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Primera guerra mundial

Antecedentes de la Primera Guerra Mundial

Desde el 1871 hasta el 1914 Europa vivió lo que se ha dado en llamar la “Paz
Armada”, que fue en extremo beneficiosa para el desarrollo económico, cultural y
científico de las naciones industriales europeas. Sin embargo, entre las grandes
potencias existía mucho recelo, lo que les inducia a armarse constantemente. De
allí el nombre que se le ha dado a este periodo.

Inicio

La Primera Guerra Mundial marcó el primer gran conflicto internacional del siglo
XX. Fue un conflicto bélico global centrado en Europa que comenzó en el verano
de 1914. La lucha terminó a finales del año 1918. Este conflicto involucró a todas
las grandes potencias del mundo, las cuales se reunieron en dos alianzas
opuestas: los Aliados (en torno a la Triple Entente) y los Imperios Centrales. En la
Primera Guerra Mundial, más de 70 millones de efectivos militares, incluidos 60
millones de europeos, se movilizaron en una de las mayores guerras de la historia.
Más de 9 millones de combatientes perdieron la vida, debido en gran parte a los
grandes avances tecnológicos en potencia de fuego.

Algunas de las causas tienen que ver con algunos cambios que involucraban a
todas las potencias:

 El primer cambio tiene lugar en el contexto de la globalización que estaba


viviendo la economía mundial. El ascenso de Estados Unidos y Japón,
significó el paso de un concierto europeo a un concierto mundial de
potencias. Dos guerras en el tránsito de siglo ejemplifican esta
transformación: la guerra hispano-norteamericana de 1898 y la guerra ruso-
japonesa de 1905.
 El segundo cambio vino propiciado por las transformaciones tecnológicas
de la segunda revolución industrial. El dominio de las nuevas tecnologías e
industrias provocó una nueva correlación de fuerzas entre las potencias. La
cada vez más poderosa Alemania comenzó a desafiar la hegemonía
británica. Este desafío se concretó en dos terrenos: la creciente
competencia de la economía germana y el acelerado rearmen naval
alemán.
 La tercera transformación la encontramos en la expansión colonial europea
de fines del siglo XIX. La extensión de los imperios coloniales exacerbó la
pugna por territorios y mercados entre las potencias industriales europeas.
La competencia no solo se dio por razones económicas. A menudo
cuestiones políticas, geoestratégicas o de prestigio estuvieron detrás de los
conflictos coloniales.
Además de ello la expansión colonial tuvo importantes consecuencias:

 Los roces y conflictos entre las potencias tuvieron lugar en un marco


geográfico mucho mayor, pudiendo tener lugar en cualquier sitio del mundo.
 La tendencia de los imperios a crear economías cerradas imperiales
propició una feroz lucha por territorios. Posteriormente, cuando el reparto
colonial hubo concluido, las potencias se lanzaron a una guerra de
aranceles. El proteccionismo comercial fue otro elemento que enrareció las
relaciones internacionales.
 En este contexto, las rivalidades territoriales entre las potencias europeas
se agudizaron. Estos conflictos estuvieron en el origen de la primera guerra
mundial:

1. Rivalidad franco-germana, ineludible desde la anexión de Alsacia-


Lorena por Alemania en 1870.
2. Entre Alemania y Francia por la rivalidad que dejo la Guerra Franco-
Prusiana.
3. Entre Rusia y Austria por la hegemonía en la península de los Balcanes.
4. Entre Inglaterra y Alemania por la competencia comercial y colonial.
5. Las fricciones políticas entre Inglaterra, Francia y Rusia, a causa de la
respectiva expansión colonial, fueron también intensas, pero fueron dejadas
de lado para dar paso a la configuración de alianzas internacionales.
6. Aparte de las fuertes rivalidades coloniales, las potencias industriales se
enfrentaron en el plano netamente económico. Lucharon entre sí por
conseguir mercados para sus productos y retenerlos por conquista.

Un último elemento que no debemos olvidar es la rivalidad psicológica entre los


pueblos. El nacionalismo fue sistemáticamente alentado por la prensa y por las
campañas de militares y grandes industriales y aceptado de forma entusiasta por
partes significativas de los pueblos. Los casos más evidentes se dieron en
Francia, Alemania y Gran Bretaña. El odio al vecino fue más la norma que la
excepción.

El pretexto para el inicio de la “Gran Guerra” (era así como se llamaba a la


Primera Guerra Mundial antes del estallido de la Segunda Guerra Mundial) se dio
cuando ocurrió el asesinato del archiduque Francisco Fernando, heredero de la
corona austriaca, en Sarajevo (junio de 1914), por parte de una organización
nacionalista serbia "Mano Negra". Austria quiso aprovechar la oportunidad para
acabar con Serbia, en esta política la apoyo Alemania. Entonces Rusia declaro la
guerra a Austria, mientras Alemania lo hacía a Rusia y Francia.
Alianzas entre los países participantes

Durante la Primera Guerra Mundial, las Potencias de la Entente -- Gran Bretaña,


Francia, Serbia y la Rusia Imperial (a las que más tarde se unieron Italia, Grecia,
Portugal, Rumania, japon y Estados Unidos) -- lucharon contra las Potencias
Centrales: Alemania y Austria-Hungría (a las que más tarde se incorporaron la
Turquía Otomana y Bulgaria).

Teniendo como líderes:

 En los Imperios Centrales:


 Guillermo II: Emperador de Alemania.
 Francisco José: Emperador de Austria-Hungría hasta 1916.
 Carlos I: Emperador de Austria-Hungría desde 1916.
 Abdul Hamid II: Emperador de Turquía.

 En los Triple Entente:


 Herbert Henry Asquith: Primer Ministro de Inglaterra hasta 1916.
 David Lloyd George: Primer Ministro de Inglaterra desde 1916.
 Raymond Poincaré: Presidente de Francia.
 Nicolás II: Emperador de Rusia hasta 1917.
 Alejandro Kerenski: Presidente de Rusia en 1917.
 Víctor Manuel III: Rey de Italia.
 Woodrow Wilson: Presidente de Estados Unidos.

Principales batallas:

 Se inicia con la Invasión de Alemania a Bélgica. Los alemanes invaden y


ocupan Bélgica. Italia rompe alianzas con las potencias centrales.
 Invasión de Francia, los alemanes avanzan a Francia dirigidos por el
general Von Kluck, pero son detenidos por el general francés Joffré en la
Primera Batalla de Marme.
 Invasión de Alemania. Rusos invaden Prusia Oriental, pero los ejércitos
alemanes logran derrotarlos en las batallas de Tannemberg y de los Lagos
Masurianos
 Guerra de Trincheras: Los franceses desarrollan una guerra de desgaste
frente a Alemania mediante las trincheras que se extendieron desde el
frente occidental, con líneas paralelas, desde Suiza hasta el Mar del Norte.
 Bloqueo a las potencias centrales. Francia e Inglaterra decretaron el
bloqueo a Alemania.
 Guerra Submarina. Frente a las medidas de los aliados, Alemania declaro
zona de guerra, a los mares que rodeaban las islas británicas, con el fin de
garantizar el aprovisionamiento de materias primas a su industria. Se
produjo entonces el hundimiento de la embarcación norteamericana
Lusitana que determino el ingreso de los Estados Unidos en la Guerra.
EE.UU intervino para proteger el comercio internacional y sus privilegios e
inversiones en el extranjero.
 Derrota rusa en el Frente Oriental. Rusia se retira de la guerra, por las
derrotas frente a los alemanes y el triunfo de la Revolución Rusa
(revolución bolchevique), se vieron en la obligación de firmar el tratado de
Brest-Litovsk. Alemania inicia una contraofensiva terrestre. Se produce el
asedio a Francia, pero los alemanes son vencidos en la Segunda Batalla de
Marne.
 Revolución Socialista de Noviembre en Alemania que forzaría la Abdicación
del Káiser Guillermo II (fin de la monarquía alemana). El gobierno
provisional planteo el armisticio, firmado en el bosque de Compiegne que
pondría Fin a la guerra.

Final

En abril de 1917, se produjo un cambio decisivo en las hostilidades cuando la


política de guerra submarina irrestricta de Alemania sacó a Estados Unidos del
aislacionismo y lo llevó al centro del conflicto. Las nuevas tropas y el nuevo
material de la Fuerza Expedicionaria Estadounidense (American Expeditionary
Force, AEF) bajo el mando del General John J. Pershing, junto con el bloqueo en
constante aumento de los puertos alemanes, a la larga ayudaron a cambiar el
equilibrio del esfuerzo bélico a favor de la Entente.

Apenas conseguida, esta ventaja para las fuerzas de la Entente fue compensada
por los sucesos que tuvieron lugar en el teatro de operaciones oriental de la
guerra. Desde comienzos de 1917, Rusia, una de las potencias principales de la
Entente, había sufrido una gran agitación. En febrero de ese año, el mal manejo
de la guerra por parte del gobierno zarista había contribuido a inspirar un
levantamiento popular: la Revolución de Febrero. La revolución forzó la abdicación
del zar Nicolás II y puso en el poder un Gobierno Provisional de facciones liberales
y socialistas, que a fin de cuentas estaba bajo el mando del miembro del partido
Socialista Revolucionario, Alexander Kerensky. Este breve experimento con la
democracia pluralista fue caótico y, en los meses del verano, el continuo deterioro
del esfuerzo bélico y una situación económica cada vez más calamitosa provocó
disturbios por parte de los trabajadores, los soldados y los marinos rusos ("Los
días de julio").

El 24 y 25 de octubre de 1917, las fuerzas bolcheviques (izquierda socialista) al


mando de Vladimir Lenin tomaron los principales edificios del Gobierno y asaltaron
el Palacio de Invierno y luego la sede del nuevo Gobierno en la capital de Rusia,
Petrogrado (actual San Petersburgo). La "Gran Revolución Socialista de Octubre",
el primer golpe marxista exitoso de la historia, desalojó al ineficaz Gobierno
Provisional y finalmente estableció una República Socialista Soviética bajo la
dirección de Lenin.
Pero el efecto inmediato de la Revolución Rusa en el escenario europeo fue una
brutal y prolongada guerra civil en tierras rusas (1917-1922) y la decisión de los
líderes bolcheviques de hacer las paces por separado con la Alemania del Kaiser.
Cuando las negociaciones fracasaron totalmente debido a las exigencias
alemanas, el ejército alemán lanzó una ofensiva general en el frente oriental, que
produjo el Tratado de Paz de Brest-Litovsk el 6 de marzo de 1918.

Pese a los éxitos alemanes (sacar a la Rusia bolchevique de la guerra a fines del
invierno de 1918 y llegar a las puertas de París durante el verano), los ejércitos de
la Entente repelieron al ejército alemán en el río Marne. En los meses del verano y
el otoño de 1918, avanzaron sostenidamente contra las líneas alemanas en el
frente occidental ("Ofensiva de los cien días").

Las Potencias Centrales comenzaron a rendirse, comenzando con Bulgaria y el


Imperio Otomano, en septiembre y octubre, respectivamente. El 3 de noviembre,
las fuerzas austrohúngaras firmaron una tregua cerca de Padua, Italia. En
Alemania, el amotinamiento de marinos de la armada en Kiel desencadenó una
amplia revuelta en las ciudades costeras alemanas, y en las principales áreas
municipales de Hannover, Frankfurt del Meno y Munich. Consejos de trabajadores
y soldados, basados en el modelo soviético, iniciaron la llamada "Revolución
alemana"; la primera "república de consejos" (Räterrepublik) fue establecida bajo
la dirigencia del demócrata social independiente (USPD) Kurt Eisner en Bavaria. El
sólido Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD), bajo la dirigencia de Friedrich
Ebert, veía a los consejos recientemente establecidos como un elemento
desestabilizador, y abogaba, en su lugar, por las demandas de la opinión pública
alemana de una reforma parlamentaria y paz.

El 9 de noviembre de 1918, en medio del descontento generalizado y tras haber


sido abandonado por los comandantes del ejército alemán, el emperador (káiser)
Guillermo II abdicó el trono alemán. Ese mismo día, el delegado del SPD Philipp
Scheidemann proclamó la República de Alemania, con un gobierno provisional
dirigido por Friedrich Ebert. Dos días más tarde, representantes alemanes,
dirigidos por Matthias Erzberger del partido Centro Católico (Zentrum), se
reunieron en un vagón en el Bosque de Compiègne con una delegación de las
potencias victoriosas de la Entente al mando del Mariscal de Campo francés
Ferdinand Foch, comandante general de las fuerzas de la Entente, y aceptaron los
términos del armisticio.

A las 11 de la mañana del 11 de noviembre (11/11) de 1918 cesaron los combates


en el frente occidental. La "Gran Guerra", como la llamaron sus contemporáneos,
había llegado a su fin, pero la enorme repercusión del conflicto en las esferas
política, económica, social e internacional resonaría durante las décadas
siguientes.
Consecuencias

Durante la primera Guerra Mundial murieron, aproximadamente, 9 millones


de personas (entre civiles y militares). El número de heridos, entre civiles y
militares ascendió a cerca de 30 millones.
Desintegración del Imperio Otomano y del Imperio Austro-Húngaro
Fortalecimiento de los Estados Unidos de América en el escenario político,
militar y económico mundial.
Creación de la Liga de Naciones (llamada también Sociedad de Naciones)
con el objetivo de garantizar la paz mundial.
Firma del Tratado de Versalles que impuso una serie de penalidades a la
derrotada Alemania, que sería el origen del revanchismo alemán, que
provocaría el estallido de la Segunda Guerra Mundial.
Crisis económica en Europa, a causa de la devastación causada por la
“Gran Guerra” y también por los elevados gastos militares de las naciones
beligerantes
Desarrollo de varios armamentos de guerra como, por ejemplo, tanques de
guerra y aviones.

Tratado

Después de la devastación de la Primera Guerra Mundial, las Potencias


Occidentales victoriosas impusieron una serie de duros tratados a los países
derrotados. Estos tratados despojaron a las Potencias Centrales (Alemania,
Austria-Hungría, junto con la Turquía otomana y Bulgaria) de importantes
territorios y les impusieron significativos pagos de compensaciones.

Casi nunca antes el mapa de Europa se había visto alterado tan


fundamentalmente. Como consecuencia directa de la guerra, los Imperios alemán,
austro-húngaro, ruso y otomano dejaron de existir. El Tratado de Saint-Germain-
en-Laye del 10 de septiembre de 1919 estableció la República de Austria,
formada por la mayoría de las regiones de habla alemana quitadas al Estado de
los Habsburgo. El Imperio Austríaco cedió tierras de la corona a Estados
sucesores recientemente establecidos como Checoslovaquia, Polonia y el Reino
de los eslovenos, croatas y serbios al que se llamó Yugoslavia en 1929. También
cedió el Tirol del Sur, Trieste, Trentino e Istria a Italia, y Bucovina a Rumania. Un
importante punto del tratado impedía que Austria comprometiera su reciente
independencia. Esta restricción le prohibía efectivamente que se unificara con
Alemania, un objetivo largamente deseado por los "pangermanistas" y una
atractiva meta para el austríaco Adolf Hitler y su Partido Nacionalsocialista (Nazi).

La otra parte de la Monarquía austrohúngara, Hungría, también se convirtió en un


Estado independiente: en virtud de los términos del Tratado de Trianon
(noviembre de 1920), Hungría le cedió Transilvania a Rumania; Eslovaquia y
Rutenia Transcarpática a la recientemente formada Checoslovaquia; y otras tierras
de la corona húngara a la futura Yugoslavia.
El Imperio Otomano firmó el Tratado de Sèvres el 10 de agosto de 1920, que
puso fin a las hostilidades con las Potencias Aliadas; pero poco después comenzó
la Guerra de la Independencia Turca. La nueva República de Turquía, establecida
como consecuencia, firmó el Tratado de Lausana en 1923, que invalidó al de
Sèvres y dividió efectivamente al antiguo Imperio Otomano.

En enero de 1918, unos diez meses antes del final de la Primera Guerra Mundial,
el presidente estadounidense Woodrow Wilson había escrito una lista de objetivos
propuestos para la guerra a los que llamó los "Catorce puntos". Ocho de estos
puntos trataban específicamente sobre acuerdos territoriales y políticos
relacionados con la victoria de las Potencias de la Entente, incluyendo la idea de
la autodeterminación nacional de las poblaciones étnicas de Europa. El resto de
estos principios se concentraba en evitar la guerra en el futuro, y en el último
proponía que una Liga de Naciones arbitrara futuras contiendas internacionales.
Wilson esperaba que su propuesta diera lugar a una paz justa y duradera, una
"paz sin victoria" a fin de terminar la "guerra para poner fin a todas las guerras".

Cuando los líderes alemanes firmaron el armisticio, muchos de ellos creían que los
Catorce Puntos formarían la base del futuro tratado de paz, pero cuando los jefes
de gobierno de Estados Unidos, Gran Bretaña, Francia e Italia se reunieron en
París para discutir los términos del tratado, el contingente europeo de los "Cuatro
Grandes" tenía otros planes. Como consideraban que Alemania era el principal
instigador del conflicto, las Potencias Aliadas europeas finalmente impusieron en
el tratado obligaciones particularmente estrictas sobre la derrotada Alemania.

El Tratado de Versalles, presentado a los líderes alemanes para que lo firmaran


el 7 de mayo de 1919, forzaba a Alemania a ceder territorios a Bélgica (Cantones
del Este), Checoslovaquia (distrito de Hultschin) y Polonia (Poznan, Prusia
Occidental y Alta Silesia). Alsacia y Lorena, anexadas en 1871 después de la
Guerra Franco-Prusiana, volvieron a Francia. Todas las colonias alemanas de
ultramar se convirtieron en Mandatos de la Liga de Naciones, y la ciudad de
Danzig, con mayoría étnica alemana, se convirtió en una ciudad libre. El tratado
exigía la desmilitarización y la ocupación de la región del Rin, y un estatus
especial para el Saarland bajo control francés. El futuro de las áreas del norte de
Schleswig en la frontera entre Dinamarca y Alemania y partes de Alta Silesia se
determinaría mediante plebiscitos.

Quizás la parte más humillante del tratado para la derrotada Alemania era el
Artículo 231, comúnmente conocido como "Cláusula de Culpabilidad de la
Guerra", que obligaba a Alemania a aceptar la responsabilidad absoluta del inicio
de la Primera Guerra Mundial. Como tal, Alemania era responsable de todos los
daños materiales, y el primer ministro de Francia, Georges Clemenceau, insistió
particularmente en imponer enormes pagos de compensación. Conscientes de
que Alemania probablemente no podría pagar una deuda tan elevada,
Clemenceau y los franceses de todos modos temían enormemente que Alemania
se recuperara con rapidez y emprendiera una nueva guerra contra Francia. Por lo
tanto, en el sistema de tratados de la posguerra, los franceses intentaron ponerle
trabas a los esfuerzos alemanes por recuperar su superioridad económica y
rearmarse.

El ejército alemán se limitaría a 100 mil hombres y se prohibiría el servicio militar


obligatorio. El tratado restringía la Armada a buques de menos de 100 mil
toneladas y contenía una prohibición de adquirir o tener una flota de submarinos.
Además, Alemania tenía prohibido tener fuerza aérea. Alemania estaba obligada a
llevar adelante juicios por crímenes de guerra contra el káiser y otros líderes por
emprender una guerra de agresión. El Juicio de Leipzig, sin el káiser ni otros
líderes nacionales importantes en el banquillo de los acusados, tuvo como
consecuencia principalmente absoluciones y fue ampliamente percibido como una
farsa, incluso en Alemania.

 Aníbal G. (2015). Priemera Guerra mundial. noviembre 10, 2017, de Enciclopedia web Sitio
web: http://www.historiacultural.com/2010/11/primera-guerra-mundial.html
 Freddy G. (2017). Primera Guerra Mundial. Noviembre 10, 2017, de Blog Sitio web:
https://respuestas-cortas.blogspot.mx/2015/07/quienes-fueron-los-lideres-de-la.html

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