Está en la página 1de 2

Evangelio segn San Lucas 9,1-6.

J ess convoc a los Doce y les dio poder y autoridad para expulsar a toda
clase de demonios y para curar las enfermedades.
Y los envi a proclamar el Reino de Dios y a sanar a los enfermos,
dicindoles: "No lleven nada para el camino, ni bastn, ni alforja, ni pan, ni
dinero, ni tampoco dos tnicas cada uno.
Permanezcan en la casa donde se alojen, hasta el momento de partir.
Si no los reciben, al salir de esa ciudad sacudan hasta el polvo de sus pies,
en testimonio contra ellos".
Fueron entonces de pueblo en pueblo, anunciando la Buena Noticia y
curando enfermos en todas partes.

Extrado de la Biblia, Libro del Pueblo de Dios.

Leer el comentario del Evangelio por :

San Juan Crisstomo (hacia 345-407), presbtero de Antioqua ms tarde


obispo de Constantinopla, doctor de la Iglesia
4 Homila sobre 1 Corintios; PG 61, 34-36

De la boca de los nios de pecho has sacado una alabanza

La cruz ha ganado a los espritus por medio de predicadores ignorantes,


y esto en el mundo entero. No se trata de cuestiones banales, sino de Dios y
de la verdadera fe, de la vida segn el Evangelio, del juicio futuro. La cruz
ha transformado a gente sencilla e iletrada en filsofos. Aqu se ve que lo
necio de Dios es ms sabio que los hombres; y lo dbil de Dios es ms
fuerte que los hombres (1C 1,25).

Por qu es ms fuerte? Porque se ha extendido por el mundo entero, ha


sometido a los hombres a su poder y ha resistido a los innumerables
adversarios que queran hacer desaparecer el nombre del Crucificado. Y fue
lo contrario, este nombre se extendi y se propag; sus enemigos
perecieron, desaparecieron; lo vivos que combatan con un muerto han
quedado reducidos a la impotencia... En efecto, lo que unos publicanos y
pecadores, por la gracia de Dios han conseguido realizar con xito, los
filsofos, los oradores, los reyes, es decir, la tierra entera en toda su
extensin, ni tan slo han sido capaces de imaginar... Es pensando en ello
que el apstol Pablo dice: La debilidad de Dios es ms fuerte que todos los
hombres. De no ser as cmo estos doce pescadores, pobres e ignorantes,
hubieran podido imaginar una empresa de tal envergadura?

También podría gustarte