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SHINIGAMI

-Nombre Completo: Takeru Ishikawa

-Sexo: Masculino.

-Edad: Aparenta unos 25-26, y la real no es exacta, pero unos cientos.

-Rango: Soldado Raso del 5º Escuadrón: Usos y estudio del Kidoh.

-Descripción física: Es un chico bien parecido, de piel clara. Tiene los ojos de color ámbar muy
saturado y el cabello ondulado de un color entre rubio y castaño, como el de la arena, que
normalmente lleva corto y sin ningún tipo de peinado en especial. Tiene siempre barba de un
par de días, pero al ser de color tan claro no se nota demasiado. Aunque no es un hombre
fornido, se mantiene en buena forma. Usa un Shihakushō convencional y lleva la espada
colgada de la parte trasera del cinturón y no al lado. En ambos antebrazos lleva unos brazales
de cuero negro que le cubren hasta media mano también.

-Descripción psicológica: Es alegre y extrovertido, sin ningún tipo de tapujos, adicto al


sarcasmo y a buscarle sentidos extraños a lo que el resto de la gente dice. A pesar de este
comportamiento despreocupado, es una persona muy decidida y cuando se marca un objetivo,
no hay nada que no haga para lograrlo.

En vida, Takeru tuvo todas las facilidades para ser alguien aventajado en aquello en lo que
quisiera, pero su falta de actitud le condenó a la mediocridad. Ahora que está en el Seiretei, su
poder es como el de cualquier otro, pero pretende aprovechar esta segunda oportunidad al
máximo, así que está dedicándose al máximo a mejorar día a día, y ha decidido no volver a
dejar pasar ninguna oportunidad, nunca.

-Zanpakutou: Hizashi (Luz del sol)

 Forma sellada: Es una espada recta, de un solo filo. La hoja es negra pero la parte
afilada no tiene tinte –es del color del acero -. No tiene guardamano, de forma que el
mango y la funda se confunden en una sola cosa cuando está enfundada. Tiene una
hendidura a lo largo del mango y la funda, justo en el centro de ambos lados.

 Definicion Shikai

· Comando de liberación del shikai: Shinonome, Hizashi (Amanece, Hizashi)

· Forma física del shikai: La espada se vuelve en una katana de doble hoja. El mango crece
y las hojas son un poco mas curvas. La principal característica es que puede ser usada como
arco.
· Habilidades del shikai

· Habilidad pasiva del shikai: En parte recogiendo el reiatsu ambiental, en parte el del
usuario, es capaz de crear flechas de energía luminosa. Tambien es capaz de crear “flechas”
mediante los hechizos del Kidoh (básicamente lanza el kidoh con el arco, no con las manos)

· Primer ataque especial del shikai: Taihou Ya – Flecha de artillería


Hizashi concentra mucha más energía que en un ataque normal, convirtiendo una “flecha
normal” en una tan poderosa y rápida como la de una balista.

· Segundo ataque especial del shikai: Taiyou Souheki – Barrera solar


Crea un escudo de energía luminosa enfrente del usuario. Es posible crear una “burbuja” pero
pierde en resistencia. En ese caso el ataque gana el subtitulo: Suihou (Burbuja)

El escudo absorbe una pequeña cantidad de reiatsu de ataques basados en este (mayor
porcentaje cuanto mayor dominio tiene el usuario).

· Tercer ataque especial del shikai: Hiru Rei - Rayos del mediodía
El usuario lanza una flecha hacia el cielo, y cuando llega a la cúspide, se divide en millares de
flechas más pequeñas, que llueven sobre una zona concreta.

 Definicion Bankai

· Comando de liberación del bankai: Hikari no Shin, Hizashi-kin (Ilumina la verdad,


“Dorada luz del sol”)

· Forma física del bankai:

· Habilidades del bankai:

· Habilidad pasiva del bankai:

· Primer ataque especial del bankai:

· Segundo ataque especial del bankai:

· Ataque final del bankai:


Historia:
Takeru fue un humano cualquiera en vida. Tenía potencial para haber sido lo que quisiera, ya
que aunque no entrenaba siempre tenía buena forma física, no dedicaba casi tiempo al estudio
pero era un alumno aventajado en clase; empezó mil aficiones distintas, pero nunca tuvo la
constancia para acabar ninguna; era bien parecido y tubo relaciones esporádicas, pero jamás
una pareja estable. A todas luces, fue un bala perdida, y es irónico que, a la edad de 26 años,
precisamente fuera eso lo que le matara. No, ser un bala perdida no, una bala perdida de
verdad, cuando pasaba escuchando música por delante de una multitud.

Si hubiese prestado atención, habría visto a los policías. Si no hubiese llevado puestos los
auriculares, habría oído las advertencias y los gritos. Nadie más resultó muerto; solo dos de los
atracadores fueron heridos leves.

Es irónico, también, que su “vida” se volviese interesante justo cuando murió.


Allí con él había un Shinigami que se presentó simplemente como “Keishirô”. Le explicó que
durante toda su vida le había estado siguiendo, porque descendía de dos líneas muy diluidas
de Quincy, que se habían unido en él. Había tenido el potencial para convertirse en alguien,
pero toda su vida había ignorado su propio poder.

También le explicó que aunque no se convirtiera en Quincy, le habían continuado siguiendo


para averiguar si podía convertirse en Shinigami una vez muerto, y en eso también había
fallado: Había sellado su propio poder durante tanto tiempo que simplemente había
desaparecido. Iba a pasar su “siguiente vida” en el Rukongai, junto al resto de la gente común,
pero llorando siempre el haber perdido la oportunidad de ser alguien por su falta de actitud.

Keishiro no se equivocó demasiado. La “siguiente vida” de Takeru fue como una estancia en el
limbo, todo monotonía, sin cambios, sin futuro.

¿Cuánto tiempo pasó allí? Takeru no lo recuerda. Conoció a miles de almas, y no es capaz de
recordar a ninguna, vivió en cientos de lugares, y no sabría describir ninguno.

Un día cualquiera, un miembro de su nueva “familia”, un chico llamado Isshûn, llegó llorando.
Nada especial, la vida en el Rukongai no era especialmente feliz. Pero el problema era que
nadie era capaz de decir qué le pasaba, ni siquiera él mismo lo entendía, pero tenía una
especie de “dolor” en el estomago, y se sentía débil.

Takeru pensó que, quizás, el chico estaba desarrollando su reiatsu, y partió en busca de algo
para darle de comer. El hecho de que alguien, aunque no fuera él, tuviera una pequeña
posibilidad de salir de allí le dio esperanzas. Revivió la leve llama que había tenido antes,
cuando vivía.

El caso es que no es fácil encontrar comida en el Rukongai, y tardó mucho en encontrar algo:
un queso redondo que pudo robar de un carro que pasaba, corriendo grandes riesgos.

Estaba feliz, pletórico, por primera vez desde hacia cientos de años, corriendo con su premio
hasta su hogar actual, cuando algo lo mandó volando por los aires, directamente contra un
muro. Cuando recobró el aliento se intentó poner de pie, pero no era capaz de mantener el
equilibrio y tenía la vista borrosa.

Un hombre, vestido con ropas del rukongai, avanzaba hacia él. Este movió otro brazo en un
gesto violento, y una onda de energía clavó a Takeru en la pared.

- Tú, rata. – gritó el desconocido - ¿Qué haces con esa comida? Estúpido animalillo del
rukongai, sin ningún tipo de poder… No lo necesitas. Esto será para mí.

Takeru se vio impotente y sin posibilidades. Estuvo a punto de rendirse… Pero cuando la
palabra cruzó su mente, se llenó de ira:
Rendirse era lo que le había causado esa monotonía, su falta de actitud le había negado toda
posibilidad de “vivir” y le había condenado a la apatía. No iba a ser impasible otra vez, no iba a
dejar pasar la vida por delante de sus ojos como antes, iba a luchar.

Esa certeza avivó la pequeña llama que la esperanza había encendido, y su reiatsu estalló y
fluyó con libertad por primera vez en cientos de años, convirtiéndose en una luz radiante tan
intensa que quemó todo a su alrededor, agotándole del todo.

Despertó a los pocos días en la casa de su “familia” actual. Isshûn estaba perfectamente, y sus
propias heridas habían sido sanadas, aunque lo que más le desconcertó fue esa sensación
familiar que hacía tanto que no sentía: Hambre.
Keishiro, el shinigami que le había seguido en vida, fue el mismo que le salvó del tipo del
rukongai con habilidades de reiatsu y le curó sus heridas. Keishiro se llevó a Isshûn y a Takeru
al Seiretei, promocionándoles él mismo para que les admitieran en la academia.

Keishiro resultó ser “mejor persona” de lo que le había parecido antes a Takeru, y se había
mantenido informado sobre lo que hacía o dejaba de hacer. Cuando sintió el reiatsu de Takeru
creciendo de golpe, uso shunpo lo más rápido posible para llegar hasta el lugar, presintiendo el
peligro, y se deshizo del matón.

Takeru e Isshûn compartieron clase durante mucho tiempo (pese a la diferencia de “edad” y
madurez, ambos habían “despertado” a la vez y tenían un nivel semejante). Ambos eran
alumnos aventajados de la academia en Kenjutsu – técnica con la espada –, pero sobretodo en
las artes místicas, los Kidô.

Para cuando acabaron la academia, ambos tenían un nivel alto de Kenjutsu – ciertamente no
eran los mejores, ni de lejos, pero estaban bastante por encima de la media – y estaban en lo
más alto en lo referente a Kidô, pero especializados en aéreas distintas. Una vez graduados,
Isshûn fue a parar a la 4ª división, y Takeru a la 5ª.
Aclaraciones
El personaje no es un hibrido de Quincy y shinigami ni nada extraño, simplemente sus poderes
recuerdan a los de un Quincy, por herencia y porque su espada funciona también como arco.

El estilo de combate de Takeru


Con la espada sellada, Takeru es casi como cualquier otro shinigami, pero que usa
movimientos muy amplios, piruetas y vueltas al luchar, muy energético, y muy dado al shunpo.
Cuando usa el Shikai generalmente pasa a luchar a distancia, lanzando flechas de reiatsu, pero
su arma sigue siendo una espada de doble hoja con la que puede luchar efectivamente.

Los poderes de Hizashi


Hizashi tiene 2 poderes pasivos en vez de uno, pero uno de ellos algo mas “cinemático” que
útil.

El principal es el que le da la habilidad de disparar flechas de reiatsu, pero el segundo es el que


le permite disparar los Kidô convirtiéndolos en flechas… Esta habilidad es la que considero
“cinemática” teniendo en cuenta de que no le da ninguna ventaja en especial.

Cuando usa la espada como lo que es, una espada de doble hoja, la curvatura de las hojas es
menor que cuando la usa como arco.

El espíritu Hizashi
Hizashi, al igual que otros espíritus de Zanpakutô, puede adoptar varias formas.

La primera es la de un lobo hecho de llamas y luz, con una melena que semeja la forma del sol.
La segunda es la de un hombre de piel blanca, de ojos dorados y cabellos hechos de luz, que
viste una armadura dorada con emblemas y formas que sugieren la idea del Sol y de un Lobo.

Su personalidad es muy parecida y a la vez distinta que la de Takeru:


Es un espíritu muy decidido, motivado por la esperanza, y con un fuerte sentido de la justicia.
Es el que anima a Takeru a seguir adelante, a no volver a la dejadez en la que vivía antes.
Aunque es de sonrisa fácil, es más probable que ría por causas ajenas, a que el haga o diga algo
gracioso – lo que contrasta con la “manía” de Takeru de buscarle los tres pies al gato a todo lo
que le dicen.

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