Está en la página 1de 3

Belleza escondida

Andaba por ah Francisco vila


Visitando el valle caluroso
Situada en el desierto
que se extiende del mar
donde sus playas llegan
ventilando la sofocada ciudad
de incesante calor infernal.

Mientras recorra por esos caminos


Se refrescaba con la chicha de jora
Olvidndose del pasar de la hora.

Mientras tanto buscaba un lugar


Donde poderse acoger
De la noche y el amanecer
Encontrndose con una campia
el cual era abrigadora
y a la ves defensora
del frio incesante de la oscuridad
se preparaba para el da siguiente
con unas copitas de vino tinto
para poder calentar el cuerpo
antes de la venida del amanecer.

Iba caminando de lugar a lugar


Conociendo la catedral
Como tambin al teatro municipal
Quedando maravillado
por su antigedad y complejidad.

Entre sus visitas se encuentra

Con la estacin Tacna Arica


Unidas estas ciudades
Como si fuera el lazo
de una fraternal amistad.

Siendo provocado
por las frutas de los mercados
Que son deliciosos
Porque son jugosos
Se llevaba un poco
Para que lo acompaen
En esos caminos
Que no eran nada cortos.

Sigue su recorrido
Y entre sus visitas evidencia el sufrimiento
El calvario que se vivi
De las fuerza opuestas a las nuestras
En el campo de la alianza
Donde la tempestad reinaba
Y los invasores bailaban
Amenazante ante la crueldad de la luz.

As fue como Francisco vila


Conoci estos lugares
Tanto as como gastronoma
Y su belleza interna
Como muchos ms de implacable identidad
Que existen en nuestra localidad.

Es tan grande la admiracin


Que sinti Francisco vila

Por el valle viejo


dejndole huellas marcadas
en su corazn.

También podría gustarte