Pdvsa – Petroecuador ¿Contratación

que esconde pérdidas?

Los gobiernos de Ecuador y Venezuela firmaron un contrato energético por 600

millones de dólares, cuya finalidad sería la explotación petrolera en el campo Sacha, en
la Amazonía de Ecuador, a 300 kilómetros de Quito.

La asociación de las petroleras estatales de Venezuela y Ecuador, Pdvsa y Petroecuador,

respectivamente, permitiría incrementar la producción petrolera de este campo en
200.000 barriles de crudo diario durante los próximos años.

Según Hugo Coronel, personal de operaciones de la empresa Río Napo, ellos tienen
proyectado perforar 11 pozos que aunque conllevan un riesgo técnico y económico
extenderán el área del campo, por lo que consecuentemente se incrementarán las
reservas.
El funcionario además sostuvo que con la inversión “se alargará la vida productiva del
campo Sacha”. Ecuador y Venezuela formaron la empresa mixta Río Napo en la que
Pdvsa tiene una participación accionaria de un 30% y la ecuatoriana un 70%.

A simple vista la intención de este contrato es que los equipos técnicos de Petroecuador
y Petróleos de Venezuela, a través de Pdvsa Ecuador, unan esfuerzos en la explotación y
desarrollo del mejor campo petrolero con el que cuenta Ecuador. Pero si ahondamos un
poco más en el temas nos daremos cuenta que detrás de este contrato también se suman
pérdidas para el estado ecuatoriano y contradicciones en lo que la Constitución
ecuatoriana reza.

Un informe del Banco Central del Ecuador (BCE) divulgado por Diario de Negocios,
que circula de lunes a viernes con HOY, reveló que la producción petrolera ha caído en
2010, sobre todo en los campos que operan las privadas, al pasar de 69 millones de
barriles extraídos entre enero y noviembre de 2009 a 60 millones en similar período de
2010. Entre las causas para esta curva negativa, se cita la renegociación de los contratos
petroleros que obligó a las compañías a parar las inversiones hasta tener claro el
panorama de largo plazo.
Esta tendencia no solo se refleja en la producción privada, sino también en la que está a
cargo de la estatal Petroecuador, que pasó de los 60 millones de barriles extraídos en
2009 a 45 millones de barriles en 2010.

Esta curva, según explicaciones oficiales, se da luego de que Petroecuador dejara las
operaciones del campo Sacha en manos de la compañía de economía mixta Río Napo,
en la que tiene una participación la empresa estatal petrolera venezolana PDVSA.