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Angélica Paredes
Dr. Zeilina

SPAN 427
12 de diciembre del 2016
Arrancame la vida; sociedad patriarcal
Arráncame la vida es una novela de Ángeles Mastretta. Ella es una escritora mexicana

nacida en Puebla en el año de 1949. Estudió periodismo en la facultad de Ciencias Políticas y

sociales en la UNAM y empezó a colaborar en el periódico vespertino Ovaciones. En 1985

publicó su primera novela Arráncame la vida que recibió el Premio Mazatlán y tuvo un

inesperado éxito. En su obra asume una posición liberadora de la mujer oprimida que logra tener

control de su destino.

Arráncame la vida narra la historia de una adolecente de nombre Catalina la cual se casa

con un hombre mucho mayor que ella, Andrés Asensio. Andrés introduce a Catalina a la

sexualidad a una edad muy temprana rompiendo con todas las normas de la sociedad mexicana

en la posrevolución. Catalina le pareció interesante que Andrés disfruto del acto sexual mientras

ella no sintió nada. Ella se dio la tarea de investigar cómo es que una mujer llega a sentir un

orgasmo. Cuando lo logra se libera sexualmente y se vuelve erótica. Se casa con Andrés y

conforme madura, disfruta etapas de su vida mientras que otras le disgustan. Como por

ejemplo, disfruta de su sexualidad pero odia la maternidad. Andrés es un hombre infiel quien

tenía hijos con diferentes mujeres los cuales trae a vivir a la casa matrimonial. Catalina acepta a

sus hijastros y hasta llega a ser muy buena amiga de una de sus hijastras. También se vuelve

cómplice del incesto que ocurría entre Octavio y Maribel. Catalina se empieza a enfadar con la

vida que lleva a lado del general y busca como escapar de la monotonía. Cuando estaba

embarazada ella tiene relaciones sexuales con un pretendiente que tenía en el colegio. Luego
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conoce a Carlos Vives y también tiene relaciones íntimas con él. Cuando Andrés se entera de

esto, lo mata y Catalina queda desolada. Andrés muere a causa de envenenamiento ya que

excedió el consumo de té verde que tomaba y Catalina en lugar de ponerse triste casi se alegra.

Esta novela tiene un sin número de personajes pero para propósitos de este escrito solo

hablare de los personajes más importantes. La protagonista es Catalina Guzmán. El padre de

Catalina se llama Marco, su hermanos son: Teresa, Bárbara, Pía, Marcos y Daniel. Catalina

también tenía amigas ellas eran, Pepa y Mónica. Ella tuvo dos hijos con Andrés, ellos son:

Verania y Sergio. Aparte de sus hijos, ella también cuidaba a los hijos biológicos de Andrés.

Ellos son: Virginia, Octavio, Marta, Marcela, Lilia y Adriana. Por último, Rodolfo es el

compadre de Andrés quien después se convirtió en su enemigo.

La novela tiene un narrador en primera persona. Catalina es quien nos informa de los

pormenores de la historia apoderándose de las letras. Esta novel se desarrolla en los años después

de la revolución mexicana. La ubicación es en el estado de Puebla. Los sucesos toman lugar

mayormente en la Casa de Catalina y Andrés, así como en las calles de puebla donde a ella le

gustaba pasear. Parte de la novela también toma lugar en la Ciudad de México y en Acapulco.

En esta novela se pueden encontrar varios temas como, el amor, la traición, el adulterio,

el incesto, la revolución mexicana, la corrupción, y la diferencia de género. Para propósitos de

este ensayo me enfocaré en resaltar el estatus social que una sociedad patriarcal le adjudicaba a

la mujer en los años posrevolucionarios usando como ejemplo al personaje de Catalina y como

ella respondía a dicho papel.

De acuerdo con el articulo Sociedad patriarcal y censura: el caso de la revista

Chavespectaculos en Costa Rica, el autor Julián Monge Nájera describe una sociedad patriarcal
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de la siguiente manera, “en el modelo de la sociedad patriarcal, la educación y el poder

económico son para el hombre. En este modelo la mujer es vista como un ser de segunda clase,

con una sexualidad maligna que debe reprimirse, y limitada a dar placer e hijos al hombre

(Méndez, 1988).” En esta novela, el personaje de Catalina sufre en carne propia las

consecuencias de vivir en una sociedad donde el hombre tiene privilegios que una mujer no,

simplemente por el hecho de pertenecer al sexo masculino.

Mastretta resalta el poder que el hombre mexicano tenia sobe la mujer en los años

después de la revolución mexicana. Esto se puede notar específicamente en la manera en que

Andrés se comporta con Catalina. Mastretta escribe, “Andrés se levantaba con la luz, dando

órdenes como si fuera yo su regimiento……- Orale guevoncita. ¿Qué haces ahí pensando como

si pensaras? Te espero abajo, cuento a trecientos y me voy…..-Doscientos noventa y ocho,

doscientos noventa y nueve. Otra vez no te dio tiempo de ponerte las botas. Vieja Lenta (18).”

De la manera que Andrés le habla a Catalina se asimila como cuando un padre le habla a un hijo,

no como un marido le hablaría a su esposa. Él tiene el control total sobre Catalina. Ella no tiene

la libertad de levantarse a la hora que ella desee. Le da un tiempo límite para que se vista y baje

con él. Ella como esposa típica mexicana en los años después de la revolución, cumple su

cometido. Le obedece a Andrés y rápidamente empieza a prepararse para cumplir con el tiempo

límite que le regalo su esposo quien es la autoridad de la casa. En el artículo, Jugando con el

melodrama: género literario y mirada femenina en “Arráncame la vida” de Ángeles Mastretta,

la autora Aida Apter-Cragnolino explica, “la imposición brutal del poder y la imposición brutal

de la voluntad del hombre sobre la mujer, tal como aparece desde las primeras páginas de la

novela, configura casi un tópico que ha encontrado múltiples representaciones en las novelas

cuyas historias es periodo posterior a la revolución.” Mastretta resalta este poder en los
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personajes de Catalina y Andrés. Andrés siendo el dueño y señor de Catalina apoderándose de

totalmente de su vida y Catalina representado la mujer oprimida que complace a su marido en

todo lo que guste. No tiene poder de su rutina de dormir porque hasta eso le controla Andrés.

Además, en la cita, “. ¿Qué haces ahí pensando como si pensaras?” Andrés piensa que porque

Catalina es mujer ella no tiene la capacidad de pensar y la trata como una persona ignorante a la

cual se le tiene que indicar que decir y que hacer por el simple hecho de ser mujer tratándola

como persona de segunda clase intelectualmente.

Más sin embargo, Mastretta se enfoca en dale un papel más importante a la figura

femenina en esta novela lo cual contradice el papel de la mujer en una sociedad patriarcal.

Catalina es la narradora absoluta. Ella tiene el control de lo que se puede saber en la novela.

Dándole mayor valor que el que les da a los personajes masculinos de la novela. Tanta es la

libertad que Catalina tiene como narradora que hasta se daba el lujo de ridiculizar a algunos

personajes masculinos sin sentir ninguna pena ni remordimiento al proyectarlos como líderes

políticos tontos que se creen inteligentes Como por ejemplo,

“El general era tan simple como una carne con su tortilla de

harina.”

“ ..al secretario de Agricultura, que no sabía ni hablar porque era

lelo….” (158)

“Era menos tonto de lo que me imagine.” (237)

El simple hecho de comparar aun general con un simple taco de carne sin sabor, expresa la

imagen de simpleza que Catalina proyecta en cuestión al sexo masculino. Ella pensaba que los

hombres eran lo más simple que se puede encontrar en el mundo, sin chiste ni sabor. En el
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artículo, Mastretta y sus protagonistas, ejemplos de emancipación femenina, la autora Eva

Nuñez-Mendez, concuerda que Mastretta presenta a la mujer como un ser superior en la

literatura rompiendo con las normas de una sociedad donde las mujeres se perciben como seres

inferiores a los hombres. Nuñez-Mendez explica, “Esta escritora logra superponer a la mujer en

la balanza de los dos sexos, aparentemente equilibrada, pero indiscutiblemente deja a la mujer en

un plano superior en lo que a las relaciones conyugales se refiere.” No madamas en ese aspecto,

también en el aspecto de poder contar una historia como a la narradora se le plazca la gana.

Cuando un escritor le da el poder a un personaje de contar la historia desde su punto de vista,

este puede contar la historia a su conveniencia. Catalina tomo ese privilegio plasmando su sentir

y su perspectiva de mujer. Igual puede ridiculizar a los hombres como también puede modificar

la imagen de la mujer a su conveniencia. Así es como Catalina se adueña de la novela y cambia

la imagen de la típica mujer mexicana en los años posrevolucionarios.

Otra de los papeles que una sociedad patriarcal le adjudicaba a la mujer es el ser la mujer

de. En este caso la mujer de Andrés Asencio, que debía estar dispuesta a servirle en lo que fuera

necesario, pero el mérito de tener una familia distinguida, una cena en orden, o una carrera

política exitosa era para el marido de dicha mujer. Aunque, Catalina ayudaba mucho en los

roles sociales de Andrés, ella nunca fue reconocida. Ella era como la sombra de Andrés mientras

el recibía todos los elogios y hacia todas las decisiones familiares sin consultar a Catalina.

Andrés era visto como un héroe en la política mientras que Catalina era vista como la mujer del

gobernador. Tener a una mujer a su lado era importante ya que esto le daba una imagen familiar

al político que le ayudaba a acercarse a sus constituyentes y así poder escalar en la política. La

mujer se veía como un adorno que no tenía nada que ver con la política en los ojos del público

aunque esta si era participe en los negocios del marido. La sociedad le daba un título a cada uno
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dentro de la política, Andrés el gobernador de Puebla, el héroe que lucho en la revolución

mexicana y Catalina era la esposa del gobernador, la mujer que estaba a cargo de los eventos

sociales que Andrés organizaba y la familia que Andrés tenía. Catalina era usada como sirvienta,

dama de compañía, imagen familiar, la madrastra que cuidad a los hijos de Andrés y al final no

tiene ninguna autoridad. Por ejemplo, la autora escribe,

“ ….. Vigila que Lilia no lleve nada más que trajes de baño y

pantalones, que lleve algo de vestir porque la van a invitar los

Alatriste una noche.

- ¿Ya organizaste?- Le pregunte.

-Sí, ya organicé. Y no me lo preguntes en ese tono. Es mi hija y yo

velo por su futuro. Tú no te metas.

-Cuando te conviene es tu hija, cuando no te conviene es nuestra

hija. A los diez años me la entregaste con un discurso sobre la

necesidad de que yo fuera como su madre. Ahora ya nada más es

hija tuya.

-Porque ahora necesita alguien que le asegure el futuro, no quien

le limpie los mocos y le ayude con las tareas.

Cuando se requería ayuda con cualquier problema político o familiar que se le presentara a

Andrés, Catalina lo auxiliaba, pero cuando era momento de tomar decisiones importantes sus

opiniones no tenían valides. No es suficientemente inteligente para opinar en cuanto al futuro

de su hijastra, pero si está calificada para hacer trabajos laborales como es el hecho de cumplir

con las tareas de un ama de casa y una madre. Ante estas situaciones, Catalina toma una postura
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rebelde. Por ejemplo, cuando Octavio y Marcela decidieron dormir en una sola cama, Catalina

no pidió la opinión de Andrés para aceptar que los medios hermanos durmieran juntos. También,

cuando Lilia no quería casarse con el novio que su padre le había escogido, Catalina le dijo a

Lilia que no obedeciera a su padre a pesar de que Catalina sabía que Andrés no le gustaba que le

diera consejos a su hija. Con respecto a lo que servirían de cena, en uno de los viajes a Puebla,

Catalina toma control y se venga atacando el estómago de Andrés y los invitados. Catalina narra,

Llame a Puebla para hablar con Matilde la cocinera. Le pedí que

hiciera lomo en chile pasilla para la noche.

-¿No será muy pesado para la noche, señora?....

-¿No será mejor un pollo con hierbitas de olor? Ese le gusta mucho

al general.

Catalina no está para complacer a su marido y ella lo muestra. En el artículo. Naturaleza y

cultura: Arráncame la vida de Angeles Mastretta, escrito por Leon Bodevin de Murray State

University, el autor resalta la otra cara de la mujer mexicana, “ante esta circunstancia Catalina

desea establecer que la mujer es una realidad diferente de la leyenda simplista redactada por la

cultura, que es una conciencia individual y que, en asuntos personales, ella puede tomar sus

propias decisiones.” Ella esta consiente del papel que la sociedad mexicana le adjudica pero en

muchas ocasiones se resiste a seguirlas y se apodera de sus deseos aunque estos perjudiquen a su

marido de una y otro manera.

Como mujer y madre, la sociedad impone un papel específico cuando se trata de la

sexualidad de una mujer. Como mujer, debe ser decente y llegar virgen al matrimonio, lo cual en

una sociedad patriarcal es responsabilidad de los padres que su hija llegue pura y casta al altar
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Catalina tuvo relaciones sexuales con Andrés cuando la llevo a la playa. Lo que es aún más

irónico es que los papas no dijeron nada, claro se esperan ciertas actitudes de una mujer, pero

esto se puede modificar siempre y cuando sea “conveniente” para el bienestar de la mujer o de la

familia de dicha dama. La escritora dice, “Cuando acabo la semana me devolvió a mi casa con la

misma frescura con que me había sacado y desapareció como un mes. Mis padres me recibieron

de regreso sin preguntas ni comentarios.” Catalina no llego virgen al matrimonio quebrantado la

norma de acuerdo con la sociedad. Una vez que Catalina se casa y empieza a procrear, su

identidad sexual se convierte en un tabú de acuerdo a las expectativas de la sociedad. Se le ve

como a una madre a la cual no se pueden imaginar teniendo sexo. Hasta Andrés vio a Catalina

así ya que cuando estaba embarazada de su primer hija, el dejo de tener relaciones sexuales por

un tiempo. “Todo el embarazo fue un fraude. Andrés no volvió a tocarme dizque para no lastimar

al niño y eso me puso más nerviosa….” Andrés ya no la veía como amante si no como la madre

de su hijo y cuando estaba embarazada no le atraía. En el artículo, Reading Angeles Mastretta’s

Arrancame la vida through the Lens of Mexico’s Golden Age of Cinema, la autora Cinthya

Ducan, reitera la analogía de la madre como un ser sexual. Ella expresa, “Cati next challenges

the convention that good mothers are asexual beings and that motherhood is woman’s most

rewarding role.” Catalina como la mujer rebelde que es, demuestra todo lo contrario. Catalina

dice,

Tenía yo diecisiete años cuando nació Verania. La había cargado

nueve meses como una pesadilla. Le había visto crecer a mi cuerpo

una joroba por delante y no lograba ser una madre enternecida. La

primera desgracia fue dejar los caballos y los vestidos entallados,

la segunda soportar unas agruras que me llegaban hasta la nariz.

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Odiaba quejarme, pero odiaba la sensación de estar continuamente

poseída por algo extraño. Cuando empezó a moverse como un

pescado nadando en el fondo de mi vientre creí que saldría de

repente y tras ella toda la sangre hasta matarme.

Catalina rompe con el romance del embarazo y la maternidad. Ella hubiese preferido no estar

embarazada para seguir disfrutando de las cosas que el embarazo no le permitía. Entre ellas, el

tener relaciones sexuales con su esposo.

Por lo general, se ve a la mujer como fuente de cuidado y más cuando se trata de cuidar

de la salud del esposo. Mastretta plasma todo lo contrario cuando se trata de que Catalina se

ocupe de la salud de Andrés. Cuando Andrés estaba enfermo, Catalina lo toma como una

exageración. La autora escribe, “– No seas exagerado-dije-. Todo el mundo se cansa, llevas

meses del tingo al tango. Deberías ir a Acapulco más seguido.” Ella no tiene preocupación

alguna. Se puede ver que ni le importaba lo que pasara con Andrés. Rompe con la norma de la

sociedad donde la mujer debe de cuidar del marido en la enfermedad. Aunque ella misma

reconoce que se veía diferente, ella sigue como si nada y no quiere llamar a los doctores para que

lo revisen. “Durante las últimas semanas lo vi adelgazar y encogerse de apoco, pero esa tarde

envejecía en minutos. De pronto el saco resulto enorme para él.” Catalina actúa fría y sin

sentimientos cuando la salud de Andrés se deteriora y se puede asumir que ella contribuyo a

dicha muerte. En el artículo Tragicomedia de la transgresión en Arráncame la vida por Linda

Egan, la autora critica esta faceta que toma Catalina. Ella dice, “Con una frialdad espantosa,

nuestra protagonista andrógina se entera de la manera de transformar en arma ofensiva el cliché

de la mujer que cuida a los enfermos. Con un té que al principio cura y a la larga mata, ella

asesina a Andrés sonriendo, compadeciendo y callando.” Es así como Catalina modifica el papel
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que la sociedad le adjudicaba haciendo lo contrario. Ante los ojos de la sociedad, ella cuido de la

salud de su marido pero en realidad ella lo mato.

Para concluir, Arráncame la vida, me pareció un libro interesante ya que Mastretta

refleja el pensar y el sentir de muchas mujeres mexicanas que se sentían oprimidas pero que no

se atrevieron a expresarlo. Catalina representa a millones de mujeres que aún viven en una

sociedad patriarcal que no les permiten expresar sus sentimientos o deseos simplemente porque

no es correcto hacerlo. Así mismo, se convierte en una inspiración para estas mujeres ya que el

personaje logra escapar de las normas y hacer lo que se le daba su regalada gana. Al mismo

tiempo, Mastretta critica la posición que la sociedad mexicana les daba a las mujeres en esa

época. Por un parte, se esperaba que la mujer fuera pura y casta y por otro lado, el marido

esperaba que fuera una experta cuando se trataba de complacerlo en la cama. Más sin embargo,

una vez que la mujer gozaba de su sexualidad, esta era vista como una mujer indecente.

Irónicamente, actualmente aún hay sociedades donde la mujer es tratada como si estuvieran

viviendo en esa época. No se les permite estudiar porque es una tradición que viene de años y

años atrás. También, no son dueñas de su propio cuerpo ya que algunos maridos les prohíben

vestir ciertas prendas de ropa que no son adecuadas para una mujer casada. En lo personal, me

gusto la novela hasta cierto punto. Por ejemplo, me gusta la idea de la mujer con voz e

independiente, pero no me gusta el personaje de Catalina ya que ella se fue de un extremo al

otro. Pienso que es muy bonita la liberta pero como mujer, debe de haber respeto a sí misma. En

el personaje de Catalina triunfó el libertinaje y se perdió el respeto a sí misma.

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Bibliografía

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Golden Age of Cinema.” Rocky Mountain Review 63.2 (2009): 171-93.Web. Oct 23. 2016.

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Crítica Literaria Latinoamericana, 29.57 (2003): 159-169. Nov.05.2016.Web.

Apter-Cragnolino, A. (1995). Jugando con el melodrama: Género literario y mirada femenina en

“Arráncame la vida” de Ángeles Mastretta, Confluencia, 11(1), 126-133. Oct, 25 2016.web.

Egan, Linda. “Tragicomedia De La Trasgresión En Arráncame La Vida.” Signos Literarios, 3 (2006): 83.
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Napiorski, María Patricia. "Trasgresion y (re)articulacion del arquetipo de la madre/esposa en la

novela Arrancame la vida de Angeles Mastretta." Explicación de Textos Literarios, vol. 33, no. 2,
2004, p. 18+. Academic OneFile