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Calor

Conducción Radiación Convección

Sólidos Medio Fluidos


En los sólidos, la única forma de
transferencia de calor es la conducción.
La conductividad térmica es una propiedad
intrínseca de los materiales que valora la
capacidad de conducir el calor a través de
ellos.
Es elevada en metales y en general en cuerpos
continuos, y es baja en los gases y en
materiales iónicos y covalentes, siendo muy
baja en algunos materiales especiales como
la fibra de vidrio, que se denominan por eso
aislantes térmicos.
La inversa de la conductividad térmica es la
resistividad térmica, que es la capacidad
de los materiales para oponerse al paso del
calor.
No se comprende en su totalidad el mecanismo
exacto de la conducción de calor en los
sólidos, pero se cree que se debe, en parte,
al movimiento de los electrones libres que
transportan energía cuando existe una
diferencia de temperatura. Esta teoría
explica por qué los buenos conductores
eléctricos también tienden a ser buenos
conductores del calor.
Ejemplo:
Si se calienta un extremo de una varilla metálica, de
forma que aumente su temperatura, el calor se
transmite hasta el extremo más frío por
conducción.
Coeficiente de
conductividad térmica (λ)
Material λ Material λ Material λ

Acero 47-58 Corcho 0,04-0,30 Mercurio 83,7

Agua 0,58 Estaño 64,0 Mica 0,35

Fibra de
Aire 0,02 0,03-0,07 Níquel 52,3
vidrio

Alcohol 0,16 Glicerina 0,29 Oro 308,2


Alpaca 29,1 Hierro 1,7 Parafina 0,21

Aluminio 209,3 Ladrillo 0,80 Plata 406,1-418,7

Ladrillo
Amianto 0,04 0,47-1,05 Plomo 35,0
refractario

Bronce 116-186 Latón 81-116 Vidrio 0,6-1,0

Zinc 106-140 Litio 301,2 Cobre 372,1-385,2


Si existe una diferencia de temperatura en el
interior de un líquido o un gas, es casi seguro
que se producirá un movimiento del fluido.
Este movimiento transfiere calor de una
parte del fluido a otra por un proceso
llamado convección. El movimiento del fluido
puede ser natural o forzado.
Si el líquido o gas se encuentra en el campo
gravitatorio, el fluido más caliente y menos
denso asciende, mientras que el fluido más
frío y más denso desciende.
Lo que se llama convección en sí, es el transporte de
calor por medio de las corrientes ascendente y
descendente del fluido.
Se incluye también el intercambio de energía entre
una superficie sólida y un fluido o por medio de una
bomba, un ventilador u otro dispositivo mecánico
(convección mecánica o asistida).
El calentamiento de una habitación mediante un radiador
no depende tanto de la radiación como de las corrientes
naturales de convección, que hacen que el aire caliente
suba hacia el techo y el aire frío del resto de la habitación
se dirija hacia el radiador. Debido a esto los radiadores
deben colocarse cerca del suelo el aire acondicionado
cerca del techo para que la eficiencia sea máxima.
La convección también determina el
movimiento de las grandes masas de aire sobre
la superficie terrestre, la acción de los vientos, la
formación de nubes, las corrientes oceánicas y
la transferencia de calor desde el interior del Sol
hasta su superficie.
Las llamas calientan el metal porque los gases de
combustión están en contacto con el fondo y le
transmiten el calor por conducción.
El metal transmite el calor al agua del fondo del
recipiente por conducción. El agua caliente del
fondo asciende, originando corrientes convectivas y
se mezcla con el agua fría.
Las paredes de los recipientes calientes emiten
radiación.
En el verano, en una carretera recalentada, se puede
ver como asciende de ella el aire caliente formando
una columnas oscilantes. También se ve a veces
como asciende el aire desde un radiador (el aire
caliente sube y el frío baja).

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