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Pedro vive en el campo, lejos del pueblo, y no puede jugar ‘on ottos nifos. Pero tiene un amigo muy especial. Se fama epén, es de palo y siempre esté con los brazos ablertas. Pe- pon tiene un trabajo de mucha responsabilidad. iPedro se siente muy orgulasa ge su amigo! Pero un dia ve que esta en peligro, E1 debe ayudarle, no puede quedarse sin amigo. Y a fin, Pedro tiene una idea genial CONGHA LOPEZ NARVAEZ, premio Lazarilo 1984, nacié en Seuila. Estudié Fosotia y Letras, lcenciéndose en Historia de ‘América. Durante algunos arios se dedicé a la ensefanca y ac- ‘ualmente escribe para nits y jovenes, Primeros lectores Amigo de palo Concha Lopez Narvaez Premio Lazarillo, 1984 llustraciones de Tino Gatagan | ee | ediciones BA) ain tera29 asters Fe Coleccién dirigida por Marinella Terzi Primera edi: junio 1988 ‘Sepia edicion: soptombye 1985 © Concha Léper Narvaez, 1988 © Esicones SN sloaqun Turn, 39, 28048 Macs Comerciaiza: CESMA, SA- Aguacate, 43 - 26084 Mac Iga: 9¢-248.2471.x repcedssn total parcial de ete iro, iformadco, nila tenamision de singe fons o medio, ys letonio, mecico, Por orci ‘Suocopias pot tei otros dtd, st el permis peeio pr etd lon tare del pyr PEDRO ya tiene siete afios, y atin no va al colegio. Ir el aio que viene sin falta. ae fos Se lo ha dicho mama. Pedro no va al colegio porque vive en el campo, en una casa blanca rodeada de una huerta muy grande. La escuela esta en el pueblo, auna hora de camino. Pedro es todavia pequefio, y no puede caminar durante tanto tiempo. Pero el aiio que viene Ie habrin crecido las piernas. Pedro tendra los pasos largos, y podra ir al colegio sin cansarse. Pedro vive con papa y mamé. Su casa esta muy lejos de otras casas. Por ese motivo, Pedro no puede jugar con otros nifios. Pero nunca se aburre. Se inventa historias © imagina aventuras. Ademas tiene amigos: su perro Bruno, Ia burra Catalina, la gallina Carlota y el gallo Sebastisny <= ial ee También tiene otro amigo que se llama Pepén. Pepén esta siempre en la huerta con los brazos abiertos. Asi asusta a los pajaros. Pepén tiene el cuerpo de palo, un sombrero de paja con la copa aplastada, una chaqueta de cuadros, un pantalén de rayas y una bufanda roja. La bufanda es muy larga. Cuando la mueve el viento, parece que vuela como una cometa. 12 Pepon es el guarda del huerto. Cuida de sembrados y frutas. Antes de ser el guardian del huerto, Pepén era slo una rama muy larga y otra rama més corta. Pero el papa de Pedro las unio y les puso la ropa. Ocurrié un dia de verano. El papa de Pedro vio que los péjaros se comian fas frutas y las plantas del huerto. | Entonces puso cara de enfado. 14 Luego se marché a casa y buscé en el bail de las cosas antiguas. Encontré la chaqueta de cuadros, el pantaln de rayas, el sombrero de paja con la copa aplastada y la bufanda roja. Y con todo en hae se fue de nuevo al hueria, PS Luego les puso ropa: pantalones de rayas, chaqueta de cuadros, sombrero de paja ~ con la,copa aplastada y bufanda roja. Pedro miraba con los ojos curiosos Jo que hacia papa —Es un hombre de palo -dijo Pedro cuando vio las dos ramas vestidas con chaqueta y pantalones, bufanda y sombrero. —Es un espantapdjaros, y ahora tiene que trabajar. Cuidara de las plantas y frutas -dijo papa. Pedro le puso nombre: —Se llamara Pepon —Es un nombre estupendo dijo papa. Después cogié las dos ramas, la que era mas corta y la que era més larga. Colocé la corta encima de la larga y las até con una cuerda fuerte. Y las clavé en el suelo. Luego, el papa de Pedro “ig habié al espantapajaros: —Abora, Pepén, vigila y cuida bien del buerto, Sino lo haces, te atrojaré a la hoguera -le advirtié con voz seria. Cuando papa se fue, Pedro miré a Pepon. Pepén parecia un gigante,- 9 con los brazos abiertos, vigilando sembrados. ¥ Pepon sonreia. Pedro sabia por qué: porque tenfa ropa, tenia nombre y tenia trabajo. 22 | 23 Después sucedieron muchas cosas distintas, y Pedro 2 Primero liegé al’ huerto la sefiora estorni con todos sus no se perdié un detalle> Venian a picar cn las frutas maduras. De pronto, la sefiora estornino vio a Pepén. Grité con voz de espanto, le temblaron las plumas y casi se desmay6. El seor estornino estaba en fas higueras y se comifa los higos. 25 —Qné es lo que pasa ahora? -pregunté al el grito de su esposa, —Mira, marido, mira, alli cn mitad del huerto -respondié la sefiora estornino. —jAy, papa, que nos come! ~gritaron los hijitos cogidos de las alas. El sefior estornino vio al guardian de sembrados y frutas. —jQué hombre tan extrafio! Esperad aqui quietos. | 26 Voy a acercarme un‘poco para verlo mejor ~dijo, Pero el papa estornino volvié inmediatamente. —iVamonos a casa! Parece peligroso ~ordené a su familia con ka voz asustada, Pedro los vio marchar. Volaban mas deprisa que el viento. 27 Tenian mucho miedo. Pepin se hinché igual qué un globo. Estaba muy orgulloso. Después, Pedro salié corriendo hacia donde vivian los pajaros, para ver fo que hacian. La sefiora estornino, el seiior estornino y sus hijitos estaban posados en las ramas de vn roble. Y contaban !a avent a todos sus vecinos: —jEra un gigante enorme, mis grande que este arbol! ~dijo la sefiora estornino. —Erd un hombre muy alto y parecia enfadado waiiadié su marido. iY nos queria comer! —gritaron los hijitos. 28 a ig MEE: Los pajaros temblaban4 tiemblan por cualquier cosa. ‘Temblaban todos, menos los mirlos. Los mirlos son curiosos, y les gusta enredar y llevar la contraria. Ademés dicen siempre la dltima palabra La seftora mirlo miraba a la seora estornino con ojos de duda. —Pues yo no me lo creo ~exclamé. La sefiora estornino se enfadé muchisimo. 30 Pues vayase usted al huerto y vea por si misma. “* Pero cuide de que el gigante terrible no le robe sus hijos -dijo la sefiora estornino. Y Ia sefiore mirlo solt6 su risa al aire porque no habia creido una sola palabra. Luego se marché con sus hijos camino del huerto. - Cantaban todos juntos la cancién del verano. Los pajaros la cantan con voces de alegria. : 3 Porque en verano, has frutas estén maduras. Y brillan entre las hojas verd Detras de la sefiora mirlo volaban muchos péjaros. Habia gorriones, grajos, pardillos, kiganos... Todos querian ver qué sucedia en el huerto. Eran curiosos, pero todos volaban despacio y con cuidado. Todos, menos los mirlos. Los mirlos son muy imprudentes. Pedro los vio marchar. Y corrié muy deprisa para volver al huerto. Llegé en el mejor momento La mam mitlo vio a Pepén con sus brazos abiertos ¥ dio un grito enorme. Hasia fo oy el Sok. Pedro se ri6. Los pijaros hufan como loco: ‘Tropezaban y caian en el aire. Volaban en desbandada. Todos iban muertos de miedo. > Llevaban las plumas despeinadas, Jas alas temblorosas y los ojos de espanto. 34 Por fin, stodos se feerga Pedro se aproxinié ** al guardian ‘del huerto. —Pepén, haces un buen trabajo, Yo quiero ser tu-amigo y le contaba cosas. Eran cosas de amigo. Pepén las entendia aunque no tenia orejas. Pero una maiiana los pajaros volvieron. El dia estaba claro, sin nubes en el cielo. 36 El aire fresco alegraba los campos. Pedro estaba contento. Bajaba desde casa hasta el huerto con ojos de alegria. Pensaba en su amigo Pepén. Le tenia que decir que ya sabia silbar. De pronto, vio a los pajaros. Eran cientos y cientos. Llegaban en bandadas. Pedro estaba asombrado. zAdénde irian los pajaros? Volaban sobre el huerto. Volaban dando vueltas. Y ninguno se posaba en los Arboles. Sin embargo, tampoco se alejaban. Pedro lo comprendi6: estaban al acecho. Pero gqué acecharian? 38 Pepén seguia en medio del huerto. Parecia mas enorme y terribl que nunca. Pedro lo miraba con ojos orgullosos. Ningiin pajaro rozatia los arboles. Pepén fo impediria. | Pero Pedro se equivocaba. se posd en un cituclo. 2Qué es lo que estaba haciendo? ;Picaba las ciruelas! © Una, dos, tres, cuatro, éinco.. Porque si, 2 ni siquiera se las comfa. Y no tenia miedo. ” s Picaba tranquila y sin prisas. Después levanté el vuelo. Saludé a sus amigos. Y se posé en el sombrero del guardién del huerto, Pedro no podia creerlo. iQué descarada era! Pero era valiente. De pronto, Pedro lo comprendié: aquella pajarita habia viajado. Mami siempre se lo decia: «E] que viaja aprende, y se atveve a hacer cosas que fos otros no harian>. Por eso, la pajatita sabia que Pepon era un espantapajaros. Por eso, se atrevia a picar las frutas del huerto. Los otros pajaros no habian viajado, Sabian pocas cosas: volar, hacer sus nidos, cantar y criar a sus hijos. Pero no eran valientes. Todos se asustaban del guardian del huerto. Sin embargo, aquella pajarita de nada tenia miedo. Volvié a posarse en los brazos abiertos de Pepén. Saltaba de uno a otro. Los brazos se agitaban. La pajarita se estaba columpiando. ;Cémo se reia! Luego empez6 a cantar. Pedro puso atencién. Era ua canto de burla: «Venid, venid; ef gigante terri tiene brazos de palo. Tiene cuerpo de palo. Y una pata de palo que se clava en la tierra. No se puede mover. No se llama gigante. Se lama espantapdjaros. Es todo de mentira». 44 Los péjaros legaron ay como una nube oscura.. Todos alborotando, todos al mismo tiempo. Y todos se posaron sobre el pobre Pepén. Algunos en los brazos, otros en el sombrero, otros en la chaqueta... Y todos se reian. Pepén se moria de vergiienza en medio del huerto. Alli estaba, con los brazos abiertos, todo lleno de pajaros. Pedro estaba seguro de que Pepén pensari «

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