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Planteamiento del Problema:

Nuestro planeta se enfrenta a una acelerada desaparición de sus ecosistemas y a la


irreversible pérdida de su valiosa biodiversidad. El ser humano, al igual que el resto de los
seres vivos, forma parte de este sistema y también depende de él. Además, la diversidad
biológica incluye las diferencias genéticas dentro de cada especie y la variedad de
ecosistemas.

Toda esta diversidad biológica provee al ser humano de recursos biológicos. Éstos
han servido de base a las civilizaciones, pues por medio de los recursos biológicos se han
desarrollado labores tan diversas como la agricultura, la industria farmacéutica, la industria
de pulpa y papel, la horticultura, la construcción o el tratamiento de desechos. La pérdida
de la diversidad biológica amenaza los suministros de alimentos, las posibilidades de recreo
y turismo y las fuentes de madera, medicamentos y energía. Además, interfiere
negativamente con las funciones ecológicas esenciales.

Las interacciones entre los diversos componentes de la diversidad biológica es lo


que permite que el planeta pueda estar habitado por todas las especies, incluidos los seres
humanos, ya que gracias a ella se dan procesos tales como, la purificación del aire y del
agua y la destoxificación y descomposición de los desechos, la estabilización y moderación
del clima de la Tierra, la moderación de las inundaciones, sequías, temperaturas extremas y
fuerza del viento, la generación y renovación de la fertilidad del suelo, incluido el ciclo de
los nutrientes, la polinización de las plantas, etc.

En la actualidad las causas de la extinción o de su peligro están relacionadas, de una


u otra forma, con el hombre. Lo más preocupante y grave aún, es que no se manifiestan de
manera individual, haciendo más complejo instrumentar las soluciones.

La Alteración o Destrucción del Medio Ambiente: Esta es la causa principal de la


extinción de las especies o de la pérdida de la biodiversidad a escala mundial. Debido a la
acción del hombre se degradan o exterminan hábitat o espacios naturales en los cuales se
desarrolla la vida.
En Venezuela esta es la razón que ha llevado a casi la desaparición de más de la
mitad de las especies animales amenazadas.

La Cacería: Es actualmente la segunda causa de extinción a nivel mundial. Según el


folleto Extinción, Los Animales Amenazados, "En Venezuela (la cacería) es responsable de
que el 30% de las especies amenazadas estén en peligro de desaparecer. La caza se práctica
por motivos comerciales, por deporte y para consumo. Esta última modalidad es la de
mayor impacto, pues está diezmando a 16,61 % de las especies amenazadas, a una cuarta
parte de los mamíferos y a casi dos terceras partes de los reptiles".

La Contaminación: El uso inadecuado de pesticidas y fertilizantes químicos en la


agroindustria elimina a las plagas y parásitos, pero también a insectos necesarios para el
equilibrio de la vida en los ecosistemas del campo; igualmente, es causa de envenenamiento
de las fuentes de agua (lagos o ríos) que son utilizadas en el riego de los cultivos y que
cuando son absorbidas o ingeridas provocan la muerte de la flora y la fauna, y ocasionan
graves enfermedades al hombre.

Explotación de Especies en Forma No Sustentable: Cuando el aprovechamiento de


una especie se realiza a un ritmo que supera su capacidad de reproducción, se habla de
sobreexplotación. Algunas especies son de vida y crianza prolongadas, por lo tanto, con
potencial reproductivo bajo. Debido entonces a un irracional afán de lucro comercial, a
nivel mundial se han extinguido en los últimos cuatro siglos no menos de 400 especies y
subespecies de aves y mamíferos.

Dentro del contexto nacional, el estado Monagas Alberga en su territorio una


diversidad de paisajes constituidos por una variada gama de recursos naturales y abundante
diversidad biológica.

Dentro de este se encuentra, la Reserva de Fauna Silvestre “Gran Morichal”,


decretada desde el año 2001, ubicada en Jurisdicción de los Municipio Maturín y
Pedernales, de los estados Monagas y Delta Amacuro, respectivamente, la cual en su
superficie de 129.700 hectáreas cuenta con una serie de ecosistemas que por su diversidad e
importancia ecológica requiere de una evaluación de la condiciones ambientales que
permita conocer el estado actual de la reserva, a su vez, permitiendo determinar la situación
actual de la fauna presente en la reserva, si ha sido desplazada, así mismo como su
ubicación actual y las causas que podrían haber originado esta modificación.

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