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ARBOR Ciencia, Pensamiento y Cultura

CLXXXV 736 marzo-abril (2009) 267-280 ISSN: 0210-1963

APROXIMACIÓN PHENOMENOLOGICAL
FENOMENOLÓGICA A LA APPROACH TO THE POETIC
EXPERIENCIA POÉTICA EXPERIENCE IN PAUL CELAN
EN PAUL CELAN

Jesús Guillermo Ferrer Ortega


Bergische Universität Wuppertal

ABSTRACT: The author proposes a phenomenological approach to RESUMEN: El propósito del autor consiste en aproximarse, desde
the poetic experience as Paul Celan meant it. Characteristic of this una perspectiva fenomenológica, a una comprensión de la experien-
way of experience is the search for an encounter with a “thou” thanks cia poética tal como la entiende Paul Celan. El rasgo característico
to a peculiar exercise of attention. The original sense of the word de este modo de experiencia es la búsqueda del encuentro con un
attention doesn’t denote a technique of observation, but rather how “tú”, mediante un ejercicio peculiar de la atención. Ésta no consiste
the sensibility of an “I” concerns the sensibility of a “thou”, which originariamente en una técnica de observación, sino en la sensi-
implies an ethical requirement. Such attention to the other makes use bilidad de un “yo”, al cual concierne la sensibilidad de un “tú”, de
of poetical images, not in a metaphorical but in a phenomenological donde nace una exigencia esencialmente ética. La atención al otro
way, bringing two sensibilities face to face and rendering possible an así concebida se vale de un lenguaje pleno de imágenes poéticas
encounter of them or a failure. The paper emphasizes the pertinence que, es importante subrayarlo, no desempeñan una función mera-
of phenomenology for the interpretation of Celan’s work, which do- mente metafórica, sino fenomenológica: situar frente a frente dos
ubtless is a summit of the dialog between philosophy and poetry. sensibilidades, dando así margen a la posibilidad de su encuentro o
desencuentro. En el artículo se enfatiza la pertinencia de la fenome-
KEY WORDS: Phenomenology, poetical experience, attention, sen- nología para interpretar la obra de Celan, que constituye, sin duda,
sibility, images. uno de los momentos cumbre del diálogo entre poesía y filosofía.

PALABRAS CLAVE: Fenomenología, experiencia poética, atención,


sensibilidad, imágenes.

INTRODUCCIÓN oportunidad para revitalizar la fenomenología. El punto


clave de esta revitalización radica en la ocasión que brinda
Nuestro propósito no consiste en interpretar la poesía de la poesía de Paul Celan para ahondar en la descripción de
Paul Celan desde la perspectiva de tal o cual fenomeno- la experiencia de la propia subjetividad en necesaria vin-
logía histórica, sino más bien en plantear problemas y culación con la experiencia del otro, o mejor aún, siempre
circunscribir ciertos dominios de fenómenos a partir de en camino hacia el otro, sea que la travesía llegue a buen
la consideración de textos teóricos y poemas de nuestro término o no. Animada por este motivo, la poesía de Paul
autor1. Indicaremos posibles vías de solución para dichos Celan está en condiciones de suscitar análisis fenomeno-
problemas, posibles conexiones históricas y además recu- lógicos de nuestra experiencia sensible, de nuestro pensa-
rriremos a modos de descripción que, a nuestro parecer, miento y de nuestro lenguaje.
sean pertinentes para los fenómenos en cuestión. Se trata-
rá, empero, de meras hipótesis de trabajo, de descripciones Nos restringiremos a la consideración de algunos temas de
fragmentarias, en ocasiones confusas y desvinculadas en- la poesía de Paul Celan: I. La reflexión sobre la atención
tre sí, de ninguna manera exentas de objeciones, por tanto como figura o actitud fundamental de la experiencia poé-
siempre susceptibles de revisión y corrección. tica. En última instancia esta atención consiste en dejar
hablar al tiempo del otro y en un contacto de sensibili-
Estamos convencidos de que una lectura de la poetología dad con sensibilidad. II. Ahora bien, la atención poética,
y de los poemas de Paul Celan constituye una excelente por así llamarla, depende de una ascética respecto de las
metáforas. Las imágenes de que se vale Paul Celan no son e “insinuaciones”) que dan testimonio, que son “trazas”
tímidas alusiones al objeto de la experiencia poética. Celan –no contenidos de presentificaciones en sentido husser-
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no se despreocupa de la realidad para concentrarse en la liano– del estado profundo o de la situación íntima del
belleza de una comparación indirecta y por eso mismo más otro. Esta forma de atención no equivale a una especie de
o menos arbitraria. Por el contrario, Paul Celan insiste en el inspección que culminaría en el punto máximo de la visión
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

carácter fenomenológico de las imágenes, en su precisión o re-presentación. No se trata, en la atención que suscita el
para decir la verdad y para situarnos frente al otro o en poema, de ver o ver mejor, sino de una “concentración” que
camino hacia él. Este camino no conduce necesariamen- conserva nuestras fechas y las fechas, podríamos decir “la
te a buen término. Nada nos exime de emprender una hora” del otro. Ahora bien, si la poesía rememora las fechas
conversación con el otro –las imágenes poéticas ofrecen del otro, no es para resucitar su pasado en una percepción
una oportunidad de dar o recibir un mensaje– pero esta fingida o quasi-Wahrnehmung, ni para integrarlas en una
conversación puede ser “desesperada”. Alrededor de los lógica de la historia donde los temas se concatenan unos
mencionados temas girarán las siguientes meditaciones, con otro. La poesía rememora al otro para obsequiarle
que son mero preámbulo de un trabajo aún por llevar a atención en su ausencia, incluso si ésta es definitiva.
cabo.
De hecho la poesía atenta a las fechas del otro, va a
contrapelo de la ciencia histórica, en la medida en que
ésta recrea escenas de las cuales somos de alguna manera
1. ATENCIÓN COMO FIGURA FUNDAMENTAL espectadores, además de permitirnos seguir la trabazón
DE LA POESÍA Y TIEMPO DEL OTRO lógica de los hechos relatados. En este sentido nos parece
acertado el enfoque de Derrida: La poesía, en contraste
Como punto de partida de una lectura fenomenológica de con la historia, posibilita, mediante imágenes, la memo-
la obra de Paul Celan nos serviremos de un pasaje del texto ria no temática de lo que ha de ser olvidado debido a la
El meridiano, donde se caracteriza la experiencia poética ausencia de cualquier espectador. La poesía resguarda las
como un movimiento del yo hacia la trascendencia2. La cenizas del conmemorado mediante una imagen críptica,
figura fundamental de este movimiento es la dirección de la cual es una especie de urna. Es verdad que el poema,
la atención hacia un tú capaz de respuesta, que justamente en la medida en que puede ser leído repetidamente, posee
no es tú sino en la medida que es interpelado: un cierto ser ideal. Pero esta idealidad no es la de una
cualidad sensible que pertenece esencialmente al objeto.
“El poema quiere ir hacia un otro, necesita este otro, ne- Tampoco es la idealidad de un concepto. Es una idealidad
cesita un enfrente. El poema visita al otro y se concede a con claroscuros, codificada4.
él [...] cada cosa, cada persona es para la poesía una forma
de este otro. El poema intenta prestar atención a todo lo El poema quiere, ciertamente, ser comprendido, pero en
que le sale al encuentro, tiene un sentido agudo del detalle, cuanto es oscuro y opaco. Por su esencia misma el poema
del contorno, de la estructura y del color, pero también de admite “versiones interlineares” reservadas para el tú al
las ‘palpitaciones’ y de las ‘insinuaciones’. Tal atención, así cual se dirige el poema. No son espacios dentro de un ho-
lo creo, no se identifica con una adquisición de la vista que rizonte de visión panorámica, como si la interpretación del
rivaliza con, o va a la par de, los aparatos cada día más conmemorador fuese prevista por obra de una anticipación
perfectos. Se trata más bien de una concentración que tiene más o menos indeterminada. Se trata más bien de espa-
presente todas nuestras fechas”3. cios que son cavidades permanentemente oscuras de un
cuerpo “poroso” (porös), “esponjoso (spongiös): “El poema
Al leer cuidadosamente este texto descubrimos una serie sabe de las erosiones a las que se expone”5. La imagen del
de ideas clave para la comprensión de la poesía de Paul poema como cuerpo expuesto a erosiones, así nos parece,
Celan: El poema no se reduce a una forma de observación descarta la idea de una interpretación o comprensión que
curiosa de cualidades o apariencias externas en sentido habría de aclarar espacios oscuros pero potencialmente
objetivo. La poesía, como la entiende Celan, pone en juego iluminables. El acento recae más bien en la manera como
la atención como sensibilidad ante gestos (“palpitaciones” una sensibilidad –la del lector del poema– puede entrar en

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contacto con un cuerpo de imágenes, por así decirlo, que salta el marco de cualesquiera representaciones de mayor
en su impenetrabilidad y oscuridad permanente manifies- o menor lejanía respecto del otro, así como de cualesquiera
tan la vulnerabilidad y la mortalidad del otro concretadas representaciones de espacios meramente contiguos y de
en una fecha conmemorada. alguna manera fusionables. Pues aquello que podemos
recuperar por la memoria (como un suceso en el pasado

JESÚS GUILLERMO FERRER ORTEGA


Esta conservación de las fechas del otro –y para un otro remoto pero aún asequible) o preveer por la anticipación
que el autor del poema– tiene por consiguiente una pe- (como algo que puede demorar pero de arribo inminente)
culiar estructura temporal, además de una corporeidad nos pertenece en última instancia. No así el tiempo del
específica: Es un acontecimiento en el presente que es otro y la manera como nos concierne. Estar atento al otro
esencialmente memoria atenta, una tensión o esfuerzo de consiste en tener presentes –ahora y en el porvenir– sus
la atención dirigidos a nuestras historias, a las historias fechas como etapas de un camino, que no es ni puede ser el
del otro datadas y datables, con el fin de proporcionar- nuestro, ya recorrido o por recorrer hacia la muerte, y ésta
les un porvenir de conmemoración. Cada poema singular, da signo de sí en cualquier palabra, gesto o movimiento de
mediante imágenes únicas que conforman su corporeidad un ser finito y vulnerable.
o materialidad, se constituye como lapso de tiempo, como
espacio temporal que sin embargo, digámoslo con pre- En un estudio notable H. France-Lanord pone de relieve
caución, se “extiende” hacia el pasado y hacia el futuro que la fenomenología poética de Celan consiste en dejar
(como posibilidad permanente de conmemoración de la aparecer el aquí y ahora, el ser propio de un tú; ahora
fecha de otro, el conmemorado, por otro, a saber el re- bien, la aparición o fenomenalización del otro se funda en
ceptor del mensaje poético) sin recuperarlos en calidad de una atención dirigida hacia la mortalidad del tú que está
temas. El poema es además una figura espacial que, lejos ahí frente a frente7. La muerte o bien ya acaecida, o bien
de ser omniabarcante, como un espacio único e infinito, pronta o dilatada del otro –de cuya inminencia y carácter
muestra, “entre líneas” vacíos o resquicios ocupables por inevitable dan testimonio la fragilidad corporal y anímica
otro o preparados para él. En este presente y espacio del del otro– ha sido, es, será el acontecimiento más individual
poema se produce (o simplemente no se llega a producir) y singular del otro. No hay manera de que experimentemos
el encuentro con un tú –digamos más precisamente una tal acontecimiento en carne propia, y no obstante sabemos
constelación de encuentros– al cual se alude y se da un que compartimos con el otro el mismo destino. Nosotros
nombre; un tú que trae consigo lo más propio de sí mismo, prefiguramos o presentimos la muerte cuando en nuestra
a saber su tiempo. vida irrumpen, repentina e imprevisiblemente, decepciones
y épocas de profunda tristeza y melancolía, a veces junto
“El poema, aún en su aquí y ahora (el poema mismo tiene con la sensación de haber sufrido un hondo y quizá incu-
sólo este presente uno, único, puntual), aún en esta inme- rable traumatismo. Asimismo es a través de la debilidad,
diatez y cercanía, deja que lo más propio del otro, a saber angustia y soledad del otro como nos colocamos frente a
su tiempo, hable también”6. su muerte. Meditemos sobre un poema de Celan:

Por consiguiente el presente del acto poético de atención A TRAVÉS DE LOS RABIONES DE LA MELANCOLÍA,
se nos muestra como una diacronía y una separación. Por por el terso espejo de las heridas pasando:
una parte este presente aspirar a lograr la mayor cercanía allí, descortezados, llevan en
posible del yo al otro, al punto de que las distancias y la almadías los cuarenta árboles de la vida.
alteridad amenazarían con acortarse y disolverse; por otra
parte es un presente en el cual el otro entra en escena con Única nadadora
lo más propio de sí y lo más ajeno para nosotros: una inti- en contra, tú los cuentas, los tocas
midad que no es la nuestra. El otro irrumpe en la medida todos8.
en que dejamos que su tiempo interior hable y se date,
en la medida en que su espacio se toca con el nuestro sin Como justamente observa Gadamer, la imagen de los cua-
confusión alguna. Celan pone aquí en juego una definición renta árboles de la vida no se restringe a ser alusión de
del presente y del espacio de la experiencia poética que los cuarenta años del poeta:

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“Alguien piensa en sus cuarenta años. Se dirá: el poeta. Cier- esta síntesis las heridas del otro dejarían de ser patentes,
tamente, y sin embargo hay algo general en lo que el poeta dejarían de apelar inmediatamente nuestra sensibilidad
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dice de sí mismo. En el poema nunca se dice ‘yo’, en tanto para disimularse en la consideración temática del otro. En
que en el lenguaje lírico el ‘yo’ somos todos nosotros”9. El meridiano Celan comenta una emocionante escena de la
obra de Georg Büchner Dantons Tod. Camille, un condena-
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

Los cuarenta árboles significan más bien la mitad del cami- do a muerte, sostiene un elocuente discurso sobre el arte.
no de la existencia humana, cuando con mayor claridad y a Su enamorada Lucile le escucha simplemente. El diálogo de
veces, debido a la crueldad de ciertas situaciones, reflexio- ambos nos parece pertinente para ilustrar la problemática
namos sobre las experiencias que nos han sobrevenido; del concepto de atención en Paul Celan:
cuando sabemos que no disponemos de “mucho” tiempo y
que hemos vivido bastante, no siempre felizmente. Estos “CAMILLE: ¿Qué dices Lucile?
acontecimientos no se dejan describir como simples he- LUCILE: Nada, me agrada verte hablar.
chos brutos y anónimos, sino como contrariedades, como CAMILLE: ¿También me escuchas?
fenómenos que irrumpen en nuestra experiencia decepcio- LUCILE: ¡Ah! Desde luego.
nando expectativas, que alteran nuestros hábitos e incluso CAMILLE: ¿Y no tengo razón?, ¿sabes qué he dicho?
desgarran el corazón. LUCILE: No, realmente no”.

“Tiempos de melancolía, rápidos de un río, que representan Lo digno de notarse en la actitud de Lucile consiste en que
un peligro no tanto por su existencia como por lo repentino ella obsequia toda su atención a Camille sin tematizar la
e imprevisible de su aparición”10. significación de sus palabras. Nos podría prima facie sonar
paradójico que Celan reconozca en el comportamiento
El terso espejo es la conciencia de las heridas, conciencia de Lucile una forma superior de atención al otro, pues
que no es, no puede ser la propia de un ente idéntico a estamos habituados a identificar la atención con la visión
sí mismo y puramente contemplativo, sino más bien su- circunspecta y la consideración de un tema. No obstante,
mergido en el flujo y pasar del tiempo como diacronía y nos dice Celan, quien está frente a otro, quien pretende
exposición del cuerpo propio ante los demás. La concien- atender a otro, puede escuchar, aguzar el oído, mirar, sin
cia de sí mismo, en la medida en que tiene presentes las saber qué está en cuestión o es tematizado. Quien está
heridas infligidas, es necesariamente temporalidad como atento al otro “ve hablar”, ha percibido el lenguaje y la
desplazamiento continuo del ahora, imposibilidad de per- figura del otro, su respiración (Atem), es decir su direc-
manencia, reductio ad absurdum de un momento de puro ción y su destino como mortal. Como lapsos de tiempo de
gozo de sí mismo, experiencia de lo que sobreviene “desde un ser finito –cuya muerte y el tiempo que la antecede
fuera” y nos “hiere” sin ser anticipado, o de lo que, siendo señalan acontecimientos absolutamente únicos e instran-
vagamente vislumbrado, irrumpe abruptamente mostrando feribles– las fechas, las “horas” del otro se dan una sola,
un carácter de novedad y traumatismo. Ahora bien, las primera y última vez. Debido a su carácter singular e irre-
heridas propias no son concebibles sino a causa de los petible la fecha u hora del otro se resiste a ser integrada
otros o por el esfuerzo de, o por falta de dirección hacia los en predeterminaciones sintácticas o semánticas y, como ha
otros. Las heridas son tanto más recalcitrantes en cuanto observado Jacques Derrida, sólo se muestra a la atención
que se rozan siempre con heridas de los demás, infligidas en la medida en que detiene la continuidad de un proceso
en sus almas y cuerpos por los accidentes de su itinerario de observación y comprensión meramente racional. Con-
hacia mí o hacia otros. viene que nos detengamos en el análisis que hace Derrida
del poema siguiente:
La atención al tiempo del otro –figura fundamental de la
experiencia poética– no puede, por tanto, consistir en la CAMINOS EN LAS QUEBRAZAS DE SOMBRAS
disolución de sus discontinuidades, accidentes y “trazas” de tu mano.
o “huellas” traumáticas en la unidad de una percepción Del surco de cuatro dedos
presente, cuya síntesis de identificación se lleva a cabo me rebusco la
gracias a la retención y a la protención. Por medio de bendición petrificada11.

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El poema, nos dice Derrida, es la promesa u oportunidad búfalos rumanos
de recibir una “bendición petrificada”. El yo lírico “rebusca”, en lugar de la estrella sobre
“cava” en el surco de cuatro dedos, intenta abrir la mano el lecho de arena,
que está replegada sobre sí misma. Anhela una bendición en el matraz elocuente,
de parte de quien promete una bendición u ofrece signo, poderoso de rojas cenizas15.

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ademán de bendecir. No obstante ninguna anticipación,
ningún esfuerzo premeditado garantiza la bendición: Celan tiene en la memoria una persona concreta, Rosa
Luxemburg. En el poema convergen lapsos de tiempo o
“Como si una bendición adquirida de antemano, con la cual lugares temporales donde tiene lugar una conversación,
se pudiera contar, una bendición verificable, calculable, por silenciosa pero atenta. En su libro Paul Celan relata Wol-
decidir, ya no fuera una bendición. Una bendición, ¿no debe fgang Emerich un episiodio conmovedor:
permanecer siempre improbable?”12
“Finalmente, hay testimonios fiables de que Celan, en di-
La imagen poética de la mano, presta a bendecir pero ciembre de 1967, durante su estancia en Berlín, visitó el
replegada, indica el carácter de donación del sentido del canal Landwehr, al cual fue arrojado el cadaver de Rosa
otro. Ninguna indagación nos permite asegurar si tal sen- Luxemburg. En las cartas que Rosa Luxemburg envío desde
tido se ha de revelar o no. Ninguna anticipación nos exime la prisión se halla un pasaje emocionante. Desde la carcel de
del riesgo de que el sentido nos sea rehusado. No estamos Breslau escribe la prisionera, en diciembre de 1917, a Sophie
en condiciones de decidir si el sentido del otro se nos ha Liebknecht cómo vio ella, en el patio, reses de Rumania,
de manifestar o no. Ahora bien, lejos de frustrar la aten- ‘trofeos de guerra’, a tal grado lastimadas por soldados, que
ción, tal indecisión resulta ser condición de posibilidad de manaba sangre de la herida de un joven animal. El animal,
aquélla: relata Rosa Luxemburg, estaba frente a ella, mirándola con
una expresión en el negro rostro y con los tiernos ojos negros
“La indecisión mantiene siempre en vilo a la atención, es como un niño lloroso [...] ‘yo estaba ahí enfrente, y el animal
decir con vida, despierta, vigilante, presta a adentrarse en me miraba. Se me derramaron las lágrimas. Eran sus lágri-
otro camino, a dejar venir, tendiendo la oreja, escuchando mas. En mi impotencia, yo no podía haberme estremecido
fielmente otra palabra, suspendida al aliento de otra palabra más dolorosamente por el hermano más amado que por este
y de la palabra del otro, incluso ahí donde podría parecer sufrimiento silencioso‘”16.
ininteligible, inaudible, intraducible”13.
Las imágenes poéticas de Coagula se nos muestran cómo
Que el progreso de la comprensión o interpretación del una visión discreta, voluntariamente inhibida, que, por así
sentido ajeno14 se interrumpa o deba interrumpirse brus- decirlo, desearía curar la herida tanto de Rosa Luxemburg
camente no significa, empero, que el otro no esté cerca, como la del animal maltratado absurdamente. Las mismas
próximo de nosotros mediante un gesto dirigido a nuestra imágenes son capaces de tender un puente entre nosotros,
sensibilidad (por ejemplo el ademán de una caricia que con nuestras heridas, y otro, con sus heridas. Las versio-
quizá se detenga a medio camino y finalmente sea rehu- nes interlineares del poema son espacios reservados para
sada), ni que su sufrimiento nos sea velado. La necesaria nosotros. No hay de por medio, en las imágenes, morbo
interrupción del esfuerzo de visión plena y de comprensión o curiosidad intelectuales. Las imágenes poéticas no as-
racional no ocurre sin un movimiento intenso hacia el otro, piran a “retratar” o “poner” la realidad de lo imaginado.
esta vez en forma de la atención más solícita y saturada De ahí el carácter discreto y el sentido inestable de tales
de sensibilidad. Leamos los siguientes versos: imágenes. No obstante, las imágenes desempeñan una
función fenomenológica: muestran al otro y procuran el
COAGULA encuentro de sensibilidades. Han trascendido así el ni-
También tu herida vel de meras copias o de metáforas plenas de belleza.
Rosa. ¿Cómo es posible que las imágenes tengan un carácter
fenomenológico? En el apartado siguiente intentaremos
Y la luz de los cuernos de tus responder esta pregunta.

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2. POESÍA COMO REDUCTIO AD ABSURDUM su soledad y su angustia, y finalmente de su mortalidad.
DE LAS METÁFORAS Y CARÁCTER FENOMENOLÓGICO En la expresión poética del tiempo del otro Celan quiere
Nº 736 DE LAS IMÁGENES resaltar la hondura de respiración y los espasmos de los
“halos temporales” (Zeithöfe), cuya dirección ineludible es
La manera como Paul Celan define las imágenes y hace uso la muerte. El poema, observa Celan, debe ser, por tanto,
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de ellas en su poesía es, sin duda, una cuestión de notable pneumáticamente tangible (pneumatisch berührbar)
interés y relevancia para la fenomenología. Al caracterizar
los rasgos esenciales de la obra de Ossip Mandelstamm, Podemos formular así la pregunta que nos incumbe: ¿Cómo
Celan acentúa el valor intrínseco de poemas que no bus- y en qué medida las imágenes poéticas son aptas para
can la musicalidad de las palabras ni el colorido de los suscitar la manifestación fenomenológica de la finitud
sonidos, que no construyen una “segunda realidad” con del otro, sin recaer en una mera técnica de expresión, sin
base en metáforas preciosistas. La poesía de Mandelsta- estetizar la realidad y despojarla así de su gravedad? ¿Por
mm representa para Celan el precedente más cercano de qué las imágenes poéticas resultan pertinentes e incluso
un lenguaje que apuesta al carácter fenomenológico de preferibles como testigos que las descripciones más exac-
las imágenes, carácter que es preciso oponer al carácter tas y verídicas sobre la enfermedad, debilidad y muerte
metafórico o meramente emblemático de ciertos poemas17. humanas? Con el fin de orientarnos en esta problemática
Al respecto conviene que meditemos sobre un importante leamos con atención el siguiente poema:
pasaje del Meridiano:
AL OTRO LADO
“¿Y que serían entonces las imágenes? (...) Lo percibido y por
percibir siempre una sola vez, sólo aquí y ahora. Y el poema Sólo más allá de los castaños está el mundo.
sería por consiguiente el lugar donde todos los tropos y De allí viene de noche un viento en carro de nublados
metáforas quieren ser reducidos ad absurdum”18. y alguien se levanta aquí...
A ése quiere llevar más allá de los castaños:
La imágen poética así concebida pretende restituir a la “¡Polipodio y roja dedalera tengo aquí!
palabra la función de significar, o mejor aún, por recorrer Sólo más allá de los castaños está el mundo...”
a términos de Lévinas, de decir lo singular del otro, esto es,
lo que sólo puede experimentarse, concretamente, una vez, Entonces canto bajito como hacen los grillos,
y se resiste a ser disponible como un concepto o un tema. Entonces lo retengo, entonces se ha de detener:
Nada más distante de una cierta manera de hacer poesía ¡mi llamada se le atraviesa en sus miembros!
que, como observa Yves Bonnefoy, recurre a la rima y al Al viento lo oigo muchas veces volver:
ritmo para asegurar la esencia y repetición de lo dicho19. “En mi lugar flamea la lejanía, el tuyo es estrecho...”
Entonces canto bajito como hacen los grillos.
En muchas ocasiones y de modo elocuente ha intentado
Celan precisar el antedicho concepto del carácter feno- Mas si el fulgor de la noche también hoy es ninguno
menal de las imágenes. La imagen es, ciertamente y ha- y vuelve el viento en carro de nublados:
blando en general, visión, testigo de un acontecimiento “Polipodio y roja dedalera tengo aquí”.
único e irrepetible; pero la imagen poética es, debe ser Y quiere llevarlo más allá de los castaños –
en sentido estricto visión del otro hombre, y éste es “(...) entonces no lo retengo, no lo retengo aquí...
un ser anímico, pero [del cual] no tenemos su imagen en
la ordenación de sus cromosomas; tenemos su imagen en Sólo más allá de los castaños está el mundo21.
su rostro hipocrático”20. Para comprender esta última ex-
presión debemos recordar que el obsequio de atención al En su estudio Antschel Paul - Paul Celan. Studien zum
otro por parte del poeta se identifica con la percepción o Frühwerk Barbara Wiedemann ha realizado un excelente
intuición –en sentido amplio– no tematizante, del aliento análisis de este poema22. Por ahora nos limitamos a recoger
del otro, de la emisión y la extinción continuas de su voz, algunos de los resultados más notables de este análisis,
signos sensibles de su vulnerabilidad y sus heridas, de que nos permitirán responder con mayor exactitud las

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preguntas que antes hemos formulado a propósito del del moral solicité la muerte a quien esté dispuesto a darla.
papel de las imágenes poéticas en la experiencia de la Tanto más sorprendente en cuanto que la imágen poética
finitud del otro: El “aquí” (dahier) es contrapuesto a un del moral, como nota Gadamer, “(...) es aquí sin duda la
“alli” (dort), aquél representando nuestro mundo, en gran quintaesencia de la energía pulsional y de la formación
medida familiar y deseable, éste el más allá, el “contracos- de pulsiones nuevas, un símbolo de la insaciable sed de

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mos” (Gegenkosmos) de la muerte. En el original alemán vida. Pues a diferencia de otros arbustos el moral tiene
Heimchen (grillos)23 remite a Heim, Häuslichkeit, término hojas frescas no sólo a comienzos de año, sino todo el
muy difícil de traducir y que denota un “carácter de hogar” verano”25.
de nuestro mundo. No obstante en el “otro lado” (drüben),
que está “más allá de los castaños” flamea la lejanía, Ahora bien, observa Gadamer, la sobreabundancia del ins-
imagen poética que es contrapuesta a la estrechez. El tinto y de las pulsiones durante el verano puede llegar a
viento que viene del más allá retornando una y otra vez en ser insoportable, verdaderamente insufrible. La vida puede
carro de nublados, solicitando a “alguien de aquí”, ofrece llegar a ser excesiva y la muerte deseable. El poeta dirige
polipodio (Engelsüß) y dedalera roja (roter Fingerhut) Se simplemente su atención al grito de la joven hoja, a su
trata de plantas cuyos nombres técnicos son polypodium anhelo de descanso, a su aliento sofocado por el calor del
vulgare y digitalis purpurea. Tanto el uno como la otra verano, sin tematizar nada de ello. Pues por una parte las
son imágenes relacionadas con la sanación, pues el po- imágenes poéticas, siendo experiencia intuitiva, concier-
lipodio, según la creencia popular, es un obsequio de los nen a la sensibilidad del lector, permitiendo así el contacto
ángeles para prevenir ataques de apoplejia, mientras que directo con otro, cuya voz fatigada y casi extinta se deja
la dedalera roja es ingrediente de medicamentos contra escuchar; por otra parte el laconismo, sobriedad y contun-
enfermedades del corazón. No obstante, quien ofrece la dencia de las imágenes poéticas están en correlación con
sanación es el viento que viene del más allá, que ofrece un freno brusco de la curiosidad perceptiva e interpretativa
amplitud en vez de estrechez, luz en vez de una noche respecto del tedio de la vida que otro puede experimentar,
que no alumbra, pero tan sólo al precio de la muerte (la no obstante su juventud y la plenitud de sus energías in-
dedalera roja es venenosa). telectuales y corporales.

No menos impactantes son las imágenes del siguiente Cabe agregar que las imágenes, siendo una paradójica
poema: intuición de lo ausente, pueden salvaguardar, respetar
la intimidad del otro que no se revela jamás a una ob-
PUEDES confiadamente servación curiosa o incluso mórbida. En este sentido las
agasajarme con nieve: imágenes poéticas sobre la muerte se muestran como lo
siempre que hombro con hombro contrario de las imágenes fotográficas más crudas o de una
anduve con el moral a través del verano autopsia. Digamos que las imágenes poéticas no profanan
gritó su más joven hoja24 el santuario del alma o del cuerpo del otro, ni violentan su
secreto, en la medida en que simultáneamente permiten
En su importante comentario al ciclo de poemas Atemwen- e impiden ver, respetando así la diacronía de mi tiempo y
de Hans-Georg Gadamer ha logrado poner de relieve la del tiempo del otro; o dicho de otra manera, en la medida
riqueza y precisión “fenomenológica” de las imágenes que en que ejerciendo la “consideración estética de la ima-
aquí están en juego: La hoja más joven del moral se dirige gen”, por usar términos de Husserl (que a decir verdad no
quizá no al poeta, sino a un tú en quien está el poder de se ajustan del todo a la Kunstfeindlichkeit o animosidad
obsequiar con nieve, imágen poética de la muerte que todo contra el arte que Paul Celan muestra reiteradamente),
nivela, enfría y lleva a un punto de detención. La palabra renunciamos a una progresiva aproximación al ideal de
alemana getrost, que impregna de una particular tonalidad “visión omnilateral”, de comprensión exhaustiva del otro
afectiva el clamor de la hoja del moral, es aquí traduci- como tema o correlato de una noesis.
da como “confiadamente”. Getrost significa también ohne
Reue, es decir sin remordimiento. El matiz es importante, Solamente así logramos atender en la mera imagen los
pues pudiera causarnos escrúpulo que la hoja más joven aspectos sensibles que, por medio de una aprehensión,

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referimos a otro, pero siempre con una conciencia con- que nos ha sugerido la reflexión de Paul Celan sobre la
comitante de que dichos aspectos jamás podrían ser “rea- imagen poética.
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lizados”, perfectamente sintetizados para traer al otro a
aparición tal como es. La consideración estética de la El problema que ahora nos atañe resolver es el siguiente:
imagen constituye así una experiencia donde, paradóji- ¿Cómo es que las imágenes poéticas llegan a ser ocasión
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

camente, el presente del otro, en la forma concreta de su o fuente de intuición para el ejercicio más profundo de
voz y su lenguaje, se mantiene ausente y absolutamente atención al otro? Nos parece que una posible clave para
anárquico –en el sentido que Levinas atribuye a esta pa- responder a esta pregunta se halla en la experiencia de la
labra–, en tanto que en la imagen “vemos” o “intuimos” al imposibilidad de realización de la imagen misma, esto es,
otro sin absorberlo o sin someterlo al ideal de la presencia en la imposibilidad de que la imagen equivalga al objeto
más plena de intuición; ello radica en que la imagen es, imaginado o pueda suplirlo: En la imagen “vemos” lo ima-
ciertamente, imagen del otro, pero a la vez “irrealizable” y ginado y éste nos “ve”, pero de tal manera que no por eso
por consiguiente “nada” del otro. se acorta la distancia entre nuestro modo de representa-
ción o presentificación (Vergegenwärtigung) y la ausencia
Podemos incluso aventurarnos a definir a la imágen poé- del objeto imaginado. El momento de consideración pro-
tica como correlato de una experiencia que en medio de piamente “estética” surge cuando renunciamos libremente
la intuición sensible es atenta a la ausencia del otro, a a una mejor adecuación de la imagen con el objeto ima-
la diacronía irreducible de los aspectos sensibles de la ginado, cuando aceptamos el conflicto irresoluble entre
imagen y de la actualidad de lo imaginado. No es que la nuestra capacidad de “retratar” y el objeto “retratado”,
imagen poética nos autorice a evadir la realidad; por el para volcarnos al objeto imaginado en la pura imagen.
contrario, nos muestra lo real en la medida en que vemos
a través de o en la imagen, sin tender más a iluminar, En este momento de consideración propiamente estética,
a tornar absolutamente visibles las opacidades propias nos parece, surge la oportunidad de efectuar una “reduc-
de la manifestación del otro, sin resolver el conflicto ción” a la sensibilidad, un acto de atención al otro, acto
o choque entre la espontaneidad de la conciencia y lo que no es fría técnica de observación ni perfeccionamiento
real en favor de su posible o deseable síntesis definitiva. de la visión, ni juego de espejos mediante copias fidedignas
Las palabras teñidas de imaginación poética, justamente de la realidad, sino contacto y encuentro entre un yo y un
porque no disimulan la distancia entre la conciencia y su tú por medio de la imágen poética, en la medida en que
objeto –distancia que ninguna anticipación podría acortar ésta ve, toca y escucha al otro. Sin embargo, en y por la
y por tanto distancia insalvable–, propician la verdadera imagen poética vemos, tocamos y escuchamos al otro no
cercanía al otro. En este contexto nos parece acertada y mediante una sincronización sensorial que acaba o tiende
profunda una reflexión de Yves Bonnefoy sobre la palabra a acabar en la proclamación de estas cualidades objetivas
poética: “La verdad de palabra es una proximidad. Cuando como aquellas cualidades objetivas identificables en ulte-
las realidades esenciales son transparentes, constituyendo riores percepciones de tal o cual sujeto. Aquí estarían en
así el umbral del lugar verdadero, son no obstante tanto juego cualidades objetivas que, más o menos diferenciadas
más opacas, tanto más extrañas en la medida en que se según los distintos individuos, serían en última instancia
sustraen siempre, por el azar de su dispersión, al paso cualidades objetivas comunes y por tanto objeto de la bio-
próximo pero secreto”26. logía, de la fisiología o de la antropología. La consideración
estética de una imagen singular, única, tiende más bien a
Justo en este momento de nuestra reflexión y con el fin disolver toda comunidad o generalidad de cualidades obje-
de hacer comprensibles nuestras afirmaciones anterio- tivas, con el fin de que una sensibilidad se encuentre frente
res, conviene que examinemos ciertas tesis de la feno- a otra, un puro Angesicht zu Angesicht sin equívoco alguno
menología de la imagen de Husserl27. Nuestra intención y, en el caso de la imagen poética como la usa Celan, sin
no consiste en exponer fielmente los análisis de Husserl posibilidad de evasión o desinterés respecto del otro.
y aplicarlos –arbitrariamente– a la poetología de Celan.
Más bien nos proponemos, leyendo a Husserl, considerar Husserl ha puesto de relieve un conflicto, en la conciencia
libremente algunas posibles vertientes y algunos matices de imagen, entre objeto-imagen (Bildobjekt) y tema de la

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imagen (Bildsujet) Desde luego hay semejanzas entre am- poético quiere expresar. La atención no se dirige aquí al
bos que legitiman una referencia intencional; no obstante resultado de una síntesis, sino a un acontecimiento que
el conflicto es irresoluble: el niño de la fotografía (el ejem- ha irrumpido desconcertando las efectuaciones sintéti-
plo es de Husserl) muestra discrepancias irremediables con cas de la conciencia, a un acontecimiento que muestra
el niño ausente representado. Las prefiguraciones proten- una novedad imprevisible, a veces traumática, y que da

JESÚS GUILLERMO FERRER ORTEGA


cionales de la percepción pueden aspirar a ser realizadas testimonio de una ausencia que no es recuperable ni
mediante el “cumplimiento”; el tema de la imagen, en la anticipable. La consideración estética de la imagen, en
medida en que exige fidelidad por parte del objeto-imagen, cuanto renuncia libre a retratar, presentar y así idealizar
inaugura un horizonte protencional de mejor aproximación el objeto, da testimonio del carácter único e irrepetible
al objeto imaginado, lo cual nos mueve a producir mejores de un acontecimiento.
imágenes; empero las prefiguraciones protencionales aquí
en juego están condenadas, por así decirlo, a una frus- ¿Ha llegado Husserl realmente hasta este punto? Él se limi-
tración permanente. De hecho no podemos anticipar una ta a describir una experiencia que en última instancia es de
imagen que retrataría perfectamente el tema de la imagen, gozo puro en la manera como se representa el tema, no por
pues tal previsto dejaría de ser imagen (del mismo modo, la imagen, sino en la imagen misma. Pareciera que en la
cabe observar, que la tendencia a la visión omnilateral de la experiencia estética así concebida culmina la experiencia
cosa, de realizarse completamente, equivaldría al fin de la ontológica. Pues viviendo en la experiencia estética llega-
percepción trascendente, pues la cosa sería dada al modo mos a sentir gozo o complacencia en cualquier tema, in-
de la percepción inmanente). cluso en aquel que es testimonio frío de un acontecimiento
terrible. El arte, como nota Levinas, es “[...] ostentación
Husserl ha descrito otra manera de relación con el tema por excelencia, dicho reducido al tema puro, a la exposi-
de la imagen que ya no es una relación de aproximación ción absoluta hasta el impudor, capaz de sostener todas
progresiva. Renunciando a resolver el conflicto entre ob- las miradas a las cuales se destina exclusivamente”29. Sin
jeto-imagen y tema de la imagen en favor de una co- embargo, a propósito de la imagen poética, cabe describir
pia fiel de este último, la conciencia puede ejercer una otras posibilidades, de “reducciones” más radicales a partir
“imaginabilidad inmanente”. El sujeto no está atento a las de la decisión libre de no copiar el objeto, de no violentar
semejanzas (que posibilitan la referencia intuitiva al ob- su ausencia con retratos cada vez más adecuados, sino
jeto imaginado o tema imaginado) ni a las desemejanzas de atenderlo en la imagen misma, cuyas “infidelidades”
(que impiden una identificación del objeto-imagen con el deliberadas respecto del objeto imaginado pueden rendir
objeto o tema imaginado), sino que contempla, o mejor testimonio de la restricción de una curiosidad morbosa o
dicho atiende al tema dentro del objeto-imagen o signo- monstruosamente neutral ante lo que está en cuestión y
imagen en el caso de la poesía. El sujeto ya no va en pos requiere ser expresado. Una vez que la poesía –no podría
de mejores representaciones del tema, sino que dirige su ser de otra manera– ha recorrido su camino de mano con
interés hacia la imagen como tal, hacia el tema immanente el arte, dispone de una posibilidad de liberación, de una
en la imagen. O dicho de otra manera: el sujeto no persigue “contra-palabra” (Gegenwort): No darle la espalda a lo
el objeto imaginado en la medida en que es exterior a la humano que el arte siempre expresa. “Quizá [...] la poesía,
imagen, sino que está interesado única y exclusivamente como el arte, con un yo que se olvida de sí mismo va hacia
en el objeto-imagen, hallando gozo (Genuss) en su manera lo siniestro y ajeno; y no obstante se libera (¿dónde?, ¿en
de representación o figuración intuitiva28. qué lugar?, ¿de qué manera? ¿bajo qué forma?)”30 Además,
si las técnicas de observación y la conceptualización, lejos
La consideración estética del otro en la imagen poética de rendir cuenta de la novedad del otro le imponen vio-
intuye la ausencia del otro en una sensibilidad acen- lentamente sus condiciones, ¿no queda, como un resto, el
drada, pero que no está organizada en función de la lenguaje de imágenes poéticas que, mediante su fidelidad
idealización de los datos sensibles, de su tematización y a lo singular e irrepetible, se resiste contra toda ideología
conceptualización; más bien se trata de una sensibilidad y violencia? Por otra parte experimentamos lo real en tanto
“desorganizada” y “embrollada” por la singularidad e irre- que no se deja reducir a nuestras representaciones, en
petibilidad del acontecimiento del otro que el lenguaje tanto que éstas contrastan con la realidad y se muestran

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impotentes para “ponerla”. La imágen poética rinde cuenta EL COMPAÑERO DE VIAJE
de la novedad inanticipable de la realidad porque contrasta El alma de tu madre va en vilo delante.
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con aquello que expresa, porque lo imaginado permanece El alma de tu madre ayuda a capear la noche, escollo a
exterior a una representación temática y cercano a una escollo.
sensibilidad humana. El alma de tu madre fustiga a los tiburones delante de ti.
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

Tomando en cuenta lo antedicho sería un error grave creer Este vocablo es pupilo de tu madre.
que la imagen poética nos ofrece visiones nuevas, cuyo El pupilo de tu madre comparte tu lecho, piedra a piedra.
sentido consistiría en “enriquecer” nuestra experiencia El pupilo de tu madre se inclina sobre la migaja de luz32.
del otro con datos curiosos o extravagantes prestos a las
tematizaciones más variadas. La novedad que aquí está Y sin embargo el recuerdo no atenúa la pérdida, sobre todo
en cuestión es originariamente traumática, porque el en- si ésta ha sido violenta y cruel (se sabe que la madre de
cuentro con el otro implica siempre la mayor contrariedad Paul Celan murió asesinada en el campo de concentración
que puedan padecer el auto-interés y el egoísmo (que se Michailowka en Gaissin, Ucrania, durante el invierno de
concretan en ideología y violencia). El encuentro con el 1942-3)
otro implica asimismo que el desinterés y la generosidad
tal vez no sean correspondidos, o que el egoísmo y las en- ÁLAMO TEMBLÓN, tu follaje es blanco en lo oscuro
fermedades del yo hagan fracasar las mejores intenciones. El cabello de mi madre nunca llegó a ser blanco.
Las experiencias del amor y del diálogo no acontecen sin
portar el signo de la precariedad y de la posible exposición, Diente de león, tan verde es la Ucrania.
de ambas partes, a la indiferencia, a las desatenciones y Mi rubia madre no volvió a casa.
formas de violencia extremas.
Nube de lluvia, ¿te demoras en los pozos?
El encuentro con el otro nos coloca cruda, brutalmente Mi dulce madre llora por todos.
ante nuestra vulnerabilidad y ante el peligro de la deso-
lación, de la tristeza y de la desesperación. Si es verdad Estrella redonda, tú enroscas la cola dorada.
que la poesía de Celan aspira a un retorno a lo humano, El corazón de mi madre fue herido con plomo.
a lo más humano en cuanto encuentro y conversación
con el otro, no es menos verdad que esta poesía tiene una Puerta de roble, ¿quién te sacó de los goznes?
conciencia aguda de que una conversación puede llegar Mi tierna madre no puede venir33.
a ser “desesperada”. En cierto grado de nosotros depen-
de construir vínculos con los demás, o nos encontramos La imagen del alamo temblón (Populus tremula) indica
de golpe en relación con los demás; podemos proteger la ausencia de la madre muerta de herida de bala en el
estos vínculos y hacerlos crecer, ¿pero si se nos priva de corazón; pero no está aquí en juego una asociación arbi-
esos vínculos contra nuestra voluntad?, ¿y si en algún traria de la imagen del álamo con la ausencia de la madre.
momento traumático, que primeramente no pudimos asi- Las hojas del álamo temblón son más claras en la parte
milar sino sólo resignificar más tarde, nos hemos visto superior del árbol que en su parte inferior. Así, la imagen
excluidos de la “comunicación existencial” con los otros, representa las canas de la vejez y redoblan la ausencia
por usar términos de Henri Maldiney, tal vez de manera de la madre, no sólo por su muerte violenta, sino por su
irreversible?31 muerte temprana.

El recuerdo de un ser querido puede sostenernos en las ¿Si los vínculos que nos sostienen se rompen, si por más
situaciones más difíciles. En una prisión de la GESTAPO que enviemos mensajes al otro no hay respuesta? Ce-
en Köln leemos unos trazos en la pared: “Wenn keiner an lan nunca dejó de insistir en el carácter dialógico de su
dich denkt, dann denkt an dich deine Mutter” (“cuando poesía, pero siempre puso el acento en el carácter con-
nadie piensa en ti, entonces tu madre piensa en ti”). De dicionado de la conversación deseada. “El poema es una
semejante experiencia nos da imagen este poema: forma de aparición del lenguaje y por eso dialógico según

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su esencia; así, el poema puede ser un mensaje en una Insektenforschers Fabre describe la terrible eficacia de la
botella, enviado con la creencia –ciertamente no siempre mantis: “Con el primer mordisco en el cuello comienza la
con grandes esperanzas– de que en algún momento y en muerte de la presa. Los centros nerviosos son heridos y en-
alguna parte ella podría ser arrojada a tierra, quizá a la venenados, la llama de la vida se apaga en un instante”36.
tierra del corazón”34. No menos preciso es el siguiente poema:

JESÚS GUILLERMO FERRER ORTEGA


El riesgo de ser un sujeto abierto a los demás, obligado a LA MANTIS, otra vez,
emprender un éxodo hacia los otros, consiste en el peligro en la nuca de la palabra,
de la soledad y de la tristeza. La palabra dirigida al otro en la que te habías escurrido–,
es un refugio, pero tan precario que tarde o temprano la
soledad y la tristeza nos pueden alcanzar y herirnos cer- valor adentro
teramente35. La mantis religiosa es, para Celan, imagen del camina el sentido,
carácter mortífero de la soledad y la tristeza. En un libro sentido adentro
titulado Das offenbare Geheimnis. Aus dem Lebenswerk des el valor37.

NOTAS punto de partida: “Resulta que, para


Celan, el poema se sitúa precisamen-
1 Sin embargo la influencia de Emma- te al nivel pre-sintáctico y pre-lógico
nuel Levinas y de Jacques Derrida en [...], pero también pre-revelante: en el
nuestras reflexiones es tan notoria, momento del tocar puro, del contacto
que, una vez mencionada nuestra puro, de la emoción, de la atribula-
deuda, sería superfluo citarlos en ción, que es quizá una manera de dar
todo momento. No se trata, para no- hasta la mano que da”. Levinas, Em-
sotros, de imponer determinados cri- manuel, Paul Celan de l’être à l’autre,
terios de interpretación de la poesía Éditions Fata Morgana, Paris, 2002,
de Celan, por mucho que tales crite- p. 17. Salvo indicación expresa, las
rios se basen en obras maestras. Más traducciones de los textos en francés
bien la poesía misma de Celan exige y en alemán son nuestras.
ser puesta, en el caso de Levinas, en 3 Paul Celan, Der Meridian. Endfassung.
relación con una filosofía que, con un Vorstufen. Materialien, Herausgege-
rigor sin precedentes, pretende dar ben von Bernhard Böschenstein und
cuenta del hecho ético y su origina- Heino Schmull. Unter Mitarbeit von
riedad. En el caso de Derrida la crítica Michael Schwarzkopf und Christia-
de la “metafísica de la presencia” va ne Wittkop. Tübinger Ausgabe. Su-
de la mano de una reflexión ética que hrkamp Verlag. Frankfurt am Main,
toma en cuenta las formas diversas 1999, 9, 35 c. En lo sucesivo citare-
de ausencia del otro. La importancia mos así este volumen: DM, indicando
que la poesía de Celan reviste para a continuación el número de página
los susodichos fines no ha pasado y de interlineado.
inadvertida al fundador del decons- 4 En este sentido comprendemos algu-
truccionismo. nos pasajes del bello libro de Derrida
2 Levinas, primero que nadie, ha re- Schibboleth. Pour Paul Celan: “En la
saltado el valor de una obra poética lengua, en la escritura poética no
Recibido: 26 de diciembre de 2007 que ha intentado decir el movimien- hay más que schibboleth [contra-
Aceptado: 15 de enero de 2008 to hacia la trascendencia y situar su seña, mensaje cifrado]. Como la fe-

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cha, como un nombre, el schibboleth entrindeten Lebensbäume geflößt. a hacer vibrar, como cuerdas, el ins-
permite el aniversario, la alianza, el Einzige Gegen- trumento de las significaciones adqui-
retorno, la conmemoración, incluso si Schwimmerin, du ridas, o a suscitar alguna reminiscencia:
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ya no hubiera traza, lo que corrien- zählst sie, es preciso que el despliegue de tales
temente llamamos traza, la presencia berührst sie palabras tenga el poder de lanzarme
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

subsistente de un resto, incluso si tan alle. hacia una significación que ni él ni yo


sólo hubiera las cenizas de lo que 9 Gadamer, Hans Georg, Wer bin Ich poseíamos”.
se data, celebra o bendice”. Derrida, und wer bist Du? Ein Kommentar zu Merleau-Ponty, Maurice, La prose du
Jacques, Schibboleth. Pour Paul Ce- Celans “Atemkristall”, Suhrkamp Ver- monde, Gallimard, Paris, 1969, p. 197.
lan, Éditions Galilée, Paris, 1986, pp. lag, Frankfurt am Main, 1973, p. 47. En este libro Merleau-Ponty desarrolla
61-62. 10 Gadamer, Hans Georg, idem. ideas que nos parecen muy oportunas
5 Celan, Paul, “Mikrolithen sinds, Ste- 11 Celan, Paul, OC, p. 209. para una aproximación fenomenológica
inchen”. Die Prosa aus dem Nachlaß, WEGE IM SCHATTEN-GEBRÄCH a la poesía de Celan. Es notable ante
Kritische Ausgabe, Herausgegeben deiner Hand. todo el contraste de la universalidad del
und kommentiert von Barbara Wie- Aus der Vier-Finger-Furche sentir (universalité de sentir), en donde
demann und Bertrand Badiou, Su- Wühl ich mir den versteinerten acaece la experiencia del otro, con una
hrkamp Verlag, Frankfurt am Main Segen. conciencia que expresa significaciones
2005, p. 146, 262.2. 12 Derrida, Jacques, Béliers. Le dialogue puras, entre las cuales el otro sería uno
6 DM, 9-10, 36a-d. ininterrompu: entre deux infinis, le más. “Yo miro este hombre inmóvil du-
7 “Tal es la fenomenología poética de poème, Éditions Galilée, Paris, 2003. rante el sueño y que repentinamente se
Celan: mediante la denominación del 13 Derrida, Jacques, op. cit., p.37-38. despierta. Abre los ojos, hace un gesto
poeta, lo que es nombrado llega a 14 Progreso hermenéutico que sería hacia su capa tendida a un lado y la
aparecer aquí y ahora en su propio impensable sin la disposición previa toma para cubrirse del sol”. Ibidem, p.
ser otro como un tú (...) Idiomático, el de un bagaje conceptual y de he- 189. No es porque este hombre sea ob-
lenguaje de Celan es tal en la medida rramientas de interpretación, a todo jeto de conciencia que le experimento
en que es un lenguaje que coloca lo cual el sentido ajeno tendría que como otro, observa Merleau-Ponty, sino
a cada uno ante su propia muerte, acoplarse como “cumplimiento” o porque, padeciendo yo como sintiente el
ante la muerte que no es propiedad realización de lo virtual. Ahora bien, mismo ardor del sol y parpadeando ante
de nadie, sino al mismo tiempo el esta interpretación sin fisuras, aun- la misma luz cegadora, me veo impelido
principio absoluto de individuación”. que sólo sea proclamada como ideal, a protegerle. Este impulso, proveniente
France-Lanord, Hadrien, Paul Celan et en la medida en que pretende llegar a de mi sensibilidad, surge espontánea-
Martin Heidegger. Le sens d’un dialo- ser norma única de lectura, excluiría mente sin decisión o consideración
gue, Fayard, Paris, 2004. la novedad y singularidad de una res- temática de por medio. Cf. Ibidem, pp.
8 Nos atendremos, salvo indicación puesta a partir de la sensibilidad de 189-190.
contraria, a las traducciones de José quien recibe el mensaje del poema. 15 Hemos simplificado un tanto la ver-
Luis Reina Palazón en Celan, Paul, Esta respuesta es absolutamente im- sión de José Luis Reina Palazón. Ce-
Obras completas, Editorial Trotta, 4.ª previsible e indiscreptible mediante lan, Paul, OC, p. 242, sin modificar,
edición, 2004 (1.ª edición 1999). En lo el recurso a un lenguaje instituido y nos parece, su contenido:
sucesivo citaremos así las referencias formalizado. El encuentro que pro- COAGULA
a los poemas: Celan, Paul, OC, y a picia la poesía de Celan no es algo También tu
continuación el número de página, que podamos pre-decir con base en herida, Rosa.
en este caso p. 208. lo que ya sabemos. En este contexto Y la luz de los cuernos
DIE SCHWERMUTSCHNELLEN nos parece acertada la caracteriza- de tus búfalos rumanos
HINDURCH, ción que hace Merleau-Ponty del en el lugar de la estrella sobre
an blanken diálogo auténtico: el lecho de arena, en la parladora,
Wundenspiegel vorbei: “Aquí las palabras de otro o las mías de rojas cenizas poderosa
da werden die vierzig en él no se limitan, en quien escucha, retorta.

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COAGULA Dann zirp ich leise, wie es Hei- posible, al volumen XXIII de la serie
Auch deine mchen tun, Husserliana: Phantasie, Bildbewusst-
Wunde, Rosa. dann halt ich ihn, dann muß er sein, Erinnerung. Zur Phänomenolo-
Und das Hörnerlicht deiner sich verwehren: gie der anschaulichen Vergegenwär-
rumänischen Büffel ihm legt mein Ruf sich ums Gelenk! tigungen. Texte aus dem Nachlass

JESÚS GUILLERMO FERRER ORTEGA


an Sternes Statt überm Den Wind hör ich in vielen (1898-1925), Martinus Nijhoff, The
Sandbett, im redenden, rotaschen- Nächten wiederkehren: Hague, 1989. Cualquier alusión a
gewaltigen “Bei mir flammt Ferne, bei dir ist este texto se hará conforme a la
Kolben. es eng...” nomenclatura Hua, indicando a con-
16 Emerich, Wolfgang, Paul Celan, Dann zirp ich leise, wie es Hei- tinuación con números romanos el
Rowohlt Taschenbuch Verlag, Ham- mchen tun. volumen y con números arábigos la
burg, 1999, p. 155. Doch wenn die Nacht auch heut página y el interlineado.
17 Cf. DM, 215, 5. sich nicht erhellt 28 Los siguientes pasajes son esenciales
18 DM, 10, 39 a-b und wiederkommt der Wind im e ilustran los fundamentos de una
19 Bonnefoy denuncia una “poesía Wolkenwagen: fenomenología de la consideración
mentirosa”, cuya arquitectónica “Bei mir ist Engelsüß und roter estética en la obra de Edmund Hus-
de las palabras se caracteriza por Fingerhut bei mir!” serl: “Nos vemos dentro de la imagen,
un “gran rechazo” (grand refus): Und will ihn über die Kastanien nuestro interés pertenece a ella, ve-
“Cuando tenemos que ‘dominarnos’, tragen – mos el tema en ella. La imagen no
como decimos de alguien a quien dann halt, dann halt ich ihn nicht tiene la mera función de suscitar una
la desgracia alcanza; cuando tene- hier... representación exterior a la imagen
mos que desafiar la ausencia de un Erst jenseits der Kastanien ist die o una representación conceptual del
ser, el tiempo que nos ha engañado, Welt. mismo”. Hua, XXIII, 36, 22-26. “Pero
el abismo que se abre en el cora- 22 Wiedemann-Wolf, Barbara, Ants- cuán esencialmente el objeto ima-
zón mismo de la presencia, o de la chel Paul - Paul Celan. Studien zum gen participa del interés, se muestra
comprensión, que sé yo, entonces Frühwerk, Max Niemeyer Verlag, Tü- en que la fantasía no va tras estas
acudimos a la palabra como a un bingen, 1985. Cf. pp. 247-248. representaciones nuevas, sino que
lugar preservado (...) Toda una poesía 23 En un haiku profundo Matsuo Bashô el interés regresa siempre al objeto-
buscará siempre, para captar mejor ha asociado el canto de estos peque- imagen y pende de él interiormente,
lo que ama, deshacerse del mundo”. ños insectos con la mortalidad. El ins- encontrando gozo en la manera de su
Bonnefoy, Yves, L’improbable et au- tante de su canto contrasta así con la figuración imaginativa”, Hua, XXXIII,
tres essais, Éditions Gallimard, Paris, eternidad del anonadamiento: 37, 11-15.
1992, pp. 107-108. Nada 29 Levinas, Emmanuel, Autrement
20 DM, 102. en la voz de la cigarra dice, qu’être ou au-delà de l’essence,
21 Celan, Paul, Obras completas, p. 395. cuán pronto ha de morir. Kluwer Academic, 5.ª edición (1.ª edi-
DRÜBEN 24 Celan, Paul, Obras completas, p. 207. ción Martinus Nijhoff 1978), Paris,
Erst jenseits der Kastanien ist die DU DARFST mich getrost 2006, p. 70.
Welt mit Schnee bewirten: 30 DM, 6, 22 b.
Von dort kommt nachts ein Wind sooft ich Schulter an Schulter 31 La pérdida de un ser querido, ruptura
im Wolkenwagen mit dem Maulbeerbaum schritt de un vínculo que sostiene todas las
Und irgendwer steht auf dahier... durch den Sommer, posibilidades de comunicación exis-
Den will er über die Kastanien schrie sein jüngstes Blatt. tencial, puede significar el principio
tragen: 25 Gadamer, Hans-Georg, Op. cit., p. de una psicosis melancólica incura-
“Bei mir ist Engelsüß und roter 15. ble. Maldiney relata un caso clínico
Fingerhut bei mir! 26 Bonnefoy, Yves, Op. cit., p. 132. entre muchos otros: “Yo me acuerdo
Erst jenseits der Kastanien ist die 27 Nos referiremos en adelante, eco- de una muchacha que se me impone
Welt...” nomizando citas en la medida de lo como la mirada interior, extraña a

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todo, como el deseo sin falta, por ESPENBAUM, dein Laub blickt weiß el fracaso del encuentro con otros
tanto sin escisión, de la melancolia ins Dunkel. hombres. Dios (a quien Celan ha
absoluta. Ni una sola vez en su vida Meiner Mutter Haar ward nimmer puesto en duda después de la Shoa)
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le toco en suerte reír. Se acordaba de weiß. es más bien una figura que hace más
tener tan sólo dos años y haber ca- Löwenzahn, so grün ist die Ukrainie. amarga la soledad, y lejos de hacerla
APROXIMACIÓN FENOMENOLÓGICA A LA EXPERIENCIA POÉTICA EN PAUL CELAN

vado a medias su tumba en el jardín. Meine blonde Mutter kam nicht comprensible la torna más violenta.
Varías veces había intentado suici- heim. Pues, ¿cómo podría concebirse que
darse, sin la menor sombra de chan- Regenwolke, säumst du an den Dios haya sido el compañero de viaje
taje histérico, y cada vez en medio Brunnen? de una vida que a todas luces es o
de una especie de alegría reposada Meine leise Mutter weint für alle. ha sido desgraciada? En este sentido
y fascinante. Quería reunirse con su Runder Stern, du schlingst die es justificada la ironía de Emil Cio-
padre muerto, decía, a quien jamás goldne Schleife. ran: “X, quien ha sufrido de todo, se
había conocido”. Maldiney, Henri, Meiner Mutter Herz ward wund quejaba ante mí de no tener destino.
Penser l’homme et la folie, Éditions von Blei. Por el contrario, por el contrario: la
Jérôme Millon, 3e édition (1e édition Eichne Tür, wer hob dich aus den serie de vuestros fracasos es tan no-
1991), Grenoble, 2007, p. 14. Angeln? table que parece indicar un designio
32 Celan, Paul, OC, p. 73. Meine sanfte Mutter kann nicht providencial”. Cioran, Emil, Œuvres,
DER REISEKAMERAD kommen. Gallimard, Paris, 1995, p. 1666.
Deiner Mutter Seele schwebt voraus. 34 Celan, Paul, Gesammelte Werke in 36 Fabre, Jean-Henri, Das offenbare Ge-
Deiner Mutter Seele hilft die Nacht sieben Bänden, Dritter Band: Gedi- heimnis. Aus dem Lebenswerk des In-
umschiffen, Riff um Riff. chte III. Prosa. Reden. Herausgege- sektforschers, Zürich/Stuttgart, 1962,
Deiner Mutter Seele peitscht die ben von Beda Allemann und Stefan p. 229.
Haie vor dir her. Reichert unter Mitwirkung von Rolf 37 Celan, Paul, OC, p. 335.
Dieses Wort ist deiner Mutter Bücher, Suhrkamp, Frankfurt am DIE MANTIS, wieder,
Mündel. Main, 1983, p. 186. im Nacken des Worts,
Deiner Mutter Mündel teilt dein 35 No nos ocuparemos de la difícil in das du geschlüpft warst -,
Lager, Stein um Stein. cuestión de la trascendencia religio- muteinwärts
Deiner Mutter Mündel bückt sich sa en Celan. No nos parece que, en wandert der Sinn,
nach der Krume Lichts. la travesía hacia el otro la relación sinneinwärts
33 Celan, Paul, OC, p. 51. con Dios remedie o pueda remediar der Mut.

280 ARBOR CLXXXV 736 marzo-abril [2009] 267-280 ISSN: 0210-1963

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