Un embudo gigante ha sido posicionado por técnicos de la empresa British Petroleum
encima de un pozo petrolero averiado en el fondo del Golfo de México, en un intento por contener el derrame de petróleo ocasionado por la plataforma petrolera Deepwater Horizon. Sumergibles a control remoto guiaron el domo de hormigón y acero de 98 toneladas de peso, hasta el sitio del pozo, a unos 1.500 metros de profundidad. En caso de tener éxito, esta especie de aspiradora gigante recogerá un 85% del petróleo vertido en el lecho marino, que a través de barcos será llevado a tierra firme. Petróleo procedente del derrame ya ha llegado a las costas de Luisiana en Estados Unidos. Antecedentes Varios expertos indican que en el pasado la utilización de domos ha funcionado para contener los derrames de crudo, pero advierten que la profundidad a la que se encuentra el oleoducto presenta un gran desafío, pues el dispositivo gigante debe ser manejado con mucho cuidado para colocarlo en su lugar. Los detractores del proyecto temen que el dispositivo dañe aún más el pozo por sus grandes dimensiones y que empeore la fuga. La embarcación Joe Griffin llevó el domo al fondo del mar. También hay quienes creen que el domo podría atascarse o que podría producirse explosiones en la superficie al separar la mezcla de crudo, gas y agua. Sin embargo, el director ejecutivo de BP, Tony Hayward, defendió la operación y le aseguró a la BBC que la compañía ve el plan como "una batalla de tres frentes: bajo el mar, en la superficie y en la orilla". Estos frentes no han impedido que la marea negra alcanzara las islas Chandeleur en Luisiana, que alberga a un gran número de aves acuáticas. Según el corresponsal de BBC en Alabama, Rajesh Mirchandani, "se han encontrado aves como pelícanos y alcatraces cubiertas de petróleo a lo largo de la costa pantanosa" de las islas Chandeleur, la zona más cercana a la fuga. Las islas, que están deshabitadas, forman parte del Refugio Natural Breton y están consideradas el segundo refugio más antiguo de aves en peligro de extinción.
El derrame petrolero en el Golfo de México se
produjo después de que ocurriera una explosión en la plataforma Deepwater Horizon, administrada por BP, el pasado 21 de abril.
En el incidente en el que murieron al menos 11 personas se rompió el oleoducto que
estaba conectado a la infraestructura. Desde entonces unos 5.000 barriles de crudo se derraman diariamente en las aguas del Golfo.