Cacho de Castelar

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Cacho Never Dies

Por Don Richard 2 (Candidato para el 2003 del Partido Anarquista Visigodo)

Cacho, en su última incursión al corrupto mundo exterior, creyó

que iba encontrar un paraíso. Pobre iluso. Cuando volvió a la
República Gada, le agarró un ataque y fue encarcelado por corrupción
de siete menores en la Comisaría “Presidente Antonio”, pero, como
siempre pasa, salió por la puerta de atrás a los diez minutos y se fue a
embriagar al barcito de la esquina con Guido Suller y su nuevo
amiguete Rafa, un gordo que vende comics en Marcelo T. De Alvear
2002 (listo, ya cortemos con los chivos camuflados).
Ahora mismo se encontraba recostado en su sucio sillón en su
casa de lona, cartón y chapa, viendo por la tele como el Ministro de
Economía, Federico Klemm, decía que la recesión se acaba el año
que viene, que se bajarán los impuestos y estaremos entre los diez
países más grandes del mundo.
-Si claro, y yo tomó agua mineral –comentó mientras se tomaba
su última cerveza del día-. A ver que hay en otros canales...
Claro, como ahora no hay noticias la televisión es aburrida. Ya
no hay cortes de ruta, es más ya no hay ni rutas. Aparte el voto bronca
ganó las últimas elecciones, y Osama Bin Laden está codo a codo con
los excrementos, pero las puteadas los siguen de cerca. La presidenta
Lita de Lazari resultó ser igual al último mandatario. Por lo menos los
ladrones abandonaron en masa el país alegando que no quedaba
nada que robar. La mejor noticia es que la gente piensa que la película
de “Mad Max” es una profecía de cómo iba a quedar la Ex – Argentina.
-Bla, bla, bla. Siempre lo mismo. Me rompo el ojete laburando
ocho horas en ese remis para tener que recibir quebrachos, encima
metidos en el banco. Pero después sale Lita y dice “Era una jodita
para los argentinos. Ahí tenes la cámara, decile al muppet lo que
quieras” y te pone un muñeco para que lo destruyas. Aparte ahora el
dólar esta a un dólar = cien quebrachos y no podemos escapar de acá.
Entonces Cacho, usando sus consejos mundanos, se dio cuenta
que tenía una necesidad, una necesidad de joda. Y se le ocurrió
transforma su “casa” en La Torre del Terror.
Entonces agarró su teléfono hecho de dos vasitos y un hilo, y
llamó al terrorista de la villa, el señor Balza Triangulation, y le encargó
un hacha, granadas de gas nervioso y un mortero.
-¿Aceptas Lecop?
-Sí, pero te lo subo al quince por ciento.
-¡Hijo de puta! ¡Maricón! ¡Putativo!
-Bueno, si no quiere.....
-Está bien, está bien, trae la merca para mañana y te doy un
cheque.
Cacho cortó con el amigo Balza y salió un rato a tomar aire.
Claro, fresco no era, porque se lo pungearon los Ministros de Medio
Ambiente. El Riachuelo es usado como sustituto del ácido sulfúrico y
Lita lo hizo Patrimonio Nacional, junto al dulce de leche y los canales
porno. Y bueno, es la Ex – Argentina.
Entonces Cacho, para hacer la Torre del Terror, contrató al ya
jubilado Pitufo Enrique y su banda de gnomos terroristas para que la
torre tenga sus misterios y leyendas. Les dijo “Yo les doy una botellita
de ginebra y se pueden ir a afanar a los pibes de la plaza, pero se me
ponen las pilas como guardianes de la Torre del Terror”, y el pitufo dijo
“¡Chacachicachucacha!”.
Entonces Cacho transformó su casa de dos pesos en la Torre
del Terror, construyendo un segundo piso con cajas de sus changas
nocturnas. Por supuesto que de torre no tenía un pelo, pero era de
terror.
-Listo loco, es una obra maestra.
 Al otro día llegó Balza con unos colegas colombianos, y le trajo
sus cosas y Cacho le dio el cheque.
-Che, Cacho no sabia que te llamabas Verdulero Cacho Montoto.
-Shhh, toma diez quebrachos más y vos no viste nada.
-Bien, más coimas. Encima el Senado me viene dando cada
fangote de guita.
Cacho se armó con el hacha, le dio las granadas de gas nervioso
al Pitufo Enrique y su banda de gnomos terroristas, e instaló el mortero
en lo alto de su torre.
-Listo calipso, ahora la tenemos que presentar al público...
-Che Cacho, secuestremos a alguien, lo traemos a la torre y
pedimos rescate- dijo el Pitufo Enrique-.
El pitufo, entonces, mandó su banda de gnomos terroristas a los
estudios de América, secuestraron a la Suller y la llevaron a la torre.
-Che Cacho- dijo el pitufo-. Uno de mis gnomos se murió por una
infección auditiva cuando Silvia empezó a hablar.
-¡Dale, amordázala, que no me la banco más!
Entonces Cacho llamó a los de “Rumores” anunciando la captura
de Silvia y pidiendo diez mil porteños por liberarla.
Obvio que los programas de chimentos fueron a la entrada de la
torre a documentar todo. Aparecieron Jacobo, Mich, Clombo, Zulemita,
Malena Candelmo, Florencia de la V (erga) y un largo etc.
-Listo flacos, ahora la Torre del Terror es re famosa. Aparte
vamos a llenarnos de plata con el rescate de esta tipa.
Pero los días pasaban y la familia Suller no puso ni un mango,
alegando que estaban todavía enojados con Silvia, con Claudio, con
Guido, con la Santa Trinidad, con Saddam Hussein y con los Mc
Nuggets.
-Que bosta che, nadie la quiere rescatar y ahora la prensa esta
documentando el nacimiento de un mono en el zoológico. Libérenla y
punto.
Así Silvia fue liberada para el horror de sus oídos, y Cacho cayó
en un pozo depresivo por cinco minutos hasta que Rafa y El Pitufo
Enrique le dijeron “Che Cacho, vamos a hacer un reventón y ha
agarrarnos una resaca con vodka ¿venís?”
Y Cacho fue con Dios.