Rescate
La propiedad del patrimonio subacuático
Nuestra Señora
y la fragata
de Las Mercedes (1804-2010)
Antecedentes
os naciones y veinticinco descen-
dientes de quienes estaban a bordo de la
fragata de guerra española Nuestra Seño-
ra de las Mercedes –que explotó en 1804
por los cañonazos ingleses en las aguas
internacionales alrededor de Gibraltar–,
se disputan entre sí y con Odyssey, em-
presa buscadora de tesoros subacuáticos,
ante una corte en Tampa, Florida, EEUU,
la propiedad de sus tesoros específica-
mente de 594,000 monedas de oro y pla-
ta de las aproximadamente 900,000 que
cargó en el Callao y Montevideo.
Esta ingente cantidad de monedas
–mayoritariamente de plata– eran los
ahorros del segundo en el mando de esa
fragata, don Diego de Alvear y Ponce de
León (1749-1830) cuya esposa y siete hi-
jos perecieron en el ataque inglés. Se sal-
varon él y su hijo mayor Carlos María por
estar en otra nave, ambos fueron llevados
como prisioneros a Inglaterra y hoy sus
descendientes están en ese país, así como
en España, el Perú, Argentina y Uruguay.
Odyssey Marine Exploration (OME),
siguiendo la ancestral tradición de la pira-
tería de océanos y mares, expolia el patri-
monio subacuático de la humanidad tergi-
versando los hechos, en base a las investi-
gaciones efectuadas desde Sevilla, por el
historiador italiano Claudio Bonifacio. En
mayo del 2007 anunció haber encontrado
la fragata española Cisne Negro, en aguas
internacionales frente al Portugal y por su-
puesto ha seguido manipulando la infor-
mación al respecto. Esta empresa también
afirma que cual sea la decisión de la justi-
cia estadounidense seguirá depredando
–o rescatando para algunos y algunas– el
patrimonio subacuático.
Los hechos históricos y la jurispruden-
cia internacional, según los jueces estado-
unidenses Mark Pizzo y Steven D. Merry-
day, evidencian que el buque hundido y
su cargamento constituyen un indivisible
4 Publicación cultural de “La Industria” Chiclayo-Trujillo (Perú), Febrero de 2010
Así debió mostrarse el buque de guerra español Mercedes al navegar. Se trata de una fragata construida en
1788 por los ingenieros navales de los astilleros españoles ubicados en La Habana, Cuba. Actualmente
Odyssey ha encontrado 17 cañones del tipo que la Mercedes debió llevar para defenderse. La información de
Odyssey es confusa pues inicialmente denominó a esta fragata Cisne Negro para engañar a las autoridades.
bien que pertenece a España, como se
puede verificar en la sentencia –redactada
en inglés– que se encuentra en Internet.
Odyssey así como el Perú con los des-
cendientes peruanos de los Alvear se pre-
sentarán respectivamente ante el Tribunal
de Apelaciones de Atlanta, EEUU, para
obtener la parte rentable –y comercializa-
Mariana Mould de Pease
ble de inmediato– de la carga de la Mer-
cedes es decir, de las monedas de plata y
oro. Los medios de comunicación lime-
ños han difundido que las monedas per-
tenecen al Perú porque se trata de piezas
acuñadas en la Casa de Moneda de Lima.
El abogado Carlos Ramos considera
que el juez emitió sentencia en consonan-
cia con los intereses de España, postuló
una inconsistencia crucial: el Perú no ten-
dría derecho a reclamar dichos bienes
debido a que en el momento del hundi-
miento, 1804, no era un Estado sino una
colonia del reino. Asimismo, desea que: el
equipo jurídico del Estado Peruano utilice
una argumentación histórica y no se limi-
te a la tesis simplista del lugar de la acu-
ñación ni al recurso de una soberanía
inexistente en esa época. (El Comercio de
Lima, 29 de diciembre del 2009)
De la Nación a la
República Peruana
Los jueces Pizzo y Merryday sustenta-
ron que la República del Perú no existía
en 1804, ya que era una colonia de Es-
paña y así desestima los reclamos de
nuestro país a las monedas de oro y plata
acuñadas en Lima que forman parte del
tesoro de la Mercedes.
El argumento peruano es geográfico
porque se sustenta en que la plata y el
oro provienen del territorio de nuestro
país como heredero del virreinato de Es-
paña en los Andes, también esgrime de-
rechos patrimoniales sobre este bien cul-
tural. Evidentemente, las autoridades pe-
ruanas no han considerado que las minas
de Potosí están en territorio boliviano
desde 1825 como les recuerdan estos jue-
ces estadounidenses, cuyo argumento his-
tórico propicia la articulación del mundo
hispano andino en el siglo XXI. Las per-
sonalidades peruanas que tienen a su car-
go este reclamo –que ya es un hito en la
política cultural exterior– tampoco tienen
 La Mercedes al explotar desparramó su precioso cargamento de aproximadamente 900,000 monedas, en su gran mayoría de plata ya que sólo llevaba unas cuantas de oro
según los registros históricos de la Corona Española. Odyssey ha extraído unas 594,000 monedas con una abrumadora disparidad entre las de oro y las de plata y no ha
podido explicar a la Corte estadounidense –con evidencias documentales impresas– esta confusión de evidencias.

en cuenta que la República del Perú no para ello ha establecido una fundación en gobierno en la defensa del patrimonio ar- ciando procesos de coordinación y su-
ha ratificado la Convención sobre la Pro- Cádiz, el puerto al cual debió entrar la fra- queológico subacuático. A juicio de estos mando esfuerzos que se están realizando
tección del Patrimonio Cultural Subacuá- gata Nuestra Señora de las Mercedes, en Alvear, es clave garantizar que la protec- en el mapa de todas las costas españolas
tico aprobada por UNESCO, en el 2001, octubre de 1804, como puente de unión ción y recuperación de los yacimientos ar- junto con la creación de equipos de ar-
ya ratificada por España en el 2004 y su entre España y América, en especial con queológicos submarinos sea llevada a queólogos y científicos altamente califica-
finalidad es la negativa a la explotación aquellos países en los que su legado ha cabo por arqueólogos e historiadores que dos que inaugurarán una nueva era de
comercial de los vestigios que han queda- dejado huella. Este comunicador social se se preocupen por salvaguardar la memo- conocimiento de nuestra memoria naval.
do en los fondos marinos; así como la co-
operación entre Estados con miras a sal- Colofón
vaguardar este patrimonio y hacer cobrar Esta es una apretadísima síntesis de
al público conciencia de su importancia y una controversia transatlántica muy pro-
propiciar la formación en arqueología pia del siglo XXI sobre el dinero y la ética
subacuática. de la preservación del patrimonio cultural
Pizzo y Merryday consideran que por como elemento de particular importancia
la Capitulación de Ayacucho de 1824 Es- en la historia de los pueblos, las naciones
paña entregó al Perú todos los territorios y sus relaciones mutuas en lo concernien-
y sus objetos dentro de dicho territorio. te al bien común.
Asimismo, que España y el Perú suscri- Este es un aspecto de la historia que
bieron en 1879 un tratado de paz y amis- no puede ser soslayado ni ignorado por
Gorka Lejarcegui - El País / España

tad que debidamente ratificado aseguraba los abogados, diplomáticos y expertos en

el completo olvido del pasado así como numismática peruanos que han pedido a
una sólida e inviolable paz entre la Repú- los jueces estadounidenses definir la titu-
blica del Perú y Su Majestad el Rey de laridad de la carga, porque con su igno-
España. rancia nos marginan del devenir histórico
inmediato de la humanidad. La margina-
Conclusión al siglo XXI ción del concierto de las naciones nos
El fallo judicial precisa que por más de empobrece; por ello, insto a las autorida-
doscientos años desde que explotó la José María Moncasi de Alvear, posa con dos lienzos de su antepasado don Diego de Alvear, capitán de la Merce- des peruanas que no se pongan a lado de
Mercedes, sus bienes materiales y sobre des en torno a cuya figura se ha propuesto cohesionar el mundo hispano americano con la puesta en valor del los y las piratas del siglo XXI ante la justi-
todo los restos humanos de sus ocupan- cargamento de esta fragata. Este aristócrata y publicista español presenta sí una propuesta –transparente y ve- cia estadounidense y que consideren que
raz– para defender y preservar el patrimonio cultural subacuático como bien común de la humanidad.
tes no han sido perturbados; asimismo, el Perú debe ser coherente con sus oríge-
que por la ley internacional y la solemni- ha propuesto revalorizar la contribución ria histórica y no solamente por las ga- nes hispano andinos y hacerse presente
dad de su memoria, España tiene intere- de su antepasado a la historia de España, nancias económicas. en la Fundación Diego de Alvear y Ponce
ses soberanos en su preservación. a la cabeza de la mayoría de integrantes Así –como se puede comprobar en su de León.
José María Moncasi de Alvear, des- de la amplia familia Alvear –aproximada- blog– afirma: * 2008 “De la actualidad del patrimonio subacuáti-
cendiente de Diego de Alvear y Ponce de mente 1,500 descendientes– que no quie- Nos congratula saber que el Gobierno co” Lundero, Revista cultural de La Industria, Tru-
León, quiere recuperar su memoria y ren parte del tesoro, por eso, apoyan a su español, a través de la Armada, está ini- jillo – Chiclayo. (Perú). Año 30. N° 350.

Publicación cultural de “La Industria” Chiclayo-Trujillo (Perú), Febrero de 2010 5