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Prelogica
LÓGICA MATEMÁTICA
Por:
U NIVERSIDAD DE A NTIOQUIA
2009
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Í NDICE GENERAL
4
Capı́tulo 1
Cálculo Proposicional
Una de las componentes del lenguaje matemático es escribir sus afirmaciones mediante los
conectivos lógicos ¬ (negación), ∨ (disyunción), ∧ (conjunción), ⇒ (implicación) y ⇔ (equiv-
alencia) para hacer un seguimiento fácil y efectivo en las demostraciones. Este “seguimiento” corre-
sponde a las leyes (Tautologı́as) que se obtienen mediante el Cálculo Proposicional, el cual consiste
en el estudio de las afirmaciones que se escriben mediante los conectivos lógicos mencionados y de
sus leyes que permiten obtener, mediante técnicas y cálculos sencillos, afirmaciones siempre ver-
daderas en ese lenguaje.
Ası́ como el mismo idioma español, el cálculo proposicional contiene una forma semántica y
una sintaxis. En la presente sección resumimos la parte semántica, ésto con el fin de darle validez a
su sintaxis, la cual se expone desde la sección 1.2.
En la práctica, las letras sentenciales representan afirmaciones a las cuales se les puede asignar un
valor de verdad V (verdadero) ó F (falso). Los conectivos lógicos actúan como operadores entre las
letras para obtener un valor de verdad según la asignación de valores de verdad dadas a las letras. A
continuación ilustramos la tabla de verdad correspondiente a cada conectivo lógico.
A ¬A
V F
F V
A B A∨B
V V V
V F V
F V V
F F F
6
A B A∧B
V V V
V F F
F V F
F F F
A B A⇒B
V V V
V F F
F V V
F F V
A B A⇔B
V V V
V F F
F V F
F F V
Algunas peculiaridades que encontramos sobre estas tablas son las siguientes:
(4) La implicación es falsa sólo cuando el antecedente (A) es verdadero y el consecuente (B) es fal-
so. Ésto es debido a que, intuitivamente, una afirmación verdadera no tiene como consecuencia
una afirmación falsa.
(5) La equivalencia es verdadera sólo cuando sus componentes tienen el mismo valor de verdad.
Ésto es debido a que, intuitivamente, dos afirmaciones equivalentes tienen el mismo significado.
Es bien sabido que, a partir de las tablas anteriores, se pueden obtener tablas de verdad de afir-
maciones más complejas, siempre y cuando tengan un sentido lógico. Por ejemplo, la afirmación
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(A ⇒ B) ∧ (¬A ∨ C) tiene un sentido lógico, pues se puede interpretar adecuadamente, mientras
que ⇒ A no lo tiene. Por lo tanto, llamamos Forma Sentencial (F.S.) a una afirmación con sentido
lógico1 .
(1) Las F.S. tienen sentido lógico y se prestan para interpretaciones obvias, mientras que las afir-
maciones que no son F.S. no, y
(2) a las F.S. se les puede elaborar una tabla de verdad, mientras que a las afirmaciones que no son
F.S. no se les puede elaborar dicha tabla.
A B C ¬A A⇒B ¬A ∨ C (A ⇒ B) ∧ (¬A ∨ C)
V V V F V V V
V V F F V F F
V F V F F V F
V F F F F F F
F V V V V V V
F V F V V V V
F F V V V V V
F F F V V V V
En adelante, denotaremos por letras cursivas del tipo B, C, etc., a las F.S.. Entre las afirmaciones
que se pueden construir con letras sentenciales y conectivos lógicos adquieren importancia las F.S.,
pues son las que adaptan un valor de verdad y tienen un sentido lógico. Más allá de esto, en lógica
hay un grupo de afirmaciones que se destacan entre las F.S., las cuales incluı́mos en la siguiente
definición.
1.3 Definición (Tautologı́a, Contradicción). Una F.S. B se llama Tautologı́a si su tabla de verdad
toma el valor V bajo cualquier asignación de verdad a sus letras. Por otra parte, B se llama Con-
tradicción si su tabla de verdad toma el valor F bajo cualquier asignación de verdad a sus letras.
1
Estrictamente hablando, “con sentido lógico” resulta ambiguo y poco preciso para definir una Forma Sentencial, a
pesar de que es muy claro lo que se quiere decir. Ver el Apéndice I para la definición formal.
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1.4 Ejemplo. Con tablas de verdad, es fácil chequear que
1. A ∨ ¬A es una tautologı́a.
3. A ⇒ B no es tautologı́a ni contradicción.
Las afirmaciones más importantes del cálculo proposicional son las tautologı́as debido a que, al
ser siempre verdaderas, son las leyes lógicas del pensamiento abstracto y el sentido común, además
de que sobre éstas se elaboran las demostraciones en matemáticas.
1.5 Proposición (Leyes del Cálculo Proposicional). Las siguientes son tautologı́as (lo cual se
chequea facilmente con tablas de verdad).
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1.6 Observación. Según los incisos (f), (g) y (h) para construir el cálculo proposicional sólo es
necesario considerar los conectivos lógicos ¬ y ∨ para definir los demás conectivos. Esto se ten-
drá en cuenta a partir de la sección 1.2.
Finalizamos esta sección con una técnica que determina el comportamiento de la tabla de verdad
de una afirmación, lo cual ilustramos en el siguiente ejemplo.
1.7 Ejemplo. (1) Veamos que (A ⇔ (¬B ∨ C)) ⇒ (¬A ⇒ B) es una tautologı́a. Claramente, una
tabla de verdad resuelve este asunto. Sin embargo, introducimos una técnica con la cual no es
necesario elaborar una tabla de verdad. Según el diagrama al final del párrafo, hacemos este
análisis:
(a) Supongamos que la F.S. toma el valor F. Como es una implicación, entonces el antecedente
toma el valor V y el consecuente toma el valor F.
Del análisis anterior se conluye que B toma simultaneamente los valores V y F (ver las letras
subrayadas) lo cual es imposible para una asignación de valores de verdad. Esta inconsistencia
se surge de suponer que la F.S. toma el valor F. Por lo tanto, la F.S. nunca toma el valor F, es
decir, es una tautologı́a.
(A ⇔ (¬ B ∨ C)) ⇒ (¬ A ⇒ B)
? ? ?
(a) V F F
? ? ? ? ? ? ?
(b) F V F F V F F
Nótese que para esto no tuvimos que construir la tabla de verdad de la F.S. sino razonar de
forma similar al método de Reducción al Absurdo2 .
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valor V. Como es una conjunción, sus componentes toman el valor V. Luego, como A ∧ B ∧ C
∧ D∧E ∧ ¬G es verdadera, entonces sus componentes son verdaderas, por lo cual A, B, C, D
y E toman el valor V mientras que G toma el valor F. Pero, con estos valores, A ⇒ (B ⇒ (C ⇒
(D ⇒ (E ⇒ G)))) es F cuando se dijo que es V.
Esta inconsistencia indica que la F.S. nunca toma el valor de verdad V en su tabla, por lo cual
es una contradicción.
(A ⇒ (B ⇒ (C ⇒ (D ⇒ (E ⇒ G))))) ∧ ( A ∧ B ∧ C ∧ D ∧ E ∧ ¬ G)
V, F V V V V V V V F
(3) Analizemos, como en el ejemplo anterior, a A ⇒ (B ⇒ C). Supongamos que toma el valor F
por lo cual, según la tabla de la implicación, A es V y B ⇒ C es F. Esto significa que B es V
y C es F.
A ⇒ (B ⇒ C)
? ? ? ? ?
V F V F F
A diferencia de los dos ejemplos anteriores, no llegamos a ninguna inconsistencia. Sin embargo,
este análisis permite concluir el comportamiento de la forma sentencial: ésta sólo es F cuando
A y B toman el valor V y C toma el valor F. Esto significa que, en las demás asignaciones
de valores de verdad a las letras, la forma sentencial toma el valor V. Por tanto, ésta no es una
tautologı́a ni una contradicción.
1.8 Observación. La técnica anterior es efectiva para ahorrar el trabajo de hacer tablas de verdad.
Si en el ejemplo anterior hubiésemos razonado con tablas de verdad, para la primera y última F.S.
habrı́a que escribir una tabla de 8 filas, mientras que para la segunda F.S. habrı́a que escribir una
tabla de 64 filas. Sin embargo, esta técnica no es efectiva para todos los casos, por ejemplo, para
ver que (A ⇔ (B ⇔ C)) ⇔ ((A ⇔ B) ⇔ C) es una tautologı́a: si se supone que esta F.S. toma
el valor F entonces A ⇔ (B ⇔ C) y (A ⇔ B) ⇔ C toman valores diferentes de verdad, lo cual
lleva a analizar dos casos. Cada caso se divide en dos, de modo que al final se terminan analizando
8 casos, lo cual equivale a hacer la tabla de verdad (que contiene 8 filas). Luego ¿en qué casos la
técnica del ejemplo 1.7 es efectiva? Las siguientes son las pautas:
(a) Es efectivo suponer que la F.S. tiene el valor F cuando se compone, en su mayor parte, de ⇒
y ∨ .
(b) Es efectivo suponer que la F.S. tiene el valor V cuando se compone, en su mayor parte, de ∧ .
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Existe otra forma definitiva de comprobar si una afirmación es tautologı́a: por el método de-
mostrativo, con el cual siempre se razona en matemáticas. Este método es introducido en la próxima
sección.
1.1 Ejercicio. Cuando A ⇔ B es falsa, ¿Qué se puede decir sobre el valor de verdad de las siguientes F.S.?
1.2 Ejercicio. Determine si las siguientes formas sentenciales son tautologı́as por el método del Ejemplo 1.7
o por tablas de verdad.
Cabe advertir que, para el desarrollo completo de este capı́tulo, no es permitido utilizar tablas
de verdad ni las leyes de la sección anterior hasta que se demuestre el Teorema de Completez
para L (sección 1.4). Antes de ello, solo es permito razonar con axiomas, reglas de inferencia y
afirmaciones ya demostradas.
2.1 Definición (Teorı́a L). La Teorı́a L está compuesta por los siguientes elementos.
(1) Lenguaje. El lenguaje de L está compuesto por las letras mayúsculas A, B, C, etc. y los conec-
tivos lógicos ¬ y ∨ .
(2) Fórmulas (bien formadas). Una fórmula de L es una afirmación escrita en el lenguaje de L
que tiene sentido lógico3 . Utilizamos letras cursivas del tipo B, C, etc. para denotar fórmulas de
3
Formalmente, se define análogamente a Forma Sentencial, ver Apéndice I.
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L. Dados dos fórmulas B y C definimos las siguientes afirmaciones, las cuales son fórmulas.
B ⇒ C es ¬B ∨ C
B ∧ C es ¬(¬B ∨ ¬C)
B ⇔ C es (B ⇒ C) ∧ (C ⇒ B).
(A1) (B ∨ B) ⇒ B.
(A2) B ⇒ (B ∨ C).
(A3) (B ∨ C) ⇒ (C ∨ B).
(A4) (B ⇒ C) ⇒ [(D ∨ B) ⇒ (D ∨ C)].
(4) Reglas de Inferencia. L solo tiene una regla de inferencia, llamada Modus Ponens (MP).
(MP) B
B⇒C Esto significa que de B y B ⇒ C se deduce C.
C.
Con estos elementos es posible definir lo que significa una demostración en L. Cuando se trabaja
cualquier teorı́a en matemáticas, una prueba se puede ver como una sucesión finita de afirmaciones
(o pasos) donde cada afirmación está justificada por una razón (porque es un axioma, porque resulta
de aplicar un resultado ya probado, etc.). Puesto que en L solo contamos con axiomas y el Modus
Ponens, una demostración en L se define como
2.2 Definición (Demostración en L). Una demostración en L es una sucesión finita de fórmulas
B1 , B2 , . . . , Bn tal que cada Bi cumple una de las siguientes condiciones:
(i) Bi es un axioma de L o
De una forma más simple, una demostración en L es una justificación donde sólo se pueden aplicar
axiomas de L y (MP) (y también resultados probados en L, pues una aplicación de estos correspon-
den a la repetición de la prueba del resultado usado en la demostración dada).
En matemáticas es muy común razonar de la forma “supongamos ... entonces ...” donde la prueba
se efectua de la misma forma que explicamos anteriormente, con la diferencia de que, adicional a
los axiomas, se pueden utilizar hipótesis. En particular, en L se llevan a cabo demostraciones de
fórmulas bajo la suposición de hipótesis.
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2.3 Definición (Deducciones en L). Sea Γ un conjunto de fórmulas de L (las cuales llamaremos
“hipótesis”) y sea B una fórmula de L. Escribimos Γ ⊢L B, lo cual se lee “B se sigue (se demues-
tra, o se prueba) de las hipótesis Γ”. Esto significa, formalmente, que existe una sucesión finita
de fórmulas B1 , B2 , . . . , Bn donde Bn es B (la conclusión) y tal que cada Bi cumple una de las
siguientes condiciones
(ii) Bi es un axioma de L o
De una forma más simple, Γ ⊢L B significa que B se puede demostrar usando solo axiomas,
hipótesis de Γ y (MP) (y también resultados probados en L, pues una aplicación de estos corre-
sponden a la repetición de la prueba del resultado usado en la demostración dada).
Intuitivamente, un teorema de L se considera una fórmula cierta para la teorı́a L, puesto que
son las afirmaciones que se pueden demostrar a partir de los axiomas de L. Por lo tanto, el objetivo
de la construcción de L es verificar que sus teoremas son precisamente las tautologı́as del cálculo
proposicional. Para efectuar esta tarea no se pueden utilizar los resultados de la sección anterior
(pues lo que se busca es ver que se pueden probar) sino los resultados que vayamos obteniendo paso
a paso.
En este punto del texto, comenzamos con las pruebas de ciertas leyes lógicas en L, lo cual
sirve como ejemplos para las definiciones 2.2, 2.3 y 2.4. Todas las letras cursivas de los enunciados
corresponden a fórmulas de L.
14
Justificación.
B1 . B⇒C Hipótesis
B2 . C⇒D Hipótesis
B3 . (C ⇒ D) ⇒ [(¬B ∨ C) ⇒ (¬B ∨ D)] (A4)
B4 . (¬B ∨ C) ⇒ (¬B ∨ D) B2 , B3 , (MP)
B4 . (B ⇒ C) ⇒ (B ⇒ D) Def. de ⇒
B5 . B⇒D B1 , B4 , (MP).
El resultado es claro a la intuición respecto al axioma (A2), pero escencialmente no son la misma
fórmula. (A2) permite agregar una fórmula por disyunción a la derecha, mientras que el Lema L.2
permite agregar una fórmula por disyunción a la izquierda. A pesar de que ambos significan lo
mismo (por la conmutatividad de ∨ ), no son escencialmente lo mismo y, por lo tanto, ası́ se tenga
(A2), se debe efectuar una demostración para L.2.
Justificación.
1. B ⇒ (B ∨ C) (A2)
2. (B ∨ C) ⇒ (C ∨ B) (A3)
3. B ⇒ (C ∨ B) 1, 2, L.1.
L.3 Lema. ⊢L B ⇒ B.
Justificación.
1. B ⇒ (B ∨ B) (A2)
2. (B ∨ B) ⇒ B (A1)
3. B ⇒ B 1, 2, L.1.
15
L.4 Lema. C ⊢L B ⇒ C.
Justificación.
1. C Hip.
2. C ⇒ (¬B ∨ C) L.2
3. ¬B ∨ C 1, 2, (MP)
3. B⇒C Def. de ⇒ .
L.5 Lema (Tercer Excluı́do). ⊢L B ∨ ¬B. L.6 Lema (Doble negación). ⊢L B ⇒ ¬¬B.
Justificación.
Justificación.
1. B⇒B L.3
1. ¬B ∨ B Def. de ⇒ 1. ¬B ∨ ¬¬B L.5
2. (¬B ∨ B) ⇒ (B ∨ ¬B) (A3) 1. B ⇒ ¬¬B Def. de ⇒ .
3. B ∨ ¬B 1, 2, (MP).
Justificación.
1. C ⇒ ¬¬C L.6
2. (C ⇒ ¬¬C) ⇒ [(¬B ∨ C) ⇒ (¬B ∨ ¬¬C)] (A4)
3. (¬B ∨ C) ⇒ (¬B ∨ ¬¬C) 1,2,(MP)
4. (¬B ∨ ¬¬C) ⇒ (¬¬C ∨ ¬B) (A3)
5. (¬B ∨ C) ⇒ (¬¬C ∨ ¬B) 3,4,L.1
5. (B ⇒ C) ⇒ (¬C ⇒ ¬B) Def. de ⇒ .
L.8 Lema. B ⇒ C ⊢L (C ⇒ D) ⇒ (B ⇒ D)
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Justificación.
1. B⇒D Hip.
2. C⇒D Hip.
3. (C ⇒ D) ⇒ [(B ∨ C) ⇒ (B ∨ D)] (A4)
4. (B ∨ C) ⇒ (B ∨ D) 2, 3, (MP)
5. (B ⇒ D) ⇒ [(D ∨ B) ⇒ (D ∨ D)] (A4)
6. (D ∨ B) ⇒ (D ∨ D) 1, 5, (MP)
7. (B ∨ D) ⇒ (D ∨ B) (A3)
8. (B ∨ D) ⇒ (D ∨ D) 7, 6, L.1
9. (D ∨ D) ⇒ D (A1)
10. (B ∨ D) ⇒ D 8, 9, L.1
11. (B ∨ C) ⇒ D 4, 10, L.1.
Justificación.
1. B ⇒ (C ⇒ D) Hip.
2. B⇒C Hip.
3. (C ⇒ D) ⇒ (B ⇒ D) 2, L.8
4. B ⇒ (B ⇒ D) 1, 3, L.1
5. ¬B ⇒ (¬B ∨ D) (A2)
5. ¬B ⇒ (B ⇒ D) Def. de ⇒
6. B ∨ ¬B L.5
7. B⇒D 4, 5, 6, L.9.
Probar los siguientes ejercicios en la Teorı́a L. Sólo es permitido utilizar los elementos de esta sección.
17
1.3. Métodos de Demostración
En esta sección introducimos los métodos de demostración para facilitar las pruebas en la Teorı́a
L. Los razonamientos de la sección anterior, aunque precisos, dejan poco lugar a la intuición para
ser desarrollados. Con los métodos de demostración, más los primeros resultados de esta sección,
el desarrollo de las pruebas en L se puede basar en argumentos intuitivos que fácilmente se pueden
convertir en demostraciones.
Básicamente, los métodos de demostración para L son dos: el Teorema de la Deducción (cono-
cido también como el Método Directo) y Reducción al Absurdo. Los métodos de Disyunción de
Casos y de Contrarrecı́proco son más bien leyes lógicas, las cuales se afirman en L.9, L.7 y en el
Ejercicio 1.5(b) (L.13). Como técnicas de demostración, veremos al final de la sección la forma de
razonar por equivalencias.
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Justificación.
1. ¬¬B Hip.
2. ¬¬B ⇒ (¬¬B ∨ B) (A2)
3. ¬¬B ∨ B 1, 2, (MP)
3. ¬B ⇒ B Def. de ⇒
4. B⇒B L.3
5. B ∨ ¬B L.5
6. B 5, 4, 3, L.9.
Hemos probado ¬¬B ⊢L B. Luego, por el Teorema de la Deducción, ⊢L ¬¬B ⇒ B.
Introduzcamos ahora el método de Reducción al Absurdo. Éste consiste en que, para probar una
afirmación B, se toma ¬B como hipótesis y se obtiene una contradicción. ¿Qué significa “obtener
una Contradicción”? la siguiente definición da una respuesta natural.
Justificación. Sea Γ un conjunto inconsistente de hipótesis, es decir, existe una fórmula D tal que
Γ ⊢L D y Γ ⊢L ¬D. Sea C una fórmula arbitraria y veamos que Γ ⊢L C. Esto se sigue de la siguiente
demostración en donde se toma a Γ como conjunto de hipótesis.
1. D porque Γ ⊢L D
2. ¬D porque Γ ⊢L ¬D
3. ¬D ⇒ (D ⇒ C) Ej. 1.3(a)
4. D⇒C 2, 3, (MP)
5. C 1, 4, (MP).
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En principio, Γ es un conjunto de hipótesis (que puede ser vacı́o) de donde se quiere probar
B. El método de Reducción al Absurdo consiste en suponer a ¬B como hipótesis, además de Γ, y
llegar a una contradicción, es decir, que Γ, ¬B es un conjunto inconsistente de hipótesis.
Justificación.
1. ¬C ⇒ ¬B Hip.
2. B Hip.
3. ¬C Hip. (para reducción al absurdo)
4. ¬B 1, 3, (MP).
De 2. y 4. obtenemos que ¬C ⇒ ¬B, B, ¬C es un conjunto inconsistente de hipótesis. Luego, por
Reducción al Absurdo, ¬C ⇒ ¬B, B ⊢L C. Por Teorema de la Deducción se sigue que ¬C ⇒ ¬B ⊢L
B ⇒ C y, del mismo Teorema, concluı́mos que ⊢L (¬C ⇒ ¬B) ⇒ (B ⇒ C).
(b) B ⇒ C, C ⇒ B ⊢L B ⇔ C.
Justificación. (a)
1. B Hip.
2. C Hip.
3. ¬(B ∧ C) Hip. (para el absurdo)
3. ¬¬(¬B ∨ ¬C) Def. de ∧
4. ¬¬(¬B ∨ ¬C) ⇒ (¬B ∨ ¬C) L.11
5. ¬B ∨ ¬C 3, 4, (MP)
5. B ⇒ ¬C Def. de ⇒
6. ¬C 1, 5, (MP).
20
De 2. y 6. se sigue que B, C, ¬(B ∧ C) es un conjunto inconsistente de hipótesis. Por Reducción
al Absurdo, obtenemos B, C ⊢L B ∧ C.
(b)
1. B⇒C Hip.
2. C⇒B Hip.
3. (B ⇒ C) ∧ (C ⇒ B) 1, 2, (a)
3. B⇔C Def. de ⇔ .
(b) B ⇔ C ⊢L C ⇔ B.
(g) B ⇔ C ⊢L (B ⇒ D) ⇔ (C ⇒ D).
(c) B ⇔ C, C ⇔ D ⊢L B ⇔ D.
(h) B ⇔ C ⊢L (D ⇒ B) ⇔ (D ⇒ C).
(d) B ⇔ C ⊢L ¬B ⇔ ¬C.
Justificación. (a)
1. B ⇒ B L.3
2. B ⇔ B 1, 1, L.14.
21
(c)
1. B⇔C Hip.
2. C⇔D Hip.
3. B⇒C 1, L.15, (MP)
4. C⇒B 1, L.15, (MP)
5. C⇒D 2, L.15, (MP)
6. D⇒C 2, L.15, (MP)
7. B⇒D 3, 5, L.1
8. D⇒B 6, 4, L.1
9. B⇔D 7, 8, L.14.
1. B⇒C Hip.
2. B∧D Hip.
3. B 2, L.15, (MP)
4. D 2, L.15, (MP)
5. C 1, 3, (MP)
6. C∧D 5, 4, L.14.
(g)
1. B⇔C Hip.
2. ¬B ⇔ ¬C 1, (d)
3. (¬B ∨ D) ⇔ (¬C ∨ D) 2, (f)
3. (B ⇒ D) ⇔ (C ⇒ D) Def. de ⇒ .
1. B⇔C Hip.
2. B⇔D Hip.
3. C⇔B 1, (b)
4. C ⇔ D 3, 2, (c).
3.5 Observación. L.14(b) indica la técnica usual para probar equivalencias en el cálculo proposi-
cional (en general, en matemáticas). Para probar B ⇔ C es suficiente demostrar dos afirmaciones,
22
que B ⇒ C y que C ⇒ B. Ambas se pueden demostrar por Teorema de la Deducción. La prueba de
L.16(a) es un ejemplo de esta técnica, como lo serán muchas demostraciones posteriores.
Justificación. (a)
1. ¬(B ∧ C) ⇔ ¬(B ∧ C) L.16(a)
1. ¬(B ∧ C) ⇔ ¬¬(¬B ∨ ¬C) Def. de ∧
2. ¬¬(¬B ∨ ¬C) ⇔ (¬B ∨ ¬C) L.17(a),L.16(b)
3. ¬(B ∧ C) ⇔ (¬B ∨ ¬C) 1, 2, L.16(c).
(b)
1. (B ∨ C) ⇔ (¬¬B ∨ C) L.17(a),L.16(f)
2. (C ∨ ¬¬B) ⇔ (¬¬C ∨ ¬¬B) L.17(a),L.16(f)
3. (¬¬B ∨ C) ⇔ (¬¬B ∨ ¬¬C) 2, L.17(d),L.16(c)
4. (B ∨ C) ⇔ (¬¬B ∨ ¬¬C) 1, 3, L.16(c)
5. ¬(B ∨ C) ⇔ ¬(¬¬B ∨ ¬¬C) 4, L.16(d)
5. ¬(B ∨ C) ⇔ (¬B ∧ ¬C) Def. de ∧ .
L.19 Lema.
23
otra fórmula para generar fórmulas equivalentes y, por la transitividad de la equivalencia, se pueden
hacer varias sustituciones y aplicaciones de las leyes lógicas probadas previamente para generar
demostraciones4 .
La segunda prueba está dada por el Teorema de la Deducción y la Disyunción de Casos. Veamos
que ⊢L (B ∨ (C ∨ D)) ⇒ ((B ∨ C) ∨ D).
1. B ∨ (C ∨ D) Hip.
2. B ⇒ (B ∨ C) (A2)
3. (B ∨ C) ⇒ ((B ∨ C) ∨ D) (A2)
4. B ⇒ ((B ∨ C) ∨ D) 2, 3, L.1
5. C ⇒ (B ∨ C) L.2
6. C ⇒ ((B ∨ C) ∨ D) 5, 3, L.1
7. D ⇒ ((B ∨ C) ∨ D) L.2
8. (C ∨ D) ⇒ ((B ∨ C) ∨ D) 6, 7, L.9
9. (B ∨ C) ∨ D 1, 4, 8, L.9.
(c) Procedamos a probar las dos implicaciones que permiten concluir la equivalencia. Para ⇒ ,
1. B ∧ (C ∨ D) Hip.
2. B 1, L.15, (MP)
3. C ∨ D 1, L.15, (MP).
4.1. C Hip.
4.2. B∧C 2, 4.1, L.14
4.3. (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) 4.2, (A2), (MP)
4. C ⇒ (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) 4.1-4.3, TmaDed (3.1)
4
Ver el Apendice I para un resultado que justifica completamente el criterio de sustitución de fórmulas equivalentes.
24
5.1. D Hip.
5.2. B∧D 2, 5.1, L.14
5.3. (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) 5.2, L.2, (MP)
5. D ⇒ (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) 5.1-5.3, TmaDed 3.1
6. (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) 3, 4, 5, L.9.
Hemos probado B ∧ (C ∨ D) ⊢L (B ∧ C) ∨ (B ∧ D), por lo se sigue ⇒ por Teorema de la
Deducción.
Veamos ahora el recı́proco:
1. (B ∧ C) ∨ (B ∧ D) Hip.
2. C ⇒ (C ∨ D) (A2)
3. (C ∧ B) ⇒ ((C ∨ D) ∧ B) 2, L.16(e)(ver prueba)
4. (B ∧ C) ⇒ (B ∧ (C ∨ D)) 3, L.17
5. D ⇒ (C ∨ D) L.2
6. (D ∧ B) ⇒ ((C ∨ D) ∧ B) 5, L.16(e)(ver prueba)
7. (B ∧ D) ⇒ (B ∧ (C ∨ D)) 6, L.17
8. (B ∧ (C ∨ D)) 1, 4, 7, L.9.
(e)
¬(B ⇒ C) ⇔ ¬(¬B ∨ C) Def. de ⇒
⇔ (¬¬B ∧ ¬C) Ley D’Morgan
⇔ (B ∧ ¬C) Doble neg..
(g)
(B ⇒ (C ⇒ D)) ⇔ (¬B ∨ (¬C ∨ D))) Def. de ⇒
⇔ ((¬B ∨ ¬C) ∨ D) (b)
⇔ (¬(B ∧ C) ∨ D) Ley D’Morgan
⇔ ((B ∧ C) ⇒ D) Def. de ⇒ .
(b) ¬B ⊢L (B ∨ C) ⇔ C.
25
(d) L.20. (b) Utilize la equivalencia anterior y los Lemas de
esta sección para probar (i) y (j) de L.19.
(e) B, C ⊢L B ⇔ C.
(f) B ⇔ ¬B es una hipótesis inconsistente en L. 1.10 Ejercicio. Sea Γ un conjunto de fórmulas. Jus-
(g) (i) de L.19. tifique los siguientes enunciados.
En la sección anterior vimos cómo las principales leyes del cálculo croposicional se demuestran
en L, además que los métodos de demostración conocidos en matemáticas son válidos para dicha
teorı́a. Esto lleva a comparar esta parte formal del cálculo proposicional con su parte semántica
(discutida en la sección 1.1), para concluir, como se hace en esta sección, que las tautologı́as son
precisamente los teoremas de L. Ésto es lo que se conoce como el Teorema de Completez en el
sentido de que muestra que L es realmente el cálculo proposicional.
Justificación. Es fácil chequear, con tablas de verdad, que los axiomas de L son tautologı́as. Por
otra parte, el Lema 4.1 indica que la aplicación de (MP) a tautologı́as genera tautologı́as.
Todo teorema B de L tiene una demostración en la cual solo se aplican axiomas y (MP) (Defini-
ciones 2.2 y 2.4) y, puesto que estos pasos generan tautologı́as (según el párrafo anterior), el resul-
tado final (B) es una tautologı́a.
4.3 Teorema (de Completez). Sea B una fórmula. B es una tautologı́a si y solo si ⊢L B (B es
teorema de L).
26
El Teorema anterior garantiza la confianza de razonar en L pues, como prueba todo lo que es
verdad, no puede probar algo falso. Por lo tanto, la teorı́a L es consistente, lo cual definimos y jus-
tificamos a continuación.
Por lo general, ası́ como L, toda teorı́a T se compone de un lenguaje, un conjunto de fórmulas
(bien formadas), un conjunto de axiomas y unas reglas de inferencia. De la misma forma se puede
definir lo que significa demostración en T, Γ ⊢T B y ⊢T B .
4.4 Definición (Consistencia de una Teorı́a). Sea T una teorı́a que contiene a ¬ en su lenguaje.
Decimos que T es una teorı́a inconsistente si existe una fórmula D en el lenguaje de T tal que ⊢T D
y ⊢T ¬D. De lo contrario, decimos que la teorı́a es consistente.
Justificación. Supongamos, por el contrario, que L es inconsistente, es decir, existe una fórmula D
tal que ⊢L D y ⊢L ¬D. Del Teorema de Completez se sigue que D y ¬D son tautologı́as, es decir,
siempre toman el valor V en sus tablas de verdad. Claramente, esto es imposible.
1.11 Ejercicio. Sea B una fórmula. Pruebe que las siguientes afirmaciones son equivalentes:
(i) B es una contradicción.
(ii) ¬B es una tautologı́a.
(iii) ⊢L ¬B.
(iv) B es una hipótesis inconsistente de L.
1.12 Ejercicio. Sea T una teorı́a, B y C fórmulas de T. Sea T′ = T + C (la teorı́a que resulta de añadir a C
como axioma a T). Pruebe que ⊢T′ B si y solo si C ⊢T B. Sugerencia: Utilize la definición de demostración
para T y T′ .
27
28
Capı́tulo 2
Cálculo de Predicados
Aunque el cálculo proposicional tiene gran poder para formalizar y estructurar las leyes lógicas
de razonamiento, no es suficiente para dar forma a una teorı́a fuerte, en particular, a los fundamen-
tos de la matemática. Ésto se debe a que las fórmulas dentro de este cálculo contienen un valor de
verdad constante, cuando por lo general se presentan afirmaciones cuyo valor de verdad depende de
una o más variables. Por ejemplo, “la persona x vive en Medellı́n” o “x + y = 0”son afirmaciones
cuyo valor de verdad dependen de variables.
Por lo tanto, es necesario extender el lenguaje y la teorı́a del cálculo proposicional de modo
que pueda analizar afirmaciones con elementos más complejos. Dicha extensión, además de que
se constituye de conceptos simples, permite un panorama general sobre el cual se puede estruc-
turar cualquier teorı́a matemática elemental, más aún, permite formalizar la Teorı́a de Conjuntos de
Zermelo-Fraenkel, dentro de la cual toma lugar toda la matemática.
Un lenguaje de primer orden se presenta como un lenguaje elemental que puede describir una
teorı́a de primer orden, la cual es un modelo de estructura para gran cantidad de teorı́as matemáticas
fundamentales y donde los elementos del cálculo proposicional siguen siendo válidos. Hay una
teorı́a de primer orden que llamaremos el cálculo de predicados, cuyos teoremas son verdaderos en
cualquier otra teorı́a del mismo tipo.
El objetivo central de este capı́tulo es desarrollar los elementos del cálculo de predicados, ya que
estos son comunes en cualquier teorı́a matemática. En la primera sección extendemos el lenguaje del
cálculo proposicional a lenguajes de primer orden y, en la segunda sección, definimos la estructura
común para teorı́as de primer orden y expondremos algunos teoremas del cálculo de predicados.
En la tercera sección presentamos los métodos de demostración para teorı́as de primer orden los
cuales, aunque extienden los métodos de demostración para L, contienen algunas restricciones. En
la cuarta sección presentamos el razonamiento con cuantificadores tı́picos, los cuales se presentan
más comunmente en matemáticas. Finalizamos en la última sección con los elementos fundamen-
tales de una teorı́a que contiene el signo igual (=).
Ası́ como el cálculo proposicional, el cálculo de predicados se puede analizar desde la semántica
y desde la sintaxis. También hay una versión de teorema de completez que indica la equivalencia
entre ambos enfoques. En este capı́tulo sólo presentamos el análisis desde la sintaxis, pues el trabajo
desde la semántica demanda el conocimiento de elementos de la Teorı́a de Modelos.
Puesto que muchas afirmaciones en matemáticas no tienen un valor de verdad constante sino
que dependen de variables, modificamos el lenguaje del cálculo proposicional de modo que admita
afirmaciones con variables y cuantificadores.
1.1 Definición (Lenguaje de primer orden). Un lenguaje de primer orden L se consituye de los
siguientes elementos.
2. Variables. Una cantidad infinita contable de variables x1 , x2 , x3 , . . . las cuales representan incógni-
tas para objetos del lenguaje. Usualmente, usamos las letras x, y, z, u, v, w para denotar vari-
ables.
4. Letras funcionales. Son operadores que, aplicados a objetos del lenguaje, generan nuevos obje-
tos.
5. Letras predicativas. Son signos que permiten construir afirmaciones sin utilizar sı́mbolos lógi-
cos.
Los elementos 1. y 2. son comunes para todos los lenguajes de primer orden. Por lo tanto, para
definir un lenguaje de primer orden sólo basta indicar 3., 4. y 5..
30
operación sucesor donde s(x) es el número que le sigue a x. De esta forma, se define 1 = s(0),
2 = s(1), 3 = s(2), etcétera.
Como se indica en la definición 1.1, las letras funcionales s, + y · denotan operaciones para
generar nuevos objetos. Por ejemplo, los objetos 1, 2, 3, . . . se generan a partir de la operación
s aplicada a 0, y x + 0, 4 · 1 y x · x + y · (x + s(z) + 1) son objetos del lenguaje generados por
letras funcionales.
La letra predicativa = tiene el fin de la construcción de afirmaciones. Por ejemplo, x + 0 = 0,
1 = 0, 1 + 1 = 2 y x · x + y · (x + s(z) + 1) = 3 son afirmaciones construidas desde el sı́mbolo
= aplicado a objetos del lenguaje.
Aunque los números 0, 1, 2, 3, . . . son objetos fijos en ese lenguaje, el único que se define como
constante del lenguaje LS es 0 debido a que los demás números se definen a partir de éste y de
la operación sucesor.
(2) Lenguaje de ZF. ZF denota la Teorı́a de Conjuntos de Zermelo-Fraenkel (la cual describimos
en detalle desde el capı́tulo 3). El lenguaje de esta teorı́a es LZF := {=, ∈}, donde ambos = y
∈ son letras predicativas. Por ejemplo, x ∈ y y x = x son afirmaciones que se construyen con
dichas letras.
En principio, LZF no contiene constantes ni letras funcionales. Esto genera la pregunta de
qué pasa con sı́mbolos como ∅, ∪ (unión), ∩ (intersección) ó ⊆ (contención) con los cuales
es fundamental la escritura de la teorı́a de conjuntos. La razón por la cual no es necesario in-
cluı́rlos al definir el lenguaje es que se presentan como sı́mbolos secundarios, es decir, solo se
necesita =, ∈ y algunos teoremas de la teorı́a de conjuntos para definirlos.
El ejemplo anterior aclara que un lenguaje de primer orden se presenta como un conjunto de
sı́mbolos que sirven de punto de partida para construir afirmaciones y objetos más complejos. Por
lo general, un lenguaje se define para asociarlo a una teorı́a que se quiere describir, como sucede
en el primer caso con la Aritmética y en segundo con la Teorı́a de Conjuntos. Nótese que en estos
ejemplos hemos utilizado constantemente dos expresiones: “objetos del lenguaje” y “afirmaciones
del lenguaje”. Es importante distinguir entre ambas nociones para un lenguaje de primer orden, pues
tienen diferente naturaleza. Las afirmaciones se presentan para relacionar objetos y dar un juicio so-
bre ellos, además, se les puede asignar un valor de verdad, mientras que a un objeto no.
A continuación vamos a dar una definición precisa de lo que significa objeto y afirmación para
un lenguaje. En la práctica, se utiliza la palabra término para denotar objetos y la palabra fórmula
31
para denotar afirmaciones. Nótese de los ejemplos anteriores que en los objetos construidos inter-
vienen variables, constantes y letras funcionales, los cuales son los elementos fundamentales para
la construcción de objetos.
1.3 Definición (Término). Dado un lenguaje de primer orden L, un término de L es un objeto que
se construye a partir de variables, constantes y letras funcionales del lenguaje1 .
(2) Los únicos términos de LZF son las variables, pues dicho lenguaje no contiene constantes ni
letras funcionales para generar otros términos. Sin embargo, objetos como ∅ y x ∪ y se definen
según teoremas de ZF, lo cual se aclara en el Capı́tulo 3.
(3) Para cualquier lenguaje de primer orden, las variables y las constantes son términos.
Una fórmula en un lenguaje de primer orden se define como una expresión con “sentido lógico”
sobre términos del lenguaje. De manera similar al cálculo proposicional, en este tipo de afirmaciones
intervienen conectivos lógicos, más expresiones simples escritas a partir de las letras predicativas,
las cuales llamamos fórmulas atómicas.
1.5 Definición (Fórmula atómica). Dado un lenguaje de primer orden L, una fórmula atómica de
L es una afirmación constituı́da por una letra predicativa que relaciona términos de L. Éste tipo de
fórmula no tiene sı́mbolos lógicos.
1.7 Definición (Fórmula (bien fundada)). Una fórmula (bien fundada) de un lenguaje de primer
orden L es una expresión con “sentido lógico” que se compone de fórmulas atómicas y sı́mbolos
lógicos. Usamos las letras cursivas B, C, D, etc. para denotar fórmulas de un lenguaje de primer
1
Ver Apendice II para una definición formal de término.
32
orden2 .
Dadas dos fórmulas B y C de L, definimos las siguientes fórmulas:
B⇒C ≡ ¬B ∨ C
B∧C ≡ ¬(¬B ∨ ¬C)
B⇔C ≡ (B ⇒ C) ∧ (C ⇒ B)
∃x B ≡ ¬∀x (¬B).
(2) x ∈ x, ∀z (z ∈ x ⇒ z ∈ y) y ∀x (¬(x ∈
/ y)) son fórmulas de LZF . La segunda fórmula se suele
denotar por x ⊆ y.
Sı́mbolos como < y ⊆, aunque corresponden a su respectivo lenguaje, no se toman desde la defini-
ción ya que se construyen a partir de los otros sı́mbolos.
Intuitivamente, un término representa un objeto del lenguaje, mientras que una fórmula es una
afirmación (con sentido lógico) sobre los términos del lenguaje. Una fórmula de un lenguaje es
cierta o falsa dependiendo de la teorı́a donde se razone, hecho sobre el cual profundizamos en la
sección 2.2.
(1) El alcance de un cuantificador dentro de una fórmula es la fórmula a la cual se aplica el cuan-
tificador.
(2) Dada fórmula B, decimos que una ocurrencia de x está ligada (o acotada) en B si está al alcanze
de un cuantificador de la forma ∀x ó ∃x . De lo contrario, decimos que x es libre en B. Decimos
que una variable no es libre en B si aparece ligada, o si no está en la fórmula.
2
Ver el Apendice II para una definición formal.
33
1.10 Ejemplo. (1) Consideremos las siguientes fórmulas del lenguaje LS :
C1 : x + 0 = x
C2 : (∃z (x · z = 0)) ∧ x = z + 3
C3 : ∃y (x · y + 6 = y + 5).
B1 : ∀x (x ∈ y ⇔ ¬(x ∈ x))
B2 : (∃x (x = x)) ∧ ∃y (x ∈ y ⇒ x = x)
B3 : ∀x (z ∈ y ⇒ ∃x (x ∈ x))
B4 : x ∈ y ⇔ x ∈ z.
Sea L un lenguaje de primer orden. En la práctica, es usual destacar ciertas variables en una
fórmula. De este modo, si B es una fórmula de L y se quieren destacar las variables x y z, se escribe
B(x, z) en vez de B para destacar dichas variables.
1.11 Ejemplo. (1) Respecto al Ejemplo 1.10(1) destacamos las variables de las siguientes fórmu-
las:
C1 (x) : x + 0 = x
C2 (x, z) : (∃z (x · z = 0)) ∧ x = z + 3
C3 (x, y) : ∃y (x · y + 6 = y + 5).
34
(2) Respecto al Ejemplo 1.10(2) destacamos las variables de las siguientes fórmulas:
Por lo general se destacan las variables que son libres en una fórmula, aunque no es estricta-
mente necesario. Se pueden destacar variables que no sean libres o que nisiquiera aparecen en la
fórmula, además que no es obligación destacar una variable que sea libre o que esté ligada. Destacar
variables es más una cuestión de gusto y necesidad en una situación dada.
Una de las razones por las cuales se destaca una variable en una fórmula es para denotar susti-
tución. En otras palabras, si L es un lenguaje de primer orden, B(x) una fórmula de L en donde se
destaca la variable x y t es un término de L, B(t) denota la fórmula que resulta de sustituir todos
los x libres por t en B(x).
C1 (3) : 3+0 =3
C1 (5 · z) : 5·z+0 =5·z
C1 (x + y) : (x + y) + 0 = x + y
C2 (5, z) : (∃z (5 · z = 0)) ∧ 5 = z + 3
C2 (x, 6) : (∃z (x · z = 0)) ∧ x = 6 + 3
⋆ C2 (z + 1, z) : (∃z ((z + 1) · z = 0)) ∧ z + 1 = z + 3
C3 (0, y) : ∃y (0 · y + 6 = y + 5)
C3 (x, 852) : ∃y (x · y + 6 = y + 5)
⋆ C3 (y, y) : ∃y (y · y + 6 = y + 5).
(2) Al fijar B1 (y), B2 (x), B3 (x, w) y B4 (x, y, z, w) obtenemos las siguientes sustituciones
35
En la práctica, las sustituciones señaladas por ⋆ no se dan en matemáticas porque dañan la
estructura y el significado de una fórmula. Ésto se debe a que estas sustituciones generan nuevas
variables ligadas, lo cual modifica el significado esencial de la fórmula.
1.13 Definición (Término libre para una fórmula). Sea L un lenguaje de primer orden, x una vari-
able, B(x) una fórmula de L y t un término de L. Decimos que t es libre para x en B(x) si en B(t)
no se generan nuevas variables ligadas. Ésto significa, intuitivamente, que la sustitución de t por los
x libres en B(x) no dañan la estructura de la fórmula.
(1) 3 es libre para x en C1 (x), también 5 · z es libre para x en C1 (x). Más aún, cualquier término
de LS es libre para x en C1 (x), pues como dicha fórmula no tiene cuantificadores, cualquier
sustitución por x no genera nuevas variables ligadas. El término 5 es libre para x en C2 (x, z),
pero z + 1 no es libre para x en C2 (x, z) ya que genera una nueva variable z ligada. Teniendo
en cuenta el significado de las fórmulas respecto a C2 (x, w), obtenemos
C2 (x, z) : Existe un número que multiplicado por x es igual a cero, y x es igual a z más 3.
C2 (5, z) : Existe un número que multiplicado por 5 es igual a cero, y 5 es igual a z más 3.
C2 (z + 1, z) : Existe un número que multiplicado por él mismo más 1 es igual a cero,
y z + 1 es igual a z más 3.
Nótese que en las dos primeras fórmulas se conserva la esencia de la fórmula, a diferencia que
se cambia el papel de x por 5, mientras que la última tiene una interpretación muy alejada. La
razón de esto es que en C2 (z + 1, z) aparece una nueva variable ligada.
0 es libre para x en C3 (x, y), 852 es libre para y en C3 (x, y), pero y no es libre para x en
C3 (x, y), pues al sustituir, C3 (y, y) contiene una nueva variable ligada.
(2) R es libre para y en B1 (y), pero x no es libre para y en B1 (y), pues en B1 (x) aparece una nueva
x ligada. Comparemos el significado de las fórmulas que resultan:
36
B3 (x, w), y para w en B3 (x, w).
Cualquier término es libre para cualquier variable en B4 (x, y, z, w), pues como dicha fórmula
no tiene cuantificadores, cualquier sustitución no genera variables ligadas.
La importancia de esta notación radica en un axioma que presentamos en la sección 2.2 para el
cálculo de predicados. Dado un lenguaje de primer orden L, B(x) una fórmula y t un término de L,
se propone siguiente axioma
∀x B(x) ⇒ B(t)
siempre y cuando t sea libre para x en B(x). Esto se debe a que una sustitución que altere la esen-
cia de la fórmula puede generar contradicciones (damos un ejemplo en la próxima sección). Por lo
tanto, una sustitución es permitida siempre que no altere la estructura de la fórmula, es decir, si el
término es libre para la variable por la cual se va a sustituir. Debido a esto, las sustituciones mar-
cadas por ⋆ en el Ejemplo 1.12 no son permitidas en lógica y las evitaremos en lo que resta del texto.
Entre los términos y las fórmulas de un lenguaje de primer orden, se destacan los siguientes.
1.15 Definición. Dado un lenguaje de primer orden L, llamamos término cerrado de L a un término
que no tiene variables. Llamamos sentencia o fórmula cerrada de L a una fórmula que no tiene
variables libres.
1.16 Ejemplo. (1) Los términos 0, 1, 2, 3, . . ., 5 + 7, s(6) · 8 son cerrados en LS , pues no contienen
variables. Las fórmulas 1 = 0, ∀x (x + 0 = x) y ∀x ∃y (x · y = 1) son sentencias en LS , pues no
contienen variables libres.
(b) Sea B una fórmula y t un término de L. Si las variables de t no aparecen ligadas en B entonces
t es libre para cualquier variable en B.
37
(d) Sea B una fórmula de L. Si x no aparece libre en B entonces cualquier término es libre para x
en B.
Justificación. (a) Sea r un término cerrado y B(x) una fórmula de L. Como r no contiene vari-
ables, es claro que en B(r) no aparecen nuevas variables ligadas. Por lo tanto, r es libre para x
en B(x).
(c) Sea B(x) una fórmula de L. Al sustituir x por x en B(x) resulta la misma fórmula, por lo cual
no aparecen nuevas variables ligadas. Por lo tanto, x es libre para x en B(x).
2.1 Ejercicio. En las siguientes fórmulas de LS in- (vi) z + z es libre para w en D3 (w).
dique el alcance de cada cuantificador, las variables
(vii) Cualquier término es libre para z en D4 (w, z).
libres y las variables ligadas.
(a) D (w) : ∃ (0 + z = w). (viii) D3 (w) es una sentencia.
1 z
2.2 Ejercicio. Respecto al ejercicio anterior, indique 2.4 Ejercicio. Sea L un lenguaje de primer orden. In-
si las siguientes afirmaciones son ciertas o no. En ca- dique si las siguientes afirmaciones son ciertas o no.
da caso justifique su respuesta. En cada caso, dé una justificación precisa.
Una teorı́a de primer orden es una estructura muy general en donde se puede formalizar cualquier
teorı́a matemática elemental. El primer elemento que permite describir una teorı́a de este tipo es un
lenguaje de primer orden, el cual se define respecto a la teorı́a que se desea construir. En la sección
anterior dimos los ejemplos LS y LZF de lenguajes de primer orden, el primero para definir la teorı́a
de la aritmética, el segundo para la teorı́a de conjuntos de Zermelo-Fraenkel.
2.1 Definición (Teorı́a de Primer Orden). Dado un lenguaje de primer orden L, una teorı́a de primer
orden K sobre el lenguaje L está compuesta de los siguientes elementos.
38
1. Lenguaje. El lenguaje L.
2. Fórmulas (bien formadas). Las fórmulas de L. En este caso, decir fórmula de K significa lo
mismo que ser fórmula de L. Análogamente, decir término de K denota ser un término de L.
(A1) (B ∨ B) ⇒ B.
(A2) B ⇒ (B ∨ C).
(A3) (B ∨ C) ⇒ (C ∨ B).
(A4) (B ⇒ C) ⇒ [(D ∨ B) ⇒ (D ∨ C)].
(A5) (Particularización) ∀x B(x) ⇒ B(t) siempre que t sea libre para x en B(x).
(A6) ∀x (B ⇒ C) ⇒ (B ⇒ ∀x C) siempre que x no sea libre en B.
4. Reglas de inferencia. Sólo dos reglas de inferencia, Modus Ponens (MP) y Generalización
(GEN).
(MP) B (GEN) B
B⇒C ∀x B
C
En la práctica, para definir una teorı́a de primer orden sólo es necesario considerar dos elementos:
el lenguaje de primer orden y los axiomas propios, puesto que las fórmulas se definen a partir del
lenguaje y los axiomas propios y reglas de inferencia son comunes a todas las teorı́as de primer
orden que corresponden a un mismo lenguaje.
De forma análoga al trabajo con la teorı́a L, definimos lo que significa una prueba, deducción y
teorema para una teorı́a de primer orden.
2.2 Definición. Sea K una teorı́a de primer orden, Γ un conjunto de fórmulas de K y B una fórmula
de la misma teorı́a. Escribimos Γ ⊢K B para indicar que de las hipótesis en Γ se demuestra B, lo
cual significa, formalmente, que B tiene una prueba finita donde cada paso está justificado por una
hipótesis en Γ, un axioma de K o por una regla de inferencia ((MP) ó (GEN)). De un modo más
técnico, existe una sucesión finita B1 , . . . , Bn de fórmulas de K donde Bn es B y cada Bi cumple
una de las siguientes condiciones
39
(i) Bi es hipótesis en Γ,
(iv) Bi se sigue por (GEN) aplicado a una fórmula que la precede en la sucesión.
Por otra parte, decimos que B es teorema de K cuando ∅ ⊢K B, es decir, B se demuestra en K sin
necesidad de hipótesis. Este concepto lo abreviamos como ⊢K B.
2.3 Ejemplo (Aritmética de Peano). Definimos como la aritmética de Peano a la teorı́a de primer
orden S en el lenguaje LS cuyos axiomas propios son
(S1) x = y ⇒ (x = z ⇒ y = z)
(S2) x = y ⇒ s(x) = s(y)
(S3) ¬(0 = s(x))
(S4) s(x) = s(y) ⇒ x = y
(S5) x+0=x
(S6) x + s(y) = s(x + y)
(S7) x·0=0
(S8) x · s(y) = x · y + x
(S9) [B(0) ∧ ∀x (B(x) ⇒ B(s(x)))] ⇒ ∀x B(x).
El axioma (S9) es el conocido principio de inducción matemática. En esta teorı́a se tiene, por ejem-
plo, ⊢S x + (y + z) = (x + y) + z, ⊢S s(x) = x + 1 y ⊢S 1 + 1 = 2. En general, todos los resultados
conocidos de la aritmética de números naturales se pueden demostrar en esta teorı́a.
En adelante, fijemos un lenguaje de primer orden L. El interés de este capı́tulo es probar las
leyes lógicas más generales que son teoremas de cualquier teorı́a de primer orden en el lenguaje L.
El siguiente teorema justifica que los resultados de L son válidos en cualquier teorı́a de primer
orden, excepto el Teorema de la Deducción y Reducción al Absurdo. Lo anterior se debe a que
estos métodos de demostración tienen restricciones al usar fórmulas con cuantificadores, lo cual
desarrollamos en la sección 2.3.
40
2.5 Proposición. Toda fórmula con estructura de tautologı́a es lógicamente válida, es decir, es
un teorema del cálculo de predicados (y, por lo tanto, de cualquier teorı́a de primer orden en el
lenguaje L). Además, la prueba de una tautologı́a solo requiere los axiomas (A1)-(A4) y (MP).
Siguiendo la idea de la sección 1.4, damos la siguiente definición en relación con la capacidad
de una teorı́a de primer orden para no caer en contradicciones.
2.6 Definición. Una teorı́a de primer orden K en el lenguaje L es inconsistente si existe una fórmula
C en K tal que ⊢K C y ⊢K ¬C. De lo contario, decimos que la teorı́a es consistente.
2.7 Corolario. Si K es una teorı́a inconsistente en el lenguaje L, entonces puede probar cualquier
fórmula del lenguaje L.
Justificación. Si K es una teorı́a de primer orden inconsistente, existe una fórmula C tal que ⊢K C
y ⊢K ¬C. Dada una fórmula arbitraria D en el lenguaje L, veamos que ⊢K D según la siguiente
demostración en K:
1. C ⊢K C
2. ¬C ⊢K ¬C
3. ¬C ⇒ (C ⇒ D) Tautologı́a
4. C⇒D 2,3,(MP)
5. D 1,4,(MP).
Del corolario anterior se deduce que una teorı́a de primer orden es consistente si existe una
fórmula de su lenguaje que no pueda demostrar. El hecho anterior permite concluir el siguiente resul-
tado pero, debido a los conocimientos avanzados que requiere su justificación, no lo demostraremos
en este texto.
Desde ahora, fijamos una teorı́a de primer orden K arbitraria en el lenguaje L. Los resultados
que probaremos a continuación son fórmulas lógicamente válidas. Las letras del tipo B, C, etc.
denotan fórmulas de K y letras como t, r, s, etc. denotan términos de K.
41
(b) Si t es un término libre para x en B(x), entonces ⊢K B(t) ⇒ ∃x B(x).
(c) ⊢K B ⇒ ∃x B.
(b)
1. (∀x (¬B(x))) ⇒ ¬B(t) (A5), pues t es libre para x en B(x) y, por lo tanto, en ¬B(x)
2. ¬¬B(t) ⇒ ¬∀x (¬B(x)) 1, de L (contrarrecı́proco)
3. B(t) ⇒ ¬¬B(t) de L (doble negación)
4. B(t) ⇒ ¬∀x (¬B(x)) 2, 3, de L (transitividad)
4. B(t) ⇒ ∃x B(x) Def. de ∃.
El siguiente Lema está marcado con * debido a que su uso involucra una generalización en x.
Este hecho se tendrá en cuenta en la sección 2.3.
K.2 Lema*. (a) B ⇒ C ⊢K (∀x B) ⇒ (∀x C). (c) B ⇔ C ⊢K (∀x B) ⇔ (∀x C).
Demostración. (a)
1. B⇒C Hip.
2. (∀x B) ⇒ B K.1
3. (∀x B) ⇒ C 1,2, transitividad
4. ∀x ((∀x B) ⇒ C) 1,(GEN)
5. [∀x ((∀x B) ⇒ C)] ⇒ [(∀x B) ⇒ (∀x C)] (A6), x no es libre en ∀x B
6. (∀x B) ⇒ (∀x C) 4,5,(MP).
(b)
1. B⇒C Hip.
2. ¬C ⇒ ¬B 1, contrarrecı́proco
3. (∀x (¬C)) ⇒ (∀x (¬B)) 2,(a)
4. (¬∀x (¬B)) ⇒ ¬(∀x (¬C)) 3, contrarrecı́proco
4. (∃x B) ⇒ ∃x C Def. de ∃.
42
(c)
1. B⇔C Hip.
2. B⇒C 1, de L
3. C⇒B 1, de L
4. (∀x B) ⇒ (∀x C) 2,(a)
5. (∀x C) ⇒ (∀x B) 3,(a)
6. (∀x B) ⇔ (∀x C) 4,5, de L.
El resultado anterior, junto con el Lema L.16, justifica que en una teorı́a de primer orden se
puedan reemplazar fórmulas equivalentes en una demostración, lo cual hace que el razonamiento
mediante equivalencias sea permitido. Ver el Apendice II para una justificación de este hecho.
K.3 Lema. (a) ⊢K (¬(∃x B)) ⇔ ∀x (¬B). (b) ⊢K (¬(∀x B)) ⇔ ∃x (¬B).
(a)
¬(∃x B) ⇔ ¬¬(∀x (¬B)) Def. de ∃
⇔ ∀x (¬B) doble negación.
(b)
∃x (¬B) ⇔ ¬∀x (¬¬B) Def. de ∃
⇔ ¬(∀x B) doble negación y sustitución (K.2).
Hemos probado ⊢K (∃x (¬B)) ⇔ ¬(∀x B). Por la conmutatividad de ⇔ (probada en L) se
sigue el resultado.
Para finalizar la sección, damos ejemplos de malas aplicaciones de los axiomas (A5) y (A6) en
donde no se tienen en cuenta sus restricciones.
2.9 Ejemplo. (a) ∀x ∃z (¬(x = z)) es un teorema de la aritmética de Peano S. Al aplicar (A5) con
el término z, se obtiene (∀x ∃z (¬(x = z))) ⇒ ∃z (¬(z = z)) y, por (MP), concluı́mos que
∃z (¬(z = z)) es un teorema de la aritmética de Peano, lo cual es falso (siempre que S sea
consistente). Dicha inconsistencia se sigue de una mala aplicación de (A5), pues z no es libre
para x en ∃z (¬(x = z)) ya que, al sustituir z por x, se obtiene una nueva variable ligada.
43
(b) De (A6) (mal aplicado) se sigue que
Probar los siguientes ejercicios en la Teorı́a K. No es permitido utilizar resultados de las secciones pos-
teriores.
2.7 Ejercicio. Sea B una fórmula donde x no es libre. (b) ⊢K (∃x B(x)) ⇔ (∃y B(y)).
De los resultados de L y de la sección anterior, cualquier teorı́a de primer orden cuenta con las
siguientes técnicas de demostración:
44
la generalización (GEN).
1. Teorema de la Deducción.
2. Reducción al absurdo.
3. Método de escogencia (más que un método de demostración, es una técnica que justifica ciertos
pasos demostrativos).
3.1 Teorema (de la Deducción para una teorı́a de primer orden.). Sea Γ un conjunto de fórmulas
(hipótesis) de K, B y C fórmulas de K. Si Γ, B ⊢K C y en la prueba de esto no se utiliza (GEN)
sobre variables libres de B, entonces Γ ⊢K B ⇒ C.
La restricción dada en este Teorema de la Deducción se debe a que, al tomar B como hipótesis,
sus variables libres quedan fijas y, por lo tanto, no es lógico generalizar sobre éstas para probar
C. Esta restricción no está tan presente en la práctica debido a que la experiencia e intuición del
matemático hace que, a la hora de demostrar, nunca generalice variables libres que están en una
hipótesis. A continuación, ofrecemos una mala aplicación del Teorema de la Deducción en la cual
se viola su restricción.
1. x = 0 Hip.
2. ∀x (x = 0) 1,(GEN).
45
3.3 Ejemplo (Aplicaciones del Teorema de la Deducción). (1) Probemos K.2(a) por medio del Teo-
rema de la Deducción.
1. B⇒C Hip.
2. ∀x B Hip.
3. (∀x B) ⇒ B K.1
4. B 2,3,(MP)
5. C 1,4,(MP)
6. ∀x C 5,(GEN).
Hemos probado B ⇒ C, ∀x B ⊢K ∀x C. En la prueba se utilizó (GEN) sobre la variable x (paso
6) pero, como x no es libre en la hipótesis ∀x B, podemos aplicarle el Teorema de la Deducción
y concluir B ⇒ C ⊢K (∀x B) ⇒ ∀x C. Cabe aclarar que no se puede aplicar Teorema de la De-
ducción para pasar la hipótesis B ⇒ C como antecedente ya que es posible que x sea libre en
B ⇒ C.
1. ∀x ∀y B Hip.
2. (∀x ∀y B) ⇒ ∀y B K.1
3. ∀y B 1,2,(MP)
4. (∀y B) ⇒ B K.1
5. B 3,4,(MP)
6. ∀x B 5,(GEN)
7. ∀y ∀x B 6,(GEN).
3.4 Definición (Fórmulas similares). Decimos que las fórmulas B(x) y B(y) son similares si ambas
tienen la misma estructura y se diferencian solo que en donde aparece x libre en B(x), aparece y
libre en B(y) y viceversa. De un modo más técnico, B(x) y B(y) son similares si se cumplen las
siguientes condiciones
46
(1) Consideremos la fórmula B(x) : x + y = 4. Luego,
B(y) : y + y = 4
B(z) : z + y = 4.
Las fórmulas B(x) y B(z) son similares, pues corresponde a intercambiar x por z y preserva
la idea de que, al sumarse con y, resulta 4. Sin embargo, B(x) y B(y) no son similares, pues
ambas no resultan de intercambiar x por y de una fórmula a otra, pues al cambiar x por y en
B(y) resulta x + x = 4, lo cual no es B(x). Por otra parte, x + x = 4 es similar a B(y).
C(w) : w = 0 ∨ ∀z (z = w2 )
C(z) : z = 0 ∨ ∀z (z = z 2 ).
Las fórmulas C(x) y C(w) son similares, pues corresponden a intercambiar los x libres por w
entre ambas fórmulas. Sin embargo, C(x) y C(z) no son similares, pues en C(z) se daña la
estructura de la fórmula C(x) (al aparecer una nueva variable ligada).
Demostración. (a) (i) Es claro que ⊢K (∀x B) ⇒ B por K.1, de modo que resta probar el recı́pro-
co cuando x no es libre en B.
1. B Hip.
2. ∀x B 1,(GEN).
Hemos probado B ⊢K ∀x B y en su prueba utilizamos (GEN) sobre x. Como x no es libre
en la hipótesis, por Teorema de la Deducción se sigue ⊢K B ⇒ ∀x B.
47
(b) (i)
1. ∀x B(x) Hip.
2. (∀x B(x)) ⇒ B(y) (A5), al ser B(x) y B(y) similares, y es libre para x en B(x)
3. B(y) 1,2,(MP)
4. ∀y B(y) 3,(GEN).
Hemos probado ∀x B(x) ⊢K ∀y B(y) con una aplicación de (GEN) sobre y. Dado que B(x)
y B(y) son similares, y no es libre en B(x) y, por lo tanto, tampoco es libre en ∀x B(x).
Luego, por el Teorema de la Deducción se sigue ⊢K (∀x B(x)) ⇒ ∀y B(y). El recı́proco se
demuestra de forma análoga.
3.6 Ejemplo. (1) El Lema K.4(a) indica que los cuantificadores que no ligan variables se pueden
eliminar de una fórmula. Por ejemplo, (∀x (∀x (x · 0 = x))) ⇔ ∀x (x · 0 = x), es decir, el
cuantificador ∀x que no liga variables en la fórmula de la izquierda se puede eliminar gracias a
K.4(a). Por la misma razón, ∀x (1 + 5 · 4 = 6) ⇔ (1 + 5 · 4 = 6).
Una aplicación errada de K.4(a) es ∃x (x = x+x) ⇔ x = x+x (lo cual es falso en la aritmética
de Peano), pues el cuantificador ∃x liga variables y no se puede prescindir de él (se debe a que
x es libre en x = x + x).
(2) El Lema K.4(b) indica que es permitido cambiar la variable de un cuantificador junto con las
variables que liga (siempre que la estructura de la fórmula no se vea afectada). Por ejemplo, de
dicho resultado,
(∀y (y + 0 = 4)) ⇔ ∀z (z + 0 = 4)
(∃x ∀y (y + x = 0)) ⇔ ∃w ∀y (y + w = 0).
Intuitivamente, cada par de fórmulas asociado por equivalencias tienen el mismo significado,
lo cual indica que no es importante la variable donde se cuantifica una fórmula respecto a su
significado.
Una aplicación herrada de K.2(b) es (∃x ∀y (y + x = 0)) ⇔ ∃y ∀y (y + y = 0), pues al cambiar
la variable x por y se daña la estructura de la fórmula, lo cual se debe a que ∀y (y + x = 0) y
∀y (y + y = 0) no son similares.
48
El método de reducción al absurdo, ası́ como el Teorema de la Deducción, tiene la restricción
de que en la prueba de la contradicción no se aplique generalización sobre variables libres de la
hipótesis que se toma para el absurdo. Del mismo modo, dicha generalización no es permitida
porque las variables libres en una hipótesis quedan fijas.
1. D ∧ ¬D pues Γ, ¬B ⊢K D ∧ ¬D
2. D 1, de L
3. ¬D 1, de L
4. ¬D ⇒ (D ⇒ B) tautologı́a
5. D⇒B 3,4,(MP)
6. B 2,5,(MP).
En la justificación del paso 1 se tiene, del enunciado, que no contiene generalizaciones sobre vari-
ables libres de B. Luego, la prueba (anterior) de Γ, ¬B ⊢K B no tiene aplicaciones de general-
ización sobre variables libres de B y, por lo tanto, de ¬B. Del Teorema de la deducción se sigue
Γ ⊢K (¬B ⇒ B) y, como (¬B ⇒ B) ⇔ B es una tautologı́a, concluı́mos que Γ ⊢K B.
3.8 Ejemplo. Sea E(x, y) una fórmula cuyas variables libres son las señaladas y tal que y es libre
para x en E(x, y). Veamos que ⊢K ¬∀x (E(x, y) ⇔ ¬E(x, y)) por reducción al absurdo.
Hemos probado ¬¬∀x (E(x, y) ⇔ ¬E(x, x)) ⊢K E(y, y) ∧ ¬E(y, y) sin utilizar (GEN). Luego, por
Reducción al Absurdo, se sigue ⊢K ¬∀x (E(x, y) ⇔ ¬E(x, y)).
El resultado anterior formaliza dos paradojas conocidas en matemáticas.
(1) La paradoja del barbero. Considere un pueblo donde hay un barbero cuyo criterio de trabajo
es el siguiente: “el barbero presta su servicio precisamente a las personas que no se afeitan a
sı́ mismas”. La pregunta es entonces, ¿quién afeita al barbero? Si el barbero se afeita a sı́ mismo,
según su criterio de trabajo entonces no se afeitarı́a a sı́ mismo. Esta inconsistencia indica, por
49
lo tanto, que el barbero no se afeita a sı́ mismo, pero, bajo su criterio, entonces se afeita a
sı́ mismo, lo cual es, de nuevo, una inconsistencia.
Esta paradoja en el lenguaje se puede formalizar de esta forma: considere E(x, y) :“y afeita a
x”. Si llamamos y al barbero, su criterio de trabajo es ∀x (E(x, y) ⇔ ¬E(x, x)), lo cual vimos
que es falso para el cálculo de predicados. Por lo tanto, no puede existir un barbero en el pueblo
que pueda acomodarse a dicho criterio de trabajo.
Notese que para el paso 3 no tenemos ningún resultado que lo justifique, aunque intuitivamente dice
algo que es claro para el significado del cuantificador ∃: “decir que existe un objeto que satisface
cierta propiedad debe permitir hacer un razonamiento con dicho objeto”. Para que este tipo de
proceder sea válido en el cálculo de predicados, debemos proponer un resultado que lo justifique.
50
Ésto es lo que vamos a definir precisamente como el método de escogencia, pues se está escogiendo
un objeto que existe y que satisface una propiedad.
3.10 Definición (Regla C y Método de Escogencia). Una aplicación de Regla C en una demostración
consiste en pasar, de una fórmula del tipo ∃x B(x) a B(c). Una prueba por método de escogencia es
una demostración que contiene regla C y tal que se satisfacen las siguientes condiciones:
(1) Al aplicar regla C, el objeto c es, técnicamente, una nueva constante que no figura en el lenguaje
de la teorı́a.
(2) Después de aplicar regla C a ∃x B(x), no se puede generalizar sobre variables libres de ∃x B(x)
en lo que sigue de la prueba.
(3) Regla C se puede aplicar finitas veces en una demostración. Sin embargo, en cada aplicación no
se puede repetir la constante escogida. Es decir, si ∃x B(x) y ∃y C(y) aparecen en una prueba,
al aplicar regla C a la primera fórmula se sigue B(c) donde c es una constante que no está en
el lenguaje de la teorı́a. Luego, si aplicamos regla C a ∃y C(y) se sigue C(d) donde d es una
constante que no está en el lenguaje de la teorı́a y no es c (aunque, en algunos casos, podrı́a
probarse c = d). No es apropiado aplicar regla C y concluir C(c), pues se estarı́a repitiendo la
escogencia de c cuando ya se tomó para ∃x B(x). Intuitivamente, esto se debe a que el objeto
que satisface B(x) no necesariamente es el mismo que satisface C(x).
(4) Los axiomas y reglas de inferencia de la teorı́a se pueden aplicar para fórmulas que contienen
constantes que aparecen por regla C.
(5) La conclusión de una demostración donde se utiliza regla C no debe contener las constantes
generadas por su aplicación. Esto se debe a que dichas constantes no están en el lenguaje de la
teorı́a.
Justificación. Supongamos primero que Γ prueba a B donde sólo hay una aplicación de regla C
que cumple (1)-(5) del método de escogencia. Sea ∃z D(z) la fórmula a la cual se le aplica regla
C en dicha prueba, de modo que en algún paso de la prueba se tiene D(c). Lo anterior refleja los
siguientes hechos:
51
(i) Γ ⊢K ∃z D(z), pues la fórmula a la que se le aplica regla C debe ser demostrable.
(ii) Si en vez de considerar la regla C se justifica el paso D(c) como una nueva hipótesis, obten-
emos Γ, D(c) ⊢K B.3
En la demostración para Γ, D(c) ⊢K B (en (ii)) podemos cambiar todas las c por una nueva variable
w que no aparezca en ninguna fórmula de la demostración. Con ese cambio, se sigue Γ, D(w) ⊢K B.
Por la condición (5) del método de escogencia la fórmula B permanece intacta, pues no contiene
niguna c. De ésto también se deduce que w no es libre en B.
Según la condición (2) del método de escogencia, en la prueba de B no se aplica generalización
sobre variables libres de ∃z D(z) y, luego, tampoco hay generalización sobre variables libres de
D(w) en la prueba de Γ, D(w) ⊢K B. Por lo tanto, por el Teorema de la Deducción se sigue que
Γ ⊢K D(w) ⇒ B.
La siguiente demostración justifica entonces que Γ ⊢K B:
Mediante un argumento inductivo, supongamos que una prueba es válida cuando contiene n aplica-
ciones de regla C que cumplen (1)-(5), de donde basta justificar que una prueba con n + 1 aplica-
ciones de regla C que cumplen (1)-(5) también es válida. En efecto, si Γ prueba a B mediante n + 1
aplicaciones de regla C, sea ∃zn+1 Dn+1 (zn+1 ) la n + 1-ésima fórmula a la cual se le aplica regla C
en la prueba, de donde se genera Dn+1 (cn+1 ) donde cn+1 es una nueva constante. De forma análoga
al caso de una sola aplicación de regla C, al cambiar todos los cn+1 de los pasos de la demostración
por una variable w que no figure en toda la prueba, se obtiene que de Γ, D(w) se prueba B mediante
n aplicaciones de regla C (las cuales se conservan por la condición (3)). Por la hipótesis, se tiene
una prueba válida y por tanto Γ, D(w) ⊢K B. Luego, siguiendo las mismas lı́neas de la prueba del
caso de una sola regla C, se concluye Γ ⊢K B.
3.12 Ejemplo. (1) En el Ejemplo 3.9 el paso 3. se justifica por Regla C donde c es una nueva
constante que no está en el lenguaje de la teorı́a. Luego, como en esta prueba se cumplen las
3
Esto es un abuso de la notación, pues D(c) no se puede considerar como hipótesis ya que su escritura supera el
lenguaje de la teorı́a K. En un sentido estricto, debe considerarse K′ una teorı́a de primer orden cuyo lenguaje es el de K
más la constante c y cuyos axiomas son los de K permitidos para fórmulas en el lenguaje extendido.
52
condiciones (1)-(5) para el método de escogencia, concluı́mos que ∀x (B ⇒ C), ∃x B ⊢K ∃x C.
Debido a que en dicha prueba no se utiliza (GEN), al aplicar Teorema de la Deducción dos
veces concluı́mos ⊢K (∀x (B ⇒ C)) ⇒ ((∃x B) ⇒ ∃x C).
1. ∃x ∃y B(x, y) Hip.
2. ∃y B(c, y) 1, Regla C, c nueva constante
3. B(c, d) 2, Regla C, d nueva constante (no puede escogerse c otra vez)
4. B(c, d) ⇒ ∃x B(x, d) K.1(b)
5. ∃x B(x, d) 3,4,(MP)
6. ∃x B(x, d) ⇒ ∃y ∃x B(x, y) K.1(b)
7. ∃y ∃x B(x, y) 5,6,(MP).
(3) (Mala aplicación de regla C donde se viola la condición (2)) La fórmula (∀x ∃y B) ⇒ ∃y ∀x B no
es lógicamente válida. En la aritmética de Peano, consideremos B : x < y, de donde la fórmula
anterior se traduce en (∀x ∃y (x < y)) ⇒ ∃y ∀x (x < y). El antecedente dice que “para cualquier
número existe otro mayor que él”, el cual es verdad en S, pero el consecuente es falso, pues dice
“existe un número más grande que todos”. Por lo tanto, dicha implicación es falsa.
Sin embargo, un mal uso de la regla C puede generar una demostración de lo anterior:
1. ∀x ∃y B(x, y) Hip.
2. ∃y B(x, y) 1,K.1(a),(MP)
3. B(x, c) 2, Regla C, c nueva constante
4. ∀x B(x, c) 3,(GEN)
5. (∀x B(x, c)) ⇒ ∃y ∀x B(x, y) K.1(b)
6. ∃y ∀x B(x, y) 4,5,(MP).
En el paso 4 se utiliza una generalización sobre x, variable que puede ser libre en la fórmula
del paso 2 (a quien se le aplica regla C). Esto viola la condición (2) del método de escogencia
y, por lo tanto, la anterior no es una demostración válida.
(4) (Mala aplicación de regla C donde se viola la condición (3)) ((∃x B) ∧ (∃x C)) ⇒ ∃x (B ∧ C) no
es lógicamente válida. En la aritmética de Peano, consideremos B : “x es par” y C : “x es
impar”. El antecedente de la fórmula establece que “existe un número par y existe un número
impar”, lo cual es cierto en la aritmética, pero el consecuente “existe un número par e impar”es
falso. En este caso, ((∃x B) ∧ (∃C)) ⇒ ∃x (B ∧ C) es falso en la aritmética.
53
Un mal uso de la regla C puede generar una prueba de lo anterior:
Notemos que en el paso 5 se aplica regla C por segunda vez, de modo que, según (3) del método
de escogencia, debe tomarse otra constante que no sea c, lo cual no se tuvo en cuenta. Por lo
tanto, la prueba anterior no es válida.
1. ∀x (B ∧ C) Hip.
2. B∧C 1,K.1,(MP)
3. B de 2
4. C de 2
5. ∀x B 3,(GEN)
6. ∀x C 4,(GEN)
7. (∀x B) ∧ (∀x C) 5 y 6.
Hemos probado (∀x B) ∧ (∀x C) ⊢K ∀x (B ∧ C) con una generalización sobre x pero, como x no
es libre en (∀x B) ∧ (∀x C), por el Teorema de la Deducción se sigue “⇐”.
54
(b) Damos dos pruebas de este hecho, la primera por equivalencias:
La segunda prueba consiste en probar cada implicación sin usar (a) ni la definición de ∃.
1. B ⇒ (B ∨ C) de L
2. (∃x B) ⇒ ∃x (B ∨ C) 1,K.2
3. C ⇒ (B ∨ C) de L
4. (∃x C) ⇒ ∃x (B ∨ C) 3,K.2
5. ((∃x B) ∨ (∃x C)) ⇒ ∃x (B ∨ C) 2,4, disy. de casos.
55
(a) ⊢K (∀x (B ∨ C)) ⇔ (B ∨ ∀x C). (c) ⊢K (∃x (B ∧ C)) ⇔ (B ∧ ∃x C).
(b) ⊢K (∃x ∃y B) ⇔ ∃y ∃x B.
(c) ⊢K (∃x ∀y B) ⇒ ∀y ∃x B.
Demostración. (a) La prueba del Ejemplo 3.3(2) justifica ambas implicaciones de la equivalencia.
(b) Directo del Ejemplo 3.12(2) (el recı́proco se prueba de forma análoga).
(c)
1. ∃x ∀y B(x, y) Hip.
2. ∀y B(c, y) 1, Regla C, c nueva constante
3. B(c, y) 2,K.1,(MP)
4. ∃x B(x, y) 3,K.1(b),(MP)
5. ∀y ∃x B(x, y) 4,(GEN).
Hemos probado ∃x ∀y B ⊢K ∀y ∃x B mediante método de escogencia con generalización sobre y,
la cual es válida porque y no es libre en la fórmula que se aplica regla C (∃x ∀y B). Luego, como
y no es libre en la hipótesis, por el Teorema de la Deducción se sigue el resultado.
56
En el Ejemplo 3.12(3) vimos que el recı́proco de (c) no es lógicamente válido. Otro ejemplo que
verifica esto es con la fórmula B(x, y) :“la llave x abre la puerta y”. (c) significa que “si existe una
llave que abre todas las puertas, entonces toda puerta tiene una llave que la abre”, pero su recı́proco
dice “si toda puerta tiene una llave que la abre, entonces existe una llave que abre todas las puertas”,
lo cual puede ser falso en vista de que no a todas las puertas las abre la misma llave.
2.9 Ejercicio. Probar los siguientes enunciados. 2.13 Ejercicio. Demuestre que las siguientes afirma-
ciones son teoremas de K.
(a) Si x no es libre en B, entonces
(a) [(∃x B) ⇒ ∀x C] ⇒ ∀x (B ⇒ C).
(i) ⊢K (∀x (B ⇒ C)) ⇔ (B ⇒ ∀x C).
(ii) ⊢K (∃x (B ⇒ C)) ⇔ (B ⇒ ∃x C). (b) (∃x (B ⇒ C)) ⇔ ((∀x B) ⇒ ∃x C).
2.10 Ejercicio. Indique por qué la siguiente prueba (f) ((∃x B) ⇒ C) ⇒ ((∀x B) ⇒ ∃x C).
no es válida en K. (g) [(∀x (B ⇒ (C ∨ D))) ∧ ¬∀x (B ⇒ C)]
⇒ ∃x (B ∧ D).
1. ∃x (B(x) ⇒ C(x)) Hip.
2. ∃x B(x) Hip. (h) (∀x ∃x B) ⇔ ∃x B.
3. B(d) ⇒ C(d) 1, Regla C (i) (∀x ((∀x B) ∨ C)) ⇔ ((∀x B) ∨ (∀x C)).
4. B(d) 2, Regla C
5. C(d) 3,4,(MP) (j) (∃x ((∀x B) ∧ C)) ⇔ ((∀x B) ∧ (∃x C)).
6. ∃x C(x) 5,K.1(b),(MP). (k) (∀ (B ∨ C)) ⇒ ((∀ B) ∨ (∃ C)).
x x x
Además, de un ejemplo para verificar que (l) ((∃x B) ∧ ∀x C) ⇒ ∃x (B ∧ C).
(∃x (B ⇒ C)) ⇒ ((∃x B) ⇒ ∃x C) no es lógicamente
válida. 2.14 Ejercicio. Si x no es libre en C y y no es libre
en B, pruebe que
2.11 Ejercicio. (a) Probar el Lema K.6.
(a) ⊢K (∀x ∀y (B ∧ C)) ⇔ ((∀x B) ∧ ∀y C).
(b) Probar (b) y (c) del Lema K.7.
(b) ⊢K (∃x ∃y (B ∧ C)) ⇔ ((∃x B) ∧ ∃y C).
2.12 Ejercicio. Sea E(x, y) una fórmula cuyas vari-
ables libres son las señaladas y tal que sustituciones (c) ⊢K (∀x ∃y (B ∨ C)) ⇔ ((∀x B) ∨ ∃y C).
de x ó y por x, y ó z son permitidas. Demostrar que 2.15 Ejercicio. Sea Γ un conjunto de hipótesis.
(a) ⊢K (∀x ∀y E(x, y)) ⇒ ∀x E(x, x). (a) Si B es una sentencia y C es una fórmula tal que
(b) ⊢K [∀x ∀y (E(x, y) ⇒ ¬E(y, x))] ⇒ ¬∀x E(x, x). Γ, B ⊢K C, entonces Γ ⊢K B ⇒ C.
(c) ⊢K ∀x (E(x, x) ⇒ ∃y E(x, y)). (b) Si Γ, B, ¬C ⊢K D ∧ ¬D en cuya prueba no se
h utiliza (GEN) sobre variables libre de B y de C,
(d) ⊢K ∀x ∀y (E(x, y) ⇒ E(y, x)) entonces Γ ⊢K B ⇒ C.
i
∧ ∀x ∀y ∀z ((E(x, y) ∧ E(y, z)) ⇒ E(x, z)) 2.16 Ejercicio. Sea C una sentencia tal que C no se
⇒ ∀x ∀y (E(x, y) ⇒ E(x, x)). puede demostrar en K. Justifique que
(e) ⊢K ¬∃y ∀x (E(x, y) ⇔ ¬E(x, x)). (a) K es consistente.
(f) Relacionar el inciso anterior con la paradoja del (b) La teorı́a que resulta de añadir ¬C a los axiomas
barbero y la paradoja de Russell. de K es consistente.
57
2.4. Cuantificadores Tı́picos
4.1 Definición (Cuantificadores tı́picos o acotados). Dado B y C definimos las siguientes fórmulas:
∀x
B C es ∀x (B ⇒ C).
∃x ∀x
B C es ¬ B ¬C .
A los cuantificadores del tipo ∀Bx ó ∃Bx los llamamos cuantificadores tı́picos o acotados. Su
La definición del cuantificador existencial acotado surge de forma análoga a como se define ∃
respecto a ∀. En la práctica es más común utilizar la siguiente equivalencia para dicho cuantificador,
la cual da sentido a su significado intuitivo.
∃x
K.9 Lema. ⊢K B C ⇔ ∃x (B ∧ C).
Demostración.
∃x
C ⇔ ¬ ∀Bx ¬C Def. de ∃Bx
B
Def. de ∀Bx
⇔ ¬(∀x (B ⇒ ¬C))
⇔ ∃x (¬(B ⇒ ¬C)) K.3
⇔ ∃x (B ∧ ¬¬C) Negación de ⇒
⇔ ∃x (B ∧ C) Doble negación.
4.2 Ejemplo. Los siguientes ejemplos (excepto el primero) corresponden a la teorı́a ZF donde toma
lugar la matemática básica. Fijamos la siguiente notación
∀x
∀x∈U B es x∈U B.
∃x
∃x∈U B es x∈U B.
58
(2) ∀x∈A (x ∈ B) significa que “todos los elementos de A están en B” lo cual significa que A ⊆ B.
Según la definición de cuantificadores acotados, la fórmula anterior es ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ B).
∃z
(3) z⊆B ∀x (x ∈
/ z)) significa que “existe un subconjunto de B que no tiene elementos” lo cual
equivale a ∅ ⊆ B. De K.9, la fórmula quivale a ∃z (z ⊆ B ∧ ∀x (x ∈
/ z)).
(4) ∀n∈Z ∃k∈Z (n + (n + 1) = 2k + 1) significa que “la suma de un entero y su sucesor es impar”,
lo cual se expresa con cuantificadores acotados. Por definición de cuantificadores acotados y el
Lema K.9, esta fórmula equivale a ∀n (n ∈ Z ⇒ ∃k (k ∈ Z ∧ n + (n + 1) = 2k + 1)).
Las propiedades que cumplen las fórmulas con cuantificadores acotados son muy similares a las
que cumplen con cuantificadores no acotados (∀x y ∃x ). En lo que resta de la sección, vamos a dar
las versiones de los resultados de las dos secciones anteriores para cuantificadores acotados.
∀x ∃x
(a) ⊢K B(t) ∧ B(x) C(x) ⇒ C(t). (c) ⊢K (B(t) ∧ C(t)) ⇒ B(x) C(x).
∀x ∃x
(b) ⊢K B ∧ B C ⇒ C. (d) ⊢K (B ∧ C) ⇒ B C.
K.11 Lema* (Relativo a K.2). Los siguientes enunciados justifican la sustitución de fórmulas equiv-
alentes dentro de cuantificadores tı́picos4 .
∀x ∀x ∀x ∀x
(a) B ⇒ (C ⇒ D) ⊢K B C ⇒ B D. (e) C ⇒ D ⊢K B C ⇒ B D.
∃x ∃x ∃x ∃x
(b) B ⇒ (C ⇒ D) ⊢K B C ⇒ B D. (f) C ⇒ D ⊢K B C ⇒ B D.
∀x ∀x ∀x ∀x
(c) B ⇒ (C ⇔ D) ⊢K B C ⇔ B D. (g) C ⇔ D ⊢K B C ⇔ B D.
∃x ∃x ∃x ∃x
(d) B ⇒ (C ⇔ D) ⊢K B C ⇔ B D. (h) C ⇔ D ⊢K B C ⇔ B D.
4
Ver también el Ejercicio 2.19.
59
(c)
1. B ⇒ (C ⇔ D) Hip.
2. (C ⇔ D) ⇒ (C ⇒ D) Tautologı́a
3. (C ⇔ D) ⇒ (D ⇒ C) Tautologı́a
4. B ⇒ (C ⇒ D) 1,2,transitividad
5. B ⇒ (D ⇒ C) 1,3,transitividad
∀x ∀x
6. B C ⇒ B D 4,(a)
∀x ∀x
7. B D ⇒ B C 5,(a)
∀x ∀x
8. B C ⇔ B D de 6 y 7.
(f)
1. C ⇒ D Hip.
2. B ⇒ (C ⇒ D) 1, de L
∃x ∃x
3. B C ⇒ B D 2,(b).
∃x ∀x
K.12 Lema (Relativo a K.3). (a) ⊢K ¬ B C ⇔ B (¬C).
∀x ∃x
(b) ⊢K ¬ B C ⇔ B (¬C).
Demostración. (a)
∃x
C ⇔ ¬¬ ∀Bx (¬C) Def. de ∃Bx
¬ B
⇔ ∀Bx (¬C)
Doble negación.
(b)
∀x
Def. de ∀Bx
¬ B C ⇔ ¬∀x (B ⇒ C)
⇔ ∃x (¬(B ⇒ C)) K.3
⇔ ∃x (B ∧ ¬C) Negación de ⇒
⇔ ∃Bx (¬C)
K.9.
∀x
En matemáticas es muy común demostrar afirmaciones del tipo B C como, por ejemplo,
∀n∈P (−n ∈ P ), ∀n∈P ∀m∈P (n + m ∈ P ) y ∀n∈P (n2 ∈ P ) donde P = {n ∈ Z / ∃k∈Z (n = 2k)}
(el conjunto de enteros pares). El procedimiento usual para demostrar afirmaciones de este tipo es
suponer B como hipótesis y concluir C, lo cual es garantizado por el siguiente resultado.
4.3 Proposición* (Variación usual del Teorema de la Deducción). Sea Γ un conjunto de fórmulas.
Si Γ, B ⊢K C y en esta prueba no se utiliza generalización sobre variables libres de B, entonces
Γ ⊢K ∀Bx C.
60
El Lema K.4 afirma que se pueden eliminar, en una fórmula, los cuantificadores que no ligan
variables. En una fórmula del tipo ∀Bx C es posible que el cuantificador no ligue variables en C,
pero su eliminación no se puede tomar a la ligera debido a que éste involucra a B. Sin embargo, es
posible concebir su eliminación bajo cierta hipótesis.
61
4.4 Ejemplo. Los siguientes ejemplos tienen lugar en ZF.
(a) En la fórmula ∃x∈Z (n2 − 1 = −2) el existe no liga variables en n2 − 1 = −2. Como ∃x (x ∈ Z)
es cierto, entonces ∃x∈Z (n2 − 1 = −2) ⇔ n2 − 1 = −2 por el resultado anterior.
∀x
(b) En la fórmula x6=x (0 = 1) el cuantificador universal no liga variables en 0 = 1. Sin embargo,
∀x
(0 = 1) ⇔ 0 = 1 es falsa, pues 0 = 1 es falsa y x6∀=xx (0 = 1) es verdadera
la fórmula x6=x
(x 6= x ⇒ 0 = 1 es cierta porque tiene antecedente falso, por lo cual ∀x (x 6= x ⇒ 0 = 1) por
(GEN)). Al observar el Lema K.13 la hipótesis ∃x (x 6= x) es falsa, por lo cual no se garantiza
la eliminación del cuantificador acotado.
∀x
∀x
∀x
K.14 Lema (Relativo a K.5). (a) ⊢K B (C ∧ D) ⇔ B C ∧ B D .
∃x
∃x
∃x
(b) ⊢K B (C ∨ D) ⇔ B C ∨ B D .
Demostración. (a)
∀x
⇔ Def. de ∀Bx
B (C ∧ D) ⇔ ∀x (B ⇒ (C ∧ D))
⇔ ∀x (¬B ∨ (C ∧ D)) Def. de ⇒
⇔ ∀x ((¬B ∨ C) ∧ (¬B ∨ D)) Ley distributiva
⇔ ∀x ((B ⇒ C) ∧ (B ⇒ D)) Def. de ⇒
⇔ (∀x (B ⇒ C)) ∧ (∀x (B ⇒ D)) K.5
⇔ ∀Bx C ∧ ∀Bx D Def. de ∀Bx .
(b)
∃x
B (C ∨ D) ⇔ ∃x (B ∧ (C ∨ D)) K.9
⇔ ∃x ((B ∧ C) ∨ (B ∧ D)) Ley distributiva
⇔ (∃x (B ∧ C)) ∨ (∃x (B ∧ D)) K.5
⇔ ∃Bx C ∨ ∃Bx D
K.9.
∃x
∃x
∃x
K.15 Lema (Relativo a K.6). (a) ⊢K B (C ∧ D) ⇒ B C ∧ B D .
∀x ∀x ∀x
(b) ⊢K B C ∨ B D ⇒ B (C ∨ D).
El siguiente resultado está en relación al Lema K.7. Sin embargo, en algunos casos se requiere
la misma hipótesis del Lema K.13 por su uso al efectuar la prueba.
∀x ∀x
(a) ⊢K B (C ∨ D) ⇔ C ∨ B D .
62
∀x ∀x
(b) ⊢K (∃x B) ⇒ B (C ∧ D) ⇔ C ∧ B D .
∃x ∃x
(c) ⊢K B (C ∧ D) ⇔ C ∧ B D .
∃x ∃x
(d) ⊢K (∃x B) ⇒ B (C ∨ D) ⇔ C ∨ B D .
Demostración. (a)
∀x
Def. de ∀Bx
B (C ∨ D) ⇔ ∀x (B ⇒ (C ∨ D))
⇔ ∀x (¬B ∨ C ∨ D) Def. de ⇒
⇔ ∀x (C ∨ ¬B ∨ D) Asociatividad y conmutatividad de ∨
⇔ ∀x (C ∨ (B ⇒ D)) Def. de ⇒
⇔ C ∨ ∀x (B ⇒ D) K.7, x no es libre en C
⇔ C ∨ ∀Bx D Def. de ∀Bx .
K.17 Lema (Relativo a K.8). Sea x una variable no libre en C y y una variable no libre en B.
∃x
∃y ∃y ∃x
(b) ⊢K B C D ⇔ C B D.
∃x ∀y ∀y ∃x
(c) ⊢K B C D ⇒ C B D.
La razón de la condición en este Lema es que uno de los cuantificadores acotados no ligue la
fórmula que está debajo del otro. Si x fuera libre en C entonces en ∀Bx ∀Cy D las x libres en C
estarı́an ligadas por ∀Bx , mientras que en ∀Cy ∀Bx D las x se conservarı́an libres en C, dándose
ası́ una diferencia estructural entre ambas fórmulas. Una situación análoga sucede si y es libre en B.
Demostración. (a) Presentamos dos formas de demostrar este inciso, la primera por doble impli-
cación mediante el Teorema de la Deducción. Debido a que vamos a probar afirmaciones con
cuantificadores universales acotados, consideraremos hipótesis para utilizar la Proposición 4.3.
1. ∀Bx ∀Cy D Hip.
2. C Hip.
3. B Hip.
4. ∀Cy D
1,3,K.10(c),(MP)
5. D 2,4,K.10(c),(MP).
63
∀x ∀y
Hemos probado B C D, C, B ⊢K D. Como en la prueba no hubo generalización, de la
Proposición 4.3 se sigue ∀Bx ∀Cy D, C ⊢K ∀Bx D, lo cual involucra (GEN) sobre x. Como x
no es libre en C, de la aplicación del mismo resultado se sigue ∀Bx ∀Cy D ⊢K ∀Cy ∀Bx D lo
cual involucra (GEN) sobre y. x no es libre en la hipótesis ∀Bx ∀Cy D, pues el cuantificador
∀x
∀y
B liga todas las x. El cuantificador C liga las y que aparecen libres en C y D, pero, como
y no es libre en B, entonces y tampoco es libre en la hipótesis. Por lo tanto, las generaliza-
ciones en x y y no violan la restricción para aplicar el Teorema de la Deducción y concluir
⊢K ∀Bx ∀Cy D ⇒ ∀Cy ∀Bx D. El recı́proco se demuestra de manera análoga.
Hemos probado ∃Bx ∀Cy D, C ⊢K ∃Bx D sin utilizar (GEN). Luego ∃Bx ∀Cy D ⊢K ∀Cy ∃x
B D
por Proposición 4.3, donde surge una aplicación de (GEN) sobre y. Como y no es libre en B
entonces tampoco es libre en ∃Bx ∀Cy D por lo cual, por Teorema de la Deducción, se concluye
la implicación.
64
∀x ∃x ∃x
2.17 Ejercicio*. Pruebe que C ⊢K B C. (d) B (C ∨ D) ⇔ C ∨ B D cuando x no es
libre en C.
2.18 Ejercicio. Demostrar
(e) (a), (b) y (c) del Lema K.17 sin la condición de
(a) Lema K.10.
las variables no libres escrita en el enunciado.
∀x ∃x
(b) ⊢K (∃x B) ⇒ B C ⇒ B C .
2.24 Ejercicio. Probar los siguientes enunciados.
(c) ⊢K ∃Bx C ⇔ ∃x
C B.
(a) Si x no es libre en C, entonces
2.19 Ejercicio*. Probar
(i) ⊢K ∀Bx (C ⇒ D) ⇔ C ⇒ ∀x
B D .
(a) (b), (d), (e), (g) y (h) del Lema K.11.
(ii) ⊢K (∃x B) ⇒
(b) B ⇒ C ⊢K ∀Cx D ⇒ ∀Bx D.
∃x ∃x
B (C ⇒ D) ⇔ C ⇒ B D .
(c) B ⇒ C ⊢K ∃Bx D ⇒ ∃Cx D.
(b) Si x no es libre en D, entonces
(d) B ⇔ C ⊢K ∀Bx D ⇔ ∀Cx D.
(i) ⊢K ∀Bx (C ⇒ D) ⇔ ∃x
B C ⇒D .
(e) B ⇔ C ⊢K ∃Bx D ⇔ ∃Cx D.
(ii) ⊢K (∃x B) ⇒
∃x ∀x
2.20 Ejercicio. Sea Γ un conjunto de fórmulas. Si B (C ⇒ D) ⇔ B C ⇒D .
existe una fórmula D tal que Γ, B, ¬C ⊢K D ∧ ¬D y
en esta prueba no se utiliza generalización sobre vari- 2.25 Ejercicio. Demostrar (la aplicación de los sigu-
ables libres de B y C, entonces Γ ⊢K ∀Bx C. ientes resultados involucra (GEN) sobre x, excepto
(a) y (b)):
2.21 Ejercicio. Sea B(x) similar a B(y) y C(x) sim- ∀x
ilar a C(y). Probar: (a) ⊢ K (∀ x C) ⇒ B C.
(b) ⊢K ∃Bx C ⇒ ∃x C.
∀x
∀y
(a) ⊢K B(x) C(x) ⇔ B(y) C(y) .
(c) C ⇒ B ⊢K ∃Bx C ⇔ ∃x C.
∃x
∃y
(b) ⊢K B(x) C(x) ⇔ B(y) C(y) .
(d) (¬C) ⇒ B ⊢K ∀Bx C ⇔ ∀x C.
2.22 Ejercicio. Demostrar:
(e) B ⊢K ∃Bx C ⇔ ∃x C.
(a) (b) del Lema K.13.
(b) Lema K.15. (f) B ⊢K ∀Bx C ⇔ ∀x C.
libre en C. idea).
65
2.5. Teorı́as con Igualdad
En esta sección modelamos el tipo de teorı́as de primer orden que contienen el signo = de modo
que su uso en la teorı́a corresponde a lo que intuitivamente significa. Dados dos términos t y s, la
interpretación de t = s denota que t y s representan el mismo objeto y esto permite que se pue-
da intercambiar t por s en ecuaciones y fórmulas de forma consistente. Sin embargo, para que el
signo = se comporte de esta forma en una teorı́a de primer orden, debe cumplir ciertos axiomas y
propiedades que desarrollamos a continuación.
Antes de presentar los axiomas para el signo =, fijamos una nueva notación. Si B es una fórmula,
con B(x) se destaca la presencia de la x en B y, si t es un término, B(t) denota la sustitución de t por
todos los x libres en B(x). Sin embargo, en esta sección estamos interesados en hacer sustituciones
de términos por variables, pero no que se tengan que sustituir todas las variables libres sino solo
algunas, al gusto de quien escribe la demostración. Para este caso, escribimos B(x, x) para destacar
la variable x en B y denotamos por B(x, t) la fórmula que resulta de sustituir t por algunas x libres
(las que se deseen) en B(x, x).
5.2 Definición (Teorı́a con Igualdad). Sea L un lenguaje de primer orden que contiene la letra
predicativa =, K una teorı́a de primer orden en el lenguaje L. Decimos que K es una teorı́a con
igualdad si las siguientes afirmaciones son teoremas de K para cualquier fórmula B:
(A7) ∀x (x = x)
(A8) (Sustitución) x = y ⇒ (B(x, x) ⇒ B(x, y)), siempre que las sustituciones de y por x en
B(x, x) no generen nuevas variables ligadas.
66
Como notación, escribimos t 6= s para denotar ¬(t = s).
5.3 Ejemplo. (a) La aritmética de Peano S es una teorı́a con igualdad, pues sus axiomas permiten
demostrar (A7) y (A8). Si suponemos x = y en esta teorı́a, según (A8) se sigue, en caso de
sustituir y por el primer y tercer x, que x3 + x2 + x + 1 = 0 ⇒ y 3 + x2 + y + 1 = 0.
(a) ⊢K t = t.
(b) ⊢K t = s ⇒ s = t.
(c) ⊢K (t = r ∧ r = s) ⇒ t = s.
Demostración. (a)
1. ∀x (x = x) (A7)
2. t = t 1,(A5),(MP).
(b) Sean u y v variables que no figuran en t ni en s (las cuales podemos tomar porque el lenguaje
contiene infinitas variables). Probemos primero que ⊢K ∀u ∀v (u = v ⇒ v = u).
1. u=v Hip.
2. u = v ⇒ (u = u ⇒ v = u) (A8) al sustituir v por la primera u en la fórmula u = u
3. u=u⇒v =u 1,2,(MP)
4. u=u (a)
5. v=u 3,4,(MP).
1. ∀u ∀v (u = v ⇒ v = u) ya probado
2. ∀v (t = v ⇒ v = t) 1,(A5),(MP), como v no aparece en t, la sustitución no genera
nuevas variables ligadas
3. t = s ⇒ s = t 2,(A5),(MP), como v no aparece en t, no hay sustituciones de s
por v además de las señaladas.
67
El (A8) solo permite hacer sustitución de variables mediante una sola implicación, pero, de
un modo más general, una teorı́a con igualdad permite sustituir cualquier tipo de términos iguales y
genera fórmulas equivalentes, criterio el cual se utiliza todo el tiempo en matemáticas (de una forma
implı́cita e intuitiva).
I.2 Lema (Criterio de sustitución para fórmulas). Sean t y s término de K, B(t, t) una fórmula y
B(t, s) la fórmula que resulta de sustituir s por los t deseados en B(t, t), de modo que la sustitución
no genere nuevas variables ligadas. Entonces ⊢K t = s ⇒ (B(t, t) ⇔ B(t, s)).
Demostración. Considere u y v variables que no figuran en t, s ni en B(t, t). Sea B(u, u) la fórmula
que resulta cambiar todas las u por t en B(t, t). Sea B(u, v) la fórmula que resulta de cambiar todas
las u por t y todas las v por s en B(t, s). Veamos primero que
1. u=v Hip.
2. u = v ⇒ (B(u, u) ⇒ B(u, v)) (A8)
3. B(u, u) ⇒ B(u, v) 1,2,(MP)
4. v=u 2,I.1(b),(MP)
5. v = u ⇒ (B(u, v) ⇒ B(u, u)) (A8), al restablecer las u que se cambiaron por v en B(u, u)
6. B(u, v) ⇒ B(u, u) 4,5,(MP)
7. B(u, u) ⇔ B(u, v) de 3 y 6.
Del Teorema de la Deducción y dos veces (GEN) se sigue ⊢K ∀u ∀v (u = v ⇒ (B(u, u) ⇔ B(u, v))).
Ahora veamos el enunciado de este Lema.
5.4 Ejemplo. (1) En la aritmética de Peano es claro que 3 · 2 + 1 = 7. Luego, del Lema I.2 se sigue
que (3 · 2 + 1) · 7 = 49 ⇔ 7 · 7 = 49 al sustituir 3 · 2 + 1 por 7, los cuales son términos iguales.
68
I.3 Lema (Criterio de sustitución para términos). Sean t y s términos de K, T (t, t) un término de
K. Si T (t, s) denota el término que resulta de sustituir s por los t deseados en T (t, t), entonces
⊢K t = s ⇒ T (t, t) = T (t, s).
Demostración. Denotemos por B(t, t) a T (t, t) = T (t, t) y por B(t, s) a T (t, t) = T (t, s).
1. t=s Hip.
2. t = s ⇒ (B(t, t) ⇔ B(t, s)) I.2
3. B(t, t) ⇔ B(t, s) 1,2,(MP)
4. T (t, t) = T (t, t) I.1(a)
4. B(t, t) por notación
5. B(t, s) 3,4,sustitución de equivalentes
5. T (t, t) = T (t, s) por notación.
Para dar fin al capı́tulo, presentamos una notación importante en matemáticas dada para teorı́as
con igualdad.
Intuitivamente, la primera fórmula significa que existe un único objeto que cumple C(x), la segunda
que existe un único objeto que cumple B(x) tal que C(x). ∃! es el cuantificador de existencia única,
69
∃!x
y B(x) su cuantificador tı́pico correspondiente. Una fórmula de existencia única se divide en dos
partes: existencia, es ∃x C(x) lo cual denota que alguien cumple la propiedad C(x); unicidad, es
∀x ∀y ((C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y) lo cual denota que no hay más de un objeto que cumple la propiedad.
Combinando ambas, se tiene que solo un único objeto satisface la propiedad C(x).
I.4 Lema. Si B(x) y C(x) son similares a B(y) y C(y), respectivamente, entonces
" #
∃!x ∃x ∀x ∀y
⊢K C(x) ⇔ C(x) ∧ ((C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y) .
B(x) B(x) B(x) B(y)
Demostración.
∃!x ∃!x
B(x) C(x) ⇔ ∃!x (B(x) ∧ C(x)) Def. de B(x)
⇔ (∃x (B(x) ∧ C(x))) ∧ ∀x ∀y ((B(x) ∧ C(x) ∧ B(y) ∧ C(y)) ⇒ x = y) Def. de ∃!.
∃x
De K.9 es claro que ∃x (B(x) ∧ C(x)) ⇔ B(x) C(x), de modo que resta probar la equivalencia entre
las unicidades.
∀x ∀y ((B(x) ∧ C(x) ∧ B(y) ∧ C(y)) ⇒ x = y)
⇔ ∀x ∀y ((B(x) ∧ B(y) ∧ C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y) tautologı́a
⇔ ∀x ∀y (B(x) ⇒ (B(y) ⇒ ((C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y))) tautologı́a
⇔ ∀x (B(x) ⇒ ∀y (B(y) ⇒ ((C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y))) Ejercicio 2.9
∀x ∀y
Def. de ∀Bx .
⇔ B(x) B(y) ((C(x) ∧ C(y)) ⇒ x = y)
∃!x
Para los ejemplos en Teorı́a de Conjuntos, usamos la notación ∃!x∈U C(x) para x∈U C(x).
(b) ⊢ZF ∃!z∈R ∀x∈R (x + z = x), es decir, el neutro de la suma de números reales es único. Dicho
neutro se conoce como el 0.
(c) ⊢ZF ∀x∈Q [x 6= 0 ⇒ ∃!y∈Q (x · y = 1)], es decir, todo número racional x diferente de 0 tiene un
único inverso multiplicativo, el cual se conoce como x−1 .
La forma de probar los enunciados de los dos ejemplos anteriores en ZF es definir el único
objeto que cumple la propiedad (en el primer caso, 0, en el segundo, x−1 para cada x ∈ Q diferente
de cero). El siguiente resultado es una versión alternativa para expresar la existencia única de un
objeto respecto a una propiedad, dando prioridad a la existencia del objeto.
70
I.5 Lema. Sean B(x) y C(x) similares a B(y) y C(y), respectivamente.
71
(b) Hay dos formas de probar este enunciado, la primera es mediante un razonamiento análogo al
anterior (excepto que se utiliza el Lema I.4 y no la definición 5.6). La segunda, es utilizar el
resultado anterior y proceder mediante equivalencias, como se ilustra a continuación.
∃!x ∃!x
B(x) C(x) ⇔ ∃!x (B(x) ∧ C(x))
Def. de B(x)
⇔ ∃x B(x) ∧ C(x) ∧ ∀y ((B(y) ∧ C(y)) ⇒ x = y) (a)
⇔ ∃x B(x) ∧ C(x) ∧ ∀y (B(y) ⇒ (C(y) ⇔ x = y)) tautologı́a
∃x ∀y
K.9 y def. de ∀Bx .
⇔ B(x) C(x) ∧ B(y) (C(y) ⇒ x = y)
5.8 Ejemplo. En ZF se construye un objeto 0 ∈ R tal que ∀x∈R (x + 0 = x). Para probar
∃!z∈R ∀x∈R (x + 0 = x) basta ver, según el resultado anterior, que
∃z∈R (∀x∈R (x + z = x)) ∧ ∀y∈R ((∀x∈R (x + y = x)) ⇒ z = y) .
El objeto z al que hace referencia el cuantificador ∃z∈R tiene que ser el único número real que es
neutro aditivo de los números reales, el cual es el cero. Por lo tanto, veamos que
La primera fórmula de esta conjunción es cierta por la construcción del 0 en los números reales,
ası́ que solo basta probar la segunda.
1. y∈R Hip.
2. ∀x∈R (x + y = x) Hip.
3. 0∈R construcción del 0
4. 0+y =0 2,3,K.10,(MP)
5. ∀x∈R (x + 0 = x) Propiedad supuesta probada para 0
6. y+0=y 1,5,K.10,(MP)
7. 0=0+y 4,I.1,(MP)
8. 0+y =y+0 conmutatividad de la suma en R
9. 0=y+0 7,8,I.1,(MP)
10. 0=y 9,6,I.1,(MP).
Por el Teorema de la Deducción y la Proposición 4.3 se sigue ∀y∈R ((∀x∈R (x + y = x)) ⇒ 0 = y).
Luego, junto con 5 (el cual no depende de la hipótesis 1) se sigue
72
2.27 Ejercicio. (a) Pruebe I.1(c).
(b) Utilice el Lema I.2 para dar una prueba más directa de (b) y (c) del Lema I.1.
(c) Pruebe ⊢K ∃y (x = y).
(d) Si y es libre para x en B(x), entonces pruebe que ⊢K (B(x) ∧ ¬B(y)) ⇒ x 6= y.
(e) Dados t y s términos, pruebe que ⊢K t = s ⇔ s = t.
2.28 Ejercicio. Sea t un término que no contiene la variable x y que es libre para x en B(x). Demuestre que
∃x
(a) ⊢K x=t B(x) ⇔ B(t).
∀x
(b) ⊢K x=t B(x) ⇔ B(t).
2.29 Ejercicio (Cambio de Variable). Sea t(x) un término (que depende de la variable x) que no contiene la
variable y y que es libre para y en B(y). Sea T (y) la fórmula ∃x (y = t(x)). Pruebe que
(a) ⊢K T∀(y)
y
B(y) ⇔ ∀x B(t(x)).
(b) ⊢K T∃(y)
y
B(y) ⇔ ∃x B(t(x)).
(c) Si t(x) es x, pruebe que los dos resultados anteriores prueban directamente K.4(b).
2.30 Ejercicio (Cambio de Variable para Cuantificadores Acotados). Sea t(x) un término (que depende de la
∃x
variable x) que no contiene la variable y y que es libre para y en B(y). Sea T (y) la fórmula D(x) (y = t(x)).
Demuestre que
(a) ⊢K T∀(y) ∀x
y
B(y) ⇔ D(x) B(t(x)).
(b) ⊢K T∃(y) ∃x
y
B(y) ⇔ D(x) B(t(x)).
2.32 Ejercicio. Sean B(x) y C(x) similares a B(y) y C(y), respectivamente. Demuestre que
(a) ⊢K (∃!x C(x)) ⇔ ∃x ∀y (C(y) ⇔ x = y).
∃!x
∃x
∀y
(b) ⊢K B(x) C(x) ⇔ B(x) B(y)
(C(y) ⇔ x = y).
73
74
Capı́tulo 3
En este capı́tulo definimos la teorı́a ZF como teorı́a de primer orden y exponemos sus aspectos
iniciales que sirven como punto de partida para la formalización de las nociones intuitivas sobre los
conjuntos.
3.1. Definición de ZF
1.1 Definición. Definimos el lenguaje de ZF como LZF := {=, ∈}, es decir, un lenguaje de primer
orden con las letras predicativas = y ∈, sin constantes ni letras funcionales. Una fórmula de ZF es
una fórmula del lenguaje LZF . La Teorı́a de Conjuntos de Zermelo-Fraenkel, denotada por ZF, es
una teorı́a de primer orden en el lenguaje LZF que contiene 2 axiomas propios (Eq1) y (Eq2) para
la igualdad, más los siguientes axiomas propios.
(Z1) Axioma de Extensionalidad. (Z5) Axioma de Partes.
Los esquemas axiomáticos (Z2) y (Z7) son reglas que generan infinitos axiomas propios1 . A
medida que avanzamos el desarrollo del tema, enunciamos cada axioma para explicar su necesidad.
Se define ZFC la teorı́a que resulta de añadir a ZF el Axioma de Elección. ZFC es la teorı́a donde
toma lugar toda la matemática contemporanea.
Como ZF es una teorı́a de primer orden, todos los resultados y métodos de demostración de los
capı́tulos anteriores son válidos. A medida que se avanza en el tema, seremos menos especı́ficos al
aclarar qué métodos de demostración o resultados de la lógica se utilizan en las demostraciones. De
los axiomas (Eq1), (Eq2) y (Z1), probamos en la Proposición 1.4 que los axiomas (A7) y (A8) son
teoremas de ZF, a partir de donde se pueden utilizar los resultados de la sección 2.2.5.
En esta teorı́a, le llamaremos conjunto a un término de ZF. Como ZF no tiene variables ni letras
funcionales, los únicos conjuntos con los que contamos hasta el momento son las variables, pero
más adelante veremos una forma alternativa y usual para definir términos, es decir, conjuntos. Real-
mente no hay una distinción especı́fica de lo que es un conjunto a un elemento, todos los objetos de
la teorı́a (e incluso de la matemática) son conjuntos. Elemento denota la relación entre dos conjun-
tos, es decir, dados dos conjuntos x y y, decimos que x es elemento de y si x ∈ y. La idea intuitiva
de conjunto es una colección de objetos (que también son conjuntos). En la sección 3.2 veremos
que no todas las colecciones de objetos son conjuntos.
76
a teoremas y definiciones de la teorı́a ZF. Como no enunciamos todos sus axiomas desde el comien-
zo, se notará de cuáles axiomas depende cierto teorema.
(a) A ⊆ A. (b) (A ⊆ B ∧ B ⊆ C) ⇒ A ⊆ C.
Demostración. (a)
1. x ∈ A ⇒ x ∈ A tautologı́a
2. ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ A) 1,(GEN)
2. A ⊆ A Def ⊆.
(b)
1. A⊆B∧B ⊆C Hip.
2. A⊆B de 1
3. B⊆C de 1
2. ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ B) Def ⊆
3. ∀x (x ∈ B ⇒ x ∈ C) Def ⊆
4. x∈A⇒x∈B 2,K.1
5. x∈B⇒x∈C 3,K.1
6. x∈A⇒x∈C 4,5,trans.
7. ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ C) 6,(GEN).
7. A⊆B Def ⊆.
Como x no es libre en la hipótesis, por Teorema de la Deducción se sigue el resultado.
El anterior es de los pocos resultados que se siguen del Cálculo de Predicados en el lenguaje
de ZF. La propiedad (A ⊆ B ∧ B ⊆ A) ⇒ A = B no se sigue sin axiomas propios. Por lo tanto,
comenzamos a enunciar los primeros axiomas de ZF, a saber,
77
Los axiomas (Eq1) y (Eq2) denotan la sustitución de objetos iguales en la relación ∈. En el
axioma de Extensionalidad, ∀x (x ∈ A ⇔ x ∈ B) significa que A y B tienen los mismos elementos,
de donde (Z1) significa que dos conjuntos son iguales si tienen los mismos elementos. Lo anteri-
or, aunque es intuitivamente claro, no se puede probar desde (Eq1) y (Eq2) y, por lo tanto, debe
proponerse como axioma.
Justificación. Veamos que los axiomas (A7) y (A8) son teoremas de ZF.
1. x∈A⇔x∈A tautologı́a
2. ∀x (x ∈ A ⇔ x ∈ A) 1,(GEN)
3. A=A 2,(Z1)
4. ∀A (A = A) 3,(GEN).
Por lo tanto, (A7) es Teorema de ZF. Debido a la complejidad de la prueba de (A8), la incluı́mos en
el Apéndice III.
1.5 Teorema. (A ⊆ B ∧ B ⊆ A) ⇔ A = B.
1. A⊆B∧B ⊆A Hip.
1. ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ B) ∧ ∀x (x ∈ B ⇒ x ∈ A) Def. ⊆
2. ∀x ((x ∈ A ⇒ x ∈ B) ∧ (x ∈ B ⇒ x ∈ A)) K.5
2. ∀x (x ∈ A ⇔ x ∈ B) Def. ⇔
3. A=B 2,(Z1).
78
Del Teorema de la Deducción se sigue ⇒ . Veamos el recı́proco.
1. A=B Hip.
2. A⊆A⇔A⊆B 1,I.2
3. A⊆A⇔B ⊆A 1,I.2
4. A⊆A Lema1.3
5. A⊆B de 2
6. B⊆A de 3
7. A⊆B∧B⊆A 5 y 6.
∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ B) ∧ ∀x (x ∈ B ⇒ x ∈ A)
(c) A 6= B ⇔ (∃x∈A (x ∈
/ B)) ∨ ∃x∈B (x ∈
/ A)
(b)
A * B ⇔ ¬∀x∈A (x ∈ B) Def. *
⇔ ∃x∈A (x ∈
/ B) C. Predicados.
Para probar una fórmula del tipo A ⊆ B, según la definición de contención, basta suponer x ∈ A
como hipótesis y concluir x ∈ B, pues el Teorema de la Deducción garantiza que ∀x∈A (x ∈ B). Por
otra parte, para probar una fórmula del tipo A = B basta, según el Teorema 1.5, demostrar A ⊆ B
y B ⊆ A, donde cada una puede justificarse por el método explicado anteriormente. Al probar una
igualdad por este método se dice que es una prueba por doble contención, la cual es muy usual en
matemáticas.
79
1.7 Definición (Contención estricta). A ( B es A ⊆ B ∧ A 6= B. Se lee como A está contenido
estrictamente en B o A es subconjunto propio de B.
(b) A ( B ⇒ B * A. (e) (A ( B ∧ B ⊆ C) ⇒ A ( C.
De manera temporal, vamos a presentar un axioma que indica que existe un conjunto sin ele-
mentos, más adelante demostramos que este hecho se sigue del axioma (Z2).
La fórmula ∀x (x ∈
/ y) significa que y no tiene elementos. Más aún, de (Z0) se sigue que existe
un único conjunto sin elementos, como vemos a continuación.
Demostración. La existencia está dada por (Z0), de modo que probamos la unicidad. Supongamos
∀x (x ∈
/ y) y ∀x (x ∈
/ w) y veamos que y = w. De K.1 se tiene x ∈
/ yyx∈
/ w. Del resultado del
cálculo proposicional ¬B ⊢L B ⇒ C se sigue que x ∈ y ⇒ x ∈ w y x ∈ w ⇒ x ∈ y, de donde
x ∈ y ⇔ x ∈ w. Al generalizar, ∀x (x ∈ y ⇔ x ∈ w), de donde concluı́mos y = w por (Z1).
80
A pesar de que el lenguaje de ZF no tiene constantes ni letras predicativas, ∅ aparece como una
nueva constante de ZF que representa el único conjunto que no tiene elementos. Más adelante, por
definiciones respecto a la existencia única, aparecerán nuevos sı́mbolos en el lenguaje, los cuales no
afectan la identidad de ZF ni la potencia en sus razonamientos2 .
/ ∅).
(a) ∀x (x ∈ (c) Y 6= ∅ ⇔ ∃x (x ∈ Y ).
(b) Y = ∅ ⇔ ∀x (x ∈
/ Y ). (d) ∅ ∈
/ ∅.
El siguiente resultado muestra que el vacı́o es subconjunto de cualquier conjunto y que el único
subconjunto del vacı́o es el mismo vacı́o, es decir, no tiene subconjuntos propios.
(a) ∅ ⊆ X. (d) X 6= ∅ ⇔ ∅ ( X.
(b) ∅ ⊆ ∅.
81
(c)
X = ∅ ⇔ X ⊆ ∅ ∧ ∅ ⊆ X Tma1.5
⇔X ⊆∅ (a),C.Proposicional.
(d)
∅ ( X ⇔ ∅ ⊆ X ∧ X 6= ∅ Def (
⇔ X 6= ∅ (a),C.Proposicional.
3.1 Ejercicio. Utilize solo (Eq1), (E12), (Z1) y el 3.3 Ejercicio. Pruebe ∀A ∃!Y ∀x (x ∈ Y ⇔ x ∈ A).
cálculo de Predicados (no usar resultados de Teorı́as
con igualdad) para demostrar 3.4 Ejercicio. Pruebe 1.12(e).
3.2 Ejercicio. Pruebe 1.6(c), 1.8(c),(e),(f). Sugerencia: Pregúntese primero quién debe ser Y .
En la notación de conjuntos es usual utilizar dos modos de notación, por extensión y por com-
prensión. El primer modo se refiere a denotar un conjunto señalando todos sus elementos, por ejem-
plo
A = {0, 1}, B = { }, C = {a, b, c, d, e, f }.
El segundo modo consiste en definir un conjunto mediante una propiedad, por ejemplo
I = q ∈ Q / q2 < 2 .
P = {n ∈ Z / ∃k∈Z(n = 2k)} ,
82
Para esta sección, fijemos una fórmula arbitraria ϕ(x) donde la variable Y no es libre. Primero
hagamos un análisis intuitivo del significado de {x / ϕ(x)}. Y = {x / ϕ(x)} significa que Y es el
conjunto formado por los objetos que cumplen ϕ(x), es decir,
Y = {x / ϕ(x)} ⇔ ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)).
Recordemos que, para definir ∅, primero probamos que existe un único y tal que ∀x (x ∈
/ y).
Motivados por esto, si probamos que existe un único conjunto Y tal que ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)), ese
objeto tiene que ser {x / ϕ(x)} y, por lo tanto, se define como ese único Y . Al respecto, presentamos
el siguiente resultado.
2.2 Definición (Clasificador de Frege). Si ∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)), del Lema 2.1 tal Y es único, por
lo cual se define {x / ϕ(x)} como ese único Y .
2.3 Definición. Decimos que {x / ϕ(x)} es conjunto si ∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)). Por otra parte,
{x / ϕ(x)} es clase propia significa que no es conjunto, es decir, ¬∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)).
La definición anterior tiene sentido, pues {x / ϕ(x)} es conjunto cuando se puede probar que
existe. El problema de preocuparse cuándo {x / ϕ(x)} es conjunto o no surge a principios de siglo
XX desde la propuesta del matemático Fregue con una teorı́a de conjuntos donde figura el axioma
2.4 Teorema. {x / x ∈
/ x} es clase propia, es decir, ¬∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ x ∈
/ x). Dicha clase propia
se conoce como la clase de Russell
83
Demostración. Supongamos que {x / x ∈
/ x} es conjunto, es decir, ∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ x ∈
/ x). Por
regla C, escojamos R tal que ∀x (x ∈ R ⇔ x ∈
/ x). Al particularizar se sigue R ∈ R ⇔ R ∈
/ R, lo
cual deduce una contradicción.
Por lo tanto, no se puede garantizar que {x / ϕ(x)} siempre es conjunto, como ejemplo ten-
emos la clase de Russell, además de otros que irán surgiendo a lo largo del texto. Ası́, el axioma de
Frege debe ser descartado y debe proponerse otro que permita comprobar que ciertas clases del tipo
{x / ϕ(x)} sean conjuntos.
La intuición del matemático experimentado indica que una colección es clase propia cuando
tiene una cantidad exagerada de elementos que superan los tamaños naturales que puede tomar un
conjunto. Por lo tanto, en el Esquema Axiomático de Comprensión se propone que las colecciones
del tipo {x ∈ A / ϕ(x)} siempre pueden ser conjuntos pues, como están subordinadas a un conjunto
A, no es posible que tenga demasiados elementos para ser clase propia. De forma natural se puede
definir {x ∈ A / ϕ(x)} = {x / x ∈ A ∧ ϕ(x)}, de modo que decir {x ∈ A / ϕ(x)} es conjunto
significa, según la Definición 2.3,
∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ (x ∈ A ∧ ϕ(x))).
(Z2) Esquema axiomático de Comprensión Dada una fórmula ϕ(x) donde Y no es libre,
∀A ∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ (x ∈ A ∧ ϕ(x))).
El nombre de esquema axiomático para (Z2) es porque no es un solo axioma, sino que representa
infinitos axiomas, uno por cada fórmula de ZF. A cada aplicación de (Z2) también se le puede llamar
axioma de Comprensión.
definidos en matemáticas, pues son conjuntos por (Z2). El siguiente es un detalle técnico sobre los
términos del tipo {x / ϕ(x)}.
84
2.6 Proposición. (a) Si {x / ϕ(x)} es conjunto, las variables de este término son las variables
libres de ϕ(x) excepto la variable x.
(b) Las variables del término {x ∈ A / ϕ(x)} son A y las variables libres de ϕ(x) excepto x.
Justificación. (a) Si {x / ϕ(x)} es conjunto, por Definición 2.2 éste es el único Y que satisface
∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)). Las variables libres de esta expresión son Y y las variables libres de
ϕ(x) excepto x, pues aparece ligado por ∀x . Luego, como {x / ϕ(x)} depende de la expresión
anterior, sus variables son las variables libres de la expresión exceptuando Y , pues Y representa
al conjunto {x / ϕ(x)}. Por lo tanto, las variables del conjunto son las mismas de ϕ(x), excepto
xyY.
(b) Como {x ∈ A / ϕ(x)} = {x / x ∈ A ∧ ϕ(x)}, sus variables, por (a), son las variables libres
de x ∈ A ∧ ϕ(x), excepto x, las cuales incluyen A y las variables libres de ϕ(x) (excepto x).
2.7 Lema. Supongamos que {x / ϕ(x)} es un conjunto, y libre para x en ϕ(x) y z una variable tal
que ϕ(x) y ϕ(z) son similares. Entonces
Demostración. (a) Por Definición 2.2, {x / ϕ(x)} es el único Y que satisface ∀x (x ∈ Y ⇔ ϕ(x)).
Por lo tanto,
∀x (x ∈ {x / ϕ(x)} ⇔ ϕ(x)).
85
(b) Por Definición 2.2, {z / ϕ(z)} es el único Y que satisface ∀z (z ∈ Y ⇔ ϕ(z)), por lo cual
∀z (z ∈ {z / ϕ(z)} ⇔ ϕ(z)).
En teorı́a de conjuntos es muy importante saber cuándo una colección {x / ϕ(x)} es conjunto.
El siguiente resultado proporciona la forma estandar de obtener la respuesta.
De la misma forma, hay muchas fórmulas que se escriben en términos de {x / ϕ(x)} sin saber que
éste es conjunto y, sin embargo, se pueden representar con fórmulas de ZF (ver el Ejercicio 3.8).
ϕ(x) ⇔ x ∈ C ∧ ϕ(x).
3
Para que esta generalización sea permitida, se debe tomar y de modo que no sea libre en ϕ(x).
86
⇐ es claro. Para ⇒ , supongamos ϕ(x). Luego, por hipótesis, x ∈ C, de donde x ∈ C ∧ ϕ(x).
De la equivalencia y el Lema 2.7 se sigue ϕ(x) ⇔ x ∈ {x ∈ C / ϕ(x)}, de donde
∀x (x ∈ {x ∈ C / ϕ(x)} ⇔ ϕ(x)).
Como primera aplicación de este Lema, veremos que la colección a la cual le pertenecen todos
los conjuntos no se puede definir en ZF, es decir, no existe el conjunto de todos los conjuntos.
Como resultado final, veamos que el axioma del Vacı́o (Z0) no se necesita colocar en la lista de
axiomas de ZF ya que puede deducirse de (Z2). Nótese que ningún resultado previo en esta sección
depende de (Z0).
∀A ∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ (x ∈ A ∧ x 6= x)).
∀x (x ∈ O ⇔ (x ∈ A ∧ x 6= x)).
87
2.11 Ejemplo. (a) La colección {x / x 6= x} es un conjunto. Intuitivamente, se concluye fácil-
mente que es ∅, pues ningún objeto cumple la propiedad x 6= x. Veamos dos formas de de-
mostrar lo anterior en ZF.
∃Y ∀x (x ∈ Y ⇔ x 6= x).
∀x (x ∈ ∅ ⇔ x 6= x).
Con el Lema del subconjunto. Veamos que {x / x 6= x} está contenido en algún conjunto. La
intuición indica que dicho conjunto es ∅, por lo cual se debe probar {x / x 6= x} ⊆ ∅. En
efecto, como x 6= x es falsa, entonces x 6= x ⇒ x ∈ ∅ de donde, al generalizar, se sigue
{x / x 6= x} ⊆ ∅. Luego, ∃Y ({x / x 6= x} ⊆ Y ) de donde se concluye que {x / x 6= x}
es un conjunto por el Lema 2.8.
Ahora, para probar que {x / x 6= x} = ∅ basta notar que, del párrafo anterior, se sigue
{x / x 6= x} ⊆ ∅, de donde {x / x 6= x} = ∅ por 1.12(c).
(b) La colección {x / x = x} es una clase propia. Intuitivamente, todos los conjuntos pertenecen
a dicha colección (pues todos los objetos cumplen x = x) la cual no puede ser conjunto por el
Teorema 2.9.
Si {x / x = x} fuese un conjunto, es claro que ∀x (x ∈ {x / x = x}) de donde ∃Y ∀x (x ∈ Y )
lo que contradice el Teorema 2.9.
88
2.12 Definición (Intersección, Diferencia.). Dados A y B conjuntos, definimos
A ∩ B = {x ∈ A / x ∈ B} = {x / x ∈ A ∧ x ∈ B} Intersección entre A y B.
A r B = {x ∈ A / x ∈
/ B} = {x / x ∈ A ∧ x ∈
/ B} Diferencia entre A y B.
A ∪ B = {x / x ∈ A ∨ x ∈ B}
{a, b} = {x / x = a ∨ x = b}
P(A) = {x / x ⊆ A} .
El problema es que desde (Z1) y (Z2) no se puede probar que estas colecciones son conjuntos. Más
aún, con estos axiomas no se puede demostrar que existen conjuntos diferentes del vacı́o. En vista de
esta limitación, es necesario agregar más axiomas a la teorı́a para poder probar que las colecciones
anteriores (y muchas otras) son conjuntos.
89
3.3. Operaciones iniciales entre conjuntos
El axioma (Z4’) será sustituı́do, en la sección 3.4, por (Z4), el cual permite realizar infinitas
uniones. Estos axiomas se proponen con el fin de definir los siguientes conjuntos.
(e) x ∈ A ∩ B ⇔ (x ∈ A ∧ x ∈ B).
(f) x ∈ A r B ⇔ (x ∈ A ∧ x ∈
/ B).
90
(c) De (Z4’) ∃y ∀x ((x ∈ A ∨ x ∈ B) ⇒ x ∈ Y ), lo cual se traduce en ∃Y (A ∪ B ⊆ Y ). Luego, por
el Lema del subconjunto, A ∪ B es conjunto.
y como {a1 , . . . , an } ∪ {an+1 } es conjunto (la unión de dos conjuntos), entonces {a1 , . . . , an+1 }
es conjunto.
(a) x ∈ {a1 , . . . , an } ⇔ (x = a1 ∨ . . . ∨ x = an ).
(b) ai ∈ {a1 , . . . , an }.
6 ∅.
(c) {a1 , . . . , an } =
91
6 ∅ por el
(c) Como a1 ∈ {a1 , . . . , an } entonces ∃x (x ∈ {a1 , . . . , an }), de donde {a1 , . . . , an } =
Teorema 1.11.
El siguiente Teorema identifica las propiedades más usuales que cumplen las operaciones de
unión, intersección y diferencia de conjuntos. En sus demostraciones podemos identificar la sigu-
ientes técnicas, las cuales se aplican constantemente en pruebas matemáticas.
Prueba por equivalencias para la igualdad de conjuntos. Si se desea probar que dos conjuntos
A y B son iguales, basta verificar x ∈ A ⇔ x ∈ B pues, al generalizar, de (Z1) se sigue la
igualdad.
Prueba de que un conjunto es vacı́o. Para ver que un conjunto A es vacı́o, basta probar x ∈
/ A
(ya sea directamente o por reducción al absurdo), pues de la generalización y el Teorema 1.11
se sigue A = ∅.
(b) A ∩ A = A.
(j) A ∪ (B ∪ C) = (A ∪ B) ∪ C.
Leyes con vacı́o.
(k) A ∩ (B ∩ C) = (A ∩ B) ∩ C.
(c) A ∪ ∅ = A.
Leyes distributivas.
(d) A ∩ ∅ = ∅.
(l) A ∩ (B ∪ C) = (A ∩ B) ∪ (A ∩ C).
(e) A r ∅ = A.
(m) A ∪ (B ∩ C) = (A ∪ B) ∩ (A ∪ C).
(f) ∅ r A = ∅.
Leyes D’Morgan.
(g) A r A = ∅.
Demostración. (a)
x ∈ A ∪ A ⇔ x ∈ A ∨ x ∈ A Def ∪
⇔x∈A
92
Por lo tanto, ∀x (x ∈ A ∪ A ⇔ x ∈ A) y, por (Z1), se sigue A ∪ A = A.
(f) x ∈ ∅ r A ⇔ (x ∈ ∅ ∧ x ∈
/ A). Como x ∈ ∅ es falso, la fórmula de la derecha de la
equivalencia es falsa, por lo cual x ∈ ∅ r A es falso, es decir, x ∈
/ ∅ r A es cierto. Luego,
/ ∅ r A) de donde, por el Teorema 1.11, ∅ r A = ∅.
∀x (x ∈
(h)
x ∈ A ∪ B ⇔ x ∈ A ∨ x ∈ B Def ∪
⇔x∈B∨x∈A
⇔x∈B∪A Def ∪.
Luego, ∀x (x ∈ A ∪ B ⇔ x ∈ B ∪ A), de donde A ∪ B = B ∪ A por (Z1).
(k)
x ∈ A ∩ (B ∩ C) ⇔ x ∈ A ∧ x ∈ B ∩ C Def ∩
⇔ x ∈ A ∧ (x ∈ B ∧ x ∈ C) Def ∩
⇔ (x ∈ A ∧ x ∈ B) ∧ x ∈ C
⇔x∈A∩B ∧x∈C Def ∩
⇔ x ∈ (A ∩ B) ∩ C Def ∩.
Luego, al generalizar la equivalencia resultante, por (Z1) se sigue la igualdad buscada.
(l)
x ∈ A ∩ (B ∪ C) ⇔ x ∈ A ∧ x ∈ (B ∪ C) Def ∩
⇔ x ∈ A ∧ (x ∈ B ∨ x ∈ C) Def ∪
⇔ (x ∈ A ∧ x ∈ B) ∨ (x ∈ A ∧ x ∈ C)
⇔x∈ A∩B ∨x∈ A∩C Def ∩
⇔ x ∈ (A ∩ B) ∪ (A ∩ C) Def ∪.
Luego, al generalizar la equivalencia resultante, por (Z1) se sigue la igualdad buscada.
(o)
x ∈ A r (B ∩ C) ⇔ x ∈ A ∧ x ∈
/ (B ∩ C) Def r
⇔ x ∈ A ∧ ¬(x ∈ B ∩ C)
⇔ x ∈ A ∧ ¬(x ∈ B ∧ x ∈ C) Def ∩
⇔ x ∈ A ∧ (x ∈
/ B∨x∈ / C)
⇔ (x ∈ A ∧ x ∈
/ B) ∨ (x ∈ A ∧ x ∈
/ C)
⇔x∈ArB ∨x ∈ArC Def r
⇔ x ∈ (A r B) ∪ (A r C) Def ∪.
Al generalizar la equivalencia resultante, por (Z1) se sigue la igualdad buscada.
93
En relación con la contención, se siguen las siguientes propiedades. Recordemos que para probar
una fórmula del tipo A ⊆ B, basta suponer x ∈ A como hipótesis y concluir x ∈ B.
(a) A ⊆ A ∪ B. (h) A ⊆ B ⇒ A r C ⊆ B r C.
(b) B ⊆ A ∪ B. (i) A ⊆ B ⇒ C r B ⊆ C r A.
(c) A ∩ B ⊆ A.
(j) A ⊆ B ⇔ A ∪ B = B.
(d) A ∩ B ⊆ B.
(k) A ⊆ B ⇔ A ∩ B = A.
(e) A r B ⊆ A.
(f) A ⊆ B ⇒ A ∪ C ⊆ B ∪ C. (l) (A ⊆ C ∧ B ⊆ C) ⇔ A ∪ B ⊆ C.
(g) A ⊆ B ⇒ A ∩ C ⊆ B ∩ C. (m) (C ⊆ A ∧ C ⊆ B) ⇔ C ⊆ A ∩ B.
94
claro que x ∈ A ⇒ x ∈ C y, como B ⊆ C, se sigue x ∈ B ⇒ x ∈ C. Por disyunción de
casos se obtiene x ∈ C.
Prueba #2. Supongamos A ⊆ C y B ⊆ C. De (f) se tiene A ∪ B ⊆ C ∪ B y, como B ⊆ C
entonces C ∪ B = C por (j). Por lo tanto, A ∪ B ⊆ C.
A⊆C ∧ B ⊆ C ⇔ ∀x (x ∈ A ⇒ x ∈ C) ∧ ∀x (x ∈ B ⇒ x ∈ C) Def ⊆
⇔ ∀x ((x ∈ A ⇒ x ∈ C) ∧ (x ∈ B ⇒ x ∈ C)) C.Predicados
⇔ ∀x ((x ∈ A ∨ x ∈ B) ⇒ x ∈ C) C.Proposicional
⇔ ∀x (x ∈ A ∪ B ⇒ x ∈ C) Def ∪
⇔A∪B ⊆C Def ⊆.
La siguiente definición indica una notación muy común en matemáticas cuando se trabaja en un
conjunto fijo U .
(2) Respecto a R, (0, 1)′ = (−∞, 0] ∪ [1, ∞), Q′ = Q∗ (el conjunto de irracionales) y, con A como
en el ejemplo anterior, A′ = (−∞, 0) ∪ ([0, ∞) r Z).
Note que la definición de A′ depende del conjunto de referencia.
(a) U ′ = ∅. (e) A ∪ A′ = U .
(d) A ∩ A′ = ∅. (h) A ⊆ B ⇔ B ′ ⊆ A′ .
Demostración. (a) U ′ = U r U = ∅.
(b) ∅′ = U r ∅ = U .
95
(c) A′ = U − A ⊆ U y (A′ )′ = U r A′ = U r (U r A). Luego,
x ∈ (A′ )′ ⇔ x ∈ U r (U r A)
⇔x∈U ∧x∈ / (U r A) Def r
⇔ x ∈ U ∧ (x ∈
/ U ∨ x ∈ A) Ejercicio 3.16
⇔ (x ∈ U ∧ x ∈
/ U ) ∨ (x ∈ U ∧ x ∈ A)
⇔x∈U ∧x∈A Eliminación de falsa en ∨
⇔x ∈U ∩A Def ∩.
(A ∪ B)′ = U − (A ∪ B) = (U − A) ∩ (U − B) = A′ ∩ B ′ .
Según la Definición 3.1, P(A) (partes de A) es la colección donde pertenecen todos los subcon-
juntos de A. En el siguiente ejemplo ilustramos el método para identificar los elementos de P(A)
cuando A es finito.
3.11 Ejemplo. (0) Del Teorema 1.12 X ⊆ ∅ ⇔ X = ∅. Luego, P(∅) = {∅}, pues
P(∅) = {X / X ⊆ ∅} = {X / X = ∅} = {∅}.
(1) Los únicos subconjuntos de {a} son ∅ y {a}, por lo cual P({a}) = {∅, {a}}.
(2) Hallemos los subconjuntos de {a, b}: ∅ es su subconjuntos con 0 elementos, {a}, {b} son sus
subconjuntos de un elementos y {a, b} es su subconjunto de 2 elementos. Por lo tanto,
(3) Hallemos los subconjuntos de {a, b, c}: ∅ es su subconjuntos con 0 elementos, {a}, {b}, {c}
son sus subconjuntos de un elementos, {a, b}, {a, c}, {b, c} son sus subconjuntos de 2 elementos
y {a, b, c} es su subconjunto de 3 elementos. Por lo tanto,
P({a, b, c}) = {∅, {a}, {b}, {c}, {a, b}, {a, c}, {b, c}, {a, b, c}}.
96
En general, si un conjunto tiene n elementos, los elementos de su conjunto de partes se hallan
considerando sus subconjuntos de 0 elementos, los de 1 elemento, 2 elementos y ası́ sucesivamente
hasta los de n elementos. Al observar la cantidad de elementos de las partes, se puede conjeturar
que, si A tiene n elementos, entonces P(A) tiene 2n elementos, lo cual se puede demostrar6 en ZF.
(b) A ∈ P(A).
(f) P(A ∩ B) = P(A) ∩ P(B).
(c) P(A) 6= ∅.
(e)
A=B ⇔A⊆B∧B ⊆A Tma1.5
⇔ P(A) ⊆ P(B) ∧ P(B) ⊆ P(A) (d)
⇔ P(A) = P(B) Tma1.5
3.13 Ejemplo. La contención recı́proca de (h) del Teorema 3.12 no es cierta en general. Considere
A = {a} y B = {b} con a 6= b. Luego P(A) = {∅, {a}}, P(B) = {∅, {b}}, por lo cual
97
Por otra parte,
P(A ∪ B) = P({a, b}) = {∅, {a}, {b}, {a, b}}.
/ P(A) ⇔ X * A.
(e) X ∈ (e) A △ B = B △ A.
/ B) ⇔ A ∩ B = ∅.
(f) ∀x∈A (x ∈ (f) x ∈ A △ B ⇔ (x ∈ A ⇔ x ∈
/ B).
(g) A △ (B △ C) = (A △ B) △ C.
3.17 Ejercicio. Pruebe los siguientes enunciados.
(h) A ∩ (B △ C) = (A ∩ B) △ (A ∩ C).
(a) Los incisos (b), (d), (e), (g), (i), (j), (m) y (n) del
Teorema 3.6. (i) A ∪ B = (A △ B) △ (A ∩ B).
98
(a) Si a ∈
/ C y C ⊆ N ∪ {a} entonces C ⊆ N . (i) A ⊆ B ∨ A = B ∨ B ⊆ A.
(b) Si a ∈ D y D ⊆ N ∪{a} entonces Dr{a} ⊆ N . (ii) {∅} ⊆ A.
(c) Si a ∈ D y D ( N ∪{a} entonces Dr{a} ( N . (iii) ∅ ⊆ P(A).
3.22 Ejercicio. Indique, por extensión, los siguientes (iv) {∅} ⊆ P(A).
conjuntos.
(v) ∅ ∈ A.
(a) P(P({a, b})).
(vi) ∅ ∈ P(A).
(b) P(P(P(∅))).
(vii) {{∅}} ⊆ P(∅).
3.23 Ejercicio. Pruebe los siguientes enunciados.
(viii) (A r B) ∩ (B r A) = ∅.
(a) El inciso (f) del Teorema 3.12.
(ix) C r (A r B) = (C r A) r B.
(b) X ⊆ {a} ⇔ (X = ∅ ∨ X = {a}).
(c) P(A − B) = {X ⊆ A / X ∩ B = ∅}. 3.25 Ejercicio. Dado un conjunto A, demuestre que
3.24 Ejercicio. Indique si las siguientes afirmaciones (c) P(A) * A. Sugerencia: Considere el conjunto
son ciertas en general o no. Justifique su respuesta. y = {x ∈ A / x ∈
/ x}.
El axioma (Z4’) garantiza la posibilidad de realizar finitas uniones de conjuntos. Sin embargo,
en matemáticas surge la necesidad de efectuar uniones entre infinitos conjuntos y, con los axiomas
que contamos hasta el momento, no es posible realizarlas. También surge la necesidad de realizar
intersecciones entre infinitos conjuntos, pero ésto puede garantizarse sólo con (Z1) y (Z2).
Por consiguiente, desarrollamos esta sección para generalizar (Z4’) y definir las uniones e in-
tersecciones arbitrarias, además de probar sus propiedades iniciales. Veamos primero, de forma
intuitiva, cómo obtener dichas definiciones.
z ∈ B 1 ∪ . . . ∪ Bn ⇔ z ∈ B1 ∨ . . . ∨ z ∈ Bn
z ∈ B 1 ∩ . . . ∩ Bn ⇔ z ∈ B1 ∧ . . . ∧ z ∈ Bn .
99
dicho de otro modo, existe un x ∈ A (el cual es Bk ) tal que z ∈ x. Por lo tanto,
[
z∈ A ⇔ ∃x∈A (z ∈ x).
T
Por otra parte, z ∈ A si y solo si z ∈ B1 ∩ . . . ∩ Bn , lo cual dice que z está en todos los Bk , es
decir, que z pertenece a todos los elementos de A. Por lo tanto,
\
z∈ A ⇔ ∀x∈A (z ∈ x).
El ejemplo anterior, aunque indicado para finitas uniones, introduce una notación que se puede
aplicar en un caso general. Si A es un conjunto arbitrario, denotamos por
S
T A : la unión entre los elementos de A
A : la intersección entre los elementos de A.
S T
Ası́, cuando A tiene infinitos elementos, entonces A es una unión de infinitos objetos y A es
S
una intersección de infinitos objetos. Ahora, z ∈ A significa que z pertenece a la unión entre los
elementos de A, es decir, z pertenece a algún elemento de A. Por lo tanto,
[
z∈ A ⇔ ∃x∈A (z ∈ x).
T
Por otra parte, z ∈ A significa que z pertenece a la intersección entre los elementos de A, es decir,
z es elemento de todos los objetos que forman la intersección. Como estos objetos son precisamente
los elementos de A, se concluye
\
z∈ A ⇔ ∀x∈A (z ∈ x).
Independiente de la forma del conjunto A, se obtienen las mismas fórmulas del ejemplo anterior
para expresar la unión e intersección entre los elementos de A.
100
Demostración. (a) Supongamos que A 6= ∅, por lo cual ∃x (x ∈ A). Por regla C, escojamos x0
T
tal que x0 ∈ A. Veamos que A ⊆ x0 , es decir, ∀z ((∀x∈A (z ∈ x)) ⇒ z ∈ x0 ). En efecto, si
∀x∈A (z ∈ x) entonces, como x0 ∈ A, se sigue z ∈ x0 .
T T T
Luego, como A ⊆ x0 , se tiene ∃Y ( A ⊆ Y ), de donde, por el Lema del subconjunto, A
es un conjunto.
Como la definición de unión generalizada es una extensión de la definición de unión, para poder
garantizar que la aplicación de uniones generalizadas genera conjuntos debemos extender el axioma
(Z4’). El verdadero axioma de Unión para ZF tiene la siguiente presentación.
S
4.4 Lema. Dado A conjunto, A es conjunto.
∀x∈A ∀z∈x (z ∈ Y ) ⇔ ∀x (x ∈ A ⇒ ∀z (z ∈ x ⇒ z ∈ Y ))
⇔ ∀x ∀z (x ∈ A ⇒ (z ∈ x ⇒ z ∈ Y ))
⇔ ∀z ∀x ((x ∈ A ∧ z ∈ x) ⇒ z ∈ Y )
⇔ ∀z ((∃x (x ∈ A ∧ z ∈ x)) ⇒ z ∈ Y ) Ejercicio 2.9
⇔ ∀Sz ((∃x∈A (z ∈ x)) ⇒ z ∈ Y )
⇔ A⊆Y
S
Por lo tanto, (Z4) (sin ∀A ) equivale a ∃Y ( A ⊆ Y ), de donde, por el Lema del subconjunto (2.8),
S
A es conjunto.
El siguiente resultado justifica que podemos reemplazar (Z4’) por (Z4), de modo que todos los
resultados probados con (Z4’) siguen siendo válidos en ZF.
101
S
Demostración. Intuitivamente, {A, B} representa la unión entre A y B. Probemos que efectiva-
mente es ası́.
S S
z∈ {A, B} ⇔ ∃x∈{A,B} (z ∈ x) Def
⇔ ∃x (x ∈ {A, B} ∧ z ∈ x)
⇔ ∃x ((x = A ∨ x = B) ∧ z ∈ x) Def {A, B}
⇔ ∃x ((x = A ∧ z ∈ x) ∨ (x = B ∨ z ∈ x))
⇔ ∃x (x = A ∧ z ∈ x) ∨ ∃x (x = B ∨ z ∈ x)
∃x ∃x
⇔ x=A (z ∈ x) ∨ x=B (z ∈ x)
⇔z∈A∨z∈B Ejercicio 2.28.
S S
En particular, se tiene ∀z ((z ∈ A ∨ z ∈ B) ⇒ z ∈ {A, B}). Como (Z4) implica que {A, B}
es conjunto, entonces ∃Y ∀z ((z ∈ A ∨ z ∈ B) ⇒ z ∈ Y ), lo cual afirma (Z4’). Más allá de esta
S
conclusión, la serie de equivalencias anterior permite concluir ∀z (z ∈ {A, B} ⇔ z ∈ A ∪ B), de
S
donde {A, B} = A ∪ B.
∅ = ∅.
S
4.6 Teorema. (a)
S
(b) {A1 , . . . , An } = A1 ∪ . . . ∪ An .
T
(c) {A1 , . . . , An } = A1 ∩ . . . ∩ An .
Teorema 1.11.
(c)
T T
z∈ {A1 , . . . , An } ⇔ ∀x∈{A1 ,...,An } (z ∈ x) Def
⇔ ∀x (x ∈ {A1 , . . . , An } ⇒ z ∈ x)
⇔ ∀x ((x = A1 ∨ . . . ∨ x = An ) ⇒ z ∈ x) Def {· · · }
⇔ ∀x ((x = A1 ⇒ z ∈ x) ∧ . . . ∧ (x = An ⇒ z ∈ x)) Tautologı́a
⇔ ∀x (x = A1 ⇒ z ∈ x) ∧ . . . ∧ ∀(x = An ⇒ z ∈ x)
∀x ∀x
⇔ x=A 1
(z ∈ x) ∧ . . . ∧ x=A n
(z ∈ x)
⇔ z ∈ A1 ∧ . . . ∧ z ∈ An Ejercicio 2.28
⇔ z ∈ A1 ∩ . . . ∩ An Def ∩.
Por (Z1) se sigue la igualdad de ambos conjuntos.
102
4.7 Ejemplo. En la sección 3.5 explicamos la nueva notación y probamos los detalles de estos
ejemplos.
(1) Realizemos la unión entre los intervalos de la forma (n, n + 1) para n ∈ Z. Al formar A =
{(n, n + 1) / n ∈ Z}, como A es la unión entre elementos de A, obtenemos A como la
S S
S
unión de dichos intervalos. Se usa también la notación (n, n + 1) para representar dicha
n∈Z
unión, además que es igual a R r Z.
(2) Realicemos la intersección entre los intervalos de la forma [0, n1 ] para n ∈ Z+ . Para ésto,
formamos la colección A = [0, n1 ] / n ∈ Z y A representa la intersección de dichos inter-
T
(3) Realizemos la intersección entre los intervalos de la forma [x, +∞) para x ∈ R. En efecto,
formamos A = {[x, +∞) / x ∈ R}, donde A representa la intersección buscada. Ésta inter-
T
S S
4.8 Teorema. (a) x ∈ A ⇒ x ⊆ A. (e) A ⊆ P( A).
T S
(b) x ∈ A ⇒ A ⊆ x. (f) P(A) = A.
S S S
(c) ∀x∈A (x ⊆ B) ⇔ A ⊆ B. (g) A ⊆ B ⇒ A⊆ B.
T T T
(d) ∀x∈A (B ⊆ x) ⇔ B ⊆ A. (h) A ⊆ B ⇒ B⊆ A.
S
Demostración. (a) Supongamos x ∈ A y veamos que x ⊆ A. En efecto, si z ∈ x, entonces
S
x ∈ A ∧ z ∈ x, de donde ∃x∈A (z ∈ x), es decir, z ∈ A.
T T
(d) Supongamos ∀x∈A (B ⊆ x) y veamos que B ⊆ A. Si z ∈ B debemos probar z ∈ A, es
decir, ∀x∈A(z ∈ x). En efecto, supongamos x ∈ A. De la primera hipótesis se sigue B ⊆ x y,
como z ∈ B, entonces z ∈ x.
T T
Para el recı́proco, supongamos B ⊆ A. Si x ∈ A por (b) se sigue A ⊆ x. Luego, por
hipótesis y transitividad de ⊆, B ⊆ x.
Otra forma de probar la equivalencia es la siguiente:
∀x∈A(B ⊆ x) ⇔ ∀x∈A ∀z∈B (z ∈ x) Def ⊆
⇔ ∀z∈B ∀x∈AT(z ∈ x) T
⇔ ∀z∈B (z
T ∈ A) Def
⇔B ⊆ A Def ⊆.
103
S
(f) Veamos cada contención por separado. Es claro que ∀y∈P(A) (y ⊆ A), de donde P(A) ⊆ A
por (c). Para la otra contención, si x ∈ A, entonces {x} ⊆ A, por lo cual {x} ∈ P(A). Luego,
S
{x} ∈ P(A) ∧ x ∈ {x}, de donde ∃y∈P(A) (x ∈ y), es decir, x ∈ P(A).
T T
(h) Supongamos A ⊆ B. Si x ∈ A entonces x ∈ B y, por (b), B ⊆ x. Ası́, ∀x∈A( B ⊆ x), de
T T
donde B ⊆ A por (d).
La unión generalizada permite probar que ciertas colecciones de objetos no son conjuntos. Con-
cluı́mos la sección con el siguiente ejemplo de dicho tipo de prueba.
4.9 Corolario. ¬∃Y ∀x ({x} ∈ Y ). No existe el conjunto donde pertenecen todos los singuletes.
Demostración. Supongamos que ∃Y ∀x ({x} ∈ Y ). Por regla C, escojamos S tal que ∀x ({x} ∈ S).
S S
Luego, {x} ∈ S y, por Teorema 4.8, {x} ⊆ S y, como x ∈ {x}, concluı́mos x ∈ S. Por lo
S
tanto, ∀x (x ∈ S), de donde ∃Y ∀x (x ∈ Y ), lo cual contradice el Teorema 2.9.
La idea de la prueba es notar que, si S es un conjunto donde pertenecen todos los singuletes, en-
S
tonces S es el universo.
(A r {∅}).
S S
3.26 Ejercicio. Pruebe que (b) A=
S
(a) z ∈
/ A ⇔ ∀x∈A (z ∈ / x). (c) Si ∅ ∈ A entonces A = ∅.
T
T
(b) z ∈
/ A ⇔ ∃x∈A (z ∈ / x). 3.31 Ejercicio. Pruebe que no existe el conjun-
3.27 Ejercicio. (a) Pruebe (b) del Teorema 4.6. to donde pertenecen todos los dobletes, es decir,
¬∃Y ∀x,y ({x, y} ∈ Y ).
(b) Pruebe (b), (c), (e), (g) del Teorema 4.8.
3.32 Ejercicio. Sea ϕ(x) una fórmula de ZF. Sin im-
3.28 Ejercicio. Demuestre los siguientes enuncia-
portar si {x / ϕ(x)} es conjunto, responda los sigu-
dos.
S S S ientes enunciados.
(a) (A ∪ B) = A ∪ B
T T T (a) Indique una fórmula de ZF que represente la afir-
(b) (A ∪ B) = A ∩ B mación {x / ϕ(x)} = ∅.
S S
(c) B ∪ A = (A ∪ {B})
S
(b) T
Defina las colecciones {x / ϕ(x)} y
T T
(d) B ∩ A = (A ∪ {B}) {x / ϕ(x)}.
Pruebe que {x / ϕ(x)} es conjunto si y solo si
3.29 Ejercicio. Indique si las siguientes afirmaciones (c) S
son ciertas en general o no. Justifique su respuesta. {x / ϕ(x)} es conjunto.
(d) Si {x / ϕ(x)} 6= ∅, pruebe que {x / ϕ(x)} es
S S T
(i) A = B ⇒ A = B.
conjunto.
(ii) (A r A) es conjunto.
S
S Si {x / ϕ(x)} es clase propia, pruebe que
(e) T
(iii) x ∈ B ⇒ P(x) ∈ P(P( B)). {x / ϕ(x)} es conjunto.
3.30 Ejercicio. Pruebe los siguientes enunciados. (f) Si denotamos V = {x /Tx = x}
T(el universo) y
(a) Si ∃x,y∈A (x ∩ y = ∅) entonces A = ∅.
T R = {x / x ∈
/ x}, halle V y R.
104
3.5. Conjuntos definidos mediante operaciones
Nos servimos del siguiente ejemplo para introducir la notación de conjuntos definidos por op-
eraciones.
5.1 Ejemplo. (a) Es común usar {2n / n ∈ Z} para denotar el conjunto de enteros pares. Luego,
y ∈ {2n / n ∈ Z} si y solo si y = 2n para algún n ∈ Z. Por lo tanto,
y ∈ x2 / x ∈ Q ⇔ ∃x∈Q (y = x2 ).
En general, si A es un conjunto y t(x) un término (que depende de la variable x), los ejemplos
anteriores hacen referencia a colecciones del tipo {t(x) / x ∈ A}. Ésta representa la colección de
objetos de la forma t(x) con x ∈ A. De la misma forma, se intuye que y ∈ {t(x) / x ∈ A} si y solo
si y = t(x) para algún x ∈ A, de donde nos basamos para dar la siguiente noción.
5.2 Definición. Sea A un conjunto, t(x) un término y y una variable que no figura en t(x). Defini-
mos {t(x) / x ∈ A} = {y / ∃x∈A (y = t(x))}. Por lo tanto, se cumple
Según el Lema 2.7, las variables libres de {t(x) / x ∈ A} son A y las variables de t(x) excepto x.
Según la notación, queda la pregunta de si {t(x) / x ∈ A} siempre es conjunto. Con los ax-
iomas (Z1)-(Z5) no se puede dar una prueba general de este hecho, aunque en la mayorı́a de los
casos en matemáticas se logra dar una prueba sencilla, según el caso.
Sin importar que {t(x) / x ∈ A} sea conjunto o no, podemos establecer los siguientes resulta-
dos. Para lo que resta de esta sección, fijamos t(x) un término donde no aparecen las variables y ni
Y y denotamos por T = {t(x) / x ∈ A}.
5.3 Teorema (Cambio de variable). Sea ϕ(y) una fórmula de ZF donde x no es libre. Entonces:
105
(b) ∃y∈T ϕ(y) ⇔ ∃x∈A ϕ(t(x)).
Demostración. (a)
∀y∈T ϕ(y) ⇔ ∀y (y ∈ T ⇒ ϕ(y))
⇔ ∀y ((∃x∈A (y = t(x))) ⇒ ϕ(y)) notación
⇔ ∀y ∀x∈A (y = t(x) ⇒ ϕ(y)) Ejercicio 2.24
⇔ ∀x∈A ∀y (y = t(x) ⇒ ϕ(y)) Ejercicio 2.26
∀y
⇔ ∀x∈A y=t(x) ϕ(y)
⇔ ∀x∈A ϕ(t(x)) Ejercicio 2.28.
(b)
{t(x) / x ∈ A} ⊆ B ⇔ T ⊆ B Notación
⇔ ∀y∈T (y ∈ B)
⇔ ∀x∈A (t(x) ∈ B) Cambio de variable (5.3).
Del Lema 5.4 formulamos el siguiente criterio para saber cuándo {t(x) / x ∈ A} es conjunto.
5.6 Ejemplo. (1) Como ∀n∈Z (2n ∈ Z) entonces, por el Lema 5.5, {2n / n ∈ Z} es conjunto.
(a) Dado n ∈ Z es claro que (n, n + 1) ⊆ R. Por lo tanto, ∀n∈Z ((n, n + 1) ∈ P(R)), de donde
{(n, n + 1) / n ∈ Z} es conjunto por 5.5.
(b) Es claro que ∀n∈Z+ ([0, n1 ] ∈ P(R)). Por 5.5 se sigue que [0, n1 ] / n ∈ Z+ es conjunto.
(c) ∀x∈R ([x, +∞) ∈ P(R)), por lo cual {[x, +∞) / x ∈ R} es conjunto.
106
(a) {A ∪ x / x ∈ B}. (d) {A r x / x ∈ B}.
(b) {A ∩ x / x ∈ B}.
S S
Demostración. (a) Dado x ∈ B se sigue x ⊆ B por el Teorema 4.8, de donde A∪x ⊆ A∪ B,
S S
es decir, A ∪ x ∈ P(A ∪ B). Por lo tanto, ∀x∈B (A ∪ x ⇒ P(A ∪ B)), de donde, por Lema
5.5, {A ∪ x / x ∈ B} es conjunto.
S S
(e) Si x ∈ B entonces, por Teorema 4.8, x ⊆ B. Luego, del Teorema 3.12, P(x) ⊆ P( B),
S S
es decir, P(x) ∈ P(P( B)). Por lo tanto, ∀x∈B (P(x) ∈ P(P( B))), de donde se sigue el
resultado por el Lema 5.5.
S
Es claro que, si {t(x) / x ∈ A} es conjunto, entonces t(x) también es conjunto. Por otra
T x∈A
parte, si A 6= 0, por el Ejercicio 3.35 t(x) es conjunto (incluso cuando {t(x) / x ∈ A} es clase
x∈A
propia, ver el Ejercicio 3.32). El siguiente resultado permite ver qué cumplen los elementos de
dichas uniones e intersecciones.
5.10 Lema. 8
S S S
(a) z ∈ t(x) ⇔ ∃x∈A (z ∈ t(x)). (c) A= x.
x∈A x∈A
T T T
(b) z ∈ t(x) ⇔ ∀x∈A (z ∈ t(x)). (d) A= x.
x∈A x∈A
7
Según el Ejercicio 3.32, no es necesario que {t(x) / x ∈ A} sea conjunto para definir dichas colecciones
8
Resultado válido aún cuando {t(x) / x ∈ A} no es conjunto. Ver Ejercicio 3.32.
107
Demostración. (a)
S S
z∈ t(x) ⇔ z ∈ {t(x) / x ∈ A} notación
x∈A S
⇔z∈ T notación
S
⇔ ∃y∈T (z ∈ y) Def
⇔ ∃x∈A (z ∈ t(x)) Cambio de variable (5.3).
S S S
(c) Como A = {x / x ∈ A}, entonces A= {x / x ∈ A} = x.
x∈A
T T T
(d) Como A = {x / x ∈ A}, entonces A= {x / x ∈ A} = x.
x∈A
S T
Los incisos (c) y (d) reafirman el significado de Ay A como la unión (intersección) entre
los elementos de A.
[0, n1 ] =
T 1
[0, n ] / n ∈ Z+ . Por la naturaleza de Z+ , dicha intersección se suele denotar
T
(2)
n∈Z+
∞
[0, n1 ]. Veamos que es igual a {0}.
T
por
n=1
El tercer paso se justifica porque el único número real no negativo menor (o igual) que cualquier
1 +
n con n ∈ Z es 0. Por esta misma razón, [0, n1 ) = {0}.
T
n∈Z+
108
{[x, +∞) / x ∈ R}. Notemos que
T T
(3) [x, +∞) =
x∈R
T
z∈ [x, +∞) ⇔ ∀x∈R (z ∈ [x, +∞)) Lema 5.10
x∈R
⇔ ∀x∈R (z ∈ R ∧ z ≥ x)
⇔ z ∈ R ∧ ∀x∈R (z ≥ x)
La última fórmula quiere decir que z es un real que es mayor o igual que todos los reales, lo
T
cual es falso (en particular, no es mayor o igual que z + 1). Por lo tanto, z ∈ [x, +∞) es
x∈R
[x, +∞) = ∅.
T T
falso, por lo cual ∀z (z ∈
/ [x, +∞)), es decir,
x∈R x∈R
Por otra parte, S
z∈ [x, +∞) ⇔ ∃x∈R (z ∈ [x, +∞)) Lema 5.10
x∈R
⇔ ∃x∈R (z ∈ R ∧ z ≥ x)
⇔ z ∈ R ∧ ∃x∈R (z ≥ x)
⇔z∈R
El último paso se justifica porque, para todo z ∈ R, ∃x∈R (z ≥ x) es cierto (por ejemplo, z − 1).
[x, +∞) = R.
S
Por lo tanto,
x∈R
Para culminar la sección, presentamos la generalización de las leyes distributivas y D’Morgan
(del Teorema 3.6) para uniones e intersecciones generalizadas, lo mismo que su comportamiento
frente a la operación partes (que generaliza algunos incisos del Teorema 3.12). Ésto es posible por
la notación presentada en esta sección.
(d) A r (A r x).
T S
Leyes distributivas. x=
x∈B x∈B
S S
(a) A ∩ x= (A ∩ x).
x∈B x∈B Leyes con Partes
T T
(b) A ∪ x= (A ∪ x). T T
x∈B x∈B (e) P x = P(x).
x∈B x∈B
Leyes D’Morgan
S
(c) B 6= ∅ ⇒ A r (A r x).
S T S
x= (f) P(x) ⊆ P x .
x∈B x∈B x∈B x∈B
Demostración. (a)
S S
z ∈A∩ x ⇔z∈A∧z∈ x Def ∩
x∈B x∈B
⇔ z ∈ A ∧ ∃x∈B (z ∈ x) Lema 5.10
⇔ ∃x∈B (z ∈ A ∧ z ∈ x)
⇔ ∃x∈BS(z ∈ A ∩ x) Def ∩
⇔z∈ (A ∩ x) Lema 5.10.
x∈B
109
Por (Z1) se sigue la igualdad.
z ∈Ar Def r
S S
x ⇔z ∈A∧z ∈ / x
x∈B x∈B
⇔ z ∈ A ∧ ∀x∈B (z ∈
/ x) Ejercicio 3.37
⇔ ∀x∈B (z ∈ A ∧ z ∈
/ x) ∃x (x ∈ B) y K.16
⇔ ∀x∈BT(z ∈ A r x) Def r
⇔ z ∈ x∈B (A r x) Lema 5.10.
3.33 Ejercicio. Sea v una variable que no figura en 3.38 Ejercicio. Demuestre los siguientes enunciados
t(x). Pruebe que {t(x) / x ∈ A} = {t(v) / v ∈ A}. (basados en 4.8).
S
3.34 Ejercicio. Demuestre: (a) x ∈ A ⇒ t(x) ⊆ t(x).
x∈A
(a) Teorema 5.3(b). (b) x ∈ A ⇒
T
t(x) ⊆ t(x).
x∈A
(b) Lema 5.4(b) cuando B es clase propia. S
(c) ∀x∈A (t(x) ⊆ B) ⇔ t(x) ⊆ B.
(c) Lema 5.4(a) utilizando el inciso anterior (partien- x∈A
do de T ⊆ T). (d) ∀x∈A (B ⊆ t(x)) ⇔ B ⊆
T
t(x).
x∈A
(d) Lema 5.8(c). S S
(e) A ⊆ B ⇒ t(x) ⊆ t(x).
(e) Lema 5.10(b). x∈A x∈B
T T
3.35 Ejercicio. Pruebe que {t(x) / x ∈ A} = ∅ si y (f) A ⊆ B ⇒ x∈B t(x) ⊆ x∈A t(x).
solo si A = ∅.
Sugerencia: Utilize el Teorema 4.8 con la Definición
3.36 Ejercicio. Sea A = {B1 , . . . , Bn }. Pruebe 5.9 para obtener pruebas directas.
(a) {t(x) / x ∈ A} = {t(B1 ), . . . , t(Bn )}. 3.39 Ejercicio. Pruebe (b), (d) y (e) del Teorema
S 5.12.
(b) x∈A t(x) = t(B1 ) ∪ . . . ∪ t(Bn ).
T
(c) x∈A t(x) = t(B1 ) ∩ . . . ∩ t(Bn ). 3.40 Ejercicio. Demuestre los siguientes enunciados
cuando B 6= ∅ (excepto (a), que no necesita esta
3.37 Ejercicio. Demuestre hipótesis).
S
x rA= (x r A).
S
(a) y ∈
/ {t(x) / x ∈ A} ⇔ ∀x∈A (y 6= t(x)). (a)
S x∈B x∈B
(b) z ∈
/ t(x) ⇔ ∀x∈A (z ∈
/ t(x)).
x rA= (x r A).
T T
x∈A (b)
T x∈B x∈B
(c) z ∈
/ t(x) ⇔ ∃x∈A (z ∈
/ t(x)). S S
x∈A (c) A ∪ x= (A ∪ x).
x∈B x∈B
110
′
(d) Si A 6= ∅ entonces B′.
T T S T
(d) A ∩ x= (A ∩ x). B =
x∈B x∈B B∈A B∈A
Presentamos en esta sección los otros 3 axiomas de ZF y algunas de sus consecuencias princi-
pales. Debido a que el 99 % de las áreas de matemáticas diferente a la Lógica pueden describirse sin
necesidad de los axiomas de Reemplazamiento y Regularidad, no los utilizaremos a ellos ni a sus
consecuencias para el desarrollo de lo que sigue del texto, tampoco para ejercicios, a menos que se
indique lo contrario.
(Z6) Axioma del Infinito. ∃X (∅ ∈ X ∧ ∀x∈X (s(x) ∈ X)) donde se denota s(x) = x ∪ {x}.
El axioma del Infinito permite construir los conjuntos numéricos N, Z, Q, R y C, entre otros
conjuntos infinitos. En muchos de nuestros ejemplos nos referimos a estos conjuntos pero asumien-
do su definición y propiedades, lo cual se logra probar desde (Z6). Sin (Z6), es imposible probar
que existe algún conjunto infinito.
Si ∀x∈A ∃!y ϕ(x, y) entonces la fórmula ∀x∈A ∃y∈Y ϕ(x, y) equivale a {y / ∃x∈A ϕ(x, y)} ⊆ Y
(ver Ejercicio 3.42). Por lo tanto,
6.1 Teorema. Sea ϕ(x, y) una fórmula de ZF donde Y no es libre. Si ∀x∈A ∃!y ϕ(x, y), (Z7) implica
que {y / ∃x∈A ϕ(x, y)} es conjunto.
Demostración. De las hipótesis y (Z7) se sigue que ∃Y ∀x∈A ∃y∈Y ϕ(x, y), lo cual es equivalente
a ∃Y ({y / ∃x∈A ϕ(x, y)} ⊆ Y ). Luego, por el Lema del subconjunto (2.8), {y / ∃x∈A ϕ(x, y)} es
conjunto.
111
6.2 Corolario. Si A es un conjunto y t(x) un término, (Z7) implica que {t(x) / x ∈ A} es conjunto.
Demostración. Sea y una variable que no figura en t(x). Es claro que ∀x∈A ∃!y (y = t(x)). Luego,
por el Teorema 6.1, {y / ∃x∈A (y = t(x))} es conjunto, el cual es {t(x) / x ∈ A}.
Muchos de los objetos de la forma {t(x) / x ∈ A} presentados en la sección 3.5 se probaron que
son conjuntos debido al axioma de Partes. En teorı́a de conjuntos, cuando se acepta (Z7) entre sus
axiomas, se da importancia a clasificar qué resultados necesitan estrictamente el axioma de Partes
para demostrase.
Una consecuencia de (Z8), según la interpretación anterior, es que no existen sucesiones infinitas
decrecientes respecto a ∈, es decir, que no existe una sucesión de la forma
x0 ∋ x1 ∋ x2 ∋ . . . ∋ xn ∋ . . .
El hecho más relevante de (Z8) es que permite estructurar el universo por niveles, donde cada
conjunto se puede poner en un nivel especı́fico de modo que, si x ∈ y, entonces el nivel de x es
menor que el nivel de y. Por eso es que (Z8) implica que ∀x (x ∈
/ x) pues, si x ∈ x, entonces el nivel
de x serı́a menor que el mismo nivel de x, lo cual es absurdo.
(Z7) no es un axioma relevante en otras áreas de la matemática (excepto Lógica) porque las
colecciones del tipo {t(x) / x ∈ A} que se utilizan solo necesitan del axioma de Partes para que
sean conjuntos. (Z8) tampoco es relevante debido a que no es necesario dar una estructura al uni-
verso para probar teoremas importantes. El uso de (Z7) y (Z8) es relevante en lógica matemática,
donde una estructura más especı́fica del universo permite generar resultados muy potentes, además
112
de ofrecer pruebas alternativas y sencillas a resultados dentro de otras áreas de las matemáticas.
Para finalizar la discusión de este capı́tulo, hablamos del axioma de Elección. Recordemos que
ZFC denota ZF con el axioma de Elección, teorı́a donde tiene lugar toda la matemática contem-
poránea. El papel de dicho axioma, en un modo intuitivo, es poder convertir una prueba que contiene
infinitas aplicaciones de regla C en una prueba de finitos pasos, lo cual la hace válida como prueba
de una teorı́a de primer orden. Debido a que los resultados de este texto son esencialente básicos,
no se necesita el axioma de Elección en sus demostraciones.
3.44 Ejercicio. Pruebe que (Z1), (Z2), (Z5) y (Z7) (c) ∀x,y,z ((x ∈ y ∧ y ∈ z) ⇒ z ∈ / x).
implican (Z3). Sugerencia: Tome A = P(P(∅)), el (d) (x ∈ x ∧ . . . ∧ x
1 2 n−1 ∈ xn ) ⇒ xn ∈
/ x1 .
cual es conjunto por (Z1), (Z2) y (Z5). Puede utilizar
6.1 y 6.2 ya que estos son consecuencias de (Z1), (Z2) (e) La clase de Russell es el universo.
9
En cierta bibliografı́a se toma el Teorema 6.1 como el axioma de Reemplazamiento, lo cual hace que (Z2) y (Z3)
sean redundantes. Ésto reduce ZF a 6 axiomas. Sin embargo, ZFC sin (Z2) no prueba (Z2).
113
114
Capı́tulo 4
Relaciones y Funciones
En este capı́tulo formalizamos todas las nociones sobre relaciones y funciones en la teorı́a ZF,
además que suministramos todas sus pruebas. Debido a que estos conceptos son muy importantes
en matemáticas, sus definiciones son una primera evidencia de que la matemática básica se puede
formalizar en ZF.
Para el desarrollo de este capı́tulo, dedicamos la primera sección a definir par ordenado, rela-
ciones y todos los conceptos básicos alrededor de ella. En la segunda sección introducimos un tipo
de relación especı́fica llamada producto cartesiano. En la tercera sección desarrollamos el concepto
de función (una de las nociones centrales en matemáticas despues de los números) y, en la última
sección, vemos cómo se proyectan las imágenes y preimágenes de conjuntos bajo una relación es-
pecı́fica.
Todos los conceptos de este capı́tulo, ası́ como el anterior, representan fundamentos básicos
sobre los cuales se sostiene toda la matemática.
4.1. Relaciones
El concepto de relación estás soportado por la noción de par ordenado. Intuitivamente, para dos
conjuntos x y y un par ordenado (x, y) representa una coordenada con primera componente x y
segunda componente y o, dicho de otra forma, una sucesión de dos objetos x y y en donde importa
el orden. En contraste, como {x, y} = {y, x}, la noción de doblete se considera como par no orde-
nado.
Entre las varias formas de definir un par ordenado, la más usual es la siguiente.
1.1 Definición (Par ordenado). Dados dos conjuntos x y y, definimos (x, y) = {x}, {x, y} .
1.2 Teorema (Propiedad fundamental de los pares ordenados). (x, y) = (a, b) ⇔ (x = a ∧ y = b).
Demostración. Supongamos que (x, y) = (a, b), es decir, {x}, {x, y} = {a}, {a, b} . Del
Ejercicio 3.15 se sigue que {x} = {a} ∧ {x, y} = {a, b} ó {x} = {a, b} ∧ {x, y} = {b}. Pro-
cedamos por disyunción de casos.
Caso {x} = {a} ∧ {x, y} = {a, b}: Se sigue que x = a y, como {x, y} = {a, b}, entonces x =
a ∧ y = b ó x = b ∧ y = a. Procedamos de nuevo por casos.
Caso {x} = {a, b} ∧ {x, y} = {b}: Como a, b ∈ {a, b}, entonces a, b ∈ {x}, de donde a = x y
b = x. Por otra parte, como x, y ∈ {x, y}, entonces x, y ∈ {b}, es decir, x = b y y = b.
Luego, se sigue x = a ∧ y = b.
El recı́proco es inmediato.
Veamos en el siguiente ejemplo cómo el concepto de par ordenado permite definir cualquier
relación como un conjunto.
R
a b b
1
b b b
2
c b b
3
Entonces definimos R = {(a, 1), (b, 1), (b, 2), (b, 3)}, es decir, la relación es el conjunto de pares
ordenados que están relacionados. Esta definición de R suministra suficiente información en relación
con su forma intuitiva y, se puede notar, que dos objetos x y y están relacionados por R si y solo si
(x, y) ∈ R.
116
En general, mediante el mismo procedimiento, cualquier relación se puede definir como el con-
junto de pares ordenados formados por parejas relacionadas.
1.4 Definición (Relación). Una relación es un conjunto de pares ordenados. Dicho de otro modo,
un conjunto R es relación si ∀z∈R ∃x,y (z = (x, y)). Denotamos por xRy ≡ (x, y) ∈ R, lo cual
formaliza la idea de que dos objetos se relacionan cuando la pareja ordenada formada por ellos
está en la relación.
La siguiente noción indica un modo general para definir relaciones mediante una propiedad.
a la colección formada por los pares ordenados que satisfacen la fórmula ϕ(x, y).
Para definir una relación según la noción anterior hay que probar que es conjunto, pues de esa
forma también se generan clases propias. Independiente del caso, se tiene el siguiente resultado.
Demostración.
(u, v) ∈ {(x, y) / ϕ(x, y)} ⇔ (u, v) ∈ {z / ∃x,y (ϕ(x, y) ∧ z = (x, y))} Def. 1.5
⇔ ∃x,y (ϕ(x, y) ∧ (u, v) = (x, y))
⇔ ∃x,y (ϕ(x, y) ∧ u = x ∧ v = y) Tma 1.2
⇔ ∃x ∃y (u = x ∧ v = y ∧ ϕ(x, y))
⇔ ∃x (u = x ∧ ∃y (v = y ∧ ϕ(x, y)))
∃x
∃y
⇔ u=x v=y ϕ(x, y)
∃x
⇔ u=x ϕ(x, v)
⇔ ϕ(u, v)
Ahora, supongamos que {(x, y) / ϕ(x, y)} es un conjunto. Si z ∈ {(x, y) / ϕ(x, y)}, por Defini-
ción 1.5 se sigue que ∃x,y (ϕ(x, y) ∧ z = (x, y)). Por regla C, escojamos x y y tal que ϕ(x, y) y
z = (x, y), de donde ∃x,y (z = (x, y)). Por lo tanto, ∀z∈{(x,y) / ϕ(x,y)} ∃x,y (z = (x, y)), es decir,
{(x, y) / ϕ(x, y)} es relación por Definición 1.4.
117
En la prueba anterior, usamos las mismas variables x y y como las constantes que se toman al
aplicar regla C, lo cual es permitido siempre y cuando x (ni y) estén previamente determinadas. En
adelante, dejamos implı́cito el uso de la regla C en una prueba mediante una frase del tipo “existe x
tal que ...”.
xIA y ⇔ (x ∈ A ∧ x = y).
(b) ∅ es una relación, pues ∀z∈∅∃x,y (z = (x, y)) es cierta. Otra forma de justificarlo es ver que
I∅ = ∅, el cual es relación según (1).
(c) Sea R = {(x, y) / x, y ∈ R ∧ ∃z∈R+ (y = x + z)} (en la sección 4.2 probamos que R es con-
junto). Dados x, y ∈ R, notese que
118
veamos R ⊆ A. En efecto, si z ∈ R, como R es relación se sigue ∃x,y (z = (x, y)). Luego, de
la hipótesis, (x, y) ∈ R ⇒ (x, y) ∈ A pero, como z = (x, y) y z ∈ R, entonces (x, y) ∈ R.
Por lo tanto, (x, y) ∈ A, es decir, z ∈ A.
(b)
R=S ⇔R⊆S∧S ⊆R
⇔ ∀x,y ((x, y) ∈ R ⇒ (x, y) ∈ S) ∧ ∀x,y ((x, y) ∈ S ⇒ (x, y) ∈ R) por (a)
⇔ ∀x,y ((x, y) ∈ R ⇔ (x, y) ∈ S)
⇔ ∀x,y (xRy ⇔ xSy) notación.
(1) Si R es relación y (x, y) ∈ R, se dice que y es imagen de x bajo R o también que x es preimagen
de y bajo R.
(3) ranR = {y / ∃x ((x, y) ∈ R)} es el rango de R, el cual representa el conjunto de objetos que
tienen alguna preimagen bajo R.
Nótese que, en las definiciones de dominio y rango, no se exige que R sea una relación, aunque
por lo general se considera la definición sólo para relaciones.
119
SS
(b) Si x ∈ domR, por Definición 1.9 existe un y tal que (x, y) ∈ R. Luego, de (a), x ∈ R.
SS
De manera análoga se demuestra que ranR ⊆ R.
(d) Si (x, y) ∈ R entonces ∃y ((x, y) ∈ R) y ∃x ((x, y) ∈ R). Por lo tanto, x ∈ domR y y ∈ ranR.
1.11 Ejemplo. (1) Si R = {(a, 1), ∅, (b, 5)} entonces, aunque no sea relación (ver Ejercicio 4.1),
domR = {a, b} y ranR = {1, 5}.
El siguiente resultado ilustra que la unión de relaciones es una relación y que el dominio dis-
tribuye respecto a la unión.
120
(a) Considere A = {R, S}. Es claro que A satisface la hipótesis de (b), de donde se concluye
S
A = R ∪ S es una relación.
(f) S S
y ∈ ran A ⇔ ∃x ((x, y) ∈ A) Def. ran
⇔ ∃x ∃R∈A ((x, y) ∈ R)
⇔ ∃R∈A ∃x ((x, y) ∈ R)
⇔ ∃R∈AS (y ∈ ranR) Def. ran
⇔y∈ ranR
R∈A
S S
(e) Por (f), ran(R ∪ S) = ran {R, S} = ran(x) = ranR ∪ ranS.
x∈{R,S}
En la sección 4.2 probamos que R−1 y S ◦ R son conjuntos, más aún, por el Lema 1.6 son
relaciones.
1.14 Ejemplo. (a) Tomemos R como en el Ejemplo 1.3. Luego, R−1 = {(1, a), (1, b), (2, b), (3, b)},
cuyo diagrama de Venn se ilustra a continuación.
R−1
1 b b
a
2 b b
b
3 b b
c
R−1 ◦ R = {(a, a), (a, b), (b, a), (b, b)}, situación representada en la siguiente figura.
R R1
a b b b
a
1
b b b b
b
2
c b b b
c
3
Por otra parte, R ◦ R−1 = {(1, 1), (1, 2), (1, 3), (2, 1), (2, 2), (2, 3), (3, 1), (3, 2), (3, 3)}.
121
R1 R
1 b b b
1
a
2 b b b
2
b
3 b b b
3
c
−1
(b) IA = IA . En efecto,
−1
(x, y) ∈ IA ⇔ (y, x) ∈ IA Def. inversa
⇔ y ∈ A ∧ y = x Def. IA
⇔x∈A∧x=y
⇔ (x, y) ∈ IA Def. IA .
−1 −1
Por lo tanto, ∀x,y ((x, y) ∈ IA ⇔ (x, y) ∈ IA ). Como IA y IA son relaciones, entonces del
−1
Lema 1.8 se sigue IA = IA .
122
(d) (S ◦ R)−1 = R−1 ◦ S −1 .
(e) T ◦ (S ◦ R) = (T ◦ S) ◦ R.
(b)
x ∈ domR−1 ⇔ ∃y ((x, y) ∈ R−1 ) Def. dom
⇔ ∃y ((y, x) ∈ R) Def. inversa
⇔ x ∈ ranR Def. ran.
(e)
(x, w) ∈ T ◦ (S ◦ R) ⇔ ∃z ((x, z) ∈ S ◦ R ∧ (z, w) ∈ T ) Def. ◦
⇔ ∃z (∃y ((x, y) ∈ R ∧ (y, z) ∈ S) ∧ (z, w) ∈ T ) Def. ◦
⇔ ∃z ∃y ((x, y) ∈ R ∧ (y, z) ∈ S ∧ (z, w) ∈ T )
⇔ ∃y ∃z ((x, y) ∈ R ∧ (y, z) ∈ S ∧ (z, w) ∈ T )
⇔ ∃y ((x, y) ∈ R ∧ ∃z ((y, z) ∈ S ∧ (z, w) ∈ T ))
⇔ ∃y ((x, y) ∈ R ∧ (y, w) ∈ T ◦ S) Def. ◦
⇔ (x, w) ∈ (T ◦ S) ◦ R Def. ◦.
Al generalizar, como ambos son relaciones, por el Lema 1.8 son iguales.
(f) Si x ∈ dom(S ◦R) entonces existe z tal que (x, z) ∈ S ◦R. Luego, existe un y tal que (x, y) ∈ R
y (y, z) ∈ S, de donde se sigue x ∈ domR.
(g) ran(S ◦ R) = dom(S ◦ R)−1 = dom(R−1 ◦ S −1 ) ⊆ domS −1 = ranS. por los incisos (b), (d)
y (f).
(h) Por (f) tenemos una contención. Para la otra, supongamos x ∈ domR, es decir, existe y tal que
(x, y) ∈ R. Luego, y ∈ ranR y, como ranR ⊆ domS, entonces y ∈ domS. Por lo tanto, existe
z tal que (y, z) ∈ S. Luego, como (x, y) ∈ R ∧ (y, z) ∈ S, entonces (x, z) ∈ S ◦ R, de donde
x ∈ dom(S ◦ R).
123
Por último, veamos que la colección de todos los pares ordenados es una clase propia.
Demostración. Supongamos que existe un Y tal que ∀x,y ((x, y) ∈ Y ). Como (x, y) ∈ Y se sigue
x ∈ domY . Luego, ∀x (x ∈ domY ), de donde ∃V ∀x (x ∈ V ), lo cual es una contradicción.
124
y procedimientos matemáticos. En miras a precisar su definición, podemos incluso generalizar la
noción para cualquier par de conjuntos.
A × B = {(x, y) / x ∈ A ∧ y ∈ B}
(x, y) ∈ A × B ⇔ (x ∈ A ∧ y ∈ B).
2.2 Lema. Si A y B son conjuntos, entonces A × B es conjunto. Más aún, es una relación.
2.3 Ejemplo. (a) R × R es el plano cartesiano donde se suelen graficar situaciones de la geometrı́a
analı́tica.
(d)
6 ∅,
A si B = B si A 6= ∅,
dom(A × B) = ran(A × B) =
∅ si B = ∅. ∅ si A = ∅.
125
En efecto, si B = ∅, se sigue que dom(A × B) = dom∅ = ∅. Ahora, si B 6= ∅, entonces
(e) Es claro que <= {(x, y) / x, y ∈ R ∧ ∃z∈R+ (y = x + z)} ⊆ R × R. Por lo tanto, < es un
conjunto.
El último ejemplo ilustra la utilidad del producto cartesiano para probar que una colección de
pares ordenados es conjunto, lo cual se debe a que cualquier relación está definida dentro de un
producto cartesiano (ver Ejercicio 4.12). El siguiente resultado ilustra más ejemplos del mismo
tipo.
(a) IA . (c) S ◦ R.
(b) R−1 .
Los siguientes resultados presentan el comportamiento del producto cartesiano frente a la con-
tención y a ciertas operaciones entre conjuntos.
(b) A ⊆ C ⇒ A × B ⊆ C × B.
(c) B ⊆ D ⇒ A × B ⊆ A × D.
(d) Si B 6= ∅, entonces A × B ⊆ C × B ⇒ A ⊆ C.
(e) Si A 6= ∅, entonces A × B ⊆ A × D ⇒ B ⊆ D.
126
(f) Si B 6= ∅, entonces A × B = C × B ⇔ A = C.
(g) Si A 6= ∅, entonces A × B = A × D ⇔ B = D.
(b) (A ∪ B) × C = (A × C) ∪ (B × C).
(c) (A × B) ∩ (C × D) = (A ∩ C) × (B ∩ D).
(d) A × (B ∩ C) = (A × B) ∩ (A × C).
(e) (A ∩ B) × C = (A × C) ∩ (B × C).
(f) (A × B) ∪ (C × D) ⊆ (A ∪ C) × (B ∪ D).
127
Demostración. (a)
128
4.3. Funciones
3.1 Definición (Función). Una función es una relación tal que todos los objetos del dominio tienen
una única imagen. Dicho de otra forma, f es función sii se satisface
(i) f es relación,
(ii) ∀x∈domf ∃!y (xf y) (todo elemento del dominio tiene una única imagen).
Si f es una función y x ∈ domf , definimos f (x) como el único y tal que xf y (la única imagen de
x).
La propiedad (ii) de la definición de función, más la noción de f (x), hacen que una función se
considere, más allá de un conjunto de pares ordenados, como una operación que transforme cada
elemento del dominio en su imagen. Ésto hace entonces que las propiedades de una función f de-
pendan sólo de dos nociones: dominio y f (x). El siguiente resultado ofrece un primer acercamiento
a este hecho.
Demostración. (a) Si x ∈ domf , de la Definición 3.1 f (x) es el único y tal que (x, y) ∈ f . Por lo
tanto, (x, f (x)) ∈ f .
(b) Si (x, y) ∈ f , es claro que x ∈ domf . Luego, por (a) y la unicidad de la imagen de x, se sigue
que y = f (x).
Para el recı́proco, supongamos x ∈ domf y y = f (x). De (a) se sigue que (x, f (x)) ∈ f , es
decir, (x, y) ∈ f .
129
(c) Si z ∈ f , como f también es relación, entonces existen x y y tal que z = (x, y). Ası́,
(x, y) ∈ f , de donde, por (b), x ∈ domf y y = f (x). Por lo tanto, z = (x, f (x)) ∈
{(x, f (x) / x ∈ domf }.
La contención recı́proca es directa de (a), pues para todo x ∈ domf se tiene (x, f (x)) ∈ f .
El siguiente resultado ilustra que la igualdad de dos funciones depende del dominio y la noción
de f (x).
Demostración. (a) Si f ⊆ g, del Ejercicio 4.6 se sigue domf ⊆ domg. Ahora, si x ∈ domf , del
Lema 3.2 (x, f (x)) ∈ f , de donde (x, f (x)) ∈ g. Luego, como g también es función, del Lema
3.2(b) se sigue que f (x) = g(x).
El recı́proco se prueba con el Lema 3.2(c) pues, si domf ⊆ domg y ∀x∈domf (f (x) = g(x)),
entonces
f = {(x, f (x) / x ∈ domf } Lema 3.2
= {(x, g(x)) / x ∈ domf } ∀x∈domf (f (x) = g(x))
⊆ {(x, g(x)) / x ∈ domg} domf ⊆ domg
=g Lema 3.2.
Por lo tanto, f ⊆ g.
(b)
f =g ⇔ f ⊆g∧g⊆f
⇔ domf ⊆ domg ∧ ∀x∈domf (f (x) = g(x)) ∧ domg ⊆ domf (a)
∧ ∀x∈domg (f (x) = g(x))
⇔ domf = domg ∧ ∀x∈domf (f (x) = g(x)) ∧ ∀x∈domg (f (x) = g(x))
⇔ domf = domg ∧ ∀x∈domf (f (x) = g(x)) ∧ ∀x∈domf (f (x) = g(x))
⇔ domf = domg ∧ ∀x∈domf (f (x) = g(x))
Por lo general, cuando se define una función, no se necesita indicarla precisamente como un
conjunto de pares ordenados. La razón de esto es que la información necesaria para construir una
función es determinar su dominio y el comportamiento de las imágenes. Para justificar lo anterior,
precisamos la siguiente notación.
130
3.4 Definición. (1) f : A → B significa que f es función, domf = A y ranf ⊆ B. En este caso, a
B se le suele llamar codominio de f .
En siguiente resultado indica que la notación (2) basta para definir una función, sin necesidad
de determinar precisamente el conjunto de pares ordenados al que corresponde.
3.5 Teorema. Sean A y B conjuntos, t(x) un término tal que ∀x∈A (t(x) ∈ B). Entonces f =
{(x, t(x)) / x ∈ A} satisface
f : A −→ B
x 7−→ f (x) = t(x)
Demostración. Sea f = {(x, t(x)) / x ∈ A} con las hipótesis del enunciado. Dado x ∈ A se tiene
que t(x) ∈ B, de donde (x, t(x)) ∈ A × B. Por lo tanto, f ⊆ A × B, lo cual permite concluir, por
el Ejercicio 4.11(c), que f es relación, domf ⊆ A y ranf ⊆ B.
Para probar domf = A sólo falta ver que A ⊆ domf . En efecto, si x ∈ A entonces (x, t(x)) ∈ f ,
de donde x ∈ domf .
Ahora veamos que f es función. Como es una relación, basta probar que ∀x∈A ∃!y ((x, y) ∈ f ). En
efecto, si x ∈ A, obtenemos que (x, t(x)) ∈ f . Por otra parte, si (x, w) ∈ f , entonces existe un
x′ ∈ A tal que (x, w) = (x′ , t(x′ )), de donde x = x′ y w = t(x′ ) = t(x). Por lo tanto,
3.6 Ejemplo. (1) Del Teorema 3.5, para definir una función f tal que
f : A −→ A
x 7−→ f (x) = x
131
basta verificar ∀x∈A (x ∈ A) (lo cual es cierto) y definir f = {(x, x) / x ∈ A}. Se puede notar
aquı́ que f = IA , por lo cual
IA : A −→ A
x 7−→ IA (x) = x
es decir, IA es una función con dominio (y rango) igual a A y ∀x∈A (IA (x) = x).
(2) Supongamos c ∈ B. Del Teorema 3.5 se puede definir una función h de modo que
h : A −→ B
x 7−→ h(x) = c
Para esto, según el enunciado del Teorema citado, se denota h = {(x, c) / x ∈ A} = A × {c}.
h se conoce como la función constante con dominio A y valor c, pues ∀x∈A (h(x) = c).
(3) La función
f : R −→ R
1
x 7−→ f (x) =
x2 +1
n o
está definida, según el Teorema 3.5, como f = (x, x21+1 ) / x ∈ R .
(4) ∅ es una función, pues ∅ = I∅ es función. Más aún, ∅ : ∅ → B para cualquier conjunto B.
En adelante, para definir funciones como en los ejemplos anteriores, dejamos de enunciar su
definición como conjunto de pares ordenados, pues el Teorema 3.5 basta para justificar su buena
definición. Por ejemplo, para definir
g : R −→ R
x 7−→ g(x) = x3
132
ρ1 . Ahora, si (x, y), v ∈ ρ1 , existen x′ y y ′ tal que (x′ , y ′ ) ∈ R y (x, y), v = (x′ , y ′ ), x′ .
es decir,
z, x ∈ ρ1 ∧ ∀v [ z, v ∈ ρ1 ⇒ v = x],
de donde
∃w (z, w) ∈ ρ1 ∧ ∀v [(z, v) ∈ ρ1 ⇒ v = w] .
3.9 Ejemplo. (1) IA : A → A es biyectiva. Como ranIA = A, claramente IA es sobre. Por otra
parte, ∀x,y∈A (x = y ⇒ x = y), es decir, ∀x,y∈A (IA (x) = IA (y) ⇒ x = y) (porque IA (x) = x
para x ∈ A), de donde IA es inyectiva.
−1
Además, IA es invertible, pues IA = IA es función.
133
(3) Sea c ∈ B y h : A → B definida por h(x) = c para todo x ∈ A. Si A tiene al menos dos
elementos, entonces h no es inyectiva, pues si a y b son dos elementos distintos en A, entonces
h(a) = h(b) = c, pero a 6= b. Del mismo modo, si A tiene al menos dos elementos, entonces h
no es invertible porque, como h = A × {c}, h−1 = {c} × A, el cual claramente no es función
cuando A tiene al menos dos elementos.
Por otra parte,
{c} si A 6= ∅,
ranh = ran(A × {c}) =
∅ si A = ∅.
Si A 6= ∅, entonces h es sobreyectiva si y solo si ranh = {c}.
(i) x ∈ domf ⇒ (f (x), x) ∈ f −1 . Si x ∈ domf , entonces (x, f (x)) ∈ f por Lema 3.2, de donde
(f (x), x) ∈ f −1
(a) g ◦ f es función, dom(g ◦ f ) ⊆ domf , ran(g ◦ f ) ⊆ rang y ∀x∈dom(g◦f ) ([g ◦ f ](x) = g(f (x))).
134
(b) Si ranf ⊆ domg entonces dom(g ◦ f ) = domf .
(c) Si f : A → B y g : B → C, entonces g ◦ f : A → C.
Demostración. (a) Del Teorema 1.15 se sigue directamente que g ◦ f es relación, dom(g ◦ f ) ⊆
domf y ran(g ◦ f ) ⊆ rang. Veamos ahora que
(i) (x, z) ∈ g ◦ f ⇒ (f (x) ∈ domg ∧ z = g(f (x))). Si (x, z) ∈ g ◦ f entonces existe y tal
que (x, y) ∈ f y (y, z) ∈ g. Como f y g son funciones, entonces del Lema 3.2 se sigue que
x ∈ domf , y ∈ domg, y = f (x) y z = g(y). Luego, f (x) ∈ domg y z = g(y) = g(f (x)).
(ii) x ∈ dom(g ◦ f ) ⇒ (f (x) ∈ domg ∧ (x, g(f (x)))) ∈ g ◦ f. Si x ∈ dom(g ◦ f ) entonces
existe z tal que (x, z) ∈ g ◦ f . Luego, de (i), f (x) ∈ domg y z = g(f (x)), por lo cual
(x, g(f (x))) ∈ g ◦ f .
Para ver que g◦f es función, probemos que ∀x∈dom(g◦f ) ∃!z ((x, z) ∈ g◦f ). Sea x ∈ dom(g◦f ),
de donde f (x) ∈ domg y (x, g(f (x))) ∈ g ◦ f por (ii). Ahora, si (x, w) ∈ g ◦ f , entonces, por
(i), w = g(f (x)). Por lo tanto,
de donde
∃z ((x, z) ∈ g ◦ f ∧ ∀w ((x, w) ∈ g ◦ f ⇒ w = z)).
Mediante la composición de funciones, obtenemos las siguiente propiedades para las funciones
invertibles.
135
(a) f −1 es invertible y (f −1 )−1 = f . (d) ∀x∈domf (f −1 (f (x))) = x.
Demostración. (a) Del Teorema 1.15, (f −1 )−1 = f es función, por lo cual f −1 es función invert-
ible.
(c) Del Ejercicio 4.17, f : domf → ranf y f −1 : ranf → domf , por lo cual, por el Teorema 3.11,
f −1 ◦ f : domf → domf . Por lo tanto, dom(f −1 ◦ f ) = domf = dom(Idomf ). Por el Lema
3.3, para ver que f −1 ◦ f = Idomf , basta probar que ∀x∈domf ([f −1 ◦ f ](x) = Idomf (x)). En
efecto, si x ∈ domf , por (i) de la prueba del Teorema 3.10, (f (x), x) ∈ f −1 . Luego, como f −1
es función, del Lema 3.2 se sigue que x = f −1 (f (x)) = [f −1 ◦ f ](x) (la última igualdad por
el Teorema 3.11). Por lo tanto, Idomf (x) = [f −1 ◦ f ](x).
Es muy común definir funciones por tramos en matemáticas, lo cual formalizamos respecto a la
compatibilidad de funciones.
3.14 Definición. (1) Dos funciones f y g son compatibles si ∀x∈domf ∩domg (f (x) = g(x)).
136
(2) Sea B un conjunto de funciones (es decir ∀f ∈B (f función)). Decimos que B es un sistema
compatible de funciones si ∀f,g∈B (f y g compatibles).
Demostración. (a) Como domf ∩ domf = domf y ∀x∈domf (f (x) = f (x)), el resultado es
inmediato.
(b) Si domf ∩ domg = ∅ entonces ∀x∈domf ∩domg (f (x) = g(x)) es cierto directamente.
Estas dos funciones son compatibles. En efecto, si x ∈ domf ∩ domg, como domf ∩ domg =
[0, +∞) ∩ (−∞, 0] = {0}, entonces x = 0 y f (x) = f (0) = 0 = g(0) = g(x).
f1 : [−1, ∞) −→ R f2 : (−∞, 1] −→ R
x 7−→ f1 (x) = x x 7−→ f2 (x) = −x
no son compatibles. Por ejemplo, 0, 5 ∈ domf1 ∩domf2 = [−1, 1], f1 (0, 5) = 0, 5 y f2 (0, 5) =
−0, 5. Más aún, ∀x∈[−1,1]r{0} (f1 (x) 6= f2 (x)).
(3) Sean
g1 : (−∞, −1) −→ R g2 : [−1, 1] −→ R
x 7−→ g1 (x) = 1 x 7−→ g2 (x) = x + 1
g3 : (1, +∞) −→ R
x 7−→ g3 (x) = 2
Como g1 , g2 y g3 tienen dominios disjuntos entre sı́, por el Lema 3.15 ellas son compatibles
entre sı́. Por lo tanto, {g1 , g2 .g3 } es un sistema compatible de funciones.
137
Entonces B = {fn / n ∈ Z} es un sistema compatible de funciones. En efecto, si f, g ∈ B
entonces existen m, n ∈ Z tal que f = fm y g = fn . Si m = n es claro que fm es compatible
con fn (al ser la misma función); si m 6= n entonces fm y fn tienen dominios disjuntos, por lo
cual son compatibles.
Para definir una función por tramos, primero se toman los diferentes tramos y se unen al final.
Los ejemplos anteriores representan tramos que se pueden unir para generar una nueva función.
Para ésto, es suficiente y necesario que los tramos sean compatibles, lo cual materializamos en el
siguiente resultado.
3.17 Teorema. (a) Sean f y g funciones. Entonces ellas son compatibles si y solo si f ∪ g es una
función. En este caso, dom(f ∪ g) = domf ∪ domg, ran(f ∪ g) = ranf ∪ rang y, para todo
x ∈ dom(f ∪ g),
f (x) si x ∈ domf ,
[f ∪ g](x) =
g(x) si x ∈ domg.
[
(f ∈ B ∧ x ∈ domf ) ⇒ B (x) = f (x).
138
S
Sean f, g ∈ B y supongamos x ∈ domf ∩ domg. De (i) se sigue que (x, f (x)) ∈ B y
S S
(x, g(x)) ∈ B pero, como B es función, entonces f (x) = g(x).
S S
Por otra parte, cuando B es función, si f ∈ B y x ∈ domf , de (i) se sigue (x, f (x)) ∈ B,
S
lo cual permite concluir que [ B](x) = f (x).
(a) Es claro que f y g son compatibles si y solo si {f, g} es un sistema compatible de funciones, lo
S
cual equivale, por (b), a que {f, g} es función, es decir, a que f ∪ g es función. Del Teorema
1.12 es claro que dom(f ∪ g) = domf ∪ domg y ran(f ∪ g) = ranf ∪ rang. Ahora, si f ∪ g es
función y x ∈ dom(f ∪ g), veamos que
f (x) si x ∈ domf ,
[f ∪ g](x) =
g(x) si x ∈ domg.
S
En efecto, si x ∈ domf , como f ∈ {f, g}, de (b) se sigue que [ {f, g}](x) = f (x), es decir,
S
[f ∪g](x) = f (x). De forma análoga, si x ∈ domg, como g ∈ {f, g} se obtiene [ {f, g}](x) =
g(x), es decir, [f ∪ g](x) = g(x).
(1) Como f y g son compatibles, del Teorema 3.17 se sigue que f ∪g es función. Además, dom(f ∪
g) = domf ∪ domg = R y ran(f ∪ g) = ranf ∪ rang = [0, +∞) ∪ [0, +∞) = [0, +∞), de
donde
f ∪ g : R −→ R
x si x ≥ 0,
x 7−→ [f ∪ g](x) =
−x si x ≤ 0.
3
g f
2
-3 -2 -1 1 2 3
Ésta es la forma en que se define la función valor absoluto por tramos. De hecho, para x ∈ R,
se define |x| = [f ∪ g](x).
139
(2) f1 ∪ f2 no es función, pues no son compatibles. En el ejemplo se vio que f1 (0, 5) = 0, 5 y
f2 (0, 5) = −0, 5, por lo no se puede definir [f1 ∪ f2 ](0, 5) debido a que no hay unicidad en la
imagen para 0, 5 respecto a f1 ∪ f2 .
S
(3) Como {g1 , g2 , g3 } es un sistema compatible de funciones, entonces {g1 , g2 , g3 } es función, es
decir g1 ∪ g2 ∪ g3 es función. Es claro que dom(g1 ∪ g2 ∪ g3 ) = domg1 ∪ domg2 ∪ domg3 = R,
ran(g1 ∪ g2 ∪ g3 ) = rang1 ∪ rang2 ∪ rang3 = {1} ∪ [0, 2] ∪ {2} = [0, 2], de donde
g1 ∪ g2 ∪ g3 : R −→ R
1 si x < −1,
x 7−→ [g1 ∪ g2 ∪ g3 ](x) = x + 1 si −1 ≤ x ≤ 1,
2 si 2 < x
3
g3
2
g1
g2 1
-3 -2 -1 1 2 3
De esta forma, una función definida por tramos es la unión de sus tramos, teniendo en cuenta
que éstos sean compatibles entre sı́.
[n, n + 1) = R y ran B =
S S S S S
decir, n∈Z fn es función. Además, dom B = domfn =
n∈Z n∈Z
{n} = Z. Por lo tanto, B : R → R tal que, si n ∈ Z y n ≤ x < n + 1,
S S S
ranfn =
n∈Z S n∈Z
entonces [ B](x) = n.
140
f3
3
f2
2
f1
1
-3 -2 -1 f0 1 2 3
f−1
-1
f−2
-2
f−3
-3
S
De esta forma queda definida la función parte entera por tramos. Ası́, se define ⌊x⌋ = [ B](x)
para x ∈ R.
Para terminar esta sección de funciones, veamos el concepto de inversas laterales de una función.
f −1 : R+ −→ R
x 7−→ f −1 (x) = ln x
141
si consideramos g : (−∞, 0] → R tal que ∀x∈(−∞,0] (g(x) = 0) entonces
f ∪ g : R −→ R
ln x si x > 0,
x 7−→ [f ∪ g](x) =
0 si x ≤ 0.
es inversa a izquierda de f (ver la prueba del Teorema 3.21(c)), pero no es inversa a derecha,
pues, por ejemplo, f ([f ∪ g](−1)) = f (0) = 1 6= IR (−1).
También se puede decir que f : R → R+ , en cuyo caso es sobreyectiva y f −1 se convierte en
inversa a izquierda y a derecha.
(2) Es claro que la función sen : R → [−1, 1] es sobreyectiva, pero no es inyectiva, de donde
no es invertible. Sin embargo, la función1 arc sen : [−1, 1] → R se considera como una “in-
versa” de sen. Esto es porque arc sen es inversa a derecha de sen, pues, para y ∈ [−1, 1],
sen(arc sen(y)) = y = I[−1,1] (y). Por otra parte, arc sen no es inversa a izquierda de sen, por
ejemplo, arc sen(sen(π)) = arc sen(0) = 0 6= π.
El siguiente resultado refleja algunas situaciones que se presentan en los ejemplos anteriores.
142
y h = f −1 ∪ g. Como domf −1 ∩ rang = ∅, entonces f −1 y g son compatibles. Luego, del
Teorema 3.17, se sigue que h es función, más aún,
h : B −→ A
f −1 (y) si y ∈ ranf ,
y 7−→ h(y) =
d si y ∈ B r ranf .
En el Teorema 3.21, (c) es un recı́proco de (a) cuando el dominio de f es no vacı́o. Sin embargo,
el recı́proco de (b) no se puede probar en ZF para todos los casos. De hecho, dicho recı́proco es una
afirmación equivalente al Axioma de Elección.
El siguiente resultado ofrece una técnica para demostrar que una función es biyectiva sin recurrir
a la definición, más aún, permite determinar su inversa.
Demostración. Dado que g es inversa a izquierda y a derecha de f , del Teorema 3.21 se sigue que
f es biyectiva. Luego,
f −1 = f −1 ◦ IB Ejercicio 4.29
= f −1 ◦ (f ◦ g) g inv. a derecha
= (f −1 ◦ f ) ◦ g Teorema 1.15
= IA ◦ g Teorema 3.12
=g Ejercicio 4.29.
4.17 Ejercicio. Sea f una función. Entonces (d) f : domf → ranf y es sobreyectiva.
(a) ranf = {f (x) / x ∈ domf }. 4.18 Ejercicio. Sea f : A → B. Demuestre:
(b) ranf ⊆ B ⇔ ∀x∈domf (f (x) ∈ B). (a) Si ranf ⊆ D entonces f : A → D.
(c) B ⊆ ranf ⇔ ∀y∈B ∃x∈domf (y = f (x)). (b) f : A → ranf y es sobreyectiva.
143
(c) Si B ⊆ C, entonces f : A → C. 4.26 Ejercicio. Sea f una función. Pruebe que
4.19 Ejercicio. Sea f un función. Pruebe la equiva- (a) Si domf = {a} entonces f es inyectiva.
lencia entre las siguientes afirmaciones. (b) Si domf = ∅ entonces f es inyectiva.
(i) f = ∅. (c) Si ranf = ∅ entonces f es inyectiva.
(ii) domf = ∅. (d) Si f no es inyectiva, entonces domf 6= ∅ y
ranf 6= ∅.
(iii) ranf = ∅.
(e) Si f : A → B y B = ∅, entonces f es sobre.
(iv) ∀B (f : ∅ → B).
(f) Si f : A → B no es sobre, entonces B 6= ∅.
4.20 Ejercicio. Si A 6= ∅, pruebe que no existe
f : A → ∅. 4.27 Ejercicio. Sea R una relación. Demuestre:
(a) ρ2 = (x, y), y / (x, y) ∈ R cumple ρ2 :
4.21 Ejercicio. Si f : A → ∅, pruebe que A = ∅ y
R → ranR y ∀x,y ((x, y) ∈ R ⇒ ρ2 (x, y) = y).
f = ∅.
(b) ∀z∈R (z = (ρ1 (z), ρ2 (z))).
4.22 Ejercicio. Pruebe el siguiente recı́proco del
Teorema 3.5: si t(x) es un término y (c) Sean ρ′1 : R−1 → domR−1 y ρ′2 : R−1 →
ranR−1 proyecciones. Entonces ρ′1 = ρ2 y ρ′2 =
f : A −→ B ρ1 .
x 7−→ f (x) = t(x) (d) ρ2 es sobreyectiva.
entonces f = {(x, t(x)) / x ∈ A} y ∀x∈A (t(x) ∈ (e) R es función si y solo si ρ1 es inyectiva.
B). (f) R−1 es función si y solo si ρ2 es inyectiva.
4.23 Ejercicio. Sea t(x) un término tal que (g) R es función inyectiva si y solo si ρ1 y ρ2 son
∀x∈A (t(x) ∈ B). Pruebe que existe una única f tal inyectivas.
que
f : A −→ B 4.28 Ejercicio. Sean f : X → A y g : X → B.
x 7−→ f (x) = t(x) Justifique que se puede definir la función
144
(c) Si f : A → B y g : B → C son biyectivas, (f) Si B ∩ D = ∅ entonces f y g son biyectivas si y
entonces g ◦ f : A → C es biyectiva. solo si f ∪ g es biyectiva.
(d) Si f : A → B, g : B → C y g ◦ f : A → C es 4.36 Ejercicio. Pruebe ¬∃Y ∀f (f función ⇒ f ∈
sobre, entonces g es sobre. Y ). Con esto, pruebe que {f / f función} es clase
4.33 Ejercicio. Sean f y g funciones. propia.
(a) f y g son compatibles si y solo si domf ∩domg = 4.37 Ejercicio. Dados A y B conjuntos, defina
A
dom(f ∩ g). B = {f / f : A → B}. Pruebe que
(b) Si f ⊆ g entonces f y g son compatibles. (a) Si f : A → B entonces f ⊆ A × B.
(c) Si f ⊆ g ∨ g ⊆ f entonces f y g son compati- (b) A
B ⊆ P(A × B).
bles. A
(c) B es conjunto.
4.34 Ejercicio. Decimos que B es una cadena de ∅
(d) B = {∅}.
funciones si B es un conjunto de funciones tal que
∀f,g∈B (f ⊆ g ∨ g ⊆ f ). Pruebe que (e) ∅
∅ = {∅}.
(a) Toda cadena de funciones es un sistema compat- (f) Si A 6= ∅, entonces A ∅ = ∅.
ible de funciones.
4.38 Ejercicio. Sea f : A → B. Pruebe que
(b) Si B es una cadena de funciones inyectivas, es
decir, B es una cadena de funciones
S tal que (a) Toda inversa a izquierda de f es sobre.
∀f ∈B (f uno-a-uno), entonces B es función y
(b) Toda inversa a derecha de f es inyectiva.
es inyectiva.
(c) Si f es biyectiva y g : B → A es inversa a
4.35 Ejercicio. Sea f : A → B y g : C → D com-
izquierda de f , entonces g = f −1 .
patibles. Pruebe que
(d) Si f es biyectiva y g : B → A es inversa a
(a) f ∪ g : A ∪ C → B ∪ D.
derecha de f , entonces g = f −1 .
(b) Si B ∩ D = ∅ entonces A ∩ C = ∅.
(e) Si g : B → A es inversa a izquierda de f y
(c) Si B ∩ D = ∅ entonces f y g son inyectivas si y h : B → A es inversa a derecha de f , entonces
solo si f ∪ g es inyectiva. f es biyectiva y g = h. Más aún, g = h = f −1
(d) Si f y g son sobre, entonces f ∪ g es sobre.
4.39 Ejercicio. Sean f : A → B y g : B → A tal
(e) Si B ∩ D = ∅ y f ∪ g es sobre, entonces f y g que ∀x∈A ∀y∈B (y = f (x) ⇔ x = g(y)). Pruebe que
son sobre. f es biyectiva, invertible y g = f −1 .
En esta sección estudiamos una notación especial para determinar el comportamiento de los
conjuntos respecto a la acción de una relación o una función. Los siguientes conceptos serán el
centro de este análisis.
145
Los conceptos anteriores se aplican, por lo general, cuando R es una relación y A ⊆ domR. En
este caso, R↾A es una relación que se comporta como R, sólo que limita su dominio al conjunto A.
R
domR ranR
R↾A
A
R[A] representa el subconjunto de ranR sobre el cual se proyecta el conjunto A mediante la relación
R.
R
domR ranR
A R[A]
Por último, R−1 [B] representa el conjunto de preimágenes de objetos en B bajo la relación R.
R
domR B
R−1 [B]
146
(e) ran(R↾A) = R[A].
(g) R−1 [B] = (R−1 )[B] (la imagen directa bajo R−1 ).
Demostración. (a) Si z ∈ R↾A entonces existen x y y tal que z = (x, y), x ∈ A y (x, y) ∈ R. Por
lo tanto, z ∈ R.
(e)
y ∈ ran(R↾A) ⇔ ∃x ((x, y) ∈ R↾A) Def. ran
⇔ ∃x (x ∈ A ∧ (x, y) ∈ R) Def. 4.1
⇔ ∃x∈A ((x, y) ∈ R)
⇔ y ∈ R[A] Def. 4.1.
(g) R−1 [B] = {x / ∃y∈B ((x, y) ∈ R)} = x / ∃y∈B ((y, x) ∈ R−1 ) = (R−1 )[B].
Las nociones de la Definición 4.1 adquieren una forma alternativa cuando se trata de funciones.
f↾A : A −→ f [A]
x 7−→ [f↾A](x) = f (x)
y es sobre.
147
Demostración. (a) Del Lema 4.2, f↾A ⊆ f de donde, por el Ejercicio 4.24, f↾A es una función y
∀x∈dom(f↾A) ([f ↾A](x) = f (x)). Además, del Lema 4.2, dom(f ↾A) = A y ran(f ↾A) = f [A],
por lo cual
f↾A : A −→ f [A]
x 7−→ [f↾A](x) = f (x)
y es sobre.
(c)
x ∈ f −1 [B] ⇔ ∃y∈B ((x, y) ∈ f ) Def. 4.1
⇔ ∃y∈B (x ∈ domf ∧ y = f (x)) Lema 3.2
⇔ x ∈ domf ∧ ∃y∈B (y = f (x))
∃y
⇔ x ∈ domf ∧ y=f (x)
(y ∈ B)
⇔ x ∈ domf ∧ f (x) ∈ B
Los conceptos de la Definición 4.1 también permiten determinar muchos aspectos sobre la com-
posición de relaciones.
148
Demostración. (a)
(d) Como dom(S ◦ R) ⊆ domR (por Teorema 1.15), del Ejercicio 4.40 se sigue que ran(S ◦ R) =
(S ◦ R)[domR]. Del mismo Ejercicio y (a), (S ◦ R)[domR] = S[R[domR]] = S[ranR], de
donde el resultado se sigue directamente.
4.6 Teorema. (a) R[A ∪ B] = R[A] ∪ R[B]. (g) R−1 [A ∩ B] ⊆ R−1 [A] ∩ R−1 [B].
S S
(b) R[ A] = R[X]. (h) R−1 [ A] ⊆
T T −1
R [X].
X∈A X∈A
(c) R−1 [A ∪ B] = R−1 [A] ∪ R−1 [B]. (i) R[A] r R[B] ⊆ R[A r B].
(d) R−1 [ A] =
S S −1
R [X]. (j) R−1 [A] r R−1 [B] ⊆ R−1 [A r B].
X∈A
Demostración. (b)
S
y ∈ R[ A] ⇔ ∃x∈S A ((x, y) ∈ R) Def. 4.1
S
⇔ ∃x (x ∈ A ∧ (x, y) ∈ R)
⇔ ∃x (∃X∈A (x ∈ X) ∧ (x, y) ∈ R)
⇔ ∃x ∃X∈A (x ∈ X ∧ (x, y) ∈ R)
⇔ ∃X∈A ∃x (x ∈ X ∧ (x, y) ∈ R)
⇔ ∃X∈A ∃x∈X ((x, y) ∈ R)
⇔ ∃X∈AS (y ∈ R[X]) Def. 4.1
⇔y∈ R[X]
X∈A
S S
(a) Por (b), R[A ∪ B] = R[ {A, B}] = R[X] = R[A] ∪ R[B].
X∈{A,B}
149
(c) Directo de (a) al tomar imagen directa de R−1 .
(k) Si x ∈ A ∩ domR entonces x ∈ A y existe un y tal que (x, y) ∈ R. Luego, y ∈ R[A], de donde
∃y∈R[A] ((x, y) ∈ R). Por lo tanto, x ∈ R−1 [R[A]].
El resultado anterior dice que las imágenes directa e inversa son distributivas respecto a la unión,
mas no necesariamente respecto a la intersección y diferencia. Pero, cuando se trata de la imagen
inversa de una función, se satisface dicha distributividad.
(a) Si A 6= ∅ entonces f −1 [ A] =
T T −1
f [X].
X∈A
(d) f [f −1 [B]] ⊆ B.
x ∈ f −1 [ A] ⇔ x ∈ domf ∧ f (x) ∈ A
T T
Teorema 4.3
⇔ x ∈ domf ∧ ∀X∈A (f (x) ∈ X)
⇔ ∀X∈A (x ∈ domf ∧ f (x) ∈ X) porque A 6= ∅
⇔ ∀X∈AT(x ∈ f −1 [X]) Teorema 4.3
⇔x∈ f −1 [X]
X∈A
150
(b) Por (a), f −1 [A ∩ B] = f −1 [ {A, B}] = f −1 [X] = f −1 [A] ∩ f −1 [B].
T T
X∈{A,B}
151
4.47 Ejercicio. Sea f una función inyectiva. Pruebe G : P(B) −→ P(A)
que Y 7−→ G(Y ) = f −1 [Y ]
(a) f↾A es inyectiva.
(b) Si A 6= ∅, entonces f [ A] =
T T
f [X].
X∈A (b) Si f es inyectiva entonces F es inyectiva y G es
(c) f [A ∩ B] = f [A] ∩ f [B]. inversa a izquierda de F .
(d) f [A r B] = f [A] r f [B].
(e) Si A ⊆ domf , entonces f −1 [f [A]] = A. (c) Si f es sobre entonces G es inyectiva y F es in-
4.48 Ejercicio. Sea f : A → B. Demuestre: versa a izquierda de G.
152
BIBLIOGRAFÍA
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1985.
[Je02] Jech, T. Set Theory. 3rd millenium edition, revised and expandend (monographs in mathe-
matics), Springer, 2002.
[Ka96] Kanamori, Akihiro. The Mathematical Development of Set Theory from Cantor to Cohen.
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