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VACUNAS CONTRA DIFTERIA - TÉTANOS - TOS FERINA (DTP)

1.- VACUNA ANTITETÁNICA

 El tétanos es una causa importante de morbimortalidad en los países del tercer


mundo, especialmente el tétanos neonatal. En España es casi exclusivo de
adultos o ancianos no vacunados o mal vacunados.
 Incidencia estimada: 0,1-0,2 x 100.000 Hab.
 La tasa de letalidad se mantiene en el 40%.
 Puertas de entrada
 Heridas (77%).
 Intervenciones quirúrgicas de abdomen y miembros inferiores (14%).
 Pinchazos accidentales (3,5%).
 Adicción a drogas por vía parenteral (3,5%).
 Presentaciones de la vacuna (toxoide tetánico):
 T: toxoide tetánico solo.
 Td: asociado a toxoide diftérico a dosis baja, para adultos y mayores de 6 años
 DT: asociado a toxoide diftérico, para niños de hasta 6 años.
 DTP: asociado a toxoide diftérico y tos ferina, para niños de hasta 6 años.
 dTpa: asociado a toxoide diftérico y tos ferina, para adultos, adolescentes y 
niños mayores de 6 años.
 Eficacia

 La serie primaria logra casi un 100% de protección, que se mantiene al menos


10 años.

 Efectos secundarios

 Inflamación en la zona de la inyección, fiebre y malestar general.


 Excepcionalmente neuropatía periférica, urticaria o anafilaxia.
 Indicaciones
 Inmunización sistemática contra el tétanos a partir de los 2-3 meses de edad y
mantenimiento de la inmunización en niños, adolescentes y adultos.
 Prevención del tétanos en heridas en individuos no o mal vacunados o heridas
de riesgo:
 Heridas contaminadas (tierra, saliva, heces, etc.).
 Heridas con gran destrucción o pérdida tisular.
 Heridas que tarden más de 24 horas en ser atendidas.
 Quemaduras y congelaciones.

RECOMENDACIONES EN CASO DE HERIDA


Estado vacunal Herida Herida de riesgo
limpia
Bien vacunado. Última dosis   VAT si última dosis > 5 a.
<10 a.
Bien vacunado. Última dosis VAT  VAT + IGT
>10 a.
Mal vacunado  Completar Completar VAT + IGT
VAT
No vacunado o desconocido VAT (3 dosis) VAT (3 dosis) + IGT
VAT = vacuna antitetánica
IGT = inmunoglobulina específica antitetánica

 
 Contraindicaciones y precauciones

 Reacción local grave, fiebre alta (>40,5 ºC), anafilaxia o neuropatía periférica
tras dosis anteriores.
 No administrar nuevas dosis hasta un año después de la primovacunación o de
una dosis de recuerdo, ya que aumenta la incidencia de reacciones por
hipersensibilidad.
 No se deben acortar los intervalos entre las dosis que conforman la
primovacunación (mínimo 4-6 semanas), ya que disminuye la efectividad y
aumentan las reacciones secundarias.
 Calendario, posología y administración

 Vía IM. 3 dosis (separadas mínimo 4-6 semanas) a partir de los 2-3 meses, un
refuerzo a los 18 meses y un recuerdo a los 4-6, 14-16 y cada 10 años.
 La primovacunación en niños o adultos no vacunados consiste en 3 dosis,
administradas a los 0-1-12 meses, y un recuerdo cada 10 años.

 Para la vacunación antitetánica existen, en nuestro país, los siguientes


preparados comerciales:

2.- VACUNA ANTI -TOS FERINA

 La tos ferina es una enfermedad propia de niños pequeños, en los que puede
ser grave, especialmente en menores de 6 meses. Puede padecerse ya en la
segunda semana de vida debido a que no se adquiere inmunidad por vía
transplacentaria.

 En España la cobertura vacunal es del 95% pero aún se declaran alrededor de


1000 casos/año, seguramente menos de la incidencia real, evitables en parte
mejorando la cobertura de la 4ª dosis a los 18 meses e incluyendo la vacuna
anti-tos ferina a los 4-6 años, en forma de DTP acelular. Por otra parte, existe
un declive de la inmunidad a partir de los 6-10 años de la última dosis, por lo
que muchos adultos no están ya adecuadamente protegidos.

 No existe tratamiento eficaz. La presentación atípica es frecuente y puede ser


difícil de diagnosticar, especialmente en adultos, que son los que mantienen la
circulación del agente infeccioso en la comunidad.

 Complicaciones

 Son casi exclusivas de la tos ferina adquirida en los primeros meses de vida e
incluyen:
 Convulsiones (2,6%)
 Neumonía (17%)
 Encefalopatía (1,1%)
 Crisis de apnea
 En lactantes y niños pequeños, la mortalidad es significativa (1:1.000) y las
secuelas frecuentes (1:100), sobre todo bronquiectasias y secuelas
neurológicas.

  Vacuna anti-tos ferina acelular (DTPa)

 Se prepara con fracciones atóxicas de Bordetella pertussis. Las vacunas de


distintos fabricantes difieren en los componentes (número, tipo y cantidad)
acelulares de B. pertussis. Contienen:

 Toxina pertussis inactivada (TP)


 Uno o más de otros componentes bacterianos:

 Hemaglutinina filamentosa (FHA).


 Pertactina (PRN)
 Fimbrias de los tipos 2 y 3 o aglutinógenos (AGG).

Eficacia/seguridad

 Es tan eficaz como la preparada con bacilos enteros. Confiere protección en el


85-90%, tras tres dosis, si se emplean vacunas con 2 a 5 componentes.
 Son capaces de prevenir la sintomatología clínica pero no la circulación del
agente infeccioso. Se desconoce su eficacia en la prevención de la colonización
y del estado de portador.
 Reduce en un 60% el número de reacciones locales (inflamación) y sistémicas
(fiebre, irritabilidad).
 Son aun más infrecuentes los episodios de llanto prolongado y resultan
excepcionales los cuadros de hipotonía e hiporreactividad.

Contraindicaciones y precauciones

 Son contraindicaciones las generales de las vacunas.


 Reacción de hipersensibilidad inmediata a componentes vacunales en dosis
anteriores de las vacunas DTPe, DTPa o DT
 Debe evitarse la DTP, tanto entera (DTPe) como acelular (DTPa), y emplear sólo
DT si una dosis previa ha originado:
 Encefalopatía en los 7 días siguientes a su administración.
 Enfermedad neurológica progresiva, inestable o que predisponga a
la aparición de convulsiones.
 Reacción anafiláctica tras una dosis previa de vacuna DTPe o DTPa.
 Puede emplearse la DTPa (con precaución) si:
 Convulsión (febril o no) en los primeros 3 días tras la vacunación.
 Fiebre > 40,5 ºC, inexplicada por otra causa, en las primeras 48 horas
tras la vacunación.
 Crisis de hipotonía e hiporreactividad en las 48 horas siguientes.
 Llanto persistente (de 3 o más horas) en las primeras 48 horas tras la
vacunación.
 Se debe aplazar o evitar la administración si existe un proceso neurológico
progresivo o mal aclarado o convulsión reciente sin causa conocida.

Calendario, posología y administración

 La pauta recomendada es de 3 dosis separadas 2 meses (2-4-6 meses de vida),


un refuerzo en el segundo año (15-18 meses) y un recuerdo a los 4-6 años. La
quinta dosis de DTPa no debe administrarse antes de los 4 años (se recomienda
hacerlo a los 6).
 Se presenta en jeringas precargadas o viales unidosis de 0.5 ml para inyección
IM.  

Profilaxis en contactos

 Los contactos estrechos de un caso de tos ferina deben observarse al menos 14


días y recibir eritromicina: 40-50 mg/kg/día (hasta 2 g/día) en 4 dosis,
durante esos 14 días.
 Deben tratarse todos los familiares y compañeros y cuidadores de la
guardería simultáneamente y con independencia de su estado vacunal, ya que
la inmunidad producida por la vacuna no es absoluta.
 Los menores de 7 años no vacunados o con menos de 4 dosis, deben
vacunarse. Si han recibido 4 dosis, se da un recuerdo de DTPa, salvo si tienen
más de 6 años o han recibido la última dosis menos de 3 años antes.
 Aunque probablemente la tos ferina confiera inmunidad frente a la propia
enfermedad, se desconoce su duración. Los niños que han pasado una tos
ferina bien documentada (cultivo positivo o clínica compatible y contacto con un
caso comprobado) deben recibir DT en lugar de DTP en el resto de sus
vacunaciones sistemáticas. Ya que la respuesta inmunitaria puede ser
insuficiente en lactantes, algunos autores recomiendan administrar igualmente
DTPa en las sucesivas dosis.

3.- VACUNA ANTIDIFTÉRICA

 En España no hay casos de difteria desde 1987, pero la cobertura vacunal es


menor del 90% en parte del país. La prevalencia de anticuerpos protectores es
del 96% en menores de 10 años. En adultos, incluso en comunidades con
buenas coberturas vacunales, es inferior al 30%, lo que supone un riesgo
importante dada la situación epidemiológica europea estos últimos años.

Presentaciones

 Td: toxoide tetánico y diftérico (2,5 Lf) para adultos y mayores de 6 años.
 DT: toxoide tetánico y diftérico (25 Lf) para niños de hasta 6 años.
 DTPa: toxoide tetánico, diftérico (25 Lf) y tos ferina acelular, para niños de
hasta 6 años.
 DTPa con otros antígenos (vacunas tetra, penta y hexavalentes): Hib,
Hepatitis B, polio inactivada.
  dTpa: toxoide tetánico, diftérico tipo adulto y tos ferina acelular con baja carga
antigénica, para adultos, adolescentes y  niños mayores de 6 años

Inmunogenicidad
 El toxoide confiere inmunidad contra el efecto de la toxina producida por el
Corynebacterium diphteriae (total durante 3 años y parcial durante 10).
 Con 4 dosis se logran niveles protectores de antitoxina en el 90-95%. Los
niveles bajan a partir del 5º año y hasta el 10º y por ello se recomienda un
recuerdo cada 10 años (Td).

Efectos secundarios

 Reacciones locales frecuentes: inflamación, dolor, prurito o aparición de un


nódulo sensible durante varias semanas.
 Generales: fiebre y malestar, cefalea...
 Otros: urticaria, anafiláctica o no, llanto inconsolable, cuadros colapsiformes y
neuropatía periférica, debidos muchas veces al componente tos ferina o
tetánico que acompañan al diftérico.
Indicaciones
 Inmunización sistemática contra la difteria a partir de los 2-3 meses de edad
e inmunización y mantenimiento de la inmunización en niños, adolescentes y
adultos.
 Vacunación o revacunación de individuos susceptibles en brotes de difteria.
 Vacunación o revacunación de los contactos de un caso de difteria (además,
profilaxis con penicilina benzatina o eritromicina y 500 U de antitoxina diftérica
si el contacto es estrecho).

Contraindicaciones y precauciones

 Las generales de las vacunas.


 Para la DTP, las de la anti-tos ferina y la antitetánica.
 Para la DT, las de la antitetánica, edad de 7 o más años y embarazo.
 Para la Td, las de la antitetánica. Si se indica durante el embarazo, evitar el
primer trimestre.

Calendario, posología y administración

 3 dosis (DTPa) separadas 4-8 semanas, desde los 2 meses. Una cuarta dosis
(DTPa) a los 18 meses. Una quinta dosis (DT o DTPa) a los 4-6 años. Un
recuerdo (Td o dTpa) a los 14-16 y, a partir de entonces, cada 10 años.
 La DT puede sustituir a la DTP a partir de los 2 meses si el componente tos
ferina está contraindicado.
 La Td debiera sustituir a la T en todas sus indicaciones para mantener la
inmunidad de los adultos.
 Es de esperar que la vacuna dTpa (toxoide diftérico tipo adulto, toxoide
tetánico y anti tos ferina acelular con baja carga antigénica)  se emplee en
lugar de la Td en la vacunación de los adolescentes de 14-16 años y, en el
futuro, en la revacunación de los adultos cada 10 años.
 Los preparados comerciales disponibles se han indicado en el apartado dedicado
a la vacuna antitetánica.

 VACUNA ANTI-HAEMOPHILUS INFLUENZAE TIPO b

 La enfermedad invasiva por Hib (meningitis, epiglotitis, neumonía, artritis,


sepsis, etc.) es:
 Característica de los primeros 5 años de vida (95% de los casos),
especialmente de los 2 primeros (75%).
 Rara en menores de 2-3 meses y en mayores de 5 años
inmunocompetentes.

 El recién nacido hasta los 2-3 meses se encuentra habitualmente protegido por
anticuerpos (anti-PRP) maternos transferidos por vía transplacentaria. La
inmunidad natural se desarrolla progresivamente como consecuencia del estado
de portador nasofaríngeo e infecciones por este germen y no es completa hasta
los 5 años.

 Son factores de riesgo para la infección por Hib, además de la edad:  

 Déficits inmunitarios: inmunodeficiencia, inmunosupresión, asplenia...


(aumento de la susceptibilidad).
 Asistencia a guardería, hacinamiento doméstico o existencia de
hermanos menores de 7 años (aumento de la exposición).

 Las vacunas disponibles en España se componen de polisacárido capsular


PRP (polirribosil-ribitol-fosfato) conjugado con una proteína, toxoide
tetánico en ACT-Hib e Hiberix (PRP-T) y un mutante atóxico de la toxina
diftérica en Hib-Titer (PRP-CRM), que potencia su inmunogenicidad y les
proporciona capacidad de originar memoria inmunológica.

Inmunogenicidad y eficacia

 Protegen de forma efectiva frente a enfermedades invasivas por Hib con


eficacia superior al 95% a partir de la 2ª dosis. Los pocos fracasos de la vacuna
se producen las primeras semanas tras su administración (tiempo de respuesta)
o en individuos con deficiente respuesta a la vacunación (tan infrecuente que la
aparición de enfermedad invasiva por Hib en un vacunado obliga a su estudio
inmunológico).
 No protege contra haemophilus capsulados distintos del tipo b, ni contra
haemophilus no capsulados, causantes de otitis, bronquitis y neumonía, pero no
de enfermedad invasiva.
 Reducen la tasa de portadores nasofaríngeos en la comunidad, favoreciendo así
la inmunidad de grupo.
Indicaciones
 Vacunación sistemática. A partir de 1999 está incluida en el calendario de
vacunas sistemáticas de todas las Comunidades Autónomas españolas, para
todos los niños a partir de los 2 meses de edad o lo antes posible, hasta cumplir
los 5 años.
 Indicaciones específicas:
 Niños de 2 meses a 5 años con neumopatía crónica o asplenia anatómica
o funcional, neoplasia, transplante, infección VIH sintomática o no, y
otras causas de inmunodeficiencia o inmunosupresión.
 Mayores de 5 años no vacunados con asplenia, VIH, déficit IgG2,
trasplante de médula o neoplasia.
 Menores de 2 años con una infección invasiva por Hib, ya que tienen
riesgo de padecer un segundo episodio. La infección en mayores de 2
años confiere inmunidad y hace innecesaria la vacunación.
 Ante un caso de enfermedad invasiva por Hib deben vacunarse los
contactos familiares y escolares menores de 4 años no o
incompletamente vacunados (además de recibir rifampicina).
Contraindicaciones
 Enfermedad febril aguda.
 Hipersensibilidad al toxoide tetánico o diftérico u otros componentes de la
vacuna.
 Reacciones graves en dosis anteriores.
Calendario, posología y administración

 Vacuna Hib sola (empleada actualmente en nuestro medio sólo para


indicaciones específicas o para completar calendarios incompletos):  

 
La pauta recomendada de administración es la siguiente:
ACT-HiB o Hiberix Hib-TITER (PRP-CRM)
(PRP-T)
Edad Nº de dosis Edad Nº de dosis
de de
inicio inicio
2-5 3 separadas 1-2 2-6 m 3 separadas 1-2
m m + 1 a los 15- m + 1 a los 12-
18 m 18 m
6-11 2 separadas 1-2 7-11 3 separadas 1-2
m m + 1 a los 15- m m
18 m
12- Dosis única 12- 2 separadas 1-2
60 m 14 m m
    15- Dosis única
60 m

 Hib asociada a otros antígenos (empleada habitualmente, para la


vacunación sistemática):

Hib + DTPa INFANRIX-Hib (GSK)


Hib + DTPa + VPI PENTAVAC (Sanofi Pasteur
MSD)
INFANRIX-IPV + Hib (GSK)
Hib + DTPa + VPI + INFANRIX-Hexa (GSK)
Hep B
Para la vacunación sistemática la pauta es la común a las vacunas combinadas, tetra,
penta o hexavalentes, empleadas para ese fin: 2-4-6-18 meses.
 Todas estas vacunas deben conservarse a +2/+8 ºC y se administran vía IM
(ACT-HiB también SC).
 Es necesaria la vacunación simultánea o previa con DTP para inducir una
inmunidad adecuada.
 Pueden intercambiarse los preparados de diversos fabricantes, tanto para la
serie inicial como para la revacunación.
 Pueden administrarse simultáneamente (jeringas y lugares diferentes) a las
demás vacunas sistemáticas: DTP, polio, MenC, Neumococo, hepatitis B, triple
vírica.
 Actualmente se discute la necesidad de administrar 4 dosis de esta vacuna y
algunos países europeos utilizan sólo 3 dosis, ya sea a los 2-4-6 meses o dos
en los primeros meses y la tercera 4-14 meses después. En los países que
utilizan sólo 3 dosis no se ha observado un descenso de la inmunogenicidad. De
momento, en nuestro país se mantiene la recomendación de las 4 dosis porque:

 La pauta ideal con 3 dosis serían 2 en los primeros meses (2 y 4 meses)


y un recuerdo varios meses o hasta un año después. Ello resultaría difícil
de encajar en los calendarios actuales.
 Con vacunas combinadas la respuesta al componente Hib es menor que
con vacunas independientes con los diversos antígenos. Aunque la
eficacia protectora parece ser la misma y depende más de la memoria
inmunológica que de los niveles de anticuerpos, hasta no disponer de
más datos se recomienda mantener la pauta de 4 dosis.

Pautas en niños con vacunación incompleta

Edad  Vacunación   Nº de dosis precisas


previa Hib
7-11 1 ó 2 dosis 1 a los 7-11 meses  
meses + recuerdo a los 12-15.
12-14 2 dosis antes de 1 dosis
meses los 12 m
12-14 1 dosis antes de PRP-CRM:  2 separadas 2 m
meses los 12 m PRP: 1 sola dosis
15-59 Cualquier pauta 1 dosis
meses incompleta

Pautas de vacunación en situaciones especiales

 Prematuros. Misma pauta que en recién nacidos a término.


 Inmunodeprimidos:
 Asplenia anatómica o funcional. Pauta habitual.
 Pacientes con neoplasias y trasplantados. Una dosis adicional antes de la
quimioterapia, inmunosupresión o esplenectomía. Si no estaban
vacunados, 2 dosis separadas 1-2 meses.
 Niños no vacunados, mayores de 5 años, con asplenia. Una dosis.
 Niños no vacunados, mayores de 5 años, con infección por VIH, déficit
de IgG2, trasplante de médula ósea o neoplasia: 2 dosis separadas 1-2
meses.
 Niños con antecedentes de infección invasiva por Hib:
 Si la infección ocurre antes de los 2 años existe riesgo de un segundo
episodio, por lo que está indicada la vacunación completa ignorando las
dosis previas, comenzando un mes después del inicio de la enfermedad.
 Si la infección ocurre por encima de los 2 años, ya confiere protección y
hace innecesaria la vacunación.
Profilaxis postexposición

 Los niños expuestos a un caso de enfermedad invasiva por este germen deben
ser observados cuidadosamente y recibir quimioprofilaxis con
rifampicina en las siguientes circunstancias:
Quimioprofilaxis contra el Hib con rifampicina. Indicaciones.

Contactos familiares. Todos, independientemente de su edad, si existe:

 Algún menor de 4 años no o incompletamente vacunado


 Algún inmunodeficiente, vacunado o no
 Todos los menores de 12 meses deben recibir profilaxis, aunque
probablemente las 2-3 primeras dosis de vacuna, si las han recibido,
confieran protección suficiente.

Contactos en guarderías. La necesidad de efectuar quimioprofilaxis o no


dependerá de la edad, estado vacunal de los niños y número de casos.

 Está indicada en todos los niños y cuidadores, estén o no vacunados, si hay


menores de 2 años sin vacunar o incompletamente vacunados.
 No está indicada si no hay menores de 2 años, independientemente de su
estado vacunal, salvo que aparezcan 2 o más casos en un período inferior a
60 días.

El propio enfermo, antes de salir del hospital, si no se ha tratado con cefotaxima


o ceftriaxona

Completamente vacunado es aquel niño que ha recibido: 

 Al menos 1 dosis de vacuna a los 15 meses o después de esta edad.


 2 dosis entre los 12 y 15 meses.
 2-3 dosis antes de los 12 meses y un refuerzo a esa edad o después.

Rifampicina

 Se administra en una dosis diaria, 4 días seguidos:

 Niños: 20 mg/kg/día (menores de un mes 10 mg/kg).


 Adultos: 600 mg/día (salvo embarazadas).

 ión de inmunoglobulina.

VACUNAS ANTINEUMOCÓCICAS

Neumococo

 El neumococo es un colonizador común de las vías respiratorias altas en el


hombre (único reservorio conocido), desde donde se disemina por vía aérea o
por contacto con objetos recientemente contaminados. La tasa de portadores
nasofaríngeos varía con la edad:

 30-60% en preescolares
 25-35% en escolares
 10-25% en adultos jóvenes
 Sólo 5-10% en adultos sin hijos.

 Puede causar enfermedad invasiva:


 Meningitis (en España es el segundo agente causante de meningitis
bacterianas, sólo por detrás del meningococo). La letalidad y las
complicaciones son más importantes que en la meningocócica y la
causada por Haemophilus influenzae.
 Sepsis.
 Artritis, osteomielitis, endocarditis, peritonitis, celulitis... en el curso de
una bacteriemia.

 Es también el agente etiológico principal de:

 La neumonía adquirida en la comunidad (13-38% de neumonías en


niños).
 La bacteriemia oculta de los niños pequeños.
 La otitis media aguda (50% de otitis), sinusitis y mastoiditis.

 Existe una prevalencia creciente de cepas de neumococo parcial o totalmente


resistente a la penicilina (y a otros antibióticos).
 La edad inferior a dos años, la asistencia a guardería y el empleo reciente de
antibióticos hacen más probable la infección por una cepa resistente.

 La infección grave por neumococo es más frecuente en niños:

 De 6 a 24 meses.
 De ciertos grupos de riesgo (inmunosupresión o ciertas enfermedades
crónicas).
 Que asisten a guardería.

Grupos de riesgo para la infección neumocócica


invasiva

Síndrome nefrótico

Esplenectomía (asplenia anatómica o funcional)

Fibrosis quística o broncodisplasia pulmonar

Cardiopatías

Inmunodeficiencia (incluida la infección por VIH) o


inmunosupresión

Diabetes

Portadores de fístula LCR

Anemia aplásica o drepanocitosis

Tumores sólidos o hematológicos o trasplante

  Vacuna antineumocócica 23-valente (de polisacáridos)

 Los polisacáridos capsulares proporcionan virulencia y capacidad invasiva al


neumococo y permiten clasificarlo en 90 serotipos.
 La vacuna se elabora a partir de estos polisacáridos e incluye 23 serotipos (25
mcg. de cada uno por dosis de 0.5 ml.), entre los que se encuentran casi el
90% de los que causan infecciones graves.
Eficacia/seguridad
 No es eficaz en menores de 2 años, sólo un 60-70% en adultos sanos, variable
en adultos con enfermedades crónicas y un 20% en inmunodeficientes.
 No es útil para disminuir el número de portadores nasofaríngeos de
neumococos.
 Mantiene títulos elevados durante 5 años, al menos en adultos
inmunocompetentes.
 Los efectos secundarios locales son frecuentes, pero no los generales: fiebre,
malestar, mialgias, exantema, adenitis, trombopenia y anafilaxia.

Indicaciones

 Niños mayores de 2 años incluidos en los grupos de riesgo.


 No hay evidencia de utilidad en la prevención de otitis media recurrente, por
lo que ésta no es una indicación.
 El Comité Asesor de Vacunas de la AEP, en su Manual de Vacunas en Pediatría 
incluye las siguientes indicaciones, siempre en niños mayores de 2 años:
 

VACUNA ANTINEUMOCÓCICA POLISACÁRIDA 23-VALENTE

Claramente indicada (eficacia demostrada)

Enfermedad pulmonar crónica: Fibrosis quística, enfisema. NO en el


asma.

Enfermedad cardiovascular crónica.

Hepatopatía crónica (cirrosis).

Diabetes mellitus.

Drepanocitosis.

Asplenia anatómica o funcional.

Fístula de LCR.

Potencialmente útil y también indicada (menor


inmunogenicidad)

Insuficiencia renal crónica o síndrome nefrótico.

Infección por VIH, asintomática o sintomática.

Inmunodeficiencias, incluidas las primarias de tipo humoral,


combinadas, déficit de complemento y uso prolongado de corticoides.

Neoplasias sólidas o hematológicas.

Trasplantados de órganos sólidos o progenitores hematopoyéticos.

Valoración individualizada (estudios no realizados)

Encefalopatías.

Enfermedades neuromusculares.

Conectivopatías.
 
 
Calendario, posología y administración
 0,5 ml SC o IM (deltoides). Su administración intradérmica puede causar
reacciones locales importantes.  
 En esplenectomía, quimioterapia, radioterapia o corticoterapia a dosis altas, 2-3
semanas antes ó 3-4 meses después.
 Sólo se recomienda revacunar a los 3 o 5 años (menores o mayores de 10
años, respectivamente) si se mantiene el riesgo de infección neumocócica. En
insuficiencia renal crónica, síndrome nefrótico y trasplantados, cada 3-5 años.
 No se debe suspender la profilaxis con antibióticos tras la vacunación si
previamente era necesaria.
 Los preparados comerciales disponibles, ambos presentados en jeringa
precargada, con 0.5 ml, son:
 

VACUNA ANTIPOLIOMIELÍTICA

 La poliomielitis es una infección causada por un enterovirus, el poliovirus (tipos


1, 2 y 3). El ser humano es el único reservorio del virus y la transmisión se
produce principalmente de persona a persona, por vía fecal-oral, aunque puede
transmitirse también por saliva, heces o aguas contaminadas. La mayoría de
infecciones son asintomáticas. Los casos sintomáticos presentan una fase febril
inespecífica seguida, en un pequeño porcentaje de casos, de meningitis aséptica
o enfermedad paralítica. En países desarrollados la poliomielitis es excepcional y
los casos que aparecen se deben a:

 Cepas importadas que afectan a grupos no vacunados.


 Cambios antigénicos del virus (epidemia en Finlandia en 1984).
 Virus de la vacuna viva (polio vacunal o "Poliomielitis asociada a la
vacuna"), por aparición de mutantes neurovirulentos durante la replicación
intestinal tras su administración oral.

 En USA no se observan casos de polio por virus natural desde 1979, salvo algún
caso importado. Los 8-10 casos anuales que se presentan, son producidos por
la vacuna, lo que ha llevado a revisar la estrategia vacunal y emplear
exclusivamente la vacuna inactivada (tipo Salk).

 En España la máxima incidencia se dio en 1959, descendiendo desde entonces,


especialmente desde 1964, año en que se inició la vacunación masiva con la
vacuna antipoliomielítica oral. No no hay casos de polio desde 1989, la
cobertura vacunal es del 90% y sólo existe el riesgo de adquirirla en no
vacunados que viajen a zonas endémicas y la posibilidad de algún caso
importado. El último caso de poliomielitis asociada a la vacuna se presentó en
Cataluña en el año 2002.

  Vacuna antipoliomielítica oral (VPO)

 La vacuna antipoliomielítica oral trivalente (Sabin) contiene poliovirus


atenuados de los tipos 1, 2 y 3.
 Con 3 dosis se logra inmunidad duradera (probablemente de por vida) contra
los 3 virus casi en el 100% de los casos.
 La vacuna oral proporciona además inmunidad local intestinal y evita la
reinfección.

Efectos secundarios
 El único efecto grave, excepcional, de la VPO, es el desarrollo de polio
paralítica en el receptor de la vacuna o en sus contactos, especialmente si uno
u otros son inmunodeficientes.
 El riesgo global de polio paralítica producida por la vacuna es de 1/2.400.000
dosis administradas. En la primera dosis es de 1/750.000.
 En inmunodeficientes (sobre todo en alteraciones de la inmunidad humoral) el
riesgo es 3.000-7.000 veces mayor.
 Otros efectos posibles: diarrea, fiebre, exantema y quizá S. de Guillen-Barré.

Indicaciones

 La vacuna oral sigue siendo la recomendada por la OMS para lograr la


erradicación global de la poliomielitis, sobre todo donde aún se declaran
casos por poliovirus natural.
 Es la indicada para controlar brotes epidémicos de polio porque consigue
mayor seroconversión que la vacuna inactivada tras una dosis única,
proporciona inmunidad intestinal, lo que reduce la transmisión  del virus, y se
excreta en las heces, contribuyendo a mejorar la protección de la comunidad.
 Desde principios de 2004 se ha dejado de emplear en España para la
vacunación sistemática contra la poliomielitis.

Contraindicaciones y precauciones

 Debido al riesgo de polio paralítica y a que el virus se excreta en las heces, son
contraindicaciones específicas:
 Niños con inmunodeficiencia congénita o adquirida (VIH, inmunosupresión,
neoplasia) o que conviven con inmunodeficientes.
 Embarazo (aunque no se han documentado efectos adversos sobre el feto).
 Primovacunación en mayores de 18 años (debe usarse la inactivada). Puede
emplearse si han recibido previamente alguna dosis oral o intramuscular.
 Si se administra inadvertidamente la vacuna oral a un contacto domiciliario de
un inmunodeficiente, el receptor debería evitar el contacto cercano con el
inmunodeficiente durante 4-6 semanas. Si no es posible, deben extremarse las
precauciones higiénicas, lavado de manos tras contacto con heces (pañales) y
evitar el contacto con saliva (compartir comida, cubiertos, utensilios, chupetes).
La excreción del virus por las heces es máxima las primeras 4 semanas tras la
vacunación.

Vacuna antipoliomielítica inactivada (VPI)

 Los 3 virus están inactivados. La actual es una vacuna de potencia aumentada


(1987), distinta de la desarrollada por Salk. Sigue denominándose "tipo Salk"
para diferenciarla de la oral ("tipo Sabin").
 Se utiliza por vía subcutánea o intramuscular y con 3 dosis es tan inmunógena
como la oral. Se empleaba hasta el año 2004 en España sólo para la vacunación
de adultos, inmunodeficientes de cualquier edad y quienes convivan con estos
últimos.

Calendario, posología y administración  

 En los países que sólo utilizan VPI, la pauta habitual consta de 4 dosis:
 2, 4, 6-18 meses y 4-6 años.
 2,4,6,18 meses
 En niños de 4-17 años la pauta de vacunación recomendada consiste en 2
dosis, separadas 4-8 semanas y una tercera dosis a los 6-12 meses de la
segunda.
 Esta es también la pauta recomendada para mayores de 18 años si la vacuna
estuviera indicada (no se administra rutinariamente en mayores de esta edad).
 Actualmente en España se emplea exclusivamente la vacuna inactivada.
 No existen razones para seguir recomendando 5 dosis ya que bastan 4 para
garantizar una adecuada inmunización en los países desarrollados. La
recomendación actual es, por tanto, administrar 4 dosis (2,4,6,18 meses),
suprimiendo la que previamente se administraba a los 4-6 años. La
administración de una quinta dosis vendría, en su caso, condicionada por:
 Cambios en la situación epidemiológica.
 Eventual descenso de las coberturas.
 Existencia de grupos de población susceptibles.
 Disponibilidad de preparados comerciales adecuados (no se dispone de vacunas
tetravalentes DTPa-VPI sin Hib o Hepatitis B)

 Las recomendaciones para niños que viajan a zonas endémicas dependen


del número de dosis recibidas previamente y del tiempo disponible antes del
viaje:

 No vacunados y disponen de 2 meses antes del viaje: Dos dosis VPI separadas
al menos 1 mes y posteriormente completar el calendario (siempre con VPI).
 No vacunados y disponen de menos de 2 meses antes del viaje: Una dosis VPI y
seguir la vacunación al llegar al país de destino.
 En nuestro país se dispone de:
VPI VACUNA ANTIPOLIOMIELÍTICA BERNA (Berna)
VPI + DTPa + Hib INFANRIX-IPV + Hib (GSK)
PENTAVAC (Sanofi Pasteur MSD)
VPI + DTPa + Hib + HepB INFANRIX HEXA (GSK)

VACUNA CONTRA EL ROTAVIRUS

Gastroenteritis por rotavirus

El rotavirus produce gastroenteritis agudas con aparición brusca de vómitos, diarrea y


fiebre variable (> 39 ºC en un tercio de los pacientes, en los primeros días). La
diarrea, acuosa, autolimitada, dura 3-8 días, aunque a veces más. Origina a menudo
deshidratación y un número significativo de ingresos hospitalarios. Causa a menudo
brotes epidémicos de diarrea en guarderías y en hospitales infantiles (diarrea
nosocomial).

 Las infecciones naturales confieren inmunidad parcial frente a exposiciones


posteriores, de forma que el primer episodio es habitualmente más severo que
los siguientes, si se producen, y que a su vez van generando mayor protección.
 La mayor incidencia de infecciones sintomáticas se da entre los 3 meses y 2
años de vida. Casi todos los niños padecen al menos una diarrea por rotavirus
antes de cumplir los dos años. En el período neonatal la infección suele ser leve
o asintomática en casi el 90% de casos.
 En países cálidos, como el nuestro, la infección predomina claramente en
invierno, apareciendo brotes con patrón similar a los de gripe y de bronquiolitis
por VRS.
 Los pacientes inmunodeficientes tienen riesgo de diarrea grave, prolongada y
ocasionalmente fatal.
Las medidas higiénicosanitarias no han logrado reducir su incidencia, que es similar en
todos los países, desarrollados o no.

 En países desarrollados es una causa importante de morbilidad y una carga


sanitaria significativa, pero la mortalidad resulta excepcional. En estos países la
vacuna serviría para reducir el número de hospitalizaciones, visitas médicas y
pérdidas de horas laborales de los padres.
 En países pobres es causa importante de mortalidad (500.000 anuales). Origina
el 25% de las muertes por diarrea y el 6% de todas las muertes de niños
menores de 5 años. En esos países la vacuna serviría (si pudieran costeársela)
para reducir la mortalidad y la enfermedad grave.
En Europa el 20-40% de visitas por gastroenteritis en niños menores de 5 años y el
40% de hospitalizaciones por este motivo se deben a rotavirus (unos 3 x 1.000
niños/año en el global europeo).

Vacunas contra el rotavirus

Ya que la primera infección natural confiere protección frente a diarreas graves en


ulteriores infecciones, el objetivo de las vacunas es producir una primera infección con
virus atenuados, previniendo así la enfermedad grave en las posteriores infecciones
por el virus natural.

En 2006 se comercializó en España Rotarix® y en 2007 RotaTeq®. Dado lo ocurrido


con la primera vacuna anti-rotavirus comercializada sólo en EE. UU. (Rotashield®),
retirada del mercado asociarse a un incremento del número de casos de invaginación
(1/10.000 vacunados) estas vacunas han debido probar escrupulosamente su
inmunogenicidad, seguridad y eficacia. Los estudios de coste-beneficio disponibles, si
se incluyen los gastos indirectos, sugieren que la vacunación sistemática resultaría
rentable.

En 2006 se comercializó en España Rotarix® y en 2007 RotaTeq®. Dado lo ocurrido


con la primera vacuna anti-rotavirus comercializada sólo en EE. UU. (Rotashield®),
retirada del mercado asociarse a un incremento del número de casos de invaginación
(1/10.000 vacunados) estas vacunas han debido probar su inmunogenicidad,
seguridad y eficacia en estudios con un gran número de niños. Los estudios de coste-
beneficio disponibles, si se incluyen los gastos indirectos, sugieren que la vacunación
sistemática resultaría rentable.

Las dos vacunas comercializadas, ambas de administración exclusivamente oral, tienen


diferente composición:

 Rotarix® (GSK). Vacuna monovalente (G1P1[8]), obtenida por atenuación por


sucesivos pases celulares, de una cepa de un solo virus de origen humano.
Imita la infección natural, que induce protección contra la diarrea grave en
ulteriores infecciones, tanto por la misma cepa como por cepas distintas.
Proporciona un grado variable de protección cruzada contra tipos distintos al
G1.
 RotaTeq® (Sanofi Pasteur MSD). Vacuna pentavalente (G1, G2, G3, G4 y
P1[8]) obtenida por recombinación genética de rotavirus de una cepa de origen
bovino y varias cepas humanas. La vacuna proporciona protección homóloga
contra cada una de las cepas humanas incluidas en ella.

Administración

 Rotarix®. Se administran 2 dosis orales separadas al menos 4 semanas, la


primera a partir de las 6 semanas de vida y la segunda antes de la semana 24.
 RotaTeq®. Se administran 3 dosis orales, separadas 4 semanas, la primera
también después de las 6 semanas de vida y la tercera antes de la semana 26
(ficha técnica para España).

Para ambas vacunas la pauta debe iniciarse, en todo caso, antes de las 12 semanas de
vida. No se dispone de estudios de seguridad fuera de los intervalos recomendados.

VACUNAS CONTRA EL ROTAVIRUS. PAUTAS DE ADMINISTRACIÓN.

  Nº de Edades de Límites de edad para cada Intervalo


dosis administración dosis dosis

1ª dosis 2ª dosis 3ª dosis

Rotarix 2 2-4 meses 12-14 10-24  - 4 sem.


sem. sem.

RotaTeq 3 2-4-6 meses 6-12 10-26 14-26 4 sem.


sem. sem. sem.

 Ambas pueden administrarse junto a otras vacunas del calendario sistemático


(hay estudios de administración junto a DTPa, Hib, VPI, Hep B, neumocócica
conjugada 7-valente y meningococo C conjugada).
 Debe emplearse para todas las dosis el mismo producto comercial pues aunque
la eficacia y seguridad de las dos vacunas es similar, no hay todavía datos con
la combinación de las dos vacunas.
 No se produce interferencia por la lactancia materna ni con otros alimentos, de
forma que el niño puede comer antes o después de la vacuna.
 Pueden emplearse en prematuros a partir de las 6 semanas de vida.
 No debe repetirse la dosis si el niño la escupe o vomita ya que no existe
estudios de seguridad con dosis mayores de las indicadas (ni tampoco con dosis
parciales...).

Ambas vacunas deben conservarse entre +2 ºC y +8 ºC. En estas condiciones Rotarix


es estable tres años y RotaTeq dos.

Eficacia

La vacunación completa ofrece protección de:


 70% contra diarrea por rotavirus de cualquier gravedad en los 1-2 años que
siguen a la vacunación.
 85-100% contra la gastroenteritis grave y necesidad de hospitalización.
 42-58% de ingresos hospitalarios por diarrea de cualquier etiología, lo que
permite suponer que el rotavirus es una causa más frecuente de diarrea de lo
que se detecta con los medios empleados habitualmente (en muchos casos
ninguno).

Contraindicaciones y precauciones

Contraindicaciones absolutas

 Reacción anafiláctica a una dosis previa de vacuna antirotavirus o a cualquier


componente de la vacuna
 Antecedente de invaginación o malformación intestinal no corregida que
comporte riesgo de invaginación

Contraindicaciones relativas

 Los niños con cualquier enfermedad moderada o grave o diarrea importante


deben esperar a resolver ese episodio antes de recibir la vacuna.
 Los niños con diarrea leve pueden ser vacunados.

Algunas patologías digestivas crónicas (Hirschprung, síndrome del intestino corto o


malabsorción) predisponen a los niños que las padecen a sufrir diarreas graves por
rotavirus. No existen estudios de seguridad y eficacia en estos grupos concretos de
niños pero los beneficios potenciales de la vacuna son tan grandes que justifican su
administración (para algunos autores incluso más allá de los límites de edad
recomendados para esta vacuna).

No existen estudios de seguridad y eficacia en inmunodeficientes pero al menos


teóricamente el riesgo de la vacunación es inferior al de la infección natural. En todo
caso, si la inmunodeficiencia es severa, deberá considerarse cada caso
individualmente.

Efectos adversos

 Por el momento no existen datos que sugieran una asociación de la vacuna y la


invaginación en el seguimiento postcomercialización ni existieron en los
estudios de seguridad efectuados con las dos vacunas, siempre con la primera
dosis antes de las 14 semanas (Rotarix) o las 12 semanas (RotaTeq) y la última
antes de las 24 (Rotarix) o las 32 semanas (RotaTeq).
 La diarrea leve o vómitos se presentaron con mayor frecuencia en niños
vacunados con cualquiera de las dos vacunas que en los que recibieron
placebo:. La fiebre no fue más frecuente.

Recomendaciones de los expertos

 La AEP la incluye en el calendario vacunal para 2008 para todos los lactantes
de 6-12 semanas, completando la pauta antes de los 6 meses. Considera, sin
embargo, que al no estar financiada, debe ser opcional y que si han de
establecerse prioridades, se opte primeramente por la vacuna antineumocócica,
después la vacuna contra la varicela, y en último término la vacuna frente al
rotavirus, ya que causa una enfermedad más leve que las anteriores. En
nuestro medio se han realizado estudios de coste de la enfermedad, pero aún
no de coste-beneficio o coste-efectividad de la vacuna. La AEP considera
necesaria la vigilancia epidemiológica de la enfermedad, el control del impacto
de la vacunación y ampliar los datos disponibles de seguridad y eficacia en
lactantes sanos y en situaciones especiales (inmunodeficientes, prematuros…).
 Los CDC y la American Academy of Pediatrics (AAP) recomiendan (2007) la
vacunación sistemática con 3 dosis de vacuna pentavalente oral a los 2-4-6
meses de edad, iniciando la pauta vacunal entre las 6 y las 12 semanas de vida
(no debe iniciarse más tarde de esa edad), administrando unan dosis cada 4-10
semanas, de modo que la vacunación con las 3 dosis esté completada antes de
las 32 semanas de vida.
 Para la OMS, el principal objetivo de los programas de vacunación frente a
rotavirus es disminuir la mortalidad y la enfermedad grave. Recomienda (2007)
la introducción de esta vacuna en los programas nacionales donde los datos de
eficacia de la vacuna sugieran un impacto significativo en la salud pública y se
disponga de infraestructura y mecanismos de financiación apropiados. Pero
afirma también que “hasta que el completo potencial de la actual vacuna
antirrotavirus sea confirmado en todo el mundo, particularmente en Asia y en
África, la OMS no está preparada para recomendar la inclusión global de la
vacuna del rotavirus en los programas nacionales de inmunización”.

 VACUNA TRIPLE VÍRICA (SARAMPIÓN - RUBÉOLA - PAROTIDITIS)

 Desde la introducción de la vacuna triple vírica en 1981, la incidencia de estas


tres enfermedades ha disminuido más del 95% en nuestro país. Los casos aún
declarados, 6.000 al año de cada una de ellas (15 casos por 100.000
habitantes) se deben a insuficiente cobertura y al fracaso de la vacuna (2-5%
de casos).

 La vacunación se justifica porque estas enfermedades afectaban antes a


prácticamente todos los niños, con los costes económicos y sociales que ello
supone, y por sus complicaciones:

 Sarampión: otitis (5-9%), bronconeumonía (1-6%), encefalitis (1/1000


con 15% de mortalidad), panencefalitis esclerosante subaguda
(1/100.000), miocarditis, queratitis, trombocitopenia... La mortalidad del
sarampión es importante en países en desarrollo (5-10%) y aún
significativa (1-2/1.000) en los desarrollados.
 Rubéola congénita: embriopatía (microcefalia, cataratas, sordera,
cardiopatía, coriorretinitis, retraso mental, etc.) o fetopatía (bajo peso,
hepatoesplenomegalia y púrpura). La proporción de mujeres fértiles
susceptibles a la rubéola en nuestro medio es de un 5-10%.
 Parotiditis: orquiepididimitis con ocasional esterilidad, pancreatitis,
encefalitis, meningitis aséptica, hipoacusia, tiroiditis...

 Las vacunas disponibles en España contienen virus vivos atenuados de:


 Sarampión: cepa Schwarz (Priorix) o Enders (Triple Vírica MSD),
preparadas en cultivos de embriones de pollo.
 Rubéola: cepa Wistar RA 27/3 (ambos preparados).
 Parotiditis: cepa RIT4385 (Priorix) o Jeryl-Lynn (Triple Vírica MSD).
Inmunogenicidad y eficacia

 Las tasas de seroconversión son del 95% o más para los tres virus:

 La inmunidad frente al sarampión puede durar de por vida (muy


raramente se observa desaparición de la inmunidad).
 Los anticuerpos antirrubéola permanecen al menos durante 16 años en
más del 90% de los vacunados. Protegen frente a la infección
sintomática en un 90-95%, aunque un 15% de los vacunados puede
sufrir infecciones asintomáticas (no se han asociado a teratogénesis).
 La eficacia protectora de la vacuna antiparotiditis frente a brotes
epidémicos oscila entre el 75 y el 91%.

Efectos secundarios

 Habitualmente leves, dependen de los diferentes componentes de la vacuna:

 Sarampión: sarampión vacunal, con fiebre (a veces alta, quizá


convulsión febril) a los 5-12 días de la vacunación, usualmente breve,
con o sin exantema, en el 10% de los vacunados. Raramente encefalitis,
trombocitopenia o reacción alérgica. Ocasionalmente sarampión vacunal
grave en inmunodeficientes.
 Rubéola: exantema, fiebre y adenopatías a los 5-12 días de la
vacunación en el 10% de vacunados. Artralgias, sobretodo en mujeres
jóvenes, en quienes puede existir artritis.
 Parotiditis: convulsión febril, sordera neurosensorial, parotiditis,
meningoencefalitis, exantema, orquitis, reacción anafiláctica a
componentes de la vacuna.

 No ha podido establecerse una relación causal entre esta vacuna y algunas


patologías como encefalopatía, S. de Guillain Barré, S. de Reye, autismo...

Indicaciones
 Inmunización primaria y revacunación contra el sarampión, rubéola y
parotiditis en niños y preadolescentes.
 Vacunación de niños susceptibles expuestos al sarampión o parotiditis.
Puede prevenir la enfermedad si se administra en las 72 horas tras la
exposición.
 Hay indicaciones de componentes individuales de la vacuna, en las que puede
emplearse, sin embargo, la triple vírica, que es de la que se suele disponer:

 Sarampión: inmunización post-exposición o en epidemias, en lactantes


de 6-12 meses. Estos niños deben recibir igualmente la triple vírica a los
15 meses y 4-6 años, pues los anticuerpos maternos transferidos
durante la gestación pueden bloquear la respuesta del lactante los
primeros 6-12 meses.
 Rubéola: mujeres susceptibles en edad fértil, descartando el embarazo
actual y los 3 meses siguientes.
Contraindicaciones y precauciones

 El antecedente anamnésico de haber pasado alguna de las tres enfermedades ni


contraindica ni exime de la vacunación.
 Tuberculosis activa no tratada. No es indispensable realizar un PPD previo a
la vacuna. Existe evidencia de que el sarampión natural puede exacerbar una
tuberculosis y de que la vacuna puede negativizar un PPD que sería positivo,
pero no de que la vacuna pueda influir en la evolución de una TBC desconocida.
Puede administrarse simultáneamente al PPD. Si no se administra el mismo día
se recomienda retrasar 4-6 semanas la prueba de la tuberculina. La vacuna no
está contraindicada si se ha administrado recientemente PPD.
 Embarazo. La vacunación al principio del embarazo en mujeres susceptibles
produce un 2-3% de infecciones fetales, pero no se han descrito efectos
teratógenos. El embarazo constituye una contraindicación pero no es preciso
hacer una prueba de embarazo si éste no se sospecha. La vacunación accidental
de una mujer embarazada en la que se desconocía esta circunstancia ya
constituye una indicación de aborto terapéutico para evitar una posible rubéola
congénita. Aún así, sigue recomendándose evitar el embarazo UN mes después
de la administración de la vacuna triple vírica o antirubeólica.
 Inmunodeficiencia o inmunodepresión. Sí está indicada en infecciones VIH
asintomáticas o sintomáticas salvo en presencia de inmunodepresión grave
(CD4 < 200 ó CD4/linfocitos totales < 15%).
 Alergia al huevo o a otros componentes de la vacuna (reacción
anafiláctica a la neomicina o gelatina). Ya que la vacuna se cultiva en
embriones de pollo, existía el temor a la alergia anafiláctica al administrar esta
vacuna a sujetos alérgicos al huevo. Esta vacuna está cultivada en fibroblastos
de embrión de pollo y la cantidad de proteínas procedentes del huevo es
mínima en comparación con la existente en vacunas cultivadas en huevos
embrionarios (gripe inactivada y fiebre amarilla). El Comité Asesor de Vacunas
de la AEP efectúa las siguientes recomendaciones al respecto:
 Los niños con sospecha de alergia al huevo deben ser diagnosticados
inequívocamente por un especialista en Alergología o gastroenterología.
 Tras establecer el diagnóstico preciso deben evaluarse la magnitud de
las manifestaciones clínicas y etiquetar la reacción al huevo como leve,
moderada o grave.
 Sólo en caso de manifestaciones alérgicas graves (verdadera anafilaxia)
debe vacunarse al niño bajo control en un centro hospitalario.
 Los niños con reacciones leves, no sistémicas, al huevo, pueden 
vacunarse en su Centro de Salud, manteniéndoles en observación al
menos 30 minutos después de administrar la vacuna.
 Puede administrarse simultáneamente a la vacuna de la varicela. Si no es así,
se recomienda espaciarlas al menos 4 semanas.

Calendario, posología y administración  

 Se administra una dosis de 0,5 ml subcutánea (o IM) a los 15 (12-15) meses


y otra a los 3-6 ó 11-13 años.
 Puede administrarse antes del año de vida (después de los 6 meses) para
profilaxis ante exposición o riesgo de exposición. En este caso se deberá
administrar igualmente una segunda dosis a los 12-15 meses y otra a los 3-6 ó
11-13 años.
 Para lograr la erradicación del sarampión, se recomienda administrar la
segunda dosis a los 3-6 años, pero puede hacerse en cualquier visita
mientras transcurra al menos un mes entre las dos dosis y ambas se
administren después de los 12 meses de vida.
 Los niños mayores de 15 meses no vacunados previamente han de recibir su
primera dosis de triple vírica lo antes posible y una segunda dosis en cualquier
momento entre los 15 meses y los 18 años, dejando un intervalo de al menos
un mes entre ambas.
 Se conserva a +2/+8 ºC, protegida de la luz. A temperatura ambiente (20-25
ºC) es estable algunas semanas. Debe administrarse inmediatamente tras
reconstituirla. Deben desecharse los viales que no se hayan utilizado a las 8
horas de reconstituidos.
 Los preparados comerciales disponibles en nuestro medio son:

VACUNA DE LA VARICELA

Varicela

 No siempre es una enfermedad benigna. La importancia clínica de la


enfermedad se debe a sus complicaciones, mucho más frecuentes en:

 Adultos (especialmente la neumonía)


 Enfermedades crónicas pulmonares, cardiovasculares, metabólicas,
endocrinológicas y neuromusculares.
 Inmunodeficientes
 Niños menores de 1 año.

 La mortalidad es de:

 Niños menores de 15 años inmunocompetentes: 1-3/100.000 casos.  


 Menores de 1 año: 6/100.000
 Adultos (mayores de 30 años) inmunocompetentes: 25/100.000
 Inmunodeficientes: hasta un 15-20 %

 El riesgo de hospitalización es de alrededor de 1/600 casos.


 La mayoría de hospitalizaciones y muertes producidas por complicaciones de la
varicela tienen lugar en niños sin factores de riesgo.
 

Complicaciones de la varicela

Sobreinfección bacteriana de las lesiones


Infecciones graves por estreptococo beta-hemolítico grupo A

Otitis media aguda

Ataxia cerebelosa aguda, a los 5-10 días de la erupción

Encefalitis (rara en niños)

Neumonía varicelosa o bacteriana (infrecuente en niños)

S. de Reye asociado al uso de aspirina en el curso de la varicela

S. de Guillain-Barré

Púrpura trombocitopénica postinfecciosa


Otras: artritis, orquitis, glomerulonefritis, etc. 

 Herpes zóster. El virus de la varicela-zoster permanece, en la mayoría de los


infectados, latente en las raíces sensoriales de los ganglios dorsales medulares.
En un 15-20% de ellos, la reactivación del virus latente originará la aparición de
herpes zóster en algún momento de su vida, sobre todo en adultos, ancianos y
pacientes inmunodeprimidos. También es más frecuente el desarrollo posterior
de herpes zóster en pacientes expuestos a la varicela intraútero o en quienes la
adquieren en los primeros meses de la vida.

Varicela, embarazo y neonato

 En España, menos del 5% de embarazadas son susceptibles a la varicela. Se


afirmaba que el embarazo era uno de los factores que podían condicionar una
mayor gravedad de la varicela. Estudios recientes no muestran una tasa de
neumonía varicelosa más elevada en embarazadas que en mujeres no
gestantes ni pruebas de que la varicela en la embarazada conlleve un aumento
de las tasas de aborto espontáneo, prematuridad o mortalidad perinatal. Sí es
cierto que la infección transplacentaria o perinatal puede ocasionar
consecuencias graves:
 Síndrome de varicela fetal. La varicela materna puede causar el
síndrome de la varicela fetal (muerte embrionaria o fetal, bajo peso,
microcefalia, microftalmia, cataratas, coriorretinitis, anomalías
génitourinarias, cicatrices cutáneas y atrofia de extremidades). El
síndrome, poco frecuente, aparece en el 2% de niños cuyas madres
sufren varicela en las primeras 20 semanas del embarazo. Más allá,
hasta las 28 semanas, la transmisión es posible pero muy inhabitual. En
el zóster el riesgo es mucho menor, siendo sólo responsable del 7% de
las varicelas congénitas.
 Varicela neonatal. En recién nacidos de madres que presentan varicela
entre 5 días antes y 2 días después del parto, la varicela aparece en el
5º-10º día de vida y puede ser un cuadro grave con mortalidad
significativa (20-30%). Si la madre desarrolla la varicela antes de los 5
días previos al parto, la varicela en el neonato es más precoz (primeros
4 días), pero no grave, ya que el recién nacido nace parcialmente
protegido por anticuerpos maternos.
 La transmisión intrauterina del virus de la varicela puede ocasionar
también herpes zóster en los primeros años de vida.

Varicela en inmunodeficientes

 La varicela en inmunodeficientes es un cuadro potencialmente grave, con clínica


y duración atípicas y complicaciones frecuentes: sobreinfección bacteriana (más
del 50% de casos) y neumonía (20%), siendo ésta la principal causa de
mortalidad.
 Antes de disponer de inmunoglobulina específica intravenosa y aciclovir, se
presentaba diseminación en la tercera parte de los casos y la mortalidad era del
7%.
 La profilaxis de la varicela en inmunodeficientes es posible mediante la
administración postexposición de inmunoglobulina específica intravenosa.
 La vacunación universal de los niños a los 12-15 meses de vida permitiría
inmunizar a la mayoría de ellos antes de que se dieran las circunstancias que
les llevarán más tarde a padecer una inmunodeficiencia (leucemias y otros
tumores, enfermedades crónicas, necesidad de un transplante...).
Vacunas de la varicela

 Se obtienen a partir de la cepa OKA y se preparan a base de virus vivos


atenuados cultivados en células diploides humanas.
 Existen actualmente dos vacunas antivaricela comercializadas en España.
Existen algunas diferencias entre ambas vacunas: número de cultivos seriados
de la cepa OKA, número de unidades formadoras de colonias mínimo por dosis
y algunos componentes.
 Se desconoce cómo estas diferencias pueden afectar, si lo hacen, en la práctica,
a los resultados clínicos de las vacunas. Difieren también las indicaciones
aceptadas, en su correspondiente ficha técnica. Las diferencias se deben en
parte a los distintos estudios clínicos de eficacia y seguridad disponibles para
cada una de ellas y en parte a las distintas fechas en que se inició la
comercialización de una y otra en nuestro país.

Inmunogenicidad y eficacia

 Induce inmunidad celular y humoral con aparición de anticuerpos a los 14 días.


 Confiere protección excelente (> 95%) frente a la enfermedad grave, buena
contra la enfermedad con exantema (70-90%) y más modesta contra la
infección.
 La eficacia estimada global es de un 88-94%. En más del 95% de los niños
sanos se logra la seroconversión con una sola dosis y los títulos protectores
persisten a los 5-10 años en el 97%. Los mayores de 13 años y adultos sanos
seroconvierten tras 2 dosis en más del 95% de los casos.
 La efectividad, también globalmente, es del 87%. Se produce una disminución
de esta efectividad con el tiempo transcurrido tras la administración de la
vacuna. Es del 97% en el primer año, pero baja al 86% en el segundo año y al
81% a los 7-8 años de la vacunación. La efectividad en el primer año tras su
administración es menor en los vacunados antes de los 15 meses (73%) que en
los vacunados a los 15 meses o después (99%). No se han demostrado
diferencias significativas en cuanto a la efectividad en años posteriores.
 Estudios en USA y Japón comprueban una duración de la protección, hasta la
fecha, de más de 10 y 20 años, respectivamente. Se desconoce el papel de la
exposición repetida de los sujetos vacunados que incluían estos estudios al
virus de la varicela circulante, pero la experiencia con otras vacunas de virus
vivos sugiere que la inmunidad proporcionada por la vacuna será de larga
duración, probablemente de por vida.
 Los estudios de coste-beneficio, cuando se incluyen los costes médicos
directos y los costes sociales indirectos, son también favorables a la vacunación
sistemática.
Varicela en vacunados (breakthrough)

 Los pacientes vacunados  pueden padecer una varicela, al menos 42 días


después de la vacunación. Ello permite distinguirla habitualmente de la varicela
causada por la propia vacuna, que aparece entre los 5 y 26 días tras la
vacunación.
 Resulta usualmente leve, con menos elementos exantemáticos (habitualmente
menos de 50) que en los no vacunados y a menudo no vesiculosos sino máculo-
papulosos, la mayoría sin fiebre, con escasa afectación general y una práctica
ausencia de complicaciones. Puede ser difícil de diagnosticar.
 La frecuencia oscila, en diversos estudios, entre el 6 y el 12 % de los
vacunados, aunque alguna publicación afirma encontrar hasta un 20%.
 Los pacientes con esta forma de varicela pueden transmitirla.
 Constituyen factores de riesgo para la aparición de una varicela breakthrough:
 Vacunación antes de los 15 meses de edad.
 Vacunación de varicela y triple vírica con un intervalo menor de 30 días
(la vacunación simultánea no reduce, en cambio, la eficacia).
 Tiempo desde la vacunación: a partir de los 12 meses tras la
administración de la vacuna, empieza descender su efectividad.

Efectos secundarios

 Son posibles las reacciones locales, en las primeras 48 horas, fiebre y


raramente otros efectos adversos más importantes, que resulta difícil atribuir a
la vacunación, por su baja frecuencia tanto en vacunados como en no
vacunados.
 Varicela postvacunal. Un 3-5% de niños vacunados presentan erupción
vesiculosa localizada. En otro 3-5% es generalizada, maculopapulosa o similar a
la varicela, usualmente leve, habitualmente en los 5-26 días tras la vacunación.
Es más frecuente en adolescentes y adultos.
 Herpes zóster. La vacuna puede producir herpes-zoster tanto en
inmunocompetentes como en inmunodeficientes. Los niños y adultos sanos
tienen un riesgo parecido al de la varicela natural, pero el cuadro suele ser más
leve. La incidencia y la severidad del herpes zoster en vacunados es inferior que
en los no vacunados. El zóster postvacunal puede deberse al virus de la vacuna
o al virus salvaje. Si es vacunal puede aparecer en el lugar de inyección. 
 Transmisión del virus vacunal. Excepcional. Sólo lo transmiten los
vacunados que tienen erupción y es más probable cuantas más lesiones tengan.
El virus vacunal parece seguir atenuado al transmitirse. Si aparece una erupción
en una persona vacunada, deberá evitar el contacto con individuos de alto
riesgo susceptibles a la varicela. No se recomienda la administración de
inmunoglobulina específica varicela-zóster a personas susceptibles de alto
riesgo expuestas a un caso de varicela vacunal por lo excepcional de su
transmisión, por ser presumiblemente leve y por disponer de tratamiento
(aciclovir) si desarrollan lesiones.
Indicaciones

 Vacunación sistemática contra la varicela, con distintas estrategias


posibles, que se discuten en otro lugar de este texto.

Vacunación contra la varicela. Estrategias


posibles.

Vacunación universal en la infancia

Vacunación de los adolescentes susceptibles.

Vacunación de los grupos de riesgo

 Indicaciones específicas: pacientes de alto riesgo y sus contactos


seronegativos sanos.

Vacuna de la varicela. Indicaciones específicas.

Niños con leucemia linfoblástica aguda en remisión más de 12 meses,


linfocitos > 1.200, plaquetas > 100.000, no sometidos a radioterapia y que no
reciban quimioterapia la semana antes o después de la vacunación.

Niños con tumores sólidos malignos, con las mismas condiciones que en la
leucemia.

Niños en programa de trasplante de órganos sólidos (riñón).

Niños con enfermedades crónicas: trastornos metabólicos, endocrinos,


renales, pulmonares o cardiovasculares, sin inmunodepresión ni corticoterapia a
dosis altas.

Personas seronegativas en contacto con niños inmunodeprimidos


(familiares y sanitarios que les atienden).

Mujeres susceptibles, no embarazadas, en edad fértil.

Exposición a la varicela por un individuo susceptible.

 Profilaxis postexposición. La vacuna es eficaz si se administra en los


primeros 3 días (6% de fallos) o hasta 5 días (33% de fallos) tras la exposición.

 Interrupción de brotes epidémicos. La vacuna se ha utilizado para ello, con


éxito, en guarderías, escuelas y otras instituciones.

Contraindicaciones

 Reacción anafiláctica a algún componente de la vacuna, incluyendo neomicina


(no la alergia de contacto) y gelatina.
 Enfermedad moderada o severa, con o sin fiebre. Enfermedades leves, con
síntomas discretos no constituyen una contraindicación.
 Inmunodeficiencia congénita o adquirida, infección VIH, neoplasias en
tratamiento de inducción, radioterapia.
 
 La vacuna puede administrarse en sujetos con inmunodeficiencia
humoral, pero no si padecen inmunodeficiencia celular.
 La vacuna parece ser segura, inmunógena y eficaz en infectados VIH con
clasificación N1 o A1 de los CDC (sin síntomas o síntomas leves y
linfocitos-T CD4+ > 25% para la edad).
 
 Niños con corticoterapia sistémica a dosis altas o en tratamiento crónico con
salicilatos.
 Embarazo. No se han descrito defectos compatibles con el síndrome de varicela
congénita en varios centenares de mujeres inadvertidamente vacunadas en el
primer trimestre del embarazo, pero la mayoría probablemente ya eran
inmunes y el número es insuficiente para excluir la posibilidad de un efecto
infrecuente.  
 La lactancia no es una contraindicación de la vacunación de la madre o el niño.
 La vacuna puede administrarse a convivientes con recién nacidos o
embarazadas.

Precauciones

 Deben transcurrir al menos 5 meses entre la administración de gammaglobulina


o derivados sanguíneos y la vacunación (hasta 10-12 meses en dosis altas de
Ig IV utilizadas en la púrpura trombocitopénica o en la enfermedad de
Kawasaki).
 Si se administra, por el motivo que sea, algún preparado que contenga
inmunoglobulina en las dos semanas que siguen a la vacunación antivaricela,
esta debe repetirse una vez transcurrido el intervalo recomendado para ese
preparado.
 

Tiempo que debe retrasarse la vacunación


antivaricela tras administrar preparados que
contienen inmunoglobulinas

Derivados sanguíneos Meses

Hematíes lavados 0
Hematíes reconstituidos 3
Sangre entera/concentrado 6
Plasma/plaquetas 7
Inmunoglobulinas específicas
Palizumab (VRS) 0
Antihepatitis B 3
Antitetánica 3
Anti-Rh(D) 3
Antirrábica 4
Antivaricela-zóster 5
Inmunoglobulina inespecífica IV
160 mg/kg 7
320 mg/kg 8
640 mg/kg 9
1280 mg/kg o + 11
Inmunoglobulina inespecífica IM
0,06 mg/kg 3
0,25 mg/kg 5
0,5 mg/kg 6
 
 En niños sanos la vacuna de la varicela puede administrarse simultáneamente a
otras vacunas inactivadas o atenuadas. Si no se administra simultáneamente a
la vacuna del sarampión o triple vírica, deben separarse al menos un mes las
dos vacunas.
 En inmunodeprimidos puede administrarse junto a vacunas inactivadas. Las de
virus vivos están contraindicadas, salvo la triple vírica y la de la varicela en
algunos de los infectados por VIH.

Profilaxis postexposición

 La inmunoglobulina específica antivaricela-zóster está sólo indicada en


pacientes con riesgo aumentado de sufrir formas graves de varicela que
además hayan tenido una exposición importante a la varicela:
 Niños inmunodeprimidos sin historia de varicela, salvo si han recibido
Ig (inespecífica) intravenosa en las últimas 3 semanas
 Recién nacidos de madres que presentan varicela entre 5 días antes y
2 días después del parto.
 Prematuros expuestos a varicela en la unidad neonatal o en contacto
con neonatos nacidos de madres que tuvieron varicela entre 5 días antes
y 2 días después del parto, si:

 Tienen más de 28 semanas de gestación y su madre no tiene


antecedentes de varicela o
 Menos de 28 semanas, independientemente de la historia
materna en relación a la varicela

 Se recomendaba anteriormente Ig específica intramuscular en:


 Mayores de 12 años susceptibles expuestos. Ya no se recomienda, al
disponer de aciclovir oral para tratar la varicela.
 Embarazadas susceptibles expuestas, para prevenir la varicela materna
o disminuir el riesgo de complicaciones; no para prevenir la transmisión
materno-fetal pues se sabe que no es útil para ello. Tampoco se
recomienda ya, pues su eficacia es escasa y además se dispone de
aciclovir e Ig intravenosa para una eventual varicela grave en
embarazadas.

 Actualmente no se dispone en España de ninguna presentación intramuscular


de Ig antivaricela-zoster. Puede conseguirse la intravenosa en Medicamentos
Extranjeros. La dosis es 1,25 ml/kg y la máxima efectividad se consigue
administrándola las primeras 48-96 horas tras el contacto. 
 La vacuna de la varicela es efectiva para prevenir la enfermedad en
individuos susceptibles si se administra en los primeros 3 días (6% de fallos) o
hasta 5 días (33% de fallos) tras la exposición a un caso de varicela. La vacuna
ha resultado también efectiva para controlar brotes de varicela en guarderías y
hospitales.

Calendario, posología y administración

 Puede emplearse a partir de los 9 meses de edad, pero se recomienda hacerlo a


partir de los 12 meses.
 Hasta los 13 años se administra 1 dosis. En mayores de 13 años y en
inmunodeprimidos en los que esté indicada, 2 dosis separadas 1-2 meses (si el
intervalo es mayor no se precisan ulteriores dosis).
 No se han establecido, de momento, recomendaciones de revacunación.
 Varilrix (GSK)  es  estable entre +2/+8ºC durante 24 meses.  Debe
administrarse dentro de los 90 minutos siguientes a su reconstitución.
 Varivax (Sanofi Pasteur MSD) es también estable entre +2/+8ºC durante 18
meses.  Debe administrarse dentro de los 30 minutos siguientes a su
reconstitución.
 Las dosis, de 0.5 ml, se administran por vía subcutánea (o IM). 
 Ambas vacunas han de protegerse de la luz. Pueden congelarse. 
 

Vacuna de la varicela. Recomendaciones de la AEP.


Vacunación universal contra la varicela con una sola dosis entre los 12-15
meses, preferiblemente de forma simultánea con la triple vírica.
Vacunar a todos los niños susceptibles antes de cumplir los 13 años,
preferiblemente en una visita rutinaria  a los 11-12 años.

Vacuna de la Varicela. Recomendaciones de la AAP y los CDC (USA)


Una dosis entre los 12-18 meses en todos los niños sin historia fiable de
varicela.
En mayores de 18 meses, una dosis en cualquier momento durante la
infancia, antes de los 13 años.
Dos dosis separadas 4-8 semanas en adolescentes y jóvenes sanos no
vacunados previamente y que no han padecido la varicela.
Vacunación de los adultos susceptibles, siendo prioritaria la vacunación de
quienes tengan contacto estrecho con personas con riesgo de
complicaciones graves, quienes tengan riesgo elevado de adquirir la
varicela, y mujeres en edad fértil no embarazadas.
Implementar la exigencia de vacunación antivaricela o certificado de
haberla padecido antes de iniciar la asistencia a la guardería o la escuela.
Vacunación de los niños susceptibles expuestos a un caso familiar de
varicela, durante los 3 primeros días tras la aparición del exantema en el
caso índice.
Vacunación de todos los contactos domiciliarios de sujetos
inmunodeficientes.
 

Serología prevacunal

 El antecedente anamnésico de haber pasado la varicela es fiable. Por el


contrario, la historia de no haberla pasado no lo es tanto. Por tanto:

 Los adultos, adolescentes y niños con una historia fiable de varicela


pueden considerarse inmunizados y no precisan, por tanto, vacunación.
 Ya que el 80-90% de adultos sin historia fiable de varicela son inmunes,
la serología prevacunal podría ser coste-efectiva en mayores de 13 años.
 La vacunación de individuos inmunes no comporta riesgo y puede ser
más fácil implementar la vacunación universal que la serología
prevacunal y el seguimiento y vacunación de los seronegativos.

 La AAP recomienda serología vacunal y vacunación, si procede, de los adultos


que cuidan niños: personal sanitario y de guarderías.

Serología postvacunal

 La no seroconversión de los menores de 13 años tras una dosis de la vacuna y


de los mayores de 13 años con dos dosis es tan infrecuente que la serología
postvacunal sistemática no está justificada.
 
ESTRATEGIAS DE VACUNACIÓN CONTRA LA VARICELA
 

Vacunación contra la varicela. Estrategias


posibles.
Vacunación universal en la infancia.

Vacunación de los adolescentes susceptibles.

Vacunación de los grupos de riesgo.

Elección de la estrategia. Factores a


considerar.

Costes de la estrategia elegida

Beneficios esperables con cada una de ellas

Posible modificación de la distribución etaria actual


de los casos de varicela y herpes zóster

 1.- Vacunación universal en la infancia (12-18 meses)

 Inclusión de la vacuna en el calendario de vacunaciones sistemáticas para todos


los niños, a partir de los 12 meses de edad (12-18 meses), con el objetivo de
reducir o incluso suprimir la transmisión del agente infeccioso en la población
general. La vacunación universal de los niños en el segundo año de vida se
complementaría con la vacunación de los preadolescentes susceptibles (se hace
en todos los países que han optado por la vacunación universal a los 12-18
meses).

 Los estudios coste-beneficio y los estudios de seguimiento epidemiológico de la


varicela han demostrado que esta es la estrategia más efectiva y con mejor
coste-eficacia, si se incluyen tanto los costes médicos directos como los costes
sociales indirectos.

 Esta estrategia de vacunación universal plantea, sin embargo, una serie de


cuestiones aún no totalmente resueltas.

 En primer lugar, la necesidad de alcanzar altas coberturas


rápidamente, que permitan generar inmunidad de grupo, minimizando
la transmisión del virus en la población. Por el contrario, coberturas
vacunales bajas (menores del 80%) podrían modificar el patrón
epidemiológico de la infección natural desplazándola a edades
posteriores a la infancia, aumentando la incidencia de la varicela en
adultos y, con ello, en embarazadas y recién nacidos.

 Para aumentar la efectividad de esta estrategia sería necesario


implementar un programa de “repesca” entre los 12 meses y los
12 años de vida y la vacunación de los preadolescentes susceptibles
alrededor de los 12-14 años, como se hizo con la vacuna triple vírica en
los años posteriores a su inclusión en el calendario de vacunaciones
sistemáticas, al menos hasta que la primera cohorte de lactantes
vacunados alcanzara la adolescencia.

 Está por aclarar la necesidad de administrar una segunda dosis de


vacuna en los niños de 3-6 años de edad, como se hace con la triple
vírica, para prevenir los fallos vacunales primarios y, también, en la
varicela, los secundarios, ya que la protección conferida por esta vacuna
desciende con los años, a diferencia de lo que ocurre con las incluidas en
la triple vírica.
 La reducción de la circulación del virus natural en la población general,
conllevaría una reducción de la reinfección natural en adultos y con
ello del refuerzo inmunitario (booster natural) que permite mantener el
estado de latencia del virus natural en quienes contrajeron la varicela en
la infancia. No están aclaradas las posibles repercusiones de este hecho
en la epidemiología del herpes zoster. Hay modelos matemáticos que
postulan un aumento transitorio, aunque significativo, durante varias
decenas de años, seguido de una reducción posterior.

 La disponibilidad de una vacuna cuádruple vírica (sarampión-rubéola-


parotiditis-varicela) facilitaría la vacunación universal y una eventualmente
necesaria segunda dosis. La FDA (USA) ha aprobado ya esta vacuna (Proquad
®) en niños de 12 meses a 12 años de edad, tanto para la primera dosis de
vacuna como para una segunda si se considera necesaria.

 Es difícil encontrar estudios coste-beneficio que incluyan los costes derivados


del tratamiento del herpes zóster. Un cambio importante en su incidencia podría
modificar, por tanto, las conclusiones de los estudios disponibles hasta ahora,
en su mayoría favorables a la vacunación sistemática en la primera infancia.

 Es improbable que se plantee a corto plazo el objetivo de erradicación de la


varicela, como con el sarampión y con la rubéola, ya que aunque el ser humano
es también el único reservorio natural del virus varicela-zoster, el virus
permanece latente en los infectados. Un número de varicelas breakthrough
significativo también contribuiría a dificultar, también, en la práctica, la
erradicación de la varicela.

 Se decida la estrategia que se decida, será necesario un seguimiento


epidemiológico a largo plazo de la incidencia de la varicela en los distintos
grupos de edad (niños, adolescentes y adultos) y de sus complicaciones. Similar
seguimiento deberá efectuarse en relación a la incidencia del herpes zóster.

 2.- Vacunación de los adolescentes susceptibles (10-14 años)

 El objetivo sería reducir la incidencia de la varicela en edades a partir de las


cuales las complicaciones son más frecuentes y graves. Con este abordaje del
problema, se modificaría poco la incidencia global de la varicela, ya que seguiría
siendo igualmente frecuente en la infancia, pero se eliminaría el riesgo de
modificación desfavorable de la epidemiología de la varicela y del herpes zóster.

 Es la estrategia más barata y por ello la más coste-efectiva desde el punto de


vista del pagador y/o proveedor de servicios y la que va a implementarse, por
el momento, en España, según acuerdo del Consejo Interterritorial de Servicio
Nacional de Salud, el 2 de marzo de 2005, en el que se aprobó:

“Recomendar  la vacunación de varicela en una cohorte elegida por cada


Comunidad Autónoma entre las edades de 10 y 14 años (ambas
inclusive), en aquellas personas que refieran no haber pasado la
enfermedad ni haber sido vacunadas con anterioridad”.

 Se considerarán susceptibles y, por tanto, candidatos a recibir la vacuna, todos


aquellos individuos no vacunados previamente en quienes no conste en su
historial clínico que han pasado la enfermedad, o cuando sus familiares o
tutores responsables afirmen que no la han pasado o no le recuerden.
 Se mantienen las recomendaciones efectuadas en 1998 en el sentido de
vacunar a los sujetos, niños o adultos, incluidos en los grupos de riesgo y sus
contactos susceptibles.

 3.- Vacunación de los grupos de riesgo.

 En todo caso sería una estrategia complementaria, orientada a priorizar la


vacunación de aquellos sujetos en los que la varicela conlleva un mayor riesgo
de complicaciones graves y de mortalidad.

 Es la que se había adoptado en España hasta ahora y que se va a mantener


independientemente de la introducción de la vacunación sistemática en una u
otras edades. Los grupos de riesgo se han indicado ya en otro lugar de este
texto.

 La vacunación sistemática universal en la primera infancia permitiría inmunizar


a muchos de los sujetos que van a verse más adelante incluidos en estos
grupos de riesgo antes de que aparezcan las circunstancias o la patología que
les llevará a ello.

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