6. El taylorismo hoy: ¿Arqueología industrial?

Actualmente se pretende propiciar el desarrollo de una línea de investigación y reflexión

en nuestro país que reconstruyera los hechos, la acción del trabajador colectivo que
expliquen los cambios sociales, expectativas y limitaciones de la sociedad.

Un primer paso es propiciar una reflexión sobre el taylorismo. Nadie defiende hoy el
taylorismo, es más, la moda antitaylorista tiene ya cierta solera. La vieja organización
taylorista es rechazada por los trabajadores.

Sin embargo Claude Durand no duda en afirmar que “la organización de las empresas
reposa ampliamente en métodos taylorianos tradicionales que conllevan una división del
trabajo muy profunda entre preparación y ejecución”.

En los últimos diez años se han multiplicado los textos y trabajos que hacen del
taylorismo y su difusión su objeto de análisis y reflexión. Lo que este artículo se
propone es presentar una argumentación: Qué es el taylorismo y cómo puede abordarse
su estudio.

I) Cómo estudiar el taylorismo

Estudiar el dentro y fuera de la fabrica (Bonsái 1982) a partir de la organización del

trabajo. Líneas básicas

a) Una línea de desarrollo tecnológico (historia de la técnica) de introducción y

aplicación de las máquinas polivalentes y genéricas a la difusión de las máquinas
especiales.
b) La línea de la interrelación del desarrollo tecnológico con la historia
económicosocial; las formas de control o disciplina tanto dentro como fuera del
trabajo, modificaciones en las condiciones de trabajo y en los modos de vida.
c) Historia del empresariado, analizando la introducción del taylorismo como una
estrategia de intervención empresarial, como una política.

Lo que nos interesa es sobrepasar los dicho por Taylor, sus seguidores o contradictores,
restaurando las condiciones en las cuales enuncia su doctrina, identificar los principios
implícitos. El principio metodológico que más nos interesa destacar es el de
implantación práctica, cómo y en que forma se implantó, qué piensan y hacen los
trabajadores ante las trasformaciones, cómo les afectan.

II) Qué es el taylorismo

Técnica organizativa de la que puede decirse que “la organización científica del trabajo
nació considerando al hombre como una maquina más”, un hombre medio,
intercambiable y de actividad uniforme.

Al igual que pueden suponerse aspectos biológicos idénticos, existen aspectos

psicológicos comunes a al naturaleza humana. El hombre taylorista es un hombre
económico que busca su beneficio personal actuando en función de conseguir el
máximo lucro individual con el mínimo esfuerzo. Lo que mueve a los trabajadores son
incentivos económicos individuales, pata Taylor la motivación para el beneficio forma
parte de la naturaleza humana y dos elementos muy importantes son la tarea y las
primas. Cada obrero deberá recibir una labor especial aparte para él solo, destruyendo el
poder de los equipos ya automatizando la fuerza de trabajo.

La armonía, si no se halla espontáneamente, se construye: “Un método de disciplinar a

los hombres es desgraciadamente un elemento necesario de todos los sistemas de
dirección”.

Una de las razones de éxito de Taylor es la formulación de principios. Lo fundamental

de la gestión científica es cierta filosofía y una combinación de principios.

Los sindicatos son un elemento cuya capacidad de acción conviene reducir si no puede
prescindirse totalmente de él.

La autoridad del empresario es condición necesaria para llevar la entrega del trabajo a
cotas óptimas.

III) La difusión e implantación

La primera fase, algunas personalidades dedican sus esfuerzos a la propagación de

ideas, se ha de estudiar la difusión de las publicaciones como un condicionante
contrastándolas por otro lado con las críticas contemporáneas.

La segunda fase, de adaptación se caracteriza por el deseo de aplicación práctica, que

los métodos estudiados y propagados sirvan para la restauración rápida de la economía.

La tercera fase, de desbaste o ejecución, conoce una propaganda y enseñanza más

metódica y las aplicaciones un carácter más práctico, orientados, sin embargo, por
problemas más generales. Esta es la etapa de desarrollo de las instituciones, congreso
etc. Donde se resumen los factores positivos y negativos.