Universidad de Chile – FAU

Teoría de la Arquitectura Av.

1
Profesor: Max Aguirre

¿De qué manera participa o interviene la imaginación del

proceso de proyecto?
Un proyecto busca ser la respuesta a cierta problemática dada, la cual se responde
mediante el proceso de proyectar. Dentro de los medios y variables que incluyen proyectar
se encuentra la imaginación, la cual formará las bases y ayudará a la morfología, orden y
concepción del proyecto
Consideramos la imaginación como una actividad creadora extraperceptiva, que es
alimentada por la imagen, considerada A en su mayoría como derivada del dato
perceptivo1 l
Las imágenes son constituyentes de la imaginación: “las imágenes son productos
imaginarios”2. Estas son capaces de captar la realidad y revivirla, “someten a unidad la
pluralidad de la realidad” ya que no la describen ni seccionan, pero como afirma Octavio
Paz “ la realidad poética no puede aspirar a la verdad, el poema no dice lo que es, sino lo
que podría ser”, se proyectan en una nueva realidad generada por la imagen donde esta es
su propio cosmos y responde a sus propias leyes, que se encuentran instauradas en el
momento de la percepción y en el ser que imagina.
En el mundo de las experiencias estas representan una serie de significados para quien la
vive; así como un objeto puede valerse por su función, forma, color, etc., también puede
contener en la persona recuerdos, experiencias, miedos, entre otros; “poseen sentidos en
diversos niveles”3, pero las percibimos en la experiencia como entidades únicas (unidades),
y es en la obra donde se revive esta experiencia, el objeto se coloca completo frente a
nosotros unificado por su sentido. “la imagen se explica a sí misma”, “sentido e imagen son
la misma cosa”4 por lo cual la experiencia se expresa y comunica en esta.
“Nuestras capacidades significativas, comunicativas y de disfrute están basadas en
experiencias vividas, por nosotros o por otros antes que nosotros, de cualquier modo hechas
nuestras”5 por lo cual esas imágenes creadas en nuestro interior que comunican y
significan, transmiten nuestras experiencias en el momento de proyectar, y es lógico buscar
en nuestro interior las respuestas que mejor se adecuen a la resolución de la problemática
que presenta el proyecto.

1
Gillo Dorfles. “El devenir de las artes” pp.20
2
Octavio Paz. “El arco y la Lira”. segunda ed. 1967 pp.36
3
Ibíd. pp. 39
4
Ibíd. pp.41
5
Gillo Dorfles. “El devenir de las artes” Pp23
 El proceso de constitución de un proyecto se encuentra alimentado por una seguidilla de
imágenes, que se van posando una sobre otra. “el núcleo inicial de la obra equivale al
corpúsculo, iniciación del nacimiento de la perla (…) aunque en sí mismo no era otra cosa
que elemento sensorial, neutro y amorfo, será el embrión que deba dar origen al siguiente
proyecto”6. Y así como la imagen otorga el patrón inicial constitutivo del proyecto, otorga
a la vez su significado, y por lo tanto su sentido; aquella búsqueda a la cual la obra
arquitectónica intenta responder y alcanzar. Estas inicialmente impresiones sensoriales que
se transforman en imágenes en nuestro interior al cubrirse de significados y sentido,
contienen dentro de estos porciones de nuestro ser interior, “el poeta habla en el umbral del
ser”7 por lo cual el proyecto constituido de nuestras imágenes vislumbraría en cada paso
nuestro ser interior, conociéndonos a nosotros mismos en el proceso de proyecto.

Es por aquello que el proceso de proyecto nos lleva a la búsqueda de la respuesta desde
nuestro interior, desde nuestra imaginación e imágenes, que se van fraguando en la
respuesta arquitectónica, sacando a flote el subconsciente imaginario de cada uno en
búsqueda del sentido de la obra.

6
Ibíd. Pp. 24
7
Gastó n Bachelard. “La poética del espacio” pp. 8