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ESCUELA DE CADETES

E ste libro nos muestra que el pecado es una acción voluntaria, no una sustancia.
Además las similitudes que hay entre el sistema de indulgencia católico y el uso
en algunas denominaciones de la doctrina de justificación por fe.

Así mismo incluye una serie de definiciones de términos que suelen estar rodeados
de ambigüedad y al mismo tiempo responde a preguntas tales como la carnalidad.

Además este libro nos hace un llamado claro sobre la desviación que está teniendo
el evangelio, nos ofrece soluciones. Su combinación de denuncia rigurosa y
enfoque propositivo, distinguen a este estudio como una obra constructiva en un
mar de literatura que suele naufragar y quedar estática en las arenas de la critica
estéril y nos deja de paso ver un poco el carácter del autor.

Es un desafío a las convicciones teológicas, particularmente de aquellos cuya fe no


está debidamente cimentada en las escrituras sino en las opiniones de los líderes
religiosos.

El perdón de pecados es considerado en la Biblia uno de los tesoros espirituales


mas preciosos de la gracia de Dios. Esto es maravilloso ya que esto te libra del
sentimiento de culpa y saber que hay una reconciliación con Dios, con tu persona
y con quienes te rodean. Ya que el perdón de pecados es la puerta a la salvación
misma.

Podemos ver que en tiempos pasados se creía que el comprar una indulgencia
obtenía una absolución especial por sus pecados, incluso aquellos que cometiera en
el futuro. Consiguiendo así una licencia para pecar. Se pudiera decir que las
indulgencias nacieron por la avaricia de algunos y sirvieron para ayudarles a
recaudar fondos, consiguiendo así una gran cantidad de fieles. Las personas que
administraban las indulgencias tenían un status de semidioses ante todos aquellos
que tenían la creencia de que estas bendiciones eran eternas. Considerando desde
este punto de vista que este tipo de doctrina era una doctrina pragmática.

El teólogo alemán Dietrich Bonhoffer observó las absoluciones protestantes dentro


de la iglesia Luterana bajo la lupa distorsionada de la doctrina de la gracia.
“Absolvimos a toda una nación sin condiciones”. Dijo Bonhoffer “Gracia es
representada como el tesoro inagotable de la iglesia. De la cual ella hace llover
bendiciones con manos generosas sin hacer preguntas ni fijar límites”.

Justificación por fe, el pecado

EVANGELIO DE la tentación y la salvación.


LA GRACIA retiene su origen en el Nuevo Testamento

El primero es producto de diferentes modificaciones algunas provienen del


paganismo griego, el otro fue creído y practicado por los primeros cristianos
cuando la iglesia se encontraba en su mejor apogeo.

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