Está en la página 1de 2

El camino de la soledad

La fragmentación actual de los lazos sociales fomenta un sentimiento de soledad que


limita nuestras vidas, no estamos solos, sino que nos sentimos solos. La diferencia
es la intensidad y la satisfacción que recibimos en la relación con los otros.

La soledad esta asociada al vacío y la tristeza, causa temor y desesperación sobre


todo cuando ha sido postergada durante un largo periodo de tiempo.

La dificultad para estar solo, tanto como las dificultades para relacionarse con otras
personas, forma parte de los aspectos centrales de la soledad.

En la vida todos caminamos en soledad


Todos en algún momento de la vida hemos transitado por el camino de la soledad,
una experiencia de desarrollo personal que nos abre las puertas al despertar
interior desconocido. Algunas personas están convencidas de que la soledad es
mucho mejor que el hecho de sentirse mal acompañado.

Cuando nos rodeamos de gente nos limitamos a seguir las creencias de los demás
para no romper con la dinámica de grupo. La soledad, en cambio, significa abrirse
al pensamiento propio y original.

La soledad es la fuente de las inspiraciones


Las personas somos seres sociales, pero tras pasarnos el día rodeados de gente,
atentos a las redes sociales y conectados al móvil, la soledad ofrece un espacio
sanador de reposo.

Algunas personas que han experimentado la soledad han creado obras de arte y han
llegado a un grado de concepción de descubrirse a si mismos.
Tenemos la creencia de que toda creatividad y productividad proviene de un lugar
extrañamente sociable. Sin embargo, la riqueza creativa que surge de la soledad es
el ingrediente crucial de la creatividad. La soledad para algunas personas es tan
importante, como el aire que respiran.

La conquista de tu libertad
Cuanto menos solo estás, más te cuesta estarlo, pero solo cuando estas a solas
contigo mismo es cuando eres completamente libre.

La vida se organiza y se construye en las relaciones interpersonales. Nuestra


conducta está configurada, en gran parte, por la vida con los otros; así
como nuestras creencias.

Las relaciones permanentes, generan expectativas, crean lazos y vínculos que


consolidan certidumbres y permiten construir un sentimiento de continuidad,
de protección y seguridad.

El termino “soledad” esta ligado a la situación de una persona que esta sola
momentánea y asociada al aislamiento, al estado de abandono y a la separación.

Si toleramos el aburrimiento y el vacío seremos capaces de desarrollar algo nuevo y de


desintoxicarnos de un mundo lleno de estímulos y de sobrecarga informativa.

La soledad no presenta de modo sistemático una connotación


negativa
“Estar solo” es algo que se aprende, uno aprende a estar solo, a soportar el
sentimiento de soledad y también a aprovecharlo de buena manera.

En el camino de la soledad dejamos ese espacio en blanco para escuchar sin


interferencias lo que sentimos y necesitamos.

Es importante no confundir la soledad con el aislamiento, de hecho, aislarse es un


modo de evitar la soledad. La soledad no excluye necesariamente al otro, como ocurre
cuando uno se aísla de los demás.

Podemos aislarnos de muchas maneras, sin que haya la mínima realización de


soledad.

Por lo tanto, no es lo mismo “estar solo” que “sentirse solo”, como tampoco tener
muchos amigos significa no estar solo. Lo que cuenta en todo esto es la intensidad y
satisfacción en la relación con los demás.

También podría gustarte