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ALUMNOS:
ALVAREZ TORRES ALEX JESUS
CACHA SIFUENTES SONIA JUANA
LLIUYA HUANE ANA
MULLISACA
2017- II
INTRODUCCION
El liderazgo es un tema crucial hoy en día en donde las fronteras se han abierto a la
globalización; donde todos permanentemente se encuentran en una constante lucha por ser
cada vez mejores lo que ha generado que las personas sean eficientes y capaces de dar mucho
de sí para el bienestar de los demás los líderes de hoy, aquellos que logran el éxito y que
orientan a sus subordinados a conseguirlo.
El líder como toda persona posee muchos defectos y virtudes que debe conocer; esto implica
mirar primero dentro de uno mismo, conocerse para luego entender a los demás y reflejar lo
que quiere lograr, lo que busca alcanzar con los demás para conseguir el éxito. Con la
realización del presente trabajo nos llevara a Realizar una identificación y un análisis global del
Líder en estudio.
La esencia del liderazgo son los seguidores. En otras palabras, lo que hace que una persona
sea líder es la disposición de la gente a seguirla. Además, la gente tiende a seguir a quienes
le ofrecen medios para la satisfacción de sus deseos y necesidades. El liderazgo y la
motivación están estrechamente interrelacionados. Si se entiende la motivación, se apreciará
mejor qué desea la gente y la razón de Sus acciones.
OBJETIVOS
El principal objetivo de los líderes es motivar a otros para tomar decisiones y ejecutar acciones
alineadas con la visión de la organización, los objetivos y la estrategia. Esta habilidad, más allá
de las técnicas que deben dominar, es la más intangible y, lamentablemente, la más escasa en
las organizaciones a día de hoy.
Los líderes más impactantes del mundo en todos los ámbitos, desde el empresarial al
gubernamental, han entendido la paradoja de que el liderazgo comienza con el líder, nunca
es sobre el líder. Esta máxima debe ser imitada y aplicada por todos los que aspiran al
liderazgo.
Como líder, se necesita dirigir, ejecutar y conducir, pero el objetivo principal debe ser capacitar
a otros para tomar decisiones y emprender. Pues los resultados, por evidente que
parezca, nunca residen en las habilidades de una sola persona, sino que están siempre
asociados a los resultados de un equipo. Esto requiere un esfuerzo real para potenciar a las
personas o premiar al equipo de forma continua con reconocimiento.
Uno de los primeros compromisos de todo líder es escuchar más que hablar, para que otros se
sientan escuchados y obtener valiosa información. Los líderes siempre deben estar
aprendiendo.
Cuando llegamos a una posición de dirección, por lo general hemos desarrollado importantes
capacidades en el ámbito empresarial, y es cuando se descubren nuevas lecciones que
aprender. Por un lado, como directivo ya no se trata de ti, cuando se actúa se te percibe de
forma diferente debido a la posición y la institución que representas.
Nos damos cuenta de que la gente empieza a interpretar tus estados de ánimo; si uno está
preocupado, distraído o tiene un “día gris”, el equipo empieza a preguntarse si deben
preocuparse también. Rápidamente entendemos que tenemos que transmitir los mensajes de
una manera completamente distinta y transmitir confianza.
LOS LÍDERES
Concepto:
El término Líder proviene del inglés leader, y hace referencia a conducir, guiar, dirigir,
dirigente o jefe. Un líder es el individuo de un grupo que ejerce una mayor influencia en los
demás, se le considera jefe u orientador, éste presenta la habilidad de convencer a otros de
que trabajen con entusiasmo para lograr los objetivos definidos.
En la mayor parte de los grupos (partido político, religioso, sociedad, club deportivo, etc.) existe
un líder, que se caracteriza por ocupar la posición más elevada dentro del grupo.
I.- LIDERES MUNDIALES
Nelson Rolihlahla Mandela nació el 18 de julio de 1918, fue un abogado, político y filántropo
que dedicó su vida a la lucha contra el apartheid, fue el primer presidente negro de su país y
también el primero en ser elegido por sufragio universal. Durante su gobierno se dedicó a
desmontar la estructura social y política basadas en el clasismo a través de la lucha contra el
racismo institucionalizado, la pobreza y la desigualdad social, también promovió la
reconciliación social.
Como nacionalista africano y socialista, presidió el Congreso Nacional Africano (CNA) entre
1991 y 1997, y a nivel internacional fue secretario general del Movimiento de Países No
Alineados entre 1998 y 1999.
Originario del pueblo xhosa y parte de casa real tembu, Mandela estudió en la Universidad de
Fort Hare y la Universidad de Witwatersrand donde estudió Derecho. Cuando residía
en Johannesburgo se involucró en la política anticolonialista, por lo que se unió a las filas del
Congreso Nacional Africano, y posteriormente fundó la Liga Juvenil en la misma organización.
Tras la llegada al poder del Partido Nacional en 1948, ganó protagonismo durante la Campaña
del Desafío de 1952, y fue elegido como presidente regional del Congreso Nacional Africano en
la provincia de Transvaal. Además, presidió el Congreso Popular de 1955. En su ejercicio como
abogado, fue varias veces arrestado por actividades sediciosas y, como parte del liderazgo del
CNA, fue procesado en el Juicio por Traición desde 1956 a 1961. Influenciado por el marxismo,
se unió en secreto al Partido Comunista Sudafricano (SACP) y fue parte de su comité central.
Pese a que estaba a favor de las protestas no violentas, en asociación con la SACP fundó y
comandó la organización guerrillera/terrorista Umkhonto we Sizwe (MK) o «La Lanza de la
Nación» en 1961. En 1962 fue arrestado y acusado de conspiración para derrocar al gobierno,
por lo que fue sentenciado a prisión de por vida durante el Proceso de Rivonia.
Mandela estuvo prisionero durante 27 años, primero en la isla Robben y después en las
prisiones de Pollsmoor y de Víctor Verster. Campañas internacionales abogaron por su
liberación, y fue excarcelado en 1990 en medio de una convulsión social en Sudáfrica. Se unió
a las negociaciones políticas con Frederik de Klerk para abolir el apartheid y establecer
las elecciones generales de 1994, en las que lideró al CNA al triunfo en las urnas por lo que se
convirtió en el primer presidente sudafricano de raza negra. Durante su Gobierno de Unidad
Nacional invitó a otros partidos políticos a unirse a su gabinete, y además se promulgó una
nueva constitución. También creó la comisión para la verdad y la reconciliación para investigar
las violaciones a los derechos humanos cometidos en los años del apartheid. Aunque dio
continuidad a las políticas liberales de gobiernos anteriores, en su administración se
implantaron medidas para una reforma de la propiedad de la tierra, el combate a la pobreza y
la expansión de los servicios de salud. A escala internacional fue mediador entre los gobiernos
de Libia y el Reino Unido en el juicio por el atentado al vuelo 103 de Pan Am, y verificó la
intervención militar en Lesoto. Declinó postularse para un segundo periodo de gobierno, y fue
sucedido en el cargo por Thabo Mbeki. En su retiro de la política se dedicó a obras de caridad
y al combate a la pandemia del Sida a través de la Fundación Nelson Mandela.
Mandela, en palabras de van Engeland y Rudolph (2007), pasó de terrorista a político hasta
llegar a presidente de Sudáfrica (1994-1999), por lo que fue una figura controvertida gran parte
de su vida. Sus críticos le acusaron de ser un comunista y terrorista, pese a que se ganó el
apoyo de la comunidad internacional por su activismo, lo que le hizo acreedor a más de 250
menciones honoríficas y otros galardones, entre ellos el Premio Nobel de la Paz, la Medalla
Presidencial de la Libertad y el Premio Lenin de la Paz. En Sudáfrica es considerado como una
figura de respeto, donde se le conoce con el nombre originario del clan xhosa, Madiba,
o Tata (padre). Se le llama también el Padre de la Nación sudafricana.
1.2- Mao Tse-tung
(Hunan, China, 1893 - Pekín, 1976) Político y estadista chino. Nacido en el seno de
una familia de trabajadores rurales, en el medio donde transcurrió su infancia la
educación escolar sólo era considerada útil en la medida en que pudiera ser aplicada a tareas
como llevar registros y otras propias de la producción agrícola, por lo que a la edad de trece
años Mao Tse-tung hubo de abandonar los estudios para dedicarse de lleno al trabajo en la
granja familiar.
Sin embargo, el joven Mao dejó la casa paterna y entró en la Escuela de Magisterio en
Changsha, donde comenzó a tomar contacto con el pensamiento occidental. Más tarde se
enroló en el Ejército Nacionalista, en el que sirvió durante medio año, tras lo cual regresó a
Changsha y fue nombrado director de una escuela primaria. Más adelante trabajó en
la Universidad de Pekín como bibliotecario ayudante y leyó, entre otros, a Bakunin y
Kropotkin, además de tomar contacto con dos hombres clave de la que habría de ser
la revolución socialista china : Li Dazhao y Chen Duxiu.
Mao Tse-tung
El 4 de mayo de 1919 estalló en Pekín la revuelta estudiantil contra Japón, en la que Mao
Tse-tung tomó parte activa. En 1921 participó en la creación del Partido Comunista, y dos
años más tarde, al formar el partido una alianza con el Partido Nacionalista, Mao quedó como
responsable de organización. De regreso en su Hunan natal, entendió que el sufrimiento de
los campesinos era la fuerza que debía promover el cambio social en el país, idea que
expresó en Encuesta sobre el movimiento campesino en Hunan.
Sin embargo, la alianza con los nacionalistas se quebró, los comunistas y
sus instituciones fueron diezmados y la rebelión campesina, reprimida; junto a un numeroso
contingente de campesinos, Mao huyó a la región montañosa de Jiangxi, desde donde dirigió
una guerra de guerrillas contra Jiang Jieshi, jefe de sus antiguos aliados. El Ejército Rojo,
nombre dado a las milicias del Partido Comunista, logró ocupar alternativamente distintas
regiones rurales del país.
En 1930, la primera esposa de Mao fue asesinada por los nacionalistas, tras lo cual contrajo
nuevo matrimonio con He Zizhen. Al año siguiente se autoproclamó la nueva República
Soviética de China, de la que Mao fue elegido presidente, y desafió al comité de su partido a
abandonar la burocracia de la política urbana y centrar su atención en el campesinado.
Pese a las victorias de Mao en la primera época de la guerra civil, en 1934 Jiang Jieshi
consiguió cercar a las tropas del Ejército Rojo, tras lo cual Mao emprendió la que se conoció
como la Larga Marcha, desde Jiangxi hasta el noroeste chino. Entre tanto, los japoneses
habían invadido el norte del país, lo que motivó una nueva alianza entre comunistas y
nacionalistas para enfrentarse al enemigo común.
Tras la Segunda Guerra Mundial, se reanudó la guerra civil, con la victoria progresiva de los
comunistas. El 1 de octubre de 1949 se proclamó oficialmente la República Popular de China,
con Mao Tse-tung como presidente. Si bien al principio siguió el modelo soviético para la
instauración de una república socialista, con el tiempo fue introduciendo importantes cambios,
como el de dar más importancia a la agricultura que a la industria pesada.
A partir de 1959, dejó su cargo como presidente chino, aunque conservó la presidencia del
partido. Desde este cargo promovió una campaña de educación socialista, en la que destacó
la participación popular masiva como única forma de lograr un verdadero socialismo. Durante
este período, conocido como la Revolución Cultural Proletaria, Mao logró desarticular y luego
reorganizar el partido gracias a la participación de la juventud, a través de la Guardia Roja.
Su filosofía política como estadista quedó reflejada en su libro Los pensamientos del
presidente Mao.
Fidel Castro en La Habana (1961) al inicial apoyo del campesinado pobre había seguido el fin
de las reticencias del Partido Comunista, que abrió la posibilidad de encontrar apoyo en las
ciudades; la dictadura, minada por la corrupción fue incapaz de hacer frente al movimiento
popular. El triunfo militar puso a Castro al frente del gobierno cubano, acumulando los cargos
de primer ministro y comandante en jefe de las Fuerzas Armadas.
Sin pérdida de tiempo empezó a hacer realidad los proyectos de cambio que habían
suministrado una base social a la Revolución: el más importante de todos, la reforma agraria,
que expropiaba las grandes haciendas extranjeras para dar medios de vida a los campesinos
pobres (1959); y, enseguida, la nacionalización de los bienes de compañías norteamericanas
en Cuba (1960).
Ese indudable contenido nacionalista que tuvo en un principio la Revolución cubana (contra
el dominio semicolonial que ejercía Estados Unidos) se transformó dos años después por
la dinámica de enfrentamiento con el gobierno norteamericano. Mientras Castro llamaba a una
revolución general contra el imperialismo en Latinoamérica (Primera declaración de La
Habana), el presidente Eisenhower rompía las relaciones diplomáticas con Cuba y decretaba
un embargo comercial destinado a ahogar la economía cubana y forzar la retirada de Castro,
ya que Cuba dependía casi totalmente de sus exportaciones a Estados Unidos,
fundamentalmente de azúcar (1961). Al sucederle Kennedy no aflojó la presión, sino que se
agudizó con la organización de un desembarco de exiliados cubanos armados en la bahía de
Cochinos, que fue repelido por el ejército revolucionario (1961).
Máximo dirigente de la Alemania nazi (Braunau, Bohemia, 1889 - Berlín, 1945). Hijo de un
aduanero austriaco, su infancia transcurrió en Linz y su juventud en Viena. La formación
de Adolf Hitler fue escasa y autodidacta, pues apenas recibió educación. En Viena (1907-13)
fracasó en su vocación de pintor, malvivió como vagabundo y vio crecer sus prejuicios
racistas ante el espectáculo de una ciudad cosmopolita, cuya vitalidad intelectual y
multicultural le era por completo incomprensible.
Hitler hacia el final de la guerra la política internacional de Hitler fue la clave de su prometida
reconstitución de Alemania, basada en desviar la atención de los conflictos internos hacia
una acción exterior agresiva. Se alineó con la dictadura fascista italiana, con la que intervino
en auxilio de Franco en la Guerra Civil española (1936-39), ensayo general para la posterior
contienda mundial; y completó sus alianzas con la incorporación del Japón en una alianza
antisoviética (Pacto Antikomintern, 1936) hasta formar el Eje Berlín-Roma-Tokyo (1937).
Militarista convencido, Hitler empezó por rearmar al país para hacer respetar sus demandas
por la fuerza (restauración del servicio militar obligatorio en 1935, remilitarización de Renania
en 1936); con ello reactivó la industria alemana, redujo el paro y prácticamente superó
la depresión económica que le había llevado al poder.
Luego, apoyándose en el ideal pangermanista, reclamó la unión de todos los territorios de
habla alemana: primero se retiró de la Sociedad de Naciones, rechazando sus métodos
de arbitraje pacífico (1933); luego forzó el asesinato de Dollfuss (1934) y elAnschluss o
anexión de Austria (1938); a continuación invadió la región checa de los Sudetes y, tras
engañar a la diplomacia occidental prometiendo no tener más ambiciones (Conferencia de
Múnich, 1938), ocupó el resto de Checoslovaquia, la dividió en dos y la sometió a un
protectorado; aún se permitió arrebatar a Lituania el territorio de Memel (1939).
Pero, cuando el conflicto en torno a la ciudad libre de Danzig le llevó a invadir Polonia, Francia
y Gran Bretaña reaccionaron y estalló la Segunda Guerra Mundial (1939-45). Hitler había
preparado sus fuerzas para esta gran confrontación, que según él habría de permitir la
expansión de Alemania hasta lograr la hegemonía mundial (Protocolo Hossbach, 1937); en
previsión del estallido bélico había reforzado su alianza con Italia (Pacto de Acero, 1939) y,
sobre todo, había concluido un Pacto de no-agresión con la Unión Soviética (1939),
acordando con Stalin el reparto de Polonia.
El moderno ejército que había preparado obtuvo brillantes victorias en todos los frentes
durante los primeros años de la guerra, haciendo a Hitler dueño de casi toda Europa mediante
una «guerra relámpago»: ocupó Dinamarca, Noruega, Holanda, Bélgica, Luxemburgo,
Francia, Yugoslavia, Grecia. (mientras que Italia, España, Hungría, Rumania, Bulgaria y
Finlandia eran sus aliadas, y países como Suecia y Suiza declaraban una neutralidad
benévola).
Sólo Gran Bretaña resistió el intento de invasión (batalla aérea de Inglaterra, 1940-41); pero la
suerte de Hitler empezó a cambiar cuando lanzó la invasión de Rusia, respondiendo tanto al
ideal anticomunista básico del nazismo como al proyecto de arrebatar a la «inferior» raza
eslava del este el «espacio vital» que soñaba para engrandecer a Alemania (1941). A partir de
la batalla de Stalingrado (1943), el curso de la guerra se invirtió y las fuerzas soviéticas
comenzaron una contraofensiva que no se detendría hasta tomar Berlín en 1945;
simultáneamente se reabrió el frente occidental con el aporte masivo en hombres
y armas procedente de Estados Unidos (involucrados en la guerra desde 1941), que permitió
el desembarco de Normandía (1944).
Derrotado y fracasados todos sus proyectos, Hitler vio cómo empezaban a abandonarle sus
colaboradores y la propia Alemania era arrasada por los ejércitos aliados; en su limitada visión
del mundo no había sitio para el compromiso o la rendición, de manera que arrastró a su país
hasta la catástrofe y finalmente se suicidó en el búnker de la Cancillería de Berlín donde se
había refugiado, después de haber sacudido al mundo con su sueño de hegemonía mundial
de la «raza» alemana, que provocó una guerra total a escala planetaria y un genocidio sin
precedentes en los campos de concentración.
Sus esfuerzos para traer una solución pacífica al conflicto fueron impedidas por la política
despiadada que Beijing aplicó en Tíbet Oriental, lo que encendió un levantamiento popular
que más tarde se extendió a otros lugares del país. El 10 de Marzo de 1959, en Lhasa, la
capital de Tíbet, estalló la demostración más grande en la historia tibetana, conminando a
China a salir de los territorios ocupados y reafirmando la independencia de Tíbet. Esta
sublevación nacional fue aplastada brutalmente por el ejército chino.
Su Santidad se vio obligado a escapar a la India donde recibió asilo político. Su fuga fue
seguida por 100.000 tibetanos que eligieron vivir en el exilio. Desde 1960 vive en Dharamsala,
India, conocida como "Pequeña Lhasa", sede del gobierno tibetano en el exilio.
En los años tempranos del exilio, Su Santidad apelaba a las Naciones Unidas sobre la
cuestión del Tíbet, lo que resultó en tres resoluciones adoptadas por la Asamblea General en
1959, 1961, y 1965, llamando a China a respetar los derechos humanos de los tibetanos y su
deseo de libre determinación. Con el gobierno tibetano nuevamente constituido, ahora en el
exilio, Su Santidad estableció que su tarea más urgente e inmediata era resolver los
problemas económicos de los exiliados tibetanos y preservar su cultura. Los refugiados se
reubicaron en labores agrícolas y lograron promover el desarrollo económico. Por otra parte
se creó un sistema educativo para que los niños refugiados conservaran el conocimiento de
su lengua, historia, religión y cultura. En 1959 se estableció el Instituto de Artes tibetanos y la
Institución Central de Altos Estudios Tibetanos que llegó a ser una universidad para los
tibetanos exiliados en la India. Se restablecieron sobre 200 monasterios con el fin de
conservar el extenso cuerpo de enseñanzas Budistas, la esencia del modo de vida de los
tibetanos.
En Estrasburgo, Francia, el 15 Junio de 1988, S. S. expuso este plan de Cinco Puntos para la
Paz y propuso la creación de una personalidad gobernante del Tíbet democrático, "en
asociación con el pueblo de la República China". Esta propuesta jamás fue comentada
siquiera por el gobierno chino.
José Gabriel Condorcanqui Noguera llamado igualmente José Gabriel Túpac Amaru
(Surimana, Canas, Virreinato del Perú, 19 de marzo de 1738-Cuzco, 18 de mayo de 1781),
conocido posteriormente como Túpac Amaru II o simplemente Túpac Amaru, fue
un caudillo indígena líder de la mayor rebelión anticolonial que se dio
en Hispanoamérica durante el siglo XVIII. Descendía de Túpac Amaru I (último
Sapa Inca, ejecutado por los españoles en el siglo XVI). Lideró la denominada «Gran rebelión»
que se desarrolló en el Virreinato del Río de la Plata y el Virreinato del Perú, pertenecientes
al Reino de España, rebelión iniciada el 4 de noviembre de 1780 con la captura y posterior
ejecución del corregidor Antonio de Arriaga.3 Curaca (jefe nativo) de Surimana, Tungasuca y
Pampa marca, era adinerado y se dedicaba al comercio. Se trataba de un personaje de origen
mestizo en el que confluía la sangre del Sapa Inca Túpac Amaru con la de los criollos. De
hecho, durante una gran parte de su vida, habiendo sido criado hasta los 12 años por el
sacerdote criollo Antonio López de Sosa y luego en el Colegio San Francisco de Borja, mostró
preferencia por lo criollo llegando a dominar el latín y a utilizar refinadas vestimentas hispanas,4
pero posteriormente se vistió como un noble inca, hizo uso activo de la lengua
nativa quechua en su vida y proclamas, y fue excomulgado de la Iglesia católica. Encabezó el
mayor movimiento de corte indigenista e independentista en el Virreinato del Perú. Fue el
primero en pedir la libertad de toda Hispanoamérica de cualquier dependencia, tanto de España
como de su monarca, implicando esto no sólo la mera separación política sino la eliminación de
diversas formas de explotación indígena (mita minera, reparto de mercancías, obrajes), de los
corregimientos, alcabalas y aduanas (14 de noviembre de 1780). Además decretó
la abolición de la esclavitud negra por primera vez en la misma Hispanoamérica (16 de
noviembre de 1780). Su movimiento constituyó un «parteaguas», debido al cual las autoridades
coloniales eliminaron a la ya escasa clase indígena noble y acrecentaron la represión contra
lo andino por el temor de que algo así se repitiese. En Perú ha sido reconocido como el fundador
de la identidad nacional3 peruana. Fue una figura capital para el régimen velasquista (1968-
1975) y desde entonces ha permanecido reivindicado en el imaginario popular.
ECUADOR. Cuando el conflicto con el Ecuador, el Mariscal Castilla, que tenía un elevado
concepto de Fajardo García, lo escogió para que lo acompañara durante la campaña que
terminó con la ocupación de Guayaquil y el Tratado de Mapazingue. Aquí se cuenta un
episodio protagonizado por Fajardo García, que se encontraba en un establecimiento
comercial cuando entraron dos militares ecuatorianos bravucones y pidieron cigarrillos. Los
que al ser atendidos preguntaron si los cigarrillos eran peruanos, y al contestarles que no,
mirando a Fajardo que les observaba, uno de ellos dijo: "Está bien, porque los peruanos son
demasiado flojos".
Fajardo al oír estas palabras se lanzó como una fiera contra los atrevidos y los abofeteó. Esta
actitud provocó un lance con uno de ellos que era un espadachín famoso y que al ser
ofendido de obra escogió como arma la espada. Fajardo no dominaba la espada, pero
tampoco pensaba caer abatido en el campo del honor, así que toda la noche se la pasó
ensayando, hasta el día siguiente en que se presentó al lugar designado donde después de
ofrecer una violenta lucha, derrotó a su adversario al que poniéndole la punta de su espada
en el pecho exclamó: "Le regalo la vida", a la vez que el derrotado, que sólo esperaba la
muerte, sorprendido por la generosidad de Fajardo García, dio un "Viva el Perú".
Terminada la campaña del Ecuador, Fajardo García pasa al Batallón Puno con el grado de
sargento mayor. Encontrándose como jefe instructor en la provincia de La Mar se entera de
acontecimientos provocados por la escuadra española del almirante Pinzón. No está de
acuerdo con el Tratado Vivanco-Pareja y apenas se entera que en Arequipa el coronel
Mariano Ignacio Prado se había levantado anulando el convenio, Fajardo corre a Ayacucho a
organizar un cuerpo de Ejército: el Batallón Ayacucho, que después fue puesto bajo las
órdenes del coronel Andrés Recharte.
Termina la campaña de Prado y ocupa el poder con el título de dictador y él teniente coronel,
obtuvo en premio de sus servicios la efectividad de su clase con fecha 20-11-1865.
Luego es nombrado subprefecto de La Mar, después pasó a ser subprefecto de la provincia
de Chancay, de Huancayo y de Cangallo sucesivamente. Cuando es creada la provincia litoral
de Huánuco, Fajardo García es nombrado primer prefecto, pero no puede hacerse cargo del
puesto al ser llamado para servir como ayudante de campo del presidente Mariano Ignacio
Prado.
Después fue jefe del Batallón América y jefe del Estado Mayor de la División Centro.
2 DE MAYO de 1866. En febrero de 1965, Castilla fue hecho prisionero por Pezet y fue
desterrado a Gibraltar y luego a Londres. Este hecho influyó poderosamente en el ánimo de la
población, por lo que aparecieron figuras rebeldes de una nueva generación. En Arequipa se
sublevó el prefecto Mariano Ignacio Prado invocando el nombre de Castilla. Fajardo
inmediatamente se plegó al movimiento del coronel Prado, que posteriormente derrocaría al
presidente general Juan Antonio Pezet. Allí, Fajardo obtiene el grado de sargento mayor
efectivo. Ese mismo año, a los 27 años, obtiene el grado de teniente coronel y teniente
coronel efectivo, participando en el conflicto con España y concretamente en el combate del 2
de mayo de 1866 contra la escuadra española.
LA GUERRA CON CHILE. Sin embargo, es en la guerra con Chile que Fajardo García sube a
la gloria conquistando los laureles de la inmortalidad. El coronel Víctor Fajardo partió de Lima
al Callao en tren en marzo de 1879 para trasladarse en el transporte "Limeña" de 2008
toneladas, construido en 1865, hacia la ciudad de Iquique al mando del batallón Cazadores
del Cuzco Nº 5, que estaba de guarnición en Chorrillos, Fuerte de 392 plazas.
El general Juan Buendía después del combate de Piragua, el 15 de noviembre de 1879,
concentró al ejército aliado en Santa Adela, al norte de Pozo Almonte. Víctor Fajardo intervino
en la batalla de San Francisco el 19 de noviembre al frente de su Batallón Cazadores del
Cuzco con 414 soldados. Al reconcentrarse el ejército aliado en Tarapacá, el batallón
Cazadores del Cuzco sólo había perdido 4 hombres. El 27 de noviembre de 1879 combate en
la Batalla de Tarapacá nuevamente al mando de su Batallón Cazadores del Cuzco con 410
efectivos, batiéndose heroicamente como un león hasta conseguir la victoria, apoyando al
Batallón Zepita.
Compartió Fajardo la retirada del ejército y la marcha de Tarapacá al puerto de Arica. Aquí
ascendió a coronel efectivo y se le confió la jefatura del batallón Cazadores del Rímac. Pero
es en el cerro Intiorco, llamado después Alto de la Alianza, en que Fajardo García, que había
peleado durante todo el día, cae herido, pero en un supremo arrebato de valor exclama:
"Adelante, mi anhelo es pasar la próxima revista como presente en la mansión de los
héroes".
En esa oportunidad Fajardo, a pesar de estar herido, siguió luchando, cubriendo la retirada de
los sobrevivientes, hasta que una bala certera le destrozó el corazón. A Fajardo se le
recuerda vestido de gran parada, montaba un alazán inglés que había traído de las salitreras
de Tarapacá, cuando se inició el encuentro. Herido en su caballo, continuó batiéndose a pie
hasta que una bala lo dejó sin vida. Al enterarse de este infortunio los coroneles Belisario
Suárez y Andrés A. Cáceres se acercan presurosamente para asistirlo. Después entregaron a
su hijo, alférez del mismo batallón, en el campo, su cuerpo y anillo de alianza matrimonial. Su
muerte fue muy sentida por todos los oficiales aliados y la tropa ya que era muy querido y
respetado por su valor y capacidad como oficial.
Basadre menciona que el coronel Víctor Fajardo era muy amigo del coronel Andres A.
Cáceres y era su rival en el prestigio como jefe de tropa. Según algunos datos biográficos
extraídos del periódico "Sierra", de la primera quincena de noviembre de 1949, se dice que
"sus soldados lo amaban, porque sabían que era un jefe capaz de sacrificios de todo orden en
servicio de ellos. Los jefes conocían de su gran sentido de la responsabilidad que regía sus
actos. Los compañeros comprendían que su lealtad era invariable", como lo demostró a lo
largo de toda su vida.
2.5 FELIPE GUAMÁN POMA DE AYALA
Felipe Guamán Poma de Ayala; San Cristóbal de Suntuntu, 1534 – Lima, 1615) fue un cronista
peruano. Dedicado a la enseñanza de la lengua castellana a los indígenas, es autor de
una Nueva crónica (c. 1600), compendio de la historia preincaica del Perú, y de su
continuación, Buen gobierno (c. 1615), muestra de las injusticias que los encomenderos y los
funcionarios de la corona infligían a los indios. Concebida como una monumental carta al rey
de España, Felipe II, la obra está ilustrada con dibujos del mismo autor.
Por las noticias autobiográficas contenidas en Nueva crónica y buen gobiernos sabe que era
hijo de Guzmán (o Huamán) Malqui de Ayala y de Juana Curí Oello, hija menor del inca Túpac
Yupanqui. Descendía por lo tanto de los nobles de Huánuco, señores de Chinchaysuyo
anteriores a los mismos incas. Fue educado por su hermano mestizo el padre Martín de Ayala,
quien debió de iniciarle en los estudios clásicos, y trabajó probablemente en la administración.
Desempeñó cargos directivos en los hospitales de Cuzco y Huamanga, y estudió al parecer en
estas dos ciudades.
En 1594 o 1595 fue detenido y desterrado por el corregidor de Lucanas, Antonio de Monroy. De
esta suerte el escritor inició una larga serie de viajes que se prolongó durante unos veinte años
y que le permitirían recoger abundante información para su obra; finalmente, en 1613, volvió a
Huamanga e hizo valer sus derechos al puesto de cacique de la provincia. Atacó además la
política del corregidor, por lo que fue nuevamente expulsado. Se dirigió entonces a Lima, con
la intención de presentar su Nueva crónica al virrey.
Perdido durante siglos, el manuscrito de Nueva crónica y buen gobierno fue encontrado en
1908 en la Biblioteca Real de Copenhague por Richard Pietschmann, quien lo presentó a la
comunidad científica internacional en 1912. Se cree que hubo de ser redactado entre 1567 y
1615, y en su mayor parte entre 1612 y 1615. En 1936 fue publicado en edición facsimilar al
cuidado de Paul Rivet y con una introducción escrita por Richard Pietschmann. El arqueólogo
y antropólogo peruanoJulio C. Tello ensalzó inmediatamente su importancia incomparable: “No
existe libro alguno escrito en este período que pueda competir con él en riqueza de información,
clarividencia y valentía del autor para enjuiciar los acontecimientos de su tiempo”.
El título de Nueva crónica y buen gobierno resulta claramente expresivo de las intenciones del
autor: nueva alude a que trae una óptica diferente a las de las crónicas existentes, nunca
escritas por indios; y buen gobierno a su afán por denunciar el mal gobierno del virreinato de
esos años, en claro contraste con las instituciones prehispánicas, pero también con las
creencias cristianas y los ideales utópicos del humanismo europeo. Su objetivo central es en
efecto ofrecer lo que Wachtel llamó la “visión de los vencidos”. Conectado a él, opera el designio
de enaltecer lo que realizó en el pasado el hombre andino y de instar a su participación digna y
efectiva en un gobierno realmente justo y acorde con el mensaje evangélico: sueña con un rey
propio para el Perú, aunque jerárquicamente inferior al rey de España, señor de todo el globo
terráqueo. Poma de Ayala adopta, como Bartolomé de Las Casas, una firme actitud “indianista”
e “incaica”, la cual, según advierte Estuardo Núñez, revela un vivo espíritu de rebelión y de
justicia, y constituye una franca defensa de los indígenas.
Presentada como una larguísima carta al rey de España, la Nueva crónica reelabora el género
cronístico hasta extremos no conocidos, con la libertad propia de un hombre de gran mestizaje
de lecturas y creencias como es Felipe Guamán Poma de Ayala. Consta de más de mil páginas,
embellecidas por numerosos e ingenuos dibujos, interesantes por sus trajes y por la presencia
de símbolos y perspectivas que expresan la cosmovisión andina. Produce la impresión de una
síntesis enciclopédica que buscara hilvanar en un solo texto lo que hacían por separado las
crónicas, los informes, las demandas de justicia, los tratados sobre política y sobre
evangelización, e incluso las utopías al gusto de humanistas.
La obra resulta de excepcional valor por las noticias que ofrece respecto de la vida anterior al
período incaico, el folklore y las tradiciones y narraciones de la época precolombina. La parte
más importante del libro, en el cual alternan poesías y cantos en pura lengua quechua (cantos
y poesías de amor, para la danza, para la caza, para la recolección de las mieses), se refiere
ante todo a la historia de la época inca y a la de los primeros años de la conquista española. El
autor da la biografía de cada emperador y de sus mujeres, narra sus empresas y habla del
régimen, de las leyes, de las condiciones en que vivían los súbditos, de la religión, de las fiestas
y de las indumentarias de un pueblo que había alcanzado un admirable grado de civilización y
de cultura. Guamán Poma de Ayala conoce también los protagonistas y las noticias referentes
a los acontecimientos que se sucedieron en el Perú después de la llegada de Francisco Pizarro
y de los conquistadores. Dejando de lado las posibles incoherencias históricas, la crónica de
Poma de Ayala proporciona nuevos datos sobre el pasado andino y refleja una visión
descarnada de la sociedad colonial organizada en Perú.
Poma se expresa en una lengua que algunos críticos han calificado de bárbara. La Nueva
crónica y buen gobierno está escrita en una prosa híbrida (la cual será reclamada, tres centurias
después, por Gamaliel Churata como mestizaje idiomático a desarrollar) que inserta en el
español vocablos y recursos idiomáticos del quechua, el aymara y el dialecto del Chinchaysuyo:
maraña verbal que congenia con el sincretismo que intenta entre las creencias andinas y la
cultura europea y cristiana. Su escritura trasluce las modulaciones de un escritor bilingüe que
habla la lengua del colonizador, pero no quiere abandonar del todo la propia. Es probable
también que el autor reflejara la lengua oral de su tiempo, la que hablaba la enorme masa de
analfabetos que formaban la sociedad indígena. Guamán Poma es, sin embargo, un hombre
ilustrado que no desconocía la tradición y el estilo de las crónicas hispánicas. La mezcla de
registros da a su obra ese tono distanciado y extraño que tanto ha cautivado a sus críticos y
lectores
3. LIDERES LOCALES
Nació un 19 de
agosto de 1874 en Chiquián, Ancash, y perteneció a una familia de hacendados, políticos y
montoneros (su padre luchó en las fuerzas caceristas contra Piérola durante la guerra civil y
su abuelo fue alcalde de Chiquián) ¿Cómo se volvió un bandolero tan famoso? Cuenta la
leyenda que fue tras la muerte por traición de su padre, noticia que lo sorprendió a su regreso
a Chiquián tras haber realizado sus estudios en Lima, que el joven Luis Pardo cobró
venganza, acabó con la vida de los asesinos de su padre y dio inicio a su carrera hacia la
fama que lo convirtió en legendario ladrón durante las primeras décadas del siglo XX en los
pueblos de la costa y la sierra norte.
La figura del bandolero justiciero, del Robin Hood peruano, se volvió mitológica. No había
pueblo que no tuviera su propia historia con él, al punto que “Por aquí pasó Luis Pardo” era un
sello que tenía visos de bendición al ser alentado por la tradición oral en cada rincón. La
imagen de Pardo nos recuerda esa necesidad de la figura del líder combativo, precursor,
rondero y, sobre todo, querido por sus nobles objetivos, que todo político y politiquero anhela
hoy por hoy. Tomó la distribución de la riqueza por sus propias manos y fue elevado por
pueblo al culto heroico. Luis Pardo no actuaba en banda, sin embargo cobraba cupos a los
gamonales y hacendados. Murió hace 106 años en una emboscada del ejército y sus
enemigos (para tener una idea de las dimensiones de su persecución). Tenía 35 años y su
juventud y forma de muerte (mientras escapaba a nado por el río) recuerdan al querido Javier
Heraud, poeta joven que muriera a manos del ejército en Madre de Dios. Pardo quiso, como
Javier, una transformación social a la cual dedicó su juventud.
Santiago Ángel de la Paz Antúnez de Mayolo Gomero nació entre dos cordilleras: la Blanca y
la Negra. El 10 de enero de 1887, en la provincia Aija, Ancash, donde se encontró con sus
primeros libros. La secundaria la inició en el centro educativo San Agustín de Huaraz y la
concluyó, en 1904, en el colegio Nuestra Señora de Guadalupe junto a nuestros brillantes
escritores Abraham Valdelomar y Federico More. Fue, en todos los centros que ha estudiado,
un alumno ejemplar.
Cuando estaba en Noruega, en las fábricas de Notodden y Saahein en Rujkan, notó que las
caídas de agua producían riqueza y pensó: "Con esfuerzo y dedicación las caídas en el
Callejón de Huaylas también pueden producir igual o más riqueza". Luego su trabajo
concretaría su pensamiento. No fue un turista, sino viajero interminable por y para el
conocimiento en beneficio de su patria: el Perú. Fue formal en el amor. Primero la boda. El 28
de junio de 1912, en Estados Unidos, se casó con la noruega Lucie Kristiana Rynning.
En 1960, con María Teresa Ramírez Alzamora Cobos, familiar de Claudio Ramfrez Cobos,
quizá, el más grande biógrafo del sabio. De vuelta al Perú, en 1913, laboró en la Compañía
Hidroeléctrica del Cañón del Pato, donde elaboró los proyectos de una central y una fábrica
de fertilizantes. Fue contratado por la Empresa Minera Huallanca en 1914 y luego por las
Empresas Eléctricas Asociadas. En 1923, se doctoró en Ciencia Matemática por la UNMSM
con la tesis "Teoría cinética del potencial newtoniano y algunas aplicaciones a las ciencias
físicas" en la que plantea sus revolucionarias teorías que lo consagraron como sabio.
Luego incursionó en política de manera fugaz. No duró. Lo suyo era la ciencia. Hubo
ocasiones en que fue docente en tres lugares: UNMSM, Escuela de Ingenieros y la Escuela
Nacional de Artes y Oficios. Enseñó, entre otros, Física General, Física Nuclear,
Electroquímica General, Tracción Eléctrica, Centrales Hidroeléctricas. Después de sus clases,
en las tardes, se dedicaba a sus investigaciones en el campo de la física. Forjador de la
patria, apasionado en los misterios del átomo.
Predijo, asimismo, la presencia del electrón positivo en los rayos cósmicos poco antes de que
lo demostrara en laboratorio el norteamericano Carl Anderson (que lo llamó positrón). Para
presentar este trabajo en la Academia de Ciencias de París (vitrina de las investigaciones
científicas en ese tiempo) pidió ayuda al dictador Sánchez Cerro y, por supuesto, le negó un
pasaje. Pero lo envió gracias a Francisco García Calderón, que ocupaba un cargo de
gobierno en ese entonces.
Más tarde, estos descubrimientos revolucionaron la física moderna. Otro que le ayudaba en
ese afán era su amigo Louis de Broglio, Premio Nobel de Física. La característica principal de
la producción intelectual de Antúnez de Mayolo fue su originalidad. Planteó hipótesis
novedosas, abrió nuevas trochas en el conocimiento. Su sabiduría abarcó los campos más
diversos: física, matemática, química, arqueología, historia y más.
Dejó en luto al Perú entero cuando saltó a investigar los misterios de la muerte, en 1967. "La
obra de Dios está escrita en todas partes, pero está escrita en jeroglíficos que hay que saber
descifrar." Escribió el octogenario maestro Luis Jaime Cisneros, el 14 de agosto de 1959, en
el 50 aniversario del sabio: "Los cincuenta años que cumple usted tiene que ser, ciertamente,
para quienes hemos aprendido a admirarlo por su ciencia y a quererlo por su hombría de bien,
acontecimiento que nos enorgullece como peruanos. Siento que la memoria de mi padre
vuelve a recordarme muchas veces que tuvo su nombre listo para exhibírmelo como modelo
de dedicación, de modestia, de patriotismo".
Fue una princesa inca, de la más alta nobleza del Tahuantinsuyo. Su padre fue Huayna Cápac
y su madre la coya Hanan Collque, hija de Huacachillac, el mayor señor del guamani Huaylas.
Nació en un lugar denominado Tocash (Callejón de Huaylas).Hermana de Atahualpa, de
estirpe señorial. Conquistó a dos españoles y se hizo respetar por los chapetones.
“Los Huacachillacs de Huaylas –dice el historiador R. Cúneo-Vidal- representaban por entonces
la más alta nobleza peruana allegada al trono”.
En la “Genealogía de don Melchor Carlos Inga” hallada en el Archivo Nacional de Madrid, se
dice: “Consta de declaraciones como Huayna Cápac tuvo por mujer legítima, según ley, a
Hanan Collque, hija de Hacachillac, el mayor señor de la provincia de Huaylas, el cual, por ser
señor principal, bien pudo casar a su hija con el dicho Emperador. La dicha Hanan Collque,
mujer de Huayna Cápac, andaba en andas y con quitasol, y se llamaba coya, que era nombre
de reina y se daba a las mujeres legítimas de los incas”.
Recreación de Inés Huaylas Yupanqui
Lo que pasó fue que en las últimas décadas del siglo XIV, llegó a ese lugar, en su viaje para
conquistar a los “huaras”, “piscobambas” y “conchucos”, Túpac Inca Yupanqui, quien cumplió
su cometido, aunque con gran esfuerzo y con una formidable tropa que contaba con miles de
soldados, debido a la feroz resistencia que pusieron los habitantes del lado oriental de la
Cordillera Blanca. Entre los trofeos que llevó al Cusco se encontraba la hija de uno de los
curacas. Más tarde, con esa ñusta tuvo Huayna Cápac a una de sus hijas.
En el año 1532 llegaron los hombres de Occidente. Pizarro y su escaso ejército poseían armas
de fuego, caballos, armaduras, espadas y perros amaestrados para cazar hombres. Eran
guerreros recientemente fogueados en la lucha y expulsión de los árabes, de la conquista de
Nueva España, además, firmes creyentes de que eran los elegidos de Dios.
Ayudados por indios huascaristas conquistaron un grandioso imperio apresando a Atahualpa
Inca Yupanqui. La joven ñusta, que pertenecía a la corte del inca prisionero, fue bautizada a los
17 años, recibiendo el nombre de Inés Huaylas Yupanqui.
Francisco Pizarro, luego de la captura y muerte del último emperador Inca en Caxamarca (actual
Cajamarca), en su viaje al Cusco, ingresó a la región Áncash, por la zona de Pallasca. El 23 de
agosto de 1533, cruzó el río Tablachaca con su comitiva integrada por el padre Valverde, de
doña Inés de Huaylas Yupanqui, Diego de Almagro, el nuevo Inca Inti Cussi Túpac Huallpa
Yupanqui, el general Chalcochima,
como prisionero, el secretario del conquistador Pedro Sancho de la Hoz, 400 hombres, miles
de indios auxiliares, negros, moriscos y sus perros. Una larga columna de cargueros indígenas,
les seguía con el oro, la plata y los abastecimientos. El fértil valle de los Huaylas por su
estratégica ubicación geográfica, resultaría paso obligado de los conquistadores.
Y es así que sin confirmarse el dato, el 20 de enero de 1572, día domingo, se fundaría el pueblo
de Huaraz bajo la advocación de San Sebastián, por el capitán Alonso de Santoyo y Valverde.
Huaraz asume en esa fecha la sede del Corregimiento de Huaylas hasta 1784. Entre esa fecha
y 1821, es capital del partido o subdelegación de Huaylas. El 12 de febrero de 1821, por
disposición del Reglamento provisorio de Huaura, con la firma del general José de San Martín,
en plena guerra de Independencia, se convierte en capital del departamento de Huaylas.
EL FUTURO DE DOÑA INÉS
Después de su viaje al Cusco, Pizarro busca en la costa andina un lugar seguro para fundar la
capital de su gobernación. Funda la Ciudad de los Reyes el 18 de enero de 1535 y le da la
categoría de ciudad-capital.
El vínculo con Inés Huaylas facilitó a Pizarro en el Cusco el apoyo de Manco Inca, hermano de
la ñusta, contra los intentos de resistencia de los generales quiteños. No sabemos cómo
reaccionó ella ante las profanaciones y el saqueo de los lugares sagrados incas. Algunas
versiones aseguran que Inés colaboró con la rebelión de Manco Inca en 1536. Incluso se
asegura que Inés facilitó al inca la fuga del Cusco, fuga que permitió a Manco Inca reunir un
ejército y poner sitio a la ciudad. En todo caso, el vínculo con el jefe de la conquista se mantuvo
inalterable hasta el año 1538.
Toribio de Luzuriaga fue el segundo de tres hermanos, hijos del matrimonio formado entre
Manuel de Luzuriaga y Larresta, comerciante vasco natural de Tolosa en Guipúzcoa, y de la
dama huaracina María Mejía de Estrada y Villavicencio, descendiente de una antigua familia
hacendada en el callejón de Huaylas.
Toribio concluyó su educación en Lima y se desempeñó en cargos administrativos en la sede
del gobierno virreinal. Destacado a Santiago de Chile y luego a Buenos Aires llegó a ser
secretario privado del marqués de Avilés.
Inició su carrera militar en el ejército colonial, en el país del Plata, en 1801, como alférez de
artillería. Por su desempeño durante la Defensa de Montevideo y de Buenos Aires de
los ataques de los ingleses en 1806 y 1807, fue ascendido a capitán del Cuerpo de
Voluntarios Artilleros de la Unión.
CONCLUSIONES
Los líderes parecen compartir algunos, sino todos, de las siguientes características.
Conocerse a sí mismo: es la tarea más difícil que una persona se encuentra. El líder
nunca se miente a sí mismo, especialmente sobre sí, sabe sus defectos así como sus
cualidades, y trata con ellos directamente. Cada persona es su propia materia prima.
Cuando sabe de qué consiste y qué quiere hacer con eso, entonces puede inventarse
a sí mismo.
Muchos otras características tienen los líderes: coraje (fuerza interior), moral (valor
para aceptar la responsabilidad), físico (valor para enfrentar los retos), potencia del
intelecto (juicio razonado para la toma de decisiones), captación a primera vista
(capacidad de reconocer una situación rápidamente), determinación (capacidad de
mantener una decisión una vez adoptada).