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RAFAEL ARÉVALO MARTÍNEZ

BIOGRAFÍA
Rafael Arévalo Martínez nació en Quezaltenango en 1884. Fue uno de los
representantes de la Generación de 1910, quienes guiaron la literatura de Guatemala
fuera del Modernismo y la enfocaron hacia las nuevas tendencias contemporáneas. A
causa de problemas físicos, su vida no fue del todo normal, lo cual le permitió
reflexionar más sobre temas relacionados con la filosofía humana y la relación de los
seres humanos con Dios. Era un hombre con gran fe e inquisitivo a la vez. Fue
fundador de la revista Juan Chapín en 1913, junto a Francisco Fernández. A su vez,
también colaboró con diferentes publicaciones tanto nacionales como internacionales:
La República, El Nuevo Tiempo y Centro América.

Fue director de la Biblioteca Nacional de Guatemala desde 1927 hasta 1945.


Durante su estancia en diversos países europeos fue periodista, profesor de lengua
castellana y miembro de la Academia Española de la Lengua.

Considerado como uno de los más altos exponentes del movimiento modernista,
escribió Maya (1911) y Los atormentados (1914), dos obras que muestran la pureza
del movimiento modernista guatemalteco. En la segunda etapa de su vida, ya con una
madurez consagrada, cambió su manera de redactar dirigiéndose hacia un lenguaje
mucho más simple, sobrio, claro e intimista. En esta época de su vida encontramos
obras como Las rosas de Erando (1921) y Por un caminito así (1947).
Rafael Arévalo escribió diez novelas de ámbito fantástico como Las noches en el
palacio de nunciatura (1927), La oficina de paz de Orlando (1925), crítica clara contra
la expansión imparable por parte de Estados Unidos y El Mundo de los amharachiíes
(1938). También entre sus novelas encontramos Viaje a Apanda (1939). Una de sus
obras más surrealistas es la novela titulada El hombre que parecía un caballo (1914)
Fue condecorado con La Orden del Quetzal, la más prestigiosa condecoración de
Guatemala y la Orden de Rubén Darío en el grado de Gran Cruz, la más prestigiosa de
Nicaragua.
Rafael Arévalo Martínez falleció en la ciudad de Guatemala el año 1975
BELLATÍN, Mario

BIOGRAFÍA

Mario Bel latín nació en Ciudad de México el 23 de julio de 1960. Era


hijo de padres peruanos. Estudió en el seminario Santo Toribio de
Morroviejo y se graduó en Ciencias de la Comunicación de la Universidad
de Lima. En 1987 recibió una beca para estudiar guión cinematográfico
en la Escuela Internacional de Cine Latinoamericano de San Antonio de
los Baños. A su regreso a México fue director del Área de Literatura y
Humanidades de la Universidad del Claustro de Sor Juana y miembro del
Sistema Nacional de Creadores de México.
Fue finalista para el Premio Medici por mejor novela extranjera
publicada en Francia en el 2000, y recibió el Premio Xavier Villaurrutia
por su novela Flores.
Bel latín es un autor que se ha convertido en poco tiempo en una figura
de culto cuya obra ha sido traducida a varios idiomas. Los argumentos
de sus libros tienden a un absurdo lleno de ironía y crueldad. Ha
realizado además, proyectos donde lo literario se comunica con otras
manifestaciones culturales y artísticas, relacionadas con el performance
y el happening. Fue creador de la Escuela Dinámica de Escritores de
Ciudad de México.
La peculiar novedad de este escritor estriba en los tensos y calculados
silencios de su prosa. El espacio vacío es muy importante en su obra.
Amalia bautista

BIOGRAFÍA
Amalia Bautista nació en Madrid, en 1962. Es licenciada en Ciencias de
la Información por la Universidad Complutense. Ha publicado Cárcel de
amor (Renacimiento, Sevilla, 1988), La mujer de Lot y otros poemas
(Llama de amor viva, Málaga, 1995), Cuéntamelo otra vez (La Veleta,
Granada, 1999), La casa de la niebla. Antología (1985-2001) (Universito
de les Illes Balears, 2002), Hilos de seda (Renacimiento, Sevilla, 2003),
Estoy ausente (Pre-Textos, Valencia, 2004), Pecados, en colaboración
con Alberto Parlan (El Gaviero, Almería, 2005), Tres deseos. Poesía
reunida (Renacimiento, Sevilla, 2006), Luz del mediodía. Antología
poética (Universidad de las Américas, Puebla, México, 2007), Roto
Madrid, con fotografías de José del Río Mons., (Renacimiento, Sevilla,
2008), Esto u ausente (Averno, Lisboa, 2013) y Falsa pimienta
(Renacimiento, Sevilla, 2013).
Parte de su obra ha sido traducida al italiano, portugués, ruso y árabe.
Es responsable de la edición, prólogo y selección de Juegos de
inteligencia, antología poética de Rosario Castellanos (Renacimiento,
Sevilla, 2011).
ÁNGELA BECERRA

Ángela Becerra nació en Cali (Colombia), en 1957. Estudió


Comunicación y se dedicó a la creación publicitaria por lo que obtuvo
numerosos premios internacionales. Vivió en Cali, Bogotá y Barcelona.
Decidió abandonar su exitosa carrera para dedicarse por entero a su
pasión literaria. En 2001 publicó el libro de poesía Alma abierta. Y su
primera novela apareció en 2003: De los amores negados, y obtuvo el
LatínLiterariaWard 2004 de la prestigiosa Feria del Libro de Chicago.
Con El penúltimo sueño, aparecido en 2005, obtuvo el Premio Azorín de
Novela 2005, el Premio al Mejor Libro Colombiano de Ficción 2005 y el
LatínLiterariaWard 2006. A la que siguió Lo que le falta al tiempo.
Recibió en 2009 el Premio Planeta-Cas América 2009.
Colaboró en el periódico ADN como columnista hasta su cierre, a finales
de 2011

OBRA
Novela:
Alma abierta, 2001
De los amores negados, 2004
El penúltimo sueño, 2005
Lo que le falta al tiempo, 2007
Ella, que todo lo tuvo, 2009
MEDARDO ÁNGEL SILVA

Medardo Ángel Silva nació en Guayaquil el 8 de junio de 1898, y murió de forma trágica el
10 de junio de 1919 en la misma ciudad (dos días después de haber cumplido 21 años).
Escritor, poeta, músico y compositor, es considerado el mayor representante del
modernismo en la poesía ecuatoriana. Quedó huérfano de padre a muy temprana edad y su
madre, con la pequeña pensión que su esposo les había dejado, construyó una modesta casa
en la Avenida del Cementerio. De niño entró a estudiar en la escuela de la Filantrópica,
cercana a su casa. Por esa época todas las tardes, descansando sobre una hamaca,
contemplaba el interminable desfilar de los entierros rumbo al cementerio. De allí la
fijación que el poeta expresaría más tarde hacia la muerte. También de niño le gustaba
mucho la música, e incluso solía practicar con frecuencia el piano en el convento de los
padres agustinos.
Por el año de 1910 ingresó al colegio Vicente Rocafuerte, pero al cuarto año tuvo que
abandonar sus estudios por falta de recursos. Entonces entró a trabajar en una imprenta
local. Luego de abandonar el colegio, comenzó a intentar publicar sus primeros poemas.
Estos fueron rechazados al principio por los diarios más importantes de Quito y Guayaquil,
pero poco a poco empezaron a aparecer publicados en pequeñas revistas literarias que
comenzaron a darle notoriedad. Aunque Silva no se graduó de bachiller, su condición de
autodidacta lo llevó a ser maestro escolar e incluso a leer en francés; así se le facilitó el
contacto con la poesía de los simbolistas franceses (Paul Verane, Arthur Rumbad, Charles
Baudelaire), quienes llegaron a ser sus más grandes referentes. Las influencias en su poesía,
además, fueron el modernismo de Rubén Darío y el misticismo de Amado Nervo.
Para 1915 sus poesías, que mostraban una marcada melancolía, eran ya aceptadas en todos
los diarios del país; además el joven adolescente entró a trabajar como editor en diario El
Telégrafo, el cual era en ese tiempo el periódico de mayor circulación nacional. En las
páginas de este diario es que logra publicar por entregas su pequeña novela, María Jesús.
En 1918 publica su primer y único libro de poesías, El árbol del bien y del mal. Del mismo
sólo imprime 100 copias, por falta de recursos. Aunque el libro recibió aclamación por
parte de los críticos de su tiempo, las ventas no fueron nada buenas, llegando incluso Silva
a incinerar gran parte de los ejemplares al ver que en una librería no se había vendido ni
uno.
Sin embargo, la popularidad de Silva en el ámbito literario seguía creciendo. Mas entonces
ocurrió la tragedia. La muerte de Medardo Ángel Silva sigue siendo un misterio sin
esclarecer: a los 21 años el joven poeta murió de un tiro en su cabeza junto a la casa de su
novia, por lo que se declaró que fue un suicidio. También influyó en esta creencia el
contenido de los poemas de Silva, el cual incluso llamó a la Muerte la libertadora del horror
de la vida.
Pero posteriores análisis ponen en duda la teoría de que se habría suicidado, ya que la bala
entró por detrás de su oreja. Sin embargo, nunca se investigó más allá y fue enterrado sin
los ritos fúnebres católicos, asumiéndose que su muerte fue un suicidio y esto ha llevado a
la construcción de un imaginario popular acerca de sus últimas horas, en él se habla desde
que habría estado jugando con el arma y que su muerte fue un accidente, hasta que por una
decepción amorosa habría tomado esa trágica decisión.
Entre sus famosas obras literarias están:

 El árbol del bien y del mal (poesías, 1918)


 María Jesús (novela, 1919)
 La máscara irónica (ensayos)
 Trompetas de oro (poesías)
 El alma en los labios

 El Alma en los Labios


Para mi amada
 “Cuando de nuestro amor la llama apasionada
dentro tu pecho amante contemples extinguida,
ya que sólo por tí la vida me es amada,
el día en que me faltes me arrancaré la vida.
 Porque mi pensamiento, lleno de este cariño
que en una hora feliz me hiciera esclavo tuyo,
Lejos de tus pupilas es triste como un niño
que se duerme soñando en tu acento de arrullo.
 Para envolverte en besos quisiera ser el viento
y quisiera ser todo lo que tu mano toca;
ser tu sonrisa, ser hasta tu mismo aliento,
y así poder estar más cerca de tu boca.
 Vivo de tu palabra, y eternamente espero
llamarte mía, como quien espera un tesoro.
lejos de tí comprendo lo mucho que te quiero
y, besando tus cartas, ingenuamente lloro.
 Perdona que no tenga palabras con que pueda
decirte la inefable pasión que me devora;
para expresar mi amor solamente me queda
rasgarme el pecho, amada, y en tus manos de seda
dejar mi palpitante corazón que te adora!”
José de la Cuadra (1903-1941)

 Abogado
 Profesor del colegio Vicente Rocafuerte
 Vicerrector del colegio Vicente Rocafuerte
 Subsecretario de Gobierno
 Secretario general de administración pública
 Visitador consular
 Delegado del Gobierno para el estudio de leyes
 Escritor
 Presidente del Centro Universitario de Guayaquil
 Presidente de la Federación del Sur de Estudiantes Universitarios

José de la Cuadra nació en Guayaquil, el 3 de septiembre de 1903. Su infancia desarrollo


en una relativa estrechez económica.
De la Cuadra realizó sus estudios en su ciudad natal. En 1921, culminó el bachillerato en
el Colegio Nacional Vicente Rocafuerte, y en 1929, se graduó de abogado en la
Universidad de Guayaquil.
La vida universitaria De la Cuadra fue alternada con el magisterio, el periodismo, la
política y la literatura. Desempeñó las funciones de profesor de Moral y Gramática en el
Colegio Vicente Rocafuerte; también fue bibliotecario y, con los años Vicerrector del
mismo plantel.
Las primeras incursiones literarias pertenecen a su época de colegial. Durante 1919-1920
formó parte de la redacción de la revista “Juventud Estudiosa”. En ella colaboraron, entre
otros bandos, Medardo Ángel Silva, José María Egos, Jorge Carrera Andrade, Augusto
Arias, Gonzalo Escudero, todos ellos cultivadores del “retrasado modernismo
ecuatoriano” del que José de la Cuadra no se pudo sustraer. De allí que las primeras
publicaciones tengan esta influencia. En la ya mencionada “Sangre de Incas. A la memoria
de Santo Chocano”, “A la pálida”.
A la época del estudiante universitario corresponden sus primeras actividades políticas.
Fue presidente del “Centro Universitario de Guayaquil” y de “La Federación del Sur de
Estudiantes Ecuatorianos”. En 1925, en unión de sus codearlos, fundó “la Universidad
Popular”.
Es probable que en 1931 haya escrito “Los monos enloquecidos”. Así lo indica de la
Cuadra por medio de las palabras “del protagonista al autor”, que sirven de introducción
a la obra, sin embargo, el texto inconcluso de esta obra no se publicó hasta 1951.
Desde 1931 hasta 1935, De la Cuadra colaboró en revista “Semana Grafica”, publicada
por la editorial “El Telégrafo”.
En 1932 sale a la luz, en España, una colección de cuentos titulada “La vuelta de la
locura”. Eran seis relatos de los cuales cinco habían formado parte “El amor que
dormía”, y otro, había integrado “Repisas”.
En 1932 se publicó la primera edición de “Horno”. El libro comprendía once cuentos; en
estas páginas campea “el dolor, la venganza, la miseria, las aberraciones sexuales,
reclamando enmiendas”. Una segunda edición data de 1940, y en ella se incluye “La
tigra”.
En 1933, aparecieron una serie de artículos literarios, tanto en periódicos nacionales
como en revistas extranjeras. En la Revista “Americana” de Buenos Aires se publicaron:
“Iniciación de la novelística ecuatoriana”, “Advenimiento literario del montubio” y
“¿Feísmo? ¿Realismo¿”. En la Revista “Claridad”, también de Buenos Aires, publico un
artículo dedicado a la poesía de Gonzalo Escudero y, en Guayaquil, escribió para “El
Telégrafo” “Personajes en busca de autor”,
La gran obre narrativa de José de la Cuadra, “Los Sanguinas”, fue publicada en Madrid
en 1934. Contenía además cinco cuentos: “Sangre expiatoria”, “Candado”, “Calor de
yunga”, “Barragana” y “Saisi la chiva”.
En 1937, publicó en el editorial “Imán” de Buenos Aires, su ensayo sobre el montubio
ecuatoriano. En este tratado, de la Cuadra recoge todos sus conocimientos sobre el alma y
costumbres del hombre de nuestro litoral.
El 14 de octubre de 1937, aparece “Ecuador, país sin danza”, este es un ensayo en el cual
indica las razones por las que, según el autor, nuestro pueblo no baila.
En 1937 interviene nuevamente en la política. Fue Secretario General de la administración
del General Alberto Enríquez.
En 1938, mientras trabajaba en el Gobierno de Enríquez, fue designado agente consular,
cargo que le permitió visitar distintos países de Sudamérica y ponerse en contacto con
notables escritores.
En 1938, publicó su ultimo libre “Guantón”. Se trata de una colección de catorce cuentos,
dos crónicas y seis reseñas que comprenden diferentes momentos de su creatividad
literaria y, por lo tanto, datan de diferentes fechas; unas incluso, no se han podido
precisar.
En 1938, se imprimió el Folleto “Sana güin, novela azuaya”.
En 1940, apareció en la revista “Hombre de América”, de Buenos Aires, el cuento
“Galleros”; lo fabulesco y lo legendario van a caracterizar este relato.
José de la Cuadra falleció en su ciudad natal, el 2 de febrero de 1941, en plena actividad
literaria, cuando proyectaba escribir dos biografías, una, sobre el General Eloy Alfaro y,
otra sobre Pedro Montero, caudillos liberales ecuatorianos.
Jorge Icaza (1906 – 1978)

Nació en Quito. Vivió su infancia en una enorme propiedad rural, conociendo así, por observación directa, la
aflictiva realidad de los indios, las características de su condición espiritual, sus costumbres. Aprobó en Quito
los estudios escolares y parte de la instrucción media bajo la dirección de los frailes. Ingresó en la Facultad de
Medicina, pero la abandonó poco después. Siguió entonces cursos de Arte Dramático, en el Conservatorio
Nacional. La consecuencia inmediata de ello fue su profesión de actor, que la inició en 1928, y que estimuló
sus primeras creaciones literarias. En efecto, lo que primero escribió estuvo destinado al teatro: “El intruso”
(1928); “La comedia sin nombre” (1929); “Por el viejo” (1929); “Cuál es” (1931); “Como ellos quieren” (1931);
“Sin sentido” (1932). La Compañía Dramática Nacional, a la que Icaza perteneció, puso en escena todos esos
trabajos, cuyos temas habían sido tomados de conflictos íntimos de familia, o de prejuicios sociales. La
experiencia personal de su autor, que llegó a conocer las exigencias del arte teatral, le fue de positiva utilidad
en el dominio de la acción y en la desenvoltura de los diálogos.
Aunque no dejó de un modo definitivo la creación dramática, decidió probar su talento en la
narración… el campo de su inspiración pasó a ser preponderantemente otro: el de los sufrimientos
del indio y el cholo o mestizo en una sociedad corroída por el mal centenario de la discriminación
racial, la desigualdad económica, las quiebras de la justicia y el sospechoso efecto de las leyes.
Sus nuevos libros fueron: “Barro de la sierra” (cuentos, 1933); “Huasipungo” (primer premio de la
novela de Hispanoamérica en un concurso de la “Revista Americana” de Buenos Aires, 1934); “En
las calles” (premio nacional de la novela del Ecuador, 1936); “Cholos” (novela, 1938); “Media vida
deslumbrados” (novela, 1942); “huasipungo” (novela, 1948); “Seis relatos” (cuentos, 1952); “El
chulla Romero y Flores” (novela, 1958). Se publicó finalmente, en Buenos Aires, su novela
postrera: “Atrapados”.
Icaza fue pues un escritor dedicado casi exclusivamente a su profesión literaria. Ha viajado por
muchos países. Ha ejercido las funciones de Agregado Cultural ecuatoriano en la Argentina. Ha
representado a su país en varios congresos intelectuales. Ha sido Director de la Biblioteca
Nacional. Pero todo ello no ha tenido para él la significación que su labor de novelista, que es
justamente la que le ha conquistado celebridad internacional. En la enunciada producción narrativa
de Jorge Icaza se muestran muy evidentes sus objetivos de crítica social. Son ellos los que
establecen la unidad de sus ideas combativas, y los que dictan el estilo de su relato y la
persistencia de ciertos cuadros episódicos.
Su espíritu, atormentado de conflictos raciales, sigue pesando poderosamente el ancestro
aborigen. Clarísimo testimonio de ello es el “Chulla Romero y Flores”, protagonista de la principal
novela de Icaza. Y aun en este tipo de sus trabajos es corriente encontrar más de un episodio en
que se mueven los indios rumiando su tragedia. Ahora bien, la intención política del narrador tiene
un brío incontenible. Del retrato fidedigno da un salto brusco a la caricatura. Del análisis severo
pasa resueltamente a la sátira.
Así también los conflictos anímicos de la mezcla racial del mestizo ecuatoriano se descubren por
igual en los cuentos “Cachorros” y “Mama Pacha” y en las novelas “Cholos” y “El Chulla Romero y
Flores”.
JULIO ZALDUMBIDE GANGOTENA

Nació en Quito el 5 de junio de 1.833. Hijo legítimo de Ignacio Zaldumbide


Izquierdo, combatió a lado del general José María Sáenz y fue asesinado a
lanzadas después el combate de Pesillo, cuando estaba rendido. “Su
nombre constituye baluarte de civilismo y signo de la saña del elemento
militar extranjero adueñado del país” y de Felipa de Gangosean y Tinajero,
quiteños.
Después de la primera enseñanza y de haber seguido los cursos de
secundaria hasta graduarse de maestro o bachiller en Filosofía y Letras,
ingresó a la Universidad Central con el intento de dedicarse a los estudios
de Jurisprudencia, pero muy pronto los abandonó para seguir con ardor y
entusiasmo a la literatura. “Era un joven de buenas maneras, de exquisito
gusto, pero dado a la soledad y a la melancolía”.
En 1.852 escribió la poesía titulada “La estrella de la tarde”, primera de sus
composiciones intimistas y de tono menor “en una atmósfera de amable
melancolía y vaga tristeza, tan propia de la hora vespertina, vista por ojos
románticos, donde campea su simpatía por la naturaleza y el canto al amor
doloroso e imposible idealizado en Laura”.
Poco después y con motivo de conmemorarse el séptimo aniversario de la
revolución marxista 6 de Marzo de 1.845– se presentó aún adolescente a la
velada artístico- literaria de la “Sociedad de Ilustración” y subiendo al
escenario declamó su “Canto a la Música”, causando magnífica impresión.
Fragmento: El alma llena de delicias, cuando/ en el cristal suspira de la
fuente;/ La estremece de horror, en el torrente/ que se lanza estruendoso en
el peñón. // En el umbroso bosque, en la Colina/ finges la dulce voz de los
amores/ y del vergel en las fragantes flores/ estático te escucha el corazón//
Miguel Rio frío, “el poeta lojano que ejercitaba su justa autoridad ante los
jóvenes estudiosos y que presidía la fiesta”, lo coronó. Zaldumbide tenía
escasamente dieciocho años y de allí en adelante figuro activamente en el
mundo de las letras.
Según el 29 de noviembre escribió una elegía “A la memoria de la señora
Juana Lama de Mancajo”, esposa del Dr. Pedro Mancajo y muerta al dar a
luz a su hijo. En 1.855 publicó en el periódico “La Democracia” de Quito,
otra elegía, a la muerte de Carmen Pérez Pareja. Ya era respetado en los
medios cultos del país y se había granjeado numerosas amistades.
En 1.856 publicó su Silva titulada “A la soledad del campo” que según
Hernán Rodríguez Castelo cambia sustancialmente su estilo. “Su poesía se
tornó más amplia y libre y adquirió mayor aliento, usando combinaciones
libres de versos de 11 y 7 sílabas y tomando a la naturaleza como objeto de
contemplación. Y así surgió el ciclo de sus famosas poesías tales como “La
Mañana”•, “La Tarde” y “La Noche”.
“En 1.857 atravesó una aguda neurosis que le ocasionaba desabrimiento y
desencanto a todo y al ocurrir la muerte de su tía y suegra Rosa Gangosean
de Gómez de la Torre escribió una elegía a su memoria. A fines de ese año
adquirió el fundo “Paraba” situado en la región de Malucho, que riega el río
Mira en el camino el Pailón que acababa de abrirse y para marchar hacia la
selva virgen hizo apuntes y resúmenes que debieron haberle costado
muchas fatigas. El mismo hecho de aislarse en plena selva tropical, bella y
poderosa soledad apacible, revela el cambio en su conducta; sin embargo
no perdió enteramente su tiempo pues leyó a Tácito y a Tomás Moore y
aunque no halló la ansiada felicidad que en ninguna parte está como él
mismo confesaría después, gozó de una cierta quietud física y espiritual.
“Sus últimos años fueron sombríos y agobiados. Vivía tuberculoso y
colmado de dolores, silencioso, amando a los suyos y ya no creía tanto en
el destino incierto de los hombres porque la religión iba ganando terreno en
su voluntad disminuida por el abandono, la pobreza y la enfermedad y murió
el 31 de julio de 1.887 este patricio liberal, cuando sólo contaba 54 años.
De estatura más que regular, tez blanca, delgadísimo, ojos profundos y
abundantes cabellos rizados y negros. Dejó ocho hijos y la estela inolvidable
de su fama y su talento.
Fue un poeta elegante y exquisito formado en el más severo estudio, pero
lleno de una genial apatía, pues no podía meditar y componer sin el ánimo
bien apercibido; por eso sus trabajos iban saliendo de tarde en tarde y sólo
a reiteradas solicitudes de sus amigos y admiradores. Cuando leía
meditaba. El arte que no es inspiración es artificio. La poesía es meditación
y recogimientos, las estrofas deben venir a una llamada de la emoción y la
inteligencia; por eso, conforme iban pasando los años, sus versos van
revistiéndose de gravedad, muy cercana a la Filosofía. Poeta – Filósofo se
le llamó para indicar esta inclinación meditativa. Hizo poesía profunda,
sobria y llena de buen gusto.- en la soledad del campo.
Numea Pompilio Llona

Nació en Guayaquil el 5 de Marzo de 1.832 y fue bautizado con los nombres de Manuel Pompilio
que luego cambiará por Numea Pompilio, más acorde con sus aspiraciones de grandeza. Hijo del
Dr. Manuel Leocadio de Llona y Rivera, notable abogado, perseguido en 1.818 por el Gobernador
Mandíbula por sus ideas, expresiones y actitudes patrióticas. Prócer de la Independencia y
firmante del Acta del 9 de Octubre de 1.820, Síndico Municipal de Guayaquil y activista bolivariano
en 1.822, hizo arriar el pabellón bicolor de Guayaquil Independiente del malecón de la ciudad para
izar el tricolor colombiano, acción que le atrajo el odio eterno de los elementos tradicionales de la
ciudad que jamás le perdonaron dicha ofensa; y de Mercedes Echeverri Lados, de la nobleza de
Cali en Colombia, hija del prócer Echeverri, flagelado por los españoles por ocultar en su casa a su
amigo y compadre Darío Nicolita, uno de los más valerosos caudillos revolucionarios de ese país.
El Dr. Manuel Leocadio de Llona y Rivera después de 1.822 sufrió el abandono social a causa de
su acción política, lo que influyó para que en 1.828 se distanciara de su cónyuge Antonia de
Marcos y Crespo con quien había casado ese año y de su tierno hijo Antonio, refugiándose en el
amor de la hermosísima Mercedes, de paso por Guayaquil, acompañando a su padre, militar de los
ejércitos de Colombia. Con ella vivió en su quinta de la esquina suroeste de las calles Chile y
Luque donde les nacieron varios hijos y entre ellos Numea Pompilio. Como el escándalo social era
grande, la familia Llona y Echeverri viajó a Cali en 1.836 y radicó en el valle del Salado, donde los
Echeverri eran dueños de una finca que el poeta recordó con cariño llamándola mi Arcadia en su
Odisea del Alma y allí transcurrió su adolescencia. Aguirre Abad, en su “Bosquejo Histórico”, al
referirse al Dr. Manuel Leocadio de Llona y Rivera le dice: “Célebre por sus talentos y más que por
ellos, por su conducta traviesa e inmoral” expresión que constituye una exageración sin lugar a
dudas.
En 1.853 ocupó la cátedra de Estética y Literatura General de la Universidad de San Marcos
demostrando amplios conocimientos sobre los clásicos griegos y latinos y sobre las principales
figuras del cristianismo. Por esos años alternaba con el periodismo, desde 1.854 hasta el 59 fue
redactor principal y literario del diario “El Comercio” de Lima, decano de la prensa peruana,
escribiendo con esa brillantísima generación poética formada por Fernando Velarde, Luis y José
Arnaldo Márquez y Manuel Adolfo García, a la que se unieron Clemente Altas y Juan de Arona, el
venezolano José Vicente Camacho, Luis Benjamín Cisneros, Ricardo Palma, Carlos Augusto
Salaverry. De esa época es su afamada “Oda al General Encoche y a América”.
Entre 1.860 y el 62 ejerció el Consulado General del Perú en Madrid y tuvo la oportunidad de tratar
a los principales literatos de la península. En 1.864 fue designado Secretario del Congreso
Americano reunido en Lima con el objeto de repeler la agresión española a las costas peruanas y
compuso el poema lírico “La toma de las islas de Chincha” que después incluyó en “Los Clamores
de Occidente”.
Obras Literarias
Entre sus obras literarias se encuentran diversos temas sobre los acontecimientos y circunstancias
de la vida. Escribió sobre asuntos religiosos y patrióticos, estéticos y filosóficos. Buscaba los temas
y los lectores. No hay una composición que no esté dedicada a un personaje o a una nación

 Cien Sonetos Nuevos


 Interrogaciones
 Amor Supremo
 Himnos, dianas y elegías patrióticas y religiosas
 De la penumbra a la Luz
 Cantos Americanos
 Nuevas poesías
 Artículos en Rosa
 Noches de Dolor en las Montañas
 Canto a la Vida*Odisea del Alma
 Clamores de Occidente
 El gran enigma
 Noche de dolor en las montañas
 Grandeza Moral

Los arqueros negros


Tras el hombro el carcaj : un pie adelante;
con el brazo fortísimo membrudo
tendiendo el arco; y, con mirar sañudo,
inclinado el etiópico semblante,
así, en hilera, el batallón gigante
de dolores me acecha torvo y mudo;
y sus saetas clava en mi desnudo
ensangrentado pecho palpitante!…
¡Mas no de tus flecheros me acobardo
ante el airado ejército sombrío;
sus golpes todos desdeñoso aguardo!…
¡Manda a tu hueste herirme, oh Hado impío,
hasta que lancen su postrero dardo!
Hasta que se halle su carcaj vacío.
Juan Rulfo

(Sayula, México, 1918 - Ciudad de México, 1986) Escritor mexicano. Juan


Rulfo creció en el pequeño pueblo de San Gabriel, villa rural dominada por
la superstición y el culto a los muertos, y sufrió allí las duras consecuencias
de las luchas cristeras en su familia más cercana (su padre fue asesinado).
Esos primeros años de su vida habrían de conformar en parte el universo
desolado que Juan Rulfo recreó en su breve pero brillante obra.

En 1934 se trasladó a Ciudad de México, donde trabajó como agente de


inmigración en la Secretaría de la Gobernación. A partir de 1938 empezó a
viajar por algunas regiones del país en comisiones de servicio y publicó sus
cuentos más relevantes en revistas literarias.

En los quince cuentos que integran El llano en llamas (1953), Juan Rulfo
ofreció una primera sublimación literaria, a través de una prosa sucinta y
expresiva, de la realidad de los campesinos de su tierra, en relatos que
trascendían la pura anécdota social.

En su obra más conocida, Pedro Páramo (1955), Rulfo dio una forma más
perfeccionada a dicho mecanismo de interiorización de la realidad de su
país, en un universo donde cohabitan lo misterioso y lo real, y obtuvo la
que se considera una de las mejores obras de la literatura iberoamericana
contemporánea.

Rulfo escribió también guiones cinematográficos como Paloma herida


(1963) y otra novela corta magistral, El gallo de oro (1963). En 1970
recibió el Premio Nacional de Literatura de México, y en 1983, el Príncipe de
Asturias de la Letras.
SARTRE, JEAN PAUL

Se educa en París e ingresa en la Universidad de Friburgo y más tarde en el


Instituto Francés de Berlín. Una vez que finaliza sus estudios se dedica
durante algún tiempo a la enseñanza hasta que comienza la Segunda Guerra
Mundial. Mientras se desarrolló el conflicto estuvo prisionero y una vez que
logró salir de su encarcelamiento se unió a la resistencia francesa. En 1945
abandona su labor como educador y crea con Simona de Boudoir "Les
tempos modernos", una publicación sobre política y literatura. Sartre se
relacionó con la élite intelectual de París, a la que pertenecían personajes de
la talla de Emmanuel Muñir, Raymond Aron, Maurice Merleau-Ponty, Claude
Levi-Strauss o Simón Neil. Su pensamiento político se inclina hacia el
socialismo. En 1964 fue galardonado con el Premio Nobel pero no quiso
aceptar esta mención al alegar que atentaba contra su integridad. Como
filósofo es autor de una de las obras más completas y originales. Se le
considera el padre del existencialismo, movimiento que tuvo una enorme
repercusión en todo el mundo y en todas las artes. De sus primeras
publicaciones destaca "El ser y la nada". En su faceta como literato también
eleva al individuo por encima de la religión o la propia sociedad. En 1960
publica su último ensayo sobre filosofía "Crítica de la razón dialéctica". En
esta obra manifiesta la nulidad del individuo frente a la sociedad moderna.
La revolución es para Sartre el único camino para recuperar la libertad,
como demostrará mostrando su acuerdo con los sucesos de mayo del 68 en
Francia.. Es autor además de otras obras como "La Náusea", "San Benet,
comediante y mártir", "Las palabras"
IMMANUEL KANT

Kant nace un 22 de abril en Kenig1 saber, capital del ducado de Prusia, cuarto de los 11
del maestro guarnicionero Johann Georg Kant y de su mujer Anna Regina Reuter.
Su madre, de religiosidad pietista, se encargaría de la educación del joven manolito
(Maneche), influyendo enormemente en su futuro carácter moral
1730-32
Ingresa en la escuela del Hospital, en las afueras de la ciudad.
1732-40
Asiste al ColegianFriodericino, dirigido por F. Albert Schütz (1692-1763), un pietista
seguidor de la filosofía dogmática de Wolff. La instrucción que allí recibió, plagada de
plegarias , oraciones y prácticas piadosas, terminó causando una gran aversión por la
práctica religiosa. De hecho, en su edad adulta, Kant no asistió nunca a la Iglesia.
En el 1738 muere su madre.
1740-46 Kant ingresa en la universidad de Kenigver el mismo año que Federico el Grande
pasa a ocupar el trono de Prusia. Entre sus estudios están la teología, filosofía,
matemáticas y ciencias naturales. Su profesor Martin Nutren le inicia en la lectura de
Newton y otros autores ingleses. Kant ya no reside en la casa paterna y se gana la vida
dando clases particulares. El 1746 muere su padre y Kant tuvo que dejar la universidad
antes de graduarse. Escribe su primer tratado: Pensamientos acerca de la verdadera
ponderación de las fuerzas vivas
1746-55 Kant trabaja como preceptor privado de familias pudientes, en los alrededores de
Kenigver. Este será el desplazamiento más largo que Kant realizará en su vida.
1755 El 12 de Junio Kant se gradúa en la universidad de Kenigver con un estudio en latín
Sobre el fuego y asume el puesto de profesor auxiliar (Privatosen) con un escrito en latín:
Principios fundamentales del conocimiento metafísico. Se mantendrá en este puesto los
quince años siguientes, impartiendo clases de física, matemáticas, geografía, cosmología y
teología. Kant lee a Leibniz y Hume. Este último autor ir despertará de su sueño
dogmático.
ORTEGA Y GASSET, JOSE

Estudió en los jesuitas de Cádiz, y luego en la Universidad de Madrid, donde se doctoró en

Filosofía y Letras en 1904. Marchó a Alemania para ampliar sus estudios en las

universidades de Leipzig, Berlín y Carbura. De vuelta en España en 1910, obtiene la

cátedra de Metafísica en la universidad de Madrid, desde la que impulsó el

regeneracionismo cultural español. Toda su filosofía está influida por Kant, filosofía que

estudió a fondo en su estancia en Alemania. Además de numerosas obras como La

deshumanización del arte (1925), España invertebrada (1921) o La Rebelión de las Masas

(1930), publicó numerosos artículos primero en el periódico El Imparcial, fundado por su

abuelo, y posteriormente en el diario que él mismo fundó: El Sol, o revistas como España

(1915) o La Revista de occidente (1923). Mostró su repulsa a la dictadura de Primo de

Rivera (1923-1930), creando la Agrupación al Servicio de la República, partido político por

cuyas listas fue elegido diputado en 1931, abandonando su cargo por su desacuerdo con

la Constitución de 1931. Al estallar la Guerra Civil, dejó España y vivió en países como

Francia, Argentina y Portugal. En 1945, vuelve a España y publica obras como: Papeles

sobre Velázquez y Goya (1950) y póstumamente, Meditaciones sobre Europa (1957).


NIETZCHE

Friedrich Wilhelm Nietzsche nació en Rochen,cerca de Laten en 1844, hijo de un pastor


evangélico, que murió cinco años más tarde, lo que hizo que Nietzsche creciera en un
ambiente completamente femenino, dominado por el pietismo protestante. Nietzsche
estudió primero en el internado de la Escuela de Porta, donde recibió los primeros
conocimientos sobre la antigüedad clásica, que se convertiría en un referente básico de su
pensamiento posterior. Más tarde estudió filología clásica en las universidades de Bonn y
Leipzig. En esta última ciudad entró en contacto con la filosofía de Schopenhauer, que
también influiría decisivamente en la formación de sus ideas, y con la música de Wagner,
a quien más tarde conoció personalmente, y del que fue un apasionado admirador. En
1869, cuando apenas tenía 25 años, Nietzsche fue nombrado catedrático de filología
clásica en la universidad de Basilea. A este nombramiento contribuyeron los trabajos
filológicos que el joven Nietzsche había publicado antes de terminar sus estudios. Su
actividad docente en Basilea se vio interrumpida por la guerra de 1870, en la que
Nietzsche participó como enfermero hasta que se vio obligado a regresar por causa de una
disentería, enfermedad de la nunca llegó a restablecerse del todo. Así, en 1876 Nietzsche
tuvo que pedir un permiso de un año por enfermedad, y poco después, su jubilación; la
ciudad de Basilea le pagó una pensión durante el resto de su vida, hasta que murió en el
año 1900.En 1881 Nietzsche conoció a Lou Salomé, de la que se enamoró profundamente;
pero esta mujer no le correspondió, sino que se casó con un amigo suyo. Tras su
jubilación, Nietzsche pasó largas temporadas en la Riviera francesa y en el norte de Italia,
dedicado a pensar y a escribir. Pero sus obras no tenían el éxito esperado y Nietzsche se
iba quedando cada vez más solo. A principios de 1889, en Turín, cuando ya estaba casi
ciego, Nietzsche sufrió una crisis de locura de la que no se recuperó. Estuvo internado en
una clínica de Basilea y, después, en otra de Jena, hasta que su madre se lo llevó consigo.
Nietzsche vivió los últimos doce años de su vida en un estado de aletargamiento, bajo los
cuidados de su madre y luego de su hermana, hasta que murió en el año 1900.

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