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3. La familia campesina’ La familia ocupa un importante lugar en la literatura sociolégica. Ello resulta evidente no sdlo por las nume- fosas obras consagradas a ella,' sino también por la po- sicién que ocupa en la mayoria de los sistemas tedricos © en los libros de texto generales sobre problemas socio- Idgicos y etnogréficos. La especial importancia del tema radica en la significacién de la familia como grupo o ins- titucién primarios en relacién con todos los demés. Al igual que sucede con la sociologia industrial o la sociolo- gia de las profesiones, la mayoria de los esquemas ma- Grosociolégicos consideran la sociologia de la familia como una disciplina cientifica separada con su propio ‘objeto, su propia terminologia y su propia metodologia. ‘Ademés, constituye una esfera que dispone de una lite- ratura comparativo-descriptiva sumamente rica? (princi- palmente etnolégica) y, en muchos campos, un cuerpo tedrico y unas proposiciones generales bien desarrolla- dos y establecidos. En estas circunstancias es facil sen- tirse inclinado a remitir al lector a obras especializadas ©, ignorando los problemas de Ja familia en sf, concen- trarse en un estudio detallado de la naturaleza de la fa- milia campesina. Sin embargo, es imposible ignorar por completo los problemas de la familia en general, pues para poder referirnos a las caracteristicas especiales de Ja familia campesina es necesario primero hablar de Jos rasgos comunes a todas las familias o al menos de aque- las entidades que se suelen subsumir bajo la denomina- cién de «familia», El caso es que el andlisis de la fami- Yia campesina, a diferencia del andlisis, pongamos por 1. J. SzcreeaNsnt, Socjologia: reewoj problematyki i metod (Sociotogta: et desarrolio de su objeto y métodos), Varsovia, 1961. 2G. P. Munnock, Social Structure, Nueva York, 1549. 105 caso, de los problemas de una empresa o profesién, sien- ta las bases de observaciones sobre la familia en general. Y al hablar, por ejemplo, de los cambios habidos en la familia actual, la mayorfa de los autores de hecho to- man la familia campesina como marco de referencia. Por esta razén, ser de suma utilidad resumir ciertos facto- res generales que los sociélogos han establecido sobre Ja familia. Conceptos preliminares : definicion de tipos de familia y funciones de la familia 1. La familia se define generalmente como una insti- tucién? 0, mas 0 menudo, como un grupo social. Aunque hay muchas variaciones en estas y otras definiciones, hay un acuerdo general sobre el hecho de que Ia base de la familia es una relaciGn a través del matrimonio y el pa- rentesco o Ia adopcién; y que —como se agrega gene- ralmente— los miembros normalmente conviven y co- operan dentro del marco de una divisién de roles y tareas socialmente determinada y reconocida’ Cabe advertir que esta definicién no es enteramente rigurosa. En el lenguaje cotidiano el término «familiar se refiere generalmente a un grupo de personas unidas por el pa- Tentesco, tanto como si conviven como si no. Por ejem- plo, los tfos y tias (y sus esposas 0 esposos) se suclen incluir en Ia familia, aunque normalmente no vivan con Ja persona reconocida como el centro del cfrculo fami- Hiar$ Como es posible remontarse muy lejos en busca de Ja genealogia (por el lado del padre o de Ia madre), la palabra «familia» en su sentido vulgar no puede acep- 3, Por ejemplo, en el Dictionary of sociology, ed. H. Prat Fairchild, Nueva Yore, 198, pe Tih Peo 4. Para una definicién y un estudio més amplio de los tipos y funciones de la familia, ver, por ejemplo, J. SzczzPanser, Ele- mentarne pojecia socjologit, cit, p. 149. 5. En el lenguaje cotidiano’a veces el vocablo «familiar se usa principalmente con referencia a los pavientes distantes. 106 tarse en el trabajo cientifico; se habla mds bien de lazos de parentesco mds préximos o més distantes (objetiva ‘© subjetivamente considerados), de vinculos familiares més fuertes 0 més débiles o de un circulo familiar més ampli o mas reducido, ya se determinen en base a crite- ios objetivos 0 a sentimientos de proximidad. En esta obra el vocablo «familia» abarca sélo a las personas uni- das por Jos vinculos mas préximos de consanguinidad (padres ¢ hijos), que conviven y que por regla general comparten una economia doméstica. 2. No vamos a entrar aqui en el principio de clasi- ficacién de los tipos de familia segin el nitmero de per- sonas que se encuentran unidas por los vinculos del ma- trimonio (matrimonio monégamo, poligamo o poliéndri- co) ni segin la eleccién de cényuge (endogamia y exoga- mia). Los tipos de matrimonio pueden clasificarse ade- mas segtin el principio de quién decide la eleccién de Jos conyuges (las mismas partes interesadas 0 sus padres) © segiin los motivos dominantes en la concertacién del matrimonio (cconémicos, prestigio, amor). En este sen- tido cabe mencionar la jerarquia de prestigio y autori- dad en la familia, o sea, familias patriarcales y matriar- cales, por una parte, y familias basadas en las relaciones igualitarias entre los esposos, por otra. La estructura de Ia autoridad en Ja familia generalmente va ligada al sis- tema sucesorio (nombre, patrimonio, posicién social) y a las reglas que rigen la consanguinidad: patrilineales 0 matrilineales. Con ello también va asociado el principio residencial adoptado en la sociedad dada: si la joven pareja vive con los padres del marido (matrimonio pa- trilocal) 0 con los padres de la mujer (matrimonio ma- trilocal). ‘Ademés de los principios enumerados, es conveniente clasificar las familias segin Ja finalidad del matrimoni sies del interés de la familia (el linaje) o del interés de los individuos y su deseo de felicidad individual. Esta diferenciacién corresponde a la clasificacién anterior de las familias segtin los motivos que presiden la eleccion del cOnyuge. También es esencial distinguir a las familias 107 segiin el tipo de relaciones mantenidas con los parientes distantes, que generalmente vienen definidas por Ia cos- tumbre. Podriamos citar muchos mas principios de clasifica- cién de los tipos de familia. Estos dependen del propésito cognitive de cada cual: por ejemplo, segun la clase o la afiliacién étnica, Sin embargo, los tipos citados més arri- ba son los més importantes para caracterizar a la familia y los cambios que experimenta, y contituyen el marco ‘conceptual usado con més frectencia, Los elementos de dicha tipologfa son, al mismo tiempo, las caracteristi- cas que distinguen las diferencias més importantes entre Ja familia de la clase obrera y Ia familia campesina, por ejemplo. Aparte de situar a ia familia dentro del marco de la clasificacion, un elemento importante que caracte- riza a la familia és el de Jas funciones que desempefia. 3. En la literatura estas funciones estén mas o me. nos diferenciadas. Generalmente se menciona Ja funcién biolégica del matrimonio como una institucién aprobada socialmente que regula el trato carnal y la reproducci6n. Ello implica ciertas funciones econémicas de la familia notablemente la de asegurar la existencia de sus miem. bros que no pueden obtener los medios de subsistencia por sus propios recursos (sobre todo nifios pequefios y ancianos). Otra de sus funciones econdmicas es la de dirigir Ia economfa doméstica. Entre las otras funciones econémicas 0, en un sentido mas amplio, sociales de la familia, cabe incluir, en parte al menos, las siguientes: a) Scguridad (proporcionando el sustento material y otros tipos de asistencia al individuo en tiempos de trance dificil y de crisis; Ja familia extensa suele desem- pefiar también esta funcién). +) La transmisién de la herencia (tanto material como cultural): __¢) La prestacién de facilidades para el inicio de la vida del individuo y la determinacion preliminar de su posicion en la jerarqufa de la estratificacién, basada en la renta, el prestigio y la autoridad, 108 1 Estas funciones también son desempefiadas, hasta cierto punto, por los parientes més distantes. La familia desempefia asimismo funciones educativas en cierta me- dida: la socializacién y el control de la educacién de los nifios, Ia prestacién de los conocimientos que necesitaran en la vida; la inculcacién en ellos de los valores y nor- mas dominantes en la comunidad y su iniciacién en los grupos e instituciones sociales. Las funciones culturales de la familia van unidas a las anteriores. La economia doméstica no es sélo el lugar donde se producen bienes —tanto materiales como cul- jurales—, sino el lugar donde se consumen. La organiza- cién del ocio, la diversién, etc., para los miembros de la familia dentro o fuera del hogar es otro de los aspectos de la vida de familia. Finalmente, la familia suministra un sustento moral y emocional a sus miembros indivi- duales, constituyendo una defensa contra el aislamiento social y la soledad, asi como satisiaciendo su necesidad de dicha personal, de aceptacién, de comprensién y de carifio. Estas funciones son particularmente importantes en la actualidad, y siempre son desempefiadas por la fa- milia en mayor o menor medida. 4, La descripcién de las funciones de Ja familia pro- porciona también una base para clasificar sus tipos. Asi- tmismo nos permite comparar las caracteristicas de las familias de diversas colectividades, comunidades 0 cul- turas y descubrir los cambios producidos en esas comu- nidades 0 en Ja sociedad en general. Puede ser analiticamente util introducir, entre esos conceptos preliminares, el de la diferenciacién de las di- versas fasés 0 ciclos de Ia vida familiar. A esto sc lama Ja «pequefia dindmica» para distinguirlo del cambio his- térico de la sociedad en general. Asi, podemos distinguir el primer periodo del matrimonio antes del nacimiento de los hijos, la pareja con nifios pequefios (a ese respecto cabe distinguir entre el perfodo en que los nifios no pue- den trabajar y el perfodo en que ayudan o desempefian ciertas tareas en la explotacién familiar) y el perfodo en que los hijos han alcanzado ya Ja independencia. En 109 cada una de esas etapas, ocupan el primer plano dife. rentes funciones familiares, las cuales son mas amplias durante el perfodo en que la unidad doméstica esté for. mada por los padres junto con los hijos que son atin dependientes. La especificidad social de 1a familia campesina Tomando en consideracién todos esos criterios que usamos para distinguir los diversos tipos de familia 0 definir sus funciones, la familia campesina es més tra. dicional que las demés. Primero de todo, se trata de una familia mayor. En Polonia, en 1960, el nuimero medio de personas por familia era de 3,09 en las ciudades con. tra 3,86 en las zonas rurales.! En los Estados Unidos, en, 1958, la familia urbana tenfa un promedio de 3,5 perso- nas, la familia rural no agricola de 3,82 y la familia agri. cola de 4087 Asimismo, la familia campesina tradicional se compone generalmente de tres generaciones* En las partes de Polonia menos influenciadas por la industrializacién todavia perdura una forma de familia de tres generaciones. Los abuelos controlan la economia doméstica (y/o la explotacién) conjuntas, junto con los hijos ¢ hijas casados (al menos en principio), en una re- sidencia compartida con uno de los hijos; 6 —més es- trictamente hablando— uno de los hijos reside con los padres en la morada comtin. Este tiltimo fenémeno com- porta varias pautas diferentes de relacién que requieren un tratamiento separado. En Polonia, el matrimonio ti- pico en el campo es patrilineal, y puede ser patrilocal, maatrilocal o neolocal, mientras que en la ciudad es por 6. Rocenit statystyceny (Anuario estadtstico), 1962, p. 30, tabla’ 15. 7. E, M. Rocers, op. cit,, p. 173. 8. F. Zxantecs, Socjologicane podstawowy ekologii tudzkiej (Las bases socioldgicas de la ecologia humana), «Ruch Prawniczy, Ekonomiczny i Socjologicznes («El movimiento Turidico, Econd- inico y Sociol6gicos), 1938, mim. 1, 110 Jo general neolocal. En las zonas rurales la pauta de elec- cién del conyuge revela fuertes elementos de endogamia dentro del marco de la comunidad aldeana local? En la aldea polaca, los padres todavia tienen un importante papel en la eleccién del cényuge. Las ventajas econémicas del matrimonio se toman a menudo en consideracién y también persiste el principio de dotar a los esposos cuan- do se casan, La familia campesina, asimismo, se distingue por una tasa de natalidad més elevada, En a Polonia de 1961, la tasa de natalidad por 1,000 era de 11,1 en las ciudades contra 15,1 en el campo." La familia campesina es mas estable; el divorcio es mAs raro en el campesinado que en otros medios sociales. La jerarquia de la autori- dad y prestigio en muchas familias campesinas presenta rasgos claramente patriarcales. Los intereses de la fami- lia y su explotacién tienen un importante papel en los objetivos del matrimonio. Los ligamenes con los parientes mas distantes son mucho més significativos y mas dura- bles, y también suelen diferir de las formas de relaciones de los ambientes urbanos. Las funciones de la familia campesina son més diver sificadas y se desarrollan a una escala mas amplia. La familia campesina dirige una economia doméstica que es al mismo tiempo una empresa, cumpliendo asi una importante funcién de produccién, pero como las redes comerciales estén menos desarrolladas, hay otras funcio- nes cconémicas que tienen un alcance més vasto que en las ciudades, Las funciones culturales de la familia son de mayor importancia por las mismas razones, con la matizacién que el tipo de entretenimiento cultural —en el amplio sentido del término— es peculiar a la aldea. Debido a la importancia de las funciones econémicas de la familia, hay menos tiempo disponible para esparci- 9. M, Janosmxa, Pozafabryczne srodowisko spolecane (El me- dio social fuera de ta fabrica), «Studia Socjologicznes («Estudios Sociolégicos»), 1964, num. 1. Las investigaciones realizadas en zo- has industriales sugieren que los emigrantes del campo general. mente se casan con chicas de su propio pueblo. 10. Rocenik statystycany, cit., p. 31, tabla 16. it miento de esta indole, Al ensefiar a los nifios el trabajo agricola, la familia campesina se encarga de funciones educativas més amplias, cuya naturaleza difiere de las de la familia no campesina. La cuestién de la dicha in dividual es menos importante en comparaciéa, a causa de] alto grado de identificacién del individuo con los in- tereses de la familia." Por ello, podemos hacer la gene- ralizacién de que Ia familia campesina desempeiia las funciones antes mencionadas mediante una amplia gama de actividades, es un grupo mas compacto y determina Ia situacién y el comportamiento de la vida del individuo en muchas mas situaciones que otros tipos de familia, Y, como ya hemos indicado antes, desempefia algunas de sus funciones de una manera completamente diferente y en proporciones diferentes. 3° La base de esta diferencia es, ante todo, los lazos que unen a la familia campesina con la explotacién agricola, Ello toma la forma de una economia doméstica extensa, que incluye no sélo el cultivo y la transformacién de los productos agrarios, sino la produccién de otros articulos basicos de consumo. Por tanto, la familia campesina es menos dependiente de la organizacién de la produccién dentro de la sociedad global. Sin embargo, actualmente no es tan autosuficiente como lo era en Ja sociedad prein- dustrial. Hoy dfa 1a explotacién agricola presenta las ca- racteristicas de una empresa en la que la familia desem- Pefia el papel de un equipo de produccién. (Esto implica el desarrollo de un sistema de relaciones propio de un grupo de produccién.) El agricultor asf se convierte en administrador (organizador) y ejecutivo que evalia al individuo en base a su rendimiento productivo. En suma, Ja explotacién agricola se ajusta a un sistema de relacio- nes determinadas por la divisién del trabajo que ocurre en el proceso productivo. Todas las diferencias mencio- nadas entre la familia campesina y las restantes familias tienen sus rafces en las actividades productivas del agri- cultor y, més ampliamente, en sus vinculos con Ia ex- 11. J. Cuatastnsir, Miode pokotenie chlopow, cit,, p. 133. 112 plotacién, Esos vinculos son la fuente principal del grado significativo de autonomfa y de le solidaridad de la fa- milia, asi como de la naturaleza multiple de las funcio- nes que desempefia, ‘Una segunda causa de esas diferencias es Ja relacién’) de la familia campesina con la comunidad local. Una se- rie de sus funciones basicas —particularmente econémi- cas, educativas y culturales— se ven complementadas por Jas actividades correspondientes de la comunidad aldeana. Los fuertes lazos de parentesco existentes entre las fami lias que forman la comunidad, los firmes ligémenes de ‘vecindad, el sistema ramificado de relaciones socio-eco- némicas, Ia existencia de muchas instituciones aldeanas ‘especificas y otros rasgos que constituyen la comunidad aldeana como grupo primario, todos esos factores cons- tituyen Jas especiales condiciones ambientales de las que ia familia campesina, con sus funciones distintivas cul- turales, educativas y de «seguridad social», deriva su exis- tencia y durabilidad, Cabe pensar que muchos de los rasgos caracteristicos de la familia campesina vienen determinados simplemen- te por las condiciones de la vida rural: comercio y ser- vicios escasamente desarrollados, malas comunicaciones, etcétera. Sin embargo, estas condiciones no surgen so- lamente a partir de la dificultad del hombre por dominar el espacio de las zonas rurales, sino principalmente como resultado de los rasgos de la comunidad aldeana que dan lugar a un sistema social de tipo diferente del de los asen- tamientos urbanos. © Para resumir:; la base de Ja especificidad de Ia familia campesina es el cultivo de Ia tierra, Fsta es la fuente de sus principales caracteristicas especiales, que son: 1. Es el equipo de produccién de una pequefia em- presa. 2. Es auténoma en mayor grado que otras familias en lo que se refiere a la satisfaccién de las necesidades de sus miembros. Esto deriva de la naturaleza del modo de explotacién campesino. 113 Hs 15,8 miento de esta indole. Al ensefar a los nifios el trabajo agricola, la familia campesina se encarga de funciones educativas més amplias, cuya naturaleza difiere de las de la familia no campesina. La cuestién de la dicha in- dividual es menos importante en comparacién, a causa del alto grado de identificacién del individuo con los in- tereses de la familia." Por ello, podemos hacer la gene- ralizacién de que la familia campesina desempefia las funciones antes mencionadas mediante una amplia gama de actividades, es un grupo mds compacto y determina Ia situacién y el comportamiento de la vida del individuo en muchas més situaciones que otros tipos de familia. Y, como ya hemos indicado antes, desempefia algunas de sus funciones de una manera completamente diferente y en proporciones diferentes. % La base de esta diferencia es, ante todo, los lazos que unen a la familia campesina con Ia explotacién agricola. Ello toma la forma de una economia doméstica extensa, que incluye no sélo el cultivo y la transformacién de los productos agrarios, sino la produccién de otros articulos ‘bésicos de consumo. Por tanto, la familia campesina es menos dependiente de la organizacién de la produccién dentro de la sociedad global. Sin embargo, actualmente no es tan autosuliciente como lo era en la sociedad prein- dustrial. Hoy dia la explotacién agricola presenta las ca- racteristicas de una empresa en la que la familia desem- Petia el papel de un equipo de produccién. (Esto implica el desarrollo de un sistema de relaciones propio de un grupo de produccién,) El agricultor as{ se convierte en administrador (erganizador) y ejecutivo que evalda al individuo en base a su rendimiento productivo. En suma, Ia explotacién agricola se ajusta a un sistema de relacio- nes determinadas por Ia divisin del trabajo que ocurre en el proceso productivo. Todas las diferencias mencio- nadas entre la familia campesina y las restantes familias tienen sus raices en las actividades productivas del agri- cultor y, més ampliamente, en sus vinculos con la ex- LL. J. Cuatasinstt, Mlode pokolenie chtopow, cit., p. 133. 12 Wim plotacién. Esos vinculos son la fuente principal del grado significativo de autonomfa y de le solidaridad de la fa- milia, asi como de la naturaleza multiple de las funcio- nes que desempefia, Una segunda causa de esas diferencias es la relacién} de la familia campesina con la comunidad local. Una se- tie de sus funciones basicas —particularmente econémi- cas, educativas y culturales— se ven complementadas por las actividades correspondientes de la comunidad aldeana, Los fuertes lazos de parentesco existentes entre las fami Tias que forman la comunidad, los firmes ligémenes de vecindad, el sistema ramificado de relaciones socio-eco- némicas, la existencia de muchas instituciones aldeanas especificas y otros rasgos que constituyen la comunidad aldeana como grupo primario, todos esos factores cons- tituyen las especiales condiciones ambientales de las que Ja familia campesina, con sus funciones distintivas cul- turales, educativas y de «seguridad social», deriva su exis- tencia y durabilidad. Cabe pensar que muchos de los rasgos caracteristicos de Ja familia campesina vienen determinados simplemen- te por las condiciones de la vida rural: comercio y ser- vicios escasamente desarrollados, malas comunicaciones, etcétera. Sin embargo, estas condiciones no surgen so- lamente a partir de la dificultad del hombre por dominar el espacio de las zonas rurales, sino principalmente como resultado de los rasgos de la comunidad aldeana que dan lugar a un sistema social de tipo diferente del de los asen- tamientos urbanos. « Para resumir: la base de la especificidad de Ia familia campesina es el cultivo de Ia tierra, Fsta es la fuente de sus principales caracteristicas especiales, que son: 1, Es el equipo de produccién de una pequefia em- presa. 2. Es auténoma en mayor grado que otras familias en Io que se refiere a la satisfaccién de las necesidades de sus miembros. Esto deriva de la naturaleza del modo de explotacién campesino. 113 Hs 15,8 3. El Ambito de sus funciones es mas amplio y és- tas se desempefian de una manera mas permanente. El individuo, por tanto, esté mas profundamente arraigado y subordinado a la familia, mientras que ésta es més so- lidaria y se opone més eficazmente a la desorganizacién, 4, La familia campesina recaba el apoyo de la comu. nidad aldeana para la realizacién de sus funciones. La familia y la explotacién agricola Estas observaciones un tanto abstractas sobre la espe- cificidad de Ia familia campesina pueden concretarse mas si examinamos el lugar que ocupa la explotacién en la vida de Ja familia. Sin tratar de volver absolutos los vinculos entre Ja familia y la explotacién, y lejos de pre- tender que todos los rasgos de los tipos de familia co- nocidos en Ia historia derivan del modo de produccién (pues ello seria absurdo), es atin dificil negar que carac- teristicas tales como la monogamia o la poligamia, el pa- triarcado 0 el matriarcado tienen su origen en el modo de organizacién de la produccién. Pero la cuestion de la relaci6n entre el tipo de familia y el modo de produccién rebasa los limites del tema en consideracién. Para analizar Ja explotacién familiar con més detenimiento necesitamos ahora considerar varios problemas relacionados con su génesis y funcionamiento. 1. El primer problema es la eleccién de cényuge. Como hemos mostrado antes, las opiniones de los padres y su miramiento por los intereses de la familia y de la explotacién tienen un considerable papel en la familia campesina. En esencia, la formacién de una nueva fami- Jia implica el problema de asegurar la base de su conti- nuada existencia. En la vida aldeana esto significa que hay que proveer de tierras a la nueva familia, Ello im- plica Ja necesidad de solventar los problemas econémicos relativos a cudl de los dos padres cederé parte de su tierra y cudnta tierra es precisa para asegurar Ia base de la existencia de la nueva pareja, 114 En los paises en que se reconocié el principio de la indivisibilidad de la tierra antes de Ja guerra (por ejem- plo, en la provincia polaca de Poznan), la nueva familia permanecia en la heredad de uno de los padres, y los hermanos y hermanas tenfan que aportar parte de la dote. En este caso, la parte que eportaba el otro cényuge era importante. Cuando Ja transmision de la tierra ha perdido importancia, ya sea porque las leyes o las reglas de sucesion limitan la divisién del patrimonio o ya sea por otras razones —como la falta de tierras disponibles—, esias cuestiones se plantean de una forma diferente. Por ejemplo, puede ser una cuestién de aumentar no la su- perficie de la explotacién, sino sus reservas de fuerza de trabajo. Y en todo caso, el comienzo de una nueva fami- Tia campesina precisa de algin tipo de arreglo de las cuestiones econémicas por parte de las familias de las personas que contraen el matrimonio. Asf, e! matrimonio de un hijo o de una hija afecta a la familia campesina; deben sopesarse y decidirse las cargas que recaerén so- bre la familia y los beneficios eventuales que obtendré si el matrimonio Ilega a realizarse. La familia se ve afec- tada no s6lo materialmente, sino también con respecto a su prestigio y posicién en la comunidad de la que es miembro. En vista de la conexién existente entre la ex- plotacién agricola y la posicidn de clase del agricultor, esto depende a su vez de su participacién material.” Asi, pues, en la familia campesina la eleccion de conyuge en- trafia un equilibrio entre los intereses de las dos fami- lias.” ‘Cabe agregar que el patrimonio principal de la fami- ia es la explotacion." La pareja casada recibié la tierra 12, G. Gatsse1, Socjologiczna problematyka zawodu rotnika (Problemas sociotdgicos de la agricultura como profesién), «Roce. niki Socjologil Wsi> («Anales de Sociologia Rural»), vol. , 1968. 13, B. BovnDieu, Célibat ef condition peysanne, «Etudes Rw rales, 1962, nim. $6, p. 32. : 44. W. L. Tuouas y Znawtecc, The Polish peasant in Europe and America, Nueva York, 1927,'p, 169; J. CHMLASINSET, op. cit, p. 154, 115, de sus padres y la transmite a sus.hijos. Evidentemente, es deseable que la transmita con su superficie Jo menos disminuida posible. La explotacién pasa de generacién en generacién, y la familia —los usufructuarios sucesivos— asume la responsabilidad ante sus hijos (y ante la opinién del pueblo) de Ia propiedad que esta a su cargo. Asi, pues, Ja creacion de una nueva familia campesina afecta a los intereses de la explotaci6n, como valor supremo, y de Ia familia. Por consiguiente, en tanto existan las institucio- nes de la explotacién campesina y de la familia campe- sina, la eleccién de cényuge debe mirarse desde e] punto de vista de los intereses de la familia. En una situacién concreta, el anterior esbozo esque- mitico de la relacién entre la familia y la explotacin puede aplicarse en mayor o menor medida, La situacién de las familias més ricas es diferente de Ia de las fami- lias pobres. La relacién es més débil en el caso de las familias que extraen la parte principal o una parte sub- sidiaria de sus medios de subsistencia del trabajo asala- riado. La situacién es diferente, asimismo, en el caso de los hhijos que tienen que abandonar la heredad, aunque también obtienen generalmente parte del patrimonio fa- miliar, el pago de una cuota o al menos el coste de su educacién. La situacién difiere también en el modo de explotacién campesino multifamiliar (cooperativas de pro- duccién), aunque también en este caso la necesidad de dividir la parcela privada con una pareja de recién casa- dos afecta a los intereses de la familia o incluso a los de todas las familias que trabajan juntas. 2. Los vineulos de la familia con la explotacién, que son tan visibles en la seleccin de los cényuges, ejercen un influjo considerable en Ia naturaleza de las tareas que Ja pareja de recién casados debe realizar. Como hemos dicho més arriba, la explotacién es el elemento clave de Ia economia campesina. La tierra transmitida por los pa- dres constituye la base de la existencia de la pareja de recién casados y a su vez pasa a sus hijos. Cuando la pareja recibe la tierra de manos de sus padres simulté- neamente asume la responsabilidad de su traspaso a sus 116 hijos. La superficie de tierra y el equipo y utensilios de Jabranza transmitidos a los hijos constituyen la base del prestigio que los demas les conceden y de su propia va oracién de la manera en que han desempefiado cumpli damente estos cometidos. Esta es la base de la identificacién observada de la familia con la explotacién y de los intereses individuales con los familiares. Por ello, los intereses de la familia y de la explotacién ayudan a determinar las tareas que Ia nueva familia campesina debe emprender. Esto sirve de puente entre las funciones econmicas de la familia y sus funciones de procreacién. Los hijos son a la vez herederos y trabajadores de la explotacién. Como herederos son copropietarios, pero debido a la for- ma patriarcal de la familia campesina esto no se expresa generalmente en términos de participacién en la jerarqufa de autoridad de la familia. La explotacién debe asegurar el mantenimiento y la dotacién de los hijos, mientras que éstos deben hacerse cargo del funcionamiento de aquélla. Esto entrafia la evaluacién de los hijos no sdlo desde el punto de vista de su valor como trabajadores. En la fa- milia tradicional, el acto de dar a luz un hijo se considera un hecho de importancia para la explotacién en lo que se refiere a su continuidad futura. En las regiones en que consuetudinariamente el primogénito hereda la explota- cién de su padre, se le trata de un modo diferente, Se le familiariza con todos los asuntos de la familia y tiene un papel més importante en todas Jas decisiones relativas a Ja familia y a la explotaci6n. Las costumbres que rigen la sucesién varian de un pais a otro y de una region a otra, pero en Ja familia campesina tradicional, por regla general, la posicin de los hijos viene determinada con arreglo a los intereses de la explotacién. En relacién con lo que acabemos de decir, debemos parar mientes en la cuestiOn de la tasa de natalidad. Ast, segiin datos estadisticos, nacen y se crfan mas hijos en las familias campesinas mas ricas o, mas estrictamente hablando, en familias que poseen mds tierras. Este fe- némeno tiene diversas explicaciones: matrimonio més 17 temprano,® mejor estado fisico de las mujeres, etc. Pero hasta ahora no se ha podido confirmar ninguna de estas hipétesis. Parece que este fenémeno (aungue tiende a desaparecer, como cabe esperar) cambia fundamental- mente el criterio aceptado universalmente de que hay un nexo entre la tasa de natalidad y la riqueza. En la so- ‘ciedad en general, la tasa de natalidad es inferior en las categorfas mds ricas de la poblacién. Sin embargo, el campesinado constituye una excepcién a esta regla. Como el nivel de ingresos est4 estrechamente correlacionado con las divisiones de clase, cabe pensar que las diferencias de tasa de natalidad se dan més entre clases que entre ca- tegorias de ingresos. No obstante, en las clases que son entidades cultura- les la dependencia de la tasa de natalidad del nivel de ingresos puede variar de la situacién que se da en el resto de la sociedad, y en los grupos sociales tradicio- nales puede producirse hasta la situacién inversa. Inde- pendientemente de cémo se expliquen las diferencias de tasa de natalidad, sefialan una interesante relacién entre el tamatio de la explotacién y el tamafio de la familia. E] debilitamiento de esta relacién esté en armonfa con las pautas del cambio rural contemporéneo. 3. Como ya hemos mencionado, la familia campesina conserva rasgos patriarcales incluso actualmente en mu- chas regiones de Polonia. La pauta patriarcal se corres- ponde con sus funciones. Como el equipo de produccién de una pequefia empresa, los miembros de la familia es- tn sujetos a la autoridad del padre. Fs él quien decide todos los cambios a efectuar en la explotacién,* ast como qué trabajo hay que hacer y cudndo. Su autoridad deriva de ser no sélo el administrador de la explotacién, sino 15, W. Stvs, Wspolzaleznose rozwoju rodziny chlopskiej i jej gospodarstwa (EI desarrollo contempordneo de ta familia cam- pesina y del modo de explotacién campesino), Wroclaw, 1959. 16. ‘EI cuestionario del TER de 1960 sobre in modernizacién de Ja agricultura mostraba que en principio el propictario de ia explotacién decide, en lo que respecta a la introduceién de me- joras en la explotacién, sin consultar con el resto de la familia. 418, su duefio. El padre, y después de su muerte la madre, decide sobre Ja dote de los hijos, sobre la transmisién de la explotacién a los mismos y sobre todo cambio en fl tamafio de la explotacién, tanto en lo que se refiexe fa superficie como a otros medios de produccién, Los requerimientos econdmicos de la explotacién refuerzan a solidaridad de la familia, determinan sus diferentes funciones de produccién —con las que estén asociadas diversas posiciones en la jerarquia familiar— y la manera en que dispone de sus ingresos. La disolucién de la fa- milia campesina equivale a la desintegracién de la explo- tacién y por tanto es un problema mucho més dificil y complicado que en otros tipos de familia. ‘Al considerar el nexo entre el sistema de relaciones, y sobre todo Ja disposicién de la autoridad en la familia, asi como Ta naturaleza de la explotacién campesina como unidad de produccién, es necesario tener en cuenta la relaci6n existente entre el tamafio de la explotacién y el ciclo de desarrollo de la familia.” Podemos distinguir varias fases, La primera de ellas ¢s el inicio del matrimo- nio; Ia pareja casada generalmente empieza con una pe- quefia explotacién (0, en ciertos pafses, con una finca arrendada), En esta etapa normalmente no goza de plenos derechos sucesorios. La juventud de la pareja y la relativa libertad de que goza la mujer por la ausencia de hijos hacen posible una considerable inversién en trabajo y la superficie de Ia explotacién se extiende gradualmente. Se amplia més en la segunda fase, cuando nacen los hijos. La necesidad de mantener a Ja familia impele a la pareja a intensificar el trabajo, en el que los hijos empiezan a participar a medida que transcurre el tiempo. La explo- tacién alcanza su punto maximo durante la tercera fase, cuando los hijos Iegan a la edad en que son trabajadores productivos maduros, pero atin no estén casados. En la cuarta fase, los hijos se independizan. Entonces cl enve- jecimiento ‘de los padres y la reduccin gradual de su 17. T, Lynn Swit, Sociology of rural life, Nueva York, 1953, pp. 79, 4i1 ¥ siguientes. 119 aportaciéa al trabajo de la familia, junto con Ia partida de Jos hijos, conileva una disminucién de la superficie de Ta explotacién. Aun cuando no se proceda a ninguna di- vision de Ia tierra entre los hijos, la necesidad de pagar cuotas puede obligar a la familia a vender parte de ella. La tierra puede verse reducida al tamafio de una pequefia parcela con que los padres se quedan de por vide. Pero si conviven con un hijo o una hija, la explotacién se ve generalmente reducida al tamafio que tenia cuando empe- 26 la familia. La conexidn entre el tamafio de la explo- tacién y el ciclo familiar es evidente en Ja relacién esta- disticamente confirmada entre superficie de explotacién y edad del cabeza de familia. En las familias de tres ge- neraciones (atin comunes en las zonas rurales de ciertos paises, como Italia) el mecanismo descrito opera a lo largo de un perfodo de tiempo mayor y de un modo més complicado, pero ello no implica ninguna modificacién fundamental de las observaciones anteriores, 4. El tipo de produccién determina la pauta del sis- tema educativo. En la familia campesina el nifio es edu- cado en el curso de su trabajo. A medida que madura el nifio se encarga de cometidos cada vez més dificiles y que suponen més responsabilidad, y cada vez mas los tradicionalmente asignados al sexo apropiado. La asun- cién de nuevas tareas es la expresin de la posicién de status que el nifio ocupa en la familia ¢ indica el estadio que ha alcanzado en su madurez social. El nifio adquiere pericia en la produccién y pantas de comportamiento, asf como normas éticas; aprende lo que tiene que hacer y ad- quiere una comprensién de su posicién en la comunidad local. A medida que alcanza la madurez y se hace cargo de més tareas productivas, el nifio va ocupando un lugar en el pueblo y adquiere un conocimiento del mundo ex- terior. El proceso de educacién a través de la adquisicién de una mayor eficacia en la produccion a menudo halla expresién en los rituales correspondientes. Asi, en la fa- milia campesina hay una correlacién estricta entre ma- durez bioldgica y social y madurez como productor. La madurez biolégica constituye la base, pero la asuncién 120 de nuevas tareas econémicas por parte del nifio, condi- cionada por su edad y fuerza, determina su posicién en Ja familia y en Ia comunidad aldeana." 5, La independencia del nifio de la familia se produce ya sea por el matrimonio y su traslado a su propia explo- tacién (en el tipo de familia de tres generaciones no in- mediatamente, sino después de la muerte del padre), ya sea abandonando la familia y le comunidad local para trabajar en una profesin no agricola o en una gran em- presa agricola. Semain Ja costumbre en vigor, o bien se divide la finca entré los hijos o bien un heredero se queda con ella y resarce a sus hermanos y hermanas. La costumbre deter- mina, asimismo, cudl de los hijos debe permanecer en la casa paterna y cuales de ellos deben buscar otra sali- da, bien casindose y montando sts propias explotaciones, bien cambiando de profesi6n. El mecanismo de Ia suce- sién, incluso en el caso de particién del patrimonio in- mobiliario familiar, aspira a la preservacién, o a la menor disminucién posible, de la explotacién familiar existente, EI hijo que permanece en su hogar compensa con su ma- imonio la tierra entregada a sus hermanos y hermanas o las pérdidas sufridas debido a las cuotas que ha tenido que pagarles. Por algun tiempo a veces Ileva la explota- cién juntamente con sus padres, pero generalmente, con Ta Ilegada de los nietos, los abuelos se retiran a la par- cela de tierra que se les ha reservado o conciertan con su hijo la prestacién de una renta vitalicia a cambio de entregarle las riendas de la explotacién. Cuando les po- sibilidades de abandonar el pueblo son escasas, surgen a menudo rivalidades entre los hijos sobre la herencia, y Ia posicién del heredero es ambicionada. En ciertas condiciones (cuando no puede dividirse la explotacién) Jos demas hermanos y hermanas deben encontrar tra- bajo fuera de ella si no quieren verse privados de la base para fundar una familia. 18. J, Cuatasinstt, op, cit., p. 125. 19. W. G. HormMax, Zur Dynamik der industrielten Geselts- 121 La particién de la explotacién es siempre Ia peor so- lucién, e incluso en las regiones en que ésta se permite, el temor de la fragmentacién y las perspectivas consi- guientes de existencia en una parcela reducida es un factor que estimula constantemente la emigracién del campo a Ia ciudad, o de zonas de minifundio a zonas de grandes explotaciones o a regiones bajo colonizacién, si es que existen. Bajo tales condiciones los intereses de Ja familia y de la explotacién determinan Ia direccién del porvenir del nifio—tanto si sigue la agricultura como profesién como si tiene que abandonar a familia y el pueblo, La situacién es diferente en las sociedades con cre- cientes oportunidades de trabajo fuera de la aldea y fuera de la agricultura (y en que la ciudad es muy atrayente): En esta situacién Ia rivalidad no se centra en sobre quién se va a quedar en el patrimonio familiar, sino en quién va a abandonarlo. Por regla general, aquellos que la fami- lia considera que tienen mayores posibilidades de éxito fuera de la aldea son los que se van. No obstante, en general, la explotacién campesina no se queda sin suce- sor® en tanto haya hijos en la familia. En Jas familias campesinas las obligaciones que los hijos sienten_para con la explotacién y la familia son muy fuertes y, como muestran las investigaciones, éste es el principal motivo para que un hijo permanezca en la heredad aun cuando no le guste el trabajo agricola y prefiera otra profesién La situacién es diferente en las explotaciones multifa- miliares (cooperativas de produccién) en que el senti- miento de responsabilidad hacia la explotacién y la fa- milia es incomparablemente menor, y los efectos restric- tivos de la propiedad o de Ja sucesién sélo ejercen un chaft, Wirtschaft-soziologische Bemerkungen: Beitrige zur So- siologie der industriellen Gesellschaft, Dortmund, 1952, p. 7. 20. M. Powostr, Migracje 2 wsi do miast, cit. pp. 70 y $6. 21. A. Staxno, Mlodzi rolnizy 0 swoim zawodzie (Iévenes agri- cultores en su profesion), «Wies Wspolezesna» («La Aldea Con temporéneas), 1960, nim.’ 4. 122 influjo limitado.” En tales casos la joven generacién con- cibe el trabajo sdlo en términos profesionales y, si no existen restricciones administrativas especiales, abando- nan_consecuentemente la agricultura. En las familias campesinas los vinculos que unen los jovenes a la explotacién son atin muy fuertes hoy dia, en gran medida Ia familia decide el destino del nifio. Por ello, la regla es que la profesién de agricultor pase de padre a hijo. Esta peculiaridad, junto con otras, es con- secuencia de la naturaleza del modo de explotacién cam- pesino, Los fenémenos que hemos descrito —desde el inicio de una familia hasta el retiro de los padres con una anua- lidad— difieren en muchos paises y regiones, segiin el tipo de familia, el sistema sucesorio, la intervencién del Estado, las regulaciones legales, la influencia de Ia socie- dad industrial sobre la aldea, etc. A pesar de la natura- Jeza indudablemente distintiva de las explotaciones mul- tifamiliares, es decir, las cooperativas de produccién, también en ellas el laz familiar con la explotacién es el rasgo principal que distingue a la familia campesina de los oiros tipos. Sin embargo, la especificidad caracteri- zada aqui corresponde a la familia campesina tradicio- nal. Actualmente se estan produciendo considerables cambios, como ya hemos visto. Pero el esboz0 de los rasgos de la familia tradicional era indispensable a la hora de considerar estos cambios. Cambios de las formas de ta familia campesina moderna Los socidlogos que estudian la familia estan de acuer- en general en lo que se refiere a las pautas de cambio 22, En comunicaciones personales mandadas a un concurso de la ZMW (Sindicato Rural de Jévenes), convocado en 1963, los, Jovenes frecuentemente se mostraban dispuestos a vivir en coo perativas de produceién, pero sélo porque estaban convencidos de que les seria més ffeil irse del pueblo, dado que sus obliga- ciones para con la familia y la explotaciGn serian asumidas por Ja cooperativa, 123 de Ja familia moderna” Sélo discrepan en su evaluacién de esos cambios: en si constituyen una prueba del amor- tecimiento o degeneracién progresiva de esta institucién © sélo de un cambio de sus funciones y contenido>* De- jando en manos de los especialistas la evaluacién de los cambios, aqui sélo cabe seffalar las tendencias generales de esos cambios sobre los que existe un acuerdo consi- derable, Hay acuerdo sobre Ja transicién de la familia de tres generaciones a la familia reducida formada por padres ¢ hijos. En las zonas urbanas es excepcional que los hijos y Jas hijas casados vivan con sus padres, y cuando ello ocurre viene dictado por Jos intereses de ia joven gene- racién. Mas frecuentemente, tan pronto como los hijos se casan, 0 incluso antes, cuando empiezan a ganarse su sustento, abandonan la familia y fundan su propio hogar. La escasez de viviendas, y ia necesidad de las mujeres de tomar un empleo, pueden retrasar este proceso. Pero las aspiraciones a fundar un hogar independiente son ex: traordinariamente fuertes y se materializan tan pronto como se disponen de los requerimientos materiales mi- nimos. La familia moderna es més pequefia no sélo a causa de la reduccién del mimero de generaciones que conviven bajo el mismo techo, sino también como consecuencia del control de natalidad. Con el desarrollo de Ja higiene y de los servicios sanitarios, la mortalidad infantil ha descendido considerablemente. El nifio que hoy dia viene al mundo suele nacer como resultado de una decisién y de un acto de voluntad. EI cambio del tamafio y la pauta de la familia, y las diferentes actitudes hacia los nifios y el mejor cuidado de los mismos, estén asociados con los cambios de los fines del matrimonio, que actualmente se cifran en la fe licidad personal, Su motivo més frecuente no son los in- 23. R. H. Mclvm y C. H. Pace, Society, Londres, 1961, pp, 250 Y siguientes. pot ® Kéwte, Materiaen zur Soziologie der Familie, Bers, 124 tereses de la familia, sino los del individuo, su deseo de sustento moral y emocional y de seguridad contra el ais- lamiento en nuestra sociedad atomizada. Esto provoca cambios en la eleccién de pareja, que suele basarse mas en el amor y en la atraccién mutua, Actualmente la «elec- cién roméntica» es un fendmeno universal y generalmen- te se reconoce como el valor que desear:® Este aumento de a importancia del elemento roméntico en el matrimo- nio esté asociado con cambios en la pauta de las rela- ciones entre Jos cényuges. La pauta universal es la fami- lia igualitaria en la que ambos esposos (y cada vez mas también los hijos) tienen igual derecho a la dicha personal y su igual participacién en las decisiones que afectan a su destino comin. Esto es resultado también de la inde- pendencia de la mujer, que en la sociedad actual sigue cada vez con més frecuencia su propia carrera. Estos cambios, y en particular la irrupeién de la mu- jer en el mercado de trabajo, conducen a una disminu- y no el de «comunidad rural local». Si la explotacién campesina se considera la base de la comunidad aldeana, la mayoria de los rasgos que carac- terizan a esta comunidad derivan de la definicién del modo de explotacién campesino como sistema de produc- cin basado en la identificacién de la empresa agricola con la familia. De la misma naturaleza de la produccién agricola —o, si se quiere, del papel que la tierra tiene en tal produccién— se desprence que los productores no pueden formar agregados muy grandes. Esto se aplica tanto a la aldea como al sefio-fo (hacienda). Una gran empresa agricola requiere un numero de habitantes inclu- so menor que un grupo de explotaciones campesinas. El tamafio de la comunidad aldeana depende de la estructura agraria y del tipo de produccién con que est asociada a zona agricola. Cuanto mayor es Ja fragmentacién de las explotaciones (porque no es posible la emigracién del pueblo y debido a la accién del principio de asignar parce- las de tierra a cada miembro de la familia) y cuanto mayor es e] grado de cultivo intensivo, mayor sera el numero de habitantes de la aldea. En Polonia los pueblos estan més fragmentados en el sur del pais y en las regio- nes de cultivo intensivo, es decir, en Ia proximidad de las ciudades. En las regiones centrales y occidentales, en que las explotaciones son mayores, las aldeas tienen’ un promedio de 80a 150 familias. Asi el nimero menor de habitantes y la densidad de poblacién inferior de las aldeas comparadas con las ciu- dades son resultado de las caracteristicas de la produc- cion agraria. Por consiguiente, puede decirse que (con- trariamente a las opiniones sestenidas por Sorokin y Zimmerman)’ que esas caracteristicas estan asociadas no 7. P, SOROKIN y C, C. ZIMMERMAN, op. cit., Pp. 23 y ss. 137

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