LA CORRESPONDENCIA DE LOS BUFOS,

•—*••*'•••"" n i R E C T o a . ADMINISTRADOR.
n. Alfredo á i n c i r a y Ar«Ierlu».
PBEGIOS.
PEEIOBIGO SEMANAL. n. Eduardo Valladares.

PUNTOS DE SUSGRIGION-
EN MADRID —Un mes ....
PROVINCIAS,—Tres meses
2 rs.
2n
ECO PÍRCI4 u , mmn m LA EMPRESA DE LOS BUFOS ARDERIÜS. En la Contaduría del teatro de los Bufos,
ULTRAMAR _iaem u\
ESTRANGKRO.—l·lemia. . 20 remitiendo al Admininistrador el importe
Anuncios á «EAL Y MEDIO línea. !/ COLABORADORES. en sellos de correos ó libranzas de fácil
«obro.
\/'
m NUMERO SUELTO ^OS CUARTOS. NUMERO SUELTO í ) O S CUARTOS
Arderiüs. Arrcyo y Cobos, Cubero, Cn.lilla, Castillo, Granés, Larra, IJern, Lnstonó, Lerronx, L·iiccüo, Puente y Braúas, Picón, Pastorfido, Palacios, Pastor
Ponzano, Ramos Carrión, Rivera, ^antisteban, Man Martin, Valladares y todos los españoles y españolas que sepan leer y escribir. '

AÑU I . o - N U M E R O I." M A D U . D . — J U E V E S 16 DE F E B u E R O DE 1871. UEICINA;^ CONTADURÍA DE LUS B U F u S .

ADVERTE N ClA IMPORTANTE. llenaba las localidades, aplaudió hasta —«¿Cuándo me paga Vd.? preguntó talón muy alumbrado, y una ancha escalina -
lo infinito los delicados chistes que en- hace días uno de nuestros primeros ta: es la que conduce al teatro de La Infantil.
cierra la obra, y su ejecución perfecta. sastres á unos de nuestros primeros Subid por esa escalera y por un real de ve-
Al aparecer en el arenal periodístico, Distinguióse sobre todos el Sr. D. Fran- elegantes que es á la vez uno de los llón os darán una entrada para una í^ala muy
LA CoRRKSPijNDiíivciA DE LOS BuFos, no cisco Arderiüs el cual estuvo á una primeros deudores que se pasean por bonita; os sentareis en una camoda butaca, y
altura extraordinaria. ¡Qué verdad] ¡Qué Madrid. vereis^íeíd y baile.
tiene mas que una misión: la de defen- naturalidad, y qué bien caracterizado!
der á tinta j pluma los infereses mo- —«Cuando Vd. deje de fiarme» con- Pedir mas, fuera injusto.
Reciba nuestro pláceme este emineuLe testó el interpelado, y contestó muy Dejemos a u n lado la 'pieza, y vamos á lo
rales y materiales del teatro de Los artista. Si nuestros elogios parecen bien. que importa: al baile.
Btifos Arderiüs. parciales, léase el distinguido nombre Las modistas, sastres, zapateros y Asisten á tan animado espectáculo muchos
que aparece al pié de esta revista. dem;ís artistas que hacen obra para un
¿Cumplirá esta misión*? oficiales de la guarnió on; aficionados á galan-
Ardu i. es la empresa, mas sin em- FRANCISCO A R D E R I Ü S . individuo de la buena sociedad, cobran tes aventuras; horteras bulliciosos y habitan-
su crédito pero no en metálico, y van tes de los pueblos inmediatos á Madrid, cuan-
bargo, los campeones] de nuestro pe- al Paraíso del Real ó á un anfiteatro do tienen que hacer noche en la corte.
riódico, son muchos; son bravos; son del Príncipe, á señalar con el dedo á>u Tal es, con algunas escepciones, el público
esforzados. LA BUENA SOCIEDAD. elegante parroquiana ó parroquiano, masculino que concurre á la Infaltil,
Nosotros nada prometemos, por no diciendo: Respecto al femenino, y perdónenos si lo co"
vernos en la necesidad de no poder Mas de un provinciano habrá que al —«A esa la visto yo» ó «á ese le hago locamos en segundo lugar, es mas variado.
la ropa. Mamas aficionadas al café con tostada d »
cumplir nuestras promesas: conste. leer en el rincón de su pueblo alguna
Por buena sociedad, debe pues en- abajo en invierno, y á los tarros de pomada
Lo que si podemos asegurar y esto de las revistas de Madrid que publican tenderse, la sociedad que es buena, lo (digo, sorbetes) en verano; modistillas recom-
entra en nuestfa conveniencia, es que los periódicos de la corte, dando cuenta mismo para asistir el Jueves Santo á puestas; enamoradas sensibles; algunas seño-
del movimiento de la semana, lamente
LA CORRESPONDENCIA D E LOS B U F O S su mala estrella que no le permite los oficios délas Comendadoras de San- ras amigas de verlo todo que fingen escanda-
procurará tener gracia y será impoUti- figurar como parte activa en esta zam- tiago, que el Domingo de Piñata á un lizarse del can-cán; doncellas de labor francas
co; es decir, no hablará jamás de poli- bra continua de tés danzantes, bailes baile de trage corto por arriba, que vá de servicio, con su peinado á la última y flof
de buena fé á donde le llaman á diver- económica á varlovento, y otra infinidad djB
tica, pues eso se queda para graves y cenantes y comedias... cargantes. tirse, que tiene tan bxtena pasta, que ciudadanas que seria prolijo enumerar. r
encopetados periodistas, y nosotros á De fijo que al oir tantas veces repeti-
da |la frase sacramental de «La buena pone buena cara á la esposa infiel, sí Figúrense los que esto lean, á táu completo
Dios gracias carecemos de tales cir- sociedad de Madrid, asistió á tan brillan- recibe y dá buena cena y que admite de mosaico humano confundido, barajado, entre-
cunstancias: conste también. te fiesta, esclamará para sus adentros: buenas áprimeras'las modas mas estra- mezclado en las diferentes localidades de u n
LA CORRESPONDENCIA DE LOS BUFOS, —«Cuanto siento no poder ver de vagantes y ridiculas por el solo hecho lindo teatrito con sus correspondientes palcos
cerca esa reunión de personas tan bue- de venir del extranjero. encajonados en las paredes y su anfiteatro s e -
hablará de teatros (del nuestro espe- Con que ya lo sabéis, candidos pro- mí-lóbrego, y dígannos lo quQ quede resüííar
cialmente), de acontecimientos locales, nas, que serán seguramente modelos
sin escepcion alguna de virtudes cí- vincianos, cuando lóais en alguna-lfe- de allí.
de bailes, paseos (siempre que el tiempo vicas, públicas y privadas, formando vista la salida fracesita de...
lo permita), y aun algo de salones por decirlo así el cogollo de la sociedad «La buena sociedad se dio cita en LííS mamas rinden culto & Morféo; las niñas
aristocráticos, pues cuenta con activos madrileña!» los salones de la Duquesa H..., podréis todas se v uelven ojos; los músicos de oreja con
Y al raciocinar de este modo se lleva- esclamar sin temor de engañaros: quienes están en inteligencia, se colocan en
corresponsales en tan encumbradas e s - —«Enterados y trampa adelante. sus inmediaciones 6 al margen; 6 unidos á los
feras. rá un solemnísimo chasco, porque una
autos, como diría el escribiente de un procu-
cosa es la gramática y otra cosa es el RAFAEL GABCIA Y SANTISTEBAN.
Los artículos y novelas de nuestro lenguaje corriente que un amigo mió rador; loa que van á caza de gangas dirigen
periódico, saldrán de plumas de los llama el caló de los salones. tiernas miradas á derecha é izquierda; retuer-
cen los bigotes; toman posturas académicas en
e.scritores de mas punta, j su ameni- ¿No dice una señora «voy á vestirme»
sus asientos, y juran por sus dioses hítóSi'Hina
dad y gracejo serán capaces de hacer cuando vá á desnudarse todo lo que FATALIDAD, co«?Mí«ía. ¡Amor ola muertel
sonreír á la estatua ecuestre de la puede? ¿No es un elogio decir de dos ¡Qué de blandos pisotones; qué de signifi-
honrados esposos que recibieron en su Al recoger Inés, porque llovía.
Plaza Mayor, que todas las tardes casa, «que se multiplicaron durante la cativos apretoncitos de manos y de furtivas
Sus limpias faldas de bordada blonda. miradas, no podría darnos cuenta aqtlel b e n -
contemplan absortas un sin número de fiesta,» cuando lo que hicieron fué estar
Enseñaba la pierna mas redonda dito salón! 'i
niñeras. divididos toda la noche? Que puede tornear la fantasia. Suena la orquesta; la^'eaa ha terminado y
Poco de poesías y otros escesos. Todo ¿Qué señorita aficionada, que haya Sigúela Aurelio sin quitarle ajo, los acordes cancanístíoos hacen estreiüecer á
cantado una aria ó romanza podrá Cae, se rompe una pierna, y queda cojo.
lo mas que nos permitiremos será a l - ofenderse si un gacetillero asegura los espectadores.
guna que otra composición epigramá- «que se excedió á así misma» frase que Escrita estaba la fatal cojera. Alzase nuevamente el telón, y aparece una
¡Si llega á hablar á Inés, lo mismo fuera! enmarañada selva pintada con amarillo, verde
tica, charadas y otras elucubraciones que no quiei'e significar como á prime-
y color de chocolate de Astorga. '
por el.estilo, pues bien sabido es que ra vista aparece «que se escedió can- KlCAKDO PUBNTE Y B B A Ñ A S .
Por la izquierda del espectador, no sale una
al público no le agradan poesías senti- tando» (y los escesos en el canto se ninfa con traja vaporoso, sino sencillamente
llaman gritos ó gallos), sino que cantó
mentales y de largas dimensiones. La como una calandria ó un ruiseñor? El Sr. Arderiüs ha remitido á la j u n t a de una mujer con vestido largo y botas imperia-
generalidad de los lectores prefiere una auxilios de Zaragoza, la cantidad de 3.500 rs., les. Sigúela un sátiro al gusto del día; es de-
Pues por la misma razón al hablar producto líquido del beneficio que se día en su
poesía que lleve por título: ,A las ligas de la huena sociedad, no se trata de la cir [un hombre con frac y corbata blanca, y...
teatro, con tan laudable y caritativo objeto. Comienza el baile.
de mi morena, á otra que campee bajo bondad moral sino de la bondad amable ¡Y después dirán que no somos unos caba- Algunos repliegues de vestido; varios mo-
el.de... Las agonías de Pílalos, por y consecuente de cierto número de llerosl vimientos de hombros y caderas excitan el
personas, que acuden siempre.á un
ejemplo. sitio dado á verse, á saludarse y á público entusiasmo.
Con lo dicho basta, y si bien se con- murmurar unos de otros. Anteayer fué atropellado por un carruaje —¡Bravo! ¡Bien! \Mnchol
sidera aun sobra. La buena sociedad debe tener buena en la calle de la Montera, un individuo, que Gritan desde todos los rincones de la sala.
sufrid bastante en su idem tsniendo que ser El compás se hace cada vez mas vivo.
Y sin mas por hoy saluda á sus lec- ropa, buenaá'iáañeras y buena salud pero
curado de primera intención en la casa de so- Una nueva pareja idéntica á la primera, apa-
tores, sin humillación , aunque con las buenas costumbres no son de rigor, corro del segundo distrito, y trasladado des- reoe por la izquierda. Es como si dijéramos, lo
y como para figurar dignamente en
mucho respeto, esta clase es preciso exhibirse mucho, de íllí al hospital de los Paules. escogido; lo mejorcito, el refuerzo; el eje'roito
EL REDACTOB ifE SEMANA. y las funciones gratis son las menos y ¿Y al conductor del carruaje que castigo se de reserva del euerpo de baile.
la vanidad, no llena el bolsillo de duros le ha impuesto?... ^Entonces la algazara aumenta; acrece el en-
como la cabeza de humo, resulta que tusiasmo.
una gran parte de los individuos que se Pero cuando este raya en frenesí, ea en el
REVISTA DE LA SEMANA. enorgullecen figurando en este sucursal momento en que la bailarina alza la faldimenla
del buen tono, pertenece, no á la buena EL ÒAN-CAN. y haciendo .unos picarescos movimientos de
En el afortunado teatro de Los Bufos sociedadsino[ála malaáelos tramposos, cabeza, pasa la pierna por encima de la cabe-
Arderiüs, se puso en escena por vez tramoyistas y petardistas de frac y za de s\i pa];ejo.
primera el lunes de la presente sema- corbata blanca. ¿Habéis visto, ¡oh lectoresl este célebre —¡Fulanita, murmuran los amantes menos
na, la lindísima j^arzuela de mi querido El estar abonado á una butaca de' baile?... Íntimos al oído de sus amadas; quien me diera
amigo Puente y Brañas; música de mi primer turno en la Opera ó en la Zar- ¿No? pues por poco dinero podréis satisfacer que de ese íaismo modo me pasases tú. t a m -
también amigo queridjoRogel, titulada: zuela no supone que se pague al sastre, VIH stra curiosidad, si es que la tenéis. bién á mí
Canto de Angeles. El público que, sin ni al casero, ni al zapatero, que no son Ti-; 1 una noche cualquiera por la calle de Hilas sonríen y callan. ¡Oh inocentes! ¡OU!..
duda escamado de otros estrenos no gente de buena sociedad. Carretas y á la mano izquierda, veréis un por- pero continuemos.

—Oblígalal
Gritan algunos revolviéndose impacientes
en sus asientos.
Y cae el telou en medio de los aplausos mas
estrepitosos.
Pero el can-cán se repite siempre, y enton-
ces los artistas lieclian el resto. Aquello no es
baile, es pataleo; furor; entusiasmo; delirio
imponderable.
Los artistas se retiran por fin rebosando j ú -
bilo, saboreando la tumultuosa obaoion tan ea- noches.
tisfeehos de sí mismos, como el general que
gana una batalla; como el autor dramático
que receje coronas de papel pintado en el e s -
cenario, y billetes de banco en contaduría.
Los cancanistas escapan al entusiasmo de
sus admiradores que se los comerian en aquel
momento, y los pollos y hombres sensibles
sueñan aquella noche con botas imperiales;
ligas coloradas y otros escesos.
¡Hé aquí el cancánl ¡Hé rquí el célebre bai- pañía de verso, no es por tener este oficio, sino chos quemados, una botella sirviendo de can
le de la Infantil!
Conceda Dios muchas ganancias ¿ su em-
presario, y aumente si conviene la gracia de
sus acreditadas bailarinas.
Por lo demás si hay* alguno quo crea que
hemos exagerado, con veilo basta como djjo
el otro.
Y por un real de entrada
li dos si apetito asedia,
tendrán café con tostada
y gran can-can, y comedia.
ANTONIO DE SAN MARTÍN.
El gabinete central de telé-rafos ha recibi-
do y espedido les siguientes telegramas, que
debemos á la amabilidad de uéempleado:
Madrid. Bufos Arderius.
Ayer me planto Soler.
La vida agreste me espanta.
Quiero entrar de suripanta.
Dimc lo que debo hacer.
PEPA.
APEPA.
Ronda,.
De Soler ya no te acuerdes.
¿¡Suripanta quieres ser?
Lo primero que has de hacer
Es comprarte botas verdes.
Otras de color de grana
También te harán muy al caso;
Y serán siendo de raso,
Mucho mejor que d^ lana.
Debes el pelo cortarte
En cuanto pienses venirte
Y debes mas que á vestirte
Aprender á desnudarte;
Debes pensarlo primero
Y si á ello después te atreves,
Debes. . ante todo debes.
Deber algo al zapatero
Muy puntual deberás ser
Al ensayo .. y deberás... « —l'ues mira, si tu te atreves á hacer lo que
Bien que en Madrid ya tendrás
La conciencia del .üehtr.
Debes conseguir que halague
Tu palmito á cierta gente.
Que influye aquí y finalmente
Deberás... buscar quien pague.
Si guapa, no exijen notas.
Conversación, natural;
Mas de un colorciUo igual,
Al de las primeras botas.
Eu etto sígueaie á mi.
3il sueldo, dos pesetillas.
¿Cdmo estas de pantorrillas?
¿Sabes solfa? ¿das el sí'?
Cou mañano es esto un potro.
Deja de ser sexo bello.
, Dime el volumen de aquello
para gobierno del otro.
Bailar, hacer una plancha,
Buenas formas, poca fecha,
Ganoh". la cintura estrecha,
-Salia-o, la pierna ancha,
Manejos, üvoluoioaea,^
Canean, sonrisa, mareo
Gracia, chic, y algun toreo*.
Si te h'illas en condiciones
Deja tu rústico aprisco, • —Pue.i ahora inisaio, pagúeme V.
Y Buripauta serás;
Que una suripanta mas...
¿Qué le importa á Don Francisco?
E. LlEBS.
LA CORRESPONDENCIA DE LOS BUFOS.
TIPOS MODERNOS. - P u e s como ya no eres cómico de mi café, de Puente y Brañas y música de Rogel. Si no
se la tomará el primer parroquiano que la salen complacidos del teatro de los Bufos,
pida: ó si la tomas la pagarás. que nos emplumen.
E L GA.LAN D B C A F B .
—Pues con Dios. En esta obra desempeñada por la señorita
Cejijunto, de frente deprimida, ancha boca —Di guia otra vez. Alvarez, y los señores Arderius, Rosell, Pon-
aun procurando ocultarla con un bigote r e - Y ya tenemos ajustado á Pepe (así le llama- zano y Castilla, el público hace salir con repe-
remos.) tidos aplausos á estos distinguidos y simpáti-
cortado, estrecho de hombros, estirado en su
apostura, manos ocultas en guantes viejos, Se dirige triunfalmente á la puertecilla del cos actores, y por las barbas del P . Peta vio
escenario y dice al primero que encuentra: que bien lo merecen. También llamó á la es-
pies j uanetados forrados de charol de vaca,
- O ^ e . cena á los señores Puente y Brañas y Rogel,
y el todo de la figura cubierto de paño, se pre-
—Qué, dice el interpelado. padres dichosos de la criatura: de la obra, he-
senta á los ojos de sus admiradores todas las
—¿Cuál es el sitio onde se ponía ese á tra- mos querido decir.
bajar?
Recita, cual niño que va á la escuela, su pa-
—Quién, P a t a s .
pely para dar muestras de su memoria, habla
—Sí. Dice Las Novedades:
de prisa y sin tomar aliento.
—Detrás de esa cortina, « E s t r e n o . Anoche asistimos al que t u -
Todos le conocéis, le habéis visto, á alguno
le ha servido café, á otros les ha compuesto —A ver. vo lugar en los Bufos. Representáronse las
una mesa, á otro, si es escritor, le ha plagado —Entra. zarzuelas en un acto Matemáticas y Canto de
de erras lo que le ha tocado de composición. Y se dirijen los dos á una especie de rinco- Angeles. La primera fué una cosa que terminó
Porque el galán de cafe ha sido todo, el ga • nera cubierta con una saya vieja: detrás sobre sin luz y sin moscas, llevando al final recuer-
lan de cafe si hoy está al frente de una com- una tabla clavada á la pared, se ven dos cor- dos tristes del escogido público. La segunda
basada en un pensamiento de Alfonso Kar, es
porque el suyo con las circunstancias no pro- delero, y una cazuela llena de agua sucia, col- un chistosímo juguete del Sr. Puente y Bra-
duce, y de algo le ha de servir á un hombre gado de la pared un espejillo redondo, y en el ñas, escrito con suma gracia, y magistralmen-
haber aprendido á leer, con esto basta, el Con- suelo algunas botas viejas y pantalones rotos: te desempeñado por los Sres. Arderius, Ro-
servatorio, los teatros, los actores antiguos, este es el ajuar del primer galán. sell, Ponzano y Castilla. El público pasó un
son inútiles hoy, un hombre, un encuaderna- —Y los papeles, pregunta Pepe. rato agradabilísimo, llamando al final al a u -
—Toma, los tiene Patas en su casa.
dor por ejemplo, ha pasado quince años, con tor y á los actores. Aconsejamos á nuestros
—¿Y con qué voy yo á estudiar las comedias? abonados no dejen de ver Cantada Angeles.*
el chifle, y los hierros entre manos, llega un
—Pides al ajpuntaor los suyos.
dia que esto no produce, pero este hombre
—Bueno.
sabe leer y aun escribir, y a m a s conoce al due-
Y se dirije al apuntador, le pide las come-
ño del café de los Aburridos, (este dueño de
dias, se va á su casa, y sin dejar de la mano
café se llama ahora empresario) sabe que el EPIGRAMA.
el asunto se pone á estudiar de memoria, no su
galán, primer actor y director general de la
compañía, va ha romper su convenio ó pacto, papel y las distintas peripecias de él, sino t o -
Mientraa Juan á pié camina,
pues basta y sobra, se acerca al mostrador da la obra para poderla decir siu ayuda de
apuntador. Va en berlina su mujer.
y... pero escuchemos su diálogo.
Al día siguiente á las nueve en punto, se Y mi cacumen no atina
—Buenas no hes don Manuel.
presenta al ensayo, procura hacer reir dispa- Por qué el mundo da en creer
—Hola chico, qué traes? Que es Juan quien está en berlina.
—Saludarle á V . como 3s debido. retando sin saberlo, y á fuerza de tropiezos
—Bien hombre: y que tal, ¿se trabaja m u - por la no che, grita y se esfuerza, y por ú l t i - P . y BRAÑAS.
cho éh? mo, se traga el pisté y la chica, recibiendo los
—No señor y á eso voy. aplausos y plácemes de los parroquianos (abo-
—¿A buscar trabajo? nados.) Nuestro apreciable amigo el agente de t e a -
—Sí, pero no en el oficio, eso está perdió, Hé aquí de que manera se hace hoy un a c - tros Sr. Sarmiento, nos ruega hagamos públi-
usted puede darme ocupación para que yo me tor, y no solamente actor, sino primero, y di- co, que todos aquellos que á escitacion suya
gane el jornal. rector, y andando los meses, eminente, s u - se hayan suscrito al periódico titulado El Tea-
—¿En dónde? blime, etc., porque ya el café-teatro ha ensan- tro, •jue no sabemos porque causas ha dejado
—Aquí. chado sus aspiraciones, aquel actor que hemos de publicarse, y se crean con derecho á algun
visto pasar del taller de libros al café, pasa un número del referido periódico, envíen á la Ad-
—¿En el café?
—Sí señor. año y sus tres pesetas de sueldo las convierte ministración de L A CORRESPONDENCIA DE LOS
—¿Eres cómico? en seis, y compra retales de equipaje de acto- BUFOS, el correspondiente recibo, y se les r e -
Toma, yo, vamos al decir, eso de haber res de nombre y se hace trajes y pretende mitirá nuestro periódico basta completar los
salido á una escena, no lo he hecho nunca, ajuste en los principales teatros, y si logra su números que hayan dejado de recibir.
pero soy instruido, se leer, entiendo uu poco uhji'to y sala á la escena, al verse en un esce- '^üm
de pluma, y pa decir lo que se dice en las co- nario real y efectivo, el pánico se apodera de
su atrevimiento y al compás del temblor de El domingo próximo tendrá lugar en el teatro
medias, no me falta desparpajo.
sus piernas mueve la ca'ieza y rompe la escri- de los Bufos-Arderius, el tercero de los bailes
—¿Y ropa, tienes?
de la sociedad Mabilte. El sábado anterior h e -
—La semana que viene si esto dura, tendré tura arrojado ignominiosamente por el públi-
co, y vuelve á su café, y por último tropieza mos tenido el gusto de asistir á tan brillante
que empeñar ií la mericana ú el chaquetón,
con un amante de la literatura y del arte, y fiesta. La concurrencia era numerosa, alegre
¿sabe V . cual?ese que raehice de aquel gabán
sin liesórden, y elegante sin pretensiones. En
de don Prudencio, qué, si está mas nuevo que le ayuda á ser empresario, y ya no tiene in-
conveniente en decir quo es eminente y subli- Mabitie se baila el can-can honestamente, si
cuando me le hice.
me, y asi lo escribe en el cartel y á que mas. nos es permitido servirnos de esta frase, sin
—¿Y no tienes mas ropa?
que por esto se prescinda de la gracia, anima-
—Si señor, tengo la capa de los domingos, ¿No vemos todos los días las esquinas de Ma-
ción etc., etc., que constituyen este célebre
el pantalon de patencur que me hice el año drid embadurnadas con esos libelos que lla-
baile. A Mabille asisten elegantes jóvenes de
pasado, dos chalecos, que en poniéndolos bo- man al público á los cafés-teatros, disfraza-
buen humor, niñas bor.itas como flores de
tones están nuevos, y lo que traigo puesto, los de templos del arte?
primavera, y encubiertas mascaritas ó masca-
que es la ropa de trabajar. MARIANO LERROUS. rones, (vaya V . á saber,) que dan bromitas de
—Toma, esa te^Mí servir pa los saínetes.
esas que levantan ampollas. Dárnosla en-
—Es verdad.
horabuena á la sociedad Mabüle, á quien tan-
to lavorece el público de la capital.
hace el que teugo, te ajusto. AOONTECIMIhNTOS NOTABLES
—En üúude se ponga á trabajar un hombre DE MADRID.
estoy \ó, y lo que el gane, me comprometo á
ganarlo, tan bien como ci primer nacido. —Diga V . , señor don b'rancisco:
—Pues mira, yo soy claro, al otro le doy tres Después de tantas aguas llovedizas, hela- — Qué se le ofrece á V . doña Narcisa?
pesetas cada noche y café con' media, á tí te das negras, y nievfjs, desembufandóse el se- —¿Continúa V. con mi niña desde el Uler-
daré lastres pesetas y en vez de caíé, pisté y ñor dtí Sol y los habiluutos estatiies y transeún-
eóles de Ceniza en adelante?
una chica, ¿te hace? tes en '.a coronada villa de aquel animalito, á
—¿Cómo que si continúo con ella?
—Trato hecho. quien imitan tantos amadores.'salieron defus
—Quiero decir, si sigue contratada?
—Pues al avio: ¡mozo! casas por esas calles de Dios á orearse y a dis-
—Pero hija, si falta un mes toda/ía para
Se presentó el primero que pasaba por allí frutar del buen tiempo.
concluir la temporíida: qué prisa tiefe V . por
y le dijo don Manuel: Los paseos se vieron llenos de elegantes da-
saberlo?
—Di á Patas que salga del vestidero. mas y de itildadüs galanes; la Puerta del Sol
—Es que anoche oí decir en platqtsá la ma-
Un momiiuto, después, apareció por uu t a - vi6 aumentarse el número de sus asiduos con-
dre de la Julia, que iba V . á desp^ir á varias
piz que cubría un rincón del café, ua escuáli- currontes, y todo el mundo saludó con agra-
chicas, después de Carnaval. ¿Rs|(or ventura
do personaje, llaco y macilento; era el primer decimiento al astro radiante; á ese magnifico
mi hija una de ellas?
actor, al lue iba á sustituir el «n.íuadernador. y vivificador egoista como le llamó cierto a u -
—Oyes Patas, puedes buscar acomodo, el tor moderno. —Por ahora no puedo decir á "^ lo que haré
público está disgustado, dice que no haces LOS liiijpia-botas entre tanto se dieron á t c - dentro de un mes.
reír. dos los diablos, pues estando las calles sin —Eí que si*de.spide V. á mi liña...
—Pues cuando yo estaba eu el cale del Pla- barro su oficio es poco lucrativo.' - P e r o señora mia: su nià« ^ V, ya que me
cer, ¿por qué me sacó V . de alií? . El próximo Carnaval promete mucho si el toca V. á ese punto, puede coivenirme hoy, y
—Entonces como entonces, y ahora c5mo tiempo continúa bonancible. para entonces nó, ó vicevor^. ¿Cómo quiere
ahora. * Los bailes de máscaras que han tenido l u - usted que en este momentQie conteste á u s -
—Es (lee.r qua < stoy de.-poiido. gar hasta la fecha; especialmente los de MaU- ted á una cosa que dependeré las circunstan-
—Si, }més irtü cuando te acomode. lie, han estado concurridísimos. Aconsejamos cias d e . . .
á nuestros lectores- que asistan á ellos, que —S!, sí, ya veo que es '^'ífdad lo que ma han
—Espera, «¡ou las diez, la función empezó á por muy filósofos ó muláucolicos q\ic sean, pa- dicho: es claro, como m' fina no sale vestida
las ocho j debe acabar á las tres, h i s ganado saián un buen ratita y podrán aechar una ca- de ambifiaon. el segundo icto Del Potosí Sm-
na iú aire sin ningún cargo de conciencia.
lia cua-to de din: toma tres reales. ladino, es claro: está ofrecida, no la ponen
—Y la media tostá. También les aconsejamos que asistan aun en primera fila, y ahí lltiene Y . Además, co-
—¿La iias tomado yá? cuando no sea mas que á una representación mo no le há querido hjjer caso á quien usted
— >ó, pero la he pedido. de la bellísima zarzuela Canto de Angeles, letra sabe, es natural, no ladea t)ueaps trajes; na-

die la vé, y ese es el motivo. Pues ha de saber
usted que mi niña sirve para algo mas que todas
esas que salen delante de todas, moviendo los
brazos como las aspas de un molino, enseñan-
do pantorrillas que la mitad no son suyas:
que sabe toda la solfa del maestro Deslaba; que
tiene dos años de Conservatorio, y que tiene el
Dó de pecho, lo que no tienen muchas. Eso es!
—Sí será: pero en fin, para concluir. ¿Qué es
lo que V. quiere?
—IJO que le he dicho ya. Saber si sigue mi
hija aquí desde el Carnaval.
—Pues no sjñor:!, no sigue. Y si quiere u s -
ted que no siga desde hoy...
—Ya me espai aba yo eso. Pues no señor no
«igue: así como así, me alegro, porque ayer la
han venido á solicitar del café del Sorbete para
partir trabajocon la primera tiple, con veinte
reales de sueldo y la cana.
—Pues que parta, que le conviene.
—Vaya, no faltaba mas, sino que mi hija con
«US estudios estuviese metida aquí siempre,
para no hacer mas que de comparsa.
—Pues le aseguro á V. que ha hecho mas
de lo que puede, y que estoy satisfecho de ella.
—Ya lo creo: pues qud, ¿creia V. qué mi niña
venia aquí á robar el sueldo? No señor: mi
niña sabe cumplir con su obligación, y ese ha
sido el mal, mientras que otras...
Arderius limpiándose el sudor que le sale
hasta por encima del bisoñe.—Vaya, señora,
hable V. solo de su niña y dejs V. alas iemás.
—No señor: ya que me rnaroho, quiero an-
tes decirle á V , cuatro verdades.
—Señora, no arme V. escándalo, ó me veré
«n la precisión de hacerla á V. salir por
p do pruebas de la malísima educación na el corazón de aquella mujer. Su
fuerza.
—Es claro, esto faltaba: ¿y es V . el auiable,
el complaciente don Francisco Arderius? así
le luce á V. el pelo. Señalando á Arderius á la
cabeza.
—¿Y á V. que le importa mi pelo? A ver,
representante, que se marche esta señora.
—Ya me marcho; ya me marcho; y muy á
gusto.
—Ea,pues pronto.
Un avisador: don Francisco, que baje V . al
escenario que hace V. falta en el ensayo.
—Voy: baja Arderius, y se oye la voz de Pon-
•zano que dice declamando:
Adonde está Cerverc, oír. portero!
_ 4 _
PECHAS. TITULO DE LAS OBRAS.
19 Malina.—II Feroci liomani.
20 El Capitán de Fragata.—El Matrimunio.
22 Los Polvos.—Magyartis.
23 Los Polvos.—El Relámpago.
21 Mis dos Mujeres.
25 Epístola de San Pablo.—El Matrimonio.—U Feroci Rymani.
28 El Tulipán de los Mares.
30 Mercurio j Cupido.—Magiares.—El Matrimonio.
31 M Tulipán de los Mares.
• Teatro del Liceo,
1 Los Pastorcillos.
2 LISTA DE LAS OBBAS EJECUTADAS DURANTE ÉL MES DB ENBRO ÚLTIMO,
Los Pavos Reales.—Escuela Normal.
• 4 i'-l Paiiuelo Blanao.—Don Ramon.
6 Los Pastorcillos.
8 Los Pastorc.líos.
9 El Pañuelo Blanco.—Los Dos Sordos.
11 Los Hombres de Bien.
15 Id.
n El Alcalde de Zalamea.
18 El Pañuelo Blanco.=Escuela Normal.
22 El Héroe por Fuerza.
23 El Alcalde de Zalamea.
25 Las riendas del Gobierno.
29 El Alcalde de Zalamea.
Odeon.
1.0 D. Franuisco de Quevedo.
5 Oros, Copas, Espadas y Bastos,—Pobres Mujeres.
tí
D. Francisco de Quevedo.~La Mancha de Sangre.—El Maestro
de Baile.
Mancha de Sanore.—Un paseo á Betlan.—Beltran el Marino.
15
22 Beltran el Marino.—En Brazos de la Muerte.—Yo Soy mi hijo.
En Brazos de la Muerte.—Yo Soy mi Hijo.—El Hoaor de ¡a
29 Casa.—Las Cuatro Esquinas.
El Honor de la C a s a . - L a s Cuatro Esquinas.
Circo Barcelonés.
1.0 La Huérfana de Bruselas.
(5 El Terremoto de la Martinica,
8 ídem id.
-19 La Mala Semilla.
LA CORRESPONDENCIA DE LOS BUFOS,
Y dice la Ruiz: Como que está casado.! papá queestáe» JJaíta mientras su hija,
—¿A quién saludas mama? pregunta
que no es lerda, aprovecha la ocasión
Arderius llegando á tiempo de decir un ver- la pjeciosa niña con curiosidad infantil.
so de salida: hablando con el amante no admitido —¡A Evaristo! contesta la jamona
En la cocina: oficialraeute aun por la familia. con voz entrecortada.—Vá á subir, y
Mi mujer se ha hecho nn siete en el vestido, Nunca faltarán en tales sitios viudas
y yo á una suripanta he despedido.
como le digas á papá que ha estado á
verdes; viejas compuestas que aun no saludarme, te arranco los ojos.
desecharon de su alma ciertas preten-
GABRIEL DB CASTILLA. Hé aqní, repetimos, un drama ó una
siones; embozados y no de Córdoba que tragedia. Poco importa que no se pre-
tanto pueden ser maridos recalcitran- sencie el desenlace, puede adivinarse.
LOS CÓMICOS SOCIALES. tes como viudos pertenecientes á la fá- En los números próximos amplia-
mula de los cucos, y aun. si me apuráis remos estos cuadros, que si no son edi-
mucho, prógimos que se enamoran con ficantes, pueden tener en cambio al-
Lector; amable lector. Si alguna vez la facilidad del mundo del reloj del gun interés para nuestros lectores.
concurriendo al teatro te aburre el es- vecino.
pectáculo, aparta tu vista del palco Volved la vista á los palcos, A. DE SAN MAnTm.
escénico y dirígela á los espectadores, ¿Veis aquel principal, el de la dere-
que como seas un tantofilósofo,obser- cha?..
vador, ó misántropo, seguro estoy que
cesará tu aburrimiento.
Pues la hermosa jamona que lo ocu-
pa, en compañía de una preciosa niña,
A LOS SRES. CORRESPONSALES
De telones afuera también tienen muy bien puede ser la protagonista de DB LA GALERIA DE LOS BUFOS iBDBRIüS.
lugar óperas, zarzuelas, comedias y un drama, y quizá, quizá do una tra-
aun dramas. gedia.
Observa sino á ese jovenzuelo cuya La jamona no mira al escenario: lo Los señores representantes de
escasa barba parece peregil mal sem- que menos la importa es el espectáculo. la, galería de Los BUFOS ARDERIUS,
brado en ingrata tierra, y oye como Sus ojos espresivos, bellos, seduc- hallarán en esta sección, desti-
tararea un coro de la última zarzuela tores, se dirigen con insistencia á las
que Mzo mas furor ó el aria de una butacas. , nada exclusivamente para ellos,
ópera dándose importancia de persona En ellas, y en la fila quince, hay un contestación á todas sus pregun-
inteligente en el sublime arte de Eu- arrogante joven que retuerce con aire tas, y aclaración á cuantas dudas
terpe. de fatuidad sus bigotes á la borgoñana.
Poco importa que los espectadores Entre la jamona y él se ha esta- pudieran surgir ea los asuntos
que están á su alrededor manifiesten á blecido una corriente magnética, pre- de esta galería: de! esta manera
media vo*z su desagrado; nada que á ludio de mas variadas escenas.
media voz también maldigan con toda El joven parece estar seguro del si un señor corresponsal necesita
su alma al niño de las barbas. Este dan- efecto que causa; seguro de que domi- en alguna ocasión aclarar algun
punto oscuro, con solo recorrer
que ha recibido, se ha propuesto conti- aplomo y cierto ademan de conquista-
nuar en su tema hasta tanto que uno dor; cierta sonrisa méfistofélica que ¿e la colección del periódico, halla-
de los espectadores que no posee la cuando en cuando frunce sus labios, lo rá resuelta el problema y se
virtud de la paciencia, le manda que prueban bieaá las claras. Sin embargo,
calle con voz desabrida. es un Tenorio vulgar. evitará las molestias de una cor-
Hó aquí una ópera ó zarzuela hasta L^ jamona no está tan tranquila. respondencia entretenida y una
cierto punto como dijo el otro, repre- Se revuelve en su asiento. Tan pron- pérdida de tiempo siempre ne-
sentada de telones afuera: no falta to está pálida como el papel en que
canto: el del niño barbudo. escribo, como sus mejillas toman el co- cesario para otras cosas.
¿Queréis comedia, lectores mies?... lor de los pimientos de la Eioja. Hemos elegido este medio que
Pues no tenéis mas que dirigir la ¿Tendrá celos?
vista á los anfiteatros lóbregos ó ms- Todo pudiera ser. nos parece mas á propósito, por-
teriosos, si esto os agrada mas. Próximo ya á terminar el acto, hace que al contestar á una sota pre- •
Nunca faltará en ellos una amarte- una seufiar Joven, seña que parece de- gunta, nuestros numerosos cor-
lada pareja; una mujer celosa; un buen cir: ¡Ven! ¡Estoy impaciente! respiinsales la hallan resuelta y
.4 LOS AUTORES DRAMÁTICOS.
EN LOS PRINCIPALES TEATROS DE ESPAÑA.
BARCELONA.
Romta.
FfXHA?.
TÍTULO DE LAS 0Ba.A.S.
1 El Monarca Cenovita -El Tejado de Vidrio.
2 Jorja el Armador.
4 Bienaventurados los que Lloran.
6 Ábrame Vd. l a P u e r t i . - L a Aldea de San Lorenzo.-No b q ' i i J
ro saber.
7
Don Tomás.?
8 Aldea de San Lorenzo.] *
9 Amor y Deber.—Cartucho al Canon.—El-coion de un Poblet.
11 El Tejado de Vidrio.»
13 Jorje el Armador.—Gartuchem al Cañón.
15 Las Faltas do los Padres.—Amor y Deber.—Cartuchera
Ca-
ñon.—Eleciion de «n Poblet.
21 El Tejado de Vidrio.
22 Lo Positivo,
23 Rabiar á tieiSpo-—Las Quintas»
27 Amor y Deber.—Cartuchera al cañon.-Laskíninfas.
£9 Las Quintas.
 LA CORRESPONDENCIA DÉ LOS BUFOS.

Actos. Titulo». Propiedad.

nuestras contestaciones son una
especie de circular para todos
ellos: por otra parle la índole del
periódico, la amenidad que pro-
curaremos dar á su contenido,
para lo cual contamos con las
plumas de reputados autores y la
ciicunstancia de remitírsele gra-
tis á los señores corresponsales,
nos hace creer que al tiempo de
proporcionarles un entreteni-
miento, el tiempo que ocupan en
la lectura del niímero, le hallan
gil nado por la conveniencia.
Fsía sección, pues, y este
mismo Jugar del periódico ser-
virón en lo sucesivo para la
COI respondencia especial de los
comisionndos, sin ' perjuicio de
ensanchar mas el sitio si los
as untí s dieran lugar para ello.
ADVERTENCIA.
Todos los señores corresponsales de
pro"vincias, de esta Galeria que reciban
el periódico gratis, es porque tienen en
su poder ía credencial cgmo tales, in-
cluso catálogo, etc., etc.
A LOS MISMOS.
N o t a d o l a s oto r a s q.Txe l i a y
q i x e aÍTÍaclir a l c a t á l o g o q.u.e t l e -
x x e n exx ssu. p o d e r :
' Actos. Títulos.
1 El arte por les nubes. Bainete.
1 El teatro moderoo
1 El elixir de Cnglios-
tro.
1 IJ a hipócrita
de saiiietes que le envié con fecha 10
del pasado.
Los puntos n e g r o s . . . Comedia<,.
los Bufos, una zarzuela en tres actos, de gran
aparato, titulada ZaAo-ít'm.
Empréstitos volunta- Jover Garran,—Valladolid.—Confir- Vestuario nuevo, decoraciones nuevas,
rios id.
¿Si hablará?... ¿Si no
mo mi carta 7 de lebrero, y supongo no eccetera, e t c . , contribuirán á aumentar el in-
habrá habido ningún entorpecimiento
1
hablará?
El general Bum-Bum. música
id.
en las instruc iones que le daba. Anote
terés que á juzgar por los ensayos, debe teñe?
esta obra arreglada del francés por uno da
1 Canto de ángeles usted el aumento del catálogo.
id. nuestros mas aplaudidos escritores, hembra
2 La sensitiva , id.Francisco de P. Villar.—Alicante.
3 Kl toque de á n i m a s . . . libro. '1 ^
—Eecibí oportunamente su carta. Los
muy entendido en asuntos teatrales.
*3 Los desamparados— drama, i ¡Dios haya puesto tiento en sus manos!
3 [I teatros-cafés, son sesta clase: 60, 40,
La estrella d e l a c d r t e . comedia 1
1 La Soberanía Nacio-
nal
20. En el pe riódico que hoy le remito,
«-^
^•^ss Mañana viernes se pondrá en escena por úl-,
El capitán do la muer-
va la nota de todas las obras que tiene
I libro. 1[°.o
[^.a tima vez, en el concurrido teatro de los Bufos
te en venta esta galería, y si necesita al-
drama. '1I'S^
go, pídalo; con respecto al último pár-
El primer dia feliz.... libro. 1 ©
Arderius, la aplaudida zarzuela titulada el
Potosí Svib-marino, de la cual se retirará el
rafo de su carta, he consultado y no
'a
NOTA. Todas las cartas que tengan conviene, al menos por ahora. numeroso decorado y accesorios de este, á fin
C[ue escribir ó contestar, salvo las de
Añada V. al catálogo la nota de las
de dar lugar al de otras obras que están en
interés particular, lo efectuaré por el ensayo. S. M. el Rey, ha sido invitado para Ift
plriódico á cuj^o efecto se lo remitiré á obras que arriba se espresan. función de esta uoche.
todos los comisionados, rogándole con- —Alcoy.—-Eecibí deoportunamente
Administración El Parte Diario.
serven los números por interés recí- carta. Remitiré ejemplares; vea el anun- su
proco. Clxar·ada.
Sr. D. M. Morillas.— Cádiz.—No ría; cio de las obras en venta de esta Gale-
contesté á la suya de 13 del pasado, aumente catálogo, etc. En la limpia corriente
Cayetano Clem. Eubisco.— Ciudad de mi primera,
porque el catálogo que envié tenia ya Seal.—Aun no mi acalorada frente
el aumento aunque en mi carta decia funciones del mes. he recidído la-nota de bañar quisiera:
y solo siento,
lo contrario. Anote Vd. el de hoy.
Mariano Muñoz.—Sevilla.—Eecibí su no poder ir tan lejos
Sr. ü. Juan Moreti.—Eonda.—Espe- en un momento.
ro mande lista de compañía que actúa carta, y estoy conforme con ella, salvo
en esa, y estado de funciones como la nota de funciones que me debe remi- A segunda y primera
marca mi circular. tir de las ejecutadas en el mes; pues me comparara,
Viuda de Zamora.—Granada.—No he como verá en el folletín, el objeto es si acertar no pudiera
recibido estado de las funciones hechas dar una lista de las obras puestas en
cosa tan clara;
pues por sencilla,
en el mes de Enero en esa; no se des- escena en los principales teatros. de fijo la acertara
cuide, pues como verá, se publican en A. M. Pruneda.—Avilés.—Le doy las cualquier chiquilla.
el folletín. gracias por el envio del periódico, j^ en
una de las secciones de este, verá el • A mi tercera sola,
Vicente Dorca.—Gerona.—Lo mismo anuncio de las obras en venta de esta si has solfeado,
le digo y á todos los Sres. corresponsa- Galería. de la escala en la cola
les que no la hayan enviado, y que tie- habrás hallado; .
y al afirmar,
nen su credencial. Quedo de Vdes. afectísimo, etc. es forzoso la misma
En los puntos que no se haya efec- también nombrar.
tuado ninguna función, no necesitan ALFREDO GUERRA ARDERIUS.
escribir; advertencia que hago por ha- T es el todo, tan «todo,»-
que todos, ¡todos!
ber recibido algunas cartas. el todo ambicionamos
J, Mariana y S.—Valencia.—Confir- ca En el próximo número verá la luz públi
un notable artículo debido á la chispeante de todos modos.
mo mi carta 7 de febrero, mandando y bien cortada pluma del Sr. Cubero, que lle- Y he concluido,
tres ejemplares de la pieza El elixir de vará por título: El drama de Cafarnaúm Espe- que el todo en este «todo»
Pnq)iedad. de Paco ha sido.
Cagliostro. Cuando me escriba V., acu- La solucion'en el número próximo.
se recibo de la de los dos saínetes que ramos este artículo con ansiedad, para darlo
EDUARDO VALLADARES.
id. a l a estampa.
anterior mente le había remitido.
comedia. F. Iturriaga.—Santander.—Cuando
escriba, acuse recibo de los ejemplares Pronto se pondrá en escena en el teatro de Madrid.—Imp. Esp. Arco de Santa María, nún». 1..
id.

— 2;— — 3 -

Olimpo. FECHAS. TITULO DE LAS OBRAS.

FBOnAB. - TÍTULO DE LAS OBRAS.

8 ídem id.—Pepta.
10 La Sociedad de los Trece.
I." D. Fran isco de Quevedo. 11 Un Marido de Lince.
4 Libertad en la Cadena.—La Llave do la Gaveta. 14 Un Sentenciado á Muerte.
6 D . Francisco de Qaevedo. 15 Amar sin Dejarse Amar.—Las Hijas de Elena.
8 La Luna de Miel.—Maruja. 16 Un Ente Singular.
12 Me Con-viene esta Mujer. n Me Conviene essa Mujer.
\h Inquisición por l í e n t r o . - R e p ú b l i c a ó Monarquía.—Soldados de 18 La Casa de Campo.
Piorno. 19 Como el Pez en el Agua.
22 El Diablo Predicador. —L os Dos Viejos.—La|Bola de Nieve. 20 Dos Bodas Descubiertas.
29 Treinta Años.—I^ Mano d»í)ios. v 22 ¿Será este?—La Casa de Campo.
23 La Casa de Campo.
Tirto. Este cuarto no se alquila.
20
1.** Pastorcillos.—Satanás, 27 Como el Pez en el Agua.
tt ídem.—Amor de Madre. 31 Por una Cita.
,8 Satanás.—Olmo y la Vid. Campos Elíseos.
Í5 JnanBravo,—Las dos Coronas.
22 Valencianos con honra.—La Sociedad denlos Trece. 8 Lanuza.—Los dos Vireyes.
29 La Sociedad de los Trece. —El Pañuelo Blanco. 22 La Vida por el Honor.
Prado Catalán. Teatro Principal.

1." Guillermo Colman. 1 Los polvos de la Madre Celestina.—La Soirée de Cachupín.—Por-

6 Flor de un Dia.—El Corazón de un Bandido. un inglés.—El Matrimonio.
8 Valeneianos con Honra. ^ 2 Los Pavos reales.—Diez niíl duros,—El Viudo.
3 Los Diamantes de la Corona.
Teatro Español. 4 El Secreto en el Espejo.—Un Sarao y una Soirée,
1,„ Guzman el Bueno. 5' Los dos Sordos.—Un Sarao y una Soirée.
(5 Sancho García. ' • 6 Los Polvos. —Diamantes de la Corona.
7 La Vida Parisiense.
8 Dos Familias Rivales.
15 Cabana do Tom. 8 Marina.—El Matrimonio.—Los Magjáres.
22 Matgarita da Borgoña. 9 Los Polvos.—Marina.
29 Cataluña Independiente. ÍO Un Sarao y una Soirée.-Pascual Bailón.
11 El Relámpago.
Ramillete, _ 12 Los Cómicos de la Legua.
1.0 Me Conviene esta Mujef.—Un tigre de Bengala.—Las Hijas de 13 Diamantes de la Corona.
Elena. 14 El Capitán de Fragata.—Mercurioj Cupido.
2 Ladrón y Verdugo. . ' 15 La Vida Parisién.—Magyares,—Pascual Bailón.
:Í El Secr^-to en el Esppjo. 16 El Capitán de Fragata.—Los Cómico? de la L»gii9.
,') ¿StrÁisíL? n Miigyares.
ti liijrs oc l'àt-na,—reíïitf!, 18 La t:0:róa de Cachupín.—Mercurio y Cupiio.—Ln Epístola de^
1 Dji)i-^''^8-3 iJ^'ístubitrta-. San Pablo.