempo
mente felino. Todas las historias que va- verbal más utilizado de forma, creo, in-
mos a leer se caracterizan por producir tencionada.
en el lector un hondo desasosiego, y sin Se ha mencionado la atmósfera, en estos
embargo, nada declaradamente sobrena- cuentos el ambiente es el elemento que
tural ocurre en ellos, pero continuamente confiere su peculiaridad a lo que aconte-
se sugiere. ¿Y qué hay más inquietante ce: antiguas mansiones, extrañas habita-
que esa sugerencia? No es lo que mues- ciones en las que sus moradores parecen
tra la oscuridad lo que nos asusta, sino prisioneros, estancias que se convierten
lo que oculta. En una excelente película, en museos de la memoria de sus ocupan-
The bad and the beautiful, de Vicente tes, montes nocturnos donde aúllan los
Minnelli, un productor cinematográfico lobos, villas artificiosas pobladas por vi-
se interroga sobre como conseguir que sitantes casuales que se quedan casi ais-
una película provoque un escalofrío en la lados del mundo... y sobre todo calles de
sala de proyección: no hacen falta efec- ciudades corrientes que dejan de ser vul-
tos especiales, ni monstruos, ni fantas- gares para convertirse en lugares de pe-
mas... solo se requieren sombras y un sadilla.
buen guión; la película que se rueda den- Y es que la realidad tiene en estas pági-
tro del film citado, trata de misteriosas nas un lado oscuro, cada personaje pue-
criaturas, mitad persona, mitad pantera. de descubrir dentro de sí mismo un Mis-
Jacques Tourneur había dirigido La mu- ter Hyde al mirarse en los demoníacos
jer pantera, que tuvo presente Minnelli, espejos. En cualquier momento uno deja
¿y quizá también Marina Colasanti, de pertenecerse, ¿por qué ha de ser ese
nuestra escritora? desconocido que se contempla en la año-

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sa foto, él mismo? Kafka nos presentó el nuamente se nos recuerda que somos lec-
horror de levantarse convertido en un in- tores, que asistimos a la elucubración del
secto, nuestra escritora nos descubre un escritor que puede situar el observatorio
personaje que acaba sabiendo que quizás en diferentes puntos de vista. Y además
no sea en nada diferente a tan repulsivo se nos pregunta si no somos todos en rea-
ser. lidad el personaje literario que nosotros
Las escaleras mecánicas, las cintas desli- «escribimos»: ...que se mostraba uno
zantes que nos llevan por pendientes y ante el público, pero que escondía otro
caminos sin principio ni fin son como es- entre líneas. (Página 53).
tas historias. En ellas el final se esconde
cuando se llega a la última página, y en ❑ REFLEXIONAR ACERCA DE LA
esa profundidad que engulle las escaleras LIBERTAD
y las cintas, reside el horror que el lector Asímismo en estas páginas se plantea
intuye porque no se le explica. también el tema de la libertad: ¿somos
dueños de nuestro destino o lo más que

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podemos hacer es no caer de las escaleras
mecánicas que se mueven sin nuestro con-
ALORES curso?, ¿somos acaso menos libres que un
insecto mísero con el que cualquiera pue-
❑ INDAGAR EN EL «YO» de jugar en la mesa de un bar? Nosotros
¿Qué hace que nos fascinen el horror, el no podemos volar... nuestra imaginación
escalofrío que provocan en nosotros los sí, ¿no es un buen motivo para leer?
«buenos cuentos maléficos»? La lectura

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de este libro nos hace reflexionar sobre
ese lado oscuro que podemos presentir
en nosotros. UTORA
La autora dirige esa reflexión a repensar
en que consiste la propia identidad: esta- Marina Colasanti nació en Etiopía en
mos hechos solo de memoria, somos un 1937. Durante su infancia vivió primero
conjunto de fotos que muestran un ros- en África, después en Italia y en 1948
tro de diferentes edades, ¿por qué lo lla- marchó a Brasil. Ha trabajado como tra-
mamos «yo»? ductora, periodista, animadora de televi-
Esa cuestión se aborda en estas páginas sión, diseñadora gráfica y acuarelista. Es
desde una doble perspectiva: la filosófica autora de numerosos ensayos, poesía y
y el discurso metaliterario. Por un lado se cuentos. En el ámbito de la literatura in-
habla de la esencia de la persona y por fantil ha otorgado nuevo vigor al género
otro se nos coloca fuera del relato, conti- tradicional de los cuentos de hadas.

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A C T I V I D A D E S

Uno de ellos no tiene o, mejor dicho, tie-


ANTES ne una voz muda, silenciosa, que existe y
que no existe, que está en el aire. (Página
74)
DE LA LECTURA
El hombre está atento a imprevistos,
PENÉLOPE SE PRESENTA porque los imprevistos pueden echar a
¿Quién es Penélope? ¿Por qué es tan ex- perder las apariencias. (Página 88)
traño el retrato que aparece en la cubier-
ta? Sugeriremos a los lectores que se fijen Estas líneas describen y ocultan a los seis
en la ilustración y que lean el texto de personajes que protagonizan los cuentos
cuarta de cubierta. Después cada alumno que se van a leer. Pediremos a los jóvenes
escribirá un texto breve en el que Penélo- que los retraten, procurando reflejar
pe se presente a sí misma, (con el miste- todo su misterio. Con todos los retratos
rio que requiere su antifaz, claro). decoraremos la clase. Cuando se haya le-
ído el libro cada uno podrá añadir los
EXTRAÑOS PERSONAJES detalles que quiera a sus dibujos.

Ella tenía al fin y al cabo cara de gata. CUANDO ANOCHECE EN LA CLASE...


Nada muy definido, claro, solo un aire. Preguntemos a los alumnos si han senti-
(Pág. 7) do alguna vez una oscura presencia a su
lado, si en algún momento han estado
El señor le dijo un día, un día en que, realmente asustados, si conocen algún
aunque no especialmente frío, se frotaba cuento realmente terrorífico.
las manos queriendo calentarse, que el Apaguemos las luces, formemos un cír-
señor le dijo: «Tengo la nieve metida en culo y escuchemos las terribles palabras
los huesos». (Página 29) que susurran los compañeros...

El hombre está resentido. Lo aclaro aun- CUANDO SE HACE LA LUZ DE NUEVO


que tú puedas descubrirlo solo por la ex- ¿Y si diéramos la vuelta a los relatos que
presión del rostro, por las arrugas que se narraron en la actividad anterior? Pro-
asoman al fruncir el entrecejo, por la lí- pondremos que cada uno elija uno de
nea amarga de la boca. (Página 46) ellos y que lo escriba transformándolo en
una historia de humor. Todo es cuestión
Un hombre sale de casa, va y viene. Se del punto de vista que se adopte...
muestra y se esconde. Está fuera y está
dentro. (Página 52)

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LA NEGRA TINTA DEL PERIÓDICO dar su versión de los hechos que no son
Lo que dio comienzo a su desaparición, exactamente hechos. (Página 74)
no obstante, no está en esas revistas. Es-
taba en un periódico que tiró a la basu- Organizamos a los lectores en tríos y les
ra. En una noticia que leyó mucho antes pedimos que recuerden un acontecimien-
de desaparecer. (Página 30) to que hayan vivido o conocido los tres.
Cada uno redactará su versión, ¿vieron y
El horror puede estar a la vuelta de la experimentaron todos lo mismo? Por úl-
página, solo hay que saber mirar. Cada timo tratarán de escribir un relato de lo
lector escogerá una noticia aparecida en sucedido con el que este de acuerdo todo
la prensa y tomará su contenido como el grupo.
pretexto para inventar un terrorífico
cuento. LENGUAJE ANIMADO
Mujeres gatunas, hombres fascinados
SEIS TÍTULOS EN BUSCA DE HISTORIA por los lobos, personajes obsesionados
Después de leer los títulos de los cuentos por un insecto... Así son algunas de las
en el índice, sugeriremos que inventen y criaturas que pueblan las páginas que se
cuenten oralmente historias que así pudie- van a leer. El lenguaje usa adjetivos ani-
ran encabezarse. Cuando se acabe el libro males en las descripciones humanas: ras-
veremos si alguna de esas anticipaciones gos felinos, movimientos de gacela, mira-
se parece a lo que escribió la autora. da de águila, lengua viperina, cabello de
ala de cuervo...
ANTE EL ESPEJO Cada uno de los chicos y chicas escogerá
una de esas construcciones —u otra que
Desde fuera y desde dentro del espejo los se les ocurra— e inventará un personaje
dos rostros se miran. (Página 73) del reino de las sombras que pueda ser
descrito con tales palabras.
¿Qué se dirían esos rostros que son uno? Después, por parejas, escribirán un sor-
Pediremos a los alumnos que escriban prendente relato en el que se reúnan «los
diálogos entre ellos mismos y su «doble» fantasmas» de los dos compañeros.
del espejo. Después, por parejas, pode-
mos proponerles que los escenifiquen. MANDA RECUERDOS
Si todos somos tan complicados como
LAS TRES CARAS DE LA MONEDA la Penélope de la portada, si todos te-
nemos un lado oscuro como los perso-
Esta historia es difícil de contar porque najes de estos cuentos que están a pun-
tiene tres personajes, y los tres necesitan to de leerse, ¿por qué no mostrarlo

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aunque sea con sombras, con retazos? Una sugerencia: ¿y si la historia se en-
Cada uno se retratará con un collage en cuadra en un hospital psiquiátrico?, ¿y si
el que trate de reflejar su »rompecabe- esos narradores son todos pacientes?
zas» personal. Después, anónimamen-
te, se «mandarán recuerdos» con esos EL HILO DE LOS PENSAMIENTOS
retratos —como si se tratara del juego En La hora de los lobos penetramos has-
del amigo invisible— ¿serán los desti- ta el mismo interior de un personaje, co-
natarios capaces de encontrar a los re- nocemos sus pensamientos.
mitentes? Propondremos a los lectores que dejen
fluir sus pensamientos y que traten de

DESPUÉS darse cuenta de cómo discurren, de cómo


pasan de un asunto a otro. Después, con
esas ideas que hayan ido apareciendo en
DE LA LECTURA su mente pueden crear una historia tan
sugerente y tenebrosa como las que se
han leído.
LAS IMÁGENES DEL MISTERIO
Se formarán seis grupos, cada uno se
ocupará de buscar imágenes que puedan
LA HUELLA DE LA MEMORIA
Uno de los personajes que hemos conoci-
ilustrar uno de los capítulos: fotografías,
do trata de encontrarse a sí mismo en la
tenebrosos cuadros románticos, dibujos
elaborados por ellos mismos... serie de fotografías que le representan en
Con todo ese material se elaborará un li- diferentes momentos de su vida. Propon-
bro paralelo al leído, en el que se trata de dremos que hagan ellos lo mismo. Cada
dar forma visual a los misterios solo uno hará un mural de «sí mismo» con
imaginados con las palabras. las fotos que considere más significati-
vas. Con todos ellos montaremos una
REUNIÓN VIRTUAL exposición titulada: «¿Quiénes somos?»
Sugeriremos que escriban un séptimo
cuento: en él se encontrarán todos los MÁS HUELLAS DE LA MEMORIA
protagonistas de los relatos del libro: Pediremos que repitan la actividad con
¿cómo transmitirá cada uno su particu- fotos de sus abuelos o bisabuelos. Una
lar visión del horror?, ¿dónde podrán en- vez realizado el mural podrían escribir
contrarse? Recordaremos que el ambien- un relato en el que intentarán reflejar la
te es fundamental para que un cuento de persona que realmente fue (¿o no fue?)
horror funcione y que insinuar es mucho ese ascendiente suyo al que quizá solo
más efectivo que decir. han mirado rutinariamente.

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FOTONOVELA SOMBRÍA LOS ABISMOS POÉTICOS


Se formarán seis grupos, cada uno se También los poetas han sentido la
ocupará de crear una fotonovela a partir atracción de lo desconocido, también se
de uno de los cuentos. La forma de escri- han preguntado quiénes somos, tam-
bir de la autora proporciona numerosas bién han vivido el desconcierto que
pistas a la hora de escoger los detalles a produce el paso del tiempo:
fotografiar.
Después de haber captado las imágenes Me miré imperturbable
podrán ordenarlas y completarlas con Y me pregunté Qué hago allí
los fragmentos que consideren más signi- «Busco solo una Vida que dejé
ficativos de cada cuento. ¿Seguirá por aquí?»
Me apoyé en el Temor
NUEVA CUBIERTA Me detuve en el Antes
Sugeriremos que realicen un collage en el El segundo avanzó como un Océano
que aparezcan las principales criaturas de Y rompió en mi oído
los seis cuentos, y que inventen un título
general para los seis. Sus propuestas po- Solté una sonora Carcajada
drían haber sido las portadas del libro. Tenerle miedo a una Puerta
Yo que la Consternación había conocido
ALMA ANIMAL Y jamás retrocedí.
Los gatos son los compañeros insepara-
bles de las brujas, los lobos han poblado Estos versos pertenecen a un poema de
nuestros sueños infantiles, una ballena se Emily Dickinson, y son una buena mues-
tragó a Jonás, los egipcios representaron tra de esa fascinación. ¿Se atreven los jó-
escarabajos por doquier, los indios consi- venes a inventar una narración a partir
deran sagradas a las vacas... de esas estrofas?
Propondremos que cada uno seleccione Los lectores pueden buscar poemas que
uno de esos animales tan ligados a las recojan los temas que tratan los relatos
tradiciones y que inventen un cuento del libro. Se recitarán en clase y podrían
fantástico sobre él. copiarse y decorarse. Serían un excelente
epílogo para dichos relatos. Y quizá sean
el germen de otras nuevas historias, ¿por
qué no?

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