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Vías de comunicación

Transporte Terrestre

El Perú cuenta con un sistema de transporte terrestre


por medio de carreteras que conecta todas las
capitales de departamento, lo suficiente para que un
ciudadano se pueda movilizar con su vehículo a las
principales ciudades de este país, aunque con respecto
al transportarse por medio de trenes eso todavía no
está muy avanzado dada la difícil geografía de su
territorio.

La red vial en el Perú está compuesta por más de


78.000 km de carreteras, organizada en tres grandes
grupos: las carreteras longitudinales, las carreteras de
penetración y las carreteras de enlace. Una característica de las carreteras del Perú con respecto
a la de otros países no solo de Sudamérica sino del mundo es la falta se señalización y la falta de
nombres a las carreteras.

Estado de carreteras:

Este es el estado de las carreteras del Perú , ordenadas según la región natural:

Carreteras en la Costa: de regular calidad, poca señalización y mayormente con los servicios de
infraestructura básicas.

Carreteras en la Sierra: mayormente muy complicado debido a lo agreste de la geografía, a pesar


de esto cuenta con buenos servicios que mantienen una presencia notoria de la carretera.

Carreteras en la Selva: las carreteras en esta región son algo escasas ya que la selva es muy densa
y existen demasiados ríos, algunas veces tan grandes que seria imposible atravesarlos por un
puente.

Red ferroviaria

La red ferroviaria del Perú es muy pobre en


infraestructura, ya que cuenta con tan solo 1691 km. La
red ferroviaria peruana está compuesta por tres
ferrocarriles:

Ferrocarril del Centro: este ferrocarril de de uso


comercial. Su concesionario es la empresa "Ferrovías
Central Andina", este ferrocarril es el principal medio de
transporte de productos minerales del centro del país, ya
que recorre importantes centros mineros de los departamentos de Pasco , Junín y Lima . Sus
puntos de embarque son: estación de Cerro de Pasco y la estación de La Oroya.
La Red Ferroviaria del Sur tiene los siguientes tramos:

Tramo sur: para el transporte de pasajeros cubre las rutas entre Arequipa y Cusco.

Tramo Sur-Oriente; este ferrocarril y tramo opera entre Cuzco y Machu Picchu con 160 km
aproximadamente..

Ferrocarril Toquepala-Ilo: este ferrocarril es de uso netamente minero y pertenece a la Southern


Perú, tiene una longitud de 240 km, y une las localidades de Ilo, Toquepala y Cuajone.

Ferrocarril Tacna-Arica: este es actualmente un ferrocarril internacional, con unos 70 km, que
comunica a la ciudad de Tacna con el puerto chileno de Arica.

Transporte Aéreo

El transporte aéreo del Perú recibe gran cantidad de turistas provenientes de Sudámerica hasta
los lugares más recónditos del mundo.

Aeropuertos

Sin duda alguna el principal y más importante aeropuerto


del Perú es el Aeropuerto Internacional Jorge Chávez
ubicada en el Callao.

El Perú cuenta a parte de los aeropuertos controlados por


empresas privadas, aeropuertos que fueron construidos y
son utilizados por el Ministerio de Defensa del Perú,
especialmente por las fuerzas armadas.

En el Perú existen dos tipos de aeropuertos, las que se


mencionan a continuación:

Aeropuertos Internacionales: son los aeropuertos de donde vienen y salen los vuelos hacia todo
el mundo o algunas zonas cercanas. En este país actualmente hay cinco aeropuertos
funcionando como internacionales que son los siguientes: El aeropuerto de Lima en la capital ,
los de Cuzco y Arequipa en el sur y los de Iquitos y Pucallpa en el oriente.

Transporte Portuario

En este tipo de transporte están incluidos todos los medios de transporte que circulan por
el mar , ríos y lagos.

Puertos

El total de puertos existentes y activos en el país es de 24, de los cuales 19 son marítimos, 4
fluviales y 1 lacustre; y según el sistema de atraque se dividen en puertos de atraque directo y
lanchonaje. Los puertos peruanos están bajo la administración de la Empresa Nacional de
Puertos S.A. (ENAPU PERÚ), entidad descentralizada del Ministerio de Transportes y
Comunicaciones del Perú.
El agua en el Perú

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), ubica al Perú
a nivel mundial en el puesto 17, en relación con la cantidad de agua disponible por persona y el
Banco Mundial en el puesto 14 en acceso al agua a nivel de América Latina.

Según datos del Ministerio del Ambiente el Perú cuenta con 106 cuencas hidrográficas por las
que escurren 2 046 287 millones de metros cúbicos al año (MMC). Así mismo, cuenta con 12,200
lagunas en la sierra y más de 1,007 ríos.

Sin embargo, por acción de la naturaleza, la distribución de los recursos hídricos es muy desigual.

En la vertiente amazónica reside el 26 por


ciento de la población y cuenta con 97.7 por
ciento de agua mientras que en la vertiente
del Pacífico reside el 70 por ciento de la
población y cuenta tan solo con el 1.8 por
ciento de agua. Es en la costa donde se halla
concentrada la actividad agroexportadora
con altos requerimientos de agua.

En la vertiente del Titicaca reside el 4 por


ciento de la población y cuenta con el 0.5 por
ciento de agua.

Aguas residuales

En cuanto aguas residuales, Lima libera el 66 por ciento de volumen anual nacional de aguas
residuales sin tratamiento

Según la Superintendencia Nacional de Servicios de Saneamiento a nivel nacional solo el 32.7


por ciento de las aguas residuales reciben tratamiento.

Abastecimiento de agua

En el 2011, el 76,2 por ciento de los hogares se abastecían de agua para consumo humano
proveniente del sistema de conexión a red pública y pilón de uso público. Sin embargo, aún
existe un 23,8 por ciento de hogares que consumen agua proveniente de camión cisterna, pozo,
agua de río u otra modalidad.

De acuerdo con el área de residencia y región natural, los hogares de Lima Metropolitana
(93,2%), del área urbana (90,3%) y de la costa (89,4 %) son los que acceden en mayor medida al
agua proveniente por red pública.

En cambio, los hogares del área rural (38,6 %) y de la selva (55 %) presentan los menores
porcentajes de acceso al agua proveniente por red pública.

Escasez y despilfarro

A pesar de la riqueza hídrica peruana, el agua cada vez se está convirtiendo en un recurso escaso,
debido a diferentes factores como la deforestación, el mal uso del agua y el calentamiento
global. Se prevé que en el 2030 el Perú empezará a sentir seriamente los estragos de la falta de
agua
Mientras tanto las ciudades siguen creciendo, la agricultura se ve potenciada con Proyectos
Agroexportadores y la expansión industrial, prevista en los tratados de libre comercio indican
una demanda de agua cada vez mayor.

Por otro lado Sedapal informó que en Lima 720 mil personas carecen de agua potable en sus
hogares y sin embargo pocos toman conciencia del despilfarro que se hace de este recurso. Cada
día un limeño gasta o consume 251 litros de agua, exactamente el doble que lo que un francés
o un Suizo usa en el mismo periodo.

Agua y cambio climático

El cambio climático ha ocasionado el incremento de la temperatura que trae como consecuencia


un gran impacto en el abastecimiento del agua potable, especialmente en la región costera del
Perú. Claro ejemplo de esto es lo que sucede en el nevado Pastoruri.

El país tiene el 77 por ciento de los glaciales tropicales del mundo, cuyas aguas en su mayoría
recorren la franja costera para el provecho de la agricultura y la población que se asienta en
dicha región.

Sector eléctrico en el Perú

El sector eléctrico en el Perú ha experimentado sorprendentes mejoras en los últimos 15 años.


El acceso a la electricidad ha crecido del 45% en 1990 al 88.8% en junio de 2011,a la vez que
mejoró la calidad y la eficacia de la prestación del servicio. Estas mejoras fueron posibles gracias
a las privatizaciones posteriores a las reformas iniciadas en 1992. Al mismo tiempo, las tarifas
de electricidad han permanecido en consonancia con el promedio de América Latina.

Sin embargo, aún quedan muchos retos. Los principales son el bajo nivel de acceso en las áreas
rurales y el potencial sin explotar de algunas energías renovables, en concreto la energía
hidroeléctrica, la energía eólica y la energía solar. El marco regulador de energías renovables
incentiva estas tecnologías pero en volúmenes muy limitados ya que una mayor oferta implicaría
un aumento en el costo de la energía del país.

La capacidad actual de generación de electricidad está dividida de manera uniforme entre las
fuentes de energía térmica e hidroeléctrica. El renovado y reciente dinamismo del sector
eléctrico del país se basa en el cambio por plantas a gas natural, fomentado por la producción
del campo de gas de Camisea en la selva amazónica.

El Sistema Eléctrico Interconectado Nacional


(SEIN) abastece al 85% de la población
conectada, con varios sistemas “aislados” que
cubren el resto del país. A pesar de que la
inversión en generación, transmisión y
distribución en las áreas urbanas es
principalmente privada, los recursos para la
electrificación rural provienen únicamente de
recursos públicos
Prevención y Mitigación del Riesgo

La prevención y mitigación del riesgo es el conjunto de acciones que se toman para asegurar que
no suceda un desastre cuando se manifiesta un evento natural o antrópico, o si éste sucede que
no perjudique con toda la intensidad que podría hacerlo si no se hubieran tomado medidas
preventivas con anterioridad.

La mayoría de los fenómenos naturales no pueden impedirse, pero si se pueden reducir los
daños que ellos pudieran causar; por ejemplo en el caso de los sismos si se construyen casas de
acuerdo a las normas sismoresistentes y en lugares donde el suelo haya tenido un estudio
previo, no colapsarían las viviendas, evitando así pérdidas tanto humanas como materiales.

Prevención de Riesgos

Medidas y acciones dispuestas con anticipación que buscan prevenir nuevos riesgos o impedir
que aparezcan. Significa trabajar en torno a las amenazas y las vulnerabilidades probables. Visto
de esta manera, la prevención de riesgos se refiere a la Gestión Prospectiva del riesgo, mientras
que la mitigación o reducción de riesgos se refiere a la Gestión Correctiva.

Gestión prospectiva

Es el proceso a través del cual se adoptan con anticipación medidas o acciones en la planificación
del desarrollo, que promueven la cogeneración de nuevas vulnerabilidades o peligros. La gestión
prospectiva se desarrolla en función del riesgo “aún no existente”, que podría crearse en la
ejecución de futuras iniciativas de inversión y desarrollo.

Se concreta a través de regulaciones, inversiones públicas o privadas, planes de desarrollo o


planes de ordenamiento territorial. Hacer prospección implica analizar el riesgo a futuro para la
propia inversión y para terceros, y definir el nivel de riesgo aceptable.Una población será más o
menos vulnerable dependiendo del estado de sus asentamientos humanos y su infraestructura,
la manera que la administración pública y las políticas manejan la gestión de riesgo y el nivel de
información y educación de que dispone la sociedad sobre los riesgos existentes y cómo debe
enfrentarlos.

Mitigación de riesgos

Ejecución de medidas de intervención dirigidas a reducir o disminuir el riesgo existente. La


mitigación asume que en muchas circunstancias no es posible, ni factible, controlar totalmente
el riesgo existente; es decir, que en muchos casos no es posible impedir o evitar totalmente los
daños y sus consecuencias, sino más bien reducirlos a niveles aceptables y factibles. La
mitigación de riegos de desastre puede operar en el contexto de la reducción o eliminación de
riesgos existentes, o aceptar estos riesgos y, a través de los preparativos, los sistemas de alerta,
entre otros, buscar disminuir las pérdidas y daños que ocurrirían con la incidencia de un
fenómeno peligroso. Así, las medidas de mitigación o reducción que se adoptan en forma
anticipada a la manifestación de un fenómeno físico tienen el fin de:

a) Evitar que se presente un fenómeno peligroso, reducir su peligrosidad o evitar la exposición


de los elementos ante el mismo.

b) Disminuir sus efectos sobre la población, la infraestructura, los bienes y servicios, reduciendo
la vulnerabilidad que exhiben.
Análisis

La seguridad vial en el Perú es un problema complejo que está en crisis y se debe actuar
en cuatro frentes: la infraestructura, la institucionalidad, el equipamiento del parque
automotor y el comportamiento humano para combatirlo
La red vial en el Perú es muy importante ya que gracias a estas vías se puede unir varios
departamentos y así también se puede compartir la cultura y fomentar el desarrollo,
pero todas las carreteras no están en perfectas condiciones por ello puede que afecte
a algunas ciudades en algunos aspectos como el intercambio comercial y el desarrollo
educativo.
Las vías de comunicación como las carreteras influyen mucho para el desarrollo de todo
el país, sin embargo vemos que en varias ciudades del Perú no hacen nada al respecto,
las autoridades e instituciones competentes.
Para el crecimiento del país, las vías de comunicación como : carreteras ,autopistas etc.
hacen que distintas ciudades del Perú puedan comunicarse rápidamente sobre todo el
comercio ,se sabe que es rico en flora y fauna y hay muchos atractivos turísticos y
lamentablemente están siendo ignorados por falta de vías de comunicación .
El Perú tiene una red vial compuesta por más de 78 mil kilómetros de carreteras, pero
que solo cerca de 300 kilómetros corresponden a autopistas. Sin embargo, respecto a
países como Argentina y Chile, Perú tiene deficiencias en infraestructura vial y requiere
inversiones anuales de dos mil millones de dólares.
El Perú cuenta con 106 cuencas hidrográficas por las que escurren 2.043.548,26 millones
de metros cúbicos (MMC) al año. Sin embargo, su disponibilidad en el territorio nacional
es irregular, puesto que casi el 70% de todo el agua precipitada se produce entre los
meses de diciembre y marzo, teniéndose épocas de extrema aridez en todo el año y de
abundante lluvia en algunos meses. Además, muchas lagunas han sufrido el impacto de
la contaminación por desechos mineros, agrícolas y urbanos, y el asentamiento de
pueblos o centros recreativos en sus orillas.
Nuestro país cuenta con tres vertientes hidrográficas: la vertiente del Atlántico (genera
97.7% de los recursos hídricos), la vertiente del Pacífico (genera 1.8% de los recursos
hídricos del país) y la vertiente del Lago Titicaca (genera 0.5% de los recursos hídricos
del país). Sin embargo, la población está ubicada en su mayoría en la vertiente del
Pacífico, habiendo un problema en la distribución y el manejo del agua.
El sector eléctrico en el Perú ha experimentado sorprendentes mejoras en los últimos
15 años. Sin embargo, quedan muchas mejoras por hacer como elevar el nivel de acceso
en las áreas rurales y el mayor uso de energías renovables, como la energía
hidroeléctrica, la energía eólica y la energía solar.
La capacidad de generación de electricidad está dividida entre las fuentes de energía
térmica e hidroeléctrica. En el sector eléctrico del país ha habido el cambio de plantas a
gas natural, fomentado por la producción del campo de gas de Camisea.
Impedir que los fenómenos naturales sucedan es imposible, sin embargo lo que sí se
puede hacer es prevenir o mitigar sus efectos para evitar que se conviertan en desastre.
En tal sentido, ante la continua ocurrencia de desastres, se hace cada vez más necesario
que toda la población maneje información y esté consciente de su rol en la prevención
y mitigación de desastres.
La implementación de estrategias de mitigación se puede considerar como parte de un
proceso de recuperación si se aplica después de un desastre.
Las medidas de mitigación pueden ser estructurales o no estructurales. Medidas
estructurales utilizan soluciones tecnológicas, tales como diques contra inundaciones.
Medidas no estructurales incluyen políticas, planeación de uso de tierra. La mitigación
es la metodología más eficiente en términos de costos para reducir el impacto de las
amenazas, sin embargo no siempre es adecuado.
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