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A dónde va la educación.

Jean Piaget Edson Manuel Mtz. Mtz.


Sesión: 29 Grupo: 1101

Capitulo tres
Los padres en varias ocasiones son una barrera que impide la aplicación de los
métodos activos. Esto se entiende por dos razones: los padres desconfían de
métodos que no conocen y confían en sus propios métodos utilizados desde hace
tiempo y no quieren que sus hijos sean participes de experimentos. La segunda
preocupación de los padres se centra en la cuestión de que sus hijos no estén
retrasados. Existen también en cuanto a la orientación de los alumnos en el nivel
secundaria conflictos entre la voluntad de los padres y las indicaciones de la escuela
o la oficina de orientación. Esto se resuelve si se informa e incluso se guía a los
padres acerca de la mejor educación para brindarle a sus hijos. Se emplean
medidas con esta finalidad como lo son los congresos de educación familiar para
informar sobre los problemas de la educación interior de la familia, cuestiones
escolares y pedagogía en general. También se pusieron en marcha movimientos de
colaboración entre la escuela y la familia que han sido fructuosos y benefician a
ambas partes.
Capitulo cuatro
En qué consiste la finalidad de la educación, Piaget desarrolla el objetivo de la
educación de acuerdo al artículo veintiséis, él menciona que puede ser modelar la
personalidad o modelar a los alumnos según modelos antiguos para que conserven
valores colectivos. En la escuela tradicional los alumnos son sometidos moral e
intelectualmente, ellos deben de asumir conocimientos para tener éxito en las
pruebas finales. Sin embargo, decir que la educación es el desarrollo de la
personalidad significa, para Piaget, que se tiene que diferir de un modelo como el
de la escuela tradicional. El desarrollo de la personalidad consiste en una relación
de reciprocidad y hay que diferenciar entre individuo y personalidad, el primero es
el yo centrado en si mismo y poniendo barreras con su egocentrismo moral e
intelectual a las relaciones sociales, y el segundo es la persona que acepta una
disciplina o que contribuye a su constitución y se somete a sus normas que
subordinan su libertad. Desde el punto del desarrollo de la personalidad, los niños
pueden formar una razón activa y autónoma, pero es claro que la escuela te provee
de bastantes conocimientos para que ejercites tu intelecto y lo desarrolles, aunque
al final no se aprenda lo suficiente y olvidemos casi todo. Los partidarios de la
escuela activa dicen que la extensión del programa importa menos que la calidad
del contenido, que es mejor conquistar a través de esfuerzo libre y esfuerzo
espontaneo el conocimiento; de esta manera lo podremos recordar mejor y permitirá
que el alumno adquiera un método para toda la vida y que se amplié su curiosidad
sin riesgo de agotarse. De esta manera la memoria ya no dominará al razonamiento
y aprenderá el alumno a ejercitarla por sí mismo. La escuela activa, su método para
que el alumno aprenda por si mismo, necesita de concomimientos psicológicos. Un
ejemplo de estos conocimientos son las investigaciones sobre la estructura de las
operaciones lógicas, los resultados muestran que estas estructuras no solo se
forman por ejercicios verbales y que es mucho mejor la acción sobre los objetos y
la experimentación. También suponen que es mejor la colaboración en equipo que
la actividad individual. Respecto a esto, Piaget propone que si es mejor que el
alumno solo escuche las mejores lecciones sobre la lógica o es mejor un ambiente
colectivo de investigación y experimentación, él menciona que para dar respuesta
a esto es mejor investigar cómo se construye el pensamiento lógico o las etapas
psicológicas real de las operaciones del niño para que puedan formarse métodos
para enseñar estos conocimientos. Los estudios muestran varios datos importantes
para una mejor enseñanza de las operaciones matemáticas. En la educación
tradicional de esta materia el alumno es pasivo y recibe un conocimiento que ya
esta organizado y acabado, que él mismo podrá o no entender, mientras que en un
contexto autónomo el alumno descubre, por su propia cuenta, las relaciones y las
nociones de las matemáticas. Sin embargo, algo muy importante para Piaget es que
tampoco se pueden separar las relaciones afectivas en el contexto de la escuela, la
educación es bastante compleja y no es posible formar personalidades intelectuales
autónomas si el niño está sometido al intelecto del profesor y no descubre el
conocimiento por si mismo, si es pasivo intelectualmente no puede ser libre
moralmente. Y también si su moral consiste en una sumisión a la autoridad, y si las
únicas relaciones que existen entre un maestro y el alumno son de sumisión,
tampoco el niño será autónomo intelectualmente. La escuela activa supone una
actividad, alternando trabajo individual y grupal, porque la vida colectiva es
indispensable para el desarrollo de la personalidad. Respecto a la educación moral
se plantea la pregunta de si se pretende formar individuos sometidos a las
tradiciones o se pretende formar conciencias libres de individuos respetuosos de los
derechos y libertades de los demás, para Piaget, esto se refleja cuando el maestro
imparte lecciones sobre los valores que no son suficientes para crear relaciones
vivas, de hecho, solo es por medio de autonomía y reciprocidad. Los dos problemas
principales de la educación moral son: asegurar una descentración de la actividad
de la persona y construir la disciplina. En oposición al individuo que todavía no
alcanza la personalidad y solo ignora reglas y centra sobre sí mismo las relaciones,
la persona es quien se sitúa en su yo y en una auténtica perspectiva con relación a
los demás que lo inserta en un sistema de reciprocidad que implica una disciplina
autónoma y una descentración de la propia actividad.

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