UNIVERSIDAD PERUANA UNIÓN

Facultad: Ciencias de la Salud

Materia: Fundamentos de Liderazgo

Fecha: 08/06/11 Alumno: André Choroco Del Pozo

REVISIÓN DE LIBRO 1: LOS 7 HÁBITOS DE LA GENTE ALTAMENTE

EFECTIVA

1. Datos del Libro:

Covey, Stephen Los 7 Hábitos de la Gente Altamente Efectiva. Buenos Aires: Paidos, 1990.

2. Datos del Autor:

Stephen Covey reside con su esposa Sandra, y su familia en Provo, Utah, que es en donde
se encuentra La Universidad Brigham Young University que es precisamente donde el Dr.
Covey enseñó antes de la publicación de su prestigioso libro. Stephen Covey además es
padre y abuelo, tiene nueve hijos y cuenta con cincuenta y dos nietos; recibió el premio de
Paternidad del «National Fatherhood Initiative», (iniciativa nacional de paternidad) en el
año 2003.

Stephen Covey posee una licenciatura en Administración de empresas, que le fue otorgada
por la Universidad de Utah (en Salt Lake City), una maestría en Administración de
Empresas, obtenida de la Universidad de Harvard y un doctorado en historia y doctrina de
la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, otorgado por la Universidad
Brigham Young. Prácticamente ha dedicado gran parte de su vida a la enseñanza y practica
de los preceptos que detalla en sus libros, de cómo vivir y liderar organizaciones y familias
basándose (centrándose) en principios los cuales él sostiene, son universales y como tales
son principios aceptados por las grandes religiones y sistemas éticos del mundo.
(http://es.wikipedia.org/wiki/Stephen_Covey)

3. El contenido del libro:

a. La tesis del libro: Este autor en su libro “Los 7 Hábitos de la Gente

Altamente Efectiva” materializa muchos de los principios fundamentales de la eficacia
humana. Presenta hábitos que son básicos y primarios de manera didáctica dándole un
toque de personalidad a cada uno. Utiliza un método claro, certero y eficiente: casi un
cursillo dividido en siete etapas que el lector deberá asimilar y poner en práctica por su
propia cuenta.

b. Contenido del libro: Este libro, denominado como un texto de auto ayuda,
está ordenado en cuatro bloques con un promedio de tres capítulos por bloque. Para los
propósitos de este informe, se ha considerado la organización que ha establecido el
autor de la obra
 Bloque I: Paradigmas y principios
En esta primera parte el autor da una introducción de manera breve y concisa a los
siete hábitos a tratarse en lo que resta del libro. Comprende los dos primeros capítulos (“De
adentro hacia afuera” y “Los siete hábitos a vista de pájaro”). El autor cuenta un poco de sí
mismo y unas cuantas experiencias que él tuvo como padre de una familia. Plantea el
problema de la posición que unos toman frente a ciertos problemas. También habla respecto
a la influencia que producimos sobre los demás sea esta positiva o negativa. La conducta y
relaciones humanas se basan en la ley de la cosecha dice el autor. Es necesario a veces un
cambio de paradigma, observar al otro y observarse a uno mismo. Los paradigmas son
inseparables del carácter. Ser es ver en la dimensión humana. Por lo tanto nuestros
paradigmas deben estar basados en nuestros principios. Cuando dice “de adentro hacia
afuera” se refiere a que el cambio debe suceder en nosotros primero. Debemos ser el tipo de
persona que genere energía positiva y elude la energía negativa en lugar de fortalecerla. Si
uno quiere despertar confianza, debe ser digno de confianza. Si uno aspira a la grandeza
secundaria del talento reconocido, debe centrarse primero en la grandeza primaria del
carácter. Básicamente, nuestro carácter está compuesto por nuestros hábitos. “Siembra un
pensamiento, cosecha un hábito; siembra un hábito, cosecha un carácter”. Los hábitos son
factores poderosos en nuestras vidas. El autor sugiere que el contenido de este libro no sea
revisado una sola vez sino que se esté en constante revisión para así ayudar a hacer un
crecimiento con cambios efectivos.
Bloque II: Victoria privada
En esta porción el autor ya da inicio a los siete hábitos y empieza por los primeros
tres los cuales están diseñados para aplicarlos con uno mismo. El primer hábito es “Sea
proactivo”. Esto significa tomar la iniciativa, actuar uno mismo, comprometerse en el
trabajo y mantener los compromisos que uno propone. También significa que somos
responsables de nosotros mismos, nuestra conducta es un reflejo de nuestras decisiones. Si
somos responsables con nosotros alcanzaremos la libertad. El autor desafía a los lectores a
hacer una prueba de proactividad que dura 30 días. Sugiere que durante ese lapso se trabaje
dentro del círculo de influencia auto proponiéndose compromisos y cumpliéndolos siendo
uno la solución y no el problema. El segundo hábito (Empiece pensando en un objetivo) se
trata de cada día buscarle un objetivo claro para nuestras acciones. Para hacer esto uno debe
mirarse a uno mismo, a su interior. Este segundo hábito se basa en principios de liderazgo
personal. El tener este hábito hace que nuestra vida tenga un sentido ya que nuestras
acciones tendrán un propósito. El tercer hábito se trata de la administración personal donde
menciona que la administración no es igual a liderazgo. En este capítulo se habla de la
administración de nuestras vidas y nuestro tiempo. Propone una frase resumen para la
administración eficaz “Organizar y ejecutar según prioridades”. Uno debe disciplinarse en
la toma de decisiones y en decir “sí” o “no”. Tenemos que priorizar lo que es urgente y lo
que es importante.
 Bloque III: Victoria publica
Esta sección abarca los cuatro siguientes capítulos y los tres siguientes hábitos los
cuales ya tratan de relación interpersonal. Da un pequeño preludio dando una definición a
la interdependencia. Para ser interdependientes primero debemos ser independientes. La
victoria privada, es decir de uno mismo, precede a la victoria pública. Para tener éxito con
los demás primer debemos tener éxito con uno mismo. Por lo que debemos conocernos,
evaluarnos y ser estrictos y disciplinados con nosotros mismos. Debemos crear una cuenta
bancaria de nuestras emociones y administrarlo cuidadosamente. Luego de esto podemos
pasar a la victoria pública donde nuestro trabajo y nuestra interacción con los demás
crearán una interdependencia. De este modo seguimos con el cuarto hábito: “pensar en
gano/ganas. Propone hacer un balance de los objetivos propios con los objetivos de los
demás y así buscar un estado de equilibrio. Gano/ganas permite un beneficio mutuo. Para
esto se debe tener confianza entre los miembros participantes y una actitud de cooperación.
En el quinto hábito trata de la importancia de la comunicación que debería existir entre
cooperantes. “Procure comprender primero y después ser comprendido”, este principio es
importante para la eficacia. Cuando uno escribe y otro lee, hay comunicación. Cuando uno
habla y otro escucha, hay comunicación. Estas formas de traslado de información deben ser
realizadas con un alto nivel de importancia. “Procure comprender primero” supone un
cambio de paradigma muy profundo. Lo común es ver que primero lo comprendan a uno y
cuando surge una discusión resultamos diciendo que no nos comprenden. A menudo
proyectamos nuestros sentimientos y nuestras experiencias en la otra persona sin escucharle
por completo. Luego sucede que uno dice: “no me comprende, no me escucha”. Todos
estamos llenos de nuestras razones, experiencias y autobiografías y tenemos el deseo de ser
comprendidos. Terminamos entonces haciendo un monólogo colectivo lo cual no dirige a lo
que se busca en una buena comunicación. Para evitar esto uno debe ser quien se cambie de
paradigma y comprenda primero al otro para luego de tener la idea completa y el
entendimiento integral del otro, expresar lo útil y coherente. Una comunicación organizada
hace una comprensión mutua. Así llegamos al sexto hábito: La sinergia. Esta se refiere a
que el todo es más que la simple suma de las partes. Entrelazar ideas y trabajarlas juntas
hace un resultado mejorado. Hay una diversidad de ambientes donde podemos usar la
sinergia, hasta con uno mismo en situaciones adversas. Hay que tener creatividad para
tomar las ideas divergentes y formar una sola respuesta que comprenda todos los puntos de
vista. Para esto es necesario cultivar primero los cinco hábitos anteriores.
Bloque IV: Renovación
En este último segmento están los dos últimos capítulos: el séptimo hábito y una
conclusión de todo. “Afile la sierra” es el título para el décimo hábito y el séptimo hábito.
Aquí nos habla de renovarnos en nuestras cuatro dimensiones (Física, mental, social y
espiritual) con el fin de realizar el mejor resultado posible utilizando todos los hábitos
aprendidos. Físicamente implica un régimen alimenticio balanceado, descanso suficiente y
ejercicio regular. Espiritualmente propone guardar un momento de meditación y lectura de
las escrituras a diario en un lugar apartado donde se pueda estar a solas. Esta dimensión es
nuestro núcleo y nos proporciona un liderazgo de nuestras propias vidas. Mentalmente,
significa tener bien ocupada la mente en actividades productivas, siendo disciplinados en el
estudio formal. Socialmente implica llevar una buena convivencia con los que nos rodean.
En el acto cotidiano que hacemos al relacionarnos con los demás podemos renovarnos
haciendo cada vez mejor las cosas y manejo de situaciones. Aunque la renovación en cada
una de las dimensiones de nuestra naturaleza es importante, sólo alcanza una eficacia
óptima cuando las abordamos conjuntamente. Las personas que desarrollan estos siete
hábitos son los que llegan a ser las piedras angulares de las empresas y de la sociedad. Hay
partes de la naturaleza humana que no pueden alcanzarse con la legislación o la educación;
para abordarlas se necesita el poder del Señor.
4. Importancia para la materia: Esta obra ayuda a tener un mejor paradigma para llegar a
ser un buen líder. El fin de este curso es preparar profesionales líderes y mediante la lectura
de este libro nos formamos con hábitos que nos hacen más eficaces. El autor siempre hace
alusión al lector como una persona quien dirige a otro grupo usando métodos de balance y
equilibrio social iniciando por un buen entendimiento de uno mismo. Estos siete hábitos
también nos ayudan a ser mejores alumnos y mejor ayuda/apoyo al docente.

5. Importancia para el lector: En la Biblia nosotros somos llamados a ser cabeza y no cola.
Como cristianos debemos buscar la mejor manera de ser líderes para Cristo en nuestra
sociedad o aula de clases. Al seguir los siete hábitos propuestos en este libro conjuntamente
con la lectura de las Sagradas Escrituras podremos ser reconocidos como hijos de Dios a
donde quiera que vayamos. Tendremos una actitud digna a seguir e imitar porque estaremos
imitando al ser supremo, Dios.