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L’OSSERVATORE ROMANO
EDICIÓN SEMANAL EN LENGUA ESPAÑOLA
Unicuique suum Non praevalebunt
Año XLIII, número 27 (2.218) Ciudad del Vaticano 3 de julio de 2011
Fiesta de San Pedro y San Pablo: el Papa celebra su 60º aniversario sacerdotal imponiendo el palio a 41 metropolitanos
En el Ángelus del 29 de junio, en el 60º aniversario de su ordenación sacerdotal, Benedicto XVI agradece las felicitaciones
Agradezco al Señor
su llamada
Queridos hermanos y hermanas: apostólico. Por este motivo, durante
la liturgia celebrada esta mañana en
Perdonad el largo retraso. La misa
la basílica vaticana, impuse a 41 ar-
en honor de los santos Pedro y Pa-
zobispos metropolitanos el palio, que
blo ha sido larga y hermosa. Y he-
manifiesta la comunión con el Obis-
mos meditado también en ese her-
moso himno de la Iglesia de Roma po de Roma en la misión de guiar al
que comienza con las palabras: «O pueblo de Dios a la salvación. Escri-
Roma felix!». Hoy en la solemnidad be san Ireneo, obispo de Lyon, en el
de los santos Pedro y Pablo, patro- siglo II, que en la Iglesia de Roma,
nos de esta ciudad, cantamos así: «propter potentiorem principalitatem»
«Dichosa Roma, porque fuiste em- [por su peculiar principalidad], de-
purpurada por la preciosa sangre de ben converger todas las demás Igle-
estos grandes príncipes. No para tu sias, es decir, los fieles que están en
alabanza, sino por sus méritos ¡supe- todas partes, porque en ella se ha
ras toda belleza!». Como cantan los custodiado siempre la tradición que
himnos de la tradición oriental, los viene de los Apóstoles (Adversus hae- en este día, en el que se cumple el la libertad de anunciar el Evangelio.
dos grandes Apóstoles son las «alas» reses, III, 3, 2). sexagésimo aniversario de mi orde- En este clima, me alegra saludar cor-
del conocimiento de Dios, que han Es la fe profesada por Pedro la nación sacerdotal. Gracias por vues- dialmente a la delegación del Pa-
recorrido la tierra hasta sus confines que constituye el fundamento de la tra presencia, por vuestras oraciones. triarcado ecuménico de Constantino-
y han subido al cielo; son también Iglesia: «Tú eres el Cristo, el Hijo Os doy las gracias a todos vosotros, pla, presente hoy en Roma, siguien-
las «manos» del Evangelio de la del Dios vivo», dice el Evangelio de pero sobre todo doy gracias al Señor do la significativa tradición, para ve-
gracia, los «pies» de la verdad del san Mateo (16, 16). El primado de por su llamada y por el ministerio nerar a los santos Pedro y Pablo y
anuncio, los «ríos» de la sabiduría, Pedro es una predilección divina, co- que me ha confiado, y expreso mi compartir conmigo el anhelo de la
los «brazos» de la cruz (cf. MHN t. mo lo es también la vocación sacer- agradecimiento a todos los que en unidad de los cristianos querida por
5, 1899, p. 385). El testimonio de dotal: «porque eso no te lo ha reve- esta circunstancia me han manifesta-
el Señor. Invoquemos con confianza
amor y de fidelidad de los santos lado ni la carne ni la sangre, —dice do su cercanía y sostienen mi misión
Jesús— sino mi Padre que está en los a la Virgen María, Reina de los
Pedro y Pablo ilumina a los pastores con la oración, que de todas las co-
de la Iglesia, para llevar a los hom- cielos» (Mt 16, 17). Así sucede a munidades eclesiales sube incesante- Apóstoles, para que todo bautizado
bres a la verdad, formándolos en la quien decide responder a la llamada mente hacia Dios (cf. Hch 12, 5), tra- se convierta cada vez más en una
fe en Cristo. San Pedro, en particu- de Dios con la totalidad de la pro- duciéndose en adoración a Cristo «piedra viva» que construya el reino
lar, representa la unidad del colegio pia vida. Lo recuerdo de buen grado Eucaristía para acrecentar la fuerza y de Dios.
Discurso del Papa durante la entrega del «Premio Ratzinger» en su primera edición
Corpus Christi
ocial de la Iglesia
como Jesucristo, miembros de su cuer- el camino que es él mismo. No hay na- ría en el misterio de la Visita-
po, una cosa sola con él. Esta transfor- da de mágico en el cristianismo. No ción. Con la humildad de sa-
mación es decisiva. Precisamente por- hay atajos, sino que todo pasa a través bernos simples granos de trigo,
que es Cristo quien, en la comunión de la lógica humilde y paciente del gra- tenemos la firma certeza de
eucarística, nos transforma en él; nues- no de trigo que muere para dar vida, la que el amor de Dios, encarna-
tra individualidad, en este encuentro, se lógica de la fe que mueve montañas do en Cristo, es más fuerte que
abre, se libera de su egocentrismo y se con la fuerza apacible de Dios. Por es- el mal, que la violencia y que
inserta en la Persona de Jesús, que a su to Dios quiere seguir renovando a la la muerte. Sabemos que Dios
vez está inmersa en la comunión trini- humanidad, la historia y el cosmos a prepara para todos los hom-
taria. De este modo, la Eucaristía, través de esta cadena de transformacio- bres cielos nuevos y una tierra
mientras nos une a Cristo, nos abre nes, de la cual la Eucaristía es el sacra- nueva, donde reinan la paz y
también a los demás, nos hace miem- mento. Mediante el pan y el vino con- la justicia; y en la fe entreve-
bros los unos de los otros: ya no esta- sagrados, en los que está realmente pre- mos el mundo nuevo, que es
sente su Cuerpo y su Sangre, Cristo nuestra patria verdadera. Tam-
nos transforma, asimilándonos a él: bién esta tarde, mientras se po-
Miembros del cuerpo de Cristo, nos implica en su obra de redención, ne el sol sobre nuestra querida
aprendemos del Sacramento del altar haciéndonos capaces, por la gracia ciudad de Roma, nosotros nos
del Espíritu Santo, de vivir según su ponemos en camino: con noso-
que el gesto de compartir, el amor, es el misma lógica de entrega, como gra- tros está Jesús Eucaristía, el
camino de la verdadera justicia nos de trigo unidos a él y en él. Así Resucitado, que dijo: «Yo es-
se siembran y van madurando en los toy con vosotros todos los
surcos de la historia la unidad y la días, hasta el fin de los tiem-
mos divididos, sino que somos uno en paz, que son el fin al que tendemos, se- pos» (Mt 28, 21). ¡Gracias, Se-
él. La comunión eucarística me une a la gún el designio de Dios. ñor Jesús! Gracias por tu fide-
persona que tengo a mi lado, y con la lidad, que sostiene nuestra es-
Caminamos por los senderos del
cual tal vez ni siquiera tengo una bue- mundo sin espejismos, sin utopías ideo- peranza. Quédate con nosotros, porque aliméntanos, defiéndenos, llévanos a los
na relación, y también a los hermanos lógicas, llevando dentro de nosotros el ya es de noche. «Buen pastor, pan ver- bienes eternos en la tierra de los vi-
lejanos, en todas las partes del mundo. Cuerpo del Señor, como la Virgen Ma- dadero, oh Jesús, piedad de nosotros: vos». Amén.
De aquí, de la Eucaristía, deriva, por
tanto, el sentido profundo de la presen-
cia social de la Iglesia, come lo testi-
monian los grandes santos sociales, que
han sido siempre grandes almas euca- En el Ángelus del domingo 26 de junio el Papa recuerda en la Eucaristía el corazón palpitante de la Iglesia
rísticas. Quien reconoce a Jesús en la
Hostia santa, lo reconoce en el herma-
no que sufre, que tiene hambre y sed,
que es extranjero, que está desnudo,
Antídoto contra el individualismo
enfermo o en la cárcel; y está atento a
Queridos hermanos y hermanas: meros cristianos, en Jerusalén, eran un signo evidente de
cada persona, se compromete, de forma este nuevo estilo de vida, porque vivían en fraternidad y
concreta, en favor de todos aquellos Hoy, en Italia y en otros países, se celebra el Corpus
ponían en común sus bienes, para que nadie fuese indigen-
que padecen necesidad. Del don de Christi, la fiesta de la Eucaristía, el Sacramento del Cuerpo te (cf. Hch 2, 42-47). ¿De qué derivaba todo esto? De la
amor de Cristo proviene, por tanto, y la Sangre del Señor, que él instituyó en la Última Cena y Eucaristía, es decir, de Cristo resucitado, realmente presen-
nuestra responsabilidad especial de que constituye el tesoro más precioso de la Iglesia. La Eu- te en medio de sus discípulos y operante con la fuerza del
cristianos en la construcción de una so- caristía es como el corazón palpitante que da vida a todo el Espíritu Santo. Y también en las generaciones siguientes, a
ciedad solidaria, justa y fraterna. Espe- cuerpo místico de la Iglesia: un organismo social basado en través de los siglos, la Iglesia, a pesar de los límites y los
cialmente en nuestro tiempo, en el que el vínculo espiritual pero concreto con Cristo. Como afirma errores humanos, ha seguido siendo en el mundo una fuer-
la globalización nos hace cada vez más el apóstol san Pablo: «Porque el pan es uno, nosotros, za de comunión. Pensemos especialmente en los periodos
dependientes unos de otros, el cristia- siendo muchos, formamos un solo cuerpo, pues todos co- más difíciles, de prueba: en lo que significó, por ejemplo,
nismo puede y debe hacer que esta uni- memos del mismo pan» (1 Co 10, 17). Sin la Eucaristía la para los países sometidos a regímenes totalitarios, la posibi-
dad no se construya sin Dios, es decir, Iglesia sencillamente no existiría. La Eucaristía es, de he- lidad de congregarse en la misa dominical. Como decían
sin el amor verdadero, ya que se dejaría cho, la que hace de una comunidad humana un misterio de los antiguos mártires de Abitinia: «Sine Dominico non possu-
espacio a la confusión, al individualis- comunión, capaz de llevar a Dios al mundo y el mundo a mus», sin el «Dominicum», es decir, sin la Eucaristía domi-
mo, a los atropellos de todos contra to- Dios. El Espíritu Santo, que convierte el pan y el vino en nical no podemos vivir. Pero el vacío producido por la falsa
dos. El Evangelio desde siempre mira a el Cuerpo y la Sangre de Cristo, transforma también en libertad puede ser también muy peligroso, y entonces la co-
la unidad de la familia humana, una miembros del cuerpo de Cristo a cuantos lo reciben con fe, munión con el Cuerpo de Cristo es medicina de la inteli-
unidad que no se impone desde fuera, de forma que la Iglesia es realmente sacramento de unidad gencia y de la voluntad, para volver a encontrar el gusto de
ni por intereses ideológicos o económi- de los hombres con Dios y entre sí. la verdad y del bien común.
cos, sino a partir del sentido de respon- En una cultura cada vez más individualista, como lo es Queridos amigos, invoquemos a la Virgen María, a quien
sabilidad de los unos hacia los otros, la cultura en la que estamos inmersos en las sociedades oc- mi predecesor, el beato Juan Pablo II, definió «Mujer euca-
porque nos reconocemos miembros de cidentales, y que tiende a difundirse en todo el mundo, la rística» (Ecclesia de Eucharistia, 53-58). Que en su escuela
un mismo cuerpo, del cuerpo de Cris- Eucaristía constituye una especie de «antídoto», que actúa también nuestra vida llegue a ser plenamente «eucarística»,
to, porque hemos aprendido y aprende- en la mente y en el corazón de los creyentes y que siembra abierta a Dios y a los demás, capaz de transformar el mal
mos constantemente del Sacramento continuamente en ellos la lógica de la comunión, del servi- en bien con la fuerza del amor, orientada a favorecer la
del altar que el gesto de compartir, el cio, del compartir, es decir, la lógica del Evangelio. Los pri- unidad, la comunión y la fraternidad.
amor, es el camino de la verdadera jus-
ticia. Después del Ángelus, el Santo Padre pronunció las siguientes
Volvamos ahora al gesto de Jesús en palabras:
la Última Cena. ¿Qué sucedió en ese Queridos hermanos y hermanas, también hoy tengo la
momento? Cuando él dijo: Este es mi alegría de anunciar la proclamación de algunos nuevos bea-
cuerpo entregado por vosotros; esta es tos. Ayer, en Lübeck fueron beatificados Johannes Prassek,
mi sangre derramada por vosotros y Eduard Müller y Hermann Lange, asesinados por los nazis
por muchos, ¿qué fue lo que sucedió? en 1943 en Hamburgo. Hoy, en Milán, es el turno de don
Con ese gesto, Jesús anticipa el aconte- Serafino Morazzone, párroco ejemplar en la zona de Lecco
cimiento del Calvario. Él acepta toda la entre los siglos XVIII y XIX; del padre Clemente Vismara,
Pasión por amor, con su sufrimiento y heroico misionero del PIME en Birmania; y de Enrichetta
su violencia, hasta la muerte en cruz. Alfieri, Hermana de la Caridad, llamada «ángel» de la cár-
Aceptando la muerte de esta forma la cel milanesa de San Vittore. ¡Alabemos al Señor por estos
transforma en un acto de donación. Es- luminosos testigos del Evangelio!
ta es la transformación que necesita el En este domingo que precede a la solemnidad de San
mundo, porque lo redime desde dentro, Pedro y San Pablo se celebra en Italia la Jornada por la ca-
lo abre a las dimensiones del reino de ridad del Papa. Deseo dar vivamente las gracias a todos
los cielos. Pero Dios quiere realizar esta aquellos que, con la oración y con los donativos, dan su
renovación del mundo a través del mis- apoyo a mi ministerio apostólico y de caridad. ¡Gracias!
mo camino que siguió Cristo, más aún, ¡Que el Señor os recompense!
página 8 L’OSSERVATORE ROMANO domingo 3 de julio de 2011, número 27
En el discurso a la ROACO el Papa pide libertad para los cristianos de Oriente Medio y el fin de la violencia en el norte de África
Asistencia inmediata
para quienes huyen del sufrimiento
Benedicto XVI vuelve a hacer un llamamiento en nita, Su Beatitud Béchara Boutros Raï, y extiendo suma importancia para el equilibrio y la paz mun-
favor de la libertad de religión en Oriente Próximo y mi saludo a los demás prelados, a los representan- diales. A través de vosotros, el Papa quiere estar
en Oriente Medio, y pide que se proporcione la tes de las agencias internacionales y de la Univer- cerca de quienes están sufriendo y de quienes in-
«asistencia inmediata necesaria» a quienes buscan sidad de Belén, así como a los bienhechores aquí tentan desesperadamente huir incrementando flu-
«desesperadamente huir» de las violencias en el norte presentes. Doy las gracias a todos por cooperar jos migratorios a veces sin esperanza. Al respecto,
de África. La ocasión fue la audiencia a los con generosidad al mandato de caridad universal pido la asistencia inmediata necesaria, pero sobre
participantes en la asamblea de la Reunión de las que el Señor Jesús confía incesantemente al Obis- todo cualquier mediación posible, para que cesen
Obras para la ayuda a las Iglesias orientales po de Roma como Sucesor de Apóstol san Pedro. las violencias y, en el respeto de los derechos de
—ROACO—, a los que recibió el viernes 24 de junio, Ayer celebramos la solemnidad del Cuerpo y la las personas y de las comunidades, se restablezcan
por la mañana, en la sala Clementina del palacio Sangre del Señor. La procesión eucarística, que en todas partes la concordia social y la conviven-
apostólico vaticano. presidí desde la catedral de San Juan de Letrán cia pacífica. La ferviente oración y la reflexión
hasta la basílica de Santa María la Mayor, consti- nos ayudarán, mientras tanto, a leer las perspecti-
Señor cardenal, beatitud, venerados hermanos en tuye siempre una invitación a la amada ciudad de vas emergentes en la actual época de prueba y de
el episcopado y en el sacerdocio, queridos miem- Roma y a toda la comunidad católica a permane- lágrimas: que el Señor de la historia las dirija
bros y amigos de la ROACO: cer y caminar por las sendas no fáciles de la his- siempre al bien común.
toria, entre las grandes pobrezas espirituales y La Asamblea especial para Oriente Medio del
Deseo expresar a cada uno de vosotros la más
materiales del mundo, para ofrecer la caridad de Sínodo de los obispos celebrada el pasado mes de
cordial bienvenida y correspondo con mis mejores
Cristo y de la Iglesia, que brota del Misterio Pas- octubre en el Vaticano y en la que participasteis
deseos a las amables palabras de saludo que me
cual, misterio de amor, de entrega total que en- algunos de vosotros, ha acercado a los hermanos
ha dirigido el cardenal Leonardo Sandri, prefecto
gendra la vida. La caridad «no pasa nunca» (1 Co y hermanas de Oriente de modo aún más decidi-
de la Congregación para las Iglesias orientales y
presidente de la Reunión de las Obras para la ayu-
da a las Iglesias orientales, acompañado por el ar-
zobispo secretario, por el subsecretario y por los
colaboradores eclesiásticos y laicos del dicasterio.
Dirijo un saludo fraterno al nuevo patriarca maro-
Promulgación de decretos
El lunes 27 de junio, el Papa Benedicto XVI reci- litz (Alemania) el 30 de enero de 1883 y murió en —las virtudes heroicas del siervo de Dios MAT-
bió en audiencia privada al cardenal Angelo Ama- Viena (Austria) el 11 de junio de 1933; THEW KADALIKATTIL, sacerdote diocesano y fun-
to, S.D.B., prefecto de la Congregación para las —el martirio del siervo de Dios SALVIO HUIX dador de la congregación de las Religiosas del
causas de los santos. Durante la audiencia el Ro- MIRALPEIX, obispo de Lérida; nació en Santa Sagrado Corazón de Jesús para las mujeres; nació
mano Pontífice autorizó a la Congregación la Margarita de Vellors (España) el 22 de diciembre en Edapady (India) el 25 de abril de 1872 y murió
promulgación de los siguientes decretos: de 1877 y fue asesinado, por odio a la fe, en Léri- en Palai (India) el 23 de mayo de 1935;
—un milagro atribuido a la intercesión del vene- da (España) el 5 de agosto de 1936; —las virtudes heroicas del siervo de Dios RAF-
rable siervo de Dios MARIANO ARCIERO, sacerdo- —el martirio del siervo de Dios KARL LAMPERT, FAELE DIMICCOLI, sacerdote diocesano; nació en
te diocesano; nació en Contursi (Italia) el 26 de sacerdote diocesano y pro-vicario de la adminis- Barletta (Italia) el 12 de octubre de 1887 y murió
febrero de 1707 y murió en Nápoles (Italia) el 16 tración apostólica de Innsbruck Feldkirch; nació allí el 5 de abril de 1956;
de febrero de 1788; en Göfis (Austria) el 9 de enero de 1894 y fue ase-
sinado, por odio a la fe, en el campo de concen- —las virtudes heroicas de la sierva de Dios SO-
—un milagro atribuido a la intercesión del vene- PHIA CZESKA-MACIEJOWSKA, fundadora de la con-
tración de Halle sul Saale (Alemania) el 13 de no-
rable siervo de Dios JUAN JOSÉ LATASTE (en el si- viembre de 1944; gregación de las Vírgenes de la Presentación de la
glo: Alcide Vitale), sacerdote profeso de la Orden Bienaventurada Virgen María; nació en Budziszo-
de Frailes Predicadores y fundador de las Religio- —el martirio de las siervas de Dios JOSEFA wice (Polonia) en fecha no precisa de 1584 y mu-
sas de la Tercera Orden de Santo Domingo en MARTÍNEZ PÉREZ, de la congregación de las Hijas
rió en Cracovia (Polonia) el 1 de abril de 1650;
Betania; nació en Cadillac (Francia) el 5 de sep- de la Caridad de San Vicente de Paúl, y 12 com-
tiembre de 1832 y murió en Frasne-le-Château pañeras; fueron asesinadas, por odio a la fe, en —las virtudes heroicas de la sierva de Dios MA-
(Francia) el 10 de marzo de 1869; distintos lugares dentro de los confines de la dió- RÍA JOSEFA BENVENUTI (en el siglo: Zeinab Alif),
cesis de Valencia (España) entre el 19 de agosto y monja profesa de la Orden de Santa Clara; nació
—un milagro atribuido a la intercesión de la ve- el 9 de diciembre de 1936; en Sudán entre los años 1845 y 1846 y murió en
nerable sierva de Dios MARÍA INÉS TERESA DEL Serra de’ Conti (Italia) el 24 de abril de 1926;
—las virtudes heroicas del beato JUAN MARINO-
SANTÍSIMO SACRAMENTO (en el siglo: Manuela de
NI (en el siglo: Francesco), sacerdote profeso de la —las virtudes heroicas de la sierva de Dios LAU-
Jesús Arias Espinosa), fundadora de las congrega- Orden de los Clérigos Regulares Teatinos; nació
ciones de las Misioneras Clarisas del Santísimo RA MEOZZI, religiosa profesa del instituto de las
en Venecia (Italia) el 25 de diciembre de 1490 y
Sacramento y de los Misioneros de Cristo para la Hijas de María Auxiliadora; nació en Florencia
murió en Nápoles (Italia) el 13 de diciembre de
Iglesia universal; nació en Ixtlán del Río (Méxi- 1562; (Italia) el 5 de enero de 1873 y murió en Pogrze-
co) el 7 de julio de 1904 y murió en Roma el 22 bień (Polonia) el 30 de agosto de 1951;
de julio de 1981; —las virtudes heroicas del siervo de Dios JOSÉ
MARÍA GARCÍA LAHIGUERA, arzobispo de Valen- —las virtudes heroicas de la sierva de Dios LUI-
—un milagro atribuido a la intercesión de la ve- cia y fundador de la congregación de las Herma- GIA (GINA) TINCANI, fundadora de la Unión de
nerable sierva de Dios HILDEGARD BURJAN, laica, nas Oblatas de Cristo Sacerdote; nació en Fítero Santa Catalina de Siena de las Misioneras de la
madre de familia y fundadora de la sociedad de (España) el 9 de marzo de 1903 y murió en Ma- Escuela; nació en Chieti (Italia) el 25 de marzo de
las Hermanas de la Caritas Socialis; nació en Gör- drid (España) el 14 de julio de 1989; 1889 y murió en Roma el 31 de mayo de 1976.
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Benedicto XVI impone el palio a 41 arzobispos metropolitanos en la solemnidad de San Pedro y San Pablo
Queridos hermanos y hermanas: momento, esta no era sólo una pala- hacer aquello que sólo él, el Hijo de
bra «ceremonial», y era también al- Dios, puede decir y hacer legítima-
«Ya no os llamo siervos, sino ami-
go más que una cita de la Sagrada mente: Yo te perdono tus pecados.
gos» (cf. Jn 15, 15). Sesenta años Escritura. Era bien consciente: en es- Él quiere que yo —por mandato su-
después de mi ordenación sacerdo- te momento, él mismo, el Señor, me yo— pronuncie con su «Yo» unas
tal, siento todavía resonar en mi in- la dice a mí de manera totalmente palabras que no son únicamente pa-
terior estas palabras de Jesús, que personal. En el Bautismo y la Con- labras, sino acción que produce un
nuestro gran arzobispo, el cardenal firmación, él ya nos había atraído cambio en lo más profundo del ser.
Faulhaber, con la voz ya un poco hacia sí, nos había acogido en la fa- Sé que tras estas palabras está su Pa-
débil pero firme, nos dirigió a los milia de Dios. Pero lo que sucedía sión por nuestra causa y por noso-
nuevos sacerdotes al final de la cere- en aquel momento era todavía algo tros. Sé que el perdón tiene su pre-
monia de ordenación. Según las nor- más. Él me llama amigo. Me acoge cio: en su Pasión, él descendió hasta
mas litúrgicas de aquel tiempo, esta en el círculo de aquellos a los que se el fondo oscuro y sucio de nuestro
aclamación significaba entonces con- había dirigido en el Cenáculo. En el pecado. Bajó hasta la noche de
ferir explícitamente a los nuevos sa- grupo de los que él conoce de modo nuestra culpa, que sólo así puede ser
cerdotes el mandato de perdonar los particular y que así llegan a conocer- transformada. Y, mediante el manda-
pecados. «Ya no siervos, sino ami- lo de manera particular. Me otorga to de perdonar, me permite asomar-
gos»: yo sabía y sentía que, en ese la facultad, que casi da miedo, de me al abismo del hombre y a la
grandeza de su padecer por nosotros
los hombres, que me deja intuir la
magnitud de su amor. Él se fía de
mí: «Ya no siervos, sino amigos».
Me confía las palabras de la consa-
gración en la Eucaristía. Me consi- lo mismo, decían los antiguos. La
dera capaz de anunciar su Palabra, amistad es una comunión en el pen-
de explicarla rectamente y de llevarla samiento y el deseo. El Señor nos
a los hombres de hoy. Él se abando- dice lo mismo con gran insistencia:
na a mí. «Ya no sois siervos, sino «Conozco a los míos y los míos me
amigos»: esta es una afirmación que conocen» (cf. Jn 10, 14). El Pastor
produce una gran alegría interior y llama a los suyos por su nombre (cf.
que, al mismo tiempo, por su gran- Jn 10, 3). Él me conoce por mi nom-
deza, puede hacernos estremecer a bre. No soy un ser anónimo cual-
través de las décadas, con tantas ex- quiera en la inmensidad del univer-
periencias de nuestra propia debili- so. Me conoce de manera totalmente
dad y de su inagotable bondad. personal. Y yo, ¿lo conozco a él? La
«Ya no siervos, sino amigos»: en amistad que él me ofrece sólo puede
estas palabras se encierra todo el significar que también yo trate siem-
programa de una vida sacerdotal. pre de conocerlo mejor; que yo, en
¿Qué es realmente la amistad? Idem la Escritura, en los sacramentos, en
velle, idem nolle, querer y no querer el encuentro de la oración, en la co-
munión de los santos, en las perso-
nas que se acercan a mí y que él me
envía, me esfuerce siempre por cono-
cerlo cada vez más. La amistad no
es solamente conocimiento; es sobre
todo comunión del deseo. Significa
que mi voluntad crece hacia el «sí»
de la adhesión a la suya. En efecto,
su voluntad no es para mí una vo-
luntad externa y extraña, a la que
me doblego más o menos de buena
gana. No, en la amistad mi voluntad
se une a la suya a medida que va
creciendo; su voluntad se convierte
en la mía, y justo así llego a ser yo
mismo. Además de la comunión de
pensamiento y voluntad, el Señor
menciona un tercer elemento nuevo:
Él da su vida por nosotros (cf. Jn 15,
13; 10, 15). Señor, ayúdame a cono-
certe cada vez mejor. Ayúdame a es-
tar cada vez más unido a tu volun-
tad. Ayúdame a vivir mi vida, no pa-
ra mí mismo, sino junto contigo pa-
ra los demás. Ayúdame a ser cada
vez más tu amigo.
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