2 DOMINGO 1 DE ABRIL DE 2018 EL TRIBUNO JUJUY
POESÍAS
Edición 438 del 1de abril de 2018
POESÍAS
“Pluma pequeña, sueño gigante”
*A ti te lo debo todo
Valentina Iriarte
*Sin título
Pia Aymé Sajama
*Viendo las horas pasar
Renata Ernestina Pozzi
*Versos y coplas
Keila Avalos
REBREVES
“El libro mágico”
De Selene Santos
“El libro triste”
De Marilín Garzón
CUENTO
“Cruel historia de un pobre lobo
hambriento”
De Gustavo Roldán*
EFEMÉRIDES
Jujuy siglo XX-
De Miguel Alberto Moral
RELATO
“Manos cruzadas”
De Edgardo Ávila Singh
HOMENAJE
Melitón Jaramillo, un pionero y
un luchador
Por Oscar Manuel d´Oliveira
EN PRIMERA PERSONA
“Es lo único que deseo”
De Rick Bragg
Será hasta la próxima edición, cu-
yo contenido anticiparemos por
Radio Jujuy FM 107, el 4 de abril,
en el programa “Tiempo
Compartido”, segmento
“Literarte Oral”, que conduce
Luís Tolaba, si Dios Quiere.
STAFF
Recopilación:
Susana Ayala de d’Oliveira
Edición y redacción:
Rosana Herrera
Paginación:
Natalia Taborda, Dante
Domínguez, Fernando Chávez
y Augusto Scheurer
Fotografía: Germán Fernández
y Federico Albarracín
SUPLEMENTO DECLARADO:
-Interés Municipal- Decreto
N° 0647.16.042
-Interés Cultural- Resolución
N° 00267 del Ministerio
de Cultura y Turismo
“Pluma pequeña, sueño gigante” “Cruel historia de un
A ti te lo debo todo
Valentina Iriarte
A ti te lo debo todo.
Te debo mi existir
porque tú me diste la vida
me das cariño y un hogar
Tú eres la persona
en la que más confío.
Me iluminaste con tus ojos
el camino de la verdad
la honestidad/
y por eso gracias.
Te amo desde siempre
y siempre lo haré/
hasta el final de mis días
Recordaré ese latir/
de tu corazón
Que me calmó/
desde el día que nací.
¡Te amo mamá!
(10 años-5to grado,
Colegio Del Salvador)
REBREVES
“El libro
mágico”
De Selene Santos
Hace mucho tiempo en un palacio
uno de los integrantes cada año
uno de ellos tocaría el libro mági-
co, el cual le daría un don que
ellos eligieran. Un año le tocó al
menor de la familia, él pidió que
siempre tenga felicidad y su her-
mano eligió el poder gobernar.
Pero el libro tenía una condición
que era que cuando murieran sus
padres, uno de ellos lo recibiría,
por hacer buenas acciones, pero
nadie sabía la condición del libro.
Los años pasaron, sus padres
murieron, el libro brilló y el her-
mano mayor quiso adueñarse de
él. Mientras el menor no lo quería
porque le importaba hacer accio-
nes buenas a los pobres.
Un día el mayor quiso llevarse el
libro mágico pero no pudo por-
que no era el elegido. El elegido
pasaba por la biblioteca, en eso el
libro comenzó a hablar y le dijo
que él era el elegido para llevárse-
lo pero no le dijeron nada a su
hermano.
El menor siempre que tenía
tiempo lo iba a visitar y lo leía, y el
libro le contaba todo sobre sus an-
tepasados, pero su hermano ma-
Sin título
Pia Aymé Sajama
La biblioteca está triste
ya casi no la visitan,
el internet la dejó vacía,
los libros más leídos
ya ni tienen cabida
en la vida de una niña.
Hay que visitarla
para que ella/
no se ponga mal
además/
con ir a visitarla/
aprendemos
a volar con/
la imaginación
que nos provocan/
los cuentos.
(13 años.7to grado,
Esc. Sarmiento. Tilcara)
yor se dio cuenta que él todos los
días iba a la biblioteca, él lo siguió
y encontró el libro hablando con
su hermano. Furioso, quiso matar
a su hermano pero no pudo por-
que el libro lo protegió con su ma-
Viendo las
horas pasar
Renata Ernestina Pozzi
Esperando ser abierto
veo las horas pasar,
me cansé de leer
una y otra vez la historia
que dentro mío va.
Mi vida se resume a eso
a esperar ser abierto,
ser leído;
a que alguien disfrute
todo mi conocimiento.
Libro soy. /
Un buen compañero,
un buen amigo,
varado en este estante
esperando ser leído,
veo las horas pasar
con un inmenso frío.
(10 años- 5to grado,
Esc. Sarmiento. Tilcara)
gia, por lo cual lo hizo entrar a él y
no pudo salir más. A partir de ese
momento el libro se quedó con su
elegido y nunca nadie fue malo.
(13 años- 7to grado, Escuela
Sarmiento. Tilcara)
CUENTO
Versos y coplas
Keila Avalos
A mi me han puesto en la escuela
para aprender a leer
dejé mis libros al fuego
para aprender a querer.
Una biblioteca no es un lujo
sino una de las necesidades
de la vida.
Siempre imaginé el paraíso
como un espacio de biblioteca.
(10 años-5to grado,
Esc. Sarmiento. Tilcara)
“El libro
triste”
De Marilín Garzón
Había una vez un libro que vivía
alegremente en una librería. Un
día quedó olvidado en una esqui-
na y nadie lo quería comprar,
aunque sólo costaba pocos pesos.
Estaba triste.
Todos los días elegían un libro, y
así pasaban los días y él empezó a
quedarse solo, sin compañía.
Luego de un tiempo nadie lo
compró, todos creían que era
muy caro, y él cada vez se sentía
más solo, estaba tan triste como
una mamá cuando pierde a un
hijo.
Un día apareció un chico llama-
do Gustavo Aramayo, lo había vis-
to muy triste, sucio, y entonces lo
llevó a su biblioteca que se llama-
ba Rebeca Molinelli Wells de
Márquez Miranda. El nuevamente
se sintió muy feliz, contento, emo-
cionado en esa biblioteca llena de
libros amigos de todas las clases,
libros de historietas, manuales,
cuentos, revistas y lo que más le
agradó es que ahora sería leído
por mucha gente, era realmente
¡feliz!
(10 años. 5to grado. Escuela
Sarmiento. Tilcara)
pobre lobo hambriento”
De Gustavo Roldán*
Y cuentos, don sapo? ¿A los pichones
de la gente le gustan los cuentos?-
preguntó el dijo.
Muchísimo.
-¿Y usted no aprendió ninguno?
-Uf, un montón.
-¡Don sapo, cuéntenos alguno!-pi-
dió entusiasmado la corzuela.
-Les voy a contar uno que pasa en
el bosque. Resulta que había una
niñita que se llamaba “Caperucita
roja” y que iba por medio del bosque
a visitar a su abuelita. Iba con una
canastita llena de riquísimas empa-
nadas. Que le había dado su
mamá…
-¿Y su mamá la había mandado
por el medio del bosque?- preguntó
preocupada la paloma.
-Si, y como caperucita era muy
obediente…
-Más que obediente, me parece
otra cosa- dijo el quirquincho.
Bueno, la cuestión es que iba con la
canasta llena de riquísimas empana-
das…
-Uy, se me hace agua la boca-dijo
el yaguaraté.
-¿Usted también piensa en esas
empanadas?-preguntó el monito.
-No, interrumpan que sigue el
cuento-dijo el sapo; y poniendo voz
de asustar continuó la historia-
cuando caperucita estaba en medio
del bosque se le apareció un lobo
enorme hambriento…
-¡ Es un cuento de miedo!, ¡Que
lindo! dijo el piojo saltando en la ca-
beza del ñandú.
-Bueno, decía que entonces le apa-
reció a caperucita un lobo enorme…
-¡Pobre…!-dijo el zorro.
-Si, pobre caperucita- dijo la pulga.
-No, no aclaró el zorro-, yo digo
pobre lobo, con tanto hambre. Siga
contando, don sapo.
-Y entonces el lobo dijo: querida
caperucita, ¿te gustaría jugar una ca-
rrera?
-¡como no!- dijo caperucita- Me
encantan las carreras.
-Entonces yo me voy por este ca-
mino y tu te vas por se otro.-¿Tu te
vas? ¿Qué es tu te vas?- preguntó in-
trigado el piojo.
-No se muy bien-dijo el sapo- pero
la gente dice así. Cuando se ponen a
contar un cuento a cada rato dicen
tú y vosotros. Se ve que eso les gusta.
-¿Y por qué no hablan más claro y
se dejan de macanas?
-Mire m’hijo parece que así está es-
crito en esos libros de donde sacan
los cuentos.
Y cuando hablan, ¿también dicen
esas cosas?
No, ahí no. Se ve que les da por ese
lado cuando escriben.
-Ah, bueno, no es tan grave enton-
ces-dijo el monito-¿Y qué pasó des-
pués?
-Y entonces cada uno se fue por su
camino hacia la casa de la abuela. El
lobo salió corriendo a todo lo que
DOMINGO 1 DE ABRIL DE 2018 EL TRIBUNO JUJUY
daba y caperucita, lo más tranquila,
se puso a juntar flores.
-¡Pero don sapo-dijo el coatí- esa
caperucita era medio pavota!
-A mi me hubiera gustado correr
esa carrera con el lobo- dijo el piojo-,
seguro que le gano.
-Bueno, el asunto es que el lobo
llegó primero, entró a la casa, y sin de-
cir ni tú ni vosotros se comió a la vieja,
-¡pobre!-dijo la corzuela.
-Si, pobre-dijo el zorro- que ham-
bre tendría para comerse una vieja.
-y ahí se quedo el lobo, haciendo la
digestión- siguió el sapo-, esperando
a caperucita.
-Mejor, dijo el yaguareté- déjela
que se demore, así el lobo puede ha-
cer la digestión tranquilo y después
tiene hambre de nuevo y se la puede
comer.
-Eh, don yaguareté, usted no le
perdona a nadie. ¿No ve que es muy
pichoncita todavía?- dijo la iguana.
-¿Pichoncita? No crea, si anda co-
rriendo carreras con el lobo no debe
ser muy pichoncita.
-¿Cómo sigue la historia, don sa-
po? ¿Le va bien al lobo?
-Caperucita juntó un ramo grande
de flores del campo, de todos los co-
lores y siguió hacia la casa de su
abuela.
-No, don sapo- aclaró el zorro- ala
casa de la abuela no- Ahora es la casa
del lobo, que se la ganó bien ganada.
Mire que tener que comerse a la vie-
ja, para conseguir una pobre casita.
Gustavo Roldan: Nació en
Sáenz Peña, provincia de
Chaco, el 16 de agosto de
1935. Fue un destacado
escritor argentino.
Ni siquiera sé si hizo buen negocio.
-Bueno, la cuestión es que cuando
caperucita llegó, el lobo la estaba es-
perando en la cama disfrazado de
abuelita.
-¿Y qué pasó?
-Y bueno, cuando entró, el lobo ya
estaba con hambre otra vez y se
tragó de un solo bocado.
-¿De un solo bocado? ¡pobre!- dijo
el zorro.
-Si, pobre caperucita- dijo la palo-
ma.
-No, no pobre lobo. El hambre que
tendría para comer tan apurado.
-¿Y después, don sapo?
-Nada. Allí terminó la historia.
-¿Y esos cuentos les cuentan a los
pichones de la gente? ¿No son un po-
co crueles?
-Si, don sapo-dijo el piojo- yo creo
que son un poco crueles. No se pue-
de andar jugando con el hambre de
un pobre animal.
-Bueno, ustedes me pidieron que
les cuente. No me culpen si les pare-
ce cruel.
-No lo culpamos, don sapo a noso-
tros nos interesa conocer esas cosas.
-Y otro día le vamos a pedir otro
cuento de esos con tú.
-Cuando quieran, cuando quie-
ran- dijo, y se fue a los saltos, mur-
murando-: ¡si sabrá de tú y de voso-
tros este sapo!
(*Gustavo Roldan- “Los cuentos
del sapo”, Buenos Aires Colihue,
2001)
3
EFEMÉRIDES
Jujuy en el Siglo XX
Abril 1990/91/92
De Miguel Alberto Moral
AÑO 1990
Obras: Se concretaron la peatonal
Belgrano, y mejoramiento en alum-
brado público en plaza España, y
puentes Argañaraz y Lavalle
Cultural: Se publica la obra “Puna, za-
fra y socavón” de Jesús Olmedo
Rivero.
Legislatura: Se instalaron allí dirigen-
tes gremiales realizando huelga de
hambre.
Gremiales: La provincia estuvo envuel-
ta en caos y de parálisis, los servicios
esenciales no eran prestados mientras
los funcionarios de estamentos del
Estado se mostraban indiferentes.
Ordinarias: El periodo de sesiones se
puso en marcha el 10 de abril, Ricardo
De Aparici, entonces gobernador, dio
su discurso en el recinto.
Ciclo de historia: Los días martes y con
auspicio de la dirección de cultura de
la provincia, la Coredi ofrecía charlas
de interés jujeño.
AÑO 1991
Legislatura: El mensaje del goberna-
dor en la apertura del nuevo periodo
de sesiones generó comentarios dispa-
res.
Medidas: Trabajadores del estado rea-
nudaban su plan de lucha apuntando
a un básico de 1.639.000 australes.
Hubo parálisis en toda la administra-
ción pública y sus servicios.
Suspensión: Por la deuda que poseía el
Instituto de Seguros con los colegios
profesionales, se suspendieron los ser-
vicios de al menos 150. 000 afiliados.
Visita presidencial: El doctor Carlos
Saul Menem arribó a la provincia para
participar en Perico de la inauguración
de una planta procesadora de la
Cooperativa de Tabacaleros.
AÑO 1992
AHZ: Se daba la noticia del pase a ma-
nos privadas de la que fue por muchos
años, la fábrica de fundición más im-
portante de la provincia.
Cultura: Se publicó el libro “Sociedad y
articulación en las tierras altas” por
Alejandro Islas y Boletín del departa-
mento nacional del trabajo nº 35 “Los
Tobas” de José Elías Niklíson.
Invitación de Literarte
Reiteramos la invitación
a los poetas jujeños,
a los pintores
y escultores para que
nos hagan llegar sus trabajos.
E-mail:
literartejujuy@gmail.com