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F
S T U D I O S
O
Y C O N S U L T
C
O R I A S
U S
EQUIPO PROFESIONAL
Asesor Metodológico
Francisco Covarrubias F.
Ingeniero Civil Post título en Evaluación Socioeconómica
de proyectos
Investigadores
Julio Guzmán C.
Ingeniero Comercial, Mención Economía y Administración.
Magister en Evaluación Socioeconómica de proyectos
Isabel Retamal V.
Socióloga
Jorge Rodríguez C.
Ingeniero Comercial, Mención Economía y Administración.
Magister en Evaluación Socioeconómica de proyectos
Agradecimientos 1
INTRODUCCIÓN 3
ANEXOS
Cuestionario utilizado 113
Bibliografía
Agradecimientos
Este estudio ha sido posible gracias al financiamiento de la Fundación Ford, en forma especial
queremos agradecer el paciente y leal apoyo de Anthony Tillet, sin su colaboración el estudio no
hubiese sido posible.
Por otra parte, también agradecemos la colaboración de diversas personas que nos aportaron con
ideas y experiencia en el tema; en particular quienes participaron como miembros del consejo
asesor en las etapas iniciales del proyecto: Luis Arturo Fuenzalida (Universidad de Las Américas),
Oscar Mac Clure (MIDEPLAN) y Rafael Millán (Banco Interamericano del Desarrollo). Finalmente,
queremos agradecer el apoyo de instituciones relacionadas con el tema de microempresa quienes
nos aportaron valiosa información; Banco del Desarrollo (Area de Microempresa), Fundación
Miguel Kast (a través de Pedro Flores), MIDEPLAN y otras personas e instituciones que
colaboraron participando en las entrevistas en profunididad.
INTRODUCCION
E
Ford.
l presente documento presenta los principales hallazgos del estudio "Factores que
Influyen en el Desempeño Económico y en la Viabilidad de la Microempresa en Chile",
desarrollado por Estudios y Consultorías Focus con el financiamiento de la Fundación
El objetivo general del estudio fue el analizar los factores que influyen en el desempeño
económico de la microempresa en Chile, y en su viabilidad en el tiempo. En este sentido el estudio
se realizó asumiendo una posición lo más neutra posible sobre la microempresa, sin pretender
justificar su presencia, permanencia o impacto socioeconómico. Una característica importante del
presente estudio es que este se centra en el análisis de la microempresa como unidad económica,
y analiza de manera muy parcial el impacto de los apoyos o intervenciones externas que esta
modalidad productiva pueda tener.
Entre los objetivos específicos del estudio, debe mencionarse que este pretende discutir
diversas aproximaciones a la definición del universo de las microempresas, y su función
socioeconómica, también evaluar el impacto socioeconómico de la microempresa en Chile a nivel
agregado y definir y analizar los factores que influyen en la viabilidad de la microempresa en Chile.
E n este capítulo se presenta una breve revisión de diversos aspectos conceptuales que la
bibliografía presenta en relación a la microempresa, en primer lugar se describen
aspectos generales, posteriormente se analizan sus ventajas y limitaciones desde una
perspectiva económica y finalmente, se discute el rol que le cabría al Estado en relación a este tipo
de unidades productivas.
La mayoría de las economías modernas se basan en la acción de los privados como agentes
promotores del crecimiento y el empleo, en donde el Estado cumple un rol subsidiario,
preocupándose principalmente del establecimiento de un marco jurídico y de las condiciones
generales para que los agentes privados se desenvuelvan. En este esquema, denominado
comúnmente economía social de mercado, sólo las disfunciones del mercado y la preocupación
por la equidad ofrecen una justificación económica para la acción estatal1.
En este contexto, las microempresas deben enfrentar la competencia al igual que el resto de los
agentes, intentando subsistir o crecer por medio del ofrecimiento de productos y servicios
valorados por los consumidores. Cabe preguntarse entonces, qué ventajas y limitaciones
presentan las microempresas como agentes productivos en una economía social de mercado y qué
justifica la acción del Estado en relación con su promoción y apoyo.
Si bien las microempresas abarcan un conjunto de negocios con alto grado de heterogeneidad,
es posible describirlas en función de ciertas características comunes:
1
Ver El Estado en un Mundo en Transformación, Informe Económico sobre el Desarrollo Mundial, Banco Mundial, 1997.
▪ El empleo generado por la microempresa es más bien precario, sin adecuada protección social, bajas
remuneraciones y alta rotación laboral. Sus trabajadores generalmente corresponden a excedente de
oferta de trabajo urbano, es decir, personas que no logran insertarse en ocupaciones bien
remuneradas, la mayoría de las cuales corresponden al sector moderno. La evidencia en tal sentido
surge de las diferencias en la acumulación de capital humano entre los trabajadores del sector formal e
informal.
Sin perjuicio de lo anterior, debido al alto grado de heterogeneidad que existe entre las
microempresas, es posible diferenciarlas de acuerdo a ciertos criterios:
▪ Existen diferencias en cuanto a las potencialidades de crecimiento y el efecto de los créditos entre las
microempresas del sector comercio (baja potencialidad) y del sector industria (alta potencialidad)
▪
▪ El sector tradicionalmente más vulnerable al interior de las microempresas lo constituyen las mujeres
dedicadas al comercio de bienes o servicios, mientras que en el otro extremo se encuentran las
microempresas del sector industrial.
▪
▪ Generalmente los asalariados microempresarios corresponden al sector industrial, mientras que los
trabajadores por cuenta propia pertenecen principalmente al sector comercio y servicios. Por tanto, las
microempresas del sector comercio no generan una gran cantidad de empleos asalariados, porque
más que nada corresponden a un modo familiar de producción.
▪
▪ Si bien una parte del sector informal urbano puede responder a una escasez de demanda del sector
moderno, hay otra parte de las empresas del sector informal urbano que cumplen roles productivos
importantes. Esto implica que parte del sector informal cumple función positiva para el desarrollo,
incluso reflejado en que en algunos estratos los ingresos generados son apreciables.
2
Castillo (1989)
Frente a la existencia de las microempresas, cabe preguntarse cuáles son sus ventajas y sus
limitaciones como forma de organización productiva, ya que la justificación para ir en su apoyo
necesariamente pasa por reconocer ciertas virtudes de implementar dichas políticas en
comparación con otras alternativas, tales como los subsidios directos o transferencias.
Al respecto, vale la pena distinguir entre los diversos argumentos que se han desarrollado en
relación con las microempresas.
Aun cuando la mayoría del empleo generado por las microempresas se caracteriza por ser
informal y desprotegido en materia social, comúnmente se argumenta que éstas cumplen un rol
importante en cuanto a la generación de empleos en la economía.
Así por ejemplo, en la mayoría de los países en desarrollo, las microempresas y las pequeñas
empresas representan una parte importante de la fuerza laboral. En Chile, se observa que el sector
de las microempresas representa cerca del 15% al 20% de la población económicamente activa.
Sin embargo, la importancia relativa de los pequeños productores varía significativamente entre
países y así también en un mismo país a lo largo de sus etapas de desarrollo. Estudios
comparativos que incluyen datos sobre 34 países muestran patrones comunes en cuanto al
proceso de industrialización y creación de empleo según el tamaño de las firmas3. En los países de
más bajo ingreso per cápita la mayoría del empleo es generado por la micro y pequeña empresa,
mientras que en los países de ingresos per cápita medio, la mediana empresa aumenta su
participación relativa en el empleo. Así, en la mayoría de los países la tendencia hacia una mayor
importancia de las grandes empresas en materia de empleo va de la mano con el crecimiento en el
ingreso per cápita4.
Por otra parte, tradicionalmente se ha argumentado que las micro y pequeñas empresas se
caracterizan por su mayor intensidad relativa en el uso de mano de obra, es decir, un mayor
número de empleados por unidad de capital. Sin embargo, frente a dicha realidad, cabe
preguntarse si es que lo anterior implica que ellas son más demandantes de trabajo para un
determinado nivel de producción, en comparación con el resto de las empresas. La evidencia
sugiere que el tamaño de las empresas no es un buen indicador de la intensidad de uso de mano
de obra, ya que un porcentaje no despreciable de micro y pequeñas empresas es intensivo en el
uso de capital. Así, se observa que en general existe una mayor variación en la intensidad de uso
de mano de obra entre empresas de distintos sectores económicos que al interior de un sector
económico en particular. Esto implica que si la autoridad tiene como objetivo fomentar una mayor
3
Ver Snodgrass and Biggs (1996).
4
La excepción a lo anterior la constituye principalmente Asia, en donde la distribución porcentual de las empresas en
materia de empleo se ha mantenido relativamente constante. Ibid.
En consecuencia, el hecho que las micro y pequeñas empresas empleen a un alto porcentaje
de la fuerza laboral en los países en desarrollo responde más que nada a la composición de la
producción de dichos países, y no precisamente a una mayor intensidad de uso de mano de obra
por parte de las empresas de menor tamaño.
En la misma línea, otro argumento esgrimido para ir en ayuda de las micro y pequeñas
empresas es su aparente mayor capacidad para crear empleos que el resto de las empresas. Al
respecto, la evidencia sugiere que, si bien ellas tienen una gran dinámica en cuanto a la creación
de empleos, también es cierto que presentan una alta destrucción de empleos. En otras palabras,
aun cuando se caracterizan por una alta tasa de creación bruta de empleos, su tasa de creación
neta de empleos es más bien baja5.
Con respecto a la calidad de los empleos generados por la microempresa, es posible afirmar
que, aun cuando hay muchas excepciones, en general en los países en desarrollo los asalariados
de las microempresas reciben un menor nivel de remuneraciones, un menor nivel de capacitación y
una menor cantidad de oportunidades de desarrollo que el resto de los asalariados. Existe cierta
evidencia para los países desarrollados que sugiere que esa brecha disminuye en la medida que
los países crecen7.
La microempresa y la eficiencia
5
Para evidencia sobre países desarrollados, ver Davis, Haltiwanger, and Schuh (1993).
6
Cifras estimadas a partir de información del Servicio de Impuestos Internos.
7
Ver Snodgrass and Biggs (1996).
Frente a la falta de evidencia a favor de los argumentos económicos que comúnmente se han
planteado como justificación para el apoyo a las microempresas, es necesario preguntarse cuál
debiese ser el rol del Estado en ese sentido.
Para analizar las medidas de política pertinentes en relación con la microempresa es necesario
preguntarse qué determina el tamaño de una empresa y por ende qué hay detrás de una
8
Encuesta de Caracterización Socioeconómica, CASEN, 1998.
La distribución de las firmas según tamaño tiene relación con el proceso de desarrollo industrial
y económico de un determinado país. Así, en la medida que un país crece, el tamaño relativo del
sector agrícola disminuye, mientras que aumenta el tamaño del sector industrial y del sector
servicios, así como también el tamaño medio de las empresas. La distribución según tamaño de las
empresas va evolucionando de acuerdo con la composición de la producción de la economía y de
acuerdo con los costos de transporte y de transacción.
Lo anterior implica que en vez de hablar de una distribución “ideal”, es más adecuado hablar de
una distribución “de equilibrio” de las empresas según tamaño, determinada por la dotación de
recursos, la tecnología, las regulaciones e instituciones existentes y las condiciones de mercado.
Algunos de los factores que determinan esta distribución de “equilibrio” son esencialmente
“naturales”, en el sentido que no están determinados por las políticas públicas. Sin embargo, otros
factores sí están influenciados por dichas políticas, tales como los costos de transacción, algunos
tipos de costos fijos, el grado de competencia existente y la segmentación y/o la distorsión de los
mercados. Algunos ejemplos de lo anterior son los siguientes:
▪ Grado de información existente: para la asignación correcta de los recursos, en una economía de
mercado es necesario que todos los agentes manejen la misma información relevante. Sin embargo,
en la realidad ese supuesto no se cumple, provocándose un sesgo en contra de las empresas de
menor tamaño. Por ejemplo, el acceso al crédito es más dificultoso para las microempresas porque,
entre otras cosas, para los bancos es más costoso obtener información sobre su capacidad y
solvencia. En consecuencia, estos terminan cobrando mayores tasas de interés o negando el acceso
al crédito a las microempresas.
▪
▪ Tasa de interés máxima convencional y medidas contra la usura: el mayor riesgo relativo de las
microempresas implica que una correcta asignación de los recursos requiere que el costo de los
microcréditos sea mayor que el resto de los créditos. Sin embargo, ciertas medidas preventivas de la
usura, que en teoría pretenden beneficiar a las microempresas terminan perjudicándolas. Este es el
caso de la existencia de una tasa de interés máxima convencional establecida por ley, puesto que
genera trabas al acceso al crédito para los deudores más riesgosos, que generalmente corresponden
a las microempresas.
El análisis precedente sugiere que las políticas económicas a favor de las microempresas en
realidad deberían corresponder a estrategias de desarrollo del sector privado que consideren el
hecho que la mayoría de las firmas son micro y pequeñas empresas, que ellas enfrentan distintas
restricciones y oportunidades que el resto de las empresas, y que el tipo de instituciones
necesarias para su desarrollo no surge espontáneamente en mercados segmentados o
distorsionados. Esto apunta hacia una intervención del Estado que corrija las imperfecciones del
mercado y elimine los sesgos “naturales” en contra de las micro y pequeñas empresas por medio
de:
▪ Corregir las fallas de mercado que crean desventajas de costos en contra de las microempresas, que
restringen el acceso a los mercados y que inhiben el desarrollo de servicios financieros y no
financieros para las microempresas.
▪
▪ Disminuir los costos de transacción en el mercado financiero, en el de bienes y en el mercado laboral,
por medio de la provisión de más y mejor información para los agentes.
▪
▪ Reconsiderar ciertas medidas de política y regulaciones que implícita o explícitamente son sesgadas
en contra de las microempresas, o que provocan la presencia de costos fijos que generan una
desventaja competitiva en su contra.
▪
▪ Invertir en bienes públicos que permitan abrir los mercados y que generen mayores facilidades para la
competencia, lo cual incluye políticas de infraestructura, comunicaciones, información, trasporte,
educación y desarrollo tecnológico.
Este enfoque contrasta de algún modo con la visión tradicional de las estrategias de promoción
de las micro y pequeñas empresas, en donde el énfasis generalmente está puesto en la provisión
directa de servicios financieros o no financieros subsidiados para su favor.
Por el contrario, acá se pone mayor énfasis en la creación y desarrollo de las condiciones que
permitan que las microempresas con capacidad de crecimiento se desenvuelvan en mercados en
donde no existan sesgos en su contra. Así también, se sugiere que se desarrollen mercados de
servicios que complementen los requerimientos de los microempresarios, y no que sustituyan la
Ejemplo de lo anterior es la visión actual de la manera en que se debe enfocar la acción de las
instituciones privadas de apoyo crediticio a las microempresas. Para lograr la sustentabilidad de
dichas instituciones en el largo plazo, se ha reconocido la necesidad que cobren intereses de
acuerdo con los costos de los créditos involucrados. Así también, la naturaleza diferente de los
servicios requeridos por las microempresas ha hecho necesario que los gobiernos aceleren el
desarrollo de los mercados por medio de la promoción de innovaciones y de una mayor capacidad
institucional de los prestamistas privados enfocados a las microempresas.
Frente a esta situación, cabe preguntarse qué justifica la intervención estatal en apoyo hacia
este tipo de microempresas, también denominadas microempresas de subsistencia, cuyas
características principales son la nula o muy baja capacidad de inversión y crecimiento, la corta
vida que presentan, y el hecho que surgen principalmente como alternativa de trabajo para el
microempresario ante la imposibilidad de conseguir un empleo asalariado.
“El gobierno en sus esfuerzos por superar la pobreza ha asignado a la microempresa un rol fundamental,
como estrategia para generar y aumentar los ingresos de los sectores pobres del país (…) Se debe
propiciar el aumento de los ingresos mediante el desarrollo productivo y laboral, con énfasis en sectores y
comunas pobres, a través de un programa integral de apoyo a microempresarios y a pequeños
productores urbanos y rurales, perfeccionando los instrumentos de fomento productivo del Estado para
los grupos de menores ingresos, y apoyando la modernización de las relaciones laborales y el
mejoramiento de la seguridad social9”
9
“Informe Final de Evaluación del Programa de Asistencia y Capacitación a Microempresarios”, Programa de
Evaluación de Proyectos Gubernamentales, Ministerio de Hacienda, Chile, agosto de 1997.
E n este capítulo se discuten diversos elementos que son de interés para la parte empírica
de este estudio, que se desarrolla en los capítulos siguientes. Las definiciones que se
presentan en este capítulo se nutren principalmente de la revisión bibliográfica del
estudio, de diversas entrevistas en profundidad que se realizaron a actores relevantes 10, y de la
experiencia y aprendizaje del equipo de profesionales que trabajó en el proyecto.
Con respecto a la literatura revisada, es importante destacar que se tuvo acceso a más de 50
publicaciones que abordan el tema de la microempresa desde diferentes perspectivas. De estas
fuentes, sólo siete estudios son extranjeros y todos ellos, salvo dos casos, fueron publicados en la
década de los noventa. Lo anterior refleja que existe un considerable dinamismo e interés en
conocer la realidad de la microempresa. Sin embargo, muy pocos estudios tienen el enfoque del
presente trabajo, ya que la mayoría de ellos se concentran en el análisis de los apoyos existentes
para este tipo de unidades económicas, caracterización en general y a una descripción
socioeconómica de los microempresarios. El desempeño económico es analizado en dos
publicaciones con una perspectiva mas bien casuística.
En relación a las entrevistas en profundidad, cabe destacar que se realizaron diez entrevistas a
personas relevantes en el sector microempresarial, entre las personas entrevistadas se conversó
con ejecutivos de instituciones financieras que otorgan crédito a microempresarios, con
instituciones de apoyo a microempresarios y con investigadores en el tema. A cada entrevistado se
le consultó por la definición de microempresa, su rol socioeconómico, rol del Estado y definición
operativa de desempeño y viabilidad. Por otra parte, también se entrevistó a tres funcionarios de
instituciones públicas de apoyo a la microempresa, con quienes justamente se analizó los servicios
de apoyo que ofrece el Estado y su impacto.
10
Para mayor detalle de esta actividad conviene revisar el Informe de Avance del Estudio, Agosto 1999.
Al buscar una definición para microempresa, debe en primer lugar considerarse que una
microempresa es una empresa de características especiales, principalmente en cuanto a su menor
tamaño, medido según diferentes variables. En este sentido, para definir a una microempresa,
aunque parezca elemental, lo básico es que exista una actividad productiva, de servicios, o
comercial, la cual por su reducida escala, y por otras características particulares que se señalan
más adelante, es calificada como microempresa.
Una vez ante la presencia de una empresa, para calificarla como una microempresa debe
distinguirse entre las definiciones operativas utilizadas para fines estadísticos o con el propósito de
seleccionar beneficiarios para programas, y las definiciones conceptuales que tienen un carácter
más descriptivo. Además debe considerarse que dentro del contexto de las microempresas es
posible definir distintos tipos de ellas según determinadas características, puesto que las
microempresas no representan un universo completamente homogéneo.
Entre las definiciones operativas, cabe mencionar que las distintas instituciones que interactúan
con las microempresas utilizan definiciones levemente diferentes, no obstante, existen algunos
parámetros comunes a casi todas ellas. Entre estos parámetros se destacan principalmente tres:
En función de estos tres parámetros, y de otros más particulares, las distintas instituciones
determinan diferentes umbrales máximos para calificar a una empresa como microempresa. Por
ejemplo, algunas exigen que el número de empleados sea menor que diez, mientras que otras
exigen que sea menor que cinco, incluyéndose en todos los casos como microempresa a los
trabajadores por cuenta propia.
Entre los parámetros menos comunes para definir a una microempresa, pero igualmente
utilizados por algunas instituciones, se pueden mencionar los siguientes:
Para cada uno de estos parámetros se exigen también umbrales máximos, por ejemplo, en
algunos casos se califica como microempresa a aquellas que tienen menos de tres empleados
Esta definición es la más utilizada en nuestro país, puesto que muchas otras instituciones la
usan como referencia. Esta definición considera como microempresa a aquellas empresas que:
▪ Tienen como máximo nueve empleados en total, tanto remunerados como no remunerados,
incluyendo al propio microempresario y a sus familiares que trabajen con él (para el caso de los
programas de capacitación y asesoría, el umbral de número de empleados se disminuye a siete).
▪ En promedio tienen ventas mensuales menores a UF 200 (para el caso de los programas de
capacitación y asesoría, el umbral de ventas mensuales se disminuye a UF 150).
▪ Tienen activos fijos menores a UF 500.
▪ Tienen como máximo diez empleados, tanto remunerados como no remunerados, incluyendo al propio
microempresario y a sus familiares que trabajen con él.
▪ Tienen activos fijos menores a US$ 20.000 (aproximadamente UF 700).
▪ Tienen como máximo diez empleados, tanto remunerados como no remunerados, incluyendo al propio
microempresario y a sus familiares que trabajen con él (en algunos casos el umbral de número de
empleados se disminuye a cinco).
▪ El microempresario tiene una escolaridad menor a los doce años (es decir, tiene como máximo una
educación media completa).
▪ No constituyen una sociedad completamente formal (es decir, presenta algún grado de informalidad en
alguno de los distintos ámbitos considerados, ya sea ante el Servicio de Impuestos Internos, ante la
Municipalidad, o ante la Dirección del Trabajo).
▪
▪
▪
▪ Tienen como máximo diez empleados, tanto remunerados como no remunerados, incluyendo al propio
microempresario y a sus familiares que trabajen con él.
▪ El microempresario tiene como máximo una educación técnica o superior incompleta.
Respecto a esta definición, cabe mencionar que busca ser una aproximación a la definición
utilizada por el FOSIS, la cual no puede ser homologada totalmente con las variables preguntadas
en la encuesta CASEN. Esta definición, que en términos conceptuales intenta ser equivalente a la
del FOSIS, considera como microempresa a aquellas empresas que:
▪ Son unipersonales (trabajadores por cuenta propia), o tienen como máximo nueve empleados incluido
el microempresario (el umbral de número de empleados se disminuye a cinco para el caso de los
sectores Comercio, Servicios, Transporte, y Almacenamiento).
▪ El trabajador por cuenta propia, o dueño de la empresa, tiene como máximo una educación técnica o
superior incompleta.
▪ No pertenecen a los oficios de: clero, artistas, deportistas, ni servicio doméstico.
▪ Las microempresas son generalmente operadas por su dueño, sustentándose principalmente en sus
habilidades, conocimiento y experiencia. De hecho, un porcentaje significativo de microempresas es
unipersonal, debiendo el dueño asumir tanto las funciones productivas, como las funciones
administrativas, comerciales y gerenciales.
▪ Los microempresarios en general tienen un bajo nivel de educacional formal, y tienen poca
preparación para las actividades administrativas, comerciales y gerenciales; además, las
microempresas en general absorben fuerza laboral de baja calificación, con pocas posibilidades de
acceder al sector moderno de la economía.
▪ En muchos casos existe una separación difusa entre las finanzas del hogar del microempresario y las
finanzas de su negocio, puesto que existe una gran interconexión entre ambos (por ejemplo,
Mediante esta clasificación se pretende identificar a las microempresas que tienen posibilidades
de crecer y llegar a ser pequeñas o medianas empresas. Se pueden identificar tres categorías:
Mediante esta clasificación se analizan los distintos sectores de actividad en que operan las
microempresas, lo que de paso clarifica que las microempresas pueden enmarcarse dentro de
cualquier sector de actividad, ya sea el sector manufacturas, explotación de recursos naturales,
comercio, o servicios.
e. Otras categorizaciones
Otras tipologías que pueden resultar útiles para el análisis de las microempresas corresponden
a:
▪ Según relaciones de trabajo y/o de propiedad, las microempresas pueden calificarse como familiares,
o extrafamiliares.
▪ Según su participación en el proceso productivo, las microempresas pueden calificarse como
integrales o especializadas.
▪ Según la intencionalidad en la duración del trabajo, las microempresas pueden calificarse como
permanentes, ocasionales, o temporales.
▪ Sean la principal actividad laboral del dueño o trabajador por cuenta propia, según sea el caso.
En términos operativos para analizar datos globales sobre la microempresa en Chile en función
de distintas bases de datos, se utilizarán las definiciones que se aproximen de la mejor manera
posible a la definición del FOSIS. Así, para utilizar la encuesta CASEN se utilizará la definición
planteada por MIDEPLAN en base a la encuesta en cuestión, y para utilizar la base de datos del
Servicio de Impuestos Internos sobre las empresas que tributan IVA, se considerará como
microempresas a aquellas cuyas ventas anuales sean menores a las UF 2.400.
Con respecto al desempeño económico, debe aclararse que se refiere a un enfoque particular
para analizar el desempeño de la microempresa en general, puesto que hace directa alusión sólo a
variables financieras, dejando de lado otro tipo de variables. En este sentido, el desempeño de la
microempresa en general puede ser analizado desde diferentes perspectivas, como por ejemplo
desde el punto de vista de la percepción del propio microempresario, o del nivel de satisfacción de
los clientes, no obstante, en el presente estudio se ha optado por enfocarse en el desempeño
económico, el que si bien puede resultar parcial, resulta útil por su objetividad y por su
operatividad.
Hecha la aclaración anterior, resulta necesario definir qué se entiende por un buen desempeño
económico en una microempresa. Conceptualmente éste puede entenderse como el hecho que la
empresa en un período de tiempo determinado genere ingresos que más que compensen todos los
gastos relevantes en que incurre para la generación de dichos ingresos, incluyendo todos los
costos de capital y de mano de obra, es decir, que sea capaz de generar utilidades.
▪ Utilidad neta mensual, definida como los ingresos brutos mensuales de la microempresa menos los
gastos totales mensuales (es importante considerar todos los ingresos y gastos relevantes, poniendo
especial cuidado en los gastos, de considerar el costo de la mano de obra, sea o no sea remunerada).
También se puede estimar la Utilidad neta anual, proyectando bajo ciertos supuestos la Utilidad neta
mensual.
▪ Rentabilidad mensual por hora de trabajo, definida como la Utilidad neta mensual dividida por el total
de horas de trabajo mensual en la microempresa, considerando al microempresario y a la totalidad de
los empleados, remunerados y no remunerados.
▪ Unipersonales (Trabajadores por cuenta propia) o personas que trabajan en empresas con un máximo
de nueve empleados en general, o cinco empleados en el caso de los sectores de Comercio,
Servicios, Transporte y Almacenamiento.
▪ El trabajador por cuenta propia, o dueño de la empresa tiene como máximo educación técnica o
superior incompleta.
▪ No pertenecen a los oficios de clero, artistas, deportistas ni servicio doméstico.
La utilidad de esta información está asociada al hecho que permite tener una estimación global
de la cantidad de personas empleadas en el sector microempresas, y de esta manera proyectar o
contextualizar el análisis y conclusiones de este estudio a la realidad del país. Cabe destacar que
la información que se utiliza para hacer el análisis más cuantitativo sobre desempeño económico y
viabilidad de la microempresa, en los capítulos 4 y 5, son parciales, por cuanto el desempeño se
realiza sobre la base de una muestra de microempresarios del Gran Santiago, mientras que el
análisis de la viabilidad se realiza sobre una base de datos del Servicio de impuestos internos, la
cual tiene cobertura nacional pero considera solamente a las microempresas formales.
En primer lugar es importante aclarar que la1 estimación que se presenta corresponde al
número de personas que trabaja en microempresas, y no necesariamente el número de
microempresas. Tal como se explicó la estimación surge a partir de la definición operativa de
microempresa que utilizó MIDEPLAN para la encuesta CASEN 1994. De este modo, siguiendo ese
procedimiento y tal como se aprecia en el cuadro 1.1, es posible estimar que para el año 1998
había en Chile más de un millón de personas que laboraban en unidades económicas del tipo
microempresas. Esto correspondería a un 18% de la fuerza de trabajo o a un 20,2% de los
ocupados.
Cuadro 1.1
Estimación de la población ocupada en Microempresas a nivel nacional
Rubro No. %
Industria 186.481 17,5
Comercio 337.700 31,6
Servicios y Construcción 406.631 38,1
Otros 136.376 12,8
TOTAL 1.067.188 100,0
Finalmente, también merecería una discusión la exclusión del sector agrícola y minería, ya que
los pequeños productores y los pirquineros pueden tener claramente un perfil de microempresarios.
La incorporación de estos rubros en la identificación global de los microempresarios significaría un
aumento de 315.000 personas adicionales con perfil microempresarial.
Tal como se aprecia en el Gráfico 1.1, más de un 90% de las personas que trabajan en
microempresas desempeñan su labor en el sector urbano, solo una parte marginal de los
microempresarios trabajan en sectores rurales. Esta composición está asociada también al hecho
que los rubros productivos vinculados a lo rural; como son agricultura, pesca y mineria, no son
considerados dentro de la definición de microempresas.
Gráfico 1.1.
Distribución Urbano Rural de Microempresarios
Rural
8%
Urbano
92%
b. Situación de Pobreza
Por lo tanto, claramente el microempresario no está dentro del segmento de pobreza. Sin
embargo, debe tenerse presente que es probable que justamente el hecho de poseer esa
microempresa es el factor que los hace superar el umbral de la pobreza.
Gráfico 1.2
Microempresarios y Pobreza
Inidigente
3% Pobre
13%
No Pobre
84%
c. Distribución Regional
En el gráfico 1.3 se puede apreciar la distribución interregional de las personas que laboran en
microempresas comparada con la distribución de la población total. Es posible constatar que la
distribución de ambas variables del gráfico tienen una composición bastante similar, y las
diferencias entre ambas no son significativas. Más aún, también se comparó la distribución
interregional de los microempresarios con respecto a la distribución de los ocupados y de los
desocupados, en ambos casos, se constató la similitud de ambas distribuciones con respecto a los
microempresarios.
Gráfico 1.3
Participación relativa interregional de Microempresarios y Población Total
45,0
40,0
35,0
30,0
% Participación
25,0
20,0
15,0
10,0
5,0
0,0
I II III IV V VI VII VIII IX X XI XI RM
Regiones
Microemp. Población
Para la realización de esta muestra de microempresarios se ha seguido una serie de pasos con
el fin de cuidar la calidad del instrumento de recolección de información, y de la metodología de
muestreo seleccionada.
Al respecto, se consideró en primer lugar un diseño preliminar del método de muestreo y del
cuestionario, el cual se basó por un lado en las opiniones recolectadas a través de las entrevistas
en profundidad a actores del sector microempresarial chileno, y por otro lado, en los estudios
anteriores sobre la microempresa en Chile y en el extranjero, los que fueron considerados a través
del proceso de revisión bibliográfica. En una segunda instancia, el método de muestreo y el
cuestionario fueron sometidos a la opinión del Comité Asesor del estudio. Finalmente, una vez
incorporados los comentarios y sugerencias del Comité Asesor, se procedió a efectuar una
aplicación piloto del cuestionario a una muestra de 19 microempresarios, previa capacitación de los
encuestadores, de lo cual surgieron importantes aprendizajes tanto para el diseño definitivo del
instrumento de recolección de información, como para el diseño definitivo del método de muestreo.
Así, una vez elaborado el diseño definitivo, se volvió a capacitar a los encuestadores, y se procedió
al trabajo de campo final.
a. Método de muestreo
En circunstancias que no se cuenta con un marco muestral referido al total del universo en
estudio, puesto que sólo están disponibles marcos muestrales parciales como bases de datos de
microempresarios beneficiarios de determinadas instituciones de apoyo, o bases de datos de
microempresarios de algunas comunas en particular, se ha hecho necesario considerar en el
diseño muestral la máxima dispersión en términos geográficos. Lo anterior implica cubrir todas las
comunas del Gran Santiago, en términos de la recolección de información, para lo cual se ha
considerado una distribución comunal estimada de los microempresarios, obtenida mediante una
simulación a partir de información de la Encuesta CASEN 96, distribución que se detalla más
adelante en el Cuadro 3.1. La estimación de microempresarios por comuna, en base al domicilio
particular del microempresario, se realizó siguiendo la definición de microempresa planteada por
MIDEPLAN en base a la Encuesta CASEN.
Tomando en consideración lo anterior, se decidió utilizar un muestreo en dos etapas, con una
estratificación dada por la distribución comunal. Las unidades muestrales de primera etapa
corresponden a sectores de manzanas, y las de segunda etapa corresponden a las viviendas. El
sector se define como un grupo de manzanas adyacentes, donde la manzana central es elegida
aleatoriamente mediante un muestreo sistemático. En cada sector se realizaron 5 entrevistas, lo
que se consideró un número adecuado en términos operacionales. Así, a cada encuestador se le
proporcionó un mapa con el sector demarcado en torno a la manzana central, donde se le indicó la
manzana principal y aquellas en las que debía continuar para completar la cuota de entrevistas
requerida, utilizando como punto de inicio del barrido la esquina específica marcada en el mapa. El
marco muestral utilizado para sortear los sectores se construyó a partir de la información de mapas
de la Compañía de Teléfonos de Chile, y de mapas del Instituto Nacional de Estadísticas del
precenso del año 1991.
Con respecto al tamaño muestral, se consideró un tamaño de 520 entrevistas, con un error
muestral máximo de 4,7%, con un 95% de confianza. Como el número de encuestas determinado
para realizar por sector fue de 5, se requirió un total de 104 sectores. En consecuencia, la
distribución de la muestra queda como se detalla en la Cuadro 3.1 a continuación:
Con respecto al contenido del cuestionario propiamente tal, éste consta en primer lugar de un
apartado para la identificación de la unidad muestral (apartado 0A), el que se complementa con un
filtro, en una hoja separada, con cuatro preguntas para verificar la existencia de un
microempresario en la unidad muestral. A continuación cuenta con un apartado para la
identificación del microempresario (apartado 0B), además de seis apartados de preguntas
(apartados I al VI), los que a su vez se subdividen en secciones.
La encuesta a microempresarios del Gran Santiago, se aplicó entre las semanas del 24 de
Mayo y el 6 de Agosto de 1999.
▪ Capacitación a encuestadores
▪ Aplicación piloto
▪ Revisión de cuestionario y ajustes.
▪ Segunda capacitación a encuestadores.
▪ Levantamiento de encuestas
Cuadro 3.2
Situación en Total de Viviendas Contactadas
En el Cuadro 3.3 se presenta el número de viviendas que fue necesario contactar en cada
comuna del Gran Santiago para poder obtener el número de encuestas determinado según las
cuotas comunales de la muestra. Se observa que en promedio se debieron efectuar 18,6 contactos
para obtener una entrevista. Se aprecia además que el esfuerzo realizado en términos de viviendas
contactadas para obtener la cuota de encuestas requerida varió entre las distintas comunas,
necesitándose un mayor esfuerzo en comunas como Huechuraba, Independencia y Pudahuel, y un
menor esfuerzo en comunas como Ñuñoa y San Bernardo.
Se realizó una doble digitación de las entrevistas, con el fin de minimizar los posibles errores de
ingreso, de manera adicional se aplicó una malla de validación de los datos que consideró los
siguientes aspectos: codificación de valores "missing" y valores "no corresponde", verificación de
códigos válidos, distribución de frecuencias en preguntas expresadas en $, años, meses, y otros
datos numéricos varios , cumplimiento de filtros internos, consistencia entre preguntas, verificación
de cumplimiento del filtro externo.
Como una primera aproximación a las características de las microempresas, en esta sección se
presenta de manera sintetizada, una descripción agregada de las mismas en base a la encuesta
aplicada a microempresarios del Gran Santiago, cuya metodología se describe en la primera
sección de este capítulo. En una primera instancia se especifican algunos aspectos metodológicos,
como la definición y construcción de las variables analizadas, para luego presentar la descripción
de las microempresas propiamente tal, la que se organiza según cinco factores de características:
personales del microempresario, de su hogar, del negocio, de su capacidad de gestión, y de sus
resultados financieros.
Personalidad Microempresarial
Se construyó un índice de rasgos deseables de personalidad empresarial, a partir de la
pregunta respectiva en el cuestionario. En ella se presentaron quince rasgos relativos a
autoconocimiento y autoconfianza, visión de futuro, motivación de logro, capacidad de
planificación, y capacidad de persuasión, frente a los cuales los encuestados manifestaron si se
presentaban en ellos, y en qué grado. Así se asignó puntaje al grado en que se presentaba cada
rasgo, y luego se construyeron cuatro categorías absolutas según tramos homogéneos de puntaje:
“personalidad empresarial baja”, “media baja”, “media alta”, y “alta”.
Rubro de actividad
Los propios microempresarios clasificaron su actividad en tres rubros: Comercio, manufacturas,
y servicios, incluyendo en este último caso al sector construcción.
Antigüedad de la microempresa
Se expresa en años de antigüedad y se construyó según la declaración de los propios
microempresarios. Se construyeron tres categorías, identificando en los extremos microempresas
esencialmente nuevas (menores de un año) y microempresas consolidadas (mayores de 10 años).
Grado de formalidad
Se consideraron dos instancias de formalización de la microempresas: iniciación de actividades
ante el Servicio de Impuestos Internos, y obtención de patente ante el Municipio respectivo. A partir
de lo anterior se establecieron tres categorías de formalidad: formal ante ambas instancias
(“microempresa formal”), ante una de las dos instancias (“parcialmente formal”), y ante ninguna de
las dos instancias (“microempresa informal”).
Actividades de planificación
Para la construcción de esta variable se utilizó un índice basado en dos preguntas del
cuestionario en las cuales se presentaban diferentes actividades de planificación potencialmente
realizadas por los microempresarios, algunas más deseables que otras, y por lo tanto calificadas
con un mayor puntaje. Así se construyeron tres categorías absolutas para calificar el nivel de
planificación de las microempresas, donde los extremos son: “estrategia planificadora” (7 puntos), y
“estrategia no planificadora” (menos de 3 puntos).
Utilidad mensual
Esta variable se construyó a partir de la pregunta del cuestionario referida a las ventas del mes
anterior y la referida a los gastos de mes anterior, calculándose la utilidad como la diferencia entre
ingresos y gastos. Luego se ordenó la distribución por cuartiles, los que quedaron construidos por
los siguientes tramos: utilidad mensual menor a $18.000 (incluyéndose en este cuartil todas las
utilidades negativas o pérdidas); utilidad entre $18.000 y $65.000; entre $65 mil y $167.000; y
mayor a $167.000.
a.2. Escolaridad
Se observa que un 39% de los
microempresarios tiene al menos M icro em p resas segú n Añ o s d e
educación media completa (12 o E sco larid ad d el M icro em p resario
más años de estudio), aunque la
gran mayoría no terminó sus 4 o menos
12 o más
estudios secundarios. Incluso un
39% 14%
14% cuenta con menos de 4 años
de escolaridad.
Así, la escolaridad promedio de
los microempresarios es de 9,5
años, levemente inferior al
promedio nacional, que según la Entre 5 y 11
Encuesta CASEN 1998 llega a 9,7 47%
años.
Al momento de aplicarse el
cuestionario, la gran mayoría de los Microempresas según Expectativas
microempresarios (96%) DesempeñodeFuturo (1 año)
visualizaba que continuaría en su
negocio dentro de un año. En 80%
64%
particular manifestaban un fuerte 60%
optimismo, ya que el 64%
esperaba mejorar sus resultados, y 40%
24%
sólo un 9% pensaba que los 20% 9%
empeoraría. 4%
0%
Mejorará Estará Igual Empeorará No existirá /
No sabe
La mayoría de los
microempresarios (56%), Microempresas según Tipo de Hogar del
pertenece a hogares nucleares Microempresario
completos, seguido por extensos
56%
completos (21%). 60%
En comparación con la 50%
distribución nacional acorde a la 40%
Encuesta CASEN 1998, en el caso 30% 21%
20% 12%
de los hogares de los 6% 5%
10%
microempresarios se aprecia una 0%
mayor importancia relativa de los
Completo
Completo
Incompleto
Incompleto
Extenso
Unipersonal
Nuclear
Comercio
54%
Servicios
31%
0%
1 a 159 160 a 239 240 a 247 248 y más
Horas/Hombre Mensuales
1-10 años
51%
Los microempresarios se
muestran más bien pasivos Microempresas según Desarrollo de
respecto al desarrollo de Actividades de Información y Promoción
actividades de información y
80%
promoción de sus productos para
57%
la venta. En base al índice 60%
construido para medir el nivel de 37%
actividad al respecto, sólo el 6% de 40%
los microempresarios aparece 20%
como activo, mientras el 57% no 6%
realiza actividades de este tipo. 0%
Activo Neutro Pasivo
Categoría
microempresarios.
La relación de los
microempresarios con sus clientes Microempresas según Relación con Clientes
tiende a ser informal (45% de los
casos), aunque existe un 60%
porcentaje importante (32%) que 45%
establece relaciones formales. Así, 40% 32%
el perfil más común de relación con 23%
los clientes para los 20%
microempresarios es vender de
manera espontánea sin trato 0%
previo, a personas particulares, y Formal Neutra Informal
hacerlo en el mismo barrio donde Categoría
opera la microempresa.
La relación de los
microempresarios con sus Microempresas según Relación con
proveedores muestra un grado Proveedores
mayor de formalidad que en el
caso de los clientes (33% de los 80%
casos es formal, y 58% neutra, es 58%
decir, con algunos elementos de 60%
formalidad). Así, el perfil de 40% 33%
relación más habitual de los
20% 9%
microempresarios con respecto a
sus proveedores, es comprar de 0%
manera espontánea sin trato Formal Neutra Informal
previo, a comerciantes mayoristas. Categoría
180
de las diferentes realidades de las
microempresas, ya que tres 80 9 32
-13
cuartos de ellas tiene una -20
rentabilidad menor al promedio, de Cuartil 1 Cuartil 2 Cuartil 3 Cuartil 4
(-
165,39% (4,82% a (16,37% (58,34%
las cuales un cuartil tiene en
a 4,81%) 16,36%) a58,33%) y más)
promedio una rentabilidad negativa
Cuartiles (rango %)
de 13%. Por otro lado, un cuartil
tiene una rentabilidad promedio de
346%.
En cuanto a los factores personales, los microempresarios hombres y mujeres son semejantes
en edad (46 años en promedio), nivel de escolaridad (levemente superior el de los hombres con 9,6
años versus 9,2 de las mujeres), aprendizaje autodidacta del oficio, personalidad microempresarial
(en ambos casos muy poca presencia de rasgos empresariales), y expectativas preferentemente
positivas sobre el futuro del negocio. Las principales diferencias en el ámbito de los factores
personales radican en la mayor experiencia laboral de los hombres, y en la motivación para ser
microempresario, la que en el caso de los hombres es para ser independiente, y en el caso de las
mujeres se agrega el hecho de no tener otra alternativa para trabajar.
Respecto a los factores del hogar del microempresario, tanto en el caso de hombres como en el
de las mujeres predomina el hogar nuclear completo mayoritariamente no pobre. No obstante, se
aprecia que en el caso de los hombres el ingreso per cápita del hogar es significativamente mayor,
pues representa un 23% más que el de las microempresarias. Una diferencia importante es que el
85% de los microempresarios hombre es jefe de hogar, mientras que sólo el 34% de las mujeres lo
es.
Al analizar los factores del negocio se encuentran algunos antecedentes que indican que las
microempresas lideradas por hombres están más establecidas. Se puede plantear la hipótesis
anterior a pesar que se observan niveles similares de formalidad, de número de trabajadores y de
apoyos recibidos. La diferencia radica principalmente en aspectos como la antigüedad de la
microempresa (10 años promedio en el caso de los hombres y sólo 6 en el caso de las mujeres), y
la calidad y el valor de los activos, los cuales en el caso de los hombres son considerados de
buena calidad y de un valor promedio de $1.241.000, y en el caso de las mujeres sólo de mediana
calidad y de un valor promedio de $607.000. También se verifica que en promedio existe un mayor
uso de horas de trabajo en las microempresas lideradas por hombres (259 versus 230 horas al
mes, lo que representa casi un 13% de diferencia), y en el rubro de actividad, principalmente
comercio en el caso de los hombres, y servicios en conjunto con comercio en el caso de las
mujeres.
MICROEMPRESARIOS MICROEMPRESARIOS
HOMBRES MUJERES
1. Factores Personales
Edad Promedio 46 46
Escolaridad Promedio 9,6 9,2
Experiencia Laboral, 29 20
Experiencia en el Oficio 14 8
y Aprendizaje del Oficio Autodidacta Autodidacta
92,0% Baja/Media Baja
Personalidad Microempresarial 94,5% Baja/Media Baja
Para ser independiente
y Motivaciones para ser Microempresario Para ser independiente
No tenía otra alternativa
Expectativas Futuras Positivas Positivas
2. Factores del Microempresario y su Hogar
Tipo de Hogar Nuclear Completo Nuclear Completo
y Posición del Microempresario en él 85% jefe de hogar 34% jefe de hogar
Tamaño promedio del Hogar 4,2 4,3
Ingreso per cápita del Hogar $116.000 $94.000
y Condición Socioeconómica 89,8% No Pobre 87,2% No Pobre
3. Factores del Negocio
Rubro de Actividad Comercio Servicios, Comercio
Número de Trabajadores Promedio 1,4 1,3
Horas/Hombre Trabajadas al Mes 259 230
Valor de los Bienes de Capital $1.241.000 $607.000
Calidad de los Activos y del Lugar de Trabajo Buena Mediana
Antigüedad Promedio de la Microempresa 10 6
Apoyos Externos Recibidos 78% sin apoyo 75% sin apoyo
Formalidad de la Microempresa 43,5% Informal 41,1% Informal
4. Capacidad de Gestión
Actividades de Información y Promoción Pasivo Pasivo
Actividades de Planificación Poco Planificador Poco Planificador
Actividades de Asociación e Innovación 46% No innovador 64% No innovador
Desarrollo de Estrategia Competitiva Sin estrategia definida Sin estrategia definida
Relación con los Clientes Formal Informal
Relación con Proveedores Pocos aspectos formales Pocos aspectos formales
5. Resultados Financieros
Promedio Ingresos Brutos Mensuales $380.000 $237.000
Promedio Utilidad Mensual $153.000 $71.000
Promedio Rentabilidad Mensual de los Activos 74% 39%
Promedio Rentabilidad Hora/Hombre de Trabajo $877 $377
Las restantes variables de los factores personales se presentan similares para los tres rubros
de actividad: muy baja presencia de características de personalidad empresarial, expectativas
positivas respecto al futuro del negocio, y la búsqueda de independencia como motivación para ser
microempresario.
Respecto a los factores del hogar del microempresario no se observan diferencias significativas,
pues mayoritariamente son nucleares completo y no pobres, aunque en el caso de los
microempresarios del rubro manufacturas existe un porcentaje mayor de hogares pobres.
Al analizar los factores del negocio se encuentran importantes diferencias. Es así como se
observan distintos niveles de informalidad: mientras el 65% de las microempresas del rubro
manufacturas son informales, las del rubro servicios/construcción lo son en un 56% y las del rubro
comercio en sólo un 28%. También llama la atención que justamente estas últimas empresas, las
que están relativamente más formalizadas, son las que han recibido menos apoyos (sólo un 15%
de ellas ha recibido apoyos, mientras que en los otros rubros lo ha hecho más del 30%). Otro
aspecto diferenciado es el valor de los activos, donde sea aprecia que el sector manufacturas
cuenta con los bienes de capital de mayor valor, y el sector comercio con los de menor. En
contraste, este último sector es el que cuenta con más horas de trabajo al mes (261 versus 244 y
222 de los rubros manufacturas y servicios/construcción respectivamente), lo que lo convierte en el
más intensivo en mano de obra, a pesar que no existen mayores diferencias en cuanto al tamaño
de las microempresas según rubro.
SERVICIOS/
COMERCIO MANUFACTURAS
CONSTRUCCIÓN
1. Factores Personales
Sexo 43% Hombre 77% Hombre 51% Hombre
Edad Promedio 48 46 42
Escolaridad Promedio 8,7 10,2 10,4
Experiencia Laboral, 24 27 22
Experiencia en el Oficio 9 15 11
y Aprendizaje del Oficio Autodidacta Formalmente Informalmente
Personalidad Microempresarial
92,9% Baja/Media Baja 92,4% Baja/Media Baja 97,2% Baja/Media Baja
y Motivaciones para ser
Para ser independiente Para ser independiente Para ser independiente
Microempresario
Expectativas Futuras Positivas Positivas Positivas
2. Factores del Microempresario y su
Hogar
Tipo de Hogar
Nuclear Completo Nuclear Completo Nuclear Completo
y Posición del Microempresario
76% jefe de hogar 55% jefe de hogar 76% jefe de hogar
en él
Tamaño promedio del hogar 4,3 4,1 4,4
Ingreso per cápita del Hogar $102.000 $113.000 $105.000
y Condición Socioeconómica 89,7% No Pobre 89,6% No Pobre 83,1% No Pobre
3. Factores del Negocio
Número de Trabajadores Promedio 1,4 1,3 1,5
Horas/Hombre Trabajadas al Mes 261 222 244
Valor de los Bienes de Capital $822.000 $994.000 $1.348.000
Calidad de los Activos y del Lugar
Mediana Buena Mediana
de Trabajo
Antigüedad Promedio de la
7,8 9,0 7,5
Microempresa
Apoyos Externos Recibidos 85% sin apoyo 65% sin apoyo 68% sin apoyo
Formalidad de la Microempresa 28,0% Informal 55,9% Informal 64,8% Informal
4. Capacidad de Gestión
Actividades de Información y
Pasivo Pasivo Mediano
Promoción
Actividades de Planificación Poco Planificador No Planificador Poco Planificador
Actividades de Asociación e
62% No innovador 47% No innovador 42% No innovador
Innovación
Desarrollo de Estrategia Sin estrategia definida
Sin estrategia definida Sin estrategia definida
Competitiva (38% diferenciador)
Relación con Clientes Informal Formal Formal
Pocos aspectos Pocos aspectos
Relación con Proveedores Pocos aspectos formales
formales formales
5. Resultados Financieros
Promedio Ingresos Brutos
$331.000 $255.000 $385.000
Mensuales
Promedio Utilidad Mensual $109.000 $128.000 $114.000
Promedio Rentabilidad Mensual de
52% 67% 59%
los Activos
Promedio Rentabilidad
$453 $985 $689
Hora/Hombre de Trabajo
En cuanto a los factores personales, no se verifican mayores diferencias significativas entre las
microempresas uni y multipersonales, salvo que en éstas últimas existe un porcentaje más alto de
microempresarios hombres (62% versus 52%), y presentan un nivel en extremo bajo de
características empresariales. Las restantes variables, como edad promedio, nivel de escolaridad,
experiencia laboral, aprendizaje del oficio, expectativas sobre el futuro del negocio y motivación
para ser microempresario, presentan comportamientos muy similares en ambos tipos de empresas.
Respecto a los factores del hogar del microempresario, para ambos tipos de microempresas
predomina el hogar nuclear completo mayoritariamente no pobre, y el microempresario como jefe
de hogar. No obstante, se aprecia un porcentaje de pobreza levemente mayor en el caso de los
microempresarios de firmas unipersonales, así como también un menor ingreso per cápita de sus
hogares ($102.000 versus $116.000).
Al analizar los factores del negocio, por definición existen diferencias en el tamaño de las
empresas y en la cantidad de horas trabajadas. Es así como las microempresas multipersonales
tienen en promedio 2,3 trabajadores y 400 horas de trabajo al mes, versus las 183 horas de trabajo
mensuales de las empresas unipersonales. Además de lo anterior existen importantes diferencias
respecto a la calidad de los activos y su valor, pues mientras los activos de las empresas
unipersonales son calificados como de mediana calidad y de un valor promedio de $723.000, los
de las empresas multipersonales son calificados de buena calidad y con un valor promedio de más
del doble de dicha cifra. También en este ámbito se verifican diferencias en los niveles de
informalidad, ya que mientras más de la mitad de las microempresas unipersonales son informales,
sólo poco más de un quinto de las multipersonales también lo son.
Finalmente, respecto a los resultados financieros se produce una diferencia interesante. Por un
lado, las empresas multipersonales obtienen en promedio más del doble de ingresos brutos en
comparación a las unipersonales ($500.000 versus $240.000 al mes), pero por otro lado esta
diferencia se revierte al analizar la utilidad, ya que en este caso son las empresas unipersonales
las que aventajan a las multipersonales en un 13% en promedio. Esta mayor utilidad, unido al
menor valor de los activos y las menores horas mensuales de trabajo de las empresas
unipersonales, hace que las rentabilidades de estas últimas superen ampliamente a las de las
microempresas multipersonales. Es así como las empresas formadas por sólo una persona tienen
una rentabilidad promedio mensual de los activos igual a 63% versus 46% de las empresas
multipersonales, y una rentabilidad por hora trabajada igual a $803, es decir un 183% más que la
rentabilidad que se obtienen en las microempresas de más de una persona.
En consecuencia puede afirmarse que las microempresas de más trabajadores, que son
además las que tienen bienes de capital de mayor valor, tienden a obtener mayores ingresos. No
UNIPERSONAL MULTIPERSONAL
1. Factores Personales
Sexo 52% Hombre 62% Hombre
Edad Promedio 47 46
Escolaridad Promedio 9,4 9,6
Experiencia Laboral, 25 25
Experiencia en el Oficio 11 11
y Aprendizaje del Oficio Autodidacta Autodidacta
Personalidad Microempresarial 91,5% Baja/Media Baja 97,8% Baja/Media Baja
y Motivaciones para ser Microempresario Para ser independiente Para ser independiente
Expectativas Futuras Positivas Positivas
2. Factores del Microempresario y su Hogar
Tipo de Hogar Nuclear Completo Nuclear Completo
y Posición del Microempresario en él 62% jefe de hogar 63% jefe de hogar
Tamaño promedio del Hogar 4,2 4,4
Ingreso per cápita del Hogar $102.000 $116.000
y Condición Socioeconómica 86,4% No Pobre 94,1% No Pobre
3. Factores del Negocio
Número de Trabajadores Promedio 1 2,3
Rubro de Actividad Comercio Comercio
Horas/Hombre Trabajadas al Mes 183 400
Valor de los Bienes de Capital $723.000 $1.518.000
Calidad de los Activos y del Lugar de Trabajo Mediana Buena
Antigüedad Promedio de la Microempresa 8,0 8,4
Apoyos Externos Recibidos 79% sin apoyo 71% sin apoyo
Formalidad de la Microempresa 50,8% Informal 22,2% Informal
4. Capacidad de Gestión
Actividades de Información y Promoción Pasivo Pasivo
Actividades de Planificación Poco Planificador Poco Planificador
Actividades de Asociación e Innovación 56% No innovador 50% No innovador
Desarrollo de Estrategia Competitiva Sin estrategia definida Sin estrategia definida
Relación con Clientes Informal Informal
Relación con Proveedores Pocos aspectos formales Pocos aspectos formales
5. Resultados Financieros
Promedio Ingresos Brutos Mensuales $240.000 $500.000
Promedio Utilidad Mensual $120.000 $106.000
Promedio Rentabilidad Mensual de los Activos 63% 46%
Promedio Rentabilidad Hora/Hombre de Trabajo $803 $284
En cuanto a los factores personales, en primer lugar se destaca que las microempresas de
mayores ventas son lideradas preferentemente por hombres, situación ya resaltada al analizar las
microempresas según Sexo del microempresario. Es así como entre las microempresas de
ingresos menores a $100.000 mensuales, el 61% es liderada por mujeres, mientras que de las
microempresas de ventas mensuales mayores a $300.000, el 70% es liderada por hombres. Otra
característica que aparentemente se relacionaría positivamente con un mayor nivel de ventas es el
nivel de escolaridad, ya que para las microempresas de ventas menores a $100.000, el promedio
de escolaridad de los respectivos microempresarios es de 8,4 años (más de un año menor al
promedio nacional), mientras que para las microempresas de ventas superiores a $300.000, el
promedio de escolaridad asciende a 10,7 (un año menor al promedio nacional). Finalmente, se
Respecto a los factores del hogar del microempresario, y en directa relación al nivel de ingresos
de las microempresas y su importancia en el ingreso total de los hogares, se observa que para las
microempresas de ventas mensuales mayores a $300.000 prácticamente no existen hogares
calificados como pobres (menos del 1%), mientras que para las microempresas de ventas menores
a $100.000 el porcentaje de hogares pobres llega a casi el 14%. Se destaca también que en el
caso de las microempresas de mayores ventas, existe un porcentaje significativamente mayor de
microempresarios jefes de hogar.
Al analizar los factores del negocio se encuentran importantes diferencias. Es así como las
microempresas de menores ventas tienden a ser unipersonales y utilizar menores horas de trabajo
al mes (168 en promedio), mientras que las de mayores ventas están compuestas por un promedio
de 1,6 personas y utilizan 310 horas de trabajo al mes. Situación similar ocurre con los activos,
donde las microempresas de mayores ventas presentan activos de mejor calidad y de mucho
mayor valor. Lo anterior implica que las firmas de mayores ventas cuentan tanto con más
horas/hombre de trabajo, como con más bienes de capital. Estas microempresas concentran
también gran parte de los apoyos externos, pues un 70% de las microempresas de ventas
mensuales mayores a $300.000 ha recibido al menos un apoyo, mientras que en el caso de las
microempresas de ventas menores a $100.000 lo ha hecho menos del 20%. Finalmente, en el
ámbito de los factores del negocio también se destaca que cerca del 83% de las empresas de
mayores ventas se encuentran debidamente formalizadas, mientras que sólo el 21% de las
empresas de menores ventas se encuentra en dicha condición.
Lo anterior puede relacionarse también con los factores del hogar del microempresario.
Concretamente se observa que para el caso de las microempresas más nuevas existe una mayor
incidencia de la pobreza (20% versus porcentajes menores al 12% en los otros casos), unido a un
mayor tamaño promedio del hogar (4,7), lo que podría incidir en la búsqueda de alternativas
transitorias de trabajo en la microempresa, aunque ello no se apoye en una vocación
emprendedora en particular.
Al analizar los factores del negocio, más allá de la obvia diferencia de antigüedad (las empresas
nuevas tienen en promedio sólo medio año de existencia), se encuentran otras diferencias
importantes. Concretamente, se verifica que las empresas nuevas han recibido menos apoyos
externos y son mayoritariamente informales, no obstante llama la atención que a pesar de su corta
existencia un 40% de ellas se ha formalizado. También tienen activos de menor valor (menos de la
mitad del valor de los bienes de capital de las empresas de mayor antigüedad), aunque no de
menor calidad.
Al analizar los factores del negocio, en primer lugar destaca que la calidad y el valor de los
bienes de capital aumentan a medida que aumenta la escolaridad del microempresario, teniendo
las microempresas del grupo de escolaridad más baja activos de mala calidad y de un valor
promedio de $547.000, mientras que los del grupo de mayor escolaridad tienen activos de buena
calidad y de un valor promedio igual a $1.276.000. Otra diferencia importante la constituye el nivel
de formalidad. Así, mientras más del 70% de las microempresas del grupo de alta escolaridad son
formales, menos del 50% de las microempresas del grupo de baja escolaridad también lo son.
Finalmente, en el ámbito de los resultados financieros se verifica que las firmas obtienen
mejores resultados a medida que se consideran categorías de microempresas lideradas por
microempresarios de mayor nivel de escolaridad. Es así como los microempresarios de mayor
escolaridad obtienen promedio mayores ingresos brutos, mayor utilidad, y mayor rentabilidad de las
horas totales trabajadas, pero no así en la rentabilidad de los activos, lo que como en casos
anteriores, pueden estar influido por el menor valor de los activos de los microempresarios con
menor escolaridad. En consecuencia, se puede afirmar que el nivel de escolaridad del
microempresario influye en los resultados financieros de la microempresa, lo cual puede asociarse
además a que los microempresarios con más años de estudio cuentan con bienes de capital de
mayor valor y de mejor calidad, han recibido relativamente más apoyo externos, y cuentan con
mayores grados de formalización.
>4 años
<4 años >12 años
<12 años
Para lo anterior se realizan dos ejercicios estadísticos paralelos: un análisis discriminante y una
regresión econométrica de corte transversal, cuya metodología y resultados se detallan más
adelante.
De todas maneras, antes de analizar los resultados de los ejercicios realizados, cabe recordar
qué se entiende en esta investigación por desempeño económico. Como se especificó en el
capítulo 2, en principio se consideran dos definiciones de desempeño económico basadas en la
Utilidad neta mensual:12
1. Rentabilidad mensual por hora de trabajo, definida como la Utilidad neta mensual dividida por el
total de horas de trabajo mensual en la microempresa, considerando al microempresario y a la
totalidad de los empleados, remunerados y no remunerados. Este indicador se expresa en
pesos por hora.
2. Rentabilidad mensual de los activos, definida como la Utilidad neta mensual dividida por el valor
total de los activos de la microempresa. Este indicador se expresa en porcentaje.
Es así como en base a los resultados de los ejercicios empíricos se puede concluir que la
variable Rentabilidad mensual de los activos no resulta ser una buena aproximación a la definición
del desempeño económico de las microempresas, a pesar de ser una variable ampliamente
utilizada para medir el desempeño económico de las empresas en general (usualmente en su
expresión anual). Esta situación podría deberse al extremadamente bajo nivel de activos que
presenta un porcentaje importante de las microempresas de la muestra,13 lo que tiende a sesgar la
variable Rentabilidad mensual de los activos hacia valores inusualmente altos, pues una utilidad
pequeña de todas maneras genera una rentabilidad muy alta, dado un nivel de activos cercano a
cero. Sin embargo, en estos casos de utilidad pequeña y rentabilidad de los activos alta no parece
12
Se recuerda que la Utilidad neta mensual se define como los ingresos brutos mensuales de la microempresa menos
los gastos totales mensuales, considerando todos los ingresos y gastos relevantes, y poniendo especial cuidado de
considerar en los gastos el costo de la mano de obra, sea o no sea remunerada.
13
Si bien el valor promedio de los activos de las microempresas es de $955.000, el valor de los activos del cuartil 4 es
casi 130 veces mayor que los del cuartil 1, que alcanzan a un valor promedio de sólo $22.000.
La conclusión anterior se complementa con el hecho que la mayoría de las microempresas son
intensivas en mano de obra y no en capital (rasgo común en las empresas de servicios y comercio,
que como ya se vio, representan en conjunto el 85% de la muestra). Este hecho, unido a los
resultados de los ejercicios empíricos, refuerzan la idea sobre que la definición de desempeño
económico más pertinente para las microempresas es Rentabilidad mensual por hora de trabajo, la
que además resulta de particular utilidad práctica al ser fácilmente comparable con parámetros
externos como el salario mínimo por hora (aproximadamente $520).
a. Metodología
Para representar el peso de las variables dentro de cada modelo, se incluirán los coeficientes
estandarizados de la función discriminante canónica14 junto al peso relativo de cada uno de ellos en
la función15.
14
Corresponde a la función de clasificación que entrega el análisis (sus coeficientes son proporcionales a la función
lineal discriminante de Fisher)
15
El peso se calcula dividiendo el coeficiente por la suma de todos los coeficientes en valor absoluto
Al comparar el grupo que representa al tercio de microempresas con una mayor rentabilidad
mensual por hora trabajada (Grupo 3), con el grupo que representa al tercio con la menor
rentabilidad (Grupo 1), se observan siete variables explicativas de las diferencias en la variable
dependiente, significativas al 5%. Estas variables y su respectivo coeficiente se presentan en el
Cuadro 3.4, desarrollándose a continuación una interpretación de los resultados obtenidos para
cada una de ellas.
Cuadro 3.4
Coeficientes Función Discriminante Canónica Estandarizada
Agrupación Definida por Variable: Rentabilidad Mensual por Hora de Trabajo
Variable Coeficiente
Sexo (Hombre v/s Mujer) 0,650
Ingreso Brutos Totales 0,433
Formalidad (Formal v/s Informal) 0,410
Aprendizaje del Oficio (Autodidacta v/s Otro) -0,378
Tamaño Microempresa -0,502
Rubro (Comercio v/s Otro) -0,312
Motivación para Ser Microempresario (No tenía alternativa v/s Otro) -0,230
▪ Sexo: Los microempresarios hombres obtienen una mayor rentabilidad mensual por hora de trabajo en
comparación a las microempresarias. Este resultado es particularmente interesante, pues da sustento
a la hipótesis sobre que las microempresarias tendrían una situación más precaria, la que no se
explicaría por otras variables como años de escolaridad, aprendizaje formal/informal del oficio, ni
personalidad microempresarial, pues como se vio en la Sección 3.3, éstas se comportan de manera
similar tanto para hombres como para mujeres microempresarias.
▪ Ingreso Brutos Totales: Las microempresas que generan mayores ingresos brutos obtienen una mayor
rentabilidad por hora trabajada. Este resultado es esperable por la propia definición de la variable
rentabilidad, que se afecta positivamente por la utilidad, la que a su vez depende positivamente de los
ingresos brutos. Por ello este resultado no amerita mayor análisis.
▪ Formalidad (Formal v/s Informal): Las microempresas que se han establecido de manera más formal
ante el SII y ante el Municipio, tienden a presentar una mayor rentabilidad de la mano de obra.
Respecto a este resultado es importante notar que la metodología utilizada no permite determinar
causalidad, sino sólo asociación, por ello no puede descartarse que exista una doble causalidad, en el
sentido que las microempresas de mejor desempeño económico decidan formalizarse una vez
alcanzado cierto nivel de desarrollo, al mismo tiempo que el hecho de formalizarse les permite hacer
crecer su negocio.
▪ Aprendizaje del Oficio (Autodidacta v/s Otro): Los microempresarios que han aprendido su oficio de
manera autodidacta tienden a obtener una menor rentabilidad por hora trabajada que aquellos que lo
han aprendido de manera más formal, ya sea mediante estudios o mediante una relación de aprendiz-
▪ Rubro (Comercio v/s Otro): Las microempresas dedicadas al rubro comercio obtienen un peor
desempeño económico medido en rentabilidad por hora trabajada, en comparación a las de los rubros
servicios y manufacturas. Varias hipótesis pueden surgir a partir de esta observación. Por ejemplo,
podría pensarse que el sector de las microempresas dedicadas al comercio pueda ser más
competitivo, por el alto porcentaje de microempresas en ese rubro (54%). También podría ser una
explicación, posiblemente ligada a la anterior, el hecho que en el sector comercio las microempresas
cuenten con una mayor cantidad de horas de trabajo por tener un horario más intensivo, pues
típicamente desempeñan la venta en el propio hogar de manera ininterrumpida (261 horas/hombre al
mes v/s 244 del sector manufacturas y 222 del sector servicios). Finalmente, tampoco se puede
descartar que alguna contingencia en particular haya afectado al sector comercio en la fecha en que
se aplicó la encuesta.
▪ Motivación para Ser Microempresario (No tenía alternativa v/s Otro): Los microempresarios que
asumen la actividad ante la imposibilidad de encontrar otro trabajo, tienden a tener una peor
rentabilidad por hora trabajada que los microempresarios que optan por serlo por razones más
vocacionales. Esto resulta altamente razonable, puesto que típicamente se caracteriza a un grupo de
microempresas como de subsistencia, es decir, que existen para generar un ingreso básico a la familia
mientras no se presente una alternativa de trabajo más conveniente. Por ello, es esperable que este
tipo de microempresas no se desarrolle más allá, al no existir detrás de ella una verdadera vocación
por la actividad empresarial y la independencia laboral. Distinto es el caso de los microempresarios por
opción, quienes al valorar más su propia actividad, probablemente la hagan más rentable por el propio
compromiso que involucran en ella.
Finalmente, respecto al análisis discriminante, cabe señalar que la validez de los resultados
presentados en el Cuadro 3.4 depende de lo acertada que sea la predicción del modelo basado en
las siete variables significativas. Esta predicción se refiere al porcentaje de casos clasificados
correctamente, comparando el modelo con la clasificación original de cada caso en los Grupos 1 y
3 definidos con anterioridad. Esta comparación se presenta en el Cuadro 3.5 a continuación, e
implica que el 74,8% de los casos es bien clasificado, lo que se considera aceptable para validar
los resultados del modelo.
Cuadro 3.5
a. Metodología
Si bien, la naturaleza de este análisis es predictivo, también es utilizado para establecer cuales
de las variables independientes, tienen alguna influencia sobre la dependiente, de manera
simultanea. Esto puede ser medido a través de los coeficientes de dicha función (estandarizados),
ya que indican el peso o la influencia de cada una de las variables independientes.
b. Resultados
Por otra parte, hay dos variables que resultan significativas mediante el análisis discriminante
pero no mediante el análisis regresional. Estas variables son Rubro (Comercio v/s Otro) y
Motivación para Ser Microempresario (No tenía alternativa v/s Otro). Como contrapartida, aparecen
tres nuevas variables significativas en comparación al análisis discriminante:
▪ Relación con Clientes (Formal v/s Informal): Los microempresarios que establecen relaciones
preferentemente formales con sus clientes (mediante contratos y venta a mayoristas) obtienen una
mayor rentabilidad mensual por hora de trabajo. Esto podría interpretarse como que aquellas
microempresas que logran relaciones estables con determinados clientes consecuentemente alcanzan
un mejor desempeño económico, ya sea porque se obligan a cumplirle a sus clientes, porque forman
parte de una cadena productiva, o porque tienen un piso mínimo de ingresos para poder funcionar.
▪ Ingreso per cápita del Hogar: Los microempresarios pertenecientes a hogares con un mayor ingreso
per cápita presentan un mejor desempeño económico. Esta relación debe analizarse con precaución,
pues en el ingreso per cápita del hogar se incluyen los ingresos netos generados por la microempresa,
y por lo tanto la relación probablemente también tenga un componente inverso, es decir, que un mejor
desempeño económico de la microempresa genere un mayor ingreso per cápita del hogar. De todas
formas, podría argumentarse que el mayor ingreso del hogar dado por las fuentes distintas a la
microempresa esté asociado a un mayor nivel educacional de los familiares, y por lo tanto éstos
puedan prestar un mejor apoyo al Microempresario.
16
De todas maneras debe tenerse presente que los modelos de corte transversal usualmente explican en menores
porcentajes que los modelos de series de tiempo.
R – cuadrado 24,9%
R – cuadrado ajustado 23,4%
Sin embargo, debe advertirse que no se puede ser concluyente respecto a las variables que
resultaron no significativas, ya que de todas maneras en el modelo hay un componente no
explicado de la Rentabilidad Mensual por Hora de Trabajo cercano al 75%. Por lo tanto, puede ser
que algunas de las variables mencionadas hayan sido mal especificadas y mal captadas mediante
el cuestionario aplicado a los microempresarios. Este puede ser por ejemplo el caso de la variable
Personalidad Microempresarial, para la cual se utilizó un índice basado en quince preguntas que
intentaban captar el nivel de desarrollo de determinadas características en los microempresarios, lo
cual ciertamente es complejo y probablemente requeriría de un análisis individual más profundo de
cada microempresario para ser determinado con certeza. Algo similar puede ocurrir con la variable
Escolaridad del Microempresario, la que si bien captura con facilidad la cantidad de años de
estudio, no es capaz de capturar las competencias laborales adquiridas mediante el estudio, ni
menos su nivel de actualización.
Algo distinto puede ser el caso de las variables Valor de los Bienes de Capital y Apoyos
Externos Recibidos por la Microempresa. En el primer caso, si bien se puede argumentar errores
en la valoración que los propios microempresarios hicieron de sus activos, una explicación
consistente con los resultados puede ser que un porcentaje importante de las microempresas es
intensiva en mano de obra y no en capital (rasgo común en las empresas de servicios y comercio
que representan en conjunto el 85% de la muestra), por lo que un mayor nivel de activos no
afectaría mayormente su desempeño económico. Respecto al segundo caso, la encuesta capturó
claramente la cantidad de apoyos externos recibidos por las microempresas (créditos, donaciones,
capacitaciones y asesorías), aunque no capturó la calidad de los mismos. De todas maneras,
resulta preocupante que esta variable no haya resultado significativa, pues sería una señal de la
5. CONCLUSIONES
Las conclusiones del capítulo siguen la secuencia del Modelo Explicativo del Desempeño de la
microempresas descrito en el capítulo anterior, el cual considera los aspectos personales del
Microempresario, las características de negocio y el entorno.
a.1 La mayoría de los microempresas son dirigidas por hombres mayores de 40 años, pero la
participación femenina es más que proporcional que su participación en la fuerza de trabajo.
▪ Existe un mayor porcentaje de microempresarios hombres (55% v/s 45% de mujeres), sin embargo, la
participación relativa de mujeres es mayor a su participación relativa en la fuerza de trabajo (33%).
▪ La edad promedio de los microempresarios es de 47 años, concentrándose más del 70% de ellos
sobre los 40 años.
▪ La experiencia laboral promedio de los microempresarios es de 25 años.
a.3 Se pueden diferenciar claramente dos tipos de microempresarios: los con vocación
empresarial, y los ocasionales a la espera de encontrar otro trabajo.
b.1 Los microempresarios típicamente son jefes de hogar de hogares nucleares completos, no
pobres.
c.1 La gran mayoría de las microempresas son en realidad unidades unipersonales, incluso sin
mano de obra familiar no remunerada.
▪ El 71% de las microempresas son unipersonales (el tamaño medio es de sólo 1,4 personas), y
cuentan con un promedio de 247 horas/hombre de trabajo al mes.
c.2 La cobertura de los distintos tipos de apoyo externo a las microempresas abarca sólo a una de
cada cuatro.
▪ Sólo un 24% de las microempresas ha recibido algún apoyo externo para su negocio (entendiéndose
como apoyo externo: crédito, donación, capacitación, asesoría). Dentro de los apoyos recibidos se
destaca el crédito (37%) y la capacitación técnica (34%).
▪ Las microempresas tienen en promedio bienes de capital por un valor de $955.000. Sin embargo se
aprecian casos muy heterogéneos, ya que un cuarto de ellas tiene activos de un valor promedio de
sólo $22.237, mientras que otro cuarto tiene activos valorados en promedio en $2.831.762.
▪ En promedio las microempresas tienen 8,2 años de antigüedad. De todas maneras un porcentaje
significativo (23%) corresponde a microempresas que operan desde hace menos de un año.
▪ Un 45% de las microempresas ha realizado todos los trámites para su formalización tanto ante el
Servicio de Impuestos Internos como ante el Municipio. Pero al mismo tiempo, un 42% de ellas no ha
realizado ningún trámite al respecto.
d. Capacidad de Gestión
e. Resultados Financieros
e.1 Las microempresas generan en promedio una rentabilidad por Hora/Hombre trabajada mayor
que el valor de una Hora/Hombre de trabajo acorde al salario mínimo.
▪ Las microempresas tienen una rentabilidad promedio por Hora/Hombre trabajada igual a $651, lo que
es mayor que el valor de una Hora/Hombre de trabajo acorde al salario mínimo (aproximadamente
$520).
e.2 Todos los distintos indicadores de resultados financieros llevan a concluir que existe una gran
heterogeneidad en cuanto al desempeño económico de las microempresas, desde negocios que
generan pérdidas hasta otros que potencialmente podrían crecer a pequeñas y medianas
empresas.
▪ Las microempresas obtienen un promedio de $316.000 de ingresos brutos al mes, sin descontar los
gastos de producción o venta asociados. Sin embargo, la distribución de estos ingresos no es pareja.
Es así como tres cuartos de las microempresas tienen ingresos menores al promedio, e incluso un
cuarto de ellas tienen ingresos mensuales promedio de sólo $25.250. En contraste, el cuartil de
mayores ingresos tiene un promedio de ingresos mensuales igual a $792.099.
▪ Las microempresas obtienen un promedio de $116.000 de utilidad mensual. En este caso la
distribución tampoco es pareja. Por un lado, tres cuartos de las microempresas tiene una utilidad
menor al promedio, e incluso un cuarto de ellas en promedio tiene pérdidas mensuales iguales a
$92.896. En contraste, un cuarto de las microempresas tiene una utilidad promedio mensual superior a
$398.000.
▪ La rentabilidad promedio mensual de los activos es de 95%. Tres cuartos de las microempresas tienen
una rentabilidad menor al promedio, de las cuales un cuartil tiene en promedio una rentabilidad
negativa de 13%. Por otro lado, un cuartil tiene una rentabilidad promedio de 346%.
▪ Las microempresas tienen una rentabilidad promedio por Hora/Hombre trabajada igual a $651, pero
mientras existe un cuartil que en promedio pierde $296 por hora de trabajo, existe otro cuartil que
genera en promedio $2.110 por hora trabajada.
Capítulo 4
Para este análisis se ha considerado pertinente utilizar los registros sobre empresas del S.I.I.
ya que esta base de datos permite hacer un seguimiento de cada una de las empresas a través de
los años, identificando la región (e incluso comuna) en que tributa, la rama de actividad económica
y el tramo de ventas en el cual se ubica en un año determinado.
Todos estos antecedentes permiten dar luz a la búsqueda de variables que ayuden a explicar
las diferencias en cuanto a la viabilidad de las microempresas desde un punto de vista económico,
tales como años de vida, tasa de natalidad neta, sector económico, tasa de crecimiento en las
ventas, ubicación geográfica, entre otras.
1. ASPECTOS METODOLÓGICOS
La base de datos del S.I.I que fue utilizada contiene el total de empresas que tributaron
Impuesto al Valor Agregado (IVA) durante los años 1990, 1992,1994, 1995,1996 y 199717. Además
permite diferenciar las empresas según su Rol Único Tributario (RUT), Tramo de Ventas, Código
de Clasificación Internacional Industrial Uniforme (CIIU) y Comuna en que tributan.
Los Tramos de Ventas que permiten clasificar a las empresas según su tamaño son los
siguientes:
17
Lamentablemente no fue posible acceder a la informarán correspondiente a los aros 1991 y 1993, ya que en ambos
casos existen problemas con algunos campos de dicha base.
De este modo, se ha considerado como microempresas a todas las empresas ubicadas en los
tramos de ventas 1, 2 y 3 es decir, a todas las empresas que vendieron menos de 2.400 U.F.
anuales (o 200 U.F. mensuales)18.
Cuadro 4.2
N° de empresas según tamaño: total país 1994-1997
En número
1990 1992 1994 1995 1996 1997
Microempresa 364,110 387,016 404,599 408.371 423,319 432,431
Pequeña Empresa 52,47 65.611 71,984 75.570 77,798 78,805
Mediana Empresa 7,043 8.951 9.649 10.260 10.721 10,870
18
Hay que destacar que e FOSIS - MIDEPLAN utiliza el mismo limite de ventas (200 U.F. mensuales) para clasificar a
las microempresas como tales para sus programas. Además utiliza como criterios 500 U.F. de capital y 9 empleados como
máximo requisitos que no son posibles de utilizar en la base del SII ya que no se dispone de dicha información.
19
Como ya se mencionó lamentablemente no se dispone de la información de los años 1991 y 1993
En porcentaje
Al analizar la participación en las ventas totales de los distintos tamaños de empresas (Cuadro
4. 3) se puede apreciar que las microempresas sólo representan el 4% del total de ventas aun
cuando en términos de número equivalen al 82% del total de empresas. A su vez, el tramo menos
numeroso, el de las grandes empresas, es el que tiene mayor participación en el mercado de
bienes y servidos, ya que sus ventas representan el 72% del total (siendo que en número
representan sólo el 1% del total de empresas).
Cuadro 4.3
Ventas en U.F. anuales según tamaño: total país 1994-1997*
En Porcentaje
Microempresa 4,9% 4,6% 4,5% 4,4%
Pequeña Emp. 13,8% 13,2% 13,0% 12,5%
Mediana Emp. 12,2% 11,7% 11,6% 11,3%
Gran Emp. 69,2% 70,4% 70,9% 71,9%
TOTAL 100% 100% 100% 100%
*Solo se dispone de datos sobre ventas desde 1994 en adelante.
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Cuadro 4.4
N0 de microempresas según tramo de ventas anuales total país 1994-1997
En porcentaje
01(0-600 UF) 73,8% 72,7% 72,7% 72,9%
02: (601-1800 UF) 21,9% 22,8% 22,8% 22,6%
03: (1801-2400 UF) 4,3% 4,5% 4,5% 4,5%
Total
100% 100% 100% 100%
Microempresas
Fuente: Elaboración propia a parir de la base de empresas del S.I.I.
Se destaca que la gran mayoría de las microempresas corresponden a las del tramo 1, es decir,
empresas que no superan las 600 U.F. anuales (o 50 U.F mensuales) de ventas. Esto implica que
cuando nos referimos a las microempresas, en su gran mayoría estamos hablando de negocios de
volúmenes de ventas bastante reducidos.
Cuadro 4.5
N0 de Microempresas según rama económica: total país 1990-1997
En porcentaje
1 Agricultura, Caza y Pesca 15% 15% 14% l4%
3 Industrias Manufactureras 6% 6% 6% 6%
5 Construcción 3% 3% 3% 4%
6 Comercio 46% 47% 47% 47%
7 Transporte y Comunicaciones 7% 7% 8% 8%
a Finanzas, Seg. Inmuebles, Otros 6% 6% 6% 7%
9 Ss . Estatales, Soc.de Personas 9% 9% 9% 10%
0,2.4 Otras * 7% 7% 7% 6%
TOTAL MICROEMPRESAS 100% 100% 100% 100%
Otras incluye a Actividades no especificadas, Minas, petróleo y canteras , Electricidad, gas y agua, Sin clasificación.
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
En el Cuadro 4.6 se presenta la misma subdivisión anterior pero para el caso de las ventas.
En porcentaje
1 Agricultura, Caza y pesca 15% 14% 14% 13%
3 Industrias Manufactureras 8% 8% 7% 7%
5 Construcción 4% 4% 4% 5%
6 Comercio 45% 45% 45% 45%
7 Transporte y Comunicaciones 10% 10% 10% 10%
8 Finanzas, Seg Inmuebles, Otros 7% 7% 8% 8%
9 Ss. Estatales, soc de Personas 8% 8% 8% 9%
0,2,4 Otras * 4% 4% 4% 4%
TOTAL MICROEMPRESAS 100% 100% 100% 100%
Otras incluye a Actividades no especificadas, Minas petróleo y canteras, Electricidad gas y agua, Sin clasificación
Fuerte: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Al comparar la distribución del número de microempresas con el de las ventas, se aprecia que
son muy similares, lo cual indica que en promedio no existen diferencias significativas en el tamaño
de las microempresas (en términos de ventas) entre los distintos sectores.
-2,1%
Agricultura, Caza y Pesca
-4,0%
Minas, Petróleo y Canteras
4,4%
Electricidad, Gas y Agua
Construcción 10,7%
3,3%
Comercio
8,5%
Crecimiento del PIB Real.
CRECIMIENTO PROMEDIO
El gráfico anterior muestra la comparación del crecimiento de las ventas de las microempresas
de cada sector versus el crecimiento del PIB total del país. Sin embargo, resulta más interesante
aún apreciar la evolución de la importancia de las ventas de las microempresas con respecto al PIB
de cada sector. Esto es lo que se presenta en el Cuadro 4.7.
El cálculo efectuado consiste en estimar el porcentaje que representan las ventas de las
microempresas de la rama i en relación con el PIB de la rama i, para el período 1994 a 1997 Esto
permite apreciar en qué sectores las microempresas ha adquirido una mayor (o menor) importancia
(en términos de participación en las ventas) en comparación con el resto de as empresas
Cuadro 4.8
N0 de microempresas según regiones: total país 1994-1997
En porcentaje
REGION
S/C 7% 7% 5% 3%
I 3% 3% 3% 3%
II 3% 3% 3% 3%
III 2% 2% 2% 2%
IV 4% 4% 4% 4%
V 10% 10% 10% 10%
VI 5% 5% 5% 6%
VII 8% 8% 8% 8%
VIII 11% 11% 11% 11%
IX 5% 5% 6% 6%
X 7% 7% 7% 7%
XI 1% 1% 1% 1%
XII 1% 1% 1% 1%
R.M. 34% 34% 34% 35%
TOTAL 100% 100% 100% 100%
Fuerte: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Complementario a lo anterior, en el Cuadro 4.9 se presentan las cifras con respecto a las ventas
de las microempresas según regiones.
Cuadro 4.9
En porcentaje
REGION
S/C 3% 3% 2% 1%
I 3% 3% 3% 3%
II 3% 3% 3% 3%
III 2% 2% 2% 2%
IV 4% 4% 4% 4%
V 10% 10% 10% 10%
VI 5% 5% 5% 5%
VII 7% 7% 7% 7%
VIII 11% 11% 11% 11%
IX 5% 5% 5% 5%
X 7% 7% 7% 7%
XI 1% 1% 1% 1%
XII 1% 1% 1% 1%
R.M. 38% 39% 39% 40%
TOTAL 100% 100% 100% 100%
Fuente: Elaboración propia a partir de la base empresas del S.I.I.
Gráfico 4.2
I 6,5%
II 8,2%
III 2,3%
IV 1,5%
V 3,8%
VI 3,2%
VII 2,3%
VIII 2,1%
IX 3,5%
X 4,3%
XI 5,9%
XII -0,2%
R:M: 4,5%
TOTAL 3,3%
Crecimiento Promedio
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Se destaca que en todas las regiones el crecimiento promedio es menor que el del PIB real,
siendo especialmente bajas las cifras en el caso de la XII, IV y II regiones. En el otro extremo, la II
región es la única que tiene un crecimiento similar al PIB (8.2%), seguida por la I región con un
6.5% en promedio.
Para hacer comparaciones con el PIB regional, en el Cuadro 4.10 se presenta la evolución de la
importancia relativa de las microempresas en relación con el PIB de cada región.
Cuadro 4.10
Las cifras de los cuadros anteriores mostraban poca importancia en magnitud de las
microempresas en algunas regiones, al ser comparadas con resto del país. Sin embargo, las cifras
del Cuadro 4.10 muestran que comparativamente con el PIB de cada región, la importancia relativa
de las microempresas aumenta considerablemente en algunos casos, tales como la IX y VII región.
Por ejemplo, en el caso de la IX región, la importancia de las microempresas con respecto a las
otras regiones es tan solo de un 5% pero cuando se las compara con respecto a PIB regional esta
importancia es cuatro veces mayor (20%).
El análisis dinámico del comportamiento de las microempresas tiene especial relevancia para el
tema de la viabilidad de las mismas, ya que las medidas de movilidad reflejan directamente el
grado de competencia a la cual se ven enfrentadas. Así por ejemplo, una alta rotación refleja dos
situaciones alternativas: por una parte, a posibilidad que un número importante de microempresas
20
Al igual que en la sección anterior, la definición utilizada de "microempresa" equivale a todas las empresas de ha base
de datos del S.I.I. que tienen ventas menores o igual a 2.400 U.F. anuales (200 U.F. mensuales).
6.1. Evolución anual de las tasas de natalidad y mortalidad de las microempresas: período
1990 a 1997
A partir de la base de datos del S.I.I. es posible estimar una serie de títulos de entrada y salida
a la categoría microempresa producidos entre los años 1990 a 1997. En concreto, todos los flujos
posibles se describen a continuación y se muestran en la Figura 4.1.
21
Existe la alternativa que las microempresas vuelva a aparecer en la base en años posteriores, en la medida que justo
el año t+1 haya sido un año en el cual no declararon IVA razón por la cual formar parte de esta base del SII. Sin embargo,
este flujo estimado para el periodo 1990-l997 no supera el 4% del total de microempresas del año 1990, lo cual hace prever
que la sobrestimación del número de microempresas muertas no es de gran magnitud.
22
Como se explica en la nota anterior, existe una sobrestimación implícita del número de microempresas nacidas en el
período, puesto que un porcentaje de ellas puede ser microempresas "reaparecidas" durante el período, sin embargo, es
previsible que este flujo sea bastante reducido.
Muertas Nacidas
(1) (2)
Microempresas Microempresas
(3)
Microempresas desde t
(4)
Empresas descendentes
FLUJOS
Período
(nº de microempresas)
Suma
90/91* 91/92* 92/93* 93/94* 94/95* 95/96* 96/97*
Total
Flujos de Entrada
Nacidas 59,662 59,662 58,839 58,839 72,773 76,689 74,980 461,443
Empresas Descendentes 3,853 3,853 6,481 6,481 10,795 12,254 13,309 57,025
Total Entradas 63,515 63,515 65,319 65,319 83,568 88,943 88,289 518,468
Flujos Salida
Muertas 43,473 43,473 48,826 48,826 66,485 61,067 66,470 378,619
Microemp. Ascendentes 8,590 8,590 7,702 7,702 13,311 12,928 12,707 71,528
Total Salidas 52,062 52,062 56,528 56,528 79,796 73,995 79,177 450,147
Incremento Neto
11,453 11,453 8,792 8,792 3,772 14,948 9,112 68,321
(Entradas-Salidas)
*Debido a la falta de información anual para el período 1990 a 1994 se dividió por dos los flujos y tasas del periodo bianual
1990/1992 y 1992/1994
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I..
Estos flujos permiten estimar las tasas anuales y promedio de natalidad y mortalidad, lo cual se
presenta en el Cuadro 4.12. Para efectos comparativos, se han incluido también las tasas de
natalidad y mortalidad del resto de las empresas, es decir de las que no son microempresas.
Cuadro 4.12
Tasas de natalidad y mortandad según tipo de empresa y año: 1990-1997
Pequeña, Mediana y
90/91* 91/92* 92/93* 93/94* 94/95* 95/96* 96/97 Promedio
Gran Empresa
Tasa de Natalidad 9.6% 9.6% 7.4% 7.4% 5.5% 5.5% 5.2% 7.2%
Tasa de Mortalidad 4.3% 4.3% 4.2% 4.2% 3.1% 3.0% 3.2% 3.8%
Tasa de Natalidad Neta 4.3% 5.3% 3.2% 3.2% 2.4% 2.5% 2.0% 3.4%
*Debido a la falta de información anual para el período 1990 a 1994 se dividió por dos los flujos y tasas del período bianual 1990/1992
y 1992~1994
Fuerte: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Se puede apreciar que las tasas promedio de natalidad neta (nacidas menos muertas) son
iguales entre ambos grupos (3.4%), sin embargo, la rotación de las microempresas es más del
Por otra parte, el hecho que las tasas anuales de natalidad neta haya sido positivas durante
todo el periodo entrega una señal de la dinámica de creación de empresas durante esos años.
Es interesante dar cuenta del porcentaje de sobrevivencia de las microempresas al año 1997,
es decir, el porcentaje de microempresas que nacieron durante el período 1990-1997 y que
sobrevivieron hasta el año 1997, último año considerado del cual se tiene información. En el
Cuadro 4.13 se presentan las cifras correspondientes, comparadas con las del resto de las
empresas.
Cuadro 4.13
Porcentaje de sobrevivencia de las microempresas nacidas durante 1990/1997
TOTAL
MICROEMPRESAS 90/91* 91/92* 92/93* 93/94* 94/95* 95/96* 96/97*
PERIODO
Nacidas en el período 59,662 59,662 58,839 58,839 72,773 76,689 74,980 461,443
Sobrevivientes en 1997 24,579 24,579 31,165 31,165 44,430 58,122 74,980 289,019
Tasa de sobrevivencia 41% 41% 41% 41% 61% 76% - 63%
Pequeñas, Medianas,
Grandes Empresas
Nacidas en el período 5,952 5,952 5,817 5,817 4,694 4,977 4,882 38,089
Sobrevivientes en 1997 3,567 3,567 4,388 4,388 3,791 4,484 4,882 29,066
Tasa de Sobrevivencia 60% 60% 60% 60% 81% 90% - 76%
*Debido a la falta de información anual para el período 1990 a 1994, se dividió por dos los flujos y tasa del período bianual 1990/1992
y 1992/1994
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Se tiene que el total de microempresas que nacieron durante los años 1990 a 1997 son 461.443
de las cuales sólo 289.019 lograron sobrevivir hasta el año 1997, lo que representa un porcentaje
de sobrevivencia de un 63%. A su vez en el caso del resto de las empresas el porcentaje de
sobrevivientes es de un 76%, lo que muestra la menor probabilidad de sobrevivencia que tienen las
microempresas en comparación con el resto de las empresas.
En el Cuadro 4.14 se presentan las tasas de natalidad, mortalidad y natalidad neta promedio del
período 1990 a 1997, según rama de actividad económica.
Finanzas Ss.
Agricultura Minas, Transporte
Industrias Electricidad Seg. Estatales T
Caza y Petróleo y Construcción Comercio y
Manufactureras Gas y Agua Inmuebles y Soc. de Microe
Pesca Canteras Comunicaciones
Otros Personas
Tasa de Natalidad 9.2% 21.1% 16.6% 16.5% 31.7% 14.4% 17.4% 26.6% 18.6%
Tasa de Descenso 2.2% 6.6% 3.7% 2.3% 5.6% 1.6% 2.7% 3.9% 1.5%
TOTAL TASA DE
11.4% 27.7% 20.2% 18.8% 37.3% 15.9% 20.1% 30.5% 20.1%
ENTRADA
Tasa de Mortalidad 8.7% 23.8% 13.0% 15.6% 16.7% 12.2% 12.7% 18.2% 14.4%
Tasa de Ascenso 2.4% 5.0% 4.0% 1.9% 7.4% 1.9% 3.6% 5.3% 2.2%
TOTAL TASA DE SALIDA 11.1% 28.8% 17.0% 17.5% 24.1% 14.1% 16.2% 23.5% 16.6%
TASA DE NATALIDAD
0.5% -2.6% 3.6% 0.9% 15.1% 2.1% 4.7% 8.4% 4.2%
NETA (Nacidas-Muertas)
TASA DE INCREMENTO
0.2% -1.1% 3.3% 1.3% 13.2% 1.8% 3.8% 7.0% 3.5%
NETO (Entradas-Salidas)
Construcción 31,7%
26,6%
Finanzas, Seg., Inmueb. y Otros
18,6%
Ss. Estatales, Soc. de Personas
16,6%
Industrias Manuf actureras
16,5%
Electricidad, Gas y Agua
Comercio 14,4%
(Nacidas/Total Microempresas)*100
T a s a s d e M o rta lid a d d e la s M ic ro e m p re s a s s e g ú n
R a m a E c o n ó m ic a - P ro m e d io 1 9 9 0 - 1 9 9 7
To ta l M ic ro e m p re s a 17%
C o n s tru c c ió n 31,7%
F in a n z a s , S e g . , In m u e b . y O t ro s 26,6%
M in a s , P e t ró le o y C a n t e ra s 21,1%
S s . E s t a t a le s , S o c . d e P e rs o n a s 18,6%
Tra n s p o rt e y C o m u n ic a c io n e s 17,4%
In d u s t ria s M a n u fa c t u re ra s 16,6%
E le c t ric id a d , G a s y A g u a 16,5%
C o m e rc io 14,4%
A g ric u ltu ra , C a z a y P e s c a 9,2%
Construcción 15,1%
2,1%
Comercio
-4,0% -2,0% 0,0% 2,0% 4,0% 6,0% 8,0% 10,0% 12,0% 14,0% 16,0%
Se destaca la alta rotación del sector construcción y el sector financiero, lo que se visualiza en
las altas tasas de natalidad y mortalidad que presentan. Así también estos dos sectores son los
que han mostrado mayor capacidad de generación de microempresas durante el período, ya que
tienen una tasa de natalidad neta promedio de un 15.1% y un 8.4%, respectivamente. El único
sector que tiene una tasa promedio de natalidad neta negativa en el período es el sector minero, lo
cual se condice con los problemas experimentados durante la última década por los pequeños
mineros.
Por otra parte, se observa una menor variabilidad de las tasas de mortalidad entre sectores, en
comparación con las tasas de natalidad. Esto implica que el crecimiento relativo del número de
microempresas de un sector depende principalmente del dinamismo en la creación de nuevas
microempresas, más que del número de las mismas que deja de existir durante el período.
Gráfico 4.6
Tasas de ascenso de las microempresas según rama de actividad económica:
promedio 1990 - 1997
Construcción 7,4%
Comercio 1,9%
(Ascendentes/Total Microempresas)*100
Cuadro 4.15
Porcentaje de sobrevivencia de las microempresas nacidas durante 1990 –1997
Se observa que en todas las ramas de actividad el porcentaje de sobrevivientes entre las
microempresas es menor que el resto de las empresas. Por otra parte, los sectores con un mayor
porcentaje de microempresas sobrevivientes son la agricultura (73%), construcción (72%) y
transporte y comunicaciones (71%), mientras que los con menor porcentaje de sobrevivientes son
el sector minería (51%), el sector financiero (64%) y las sociedades (64%).
Para analizar la movilidad de las empresas sobrevivientes desde 1990 a 1997 se procedió a
contabilizar el número de empresas que estaban activas en 1990 y todavía lo seguían estando en
1997, verificando si su clasificación de tramo de venta coincide o no con la original. Así, es posible
detectar el número de microempresas de 1990 que experimentaron crecimiento durante el período
así como también las que disminuyeron de tramo de venta. Esta información se presenta en el
Cuadro 4.16..
Ubicación en 1997
vencia
III 3,212 6,357 22,854 2,363 843 341 35,970 52,473 69%
Total 125,431 57,511 41,763 4,079 2,410 3,399 234,593 426,341 55%
* Tramo I: 0-600 U.F.; Tramo II: 601- 2400 U.F; Tramo III: 2401- 25000 U.F; Tramo IV: 25001- 50000 U.F.; Tramo V;
50001-10000 U.F; Tramo VI: 100001 y más U.F. Las microempresas corresponden a las del Tramo I y II (Hasta 2400 U.F.
anuales)
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
Se tiene que del total de empresas existentes en el año 1990 (426.341), solamente 234.592
sobrevivieron hasta 1997, lo que representa un 55%. Como se esperaba, el porcentaje de
sobrevivientes aumenta a medida que el tamaño de la empresa es mayor. Es así como en el caso
do las microempresas, que corresponden a tos tramos I y II el porcentaje de sobrevivencia es de
un 49% y un 65% respectivamente, mientras que del total de empresas clasificadas en el Tramo VI
en 1990, el 83% sobrevivió durante todo el período.
Por otra parte, se destaca la alta movilidad de las empresas entre los distintos tramos, ya que
sólo un porcentaje de ellas se mantienen en la misma clasificación original. Esto se aprecia más
claramente en el Cuadro 4.17, en donde se han calculado los porcentajes de las empresas
sobrevivientes según los distintos tramos.
Ubicación en 1997
Total
I II III IV V VI
Sobrevivientes
Ubicación en 1990
*Tramo I:0-600 U.F; Tramo II: 601-2400 U.F; Tramo III: 2401250000 U.F.; Tramo IV: 25001 - 50000 U.F.; Tramo V:
50001-1000000 Tramo VI:100001 y más. U.F. Las microempresas corresponden a las del tramo I y II) (hasta 2400 UF
anuales)
Fuente: Elaboración propia a partir de la base de empresas del S.I.I.
En términos generales se aprecia una tendencia ascendente a través del período en los tramos
mayores (IV y V) y una tendencia ascendente, aunque menos marcada, en los tramos menores (I y
II), llegando a niveles estables en los extremos. Por otra parte, se destaca la estabilidad del tramo
II, ya que pocas microempresas logran aumentar su nivel de ventas para llegar a los tramos
superiores. Así por ejemplo, solo un 1% logro llegar más allá del tramo III. Esto muestra de algún
modo la realidad de las microempresas, en cuanto a las pocas perspectivas de crecimiento, entre
otras cosas, debido a la falta de Inversión.
Para ver las diferencias entre los sectores económicos, en el Cuadro 4.18 se presenta el
porcentaje de sobrevivencia de las empresas según tramos de venta y rama de actividad, para el
periodo 1990-1997.
Cuadro 4.18
Porcentaje de sobrevivencia de las empresas según tramos de venta y rama
de actividad económica 1990-1997
Finanzas Ss.
Tramo Agricultura Minas, Total
Industrias Electricidad Transporte y Seg. Estatales,
de caza y Petróleo y Construcción comercio Microempresas
Manufactureras Gas y agua comunicaciones Inmueble y Soc. de
Ventas pesca canteras en cada tramo
otros Personal
I 64% 27% 47% 24% 43% 49% 45% 38% 48% 49%
II 74% 38% 62% 59% 57% 66% 65% 57% 66% 65%
III 74% 58% 70% 73% 62% 68% 70% 64% 70% 69%
IV 77% 60% 77% 89% 66% 74% 73% 70% 78% 73%
V 59% 65% 83% 87% 71% 78% 78% 71% 84% 77%
VI 28% 79% 87% 89% 77% 82% 89% 78% 91% 83%
Total 67% 41% 58% 41% 53% 55% 55% 48% 53% 55%
Cuadro 4.19
Probabilidad de cierre de una empresa según años de vida y tramos de venta
Tramo de ventas
Años
Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo Tramo
de
1 2 3 4 5 6 7 8 9 10
Vida
1 30.4 13.0 12.0 10.0 12.4 12.7 12.0 17.2 12.9 7.1
2 30.6 20.1 19.1 16.7 13.3 14.0 14.2 12.6 13.7 8.5
3 21.8 17.7 17.6 15.3 15.4 13.4 18.0 9.4 17.9 14.2
4 16.1 12.9 12.7 13.9 10.5 13.3 8.4 13.2 9.9 11.9
*Tramo 1:0-600 U.F; Tramo:2: 601-1800 U.F; Tramo 3: 1801-2400 U.F.; Tramo 4: 2401-25000 U.F.; Tramo 5: 25001-
50000 U.F.; Tramo 6: 50001-100000; Tramo 7: 100001-300000; Tramo 8: 300001-600000; Tramo 9: 600001-1200000;
Tramo 10: 12000000 y más.
Fuente: elaboración utilizando Cuadros de vida (técnica de análisis de datos sobre duración)
23
Esto se podría vincular con los problemas experimentados por este sector a lo largo de esta década. ya que la
constante apreciación del peso ha traído como consecuencia una baja en las utilidades de los sectores exportadores entre
ellos el sector agrícola.
24
“Determinantes de la Capacitación en Empresas de Chile”, Castañeda, Moreno y Román (1998).
25
Los tramos de ventas de este cuadro son distintos a los presentados en los cuadros anteriores ya que en este caso la
subdivisión es más desagregada (10 tramos en vez de 6).
26
Una explicación de ello podría estar en que empresas con alta inversión específica de entrada no cierra tan
apresuradamente ya que están dispuestas a soportar varios periodos con perdidas.
8. CONCLUSIONES
a. Si bien durante los años 1990 a 1997 las microempresas aumentaron en número y ventas, su
crecimiento fue menor que el resto de las empresas. Esto muestra que el crecimiento del país
durante esos años estuvo liderado principalmente por las grandes empresas.
En el año 1990 la base de empresas del S.I.I. contabilizaba un total de 364.l10 microempresas
formales en todo el país, mientras que en 1997 este total ascendía a 432.431 microempresas, lo
que implica que en términos netos hubo un aumento de 68.321 microempresas durante el período
analizado. Sin embargo, en términos relativos el porcentaje que representan en relación con el
total de empresas descendió desde un 85.4 % a un 82,1% entre esos mismos años-
Lo anterior también sucede en el caso de las ventas ya que hubo una disminución de la
participación en las ventas totales de las microempresas desde un 4.0% en 1994 a un 4.4% en
1997 Esto también es válido en el caso de la pequeña y mediana empresa, mientras que por el
contrario, sólo las grandes empresas aumentaron su participación relativa en el mismo período
desde un 69.2% a un 71.9%
Más del 70% de las microempresas analizadas corresponden a empresas con ventas menores
a las 600 U.F. anuales siendo que se consideró corno microempresas a todas aquellas con ventas
menores a las 2.400 U.F. anuales.
La distribución de las microempresas según rama de actividad económica arroja como resultado
que casi el 50% de ellas corresponde al sector comercio seguidas por la agricultura, caza y pesca
(14%) y el sector servicios (10%).
e. En la mayoría de los casos la participación de las ventas de la microempresa durante los años
1994 a 1997 ha disminuido con respecto al PIB sectorial y regional respectivo.
Las cifras presentadas indican que salvo en el caso del sector construcción en todos los
sectores económicos el crecimiento de las ventas reales de la microempresa fue menor que el
crecimiento del PIB nacional. Incluso en el sector agropecuario y minero este crecimiento fue
negativo.
En cuanto a la evolución de la importancia relativa de las ventas con respecto al PIB sectorial,
se aprecia que justamente el sector construcción el de mayor crecimiento porcentual es el único en
el cual la importancia relativa de las microempresas aumenta, mientras que en todo el resto
disminuye.
En el caso del análisis por región las conclusiones son similares: puesto que en todas las
regiones el crecimiento de las ventas de la microempresa es menor que el PIB nacional. Además,
en todas regiones la importancia relativa de la microempresa ha disminuido con respecto al PIB
regional, con la sola excepción de la V región en donde se ha mantenido aproximadamente
constante.
f. Aun cuando las tasas promedio de natalidad neta de las microempresas y del resto de las
empresas son similares (3,4%), las microempresas presentan una rotación significativamente
mayor
Las tasas promedio de natalidad neta (nacidas menos muertas) estimadas son iguales entre las
microempresas y el resto de las empresas sin embargo la rotación de las microempresas es más
del doble que la de las no microempresas Es así como la tasa promedio de natalidad y de
mortalidad de las microempresas es de un 17.0% y un 13,9%, respectivamente. mientras que en el
caso de las no microempresas estas cifras son de un 7.2% y de un 3.8% Lo anterior se condice
con el mayor dinamismo que se espera exista entre las empresas de menor tamaño: lo cual se
traduce en la predicción de mayores tasas de natalidad y mortalidad en el caso de las
microempresas.
Esta mayor rotación de las microempresas refleja dos situaciones alternativas: por una parte:
la posibilidad que un número importante de microempresas haya querido dejar de funcionar en
Por otra parte: el hecho que las tasas anuales de natalidad neta haya sido positivas durante
todo el período entrega una señal de la dinámica de creación de empresas durante esos años.
En cuanto a la rotación según ramas de actividad económica se tiene que el sector construcción
el sector financiero son los que presentan mayores tasas de natalidad y mortalidad siendo al
mismo tiempo los dos sectores que más mostraron capacidad de generación de microempresas
durante el periodo: con una tasa de natalidad neta de un 15.1% y un 8.4%, respectivamente.
Respecto a la definición Rentabilidad de los activos no resultó ser una buena aproximación a la
definición del desempeño económico de las microempresas, a pesar de ser una variable
ampliamente utilizada para medir el desempeño económico de las empresas en general. Esta
situación podría deberse al extremadamente bajo nivel de activos que presenta un porcentaje
importante de las microempresas, lo que tiende a sesgar la variable Rentabilidad de los activos
hacia valores inusualmente altos, pero que en la práctica representan un flujo de dinero bajo. Lo
anterior se relaciona con que la mayoría de las microempresas son intensivas en mano de obra y
no en capital (rasgo común en las empresas de servicios y comercio, que como ya se vio,
representan en conjunto el 85% de la muestra).
Por lo tanto, y considerando además que la variable Rentabilidad mensual por hora de trabajo
resulta de particular utilidad práctica al ser fácilmente comparable con parámetros externos como el
salario mínimo por hora, se recomienda usar esta definición para estudios futuros.
i. Los microempresarios hombres obtienen una mayor rentabilidad mensual por hora de trabajo
en comparación a las microempresarias.
Este resultado sustenta la hipótesis sobre que las microempresarias tendrían una situación más
precaria, la que no se explicaría por otras variables como años de escolaridad, aprendizaje
formal/informal del oficio, ni personalidad microempresarial, pues se verificó que estas variables se
comportan de manera similar tanto para hombres como para mujeres microempresarias.
ii. Las microempresas que generan mayores ingresos brutos obtienen una mayor rentabilidad
por hora trabajada.
Este resultado es esperable por la propia definición de la variable rentabilidad, que se afecta
positivamente por la utilidad, la que a su vez depende positivamente de los ingresos brutos.
iii. Las microempresas que se han establecido de manera más formal ante el SII y ante el
Municipio, tienden a presentar una mayor rentabilidad de la mano de obra.
Respecto a este resultado, no puede descartarse que exista una doble causalidad, en el sentido
que las microempresas de mejor desempeño económico decidan formalizarse una vez alcanzado
cierto nivel de desarrollo, al mismo tiempo que el hecho de formalizarse les permite mejorar su
negocio.
iv. Los microempresarios que han aprendido su oficio de manera autodidacta tienden a obtener
una menor rentabilidad por hora trabajada que aquellos que lo han aprendido de manera más
formal.
Una interpretación de esta situación podría ser que mientras más personas trabajen en la
microempresa, deban repartirse un nivel similar de utilidades. Es decir, podría darse el caso que al
contar con personal adicional las utilidades de la microempresa aumenten de manera menos que
proporcional que el aumento de las horas/hombre de trabajo disponibles, y por lo tanto, si ese
personal extra es remunerado, en el margen puede no resultar conveniente contratarlo.
vi. Las microempresas dedicadas al rubro comercio obtienen un peor desempeño económico en
comparación a las de los rubros servicios y manufacturas.
Podría pensarse que el sector de las microempresas dedicadas al comercio pueda ser más
competitivo, por el alto porcentaje de microempresas en ese rubro (54%). También podría ser una
vii. Los microempresarios que asumen la actividad ante la imposibilidad de encontrar otro trabajo,
tienden a tener una peor rentabilidad por hora trabajada que los microempresarios que optan
por serlo por razones más vocacionales.
viii. Los microempresarios que establecen relaciones preferentemente formales con sus clientes
(mediante contratos y venta a mayoristas) obtienen una mayor rentabilidad mensual por hora
de trabajo.
Esto podría interpretarse como que aquellas microempresas que logran relaciones estables con
determinados clientes consecuentemente alcanzan un mejor desempeño económico, ya sea
porque se obligan a cumplirle a sus clientes, porque forman parte de una cadena productiva, o
porque tienen un piso mínimo de ingresos para poder funcionar.
ix. Los microempresarios pertenecientes a hogares más numerosos tienden a tener un mejor
desempeño económico medido en rentabilidad por hora de trabajo
Podría pensarse que en estos casos los microempresarios reciban mayor apoyo de los
miembros de su hogar, no obstante ello ya está incorporado en la variable utilizada para medir el
desempeño económico, pues incluye horas de trabajo remuneradas y no remuneradas, estas
últimas típicamente familiares. De todas maneras podría tratarse de un tipo de apoyo no capturado
por la variable horas de trabajo, así como también podría existir una relación positiva entre el
esfuerzo del microempresario y el tamaño del hogar al que debe aportar.
x. Los microempresarios pertenecientes a hogares con un mayor ingreso per cápita presentan
un mejor desempeño económico
Esta relación debe analizarse con precaución, pues en el ingreso per cápita del hogar se
incluyen los ingresos netos generados por la microempresa, y por lo tanto la relación
probablemente también tenga un componente inverso, es decir, que un mejor desempeño
económico de la microempresa genere un mayor ingreso per cápita del hogar. De todas formas,
podría argumentarse que el mayor ingreso del hogar dado por las fuentes distintas a la
microempresa esté asociado a un mayor nivel educacional de los familiares, y por lo tanto éstos
puedan prestar un mejor apoyo al microempresario.
Respecto a este punto debe hacerse una advertencia, puesto que si bien hay variables que
resultaron ser no significativas para el desempeño económico, esto puede también atribuirse a
deficiencias en la especificación de las variables o en la captura de la información a través de la
encuesta a microempresarios, y por lo tanto no se puede ser completamente concluyentes.
Por ejemplo, en el caso de la variable Personalidad Microempresarial puede haber ocurrido que
el índice utilizado no haya sido capaz de capturar las verdaderas características de los
microempresarios. Algo similar puede haber ocurrido con la variable Escolaridad del
Microempresario, la que si bien captura con facilidad la cantidad de años de estudio, no es capaz
de capturar las competencias laborales adquiridas mediante el estudio, ni menos su nivel de
actualización.
Distinto puede ser el caso de las variables Valor de los Bienes de Capital y Apoyos Externos
Recibidos por la Microempresa. En el primer caso, si bien se puede argumentar errores en la
valoración que los propios microempresarios hicieron de sus activos, una explicación consistente
con los resultados puede ser que un porcentaje importante de las microempresas es intensiva en
mano de obra y no en capital, por lo que un mayor nivel de activos no afectaría mayormente su
desempeño económico. Respecto al segundo caso, la encuesta capturó claramente la cantidad de
apoyos externos recibidos por las microempresas (créditos, donaciones, capacitaciones y
asesorías), por lo que resulta preocupante que esta variable no haya resultado significativa, pues
sería una señal de la poca efectividad de los apoyos externos para mejorar el desempeño
económico de los microempresarios.
i. Las microempresas presentan una rotación significativamente mayor al resto de las empresas,
aun cuando las tasas promedio de natalidad neta de ambos tipos de empresas son similares
(3,4%),
Las tasas promedio de natalidad neta (nacidas menos muertas) estimadas son iguales entre las
microempresas y el resto de las empresas sin embargo la rotación de las microempresas es más
del doble que la de las no microempresas. Es así como la tasa promedio de natalidad y de
mortalidad de las microempresas es de un 17.0% y un 13,9%, respectivamente, mientras que en el
caso de las no microempresas estas cifras son de un 7.2% y de un 3.8% Lo anterior se condice
con el mayor dinamismo que se espera exista entre las empresas de menor tamaño: lo cual se
Esta mayor rotación de las microempresas refleja dos situaciones alternativas: por una parte:
la posibilidad que un número importante de microempresas haya querido dejar de funcionar en
forma espontánea, e incluso voluntaria como por ejemplo, debido a que el dueño hizo ingreso al
mercado laboral formal. Por otra parte, puede ser un reflejo de que la permanencia en el largo
plazo es muy difícil para ellas lo cual se debe a una serie de explicaciones, tales como diferencias
crecientes de productividad con el resto de las empresas, mala gestión: mal manejo financiero: etc.
Escapa a las pretensiones y posibilidades de este estudio poder contestar esas interrogantes.
El hecho que las tasas anuales de natalidad neta hayan sido positivas durante todo el período
entrega una señal de la dinámica de creación de empresas durante esos años.
En cuanto a la rotación según ramas de actividad económica se tiene que el sector construcción
el sector financiero son los que presentan mayores tasas de natalidad y mortalidad siendo al
mismo tiempo los dos sectores que más mostraron capacidad de generación de microempresas
durante el periodo: con una tasa de natalidad neta de un 15.1% y un 8.4%, respectivamente.
ii. Un 63% de las microempresas nacidas durante los siete años analizados lograron
sobrevivir hasta el final del período mientras que esta cifra es de un 76% en el caso del resto de
las empresas.
En cuanto a la comparación según ramas de actividad. se observa que en todos los sectores el
porcentaje de sobrevivencia de la microempresa es menor que el del resto de las empresas Por
otra parte, los sectores con un mayor porcentaje de microempresas sobrevivientes con la
agricultura (73%), construcción (72%) y transporte y comunicaciones (71%), mientras que los con
menor porcentaje de sobrevivientes son el sector minero (51%) y el sector financiero (64%)
iii. Se destaca que los sectores económicos con mayor dinamismo en la creación neta de
microempresas - como por ejemplo el sector construcción y el sector financiero- son los que
presentan mayor crecimiento en las ventas, mientras que el sector comercio, uno de los más
estables a nivel de las microempresas presenta la tasa de ascenso más baja de todas.
Las cifras muestran que justamente los sectores con mayor dinamismo en términos de
nacimientos y muertes, como por ejemplo el sector construcción y el sector financiero, son los que
iv. En cuanto a la movilidad de las microempresas sobrevivientes, se destaca que tan sólo un
1% de ellas llegó a tener ventas superiores a las 25.000 U.F. anuales al final del período
analizado, lo que muestra limitadas perspectivas de crecimiento significativo.
En términos generales se aprecia una tendencia ascendente a través del período de las ventas
de las empresas ubicadas en los tramos mayores a 25.000 U.F. anuales, y una descendente,
aunque menos marcada. En los tramos menores a las 2.400 U.F anuales (las que corresponden a
las microempresas). Por otra parte, se destaca la estabilidad del tramo II, que incluye a las
microempresas entre las 601 y 2400 U.F. anuales, ya que pocas de estas microempresas lograron
aumentar su nivel de ventas para llegar a los tramos superiores. Así por ejemplo, sólo un 1% logró
superar las 25.000 UF anuales de ventas. Esto muestra de algún modo la realidad de las
microempresas, en cuanto a las pocas perspectivas de crecimiento, entre otras cosas, debido a la
falta de inversión.
Por lo tanto, al momento de definir políticas es importante distinguir entre estos tipos de
microempresas, ya que en el caso de las primeras es probable que los apoyos puedan
efectivamente generar una rentabilidad futura en los microempresarios, sin embargo en el caso de
las segundas, dado su situación de subsistencia, es probable que al cambiar diversos aspectos
externos, como el encontrar un empleo, cumplir una meta económica u otro, esto podrá repercutir
en el abandono de la microempresa, lo que no tiene necesariamente una connotación negativa ya
que la familia de microempresarios ha encontrado otra fuente de ingresos.
iii. El aumento del factor trabajo en las microempresas no está asociado a mayor rentabilidad.
En forma particular, en el caso del sector comercio, se constató que al trabajar más horas los
microempresarios tienen rendimientos decrecientes, aunque no necesariamente en términos de los
ingresos totales de la microempresa.
En este sentido, para el evaluador externo, es importante tener presente que el aumento en el
tamaño de la microempresa no significa necesariamente algo positivo en sí mismo.
iv. Existen ciertas características del microempresario que no se asocian a mejor desempeño
económico.
v. Durante el período estudiado, se constató una alta rotación en las microempresas. Sin
embargo, la estabilidad no se asocia a rentabilidad.
El componente dinámico del estudio, mostró una alta rotación de las microempresas, esto se
refleja en una mayor creación y mortandad de las mismas, un 37% de las microempresas
estudiadas dejó de operar en el período. Sin embargo, en los sectores de mayor estabilidad en
términos de operación, como es el caso del sector comercio, en la práctica es aquel en el cual se
observa una menor potencialidad de ascenso económico.
Nuevamente, para el observador externo, será necesario tener presente que la antigüedad o
permanencia en el giro no necesariamente significa un potencial de crecimiento económico.