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Cuento El Abuelo
Cuento El Abuelo
NARRADOR: don Eulogio al salir del club nacional haba tomado un taxi,
indicando al chofer que circulara por las afueras de la ciudad; cuando de
pronto diviso algo
DON EULOGIO:(grito) detngase, detngase pare
CHOFER: si seor dgame
DON EULOGIO: retroceda, retroceda seor.
NARRADOR: don Eulogio bajo del taxi y llego a un montculos de piedras
DON EULOGIO: es una calavera, es una calavera, parece de un nio y Esta
sucia
NARRADOR: dos das don Eulogio mantuvo la calavera oculta en un cajn
de la cmoda del club, y cuando miro por la ventana la huerta de su casa
una idea pas por su cabeza y luego no pens mas en ello estaba decidido.
MOZO: don Eulogio la cena est servida
DON EULOGIO: est bien ya voy
NARRADOR: esa noche don Eulogio durmi bien. A la maana siguiente
don Eulogio se dispuso a limpiar la calavera haba imaginado que limpiar la
calavera sera algo muy rpido, pero se equivoc. el polvo, lo que haba
credo polvo y era tal vez excremento por su aliento picante, se mantena
soldado a las paredes internas y brillaba como una mina de metal en la
parte posterior del crneo. Don Eulogio molesto lanza la calavera pero luego
se lanz a cogerla
DON EULOGIO; (llamando por telfono) mozo trigame una lata de aceite
MOZO: aqu esta don Eulogio (tratando de mirar que esto que estaba
haciendo don Eulogio)
DON EULOGIO: ya vete
NARRADOR: don Eulogio trato de limpiar nueva mente y ahora muy feliz
porque la calavera estaba brillando.
Al salir del club nacional don Eulogio como haba anochecido tomo un taxi y
este lo dejo a la espalda de su casa estiro la mano y se dio cuenta que la
manija de puerta de atrs ceda. Dentro de la ca sita del huerto escucho las
voces de su hijo y su nuera y trato de esconder se cayendo hacia la tierra
pestaeando, frotando sus ojos trat angustiosamente, pero en vano, de
divisar al nio. Entonces lo oy rer: una risa cristalina de nio, espontnea,
integral, que cruzaba el jardn como un animalito. No esper ms; extrajo la
vela de su saco
NIO: "pero conste: hoy acaba el castigo. Dijiste siete das y hoy se acaba.
Maana ya no voy".
NARRADOR: con estas palabras el padre se alej y el nio camino hacia la
casa del huerto. Don Eulogio al verlo prendi la vela y la incrusto dentro de