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MITOS

 LAS ANIMAS

1 Un matrimonio sin hijos pero muy felices, ella se llamaba Manuelita Canale y su esposo mayor que ella don Camilo Canale, este señor
trabajaba en la empresa como guarda de noche cuyo nombre era Antigua casa de Aduanas y Agente de Barcos Ansaldo y Co. Dicho matrimonio
hacía una vida normal, gente de buenas costumbres y muy respetada. hasta que un día los dos de común acuerdo decidieron que iban a
cambiar sus hábitos debido al trabajo del señor Canale, sus vecinos no los criticaban ni se metieron para nada en esa resolución del
matrimonio en cuestión, entonces su esposa decide que a las 23 hs.le llevaría el almuerzo a las 3 de la mañana un cafecito caliente con tortillas
fritas y otras cosas cocinadas por ella. Y a las 6 de la mañana lo esperaba para cenar, se iban a dormir a esa hora y se levantaban a las 17 hs.
pm. Eso lo hacía todos los días, hasta que un día lunes, la señora escucha en su calle a muchas personas rezando, sale para ver y cuando va a
entrar a su casa una de ellas le entrega una vela encendida, como la señora estaba atareada. la pone en un rincón de su vivienda.Eso sucedía
todos los lunes y ella hacía lo mismo. cada vez. Un día la señora enferma y una vecina le dice al esposo que la lleve al médico, pero este no le
encuentra nada en especial. pero ella sigue cada vez peor hasta que van a buscar al cura, este al ver en las condiciones que estaba le dice a una
de las personas que la cuidaba que vaya a buscar una vela, porque le iba a suministrar los Santos Óleos. como no encontraron las velas, el
sacerdote le pregunta a la moribunda donde pueden encontrar una vela. La señora le dijo el lugar adonde ella ponía las velas de la precesión,
van a buscarla y en su lugar encuentran huesos de personas, El sacerdote se santigua y le pregunta a la señora y esta le cuenta lo sucedido, el
cura horrorizado le dice a la mujer que como sea vaya al cementerio a enterrar esos huesos, pero para más seguridad que la acompañen dos
niños. Como pudo, la señora Manuelita se levantó de la cama y además de los dos niños la acompañaban personas del barrio, al cementerio,
cuando esta estaba enterrando los huesos, se escuchan a muchas personas en un desde ultratumba que la perdonaban, y así ella recupero su
estado.

2 A finales del Siglo XIX, muchas de las casas del barrio de San Telmo, en la Ciudad de Buenos Aires, quedaron desabitadas a consecuencia de la
epidemia de fiebre amarilla. En una tarde de invierno como tantas, los pocos vecinos que quedaban en el barrio, se reunieron en la casa de los
Quiroga para hacer la tertulia y festejar el cumpleaños de Enriqueta, la hija mayor del prestigioso comeciante.La tarde comenzó a hacerse
noche y todo se cubrió de sombras, como era natural, los chicos de la casa fueron poco a poco entregándose al sueño. Remigio, el menor de
los Quiroga, se quedó asomado a la ventana escudriñando la noche. De pronto, vio como de las casas abandonadas, una a una se fueron
abriendo las puertas y una fila de luces comenzó a deslizarse por la calle hacia el norte. El grito desgarrador de Remigio, llevó a todos junto a la
ventana. El silencio se hizo oír y nadie pudo por un buen rato despegarse de allí. Blancas siluetas, sin rostro y con una potente luz por delante
se dirigían en hileras de dos en dos rumbo a la Catedral. Los más valientes o tal vez los más asustados, fueron los primeros en decir que eso
que estaban viendo era La Procesión de las Ánimas. A los niños, nada más el nombre, empezó a estremecerlos. Esa fue la primera vez que la
vieron, pero no fue la última. La Procesión de las Ánimas, o la Santa Compaña, era como una procesión de almas en pena que vagaba por la
ciudad durante la noche. Portaban algo en sus manos: una luz, una vela, un candil, o incluso un hueso encendido. A veces lo hacían en silencio,
otras tañendo pequeñas campanas. El olor a cera y un ligero viento eran las señales de que estaba pasando la legión de espectros. Los
hombres dejaron de salir de sus casas por la noche, para no cruzarse en alguna encrucijada con los difuntos. Los más valientes, los que no
tenían miedo, se arriesgaban a quedar condenados a vagar noche tras noche hasta el momento de su muerte o sorprender a algún otro
incauto que les sirviera de guía.

3 Las personas mayores le advirtieron pero pese las advertencias de la gente mayor, pasó la noche en vela, esperando, para comprobar la
veracidad de las aseveraciones de que esa noche llegaban los espíritus de los difuntos. “Pasada la medianoche, desde su ventana, cuando el
sueño ya comenzaba a vencerle, alcanzó a ver luces de unas velas. Varias personas marchaban en procesión; venían a la misa de bienvenida a
las ánimas.“Al pasar junto a la ventana de la curiosa, le ofrecieron una vela para que asistiera a misa. Acto seguido, la joven se quedó dormida y
despertó al día siguiente pensando que fue un sueño.“Ante las dudas, acudió a revisar el lugar donde se imaginaba que guardó la vela que le
entregaron. Descubrió un hueso. Asustada la joven ante tan espeluznante hallazgo, acudió a la iglesia a confesarse con el sacerdote, quien le
dijo que tenia que devolver la vela a los ocho días, al marcharse los espíritus.“Tenía que hacerlo a través de las manos de un niño, para que a
ella no se la llevaran los difuntos

 El conejo de la luna

1 Un día, el dios bueno se fue de viaje por el mundo tomando la figura de un hombre. Luego de haber caminado todo el día, estaba con mucha
fatiga y hambre. Sin embargo, el dios siguió caminando por bastante tiempo, hasta que se veían las estrellas y la luna brillar en el cielo. Entonces, se
sentó y mientras descansaba vio a un pequeño conejo que cenando. El dios le preguntó:

- ¿Que estás comiendo?

+ Como zacate, ¿quieres un poco?

- Muchas gracias, pero no me gusta el zacate.

+ ¿Entonces que harás?

- Tal vez morir de hambre.

+ Sabes, no soy mas que un pequeño conejo, pero si tienes mucha hambre, dejaré que me comas.
- Solo eres un pequeño conejo, pero serás recordado por todos.

Entonces el dios tomó el conejo y lo levantó muy alto hacía la luna. La figura del conejo quedo estampada. Después bajo al conejo de nuevo a la
tierra y le dijo: "Ahí está, tu retrato el luz para que seas recordado por todos los tiempos".

2 Cuenta la historia, que un dios de los que existía en tiempos muy remotos decidió viajar por todo el mundo para apreciar las maravillas del
planeta tierra, para ello, encarno en el cuerpo de un hombre y comenzó con el largo trayecto. Todo iba bien, hasta que día tras día los alimentos
estaban escaseando, no había agua y el lugar más cercano para encontrar provisiones estaba tan lejos que era imposible llegar rápidamente.El
agotamiento y el hambre venció al pobre hombre, quien desesperado por descansar reposo bajo un frondoso árbol. Espero en ese lugar hasta el
anochecer, acompañado de las estrellas y la resplandeciente luna, siguió su camino. Mientras estaba bajando por una empinada colina, se encontró
con un lindo conejo que estaba disfrutando de una deliciosa cena de zanahorias y pasto verde.El hombre en ese instante le pregunto al conejo que
si le podría compartir algo de su comida, pero se dio cuenta que sobraba un poco de pasto. El conejo preocupado por el estado físico del hombre,
se ofrece como alimento para que el pueda sobrevivir. El hombre al ver esa valiente acción, acepta comer al conejo, no sin antes darle algo a cambio
para que todos lo recuerden al levantar la mirada hacia la luna.Tomó al conejo, lo levanto muy alto hacia la luna y plasmo su silueta en la luna.
Desde ese día, aquel pequeño animalito que le salvo la vida a un pobre hombre quedo recordado para siempre en la luna, en donde se dice vive
felizmente.

3 Un día el dios Quetzalcóatl decidió explorar el mundo, para ese se convirtió en un hombre y viajo por todos los rincones del planeta
asombrándose de los grande y hermoso que era la tierra.Un día al final de su viaje, Quetzalcóatl caminaba por una carretera, sus fuerzas estaban
agotadas después de tanto caminar por el mundo, se detuvo y se sentó en un lado de la carretera, de pronto salió un pequeño conejo, quien
observo cuidosamente a Quetzalcóatl y decidió acercarse a él sin saber que él era un dios.El pequeño conejo se acercó y pregunto qué era lo que
sucedía, y Quetzalcóatl contesto que se sentía cansado y hambriento, entonces el conejo le ofreció de su comida pero Quetzalcóatl no comía
plantas, entonces el conejo se detuvo a pensar un momento y después le dijo a Quetzalcóatl que no tenía nada más que ofrecer, que solo era un
pequeño conejo sin importancia y que se lo comiera a él, que sin duda eso le ayudaría a recuperar sus fuerzas. Después de escuchar ese noble gesto
Quetzalcóatl regreso a su forma original y levanto aquel conejo y lo arrojo al cielo, al hacerlo su figura se quedó reflejada en la luna. Cuando bajo el
conejo Quetzalcóatl le dijo, que tal vez era solo un pequeño conejo, pero que de ese día en adelante todos lo recordarían al ver su figura marcada
en la luna.

 El monstruo del lago Ness

1 Cuenta la leyenda, que Nessie, fue uno de los primeros Nativos Pictos de los lagos de Escocia. Él, amaba a una bella aldeana, pero un ser horrendo
se sintió celoso de él, así que le lanzó una maldición que lo convirtió en un Monstruo. Nessi, muy avergonzado por su nueva apariencia, se sumergió
en el lago para ocultarse de los demás. En el año 565, San Columbo quien era un sacerdote irlandés que visitaba Escocia (Las Higlands), iba a
difundir el cristianismo entre los nativos Pictos. Al llegar, pudo ver que un Monstruo atacaba a unos pescadores del Lago. Se acercó y levantando su
cruz grito: "¡Detente!, ¡no toques a aquel hombre!" La bestia al oirlo, se sumergio tal cual lo dicho.

El 22 de julio de 1933, la familia Spicer dijo haber visto al Monstruo del Lago Ness, pero tras varias expediciones científicas, no lograron hallarlo.

2 Los habitantes de las cercanías del lago solían contarles a sus hijos historias acerca de un monstruo para mantenerlos alejados de las oscuras y
peligrosas aguas del lago. En dichas historias, el monstruo vivía en el lago y cuando tenía hambre, emergía y se transformaba en un bellísimo corcel
y esperaba para que los desdichados lo montasen, luego, galopaba directamente hacia las aguas y devoraba a su víctima. Esta historia
verdaderamente mantuvo a los niños lejos del lago pero los lugareños nunca dejaron de pescar su salmón. La primera vez que se lo ve a Nessie fue
en el año 565 cuando St. Columba, un sacerdote irlandés que viajaba a través de las Tierras Altas Escocesas (Highlands) y que difundía el
Cristianismo entre los Pictos, vio a la criatura. St. Columba conoció a algunos lugareños que estaban enterrando a uno de sus amigos quien, en un
intento de recuperar el bote que estaba a la deriva, fue atacado por la bestia. St. Columba le pidió a uno de sus seguidores que nadase hacia el bote
y que lo acercase a la costa, pero, cuando lo hace, la bestia emerge para atacar al hombre. Al ver esto, St. Columba mantuvo en alto la cruz y gritó
“Detente, no toques a ese hombre” y la bestia se sumergió. Durante los siglos XVIII y XIX se conocieron otros testimonios que describían que algo
extraño se veía en el lago. 1933 fue el año que se anunció al monstruo del lago Ness como hoy día lo conocemos.

 La reina roja

Una mujer se pasea por los templos de piedra de la ciudad maya de Palenque, en medio de la jungla de Centroamérica. Viste un traje adornado con
botones de malaquita, y en la cabeza, cuyo cráneo ha sido deformado dolorosa y ritualmente desde su niñez, lleva un tocado de largas plumas de
quetzal. Su nariz es curva y su rostro firme, pero tiene la mirada triste: su poderoso imperio, cuyos cientos de edificios escalonados destacan en la
selva de la neblina del amanecer, está sumido nuevamente en la crisis. Sabe que esta vez serán necesarios todos los esfuerzos de su marido, el gran
gobernante Pakal II el Grande, y de sus tres hijos para restablecer el orden y acabar con los codiciosos enemigos. Pero también es consciente de que
ella no vivirá para ver el reino en toda su magnificencia. Los dolores de huesos y dientes, causados por la osteoporosis, y los abscesos son
insoportables, y los constantes partos han hecho mella en su frágil cuerpo. Su muerte es llorada por todo el imperio y su marido ordena lo que
hasta ahora había sido algo sin precedente entre los mayas: sepultar a una mujer dentro de un sarcófago, en un templo. Es el año 672.
 El yet

El yeti es un ser bípedo conocido en toda la cordillera del Himalaya. En el Tíbet recibe el nombre de metoh kangmi. Camina ligeramente inclinado
hacia delante. Tiene todo el cuerpo cubierto de pelo lacio y fuerte, salvo la cara, de piel blanca o rojiza; el pelaje es más corto en el pecho y por
debajo de las rodillas. La cabeza es ovalada y puntiaguda y está adornada con una cresta de pelo. Tiene la frente pronunciada, los ojos hundidos y
las mandíbulas muy fuertes. El cuello y la espalda son anchos y musculosos. Los brazos llegan hasta las rodillas y las piernas son fuertes y arqueadas.
Los pies, anchos, están cubiertos de pelo. Desprende un olor característico, fuerte y nauseabundo. Tiene costumbres nocturnas y rehuye al hombre.
Su aullido se parece al graznido de la gaviota.De acuerdo con los rastros de huellas que se han observado y fotografiado en varias ocasiones, el dedo
gordo del pie, que se separa ligeramente hacia un lado, queda hacia el interior, lo que significa que el yeti es un primate, y no un oso como se ha
propuesto en ocasiones, puesto que en éste, el dedo más grueso es el quinto. A veces el segundo dedo es también bastante grueso, y los restantes
son muy pequeños.Su comportamiento es también típico de un primate: enseña los dientes como forma de intimidación, se rasca nerviosamente,
destruye cosas con violencia y manifiesta su cólera saltando rítmicamente en el sitio y arrancando manojos de hierba.De las observaciones directas
se deduce que es un animal omnívoro: se le ha visto devorar pequeños mamíferos, líquenes, frutas y bayas, e incluso chocolate y galletas robados a
los alpinistas.El análisis de los excrementos que se han encontrado junto a los rastros confirma estas observaciones: contienen materia vegetal,
huesos de pequeños mamíferos y aves, y restos de grandes insectos. Además, se han descubierto en esos excrementos tres nuevas especies de
parásitos intestinales, lo que sugiere que su huésped es una especie desconocida.

Leyenda
 La llorona

1 Se cuenta que existió una mujer indígena que tenía un romance con un caballero español, la relación se consumó dando como fruto tres bellos
hijos, a los cuales la madre cuidaba de forma devota, convirtiéndolos en su adoración.Los días seguían corriendo, entre mentiras y sombras,
manteniéndose escondidos de los demás para disfrutar de su vinculo, la mujer viendo su familia formada, las necesidades de sus hijos por un Padre
de tiempo completo comienza a pedir que la relación sea formalizada, el caballero la esquivaba en cada ocasión, quizás por temor al qué dirán,
siendo él un miembro de la sociedad en sus más altos niveles, pensaba mucho en la opinión de los demás y aquel nexo con una indígena podría
afectarle demasiado su estatus .

Tras la insistencia de la mujer y la negación del caballero, un tiempo después, el hombre la dejó para casarse con una dama española de alta
sociedad. La mujer Indígena al enterarse, dolida por la traición y el engaño, totalmente desesperada, tomó a sus tres hijos, llevándolos a orillas del
rio, abrazándolos fuertemente con el profundo amor que les profesaba, los hundió en el hasta ahogarlos. Para después terminar con su propia vida
al no poder soportar la culpa de los actos cometidos.Desde ese día, se escucha el lamento lleno de dolor de la mujer en el río donde esto ocurrió.
Hay quienes dicen haberla visto vagando buscando desesperada, con un profundo grito de dolor y lamento que clama por sus hijos.La culpa no la
deja descansar, su lamento se escucha cerca de la plaza mayor, quienes miran a través de sus ventanas ven una mujer vestida enteramente de
blanco, delgada, llamando a sus hijos y que se esfuma en el lago de Texcoco.

2 De los campos a las ciudades emigran muchas jovencitas en busca de su sueño, de estudios y de tener mejores trajes y dinero para ayudar a sus
familias.Esta como muchas llegó a la ciudad y se empleo en casa de ricos, enamorándose de su hijo el cual cruelmente la dejó embarazada y luego
la despidió de su trabajo.No habiendo más que hacer, se devolvió a su casa escondiendo su hijo bajo su delantal, lo cual no logró por mucho tiempo,
su familia, apegada al cristianismo, comenzó a decirle su error a todas horas, creándole gran angustia.Una noche bajo un gran aguacero corrió hacia
el río y pariéndolo lo lanzó a la corriente, al ver lo que había hecho se lanzó detrás del niño gritando y llorando.Todavía en las noches de luna
después de una creciente se oye el llanto de esta mujer, y se puede verle tras el rayo de luna en el agua del río, tratando de alcanzar a su hijo.Dicen
que el señor en su gran misericordia tendrá compasión de ella y que algún día lo alcanzará, volverá a la vida y será un gran hombre revolucionario
de la sociedad.

3 En las altas horas de la noche, cuando todo parece dormido y sólo se escuchan los gritos rudos con que los boyeros avivan la marcha lenta de sus
animales, dicen los campesinos que allá, por el río, alejándose y acercándose con intervalos, deteniéndose en los frescos remansos que sirven de
aguada a los bueyes y caballos de las cercanías, una voz lastimera llama la atención de los viajeros.Es una voz de mujer que solloza, que vaga por las
márgenes del río buscando algo, algo que ha perdido y que no hallará jamás. Atemoriza a los chicuelos que han oído, contada por los labios
marchitos de la abuela, la historia enternecedora de aquella mujer que vive en los potreros, interrumpiendo el silencio de la noche con su gemido
eterno.Era una pobre campesina cuya adolescencia se había deslizado en medio de la tranquilidad escuchando con agrado los pajarillos que se
columpiaban alegres en las ramas de los higuerones. Abandonaba su lecho cuando el canto del gallo anunciaba la aurora, y se dirigía hacia el río a
traer agua con sus tinajas de barro, despertando, al pasar, a las vacas que descansaban en el camino.Era feliz amando la naturaleza; pero una vez
que llegó a la hacienda de la familia del patrón en la época de verano, la hermosa campesina pudo observar el lujo y la coquetería de las señoritas
que venían de San José. Hizo la comparación entre los encantos de aquellas mujeres y los suyos; vio que su cuerpo era tan cimbreante como el de
ellas, que poseían una bonita cara, una sonrisa trastornadora, y se dedicó a imitarías.Como era hacendosa, la patrona la tomó a su servicio y la trajo
a la capital donde, al poco tiempo, fue corrompida por sus compañeras y los grandes vicios que se tienen en las capitales, y el grado de libertinaje
en el que son absorbidas por las metrópolis. Fue seducida por un jovencito de esos que en los salones se dan tono con su cultura y que, con
frecuencia, amanecen completamente ebrios en las casas de tolerancia. Cuando sintió que iba a ser madre, se retiró “de la capital y volvió a la casa
paterna. A escondidas de su familia dio a luz a una preciosa niñita que arrojó enseguida al sitio en donde el río era mas profundo, en un momento
de incapacidad y temor a enfrentar a un padre o una sociedad que actuó de esa forma. Después se volvió loca y, según los campesinos, el
arrepentimiento la hace vagar ahora por las orillas de los riachuelos buscando siempre el cadáver de su hija que no volverá a encontrar.Esta triste
leyenda que, día a día la vemos con más frecuencia que ayer, debido al crecimiento de la sociedad, de que ya no son los ríos, sino las letrinas y
tanques sépticos donde el respeto por la vida ha pasado a otro plano, nos lleva a pensar que estamos obligados a educar más a nuestros hijos e
hijas, para evitar lamentarnos y ser más consecuentes con lo que nos rodea. De entonces acá, oye el viajero a la orilla de los ríos, cuando en callada
noche atraviesa el bosque, aves quejumbrosos, desgarradores y terribles que paralizan la sangre. Es la Llorona que busca a su hija…

 Los aluxes

1 Estos míticos seres son constantemente comparados con los duendes por ser pequeños y traviesos. Las antiguas poblaciones mayas creaban a
estos seres con barro virgen y en algunos casos se cuenta que se le derramaban algunas gotas de sangre para que este tenga un vinculo mas fuerte
con su creador, el cual debía elaborarlo durante 7 semanas ya que solamente se podía hacer los viernes y no debían medir más de dos palmos, se le
hacían oraciones y ofrendas, para que cobrasen vida y se dejaban en lugares ocultos, el cual debían proteger, estos eran usualmente puestos en las
milpas para cuidar la cosecha de los animales y los ladrones, a los cuales les tiraban pedradas al entrar sin permiso en esos lugares, cuidado por
aluxes.Y cuando la cosecha no era buena o estaba en malas condiciones, estos cambiaban las cosechas con las más bonitas que encontraban. Al
morir su creador estos traviesos hombrecitos quedaban al servicio de yum-kaax dios del maíz y cuando aquella propiedad era reconocida por otro
dueño los aluxes les hacían maldad a las personas y a sus cultivos, bromas tan pesadas como apedrear su casa para no dejarlos dormir, maltratar a
sus animales como sus perros o sus gallinas e incluso hacerse visibles para asustar a los niños, el nuevo propietario debía ofrecerles una comida
tanto como oraciones, de las cuales la miel y el pozol de maíz eran sus favoritas, aceptando asi al nuevo amo al cual debían servir estos podían vivir
cientos de años e incluso aun siguen por ahí esperando a alguien con quien jugar.Se cuenta que en la actualidad en pueblos mayas no tan
desarrollados todavía crean a estos seres, para que cuiden sus tierras. Aunque es muy raro hoy en día encontrar aluxes en su forma de barro que
sean auténticos. Todavía podemos encontrar dos ejemplares en los cenotes de dzitnup cerca de Valladolid, estos cuidan el cenote de Samulá y están
en una pequeña cueva a la cual es imposible llegar. Pero se pueden observar. Estos podrían tener cientos de años.

2 Nos encontrábamos en el campo yermo donde iba a hacerse una siembra. Era un terreno que abarcaba unos montículos de ruinas tal vez
ignoradas. Caía la noche y con ella el canto de la soledad. Nos guarecimos en una cueva de piedra, y para bajar utilizamos una soga y un palo grueso
que estaba hincado en el piso de la cueva.La comida que llevamos nos la repartimos. ¿Qué hacía allá?, puede pensar el lector. Trataba de
cerciorarme de lo que veían miles de ojos hechizados por la fantasía. Trataba de ver a esos seres fantásticos que según la leyenda habitaban en los
cuyo (montículos de ruinas) y sementeras: Los ALUXES.

Me acompañaba un ancianito agricultor de apellido May. La noche avanzaba…De pronto May tomó la Palabra y me dijo:

-Puede que logre esta milpa que voy a sembrar.

-¿Por qué no ha de lograrla?, pregunté.

-Porque estos terrenos son de los aluxes. Siempre se les ve por aquí.

¿Está seguro que esta noche vendrán?

Seguro, me respondió.

-¡Cuántos deseos tengo de ver a esos seres maravillosos que tanta influencia ejercen sobre ustedes! Y dígame, señor may ¿usted les ha visto?

-Explíqueme, cómo son, qué hacen.

El ancianito, asumiendo un aire de importancia, me dijo:

-Por las noches, cuanto todos duermen, ellos dejan sus escondites y recorren los campos; son seres de estatura baja, niños, pequeños, pequeñitos,
que suben, bajan, tiran piedras, hacen maldades, se roban el fuego y molestan con sus pisadas y juegos. Cuando el humano despierta y trata de
salir, ellos se alejan, unas veces por pares, otras en tropel. Pero cuando el fuego es vivo y chispea, ellos le forman rueda y bailan en su derredor; un
pequeño ruido les hace huir y esconderse, para salir luego y alborotar más. No son seres malos. Si se les trata bien, corresponden.-¿Qué beneficio
hacen?-Alejan los malos vientos y persiguen las plagas. Si se les trata mal, tratan mal, y la milpa no da nada, pues por las noche roban la semilla que
se esparce de día, o bailan sobre las matitas que comienzan a salir. Nosotros les queremos bien y le regalamos con comida y cigarrillos. Pero
hagamos silencio para ver si usted logra verlos.El anciano salió, asiéndose a la soga, y yo tras él, entonces vi que avivaba el fuego y colocaba una
jicarita de miel, pozole cigarrillos, etc., y volvió a la cueva. Yo me acurruqué en el fondo cómodamente. La noche era espléndida, noche
plenilunar.Transcurridas unas horas, cuando empezaba a llegarme el sueño, oí un ruido que me sobresaltó. Era el rumor de unos pasitos sobre la
tierra de la cueva: Luego, ruido de pedradas, carreras, saltos, que en el silencio de la noche se hacían más claros.

3 En las noches cuando los hombres se entregan al sueño hay criaturas que salen al mundo. Los Aluxes brotan a la luz de la luna. Pocas personas los
ven, porque son ágiles, ligeros y traviesos. Su vida es un continuo jugar. Les gusta chapotear en las aguas, siempre están sonrientes y con ganas de
desconcertar a los humanos.Si de casualidad topan con gente empiezan a molestar con travesuras, tiran piedras y esconden pequeños objetos. Con
sus risas descontrolan la serenidad y si se asustan, son capaces de armar una algarabía mayúscula.En esos momentos hay que permanecer
tranquilos a sabiendas de quién se trata. Hay que tener paciencia y tratarlos con bondad. Si se hace, se tiene asegurado el porvenir. Las noches no
se van a ver inquietadas con la idea de que un mal viento pueda arrasar la casa. Ellos van a estar allí para protegerla. O que una plaga de ratones
termine con el maíz del granero. Los Aluxes no lo permitirán.Se dice que fueron creados por los campesinos a traveés de un rito especial, para que
cuiden sus cultivos.Pero si alguien piensa que se trata de animales o de malos espíritus y trata de ahuyentarlos se vengarán bailando en la milpa
hasta destruir los sembradíos o armarán tal alharaca que la quietud de las noches se perderá para siempre.Desde tiempos inmemoriales han
convivido hombres y Aluxes. Como no los vemos en el día no hay una idea clara de cómo deben ser tratados.La tradición nos lo dice: Hay que
regalarles comida y cigarrillos, o poner fuego, después de sus juegos en el agua tiritan de frío. Colocar una jicarita con miel o pozol. Son golosinas
que los pierden. Redituarán al ser que los atiende con cuidados hacia él, su familia y sus campos.

 El enano de Uxmal

1 Durante el imperio de Uxmal, se dice vivió en la ciudad de Kabah una mujer hechicera de edad avanzada quien cuidaba celosamente un huevo
que había encontrado de manera misteriosa, a diario se sentaba junto a él a tomar el sol hasta que un día del huevo brotó un niño, la mujer
resignada por su edad a no tener hijos cuido al niño como suyo, el tiempo pasaba pero el niño se mantenía del mismo tamaño, la mujer notó que
comenzaba a salirle barba la voz le engrosaba, así descubrió que se trataba de un enano. Un día el enano guiado por su curiosidad y el descuido de
la anciana se decidió averiguar qué era lo que la mujer cuidaba de manera excesiva frente a un caldero, al acercarse descubrió un Tunkul
(instrumento hecho con un palo hueco y que genera un sonido muy fuerte) fue tan alto el alcance del tono emitido que se escuchó resonar en la
ciudad de Uxmal. Ya estaba vaticinado que al oírse el cantar del Tunkul el reinado del actual mandatario llegaría a su fin, de inmediato el rey mandó
encontrar al culpable de tal anuncio, al llegar frente a él, preguntó al enano si había algún modo de evitar que eso ocurriera, el enano pidió al rey
que primeramente mandara labrar un camino que vaya desde Kabah hasta Uxmal, terminado el camino él regresaría a decirle la respuesta.Ya listo el
camino la bruja acompañada de su protegido se dirigieron a la ciudad que ya les esperaba ansiosos por conocer la respuesta. Al llegar mencionó el
enano que daría la solución solamente si el Rey superaba una prueba que consistía en romper con la cabeza el fruto más duro que se conoce en la
zona yucateca, conocido como Cocoyol, el mandatario aceptó con la condición de que fuera primeramente el retador quien la realizara, el Enano
accedió habiendo colocado de antemano por parte de la anciana una capa dura de metal bajo su cabeza, como era de esperarse éste resistió al
golpe; al llegar el turno del Rey se colocó en el lugar que se le indicó y al primer golpe cayó en muerte.Posterior a tal suceso el Enano fue coronado
Rey de Uxmal, la anciana le dirigió sabias palabras en las que le indicaba que ahora ella podía morir tranquila pues sabía que el lugar quedaba en
buenas manos, de igual forma le indicó ser justo y actuar de manera correcta sin dejarse cegar por el poder, así trabajó el nuevo jefe durante un
tiempo, al paso de los años fue olvidando aquella conversación y se fue dejando envolver por la malicia, al grado de un día anunciar la creación de
un nuevo dios que sería superior a los ya existentes, así mandó labrar en barro una escultura, ésta fue puesta en la lumbre para endurecerla y así
asegurar su resistencia, pero al ser retirado del calor la imagen vibró de tal manera que los habitantes creyeron que la estatua hablaba venerándolo
y adorándolo más que a los dioses.Ese acto de fanatismo creo un gran disgusto en los verdaderos seres supremos por lo cual en castigo a semejante
falta la Ciudad de Uxmal fue destruida acabando así con el gran poderío que hubo logrado a lo largo de tanto tiempo, hundiendo también el
dominio del Enano que por soberbia llevó a su pueblo a la peor de las catástrofes.

2 Cuentan que en un pueblo cercano a la gran ciudad de Uxmal, vivía una vieja hechicera, sola, sin hijos, y que deseaba ardientemente tener uno,
para que alegrara con sus risas infantiles su pobre choza.Cierto día, en su desesperación, tomó un huevo de gallina, lo envolvió en un paño y
guardándolo en un rincón de la casa, esperó los resultados. El número de días que pasaron no llegó a contarlos, pero ¡Cuál no sería su sorpresa al
notar que de aquel huevo había “nacido” un niño...! La vieja se hizo cargo de su crecimiento y educación, como si fuera su nieto; pero aquella
extraña criatura, al cumplir los diez años, dejó de crecer, quedando corto de estatura.Era enano! Hacía años que se decía entre los mayas que el que
tocara en determinada forma el tunk’ul y el sakatan, llegaría a gobernar Uxmal. Un día en que la vieja salió al bosque a recoger leña, el enano
curioso por saber el motivo del cuidado que aquella ponía en el fogón, lo removió y sacó del fondo un tunk’ul y un sakatan que allí estaba
enterrado. Entonces, llenando de expectación el ánimo de las gentes, pues aquel toque era el de la antigua profecía. La vieja al oírlo, regresó
presurosa del monte y reprendió severamente al enano que se disculpó diciendo que aquel sonido lo habían producido los pavos, que en ese
momento se esponjaban orgullosos en el patio. Un grupo de guerreros condujo al enano a presencia del poderoso Rey de Uxmal, que se levantó
indignado y lo retó a un original torneo:Gobernaría al pueblo, aquel de los dos, que pudiese resistir la quebradura de tres canastos de cocoyoles en
la cabeza y además la aplicación de cien azotes. El enano aceptó el desafío, y entonces el rey ordenó que se construyera un gran tablado en el
centro de la ciudad, para que todo el mundo pudiera contemplar el acto.La ciudad parecía de fiesta. Por todos lados se oían los gritos de los indios y
los acordes rítmicos y armoniosos de la música maya. Al presentarse los contendientes, la muchedumbre se agitó como si presintiera un
acontecimiento que había de cambiar sus destinos. Antes de la prueba, el Rey formuló al enano ciertas preguntas difíciles de contestar, pero el
enano las contestó con todo acierto y naturalidad.Fue cuando el rey, el gran Rey de Uxmal, sintió un miedo atroz y preso de infinita tristeza ordenó a
sus vasallos:-“Primero el enano. Quebradle en su cabeza los tres canastos de cocoyoles”… El enano se sometió a la prueba y con pasmosa
tranquilidad, sin que su rostro experimentara la más leve alteración, le fueron quebrados uno a uno, aquellos endurecidos frutos (la vieja le había
construido un disco de pedernal que ocultó mañosamente entre los cabellos del enano). Después el Rey se sometió a la prueba, pero murió al
tercer cocoyol que le fue quebrado en la real testa…

Una nube de admiración cruzó sobre el pueblo de Uxmal, que proclamó sucesor al enano.

-Ahora, ¿qué ordenáis

Preguntaron los súbditos al nuevo monarca

-“Construíd un hermoso palacio para que yo viva y otro para la vieja”.

Entonces el pueblo uxmalano levantó dos edificios de granito, grabados con misteriosos jeroglíficos y que había de burlarse del tiempo y de
los siglos llamados nohochpaal(niño grande) y xlabnah (casa de la vieja). Después de varios años la vieja murió, el enano se envileció y se volvió un
tirano para su pueblo. Cierto día presentó a Uxmal para que adorara en lugar de los antiguos yumes de la raza, un dios de barro que resistía contra
el fuego sin destruirse. Entonces el pueblo se sublevó contra él, lo asesinó y después abandonó los despojos de su antes floreciente capital.Cuentan
que una maldición divina cayó sobre aquella parte del mayab, y que los indios jamás volvieron a habitar aquellos suntuosos palacios, que
representa la sabiduría de los hombres que la construyeron. Ahora sirve únicamente para los científicos extranjeros y para el turismo internacional,
que le han elegido para centro de enseñanza donde se ven las maravillas que dejaron sus antiguos pobladores.

3 en el siglo XVI de un campesino de Santa Elena. Existen dos o tres versiones del relato. Sin embargo, en todas se habla de una vieja hechicera que
no podía tener hijos y que un día tomó un huevo de ave, lo envolvió en un trapo y lo puso en un rincón de su casa. Al poco tiempo nació del huevo
un niño que, pasado un año, dejó de crecer. La vieja trató como nieto al enano, y un día éste al separar las leñas del fogón que tanto cuidaba la vieja
descubrió un tunkul y una sonaja, y tocó ambos instrumentos, cuyos sonidos se escucharon en poblaciones próximas.En Uxmal se sabía que el día
que sonaran el tunkul y la sonaja, caería el rey. El soberano retó al enano a tres pruebas. Los poderes de la vieja sirvieron para proteger a su hijo. La
primera prueba que tendría que pasar era saber cuántas hojas tenía la ceiba que se encontraba frente a ellos. La segunda prueba fue la de soportar
latigazos atados de un pico que se encuentra frente al edificio conocido como el Palacio del Gobernador. Y la tercera fue ver cuál de los dos
aguantaría que le rompieran más cocoyoles en la cabeza.Es aquí cuando el gobernante en turno no resiste la prueba y muere; entonces el enano
asume el poder y se convierte en el rey o el gran Ahau de Uxmal.Una vez que asume el poder como gobernante de Uxmal y se declara como el gran
Ahau, manda a construir el Templo del Adivino que se terminó en una sola noche.

 El perro que hablo

1 hace muchos años en un lugar cercano a la ciudad de Mérida vivía una señora con su bebé y un perrito que más que mascota lo tenía como
estorbo, ya que la mujer lo trataba muy mal, le gritaba, casi no le daba comida y a veces hasta lo agredía a golpes.Como muchas veces ocurre, el fiel
animal, lejos de huir, siempre estaba ahí junto a su ama, no en balde dicen que el perro es el mejor amigo del hombre, aunque a veces éste los trate
mal.Parte de la molestia y amargura de la señora era porque su marido la había abandonado cuando se enteró que estaba embarazada, y poco
después se enteró que se había ido a vivir con una mujer más joven.Sin ninguna ayuda ni apoyo dio a luz y a diario hacía todos los quehaceres de su
hogar, pero lo que más le molestaba era tener que caminar todos los días más de un kilómetro, hasta donde estaba el pozo, cargando un cántaro
lleno de agua, por lo que tenía que dejar sola a su nené.

"Cuida a mi hija", le decía a diario

Cada vez que se iba le gritaba a su perro, con voz burlona y a su vez molesta: “Cuida a mi hija, a ver si haces algo productivo, sólo te dedicas a
comer y a dormir, no ayudas en nada en esta casa”.El noble perro sólo miraba fijamente a su ama sin entender nada de lo que le decía, o al menos
eso aparentaba…Un día, la mujer estaba con su rutina diaria y recordó que el agua se le estaba acabando, entonces adormeció a su hija en una
hamaca, tomó el cántaro y se dispuso a ir por el preciado líquido.Al salir, vio al perro y le dijo como siempre: “Cuida la casa animal y, si despierta mi
hija, le cantas para que se duerma de nuevo”.Hora y media después, la señora regresó a su casa con su cántaro lleno de agua, pero conforme se iba
acercando escuchaba una voz masculina que provenía del interior de su vivienda.Temerosa de que alguien hubiera entrado a su domicilio, fue
caminando con sigilo y descubrió que la voz estaba cantando una canción de cuna que conocía bien, porque esa era una de las que le cantaba a su
bebé.El perro estaba arrullando a la bebéAl abrir la puerta, tremenda fue su sorpresa al ver que era el perro cantando y meciendo a la bebé en la
hamaca, estaba parado arrullándola para que no llorara; la mujer, del susto, tiró el cántaro de agua y, según cuenta la leyenda, empezó a salir tanta
agua del mismo que se inundó, no sólo la casa sino también una hondonada que tenía en su patio hasta llenarse, convirtiéndose en una pequeña
laguna.

 La carretera de la muerte

La leyenda de la Carreta de la Muerte toma lugar en pleno centro de Miahuatlán, en la calle Basilio Rojas. Cuentan los miahuatecos que en las
noches se escuchan las ruedas de una carreta y cascos de caballos en esa calle, a veces acompañada de silbidos, otras con carcajadas pero
invariablemente provocando un cortante frío al compás del sonido de las ruedas y pisadas de los animales. Nadie ha visto la carreta pero muchos la
han escuchado. Muchas abuelas y madres alertaban a los niños para que no salieran de noche, ya que escucharían a la Carreta de la Muerte.

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