A 200 años de la Revolución de Mayo

¡NO al pago de la DEUDA EXTERNA! ¡Sí a

que los dineros del pueblo vuelvan al
pueblo!
¡Fuera el imperialismo! ¡Por la
Independencia Nacional y la Soberanía en
Malvinas!!
El Bicentenario de Mayo encuentra a nuestro país
sometido a un profundo endeudamiento externo
subordinando los intereses al imperialismo, sometiendo
al pueblo trabajador al ajuste y la miseria. Con un
gobierno que descarga todo el peso de la crisis sobre el
pueblo trabajador. Pero también este Bicentenario
encuentra a los trabajadores y al pueblo de pie y en
lucha por la soberanía nacional y sus derechos. Por ello
las organizaciones abajo firmantes creemos que este
Bicentenario debe servir para levantar una tribuna
popular que ponga por delante nuestros intereses
uniendo las fuerzas para dar una salida propia frente a la
entrega, usura y vaciamiento.
Volvemos a afirmar que el No pagar la deuda ilegítima y
fraudulenta y retomar el control de los recursos
naturales y sociales por parte de los trabajadores y el
pueblo, son una reivindicación de primer orden en la
defensa de nuestra soberanía, del salario, del trabajo y
de nuestras condiciones de vida. Los que aquí nos
congregamos estamos convencidos que la unidad y la
organización de los trabajadores y el pueblo será el
camino para conquistar nuestros reclamos.
En medio del doble discurso y de la propaganda oficial
por el Bicentenario, sigue vigente la lucha por nuestra
independencia. Nos someten con el endeudamiento y la
usura, con los monopolios y multinacionales que
saquean nuestros recursos y explotan a los trabajadores,
con los 17 millones de hectáreas y recursos claves de la
economía en manos extranjeras, con la concentración de
la tierra en pocas manos y el monocultivo, con los
pactos políticos y militares y con parte de nuestro
territorio y mares ocupados.
Un paso más de la entrega al imperialismo, es la política
de los K que permite la exploración y explotación en la
plataforma continental argentina. Ahora los ingleses se
aprestan a saquear el petróleo de Malvinas, mientras los
K hacen negocios con pulpos como Pan American Energy
(cuyo accionista mayoritario es la British Petroleum
inglesa), que operan como representantes de quienes
ocupan nuestras islas. Para luchar por la recuperación
de las Islas Malvinas es necesario echar al imperialismo
inglés de Argentina, cosa que los “nacionales y
populares” de los K no están dispuestos a hacer.
Se ha tolerado el plan de militarización de Malvinas y
Atlántico Sur por parte del Reino Unido. Seguimos siendo
aliados extra OTAN -desde 1998 a la fecha- a pesar que
este país -clave de la OTAN- ha instalado en Malvinas la
base militar más importante del hemisferios Sur. Base
militar con la que pretenden dominar el único paso
natural bioceánico y la proyección hacia la Antártida. El
gobierno sostiene que la Argentina “no tiene hipótesis
de conflicto”, mientras hoy los ingleses avanzan en el
saqueo de nuestro petróleo de Malvinas. Los que
gobiernan festejan y no tienen “conflicto” porque por
detrás, se aseguraron de cumplir acabadamente con los
compromisos de tolerar el colonialismo británico, y de
honrar la ilegitima y fraudulenta deuda externa. Son
herramientas con las que someten al saqueo a nuestra
nación y que condena a nuestro pueblo trabajador a la
miseria.
Para pagar los compromisos de la deuda son capaces de
todo: saquear los fondos de los jubilados, o mediante
decretazo habilitar el desfalco de las reservas del Banco
Central. Al mismo tiempo que pagan la deuda usuraria,
hacen escandalosos negociados para el enriquecimiento
de su grupo. Como el que armaron con sus amigos de la
City y los bonos que no entraron en el canje del 2005,
con un beneficio del 100 % para los especuladores,
saludado gratamente por Wall Street y Londres. El Banco
utilizado para la operación es Barclays, principal
accionista de la empresa inglesa DESIRE PETROLEUM, la
cual empezó a explotar el petróleo de las Islas Malvinas.
Mientras los kirchner hacen demagogia
propagandizando su “pelea” por la recuperación de las
Islas como un acto de “defensa nacional”, entregan el
canje de la deuda usuraria al principal socio de las
empresas que saquean el territorio de nuestro país.
La deuda externa de Argentina supera ya los 220 mil
millones de dólares. Representa en este momento
alrededor del 70 % del PBI, es decir está a la par de
Grecia, país que está casi en default. Frente al
agotamiento de capacidad de pago, se intenta volver a
los mercados de crédito internacional, para buscar
financiamiento a la crisis y a las necesidades políticas y
electorales del oficialismo, golpeado por la derrota
electoral. El gobierno y la oposición de derecha se
pelean en el parlamento, los medios y con acusaciones
judiciales, pero todos quieren seguir pagando la deuda,
ya sea con decretazos o con leyes o modificando el
presupuesto. Mientras el pueblo sufre las consecuencias
del ajuste ahora con la inflación. El oficialismo y la
oposición de derecha no dudan en saquear al país y a los
trabajadores y al pueblo para cumplir con los usureros
internacionales.
Antes, como ahora, la voluntad de “honrar la deuda” aún
con el “hambre de los argentinos” ha sido la consigna
histórica de la oligarquía y las clases dominantes de
argentina. Desde el primer préstamo en 1825 otorgado
por la Banca Baring Brothers, el cual consumó el primer
fraude: se canceló una deuda que ni siquiera fue
otorgada en su totalidad. Pasando por la nefasta deuda
de la dictadura, por la refinanciación usuraria promovida
por los distintos gobiernos que se han sucedido desde el
fin de la dictadura, por la estatización de la deuda
privada, por los mega canjes, blindajes y los canjes K en
la actualidad. La deuda usuraria no sólo ha sido pagada
varias veces ya, sino que se ha hecho con el sufrimiento
de los trabajadores y el pueblo y entregando la
soberanía nacional. Pagar la deuda significa más
entrega, hambre, enfermedad y muerte. Por la defensa
del salario, del trabajo, de los recursos nacionales y las
condiciones de vida de los trabajadores, decimos No al
pago de la ilegítima y fraudulenta deuda externa.
El Bicentenario de la Revolución de Mayo encuentra a los
trabajadores argentinos, como los docentes de Neuquén,
los ferroviarios, los de Crítica, del subte, de Massuh, de
la alimentación y muchos otros, en pie de lucha por
salarios, contra los despidos y suspensiones, en defensa
de la libertad de organización y por sus diferentes
reivindicaciones. Así como en 1910 los trabajadores
salieron a repudiar los festejos del gobierno y la
oligarquía, hoy distintos sectores de los trabajadores y
explotados enfrentamos los intentos del gobierno K y la
derecha opositora de descargar la crisis sobre nuestras
espaldas.
Expresamos toda nuestra solidaridad con los
trabajadores de Grecia, España y toda Europa, que
enfrentan en las calles el brutal ajuste del FMI y la Unión
Europea.
A 200 años de la Revolución de Mayo, debemos luchar y
organizarnos para conquistar nuestros reclamos y llevar
adelante las tareas de liberación nacional que nos
proponemos. Saludamos y alentamos a los trabajadores
y el pueblo que se levantan contra la explotación y por
el salario, a los campesinos y pueblos originarios que
luchan por la tierra, nos pronunciamos contra la
destrucción del medio ambiente, contra el saqueo de
nuestros recursos naturales y la defensa de nuestra
soberanía, por al defensa de la educación y salud
públicas. Estamos convencidos de que la salida pasa
porque los trabajadores y el pueblo recupere la
capacidad de decidir su propio destino. Por todas estas
razones, decimos:
No al pago de la ilegítima y fraudulenta deuda
externa

NO al acuerdo de los que quieren pagar a toda

costa, sea con reservas o con partidas
presupuestarias, en todo o en parte, con
decretazos o con pactos parlamentarios.
SÍ a que los dineros del pueblo vuelvan al pueblo,
en trabajo, salarios y jubilaciones, obras públicas,
vivienda, salud y educación.
Salario igual a la canasta familiar. Aumento de
salarios ya indexados a la inflación. No a los
despidos.
No a la fuga de capitales. Nacionalización de la
banca y el comercio exterior. Control de cambios.
Fuera Desire Petroleum y Barclays de Malvinas.
Fuera los ingleses de Malvinas.
Tierra para los campesinos y pueblos originarios.
Basta de saqueo. Por la nacionalización de los
recursos naturales bajo control de los
trabajadores y el pueblo.
Que la crisis la paguen las patronales, los
banqueros y los terratenientes.

¡¡ Fuera el imperialismo. Por la independencia

nacional !!