Tenemos que quitar la mirada de nosotros mismos, sino caeremos en un
círculo vicioso temporal en el que nos encontraremos buscando lo que queremos tener o solucionar, esta buscada fuera del orden del Señor nos terminara asfixiando y frustrando. El orden correcto es buscar su Reino y todo nos será añadido!!! Nuestro propósito para vivir no pueden ser nuestras familias, trabajos etc… Debemos accionar en el propósito eterno del Señor, que es que otros le conozcan, para esto permanecemos aquí en la Tierra. Él te incluyo en su propósito como colaborador, tienes un ministerio dado por el Padre, eres un EMBAJADOR Y RECONCILIADOR. Y todo esto proviene de Dios, quien nos reconcilió consigo mismo a través de Cristo y nos dio el ministerio de la reconciliación. Esto quiere decir que, en Cristo, Dios estaba reconciliando al mundo consigo mismo, sin tomarles en cuenta sus pecados, y que a nosotros nos encargó el mensaje de la reconciliación.
Levántate, quita la mirada de lo temporal, camina en
el propósito eterno, para esto permaneces todavía aquí. Bendiciones.