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También por James Dashner

Serie The Maze Runner

The Maze Runner

The Scorch Trials

The Death Cure

The Kill Order Pág.| 2

Doctrina de la mortalidad

The Eye of Minds


Los expedientes de
THE

MAZE Pág.| 3

RUNNER
ARCHIVOS CLASIFICADOS E
INFORMACIÓN SECRETA

JAMES DASHNER
Derechos de Autor

Esto es un trabajo ficticio. Los nombres, personajes, lugares e incidentes


son producto de la imaginación del autor o son usados de manera ficticia.
Cualquier parecido con personas reales, vivos o muertas, eventos o lugares
es pura coincidencia.

Derechos de autor del texto © 2010, 2011, 2012 por James Dashner

Derechos de autor de la portada © 2009 por Philip Straub Todos los Pág.| 4
derechos reservados.

Publicado en los Estados Unidos por Delacorte Press, una editorial de


Random House para niños, una división de Random House LLC, New York,
un Peguin Random House Company.

El material que aparece en este documento fue publicado originalmente


en Barnes & Noble ediciones exclusivas de El corredor del laberinto, La cura
mortal, y Virus Letal, en 2010, 2011 y 2012. El material seleccionado fue
publicado por primera vez en randomhouse.com / niños.

Delacorte Press es una marca registrada y el resultado final es una marca


comercial de Random House LLC.

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e-ISBN: Libro 978-0-385-38541-1 Random House para niños apoya la


Primera Enmienda y celebra el derecho a leer.
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Pág.| 5
Primera Parte
Archivos Confidenciales

Pág.| 6
Memorando CRUEL

Fecha: 220.6.24

Hora: 09:36 a.m.

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: Bienvenida

Bienvenidos, colegas, al principio del mayor esfuerzo humano de


colaboración en la historia de nuestro planeta. No me atrevo a
sugerir que este es un momento para estar emocionados. El mundo
nunca ha conocido tiempos tan oscuros como estos, y festejar está
Pág.| 7
lejos de ser adecuado. Lo que me gustaría indicar, sin embargo, es
que podemos sentir esperanza y orgullo de ser parte de algo que está
trabajando con el fin de salvar a la raza humana. Y para tener éxito,
tenemos que comenzar con el pie derecho.

Aquellos de ustedes a cargo de los grupos de búsqueda en los


Doce Sectores designados deben informar al Consejo cada vez que
un tema de interés sea descubierto. Es demasiado pronto para saber
qué porcentaje de la población cumple con nuestras necesidades,
pero es evidente que el número será pequeño. Tenemos que probar a
cada sujeto inmediatamente, así podremos elegir a los candidatos
con mayor potencial de duración hasta el final.

El equipo de diseño del Laberinto nos estará presentando sus


últimos planes mañana por la mañana a las 0900 horas en el centro
de mando 3. Construir una estructura tan sofisticada como esta es un
proyecto ambicioso en el mejor de los casos, y dado el estado actual
del mundo, se prevé que la aplicación de la Fase 1 se llevará a cabo
en los próximos años. No escatimaremos en gastos para mantener el
proyecto en marcha. En unos cuantos años vamos a tener nuestros
Candidatos Élite para ayudar en el diseño final y la fase de
construcción.

En la reunión de mañana también se dedicará un segmento a las


criaturas biotecnológicas que hemos fabricado para ayudarnos a
crear y gestionar completamente las Variables planeadas.

Nuestros psiquiatras y médicos han trabajado para llegar a un plan


de acción. Ellos creen que podemos alcanzar el sesenta por ciento de
los patrones que necesitamos al poner en marcha los incidentes que
hemos trazado hasta ahora. Con al menos diez años hasta que el
proyecto llegue a su clímax, creo que es un porcentaje increíble.

Los miembros del Consejo, planean permanecer en comunicación


constante a través de la totalidad de este proyecto, así que siéntanse
libres de compartir sus pensamientos conmigo o los otros miembros
del Consejo en cualquier momento. Estoy orgulloso de ser parte de
este gran esfuerzo, junto con todos ustedes.

El futuro ha comenzado.

Pág.| 8
Memorando CRUEL

Fecha: 26.11.221

Hora: 10:56 a.m.

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: El Candidato Élite

Hemos descubierto un candidato más extraordinario.

Ninguno de nosotros puede indicar por qué parece tan perfecto Pág.| 9
para servir como uno de nuestros élites. Es simplemente algo
en él. Aunque es muy joven, parece tener un buen
conocimiento de su entorno más allá de sus años. Sus
habilidades verbales y cognitivas se encuentran al nivel de un
adulto, aunque de alguna manera todavía se aferra a una
inocencia (una cualidad infantil) que le ha hecho amar a cada
persona que ha conocido hasta ahora.

Las pruebas preliminares muestran los resultados más


prometedores que hemos tenido hasta ahora. Su inteligencia y su
capacidad de aprender son incalculables. También tiene el potencial
de habilidades físicas increíbles, que por supuesto serán vitales en el
Laberinto si termina haciendo lo que nos gustaría que hiciera. Hemos
decidido ponerle el nombre de uno de los inventores más
importantes de la historia, ya que estamos convencidos de que él
conseguirá grandes cosas. Si les gustaría observar Thomas, vayan a
la habitación 31J. (Situada junto a Teresa.)

Creo que quedarán impresionados.


Memorando CRUEL

Fecha: 224.9.6

Hora: 11:08 a.m.

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: Implantes

Uno de los elementos más delicados de nuestro proyecto se ha Pág.| 10


completado. Todos los dispositivos cerebrales, incluyendo el
neutralizador, los manipuladores, y las herramientas telepáticas, se
han implantado con éxito. Estoy feliz de transmitir que los médicos
informaron de sólo siete muertes durante la cirugía. Muchos menos
de los que habíamos temido y previsto.
Transcripciones de Sujetos A1 y A2, Reunión 1.

COMIENZO DE LA TRANSCRIPCIÓN

Thomas: Oye.

Teresa: Hola.

Thomas: ¿Por qué nos pusieron aquí?

Teresa: No lo sé. Querían que nos conociéramos y habláramos, creo.

Thomas: ¿Cuánto tiempo has vivido aquí?

Teresa: Desde que tenía 5.


Pág.| 11
Thomas: ¿Así que…?

Teresa: Así que, 4 años.

Thomas: ¿Solo tienes 9?

Teresa: Sip. ¿Por qué? ¿Cuántos años tienes tú?

Thomas: Igual. Sólo que luces mayor, es todo.

Teresa: Pronto tendré 10. ¿No has estado aquí el mismo tiempo?

Thomas: Sip.

Teresa: ¿Por qué tienen nos tienen a algunos separados? Puedo


escuchar a otros niños gritar y reír todo el tiempo. Y he visto la gran
cafetería. Es para alimentar a cientos.

Thomas: ¿Así que llevan la comida hasta tu cuarto, también?

Teresa: Tres veces al día. La mayoría sabe a inodoro.

Thomas: Y ¿cómo sabes a qué sabe un inodoro?

Teresa: No puede saber peor que la comida que nos dan.

Thomas: ¡JA! Tienes razón

Teresa: Debe haber algo diferente en nosotros, ¿no crees?

Thomas: Eso creo. Hay una razón por la que nos mantienen solos.
Pero es muy difícil saber qué, cuando ni siquiera sabemos por qué
estamos aquí.

Teresa: Lo sé. ¿Tu vida es prácticamente cosas del colegio desde que
te despiertas hasta que apagan las luces?

Thomas: Tal cual.


Teresa: Ellos siguen diciéndome cuán inteligente soy.

Thomas: A mí también. Es raro.

Teresa: Creo que todo tiene que ver con La Llamarada. ¿Tus padres la
tuvieron antes de que CRUEL te agarrara?

Thomas: No quiero hablar de eso.

Teresa: ¿Por qué no?

Thomas: Simplemente no quiero.

Teresa: Bien entonces. Yo tampoco.

Thomas: ¿Por qué estamos aquí, de todas formas? En serio, ¿qué


deberíamos estar haciendo?
Pág.| 12
Teresa: Hablando. Siendo probados. No lo sé. Lamento si estar
alrededor mío es tan malditamente aburrido para ti.

Thomas: ¿Qué? ¿Estás molesta?

Teresa: No, no estoy molesta. Tú no luces muy amable. Me sonaba


bien la idea de que finalmente tendría un amigo.

Thomas: Lo lamento. Suena bien para mí también.

Teresa: Entonces quizás pasemos la prueba. Quizás ellos querían ver


si nosotros nos llevábamos bien.

Thomas: Lo que sea. Dejé de adivinar cosas hace mucho tiempo.

Teresa: Entonces… ¿amigos?

Thomas: Amigos.

Teresa: Chócala.

Thomas: Está bien.


Teresa: Oye, ¿a veces te duele el cerebro, quiero decir, no solo como
un dolor de cabeza normal, sino profundo dentro del cráneo?

Thomas: ¿Qué? ¿Hablas enserio? ¡Sí!

Teresa: ¡Shhh! Cállate, alguien viene. Hablamos de eso luego.

FIN DE LA TRANSCRIPCIÓN
Memorando CRUEL

Fecha: 13.02.228

Hora: 18:42 p.m.

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: Progresos telepáticos

Un pequeño reporte para todos aquellos que no están involucrados


directamente en el Proyecto Silencio. De todos los elementos que
hemos debatido durante la fase de planeación, este es uno que creo
que todos podemos estar de acuerdo es un absoluto ganador. El Pág.| 13

potencial para patrones de resultados valiosos de aquellos que


tienen habilidades implantadas son enormes. Aunque no hemos
podido oficialmente empezar la recolección los datos, ya podemos
ver beneficios para el estudio de lo que será el Proyecto Silencio.

Por favor recuerden la razón por la que acordarnos darles estos


dones especiales de comunicación a los Élites; es importante en caso
de que ustedes alguna vez entren en contacto directo con ellos y
sean interrogados. Estos Candidatos son por naturaleza muy
curiosos, no solo sobre sus asuntos personales, sino también acerca
del por qué están siendo tratados diferentes de los otros Sujetos en
todos los aspectos. Ellos se lo han estado preguntado de forma
mutua constantemente, y las preguntas han sido constantes ahora
que pueden hablar entre ellos a través de la telepatía.

Por favor recuerden, si son interrogados, responder que a ellos les


ha sido otorgada la habilidad de hacer esto por una sola y única
razón: permitirles comunicarse instantáneamente mientras nos
ayudan a completar El Laberinto. La ironía es que realmente ayudará.
Un poco. Creo que hemos subestimado enormemente cuán fluida y
eficientemente operará la estructura con tan singulares trabajadores.

Es vital que esos Candidatos nunca sepan la verdad. Una vez


nuestros sujetos sepan que hemos manipulado sus cerebros hasta tal
punto, vamos a perder la ventaja de sus reacciones inconscientes y
sinceras para las próximas Variables. Su perspectiva alterada y la
inevitable desconfianza no solo mancharán los resultados en un
principio, sino que también harán que sea casi imposible llevar a
cabo los experimentos de estimulación cuando empecemos a
alimentarlos para recuperar su memoria y lo similares.

Esas son las dos cosas sobre las que quería llamar su atención. En
primer lugar, que la telepatía funciona incluso mejor de lo que
esperábamos, ya que demuestra que será muy valiosa en la creación
de los tipos de situaciones y variables que necesitaremos en todo el
experimento. Y en segundo lugar, que hay que asegurarse de que
Thomas y los otros piensen que se les ha dado esta capacidad
únicamente para ayudar en sus esfuerzos de diseño y construcción.

Pág.| 14
Memorando CRUEL

Fecha: 10.06.229

Hora: 23:29

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: Propagación de la Llamarada

Debido a la incrementada rapidez de la propagación del virus y la


epidemia dentro de nuestras propias instalaciones, parece que
necesitaremos re-pensar la programación del experimento Laberinto. Pág.| 15
Aunque sería ideal mantener nuestra línea de tiempo de 5 años de
estudio y análisis, sugiero que adelantemos 2 años antes del envío de
nuestros sujetos catalizadores. He hablado con Thomas, Teresa, Aris
y Rachel, y están de acuerdo.

No creo que vayamos a ser capaces de recolectar todos los


patrones necesarios para el final de esta fase. Esto hace que sea casi
seguro que estaremos obligados a poner en práctica la segunda fase
que hemos planeado tentativamente. Lograremos resultados más
rápido acelerando el calendario, aunque la experiencia será mucho,
mucho más arriesgada.

Los próximos meses van a ser terriblemente difíciles. Estoy


instituyendo pruebas psicológicas obligatorias PARA TODOS LOS
SOCIOS, un día sí un día no, así sabremos cuando hemos llegado al
punto de no retorno, momento en el cual se llevará a cabo el cierre
definitivo. No podemos dejar que la disminución de nuestras mentes
ponga en peligro el propio proyecto destinado a detener una cosa
como esa.

Por favor sean sensibles sobre de Thomas y los otros. A pesar de


sus inteligencias y madurez, algunas veces olvidamos cuan jóvenes
son. Ellos necesitaran una piel gruesa para lograr la transición de
convertirse en nuestros reemplazos; ellos tendrán que sobrevivir con
sus emociones y fundamentos psicológicos intactos o todo el
proyecto podría ser un fracaso. Debemos vigilarlos de cerca.

En este momento es importante que no dejemos que prevalezca la


desesperanza. Tenemos la oportunidad de salvar el futuro. Sean
diligentes. Sean decididos. Separen sus emociones de las dificultades
del presente, y recuerden lo que hemos mantenido como nuestro
lema desde el principio: haremos lo que sea necesario para tener
éxito. Lo que sea necesario.
Memorando CRUEL

Fecha: 04.05.231

Hora: 13:43

Para: Socios

De: Kevin Anderson, Canciller

Asunto: Mi Despedida para Todos Ustedes

Espero que cada uno de ustedes pueda perdonarme por hacer esto
de una manera tan cobarde, enviándoles un memo cuando esto es
algo que debería hacer en persona. Sin embargo, no tengo otra
opción. Los efectos de La Llamarada se han extendidos a mis
Pág.| 16
acciones, es vergonzoso y desalentador. Y nuestra decisión de no
permitir la locura dentro de nuestro complejo significa que no puedo
fingir el tiempo suficiente para despedirme correctamente.

Escribir estas palabras es lo suficientemente difícil. Pero al menos


tengo la capacidad y el tiempo para escribir y editar en las pequeñas
ventanas de la cordura que me quedan.

No sé por qué el virus me ha afectado tan rápidamente y con tanta


saña. Me he deteriorado mucho más rápidamente que cualquiera de
todo el grupo original. Pero no importa. He sido dado de baja y mi
reemplazo, Ava Paige, está lista para hacerse cargo. Los Elites están
bien en su formación para servir como el enlace entre nosotros y
aquellos que seguirán ejecutando CRUEL. Ava misma admite que su
propósito es casi el de una figura decorativa, con nuestros
candidatos Elite, los verdaderos gobernantes.

Estamos y seguiremos estando en buenas manos. La noble tarea


que comenzamos hace más de una década será testigo de sus frutos.
Nuestros esfuerzos, y para la mayoría de nosotros, nuestras vidas,
habrán sido gastadas con justicia y por el bien común. La cura se
construirá.

Honestamente, este es un memo más personal. Para darle las


gracias por su amistad, su compasión, su empatía frente a las tareas
difíciles.

Una palabra de advertencia: Se pone mal al final. No luchen contra


su retiro. Lo hice, y ahora me arrepiento. Solo salgan y pongan fin al
sufrimiento.
Se ha vuelto demasiado.

Gracias.

Y adiós.

Pág.| 17
Memorando CRUEL

Fecha: 05.05.231

Hora: 07:16 a.m.

Para:

De:

Asunto:

Solo me quedan dos dedos. Escribí las mentiras de mi despedida


con dos dedos.

Esa es la verdad. Pág.| 18

Estamos mal.

Ellos son niños.

Nosotros estamos mal.

Debemos detenernos, dejar que los Munis tomen el mundo.

No podemos ser Dios.

No podemos hacerle esto a niños.

Ustedes están mal, yo estoy mal.

Mis dos dedos me lo dicen.

¿Cómo podemos mentirles a nuestros reemplazos?

Les damos esperanzas cuando no hay ninguna.

Todo el mundo va a morir.

Sin importar lo que pase.

Dejemos que la naturaleza gane.


Memorando CRUEL

Fecha: 22.06.231

Hora: 11:37 a.m.

Para: Los Reemplazos

De: Thomas (Sujeto A1)

Asunto: La Depuración

Me hago responsable en su totalidad por lo que hemos tenido que


hacer durante los últimos días. Lo que tenemos que tener en cuenta,
sin embargo, es que CRUEL sigue vivo y más fuerte que nunca. El
Laberinto está en marcha y nuestros estudios están en pleno apogeo. Pág.| 19
Estamos en el camino y no podemos alejarnos de él.
Todo lo que pido es que lo que hemos hecho aquí permanezca
dentro de la organización y nunca se haga referencia a ello, otra vez.
Lo hecho, hecho está, y fue una bendición. Pero ahora, cada
pensamiento tiene que dedicarse a la construcción del proyecto.

Ava Paige es la nueva canciller de CRUEL, con efecto inmediato.


Memorando CRUEL

Fecha: 28.01.223

Hora: 07:21 a.m.

Para: Mis asociados

De: Ava Paige, Canciller

Asunto: Con Referencia a Chuck

Quería compartir algunas reflexiones rápidas sobre la muerte de


Chuck dado que hablar de ello está muy extendido en todo el
recinto. Aunque no es de extrañar, la reacción me decepciona. Todos
entendemos qué es lo que se nos ha pedido hacer, y todos sabíamos Pág.| 20
que se esperaría que hagamos cosas que son difíciles. Pero el
propósito de CRUEL es a largo plazo, y todo habrá sido por nada a
menos que logremos nuestro objetivo final. Mostrar pequeñas
compasiones en el camino no hace ningún bien a nadie.

Los psiquiatras han determinado lo que debemos estimular en


nuestros sujetos y buscar los patrones, sus edictos son nuestra
primera preocupación. Chuck era un niño maravilloso, lleno de vida
y dulce ternura. De todos nuestros sujetos, él puede haber sido el
que más probablemente ganase nuestra simpatía, así como las de sus
compañeros. Irónicamente, esa es la razón por la que sucedió lo que
tenía que suceder. Vieron los resultados por sí mismos.

Lo más importante, y para aliviar sus conciencias, recuerden que


Chuck no era un Candidato potencial y sin duda habría encontrado
una muerte aún peor con el tiempo. En todo caso, le mostramos
misericordia estableciendo el escenario que condujo a su asesinato.

No hay mucho más que decir. No necesito predicar sobre la moral


o lo correcto y lo incorrecto. Estamos en modo de supervivencia, y la
única cosa que importa es maximizar el número de vidas salvadas a
largo plazo. Por favor, visite nuestros consejeros de personal si es
necesario, pero, por favor, sigan adelante y mantengan el rumbo
durante las Pruebas de la Quemadura. Los debates sobre este tema
deben cesar de inmediato para mantener la moral alta.
Segunda Parte
Correspondencia Recuperada

Pág.| 21
PARA TODOS LOS SOBREVIVIENTES DE LAS
LLAMARADAS
Los Esfuerzos de Recuperación de Información sobre la Llamarada
en adelante conocido como FIRE1, por este medio hace una petición
de ayuda a las unidades municipales, agencias de policía, los
servicios sociales y las entidades gubernamentales que sobreviven.
Puesto que la mayoría de los medios de comunicación se han vuelto
inútiles, esta volante ha sido difundida a todos los rincones del
mundo por cualquier medio disponible, incluyendo Netblock, Bergs,
aviones, barcos, coches, y caballos.

Hasta ahora FIRE está integrado por representantes de la Alianza Pág.| 22


de América del Norte, Rusia, la Unión Europea, los Estados Unidos de
África y México, todos los países que han sufrido daños catastróficos
desde las Llamaradas solares. Esperamos reunir a más representantes
de todo el mundo lo más rápidamente posible.

El mundo ha devastado por esta catástrofe. Pero ahora es el


momento de unirnos para hacer lo que siempre hemos hecho:
sobrevivir. La primera tarea de FIRE es reunir a los líderes del
mundo y recoger información. A continuación, organizaremos las
unidades de gobierno, las fuerzas policiales y los planes de
coordinación de alimentos y refugio.

Si lee este mensaje, por favor encuentre una forma de responder a


la sede de FIRE en Anchorage, Alaska.

1
Flares Information Recovery Endeavor
Memorando a la Coalición Post Llamaradas.

Fecha: 217.11.28
Hora: 9:46 p.m.
Para: Todos los miembros del Consejo.
De: Canciller John Michael.
Asunto: Respuesta a “Las inquietudes sobre la población”.

El informe que nos presentaron hoy, cuyas copias fueron enviadas


a todos los miembros de la coalición, ciertamente no deja dudas
sobre los problemas que enfrentaremos en este ya mutilado mundo;
estoy seguro que todos ustedes, como yo, se fueron a sus refugios
pasmados y en silencio. Espero que la dura realidad descrita en este
reporte sea lo suficientemente clara para que nosotros podamos
Pág.| 23
comenzar a discutir soluciones.

El problema es simple: el mundo tiene demasiada población pero


no los suficientes recursos.

Hemos programado nuestra próxima reunión de mañana en una


semana y espero que todos los miembros vengan preparados para
presentar una solución al problema, sin importar lo extraordinaria
que esta parezca. Ustedes posiblemente estarán familiarizados con
un viejo dicho de negocios “Piensen fuera de la caja” y creo que es el
momento adecuado para que hagamos justo eso.

Espero con interés recibir sus ideas.


Para: John Michael

De: Katie McVoy


Asunto: Potencial

John,

He investigado sobre el asunto que discutimos anoche, el IIMAEI


apenas sobrevivió a las llamaradas, pero están seguros de que el
sistema subterráneo de contención para los virus, bacterias y armas
biológicas más peligrosas no falló.

Tuve que luchar un poco, pero conseguí la información que


necesitamos, la revisé y se me ha ocurrido una recomendación.
Pág.| 24
Todas las soluciones potenciales son demasiado impredecibles para
ser usables, excepto una.

Es un virus. Ataca el cerebro y lo apaga sin dolor, actúa de una


forma rápida y tajante. El virus fue diseñado para debilitarse
lentamente en las tasas de infección mientras se propaga de
huésped a huésped. Es perfecto para nuestras necesidades,
especialmente considerando lo limitados que se han hecho los viajes.
Podría funcionar, John y por más terrible que parezca, yo creo que
puede ser muy eficiente.
Te estaré enviando los detalles, déjame saber lo que opinas.

―Katie
Para: Katie McVoy
De: John Michael
Asunto: Respuesta a “Potencial”

Katie,

Necesito que me ayudes a preparar la presentación de la propuesta


completa sobre la liberación del virus. Necesitamos enfocarnos en
cómo las muertes controladas son la única forma de salvar vidas.
Aunque de esta forma solo será posible salvar una parte selecta de la
población, a menos de que tomamos medidas extremas, enfrentamos
la eventual extinción de la raza humana.

Tú y yo sabemos cuán hipotética es esta solución, pero hemos Pág.| 25


hecho miles de simulaciones y ya no veo ninguna alternativa. Si no
hacemos esto el mundo se quedará sin recursos. Creo firmemente
que esta es la solución más ética, el riesgo de la extinción de nuestra
raza justifica la eliminación de algunos. Estoy decidido. Ahora es
cuestión de convencer a los demás miembros del Consejo.

Veámonos en mis dominios a las 1700. Todo tiene que estar


perfectamente ensayado, palabra por palabra, así que prepárate para
una larga noche.

Hasta entonces,

―John.
Para: Randall Spilker
De: Ladena Lichliter
Asunto:

Aún estoy mareada por la reunión de hoy. No puedo creerlo.


Todavía no puedo asimilar que el CCP2 tuviese el coraje de mirarnos
a los ojos y presentarnos esa propuesta. En serio. Me quedé perpleja.

Y luego más de la mitad de los presentes ¡ESTUVIERON DE


ACUERDO CON ELLOS! ¡Los apoyaron! ¿Qué DEMONIOS está pasando?
Randall, ¡dime qué demonios está pasando! ¿Cómo es que siquiera
podemos CONSIDERAR hacer algo como eso? ¿Cómo?

He pasado toda la tarde tratando de encontrar una forma de Pág.| 26


entenderlo todo. No puedo hacerlo. No puedo.
¿Cómo llegamos a esto?
Ven a verme esta noche, por favor.

―LL

2
Comité para el Control de la Población
Memorando para la Coalición Post Llamaradas
Fecha: 219.02.12
Hora: 7:32 PM
Para: Todos los miembros del Consejo
De: Canciller John Michael
Asunto: Bosquejo OE

Por favor denme sus opiniones sobre el siguiente bosquejo. La


versión final saldrá mañana.

Orden Ejecutiva #13 de la Coalición Post Llamaradas, por


recomendación del Comité para el Control de la Población, para ser
considerado CONFIDENCIAL, con la más alta prioridad y bajo
penalidad de castigo capital. Pág.| 27

Nosotros la Coalición por medio de la presente le concedemos al


CCP un permiso explicito para que implementen completamente su
iniciativa PC #1 presentada completamente y adjuntada más abajo.
Nosotros la Coalición asumimos toda la responsabilidad por estas
acciones y vigilaremos los avances, ofreceremos apoyo y pondremos
todos nuestros recursos a su disposición. El virus será liberado en
los lugares recomendados por el CCP y aprobados por la Coalición.
Fuerzas armadas serán posicionadas para asegurar que el proceso
siga el curso de la manera más ordenada posible.
EO #13, PCI #1, es por la presente ratificada. Empezar
inmediatamente.
Para: John Michael
De: Katie McVoy
Asunto: Potencial

John,

He recibido el siguiente mensaje de audio de los soldados en la


Zona Cero EU: es un intercambio entre el Lugarteniente Larrson y un
Cabo llamado Kibucho que tuvo lugar en un sobrevuelo en
helicóptero. Tengo que advertirte, es un poco perturbadora.

*Inicio de la trasmisión*
Larsson: ¿Que está haciendo ese *palabrota* allí abajo? A través de
esa brecha que está en el techo, ¿Por qué hay tanto movimiento? Pág.| 28
Kibucho: Los *palabrota* deberían estar muertos para este punto,
tienen que ser animales u algo así.
Larsson: Es imposible pero está muy oscuro, tenemos que bajar y
observar.
Kibucho: Les diré.

*Interrupción de 3 minutos en la trasmisión.*


Larsson: Abre la puerta.
Kibucho: ¿Está seguro?
Larrson: Cabo, abra la puerta de *palabrota.*
Kibucho: Entrando.

*Interrupción de 2 minutos en la trasmisión.*


Kibucho: ¡Él me arrancó la pierna! ¡El me arrancó la *palabrota*
pierna!
Larsson: ¿Qué? ¿De qué *palabrota* estás hablando?
Kibucho: [Respuesta distorsionada.]
Larsson: ¡Cabo! ¿Qué está pasando?
Kibucho: ¡La mitad de ellos están vivos! ¡Sáquenme!
Larsson: Apoyo, Apoyo, ¡Apoyo!, ¡Necesitamos apoyo en el sector
17 de la Zona Cero E.U. inmediatamente!
Kibucho: [Gritos distorsionados.]
Larsson: ¡Santa *palabrota*! ¡Santa *palabrota*! ¡Se lo están
comiendo! ¡Dios mío, se lo están comiendo!
Kibucho: [Gritos distorsionados, que se cortan abruptamente.]
Larsson: ¡Me tienen arrinconado! ¡Oh, *palabrota*, me tienen
arrinconado!
*Fin de la trasmisión.*
Tenemos que reunir al Consejo.

―Katie.

Pág.| 29
Para: Randall Spilker
De: Ladena Lichliter
Asunto: Increíble

Sé que has estado enfermo, pero los reportes ya están por todas
partes. ¿Has visto a alguno de ellos?

Esto ya no son chismes Randall, hay al menos 27 avistamientos


confirmados de grupos infectados. ¡El virus no los mato! Ninguno de
los doctores o de los científicos puede encontrar que fue lo que salió
mal. Pero casi todas las personas que vivían en los lugares de la Zona
Cero, están completamente locos, casi parecen animales. ¡Son
monstruos!
Pág.| 30
Pero eso ni siquiera es lo peor. Lo que tiene aterrorizados a la
Coalición es que algunas víctimas pudieron escapar de los campos
remotos. La Coalición pensó que el periodo de incubación y el
periodo de muerte sería mucho más rápido. Ahora hay reportes de
síntomas entre los ciudadanos de fuera de las zonas. Están en todos
lados.

Randall tenemos una gran, gran crisis en nuestras manos, debieron


escucharnos. ¡Debieron escucharnos!
Que Dios nos ayude.

―LL
Para: John Michael
De: Katie McVoy
Asunto: Unas últimas palabras.

John,

No hay forma de detener esto. Tienes razón. Odio admitirlo pero


es verdad. Todos nuestros esfuerzos por evitar la propagación
fueron inútiles. El virus está saltando entre cuerpos a cada segundo
que pasa. Todo lo que podemos esperar es que los rumores sobre la
presencia de personas inmunes sean reales. Ellos podrían ser nuestra
única oportunidad para sobrevivir.

Una cura, es la única solución que se me ocurre. De alguna forma Pág.| 31


tenemos que encontrar una cura.

¿Has escuchado como lo llaman los medios de comunicación? La


Llamarada, estoy segura de que será popular.

Estoy infectada, sé que lo estoy y por eso me iré, no quiero


infectar a nadie.
Fuiste un fiel amigo en esta locura.

Adiós, John.

―Katie
Memorando para la Coalición Post Llamaradas
Fecha: 220.05.01
Hora: 11:23 a.m.
Para: Todos los miembros del Consejo
De: Canciller John Michael
Asunto: Respuesta a “Otra Solución.”

La Zona Muerta. Esa es su nueva forma de referirse al cerebro


ahora. Es donde La Llamarada nos afecta y donde nos mata
lentamente con locura. Y ahora también le tienen un nombre a los
inmunes. Los Munis, qué ridiculez.

Pero la jerga ya poco importa. Lo que nos importa ahora es como


se conecta todo. La Zona Muerta. La Llamarada. Los Munis. Este es un Pág.| 32
mundo que está en una completa catástrofe. Necesitamos encontrar
una cura. Es la única forma de seguir avanzando.

Nos reuniremos mañana a las 0800.


Tengo una idea.
Tercera Parte
Recuerdos Suprimidos

Primer recuerdo de Thomas sobre la Llamarada

Han pasado cinco días desde que Thomas fue encerrado en la


habitación blanca.
Pág.| 33

En el quito día, después de haber hecho sus mejores intentos para


pasar la rutina que se había establecido -hacer ejercicio, comer,
pensar, repetirlo- decidió acostarse y dormir. Dejar que ese
espantoso nuevo mundo se desvaneciera por un momento. Cansado,
se fue sumiendo en el sueño y las imágenes comenzaron a aflorar en
su mente.

Thomas es joven, no puede decir cuán joven exactamente. Está


acurrucado en una esquina, con las rodillas contra su pecho,
temblando de miedo. Su padre, el hombre que lo sostiene, le lee, le
da un beso en la mejilla, lo abraza, lo baña, está comportándose
como loco, gritando cosas odiosas y volcando muebles. Su madre
trata de detenerlo, pero él la rechaza sin siquiera parecer darse
cuenta de quién es. Ella tropieza, intenta recuperar el equilibrio, y
luego choca contra la pared a pocos metros de Thomas.

Sollozando, ella se arrastra hacia él y lo abraza.

―No te preocupes, cariño ―susurra―. Ellos van a venir a


llevárselo. Estarán aquí pronto.

―¿Quiénes? ―pregunta Thomas―. Su voz suena muy joven, y


rompe su corazón en el sueño.

―Las personas que cuidarán de él ―ella responde―. Recuerda, tu


padre está enfermo, muy enfermo. No es realmente él quien hace
todo esto. Es la enfermedad.

Repentinamente papá se da la vuelta para encararlos, su rostro


ardiendo de ira.
―¿Enfermedad? ¿Acabo de escucharte decir enfermedad? ―cada
palabra sale de su boca como un dardo venenoso, lleno de ponzoña.

Mamá sacude la cabeza, abraza a Thomas más fuerte contra su


cuerpo.

―Porque no solo lo dices, mujer ―papá continúa, dando un paso


hacia ellos. Su pecho se sacude cada vez que intenta respirar, y sus
manos se vuelven puños fuertemente apretados. ―La llamarada. Dile
al niño cómo es. Dile la verdad. Tu padre tiene La Llamarada,
Thomas. Está progresando realmente bien.

Otro paso más cerca. ―Tu madre también lo tiene. Oh, sí. Pronto
ella estará mordiéndose los dedos y alimentándote con lodo en el
desayuno. Riendo histéricamente mientras rompe las ventanas y
Pág.| 34
trata de cortarte. Estará muy loca, chico, justo igual que tu padre.

Otro paso más cerca. Thomas cierra los ojos apretándolos, con la
esperanza de que de esa manera todo desaparezca. El Thomas del
sueño no quiere ver más, tampoco. Quiere que acabe.

―Mírame, chico ―dice su padre con una mueca. ―Mírame cuando


te hablo.

Thomas no puede evitarlo. Él siempre hace lo que le dicen. Su


padre parece tranquilo ahora, en todos los sentidos, excepto por
algo: sus puños. Dedos y nudillos en blanco.

―Eso es bueno ―dice papá. ―Buen chico. Mira a tu padre.


¿Parezco loco para ti? ¿Eh? ¿Lo parezco? ―grita esas últimas
palabras.

―No, señor ―Thomas dice, sorprendido de poderlo decir sin


temblar.

―Bien, estás equivocado entonces―. La cara de papá envuelta en


ira otra vez.

―Estoy loco, chico. Soy un hombre loco. Podría comerlos a ambos


en la cena y disfrutar cada bocado.

―¡Detente! ―grita mamá, un sonido tan alto que perfora los


tímpanos de Thomas dolorosamente. ―¡Detente ahora mismo! ¡Juro
por Dios que te arrancaré el corazón si tocas a mi hijo!

Papá ríe a carcajadas. No es una simple risa. Su cuerpo completo se


agita, echa hacia atrás su cabeza mientras unas carcajadas crecientes
fluyen a través de él, llenando la casa con su ruido. Thomas nunca
había oído algo tan maligno antes. Pero el hombre se mantiene
riendo, riendo y riendo.

―¡Basta! ―mamá grita otra vez. Lo repite una y otra vez hasta que
finalmente Thomas no puede soportarlo más y cubre sus oídos.

Entonces el timbre suena, apenas lo sufrientemente alto para ser


escuchado. Pero ambos padres se callan. Papá mira en dirección a la
puerta principal, su cara repentinamente envuelta en miedo.

―Han venido por ti, ―mamá dice entre sollozos. ―Mi dulzura, el
amor de mi vida, han venido para llevarte.

Thomas despertó.
Pág.| 35
Sartén, Operación de Eliminación del
Neutralizador

Sartén observó a su enfermera, y aunque el nerviosismo carcomía


sus entrañas, sabía que estaba haciendo lo correcto y se forzó a sí
mismo a relajarse. Estaba a punto de recuperar su memoria. ¡Sus
recuerdos!

No podía esperar a ver su pasado.

La mujer limpió un espacio en el costado de su cuello, luego


empujó la aguja dentro de una vena antes de que él pudiera decir Pág.| 36
otra palabra. Hubo un pinchazo agudo y luego el calor empezó a fluir
por su cuerpo.

―Listo —dijo ella. —Sólo descansa por unos minutos. Bajaremos la


máscara tan pronto te duermas.

—¿Cómo funciona? —susurro Sartén; no pudo evitarlo, quería


respuestas. —De todos modos, ¿qué es el Neutralizador?

—Sólo relájate —fue todo lo que respondió ella.

Sartén cerró sus ojos y decidió callarse. Las respuestas vendrían


pronto. Tomó una gran bocanada de aire, haciendo lo mejor por
seguir las indicaciones, para calmar sus nervios. La calidez que había
estado sintiendo se expandió y el cansancio comenzó a apoderarse
de él, llevándolo a dormirse.

—¿Estás listo?
Los ojos de Sartén se abrieron de repente para ver a su enfermera
observándolo por sobre lo que parecía ser una neblina blanca. Trató
de hablar, pero sólo salió un balbuceo de algo ininteligible.

—Pareces listo —dijo ella. —Sólo quería que sepas que estoy a
punto de bajar la máscara. No necesitas hacer nada, cierra tus ojos
otra vez. Cuando te despiertes recordarás todo.

Él gruñó, cerró sus ojos. No había estado tan cansado en mucho


tiempo. Algo chilló, seguido de un chirrido, luego unos fuertes
tintineos. Sintió las almohadillas de la máscara en su piel. Algo
rechinó, recordándole a los Penitentes, lo que disparó un breve
chorro de pánico por su cuerpo antes de ser tragado por su
cansancio.

Justo antes de perder la conciencia, juró que podía sentir gusanos


tratando de meterse por sus orejas.

Sartén nadaba en una piscina de oscuridad.

En algún lugar allí afuera, en la periferia, estaba consciente del


dolor. Mordía sus nervios, rebanaba su cabeza y su cerebro. Pero un
embotamiento, la niebla de las drogas, lo adormecía, lo transformaba
en algo que no le importaba.

Mientras flotaba en la ausencia de luz, recordó cómo los demás Pág.| 37

habían descrito pasar por la Transformación, un viaje horrible dentro


de un arremolinante tornado blanco de su imaginación. Y eso sólo
cuando recobraban unos pocos destellos de recuerdos. Ellos
hablaban de dolor extremo, y él se preguntó si estaba por
experimentar eso. No le gustaba mucho la idea, una buena
quemadura de cocina fue lo peor que le había pasado antes.

Las cosas se desarrollaron diferente a como se lo podría haber


imaginado.

Flotaba en un vacío imposible, sin gravedad, sin sentido de


orientación o espacio. Finalmente, un suelo invisible se solidificó
debajo de él y sus pies tocaron una superficie dura. Recobró su
compostura y miró a su alrededor esperando que una luz
desvaneciera la oscuridad que lo oprimía, asustándolo.

Algo crujió cerca de él y se volvió hacia el sonido, vio una puerta


abierta, una luz tenue esparciéndose para mostrar un camino de
piedra entre él y la entrada a quién sabe dónde. Él sabía que todo
esto tenía que ser parte de su imaginación, que en realidad no estaba
allí viendo lo que estaba viendo. Tenía que ser simbólico, algo
formado en su imaginación para poder procesar lo que sea que los
doctores estaban haciéndole a su cerebro con sus máscaras
mecánicas.

Alcanzó la puerta con sólo cuatro pasos, dudó frente a ella, luego
la abrió aún más y entró a un mar de negrura. Cuando sus ojos se
acostumbraron, se dio cuenta de que estaba en un pasillo que se
extendía en la distancia hasta la que podían ver sus ojos. Las
paredes, el piso y el techo ya no eran negros, sino blancos.
Continuaban hasta que convergían en un único punto.

Una serie de pantallas estaban dispuestas en la pared derecha, una


a cada metro, pareciendo continuar como el mismo pasillo. De
repente la pantalla más cercana a él pestañeó con estática; luego una
imagen con movimiento se formó dentro del cuadrado,
perfectamente clara y fresca. Sartén se acercó para poder ver mejor.

Un hombre, de pie junto a una encimera en la cocina, sus brazos se


mueven con furia mientras él mezcla algo dentro de un recipiente.
Sartén está sentado en el suelo, mirando a este hombre. Su... padre.
El hombre se da la vuelta para mirar a Sartén, una enorme sonrisa en
su rostro.
Pág.| 38
—Estos serán los mejores panqueques comidos por la humanidad.
¡Ya están casi listos! —Sartén ríe.

La pantalla se pone negra. Sartén se da cuenta de que ese es su


primer recuerdo, lo más lejos que puede llegar su mente; tal vez
tenía tres años. Está recordando a su padre, su rostro amable lleno
de amor mientras hablaba y sonreía.

Sartén sabe qué tiene que hacer a continuación, se recuerda a sí


mismo que todo es producto de su imaginación; así es cómo su
cerebro ha decidido devolverle la vida. Camina hacia la próxima
pantalla.

Él está sentado en una piscina pequeña, salpicando y chillando,


llorando cuando mucha agua se mete en sus ojos. Manos cálidas lo
buscan -unas manos de mujer- y limpian su rostro; luego todo vuelve
a comenzar. Un balón es arrojado y él lo patea. El cuerpo de su
madre continúa apareciendo y desapareciendo en el fondo mientras
ella va de un lado a otro. Ella acaba de oír terribles noticias sobre la
enfermedad propagándose por el mundo.

Él no entiende cómo todo esto le es tan claro con sólo mirar unas
pocas imágenes. Pero lo es. Sigue a la próxima pantalla.

Es un poco mayor y está ayudando a su papá en la cocina. Están


preparando un estofado, cortando todas las verduras y la carne. Su
papá está llorando. Sartén sabe que se han llevado a su mamá para
más exámenes, y que ellos han dicho que su padre sería el siguiente.

En la siguiente pantalla.
Un hombre vestido con un traje oscuro, parado junto a un coche.
Papeles en su puño, una mirada profunda en su rostro. Sartén está
tomado de la mano de su padre en el pórtico. CRUEL ha sido
formado, un proyecto colectivo de los gobiernos del mundo; aquellos
que sobrevivieron las llamaradas solares, un evento que pasó mucho
antes de que Sartén naciera. El propósito de CRUEL es estudiar lo que
ahora se conoce como la zona muerta, donde la Llamarada causa
estragos. El cerebro.

Sartén es inmune. Otros son inmunes. Menos del uno por ciento de
la población, la mayoría de ellos menores de veinte años. Muchas
personas han desarrollado odio hacia aquellos que son inmunes, los
llaman Munis y hacen cosas terribles por envidia. CRUEL dice que
pueden proteger a Sartén mientras están trabajando para obtener una
Pág.| 39
cura.

Su padre le dice muchas cosas. Mayormente que lo ama y que está


muy feliz de que jamás tenga que atravesar situaciones como las que
están viendo pasar alrededor del mundo. Locura y asesinatos.

Sartén no tiene motivos para procesar o pensar con profundidad


sobre los recuerdos devueltos. No son como nuevas revelaciones,
cosas ante las que tenga que responder de alguna manera. Siempre
han estado allí, dentro de él. Ya ha reaccionado a ellas. Ha sido
moldeado por ellas. No está aprendiendo. No está experimentando.
Está recordando.

Camina hacia la próxima pantalla, hambriento por volver a ser él.


Minho, Prueba Fase 3

Tres días han pasado desde que llegaron del Desierto en los Bergs,
y Minho estaba casi listo para volverse agresivo. Había sido recluido
en una pequeña habitación con abundante comida y absolutamente
nada para hacer. Contar las columnas del empapelado e imaginar
rostros en el estampado arremolinado del cielorraso se había vuelto
cosa de ayer. Y no había escuchado nada sobre Thomas o sus otros
amigos.

En la mañana del cuarto día, la Rata apareció en su puerta con dos


guardias armados. Pág.| 40

—Sígueme —dijo.

—¿Sin besos ni abrazos? —preguntó Minho. —He extrañado tu


horrible rostro.

—Sígueme o te dispararán —ni siquiera una grieta en su expresión


dura como piedra.

Minho suspiró e hizo lo que se le dijo. No estaba de humor para


recibir un disparo ese día. Y si era honesto consigo mismo, cualquier
cosa sería mejor que estar sentado en esa habitación un segundo
más.

Minho siguió a la Rata por un largo pasillo y luego a una pequeña


cámara que conducía a varias puertas marcadas.

—Estás en la habitación número ocho —anunció la Rata. Hizo un


gesto hacia la puerta marcada con un #8.

Se quedaron allí, en silencio, hasta que Minho preguntó: —¿De


verdad? ¿Qué se supone que haga allí adentro?

—Un simple ensayo —respondió la Rata. —Nada comparado a las


Pruebas anteriores, te lo aseguro. El tuyo probablemente sea el más
fácil de todos los experimentos que hemos creado, y creo que el más
corto. Te harán una sola y única pregunta, y la respuesta consistirá
en exactamente una palabra. ¿Suena suficientemente simple?

Sonaba demasiado simple. —¿De verdad piensas que podría


confiar en ti alguna vez, garlopo?
—¿Disculpa? —preguntó la Rata.

Minho sacudió su cabeza. —Juro por Dios que si me haces una


cosa más a mí o a mis amigos, no dejaré de pelear hasta estar
muerto.

Una sonrisa de satisfacción apareció en el rostro del hombre,


enojando aún más a Minho.

—Te doy mi palabra de que sólo tu respuesta dictará lo que pase.


Todo lo que pase desde este punto es voluntario. Las Pruebas han
finalizado.

Minho estaba tan enfadado que casi temblaba. Sabía que no tenía
más opción que hacer lo que le decían, y eso lo volvía loco.
Pág.| 41
—¿Estás listo? —preguntó la Rata.

Minho gruñó. Caminó hacia la puerta marcada con un ocho y la


abrió. Estaba sorprendido, no había artilugios fantásticos ni
máquinas complejas. Era una pequeña habitación color beige con una
sola silla en medio del piso cubierto con baldosas marrones. Una
pizarra blanca colgaba en la pared opuesta, y junto a ella se
encontraba un hombre alto y musculoso vestido con ropa quirúrgica
verde y una bata blanca de laboratorio. Tenía el pelo negro
perfectamente peinado y el peor bigote que Minho hubiese visto en
toda su vida.

—Bienvenido —dijo el hombre—, mi nombre es Lincoln. Toma


asiento mirando hacia a mí, por favor.

La curiosidad le ganó. Minho se sentó en la silla, preguntándose


qué hacer con sus manos, hasta que finalmente las apoyó en su
regazo.

—Ahora observa, por favor —dijo Lincoln con una voz fría y
clínica.

El hombre se dio vuelta y comenzó a escribir con su dedo en la


esquina superior izquierda de la pizarra, creando con su tacto líneas
rojas mientras se movía.

La primera palabra que Lincoln escribió fue Thomas. Luego


descendió unos pocos centímetros y escribió Newt.

Bajó nuevamente y añadió Sartén, y Aris debajo de ese. El hombre


se movió hacia la derecha y escribió Harriet en la esquina superior
de ese lado. Descendió y escribió Sonya. Luego Teresa. Y después,
para sorpresa de Minho, Brenda.

Cuando Lincoln finalizó, ocho nombres estaban impresos en rojo


sobre la pizarra, separados a la misma distancia unos de otros. Se
volvió nuevamente para mirar a Minho.

—¿Confirmas que estás al tanto de estos ocho individuos? —


preguntó Lincoln.

Minho puso los ojos en blanco. —Sí, genio, los conozco. La Rata
dijo que sólo harías una pregunta. ¿Eso es todo?

—El verdadero ejercicio de Experiencia no ha comenzado. Esto es


lo que llamaríamos trabajo de preparación. Por favor responde la
pregunta preliminar y luego comenzaremos con el exámen. Pág.| 42

―¿Conf...

—¡Sí! —gritó Minho—. Los conozco. ¿Ahora qué?

Lincoln no mostró signos de haber sido atrapado con la guardia


baja. Respondió calmadamente. —Gracias por confirmarlo.

Sus ojos vacilaron hacia una de las esquinas traseras del


cielorraso; Minho se dio vuelta para ver a qué estaba mirando. Un
escarabajo estaba pegado a la pared; su luz roja lo hacía imposible
de pasar por alto.

Minho podía ver el familiar garabato de CRUEL pintado en su


cuerpo. Recuerdos del Laberinto lo inundaron, y se giró a mirar a
Lincoln otra vez.

Por supuesto que estarían observando todo esto, se dijo a sí


mismo. Pero, ¿tenían que usar escarabajos? No los había visto desde
que había dejado el Laberinto.

—Bien, estamos listos para empezar —dijo Lincoln en voz alta. El


hombre volvió a concentrarse en Minho.

—Como te han dicho, voy a hacerte una sola y única pregunta. Tu


respuesta estará limitada a una palabra. Si estás listo haré la
pregunta en diez segundos.

Minho dejó escapar una pequeña risa para demostrar lo absurda


que era esta situación, luego asintió. Estaba listo.
Cuando el tiempo estipulado pasó, Lincoln habló con voz grave
para mostrar que cada palabra era verdad.

—Nuestros doctores han determinado que necesitamos diseccionar


los cerebros de estos sujetos para realizar estudios exhaustivos. Pero
te permitiremos salvar a uno de ellos. ¿A qué persona eliges salvar?
Esa es tu pregunta.

Cinco minutos enteros pasaron. Minho, sentado en silencio. No


podía ser verdad. ¿De verdad CRUEL iba a diseccionar los cerebros de
sus amigos?

—Minho —dijo Lincoln―, necesito que respondas la pregunta, pero


Pág.| 43
puedes tomarte un poco más de tiempo si lo necesitas. Sé que debe
ser difícil.

—No voy a responder a tu estúpida pregunta —contestó Minho,


sorprendido por la gran cantidad de veneno que contenía cada
palabra.

—Esto no es un juego. Las personas de esta lista han sido


utilizadas completamente, y el único valor que les queda es ser
estudiadas físicamente. Tus amigos tendrán el honor de donar sus
vidas a la causa más noble conocida por la humanidad.

Minho no dijo nada, agitándose en su silla.

Lincoln insistió. —Da gracias a que los psiquiatras determinaron


que esta Prueba sería beneficiosa. Al menos puedes salvar una de las
personas que te importan.

Minho rompió el contacto visual y miró a sus manos. Había estado


sujetándose con fuerza a la silla, pudo notarlo. Puntos flotaban ante
sus ojos, la sangre palpitaba en su cabeza, casi como si pudiera
escucharla corriendo por sus venas y hasta su corazón. De todas las
veces que había sentido ira desde que entró al Laberinto, nunca
había sido como ahora. Nunca.

—¿Cuánto tiempo nec…

—¡No necesito tiempo! —Minho gritó antes de que el hombre


pudiera finalizar—. ¡Me niego a contestar! Si siquiera tocas a uno de
ellos, te jur…
—Me temo que no tienes elección en este problema—. La voz de
Lincoln era firme, y él parecía imperturbable. —Son tiempos difíciles,
y necesitamos completar el esquema. Necesitamos esos cerebros
para los estudios.

—No voy a dejar que lo hagas —dijo Minho, repentinamente


calmado—. Si uno de ellos resulta lastimado, se acabó. Hazlo
conmigo, haz todas las pruebas que necesites hacer, pero déjalos
fuera de esto.

—Esa no es una opción, Minho. Lo lamento. Necesitamos tomar


esta decisión. Y estamos dispuestos a hacer cualquier cosa necesaria
para... estimularte a continuar ayudando.

—¿Qué se supone que significa eso?


Pág.| 44

Las líneas en la mandíbula de Lincoln se estrecharon. —Significa lo


que significa. Ahora, ¿cuál de estos nombres eliges?

—Elijo a todos ellos —dijo Minho.

—Sólo puedes elegir uno.

—Todos ellos.

—Uno y sólo uno.

—Todos.

Lincoln dio un paso adelante. —Voy a preguntarlo una vez más


antes de tomar otras medidas. ¿Cuál de tus amigos quieres salvar?

—Cada uno de ellos. Lincoln se adelantó con rapidez y sujetó a


Minho por la camiseta, poniéndolo de pie.

—¡Elegirás ahora!

Minho estaba aterrado, pero hizo caso omiso de ello.

—¡Todos!

Lincoln se echó hacia atrás con su mano derecha, formó un puño,


y golpeó a Minho en la cara.
Dolor explotó en su cabeza cuando cayó al suelo. Luces parecían
parpadear entre las baldosas marrones a unos centímetros de sus
ojos. Lincoln lo sujetó y volvió a ponerlo de pie, lo dio vuelta para
verlo a la cara nuevamente. Su fuerza era absurda; Minho no tenía
ninguna posibilidad.
—¿Qué nombre escoges? —Lincoln preguntó.

El rostro de Minho se sentía fracturado y podía saborear sangre,


pero se negó a renunciar.

—¡No voy a elegir! —escupió una bola de baba roja a la cara de


Lincoln. El hombre no se acobardó; golpeó a Minho otra vez, pero
esta vez lo sostuvo para que no se cayera. Otra explosión de dolor,
más luces.

—Minho —dijo Lincoln con una calma insultante. —¿Cuál de todos


los nombres escoges?

—¡No lo haré! —Minho se forzó a decir.

Lincoln lo golpeó en la otra mejilla. Otra vez. Y una vez más. La Pág.| 45
cabeza de Minho se sentía como agujas y papilla.

—Haz una elección —Lincoln ahora hablaba entre prununciadas


exhalaciones—. ¿Cual de los nombres eliges?

Minho no lo entendía, no podía comprender cómo todo esto podía


ser necesario. La confusión lo volvió más obstinado y enfadado.

—Todos ellos —dijo, avergonzado por cómo salió, nada más que
un quejido.

—Podemos hacer esto todo el día —dijo Lincoln—. No nos iremos y


no voy a detenerme hasta que me des una respuesta. Todo lo que
tiene que hacer es darme un nombre. ¡Sólo dilo! ¡Ahora, ¿cuál?! ¡Dilo!

—Todos ellos, garlopo, miertero, pedazo de plopus —Minho


sonrió.

Lincoln mostró en su rostro un leve indicio de sorpresa, pero se


recompuso casi tan rápido como se le había escapado. Dio un paso
hacia atrás, acomodó su vestimenta.

—El experimento ha finalizado —dijo el hombre—. Eres libre de


irte.

Atónito y magullado, Minho se quedó en silencio mientras los


guardias entraban en la habitación y lo escoltaban de nuevo a su
dormitorio.
¡A continuación un adelanto de
The eye of minds!

Pág.| 46

Extracto de autor © 2013 por James Dashner. Publicado por


Delacorte Press, una editorial de libros de Random House para niños,
una división de Random House LLC, New York.
CAPÍTULO I
El Ataúd
1
Michael habló contra el viento, a una chica llamada Tanya.

―Sé que hay agua ahí abajo pero también podría ser concreto. Vas
a quedar tan plana como un panqueque en el segundo en que lo
golpees.

No era la mejor elección de palabras confortables para hablarle a


alguien que quería ponerle fin a su vida, pero sin duda era verdad. Pág.| 47
Tanya había trepado la barandilla del Golden Gate Bridge, los coches
vibrando en la carretera, y estaba recostada hacia el aire libre, sus
manos nerviosas aferradas a un poste húmedo por la niebla. Incluso
si Michael conseguía de alguna manera convencerla de no saltar, esos
dedos resbaladizos podían terminar con el asunto de todas formas. Y
entonces las luces se apagarían. Se imaginó a algún pobre tonto
pescador pensando que finalmente había atrapado el pez gordo, sólo
para encontrarse con una desagradable sorpresa.

―Deja de bromear ―respondió la chica temblorosa―. No es un


juego, ya no lo es.

Michael estaba dentro de la VirtNet, El Sueño, para las personas


que entraban tan frecuentemente como lo hacía él. Estaba
acostumbrado a ver gente asustada ahí. Muchos de ellos. Sin
embargo, debajo del miedo solía estar el conocimiento. El
conocimiento de que sin importar lo que sucediera en el Sueño, no
era real.

Pero no con Tanya. Tanya era diferente. Al menos, su Aura, su


contraparte simulada por el computador, lo era. Su Aura tenía esta
loca apariencia de puro terror en su rostro, y le produjo repentino
escalofríos a Michael, lo hizo sentir como si fuera él quien estaba
flotando sobre esa larga caída hacia a la muerte. Y Michael no era un
gran fan de la muerte, real o falsa.

―Es un juego, y lo sabes ―dijo él, más alto de lo que quería. No


quería asustarla. Pero un viento frío se había levantado, y parecía
tomar sus palabras y llevarlas abajo hacia la bahía. ―Vuelve aquí y
hablemos. Ambos obtendremos nuestros Puntos de Experiencia, y
podemos ir a explorar la ciudad, llegar a conocernos el uno al otro.
Encontraremos algunos locos que espiar. Tal vez incluso hackear
algo de comida gratis de las tiendas. Serán buenos tiempos. Y cuando
hayamos terminado, te encontraremos un Portal, y podrás regresar a
casa. Tomar un descanso del juego por un tiempo.

―¡Esto no tiene nada que ver con Lifeblood! ―Tanya le gritó. El


viento tiró de su ropa y su oscuro cabello se desplegó tras de ella
como ropa tendida en un alambre. ―Sólo vete y déjame en paz. No
quiero que tu cara de niño de lindo sea la última cosa que vea.

Michael pensó en Lifeblood Deep3, el siguiente nivel, el objetivo de


todos los objetivos. Donde todo era mil veces más real, más
avanzado, más intenso. Él estaba a tres años de ganar su pase de
entrada. Tal vez dos. Pero en ese momento necesitaba convencer a Pág.| 48
esa chica tonta de no saltar hacia su cita con los peces o sería
enviado de vuelta a los Suburbios por una semana, haciendo que
Lifeblood Deep se encontrara aún más lejos.

―Bien, mira… ―estaba intentando escoger sus palabras


cuidadosamente, pero ya había cometido un error bastante grande y
lo sabía. Actuar de una forma distinta a la habitual y usar el juego
mismo como una razón para que ella detuviera lo que estaba
haciendo, significaba que sus puntos serían mermados. Y todo era
acerca de los Puntos. Pero, esta chica realmente estaba empezando a
asustarlo. Tenía un rostro pálido y hundido, como si ya hubiera
muerto.

―¡Sólo márchate! ―gritó ella―. No lo entiendes. Estoy atrapada


aquí. Con Portales o sin ellos. ¡Estoy atrapada! ¡Él no me dejará
regresar!

Michael quería gritarle en respuesta, estaba diciendo tonterías. Una


oscura parte suya quería decir olvídalo, decirle que era una
perdedora, dejarla caer de narices. Estaba siendo muy terca, no era
como si algo de eso estuviera realmente sucediendo. Era sólo un
juego. Tenía que recordárselo a sí mismo todo el tiempo.

Pero no podía estropear esto. Necesitaba los puntos.

―Está bien. Escucha. ―Dio un paso atrás, levantó las manos como
si estuviera intentando calmar a un animal asustado. ―Apenas nos
conocemos, dame algo de tiempo. Prometo que no haré nada loco.

3
Profunda Vida de sangre.
Quieres saltar, te dejaré saltar. Pero al menos habla conmigo. Dime
por qué.

Las lágrimas delinearon sus mejillas; sus ojos se habían vuelto


rojos e hinchados.

―Sólo vete. Por favor ―su voz había adquirido la suavidad de la


derrota. ―No estoy jugando. Ya he terminado con esto, con todo
esto.

―¿Terminado? Bien, está bien haber terminado. Pero no tienes que


arruinarlo para mí también ¿verdad? ―Michael pensó que tal vez
estaba bien hablar sobre el juego después de todo, ya que ella lo
estaba usando como su razón para ponerle un fin, para salir del
Hotel virtual de-carne-y-hueso y nunca regresar. ―En serio, camina
Pág.| 49
de vuelta al Portal conmigo, regresa a ti misma, hazlo del modo
correcto. Terminas con el juego, estás a salvo, yo consigo mis
Puntos. ¿No es ese el final más feliz que del que hayas oído hablar
alguna vez?

―Te odio ―ella escupe. Literalmente. Un spray de saliva brumosa.


―Ni siquiera te conozco y te odio. ¡Esto no tiene nada que ver con
Lifeblood!

―Entonces dime con qué sí tiene que ver ―lo dijo amablemente,
tratando de mantener su compostura. ―Has tenido todo el día para
saltar. Sólo dame unos minutos. Háblame, Tanya.

Ella hundió la cabeza en el hueco de su brazo derecho.

―Simplemente ya no puedo hacerlo más ―ella gimió y sus


hombros temblaron, haciendo que Michael se preocupase por su
agarre nuevamente. ―No puedo.

Algunas personas tan sólo son débiles, pensó, aunque no era tan
estúpido para decirlo.

Lifeblood era de lejos el juego más popular en la VirtNet. Sí, podías


ir a algún desagradable campo de batalla en la Guerra Civil o luchar
contra dragones con una espada mágica, volar naves espaciales,
explorar las extrañas chozas de amor. Pero todas esas cosas se
volvieron viejas rápidamente. Al final, nada era más fascinante que la
esquelética, desagradable y cruda vida real. Nada. Y había algunos,
como Tanya, que obviamente no podían manejarlo. Michael de
seguro podía. Había incrementado su puesto casi tan rápidamente
como el legendario jugador Gunner Skale.
―Vamos, Tanya ―dijo―. ¿Cómo puede lastimar hablar conmigo? Y
si vas a dejarlo, ¿por qué querrías terminar tu última partida
quitándote la vida tan violentamente?

Su cabeza se alzó y lo miró con unos ojos tan rígidos que se


estremeció de nuevo.

―Kaine me ha dado caza por última vez ―dijo―. No puede


simplemente atraparme aquí y usarme para un experimento,
impulsar a los KillSims sobre mí. Voy a arrancarme mi Core4.

Esas últimas palabras cambiaron todo. Michael vio con horror


como Tanya apretó su agarre al poste con una mano, luego se estiró
con la otra, y comenzó a cavar en su propia carne.
Pág.| 50

4 Núcleo
2

Michael olvidó el juego, olvidó los puntos. La situación había


pasado de ser molesta a ser de vida o muerte. En todos sus años
jugando, jamás había visto a alguien codificar fuera su Core,
destruyendo el dispositivo de barrera de El Ataúd que mantenía el
mundo virtual y el mundo real separados en sus mentes.

―¡Deja de hacer eso! ―gritó, con un pie ya en la barandilla.


―¡Detente!

Saltó a la pasarela en el borde exterior del puente y se congeló.


Estaba a solo unos pocos metros de ella ahora, y quería evitar
Pág.| 51
cualquier movimiento rápido que pudiera hacerle entrar en pánico.
Manteniendo la calma, dio un pequeño paso hacia ella.

―No hagas eso ―dijo Michael tan suavemente como pudo a través
del viento cortante.

Tanya seguía cavando en su sien derecha. Había desprendido


trozos de su piel; el flujo de sangre de la herida cubrió rápidamente
sus manos y el costado de su rostro en escarlata. Una mirada de
aterradora calma se había apoderado de ella, como si no tuviera idea
de lo que se estaba haciéndose a sí misma, aunque Michael sabía
muy bien que estaba ocupada deshaciendo el código.

―¡Deja de codificar por un segundo! ―Michael gritó ―. ¿Podrías


hablar de esto antes de que te arranques tu maldito Core? Sabes lo
que esto significa.

―¿Por qué te preocupas tanto? ―respondió ella en voz tan baja


que Michael tuvo que leer sus labios para entenderlo. Pero al menos
había dejado de escarbar.

Michael solo se quedó mirando. Porque ella había dejado de cavar


y ahora rebuscaba en la masa de carne desgarrada con el pulgar y el
índice.

―Tú sólo quieres tus Puntos de Experiencia —dijo. Lentamente,


sacó un pequeño chip metálico ensangrentado.

―Perderé mis puntos ―digo Michael, intentando ocultar su miedo


y disgusto. ―Lo juro. No puedes seguir perdiendo el tiempo Tanya.
Codifica esa cosa de vuelta y ven a hablar conmigo. No es demasiado
tarde.
Ella levantó la manifestación visual del Core, mirando con
fascinación.

―¿No ves la ironía de todo esto? ―preguntó. ―Si no fuera por mis
habilidades en codificación, probablemente ni siquiera habría sabido
quién era Kaine. Acerca de sus KillSims y sus planes para mí. Pero
soy buena en eso, y por causa de ese…monstruo, acabo de programar
mi Code fuera de mi propia cabeza.

―No de tu cabeza real. Aún es sólo una simulación, Tanya. No es


demasiado tarde. ―Michael no podía recordar un solo momento en
su vida entera que lo hubiera hecho sentir tan enfermo.

Ella lo miró tan bruscamente que retrocedió un paso.

―No puedo soportarlo más. No puedo soportarlo…a él nunca más. Pág.| 52

No puede usarme si estoy muerta. Ya he terminado.

Acunó el Core con su pulgar, y luego lo arrojó hacia Michael. Voló


por encima de su hombro… él vio destellos de luz solar a medida que
giraba en el aire, casi como si le estuviera guiñando un ojo, diciendo:
Oye, amigo, apestas en las negociaciones de suicidios. Aterrizó con
un clink en algún lugar en el tráfico, donde sería aplastado en
segundos.

No podía creer lo que estaba atestiguando. Alguien tan sofisticado


en la manipulación de códigos que podía destruir su Code, el
dispositivo que esencialmente protegía los cerebros de los jugadores
mientras estaban en El Sueño. Sin tu Core, tu cerebro no sería capaz
de filtrar la simulación de la VirtNet apropiadamente. Si tu Core se
apagaba en El Sueño, tu morirías en El Despertar. No conocía a nadie
que hubiera visto eso antes. Dos horas antes había estado comiendo
Bleu Chips robadas en el Dan the Man Deli con sus mejores amigos.
Todo lo que quería ahora era volver a estar allí, comiendo pavo con
pan de centeno, soportando las bromas de Bryson sobre la ropa
interior de ancianas y escuchando a Sarah decirle lo horrible que fue
su último corte de pelo en El Sueño.

―Si Kaine viene por ti ―dijo Tanya―. Dile que yo gané al final.
Dile lo valiente que fui. Él puede atrapar a gente aquí y robar todos
los cuerpos que quiera. Pero no el mío.

Michael había terminado de hablar. No podía escuchar ni una sola


palabra más de la boca ensangrentada de la chica. Más rápido que
nada cualquier cosa que hubiera hecho en su vida, que cualquier
personaje en cualquier juego, saltó hacia el poste al que ella se había
aferrado. Ella gritó, congelada momentáneamente por el movimiento
repentino, pero luego se soltó, de hecho se impulsó a sí misma lejos
del puente. Michael agarró la barandilla a su izquierda con una mano
y la alcanzó a ella con la otra, pero falló en ambos. Sus pies tocaron
algo sólido, y luego se resbalaron. Agitando los brazos, sintió nada
más que aire, y cayó, casi en sintonía con ella.

Un grito increíble escapó de su boca, algo de lo que hubiera estado


avergonzado si su única compañía no estuviera a punto de perder la
vida. Con su Code fuera, su muerte sería real.

Michael y Tanya cayeron hacia las profundas aguas grises de la


bahía. El viento desgarró su ropa, y el corazón de Michael se sentía
como si se estuviera arrastrando a lo largo del interior de su pecho,
hacia su garganta. Gritó nuevamente. En algún punto sabía que iba a Pág.| 53
golpear el agua, sentir el dolor; entonces sería Regresado y
despertaría en casa, sano y salvo en su Ataúd. Pero el poder de la
VirtNet era la realidad simulada, y en ese momento la realidad era
terror.

De alguna manera, las Auras de Michael y Tanya se encontraron en


esa larga caída, pecho a pecho, como paracaidistas. Mientras la
superficie agitada se precipitaba hacia ellos, envolvieron sus brazos
alrededor del otro, acercándose más. Michael quería gritar de nuevo
pero apretó los dientes cuando vio la calma profunda en el rostro de
ella.

Sus ojos se clavaron en los de Michael, los buscaron y los


encontraron, y él se derrumbó en alguna parte de su interior.

Golpearon el agua tan fuerte como pensaron que lo harían. Duro


como el concreto. Duro como la muerte.
3
El momento de dolor fue breve pero intenso. En todas partes, al
mismo tiempo, rompiendo y explotando a través de cada nervio de
Michael. Ni siquiera tuvo tiempo de hacer un sonido antes de que
todo acabara; tampoco lo tuvo Tanya, porque él no escuchó nada
más que el distinto y horrendo estruendo al golpear la superficie del
agua. Y entonces todo se disipó y su mente se quedó en blanco.

Michael estaba vivo de vuelta en la NerveBox, lo que la mayoría de


la gente llamaba El Ataúd, Regresado de El Sueño.

No se podía decir lo mismo de la chica. Una ola de tristeza e


Pág.| 54
incredulidad lo golpeó. Con sus propios ojos, la había visto cambiar
su código, arrancar el Core de su carne virtual, y luego tirarlo como
si no fuera nada más que una migaja. Cuando todo terminó para ella,
terminó de verdad, y siendo parte de ello Nunca había presenciado
nada como aquello.

Parpadeó un par de veces, esperando que se completara el proceso


de desvinculación. Nunca antes se había sentido tan aliviado de
haber terminado con la VirtNet, de haber terminado un juego, listo
para salir de su caja y respirar el aire contaminado del mundo real.

Una luz azul se encendió, revelando la puerta de El Ataúd a unos


pocos centímetros de su rostro. Los LiquiGels5 y AirPuffs6 ya habían
sido retirados, dejando únicamente la parte que Michael
verdaderamente odiaba, sin importar cuantas veces lo había hecho,
que eran muchas más de las que podía contar. Delgadas hebras
heladas de NerveWire7 salieron de su cuello, espalda, y brazos,
arrastrándose como serpientes hasta que desaparecieron dentro de
sus pequeños escondites, donde permanecerían desinfectadas y
almacenadas para su próximo juego. Sus padres se sorprendieron de
que voluntariamente permitiera que esas cosas penetraran en su
cuerpo con tanta frecuencia, y no podía culparlos. Había algo
francamente espeluznante al respecto.

Un sonoro clic fue seguido por un ruido metálico y luego una


silbante ráfaga de aire. La puerta de El Ataúd comenzó a levantarse,
pivoteando hacia arriba y alejándose en sus bisagras, como el propio

5
Gel-líquido
6
Soplo-de-aire
7
Nervio-alambre
lugar de descanso de Drácula. Michael casi se echó a reír con la idea.
Ser un vicioso vampiro chupasangre amado por las mujeres era solo
una de las mil millones de cosas que una persona podía hacer dentro
de El Sueño. Sólo una de mil millones.

Se levantó con cuidado, siempre se había sentido un poco mareado


después de ser Regresado, especialmente cuando había estado
ausente durante un par de horas, desnudo y cubierto de sudor. La
ropa arruinaba la estimulación sensorial de la NerveBox8.

Michael pasó por encima del borde de la caja, agradecido por la


mullida alfombra bajo sus pies, lo hacía sentir firme, de vuelta en la
realidad. Agarró el par de bóxers que había dejado en el piso, se los
puso. Pensó que una persona decente probablemente habría optado
por un pantalón y una camiseta también, pero no se estaba sintiendo Pág.| 55
muy decente en ese momento. Todo lo que le habían pedido hacer
en el juego era convencer a una muchacha de no suicidarse a cambio
de Puntos de Experiencia, y no sólo había fracasado, había ayudado a
que lo hiciera de verdad. De verdad, de verdad.

Tanya, donde sea que su cuerpo pudiera estar, estaba muerta.


Había arrancado su Core antes de morir, una hazaña de la
programación, protegido por contraseñas, que sólo podría haber
hecho para ella misma. Fingir una remoción del Core no era posible
en la VirtNet. Era demasiado peligroso. De lo contrario, nunca sabrías
si alguien estaba fingiendo, y la gente lo haría de izquierda a derecha
por diversión o para llamar la atención. No, ella había cambiado su
código, removido la barrera de seguridad en su mente que separaba
lo real de lo virtual, y freído el implante real de vuelta en casa, y lo
había hecho a propósito. Tanya, la bella chica de los ojos tristes y los
delirios de estar siendo cazada. Muerta.

Michael supo que la noticia estaría en NewBoops pronto.

Reportarían que había estado con ella y la VNS (VirtNet Seguridad)


probablemente vendría y hablaría con él al respecto. Definitivamente
lo harían.

Muerta. Estaba muerta. Tan vacía de vida como el hundido colchón


en su cama.

Todo lo golpeó entonces. Lo golpeó bola rápida a la cara.

8
Caja-de-nervios
Michael apenas pudo llegar al baño antes de vomitar todo lo que
tenía en el estómago. Y luego se desplomó en el suelo y se encogió
formando una bola. Ninguna lágrima llegó, no era del tipo llorón,
pero se quedó ahí por un largo tiempo.

Pág.| 56
CAPÍTULO 2
La Proposición
1
Michael sabía que la mayoría de gente, cuando se sentían como si
la tierra misma hubiera decidido que ya no le agradaban, cuando se
sentían como si estuvieran en el fondo de un pozo oscuro, iban con
su mamá o papá. Tal vez un hermano, tal vez una hermana. Aquellos
con ninguno de los anteriores podrían encontrarse a sí mismos
llamando a la puerta de una tía, un abuelo, un primo en tercer grado
dos veces eliminado.
Pág.| 57
Pero no Michael. Él iba con Bryson y Sarah, los dos mejores amigos
que una persona podría tener. Ellos lo conocían más que nadie, y no
les importaba lo que dijera o hiciera o usara o comiera. Y él les
devolvía el favor cuando ellos lo necesitaban. Pero había algo muy
extraño respecto a su amistad.

Michael nunca los había visto.

No literalmente, de todos modos. Todavía no. Eran amigos en la


VirtNet de principio a fin, sin embargo. Había llegado a conocerlos
por primera vez en los niveles iniciales de Lifeblood, y habían ido
volviéndose más y más cercanos a medida que avanzaban. Los tres
habían unido fuerzas casi desde el día en que se conocieron para
avanzar en el Juego de los Juegos. Fueron el Trío Terrible, El Trío
Diseccionar-los, la trilogía Quema-y-Saquea. Sus apodos no los
ayudaba a hacer muchos amigos, habían sido tildados de arrogantes
por algunos, de idiotas por otros, pero se habían divertido así que no
les importaba.

El suelo del baño estaba duro, y Michael no podía quedarse ahí


para siempre, así que se recompuso y se dirigió directamente a su
lugar favorito en la tierra para sentarse.

La Silla.

Era sólo una pieza normal de mueblería, pero era la cosa más
cómoda en la que alguna vez se había sentado, como hundirse en
una nube hecha por el hombre. Tenía que pensar un poco, y
necesitaba arreglar una cita con sus mejores amigos. Se sentó y miró
por la ventana al triste exterior gris del complejo de apartamentos al
otro lado de la calle. Parecía una triste tormenta congelada.
La única cosa estropeando la desolación, era un enorme cartel
publicitario de Lifeblood Deep, letras color rojo sangre sobre una
placa negra, nada más. Como si los diseñadores del juego fueran
completamente conscientes de que las palabras por si solas eran lo
único que necesitaban. Todo el mundo las conocía, y todo el mundo
quería participar, querían ganarse el derecho a ir ahí algún día.
Michael era como cualquier otro jugador, sólo uno más de la manada.

Pensó en Gunner Skale, el mejor jugador en Lifeblood que la


VirtNet hubiera conocido. Pero el hombre había desaparecido de la
red recientemente, los rumores decían que había sido atrapado por la
Deep misma, perdido en el juego que había amado tanto. Skale era
una leyenda, y jugador tras jugador había ido en busca de él en los
rincones más oscuro de El Sueño, infructuosamente, como se vio
Pág.| 58
después. Al menos, hasta ahora. Michael quería más que nada
alcanzar esa clase de nivel, convertirse en el nuevo Gunner Skale del
mundo. Sólo tenía que hacerlo antes que el chico nuevo en escena.
Este…Kaine.

Michael apretó su EarCuff9, la pequeña pieza de metal unida al


lóbulo de su oreja, y su NetScreen 10 y teclado se encendieron delante
de él, flotando en el aire. El Boletín le mostró que Bryson ya estaba
en línea y que Sarah había dicho que volvería en un rato. Los dedos
de Michael comenzaron a bailar a través de las teclas de color rojo
brillante.

Mikethespike: Oye, Bryson, deja de tontear en los nidos Gorzon y


háblame. Vi algo serio hoy.

La respuesta de su amigo fue casi instantánea; Bryson pasaba más


tiempo que Michael en línea o en El Ataúd. Y escribía como una
secretaria con tres tazas de café encima.

Brystones: ¿En serio, eh? ¿Un policía de Lifeblood te arrestó en las


Dunas de nuevo? Recuerda ¡Sólo pasa cada 13 minutos!

Mikethespike: Te dije lo que estaba haciendo. Tenía que evitar que


esa chica se lanzara del puente. No fue muy bien.

Brystones: ¿Por qué? ¿Cayó de narices?

Mikethespike: No creo que deba hablar de eso aquí. Necesitamos


encontrarnos en El Sueño.

9
Cadena del oído
10
Pantalla virtual
Brystones: Amigo, debe haber sido malo. Estuvimos ahí hace sólo
unas horas, ¿Podemos encontrarnos mañana?

Mikethespike: Sólo ven a verme de nuevo en la tienda. En una


hora. Lleva a Sarah también. Huelo a axilas.

Brystones: Me alegro de que no vamos a encontrarnos en la vida


real, entonces. No soy muy aficionado al O.T.

Mikethespike: Hablando de eso, necesitamos simplemente


hacerlo. No vives TAN lejos.

Brystones: Pero El Despertar es tan aburrido. ¿Cuál es el punto?

Mikethespike: Porque eso es lo que los humanos hacen. Se


conocen y estrechan manos reales. Pág.| 59

Brystones: Preferiría darte un abrazo en Marte.

Mikethespike: SIN ABRAZOS. Te veo en una hora. ¡Lleva a Sarah!

Brystones: Lo haré. Ve a frotar tus fosas desagradables.

Mikethespike: Dije que OLÍA a eso, no que… Olvídalo. Nos vemos


luego.

Brystones: Fuera.

Michael apretó su EarCuff y observó la NetScreen disolverse como


si un fuerte viento hubiera soplado. Luego, después de una última
mirada al letrero de Lifeblood Deep, sus profundas letras rojas sobre
negro como una burla, nombres como Gunner Skale y Kaine flotando
en su cabeza, se dirigió a la ducha.
2
La VirtNet era una cosa graciosa. Era tan real que a veces
Michael deseaba que no fuera de tan alta tecnología. Como
cuando estaba caliente o transpirando, o cuando se tropezaba y
golpeaba en uno de los dedos del pie o cuando una chica lo
abofeteaba en la cara. El Ataúd le hacía sentir cada pequeña cosa.
La única otra opción era ajustarle para menor entrada sensorial,
pero entonces, ¿por qué te molestarías en jugar si no vas a
hacerlo completamente?

El mismo realismo que creaba el dolor e incomodidad en El


Sueño a veces tenía un lado positivo, sin embargo. La comida. En
especial cuando eres lo suficientemente bueno codificando para Pág.| 60

tomar lo que quieras cuando estás un poquito corto de efectivo.


Ojos cerrados para acceder a datos brutos, manipular algunas
líneas de la programación y voilà…un festín gratis.

Michael se sentó con Bryson y Sarah en su mesa usual afuera


del Deli de Dan El Hombre, atacando un enorme plato de Nachos
Grouchos, mientras que devuelta en el mundo real El Ataúd los
estaba alimentando con nutrientes puros y saludables por vía
intravenosa. Una persona no podía confiarse solamente en la
función nutritiva del Ataúd, no era algo destinado a sustentar la
vida humana por meses, pero por supuesto que era agradable en
las sesiones largas. Y la mejor parte era que únicamente
engordabas en El Sueño si te programabas para hacerlo, no
importa cuánto comieras.

Más allá de la deliciosa comida, su conversación rápidamente


tomó un giro depresivo.

―Lo leí en la NewsBops tan pronto como Bryson me contó


―dijo Sarah. Su apariencia en la VirtNet era subestimada (una
linda cara, largo cabello marrón, piel tostada, casi sin maquillaje).

―Hubo algunos registros de Core en la última semana. Me


pone los pelos de punta. Hay rumores de que este tipo Kaine está
de alguna manera atrapando gente adentro del Sueño, sin dejarlos
despertarse. Entonces algunos de ellos se matan. ¿Puedes creerlo?
Un ciber-terrorista.
Bryson asentía. Él parecía un jugador de fútbol americano
herido (grande, voluptuoso, y todo un poco fuera de
proporciones o armonía.) Siempre decía que era tan malditamente
caliente en el mundo real que necesitaba un escape de las
muchachas mientras pasaba tiempo en la VirtNet.

―¿Pelos de punta? ―repitió―. Nuestro buen amigo aquí vio a


una chica excavar dentro de su propio cráneo y extraer su Core,
arrojarlo, y luego saltar de un puente. Creo que “Pelos de punta”
es un comienzo.

―Está bien, creo que necesito una palabra más fuerte ―ella
respondió―. El punto es que algo está pasando, y un jugador está
siendo acusado por ello. ¿Quién escucho alguna vez de personas
Pág.| 61
hackeando su propio sistema para cometer suicidio? VirtNet
Seguridad nunca ha tenido este tipo de problemas antes.

―Al menos que la VNS estuviera ocultándolo, ―agregó Bryson.

―¿Quién haría lo que ella hizo?―murmuró Michael, más para él


que para los otros. Él sabía lo suyo, y suicidios dentro del Sueño
siempre fueron raros. Suicidios reales, de cualquier manera. ―A
algunas personas les gusta la adrenalina de acabar consigo
mismos en El Sueño sin las consecuencias reales, pero nunca vi
esto. La habilidad y conocimiento para poder llevarlo a cabo… ni
siquiera creo que yo pudiera hacerlo. ¿Ahora son varios en una
semana?

―¿Y qué sobre este jugador, Kaine? ―preguntó Bryson.


―Escuche que él es grandioso, pero… ¿Cómo es posible que
alguien atrape a otros dentro del Sueño? Tiene que ser pura
palabrería.

Las mesas alrededor de ellos acababan de quedarse en silencio,


y Michel entendió por qué. Kaine estaba volviéndose infame… y
el nombre hacía a la gente empalidecer. En los últimos meses él
estuvo infiltrándose en todo, desde los juegos hasta las reuniones
privadas, aterrorizando a sus víctimas con visiones y atacándolos
físicamente. Michael no había escuchado la parte sobre atrapar
personas antes de Tanya, pero tan solo el nombre de Kaine
atormentaba al mundo virtual, como si permanecería apenas
fuera de vista no importa donde fueses. Bryson estaba lleno de
valentía falsa.
Michael ignoró a los otros clientes en el café y se enfocó en sus
amigos. ―Ella seguía diciendo que era la culpa de Kaine, que fue
atrapada por él y no lo podía soportar más. ¿Algo sobre robar
cuerpos? Y cosas llamadas KillSims. Te digo, incluso antes de que
empezara con el Core, pude ver en sus ojos que estaba siendo
totalmente seria. Ella definitivamente se cruzó frente a frente con
él en algún lugar.

―Ni siquiera sabemos mucho sobre el muchacho detrás de


Kaine todavía ―Sarah ofreció―. He leído cada historia sobre él, y
eso es todo lo que son. Historias. Nadie tiene ninguna pinza sobre
el jugador en sí mismo. Ni fotos, ni audio, ni video. Nada. Es
como si él no fuera real.
Pág.| 62
―Es la VirtNet ―Bryson contrarrestó―. Las cosas no tienen que
ser reales para ser reales. Ese es todo el punto.

―No ―Sarah sacudió su cabeza. ―Él es un jugador. Una


persona. Acostado en un Ataúd. Con toda esa publicidad,
deberíamos saber más sobre él. Los medios deberían estar encima
de este tipo. La VNS debería ser capaz de seguirlo, por lo menos.

Michael sentía como que no estaban yendo a ningún lado.

―Hey, devuelta a mí, chicos. Se supone que estoy traumatizado


y ustedes, se supone que me harían sentir mejor. Hasta ahora,
apestan en eso.

Una mirada de genuina preocupación cruzó la cara de Bryson.

―Sin duda, amigo. Lo siento, pero me alegra que hayas sido tú


y no yo. Sé que toda la cosa de negociar suicidios es parte de la
experiencia Lifeblood, pero ¿quién hubiera sabido que la tuya
sería real? Yo probablemente no dormiría por una semana si viese
algo así.

―Sigues apestando, ―Michael respondió, riendo débilmente.


En verdad, él estaba mejor ahora tan solo con sus amigos, pero se
sentía como si algo dentro de él estuviera tratando de roer su
camino hacia fuera. Algo oscuro, con grandes dientes que no
quería ser ignorado.

Sarah se inclinó hacia él y le aprieto su brazo. ―Ninguno de


nosotros tiene alguna idea de lo que debe haber sido para ti
―dijo suavemente. ―Y seriamos idiotas al pretender que sí. Pero
siento que haya pasado.

Michael se sonrojó y miró hacia el piso. Afortunadamente,


Bryson los trajo de vuelta a la realidad.

―Tengo que usar el baño ―anunció, parándose. Una persona


hacía cosas como esas dentro del Sueño, mientras tu verdadero
cuerpo se encargaba de aquello en el Ataúd.

Todo fue hecho para sentirse real. Todo.

―Encantador ―Sarah dijo en medio de un suspiro mientras


liberaba el brazo de Michael y volvía a su silla. ―Simplemente
encantador. Pág.| 63
3
Hablaron por alrededor de otra hora más, terminando con su
usual promesa de encontrarse en el mundo real pronto. Bryson
les dijo que si no lo hacían para fin de este mes, comenzaría a
cortar un dedo por día hasta que sucediese. Los dedos de
Michael, no los suyos. Eso obtuvo una muy necesitada risa.

Los tres se despidieron en un Portal, y Michael Regreso


devuelta a El Despertar, siguiendo la usual rutina dentro del
Ataúd hasta que pudo salir. Mientras caminaba hacia La Silla su
mirada naturalmente aterrizó en la gran publicidad para
Lifeblood Deep fuera de su ventana, seguido por los usuales
pocos segundos de codicia y babeo metafórico. Pág.| 64

Casi se sienta, pero cambio su mente, sabiendo que nunca se


levantaría, agotado y dolorido desde la cabeza hasta los pies. Y
odiaba quedarse dormido en La Silla, ya que siempre se levantaba
con calambres donde ningún otro humano alguna vez tuvo.

Suspiró y, tratando de no pensar en la chica llamada Tanya que


se había matado justo delante de sus ojos, de alguna manera
llego a la cama. Luego colapso a una larga noche sin sueños.
4
Salir de la cama a la mañana siguiente fue como salir de un
capullo. Le tomo veinte minutos al lado inteligente de su cerebro
convencer al lado estúpido de que hacerse pasar por enfermo
para no ir al colegio no era una buena idea. Ya había faltado siete
veces este semestre. Una o dos faltas más y empezarían a ponerse
estrictos.

Solo se había empeorado el dolor en la noche por culpa de la


caída en picada hacia la bahía con Tanya, y el extraño sentimiento
todavía retorcía su estómago. De alguna manera, sin embargo,
Michael logró llegar a la mesa del desayuno, donde su nana,
Helga, acababa de apoyar un plato de huevos y tocino. Una nana, Pág.| 65

el equipo de VirtNet, un apartamento agradable… tenía que


agradecerles mucho a sus padres ricos. Viajaban mucho, y en este
momento él no podía recordar cuando se fueron o cuando
volverían. Pero se lo compensaban con todas las cosas que le
daban. Entre la escuela, Helga y la VirtNet apenas tenía tiempo
para extrañarlos.

―Buenos días, Michael ― Helga dijo con su leve pero


igualmente notable acento alemán. ―Confío en que dormiste
bien, ¿verdad?

Él le gruño y ella sonrió. Es por eso que amaba a Helga. No se


ponía toda refunfuñona u ofendida cuando todo lo que querías
hacer era gruñir como un animal saliendo de hibernar. No le
causaba ningún problema.

Y su comida era deliciosa. Casi tan buena como en la VirtNet.


Michael terminó cada trozo de su desayuno, luego salió hacia
fuera para tomar el tren.
5
La calle estaba desbordante, trajes y faldas y tazas de café tan
lejos como el ojo podía ver. Había tantas personas que Michael
casi podía jurar que se estaban duplicando como células
reproduciéndose ahí mismo frente a sus ojos. Todos tenían la
típica mirada apática y vacía que Michael conocía muy bien. Al
igual que él, habían sufrido y trabajado duro a través de sus
deprimentes empleos o colegios hasta que pudieran volver a casa
y entrar en la VirtNet una vez más.

Michael se unió al flujo de gente, esquivando a los trabajadores


de derecha a izquierda, e hizo su camino bajo la Avenida, luego
dobló a la derecha en su atajo usual, un callejón de una sola Pág.| 66

mano, lleno de botes de basura y pilas de desechos. No podía


entender por qué la basura descartada nunca aparentaba entrar
en los grandes contenedores de metal. Pero en una mañana como
esta, compartiendo la calle con bolsas de golosinas vacías y
cáscaras de banana descartadas vencía a las masas marchantes.

Estaba a la mitad del camino cuando el chillido de llantas lo


detuvo en seco. El arranque de un motor reverberó en la calle por
detrás y Michael se dio la vuelta. El instante en el que vio el auto
aproximándose, su pintura gris y apagada como una tormenta
extinguiéndose, él supo. Supo que este auto tenía algo que ver
con él y no iba a tener un final feliz.

Giró y corrió, reconociendo en algún nivel que quien sea que


estaba detrás de él había planeado atraparlo en aquél callejón. El
final ahora parecía a millas de distancia, nunca llegaría. El sonido
del auto se hizo más fuerte mientras lo alcanzaba, y más allá de
todas las cosas extrañas y locas que había experimentado en El
Sueño, el terror explotó en el pecho de Michael. Terror real. Y
pensó, que manera de terminar, aplastado como un insecto en un
callejón infestado de basura.

No se atrevió a dar una ojeada detrás de él pero podía sentir el


vehículo avecinándose. Estaba cerca, y no tenía chance de escapar
corriendo. Se rindió en tratar de huir y se zambulló detrás de la
siguiente pila de desechos. El auto chilló mientras se detenía
mientras él rodaba y saltaba devuelta en sus pies, listo para
correr a toda velocidad en la dirección contraria. La puerta de
atrás del sedán se disparó abierta y dio un paso hacia afuera un
hombre vestido marcadamente con un pasamontañas negro sobre
su cara, sus ojos fijos en Michael a través de rajas en la tela.
Michael se congeló, solo por un instante, pero fue el tiempo
suficiente. El hombre lo derribó, golpeando su cuerpo con el piso.

Michael abrió su boca para gritar, pero una mano fría le sujeto
la cara, silenciándolo. Pánico atravesó su cuerpo como una
espada caliente, y la adrenalina inundó su sistema mientras se
retorcía y empujaba a su atacante. Pero el hombre era demasiado
fuerte y volteó Michael boca abajo, sujetando sus brazos detrás
de él.

―Para de pelear, ―dijo el extraño. ―Nadie va a herirte, pero no


tenemos tiempo para tonterías. Necesito que entres al auto.
Pág.| 67

La cara de Michael estaba presionada contra el cemento. ―Oh,


¿De verdad? ¿Estaré perfectamente a salvo? Estaba justo
pensando eso.

―Cállate la boca niño sabelotodo. No podemos solamente dejar


que todos sepan quienes somos. Ahora, entra en el auto.

El hombre se puso en sus pies, arrastrando a Michael hacia


arriba junto a él.

―Mete tu trasero ―el extraño dijo, pausando para agregar el


efecto―, en el auto.

Michael hizo un último y patético intento de liberarse, pero fue


inservible. El agarre del hombre era de hierro. Michael no tenía
otra alternativa más que hacer lo que le ordenaron. La batalla lo
consumió, y dejó que el hombre lo guiase al asiento trasero del
auto, donde se estrujo junto a otro hombre enmascarado. La
puerta se cerró de un portazo y el auto se tambaleó hacia delante,
el chillido de las ruedas haciendo eco a través de las paredes de
concreto.
6
Mientras el auto arrancaba fuera del callejón y hacia la
carretera, la mente de Michael giraba en torno a quienes eran
estas personas y hacia donde lo llevaban. Otra ola de pánico lo
inundó y entró en acción. Estrelló su codo en la entrepierna del
tipo a su izquierda, luego se lanzó hacia la puerta mientras el
hombre se doblaba en agonía, maldiciendo de tal manera que
hasta Bryson se hubiera enrojecido si hubiera estado oyendo. Los
dedos de Michael acaban de enroscarse alrededor de la manija
cuando el matón original lo tiró hacia atrás, su brazo rodeando el
cuello de Michael. El hombre estrujo hasta que Michael jadeó por
aire.
Pág.| 68
―Córtala, muchacho ―dijo demasiado calmado. Por alguna
razón, esas eran las últimas palabras que Michael quería oír. Ira
surgió en su pecho, y lucho por liberarse del agarre.

―¡Para ya! ―esta vez el extraño gritó. ―Deja de actuar como un


niño y cálmate. No vamos a herirte.

―En realidad, me estás lastimando ahora mismo, ―tosió


Michael.

El hombre liberó su agarre. ―Compórtate, y eso será lo peor.


¿Tenemos un trato, niño?

―De acuerdo ―gruño Michael. Porque, ¿qué otra cosa podía


hacer? ¿Pedir tiempo para pensar?

El hombre aparentó relajarse con eso. ―Bien. Ahora siéntate y


cállate, ―indicó―. Espera, primero discúlpate con mi amigo, eso
era totalmente innecesario.

Michael le echó una ojeada al tipo a su izquierda, y se encogió


de hombros.

―Lo siento. Espero que todavía puedas tener bebés.

El hombre no respondió, pero lo fulminó con la mirada


ferozmente a través del pasamontañas. Humillado por el enojo
del hombre, Michael apartó la mirada. La adrenalina se había
apagado, su fuerza estaba agotada, y estaba siendo paseado a
través de la ciudad por cuatro hombres con máscaras negras.

Las cosas no se veían muy radiantes.

Pág.| 69
7
El resto de viaje transcurrió en completo silencio. El corazón
de Michael, sin embargo, continuó latiendo ferozmente. Pensó
que había conocido el miedo antes. Había sido lanzado en
incontables situaciones horríficas en la VirtNet que se habían
sentido perfectamente real. Pero esto era real. Y el miedo iba más
allá de lo que él jamás había experimentado. Se preguntó si caería
muerto por un paro cardíaco a la madura y vieja edad de
dieciséis.

Como si fuese una burla, cada vistazo hacia afuera parecía


aterrizar en esos posters de Lifeblood Deep rojos y negros.
Incluso aunque la minúscula optimista parte de su cerebro seguía Pág.| 70

tratando de decirle que de alguna manera saldría de esto vivo,


sabía que ser secuestrado por hombres enmascarados
generalmente no terminaba bien. Las señales solo le recordaban
que su sueño de alcanzar Lo Profundo probablemente no pasaría
después de todo.

Finalmente, llegaron a las afueras de la ciudad y doblaron en el


enorme estacionamiento del estadio donde los Falcons11 habían
jugado. Estaba completamente vacío, y el conductor estacionó en
la primera fila, donde paró y apretó el freno de emergencia, la
estructura masiva inminente sobre ellos. Un cartel al frente del
espacio para estacionar leía RESERVADO. SERÁ REMOVIDO CON
GRÚA.

Un pitido sonó en algún lugar dentro del auto, seguido por un


cascado desde afuera, luego un zumbido de maquinaria.
Inmediatamente después, el vehículo comenzó a hundirse en el
piso, y el corazón de Michael dio un salto. Mientras descendían,
el resplandor de la luz del día rápidamente se disolvió a una
iluminación fluorescente.

Finalmente, el auto se detuvo con una leve sacudida y Michael


observó alrededor para darse cuenta de que estaban un enorme
garaje subterráneo con por lo menos una docena de autos
estacionados a lo largo de la pared. El conductor liberó el freno

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Atlanta Falcons (español: Halcones de Atlanta) es un equipo profesional estadounidense de fútbol
americano de la National Football League (NFL).
de emergencia y estacionó en un puesto libre, para luego apagar
el motor.

―Llegamos ―anunció el conductor. Innecesario, pensó Michael.

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Le ofrecieron a Michael dos opciones: lo podían arrastrar
agarrándolo de los pies, con su cabeza colgando, con un perfecto
primer plano del cemento, o podía caminar con ellos bajo su
propio poder sin intentar nada. Eligió la segunda opción. Mientras
marchaban al lado de él, su corazón seguía tratando de escapar
su caja torácica con su incesante martilleo.

Los cuatro hombres lo escoltaron a través de una puerta, por


todo un pasillo y luego a través de otra puerta hacia un gran
cuarto de conferencias. Por lo menos eso es lo que él asumía,
basado en la larga mesa de madera de cerezo, sillas de cuero
afelpado, y la barra iluminada en la esquina. Se sorprendió al ver Pág.| 72

solo una persona esperándolos: Una mujer. Era alta con largo
cabello negro, con amplios y exóticos ojos, y de alguna manera se
veía preciosa y aterradora al mismo tiempo.

―Déjenlo conmigo ―dijo. Cuatro palabras, suavemente


habladas, pero los hombres prácticamente se zambulleron hacia
afuera, cerrando la puerta detrás de ellos, como si le temieran
más allá de todo.

Esos llamativos ojos se enfocaron en la cara de Michael. ―Mi


nombre es Diane Weber, pero te referirás hacia mí como Agente
Weber. Por favor, tome asiento ―señaló la silla más cercana a
Michael, y tomo cada onza de su fuerza de voluntad vacilar antes
de sentarse. Se forzó a contar hasta cinco, mirándola fijamente,
sosteniendo su mirada. Luego, siguió sus órdenes.

Ella se acercó y se sentó junto a él, cruzando sus esbeltas y


bonitas piernas. ―Disculpas por el alboroto para traerte hasta
aquí. Lo que estamos a punto de discutir es extremadamente
urgente y confidencial, y no quería perder ni un minuto…
preguntando.

―Debería estar en la escuela. Preguntar hubiera funcionado


perfectamente. ―De alguna manera ella lo había aliviado, lo cual
lo enojaba. Estaba claro que era manipuladora, que usaba su
belleza para derretir los corazones de los hombres. ―De
cualquier manera, ¿para qué podrías llegar a necesitarme?
Su sonrisa revelaba perfectos dientes blancos. ―Eres un
jugador, Michael. Con serias habilidades para la codificación

―¿Es eso una pregunta?

―No, es una declaración. Te estoy diciendo por qué estás aquí,


ya que tú preguntaste. Sé más sobre ti de lo que tú mismo sabes.
¿Comprendido?

Michael tosió. ¿Todo este hackeo finalmente estaba dando sus


frutos?

―¿Estoy aquí porque soy un jugador? ―preguntó, luchando por


mantener su voz firme. ―¿Por qué me gusta pasar el rato en El
Sueño y codificar un poco? ¿Qué haría? ¿Noquearte y robar tu Pág.| 73

restaurante virtual?

―Estás aquí porque te necesitamos.

Las palabras trajeron un de repente un golpe de valentía sobre


él. ―Mira, no creo que mi mamá apruebe que yo salga con una
mujer mayor. ¿Probaste citas en línea? Estoy seguro que una
muchacha tan atractiva como tú podría encontrar…

Una mirada rápida de tal odio ardió a través de su cara que


Michael cerró su boca, y se disculpó antes de tener tiempo de
pensar.

―Trabajo para la VNS ―ella dijo, calmada y tranquila una vez


más. ―Tenemos un serio problema dentro de la VirtNet y
necesitamos ayuda. También estamos muy al tanto de tus
habilidades para hackear, y también aquellas de tus amigos. Pero
si no crees que puedes dejar de actuar como un niño de diez
años, seguiré con el próximo en la fila.

De alguna manera en solo tres oraciones había hecho a Michael


sentirse como un completo idiota. Y ahora lo que más quería en el
mundo era saber de qué estaba hablando.

―Está bien, lo siento. Ser secuestrado te sacude. De ahora en


más seré bueno.

―Así me gusta más ―pausó, descruzó y cruzó otra vez sus


piernas. ―Ahora, estoy a punto de confiarte unas palabras, y si
alguna vez repites esas palabras a otro ser humano sin nuestra
explicita dirección, el resultado más optimista sería una vida
entera en una prisión que, en cuanto a lo que a la población
concierne, no existe.

Curiosidad zumbó a través de Michael, pero sus palabras lo


hicieron pausar. ―¿Entonces no me matarás?

―Hay cosas peores que la muerte Michael ―dijo con el ceño


fruncido.

La miró fijamente, medio queriendo que ella el rogara que se


fuera sin oír ni una palabra más, pero su curiosidad ganó. ―Está
bien. No lo repetiré… lánzalo.
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Su labio inferior tembló levemente cuando lo dijo, como si la


frase la sacudiera en algo profundo dentro de ella. ―Doctrina de
la Mortalidad.
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El cuarto se hundió en silencio, completo y absoluto, y la
Agente Weber lo miró fijo.

¿Qué podrían esas palabras significar que le costaría su


libertad? ―¿Estoy perdiéndome de algo? ―preguntó. ―¿La
Doctrina de la Mortalidad? ¿Qué es eso?

La Agente Weber se inclinó hacia delante, su cara de alguna


manera intensificándose más que antes. ―Escuchar las palabras
te ha comprometido a unirte a nosotros.

Michael encogió los hombros, ya que era la única cosa con la Pág.| 75
que se sentía a salvo.

―Pero necesito escucharte decirlo ―dijo ella. ―Necesito


escuchar tu comprometimiento. Necesitamos tus habilidades en
la VirtNet.

Ese pequeño empujón de orgullo trajo a Michael devuelta en sí


mismo. ―Quiero saber lo que es.

Se inclinó hacia atrás y la tensión en la habitación pareció


levantarse. ―La Doctrina de la Mortalidad. En este momento,
sabemos muy poco. Es algo escondido en la VirtNet, en algún
lugar fuera de grilla conocida. Un archivo o programa de algún
tipo que puede dañar seriamente no solo la VirtNet pero el
mundo real también.

―Suena prometedor ―masculló Michael, inmediatamente


arrepintiéndose. Por suerte, ella lo dejo pasar. La verdad era que
él se había animado con la idea de una parte secreta de la VirtNet.
Quería saber dónde era.

―Esta… Doctrina podría devastar la humanidad y el mundo que


conocemos. Dime, Michael, ¿Has oído de jugador que se hace
llamar Kaine?

El nombre hacía que el corazón de Michael diese tumbos. La


chica, Tanya. Su cara volvió hacia él, al igual que sus palabras.
Como Kaine la estaba atormentado. Michael agarró los lados de la
silla porque de repente se sentía como que estaba cayendo bajo el
puente otra vez. ¿Cómo se relacionaban todas estas cosas?

―Sé de Kaine ―él dijo―. Vi a una chica matándose… ella lo


nombró…

―Sí, estamos al tanto ―la Agente Weber admitió. ―Esa es una


pequeña parte de la razón por la cual estás aquí. Eres un testigo
de que tan mal se están poniendo las cosas. Hemos sido capaces
de atar a Kaine a esta Doctrina de la Mortalidad, y está todo unido
en casos como nunca antes ha sucedido. Gente atrapada en la
VirtNet y llevadas a decodificar sus propios Cores. Es el peor
cyber―terrorismo que nos hayamos encontrado jamás.

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―¿Por qué estoy aquí? ―Michael preguntó en un graznido seco,
sintiendo una vergonzante falta de seguridad. ―¿Cómo puedo
ayudar?

Ella estuvo en silencio por un latido. ―Hemos encontrado


gente inconsciente dentro de sus Ataúdes. La tomografía revela
daño cerebral, como si fueran las víctimas de un experimento
enfermizo. Están en estado vegetativo ―pausa otra vez.

―Tenemos evidencia de que Kaine está involucrado. Y de


alguna manera está todo relacionado con este programa de
Doctrina de la Mortalidad escondido en algún lugar dentro de la
VirtNet. Necesitamos encontrar a los dos, el hombre y la Doctrina.
¿Nos ayudarás?

Lo preguntaba tan simplemente, como si le pidiera que hiciese


un viaje rápido a la tienda por leche y pan. Michael quería correr.
De hecho, quería muchas cosas en ese momento, (viajar en el
tiempo hubiera sido genial, él pensó), pero más realísticamente,
él quería su cuarto y su cama, su Ataúd, escapar a algún
descerebrado deporte, nivel principiante, el Deli de Dan el
Hombre, de primera, pasando el rato con Bryson y Sarah, una
película, un libro, su mamá y su papá devuelta de viajar, y nunca
escuchar sobre esto jamás.

Pero una palabra escapó su boca, y no sabía que realmente lo


sentía hasta que se escuchó a él mismo decirlo.

―Sí.
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PREPÁRATE PARA CORRER


THE MAZE RUNNER
EN CINES EN 2014
wckdisgood.com
Pág.| 78
Staff
Ministry of Lost Souls

TRADUCCIÓN CORRECCIÓN Pág.| 79

Tessa_
Alu Cili St Herondale
Alee Pg Ale MCM
AleDuchannes Tessa_
Riu di Angelo
Tami Herondale
Nathaly

DISEÑO MODERADORA
Auri_16 Tessa_

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