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Amplia tu perspectiva: el pensamiento lateral

por Chema Cepeda el 22 marzo, 2011 en Hacking Mental

Llevas un buen rato exprimiéndote el coco para dar con una solución a ese
problema que te está torturando. Es el momento de rendirse, no hay manera,
no existe solución… ¿Estás seguro? Quizás sea el momento de poner a
funcionar tu hemisferio derecho y usar el pensamiento lateral.

El pensamiento lógico o vertical intenta que no nos equivoquemos. El


lateral en cambio, es el explorador que aumenta las posibilidades de que
acertemos.

Foto por procsilas vía Flickr

Estamos acostumbrados a trabajar y pensar de forma racional. Basándonos


en la experiencia y en nuestra forma de pensar habitual, buscamos la
mejor salida para ese problema. Esto es así, porque nuestro cerebro tiende a
agrupar los datos siguiendo patrones, de forma que si se presentan nuevos
datos, los organiza y trata conforme a esos modelos.
Cada problema que se nos plantea pone a prueba nuestra capacidad para
ofrecer una solución. Si por ejemplo, se nos presenta un problema en nuestro
trabajo, tiramos de hemeroteca mental y razonamos así: Problema A se
resolvió con solución X, por lo que problema A’ (que se parece mucho a A) se
resolverá con solución X’.
Este planteamiento nos puede llevar a una solución válida, pero tenemos que
pensar que así como cada problema es distinto, cada posible solución también
será diferente y que no siempre la primera opción que se nos presenta es la
mejor.

Enfoque vertical vs lateral


En el colegio y en la facultad, nos han enseñado a pensar de forma racional,
mediante el análisis y el razonamiento. Para cada situación, aprendemos a
seleccionar la idea más apropiada, desarrollarla y descartar el resto. Esta forma
de pensar nos hace eficientes, pero también impide que alcancemos todas las
ideas o soluciones.
Es importante desarrollar este tipo de procesamiento, pero no tenemos que
olvidar la otra forma de resolución de problemas, la forma libre y creativa:
el pensamiento lateral.
Por ejemplo, ante un mismo problema en el que se nos plantean 3 posibles
soluciones, el pensamiento vertical seleccionaría la más prometedora de las 3 y
desecharía el resto. El pensamiento lateral en cambio, no solo no desecharía
ninguna de esas opciones, sino que intentaría generar alguna solución más.
Los dos tipos de pensamiento son necesarios y complementarios, por lo
que no son excluyentes y debemos aprender a trabajar con ambos. Como dice
Edward de Bono en su libro “El Pensamiento Lateral”, si pensamos en una
solución como en hacer un agujero, el pensamiento vertical, profundizaría en
ese agujero, mientras que el lateral exploraría nuevas vías o agujeros.

Usando la creatividad para resolver problemas


El pensamiento lateral es un proceso que consiste en salirnos de la rutina de
la lógica y abordar el problema desde otras perspectivas, consiguiendo así
soluciones creativas y alternativas que permitan solucionar la situación.
Conseguiremos sacar a nuestro cerebro del cliché que ha creado para resolver
ese tipo de situaciones, enriqueciéndolo o creando nuevos modelos para
interpretar la misma información.
En definitiva, consiste en salirnos del camino habitual que nos marca nuestro
pensamiento, ser transgresores y pensar desde “fuera de la caja”.

En el pensamiento lateral no se busca la solución correcta, sino una


distinta ordenación de la información que provoque una visión diferente de una
situación. Edward de Bono.

Aplicaciones del pensamiento lateral


Podemos aplicarlo no solo para resolución de problemas difíciles o
complicados, sino en todas las situaciones que usamos el pensamiento vertical,
es decir en todas las facetas de nuestra vida. Tener distintos puntos de vista de
las cosas, nos permite un mayor análisis y procesamiento de la
información, y nos ayuda a conseguir mejores resultados.
Podemos entonces usar el pensamiento lateral para:

 Proporcionar distintos enfoques: consiguiendo así nuevas ideas para nuestros


problemas de organización, proyectos, arte, matemáticas, etc.
 Crear alternativas para solucionar problemas. Si mediante el modelo vertical no
conseguimos hallar la solución a un problema, deberíamos recurrir al lateral.
 Como medio para evitar polarizaciones y concepciones rígidas típicas del
pensamiento vertical.

Cómo funciona el pensamiento lateral


El pensamiento lateral se sale de la lógica impuesta por el pensamiento
vertical,explorando nuevos caminos e interpretando los datos de forma
creativa, de manera que se aportan nuevas perspectivas y soluciones del
problema.
Para empezar a usar el pensamiento, debemos partir de cero, con los datos
en bruto. Esto es importante, porque si partimos ya de un razonamiento lógico
será más difícil crear algo nuevo que si partimos del material sin modelar.
Además, el lateral no sigue unos pasos preestablecidos, podríamos ir
saltando de unos conceptos a otros libremente, permitiéndonos equivocarnos
las veces que sean necesarias y no rechazando ninguno de los caminos
tomados.
Vamos a repasar las distintas técnicas que propone Edward de Bono para
ejercitar nuestro pensamiento lateral:
 Búsqueda de alternativas: buscando todos los enfoques posibles, aceptándolos aunque
parezcan irracionales, sin entrar a valorar ninguna de ellas. El objetivo será alcanzar al
menos un mínimo de alternativas posibles. Una de las técnicas para conseguirlo es la
Tormenta de ideas.
 Aplazar las valoraciones y el juicio hasta la fase final. Si desechamos una idea
porque nos parece inadecuada, quizás estemos perdiendo una solución válida obtenida a
través de esa idea errónea.
 Desestructurar modelos de pensamiento mediante el análisis de cada elemento por
separado. Es decir, romper los esquemas y prejuicios que nos llevan a pensar de cierta
manera y asumir otros nuevos.
 Identificación de ideas dominantes para plantear alternativas reales. Si no
identificamos la idea principal del problema, difícilmente podremos plantear
alternativas.

Herramientas y utilidades para desarrollar el


pensamiento lateral
Por último, vamos a ver distintas herramientas que nos pueden ayudar a
desarrollar este tipo de pensamiento:

 El dibujo: es una gran herramienta por el gran poder visual que tiene. Ya hemos
hablado de cómo nuestro cerebro es capaz de absorber la información de un mapa
mental. Permiten matizar los detalles de cada enfoque.
 División: consiste en dividir el problema en partes más simples que nos permitan
reorganizarlas de nuevo de otra manera para intentar encontrar una solución.
 Método de la inversión: consiste en ir hacia atrás desde una solución, para encontrar
nuevos enfoques y comenzar con nuevas proposiciones.
 Sesiones de imaginación creativa: mediante la tormenta de ideas. Es una de las
técnicas fundamentales del pensamiento lateral.
 Cambio del punto de entrada. El punto de entrada a la consideración de un problema,
influye mucho en el desarrollo de un pensamiento. La técnica consiste en volver atrás y
cambiar el punto de enfoque para obtener una visión nueva.
 Inserción de un estímulo elegido al azar: coger algo que no tenga nada que ver con el
problema y que nos proporcionará una pequeña distorsión en nuestra forma de pensar y
reestructurando todo el pensamiento.
 Analogías/Conceptos/divisiones/polarizaciones: son técnicas que nos permitirán
mantener nuestro enfoque en pequeñas partes del problema, ayudándonos a interpretar
cada trozo de información.

Espero haber conseguido esbozar a grandes rasgos en qué consiste el


Pensamiento Lateral. Si quieres profundizar y potenciarlo, necesitarías trabajar
distintos ejercicios sobre las técnicas antes descritas.

Puedes encontrar muchos ejercicios para desarrollar este tipo de pensamiento


en Internet y también en el libro “El Pensamiento Lateral” de Edward de Bono.
Te dejo con un ejemplo de acertijo que te obligará a usar el pensamiento lateral
para conseguir resolverlo:

Pedro y Sara han aparecido muertos en el medio de una habitación. Están


totalmente desnudos, empapados y rodeados por una gran cantidad de
cristales rotos. La autopsia determina que han muerto de asfixia. ¿Qué crees
que ha pasado en realidad?

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