Ixtlahuaca, México a 14 de Agosto de 2010

Centro Universitario de Ixtlahuaca A.C.

Coordinación de Estudios de Postgrado

Maestría en Derecho Fiscal

Modulo: Derecho Constitucional Tributario

Ensayo

La Ley de Herodes

Por: Clemente Alberto Alvarez Gomez

No. Cta. 9720567 / 10MDF003

Esta película, de cierto punto sarcástico habla de la corrupción político social que
sufre a diario en México en todos sus ámbitos, ya que lejos de creer que solo es
en lo político, abarca toda una forma de vida de “Estado”.

Además se burla de la dictadura que muchos años creí era exclusiva de un partido
político (El PRI) sin embargo en estos días me doy cuenta que es el sistema de
partidos (partidocracia) lo que tiene secuestrado al país, que en este tiempo
parece a punto de explotar en un movimiento civil de inimaginables proporciones.

La película habla de la corrupción en México, es lo que quiere demostrar

abiertamente, lo que se vive en todo el país, desde sus inicios en el poder del PRI
y hasta la llegada de otro partido (PAN) que también ha propiciado a la
descomposición social en México.

En la película se muestra desde una pequeña perspectiva lo grave del problema,

y este no es un problema generacional meramente sino de fondo, cultural, social,
religioso y político, cuando México por fin logro la independencia de España hace
200 años, comenzó su camino sin un rumbo fijo, esa es la razón de por qué
después de un siglo de guerras y luchas internas, iniciamos el siglo XX en las
mismas o en peores condiciones que cuando termino la época colonial, pero el
trasfondo va mas allá de lo político o del poder mismo y la ambición por este. Los
ideales revolucionarios, los caudillos de la revolución, fueron traicionados por
nosotros mismos, ya que aun cuando aspiremos como país al progreso y
modernidad, no estamos preparados para poder lograrlo, pues nos falta definir el
rumbo como individuos y como nación misma, de otro modo seguiremos perdidos
y encaminados al desastre, más de lo que ya está ahora, pues es el resultado de
una política sin un fin determinado y sin miras a un porvenir promisorio y
alentador, podríamos decir que mientras no nos detengamos como país y
analicemos realmente a donde queremos ir, es cuándo podremos librar este
obstáculo tan grande y lo que no nos permite hacerlo es el lastre de la incultura,
de la desunión, de la falta de compromiso y del marcado egoísmo entre nosotros.

Así muestran la película en un pueblo abandonado donde no tienen servicios y

llega un político novato que quiere hacer todo a la vez. Al llegar, todo anunciaba
que el pueblo alcanzaría un punto de cambio, tan ansiado por todos pero tan
imposible como la palabra misma, ¿cómo puede haber progreso donde no hay ni
la más remota idea de que es eso? Conforme paso el tiempo se dieron cuenta
que no se podía hacer nada por salvar a este pueblito, siendo muchas las causas
la principal falta de interés tanto del gobierno como de los habitantes sin dejar de
lado la falta de de fondos para contribuir con la transformación de este,
concluyendo de primera instancia que la corrupción era el principal virus que todos
tenían y era el factor por el cual el pueblo no progresaban.
La parte medular que nos incumbe es la forma en cómo se manejan las políticas
fiscales, y como lo representan, ya que al tener en sus manos un medio legaloide
para justificar su actuación (compendio de leyes9) y un instrumento de coerción( el
revólver ) , como lo manipulo para obtener el ingreso deseado, sin embrago
cuando lo tiene, se deja seducir por el poder mismo y también entra al juego que
marca la esposa, que representa la parte banal y material de cualquier individuo,
pero lo peor es la falta de conocimiento, de buen juicio y lamentablemente la gente
que si está capacitada para desempañar los cargos públicos(Peck) nunca llegan a
ocuparlos por su idealismo, y esto también alimenta al monstruo del estado,
burocrático, nos gusta adular al puesto, besamos las botas del funcionario en
turno, pero cuando vemos la oportunidad lo traicionamos, lo asesinamos y
reverenciamos al nuevo, y regresa la esperanza de un nuevo cambio, sin embargo
se repite la historia una y otra vez.

Hacer de la corrupción una forma de vida es lo que vemos a diario, quien no ha

escuchado la frase o el discurso gastado, sin embargo ¿de verdad somos así? o
eso creemos ser, ya no lo sabemos ciertamente, lo lamentable del caso es que
tendremos que pasar por otro movimiento violento para renovar las ideas y la
sangre liviana al menos, estamos en el punto de no regreso y nos dejaremos llevar
por el torbellino de la “bola”, a pesar de todo lo malo, los idealistas aun ansiamos
volver a la lucha, ya no literal sino real, con todos sus excesos, con toda su
violencia y sangre y muerte, tal vez ese es nuestro destino real, nuestra herencia
indígena, nos exige una vez más el sacrificio, mostrar los corazones al sol para
apaciguar esta sed y ansia de venganza contra quien se nos ponga enfrente, tal
vez por eso la violencia ha alcanzado estos niveles de barbarie en nuestros días,
la sangre llama, nadie parece tomarlo en serio pero pasara una día y ojala
estemos preparados al menos para eso, para soportar más dolor y sufrimiento.

Hoy en día la terrible realidad en la que estamos es que, como pueblo nos han
manejado, nos han humillado y puesto en desventaja ante el poder que lo único
que busca es el dinero obteniendo así beneficios para ellos mismos y no para el
pueblo quien es el que más necesita de recursos para poder desenvolverse
plenamente y con dignidad.