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EEOC R A eect R eet ee eee ee OL eee cativo desde una perspectiva sociohistorica. Sus ensayos abordan el problema de la génesis y el desarrollo de cier- Pere nner er Tees flexionar sobre los aleances de la intervencién del Estado Berets em eter es eee tr eee ers et ee eet error es eee Ce Bee eos Oe ena considera necesario “materializar” la propia historia de las ideas y las doctrinas educativas introduciendo el con- cepto de interés y lucha en el interior mismo de los cam- Pere eee eng ent tena teeta eee cate Ef oficio de! maestro a la lu Ceiacge eects El arte del buen maestro [Taro a ~ ie rd Rg oe fas) indice Introduecién, un Primera parte v 1 Consideraionestericas generales 1» { 11 Hacia una ciencia social histérica » i 2. Gonocer para transformar. El problema del Faro 43, Hl objeto: construccién minima 11 EDEstado capitalista en México... 1. Pamiculardades del desarollo de! Estido-nacién mexicano a 2. tas eontradicclones del iberaismo mexicano 41 3. El berlismo en el poder 6 4. El replanteamiento liberal de la cuestion del Estado ® 5, a imtegracién de México al mercado I teolgiy polite educa de ibraismea 37 | | | | | capiaise mnal st | | nado ¥ edueacion en el proyecto ber | | | clisico 7 2 Ideologia y politica edueativa del iberalismo cen el poster o 3, Expansion y racionalizaciGn de la forganizacion educativa del Estado 0 IV. Génesis del campo de la pedagogia mexicana 93 1. Pecagagia y politica 93 2. Pedagogia tradicional y pedagogia modema . 96 3. Flementos del paradigma pedagogico dominante m1 | 4. Luchas de intereses y luchas de doctinas 120 V__ Pedagogia y moral de clases ve BS 1. Eldesarollo del Estado moderno yy la definiein ce la moral lca Br Segunda parte. escuela y moral de clases ‘ementos de pedagoia moral Tipos de discipina y tipos dle dominacion Fl oficio del maestro: contradieciones iniciales 3 4 Las cuales clsicas: vocacin y moral 1a “cenufizcion” relava del oficio {a lucha por el reconocimiento social Ta lucha por la obligatoriedad de tiulo cde maestro VII Constraceién del Estado educador hegeménico (4917-1940) 1 x 3 Crisis del sistema de dominacion liberal ‘lgaquico y surgimiento del Estado de masas Lucha por la definiciin ideoldgiea del Estado educacor Tl desarrollo de la dimension organizativa del Estado edueador Expansion de la escolaidad y desarrollo de una pedagogia integral 1a expansion del Estado educador (1940-1980) Estado y sociedad a pani de kos anos Ia redefinickn Keologica det Estado educador Hl desarrollo evantitaivo y la divesificacién dle la organizacion escolar la racionalizacin de la pedagogia [a ricionalizacion de la organizacién educatva Perfil de un escenario para el futuro. 1 Hiacia una mocificacin de a rlacion Estado-sociedad edueacion Presupuestos de un modelo pedagégico para tuna sociedad autocregulada y plural Lis 156 166 181 182 12 199 210 241 286 305 305 310 314 319 331 335 335 339 Introducci6n “Todo discurso que reivindica un caricter “cientifico”tiende a ser Ubieado en una tradicin diseiplinaria 0 campo intelectual espe: ‘fico, Tratindose del ema de la educaci6n y a cultura y de sus Intereaciones con otros aspectos de la totalidad social, tl ubi- ‘caci6n no es sencilla, Muchas son las dsciplinas que se han inte- fesado por conocer ‘Io educativo. Eltrabajo que aqut presenta nos no pretende tener un caricer inter 0 multiisciplinaro. 'S hubiers que calicar 1a inencionalidad del cafoque empleado, lo mas adecuado sera decir que se trata de analizar “lgunas dimensiones del fenémeno educativo desde una pers pectiva sociohist6riea, De esta manera, hemos querido transi Eldifiel camino de la integracion entre sociologia e historia, Tos temas que nos interesan se stan en el presente. Este es ‘el punto de pattca. Si recurrimos al pasado To hacemos por dos trdenes de razones. Primero por conviccdn intelectual: creemos fque no pueden comprenderse ciertos aspectos de la realidad Sbaial recurriendo tnicumente al aliss de sus carsetriteas tetucturaes presentes. El estudio del lca dela genesis de un Fendmeno es un ingrediente basco para su explicacion integral Eh segurido lugar, la historizacin dela investigacion socio logica, al interrogarse por el origen de las relaciones e institucio- res del mundo de la cultura, ls relativiza y les hace perder el ‘arletersagrado que revindican todas las cosas que pretenden tuna existencia eterna, Aguila historia permite desbloquear ct presente y, de alguna manera, contrarrestarel efecto conserva or que tiene la ligica del “siempre fue asi, por lo tanto rend {que sequie send slempre a". Cuando Ios hombres toman con- ‘Geneia de la relatividad de las nstituciones sociales conquistan, n siempre procivea la sedcigin de los canto de sitena de todos fos idealism y los voluntarisos humanists Por ello, si se evakian ls eealzaciones del proyecto liber positvista por la distancia que las separa de sus metas ideals, Sediri que los logros no son muy relevantes Perosise considers Al mismo modelo ideal como parte de sus realizaciones, se puede deciraue aquél posce un valor tal que tasciende la €poca fe su gestacion, y se proyecta sobee los periods subsiguientes {lel proceso ce conformacion del sitema de educacion nacional 180 VI El oficio del maestro: contradicciones iniciales 1a lucha contra todos los tipos de panticularismos que obstacul van la hegemonia real del Estado modemno en consiruccién ‘quiere una relevancia particular en el frente educativo y cult ral La elite intelectual Hera se propuso constiuir a la naciGa ‘desde el punto de vista cultural. Esta politica se mateializo en. la definicign de un contenido cultural laico, dstinto dela con- {cepeion del mundo estracurada sobre patrones religiososy ra- Ulicionales; al mismo dempo sent6 las bases de un sistema de Jnculeacion deesta nueva cultura, Dicho sistema dia constitu Al homibre mexicano, al habitanre de an espacio-temonio bien determinado, en ciudadano de un Estado y mieminro de una misma nacionalidad, El sistema educativo 1uvo esta racionalidad initial. El proyecto de constitucién de un sistema nacional de cecueacion deberia realizarse mediante una especie de expropia: ‘Gon de los poderesculturales que se interponian enire el indivi- duo y el Estado (Iglesia, etmins, regionalsmos, corporaciones, tte), Patafaseando a Max Wever, podria decirse que el Estado reivindicd cl monopalio de la inculeacién de una especie de fondo contin de verdades a todos los ciudadanos. El sistema eduativo dea homogeneizar y unlformar, Par cello era necesario un discurso pedagoyico homogeneo que def fiers tanto los minimos cultures, es deeit, el saber edcativo legitimo, como los mesios leiimos de inculeacién. Para ls pro- positos de este estudio concebiremosal sistema educative nacio~ 181 pal come “un eesjunto nacional y diferenciado de instiuciones ‘exticadas a a educicion formal, cuyo control y supervision por Ja menos 3 parcaimente una responsabilidad del Gobierno cuyas partes y componentes estin relacionados unos con 1. Las cualidades clisicas: vocaci6n y moral El discurso pedagégico moderno no se consttuye negando las Ufiniciones csicas cle! maestro. Por el eontario, las recupens ¥y complement incorporindoles otros requisites. Jose Diaz Covarrubias era explictvalrespecto, “Epo de profesor ~escr- bi tal eomo, con usticia, lo desean los mas astres peclagagos, {es un conjunto de vintudes de tado género, y su mision no es un fico, es un sacerdocio’ #90 “un verdadero apostolao", como ‘decia Carlos Carrillo 2% Ia definicion es clara: el magisterio no se define como tinct profesién, sino como mision a sacenecio. HI wercicio de esta prictica requiere no tanto de wn saber cuanto de una sere de {Cualiktades de caricter ético-moral. La primera y ms impomante fs la vocacién. Esta deer complementase con un conjunto ce ‘icles de roo tipo. Ta ideologia de [a vocacion permea toda definiciin petage sica cela Funeién docente-1a vocacida noes materiadeeleceion ‘clonal, Es, al igual que el concepto teol6gico, un lamacio, na predsposicin quese define como innata, no acquird. "No hay ‘que olvidar ademas, que se nace educcdor, como se nace artis (Go decia Abraham Castellanos 1 En el mismo sentido se expresaba Leopoldo Kiel “entre as cualidades pedagégicas -eseribi- la principales Ia voraciin” 2 ames, Mare S Social nin of Bdnctonal Sasa Sue Pui er Lorn 19°, pi 5 Spt Create ie, ta smecie Palcn on Mic 6, el gc, ac, eg 1 ‘tin Cas Cong atin a serdar pea. 1a Bjorn a Bs lm, 3, ee 8, 182, Luego vienen “as cvalidades morales”, que son las “gue princ- palmente recomienda la Deontologia” #2 elemento vocacional se oponia explicitamente alas otT0s ccomponentes cisicos de uta profesion, en especial los que se relieren a canocimientos y hablidades que pueden y deben ser “fprendlidos. La oposicidn y la preferencia aparecen clara en el para siguiente: "Los mal informades por wn eniteri insano pidden que el maestro de escuela sea un sabio. Nada ms arbi fio (.) loque deseamos es queen la escucla haya mas vocacion, ‘ms prctca y menos teoria" 2 Yedro Alcintara Garcia, al enumerar las cualidades requet- das para aspicae la carera rormalisa seralaba que, a fala de wrovacion “espontinea” que es lo que siempre debiert set”) puena es la vocacién adquirida *mediante Ja reflexion y et cesfuerzo de la voluntad”2 ‘Sean esta concepcin, existen das tipas de voraciones: na natural (la autntica y deseable) y otra “anificial”, resultado die tinesfuerzo analiico y de una dscipina panicular. Esta segun ts ona especie de sucedineo de la primera, Lt operacion tiene Cin aentide pritico, se tata de otorgarie la “voeaeiin artificial ods ia fuera propia de la innata. De cualquier manera siempre xe pretende que el hacerse maestro no sea el simple resitado Tien cileulo racional o de una mera prevensioa utitari. ‘No se trata de elegirel magistero entre otros oficios posibes ‘ise habla de eleccion, ésta debe responder a una especie de pproisposiciSn, de un lamado interior. De esta manera se Ie Fuudiea al hecho de ser maesto una fuerza mistica que m0 ten [Br Cline Abou, Anatase Mra Geral. Peas Seven we dea a, le Ch, Boure Mes 1995, pi 4 Pei st a died ant. Br concur XL Mee 1990 pig ge AF tyne, Macros no sabios ta: Mévco islet spn XIV, Mei 198, 145 Tole Gan teks, Divecones resco det do de ser ft avo tenes Nera cad, dere ers de todo, En Ec Mere, I, i 3989. 188 lrins se presentara come lo que realmente es, es deci, el resul- tao dun proceso complejo donde intervienen miikiplescleter: minaciones sociales e ndividuales, Esta ieologia del mayiserio ‘roma vocaekin innata, como Veremos despues, ent en COA tiecién con tacas ls demandas de “ciensifizacion’ del ofteio tlocente, gue lo convierten pacialmente en “ofcio aprenclilo Por otra parte, la ideologia de la vocaci6n es eausa y efecto del bajo gro de recompensas y de reconocimiento socal de que ‘govabala profesién.a falta de estimulos matenaleseranecesario Constr ina demandla a partie del eerccio de una especie de ‘ilencia simbica sobre aquellos individuos que objetivamente cstaban mis predispuestos a"obedecer” el mado, De la voc tan docente los pedagogos de la Epoca declan que “silo el tdeseo de hacer el bien en el silencio y cn el olvido es el mei puro y verdadero de abrazara'23¥ Sin embargo, este esquem también entra en crisis (la crisis ce vocacion’), y a partir de tentoneces, como veremos luego, seri necesario auxiliar la fuerza fle la vocacidn con la promesa de incentivos ¥ recompensas Imateriales sj y ahora Gngreso, carrera, seguridat, et.) 80 meramente simbelicas y generalmente™post mortem” (dseursos de celebracion, consagmicén, etc.) Caricter "caged" del oficio. tle maesto y vocacion como elementos constittivs primarios Se complementary se presentan en todos los dliseursos que: prescriben el perfil del maestro ideal Hay que buscar la racionalidad de estas descripeiones en la Fancidn asignada al maesio ya fa instiuein escolar EI canictersagradlo dela misibn del maestro explica la ins rencia en defini las cuales sobre el polo moral-efectivo mis {que Sobre cl polo racional-cognitvo. Est se correspond tm. bign con la mision dominaote asignada a la insituciin escol cen li etapa del desarollo del Estado-Nacion en Mexico. Lae BF DI. A yD. G cachet de Pada. Capi Felina Del ater derail aes Ea ns Manz ini 5% eyes de 184 cu exaba orienta a formar clans mis que bombs Shion el au aco cscs Goerez—() los mastos Si encvelaejereen un veradro sacerdei, Henen “curt de alas ¢..)" 25° inte proyecto policaeokigico el maestro yt escucle cecum sobs too, eucadores, 1a nsteion, entenda como ‘Tainin ce conocnero y desarrollo de habiliades, tenia varpapal suondinad Por et abn, el maestro es defnkdo aasramtonpoo parma cel hombre cal ee se pretenca Tt predominio de objetivo de forma moral en a conse ciom na dea eseuela mesicanafvorel ln incorporacn de fhimujer i fancion docene. 1a fepresertacion socal dom rede fx mujra hacia pariculamente pu para eof, Lt tee educator moral por natura, Texts ogo are conveneidos de que astralmert,stnviment, fs SSupsesse gen hacia stares eoeatvas, hacia el cto Tho y mater de los nfo: ato prefieen et, para mada snk apes" ecto, as cuiades de earacter de a SRO, potea eva ceenc Lasmueres sn racosis dulces qh extn dete de "una atta infin de emocidn y de “or” Admit me, uh is peared lh chino” estos os incinan al deber por meio de la ae Gi cx mas efeaz que kn eamentos y represion que ceric ios macs. Ss termos tepoches proces es es equ lis amenaasy lara Wie de esos" 2° ect nctdo vie: set los pedagoges masculinos, "ts nur tene menores condiciones de rite algunas de pi tui convenient con e obj de madera un poco inl: ac Nal La Nae ide Rein del se. Iggy la Me, 1, spec, p13 Me a Apaie, 1. = Dae Car ne OP. pl RX 185 acgn, las mas de las veces exagerads, lo puramente ideal y fantistico, y de lear de conocimientos positivos para que pueda a Ta ver educar y ensefiar"29? Durante este periodo la ‘moje seincorporaa esta eruzada cultural para “cerca las ati- tudes tedicionales"y sustituilas por ls valores cemtficas’.28? Respecto a las eualdades morales que deben distinguie 4 todo maestro, Alcantara Garcia es por dems exigente; "Toul lo «que hagan los normalistas por aparecer como dechados ce ells sent poco’, como tambien seré poco “todo el empetio que pon ‘gan ensu compostura exter, en el asen de su cuerpo y limpiezt ide sus ropas, en adquirie Buenas manera, tato de gente, y en suuma, todo fo que contsbuya a presentarlos comportinlose con la dignidad exigida por las funciones propia del magiterio"2+ Este componente moral se exprest en mitples y expresivas Uefiniciones del maestro coma “apostol” 6 "mir dela reyene- ricin social “La causa de escuela es santa’ el trabajo en e Cs un “servicio divino”, EI maestro es “redentor de naciones” tiene la Thive para entra al augusto templo de la ciencia’, ete Si su pritica se define como misén, la cualidades exigidas part su coneeto cumplimiento también se ubicarin en ese plano no cognitvo. Podriamos clasficar las caracteristicas po cognitivas seal «das como deseables ¥ priontaias en este perfil del maestp ideal én dos tpos distintos 8) Caracterstieas morales y conduetuales que se expresan metliante ls siguientes voces: “entusiaymo”, “pacien- dia’, “perseverancia’, “dulzura, “ternura",“afabilidad ‘prilenri", honestidad”,"desinerés, “vida sin tacha’, Tirmera de caricte’, “caballersidad”, “abnegaciGn’, ‘entzegu’, Temperanca td pi, 08, 20 Manat Ay Komen. ls ad atom Me 890-128 ey ame ot meric ts Sere Pape 197, fides ach Re Op pa 8. ; 136 by Caractercas fiseas y de autopresentacién tales como cl pote exterior’, Tos buenos modiales’, "el tono de la ‘ow, la vista y los oid’, “vestimenta’ ete. A propesito Uceste aspecto existian en la epoca ebdigos pormenori ‘dos para regiamentar la presentacion Fsiea de fos maestros ante los dems. EL Marstm0 ise ave el maesro que exces temp del saber ‘rave 6 no evel vera, el genving sacerdote de ese t= aici precio conveniren qe ce que su mist no est88 “blime como lofi walo el mando pense ‘Shao iene fe en la eevela, sno ene fe en su ckvada nisin, no tend entasasmnsinentusaso profesional todo mest es mal, tanto ue nas parece criminal Para que el macs de escuela comprenda fodo to ele sa, tn ly noble, lo lo slime de so min, debe co nents por dgnificns mismo, esto es, por despovarse he ‘Dulane pesiones humans comvertise ara fos vecindarios ‘cr cjemplo constante de tas as wits; debe set eno, Teal tallleresco, elemento, en fn, de onfen para todos los vevinon Dignifcindose a sf mismo, dignifear su profeion s0 spentcauo le Jara tangas gees, ans scsaccones morales, hue le hatin agdable sv exerci 15 Feed curadera Fe balla en el compliiento les debe QUE fica mis grande puede dare qe cas ene los nies? "Aad, oft estos de escuca a fos nifios, y amare a ‘eta preston, De ete amor sacanés el mejor galanion te pasar Boetin e Elucacion de Santa Fe ‘México Intlectal amo XXIV, pags. 239-240 187 Sta important asignadaa los signos exteriones que indica el carcter ola personaliiad de los nividueses muy imponante para cl discurso pedagogico, Bs sinomitico que cuando se ent fmeran las cuales morales deseables en el maestro ideal, ‘menudo se indique ls nevesidad de aparecer como dechados Ue fe tanto yen cuanto se trata de cuaidades que solo son Gfictves si son reconocidas socilmente como tales. De esta manera que, contrariamente al dicho popular, el hbito tambien hhace al monje, Elaspecto exterog el queen forma inmediata se texpone ante los demi, clebe denotar las cualidacles interiones, ‘eualesasu vez se inculcan mediante la estate cel modelo, ‘maestro ideal -segin Carlos Carnllo (..) debe ser el ln ‘moral dela comunidad en que reside, el corazon eu ltido se Sienta en todas partes, porque es quien reparte la vida yel calor del sentimiento (7.3 Un componente basico de la autopresentaciin lo constitu yen “los modales’, mados de hablar o actuae frente lox dems con general y los alumnos en partcul. Asi, Sherwell recomen- aba al maestso no emplear“Iocuciones familiares, sino “el len iguaie mas puro que puede haber”, porque la escuela “es el tem- plo de la pureza’, “El cariao que debe profesar a sus alumnos ho eiebe llegar al extrema de hi falandad, pues en este C280 podria ccasionar "la perida del respeto” 29 Junto con fos “moxlales" se insiste fuertemente en ls cual clades propiamente fisicas que deben distngyiea un buen maes- fro, Al también, todas las exigencls se justifican en fo fanela- mental por rizanes aisciplinaras y morales. En efecto, las tualidades morales se expresan través de la consttucionfisiea Al cuerpo. Asi, un cuerpo sano delata una moral adecuada. A su veg, "los sulimientos fisicos se triducen en trastomos de ‘orden moral” 2¥ Ta robust, el vigor, [salu y fortaleza fisca TRE cat, Galo A Cnc dl msi a edad pase ap. 1 ere Clem. Cuts psa ae ds nn ef astro Ea Mime Ic on XN, oem TM, p57 138 cen general son necesarias para, en primer lugar, sobrellear “la pesada eaga del oficio de maestro, y en segundo lugar porque tstas propiedades le permiten al docente “hablar y obrar con cenergia y prudencia” 2 Pero li funeidn dsciplinaria de las cvalidades fiscas aparece mis claramente cuando se tata de indicaren detalle 1s rages Aleseables en el maestro ideal. Al respecto, los parrafos. que: sigien son sumamente elocuentes La sass aka, $i, yo ta he vist pela, degaducha, anémiea, caminando a eaves de carters y vereday, cst slempre jowen, ram vez {incana; pero a mend sonvionte y fable, marca pres al Uesempeto le us nbores, anu ysezens: yo ls inaalada ya en 0 huamlde escuela, ene asi iscpulos, tienes eauca valiéndose de los esses medio de que pure diaponer, peo sempre entsiat, siempre devinere: ida, fend [a suteola de a abneqacion y sestenita pork Frmea del mii adore ele desu vida sees en medic los mil il edentes que provoca esa banda de Hints que bate la als infects, oe sobre los alambres fmboados dela ort sobre ts usradas pigs el bro Ta eal feseas iss qu erompen come suaves bot res de rts en fit verge, que Bienen el ire como tmiiea ets cantoresalados de as selva; todo es bulico Salata, ones inseparbles de infarc, tue son es Ver ‘ides Angeles gadanes de los nides, puesto que siempre "vanen pos. Nis cespes de ashors de case, cuando las aves fan abandonadoel aula, slo queda aqui la pobre mae at fru por el abaya aan de fx enseran, arama pork fareasobehimans le madelar voluntades¥reprimicimpe tts ai permanere en meio de una anmdsfer veda pork Thi Tapa, tuo cee Seiad Baus Peat 8 Hoon ‘toi tlt, 8°16. Taccaa, aps 3 de 198 aa sespieacin de as esolares: ahi deseansa prepara a ena dl ia sigutente 0 entegidla fs meditiiones 2 que 1 ta amis ausente Después, cuando la wache cube con st arto els de ciel, cuando lasmustasLimparas de aceite vieren sus debs ‘ays en las negara de os allgores dels villreos, undo todo yace en silencio y hasta hs pesicisruedas le bas cares ‘Uormtan soventas en los cores de las casas la nati ble maces prepara sus alimentos pars enaeyarce luego al apetecklorepno, pss que as elas que se verican en as ‘adadeslasvariadasy milipls dtacciones de que sei one en Ine ents bin poblalo, son desconoeiins en Ios ‘omtoss Y ai transcoren semanas as sem, mses 6 tes, alow tras fos, ala ela de alguna de estos cts {de aquellos ios han abandons ol pueblo y «ues eon Instruclon ue recibcron en a exevelts igual deals, Iughan por I via con menos pena! en nko que la pobee sacsta sigue en frag fern y mis fa vests, pulnenvando yadevezand earsccres "Pobre mscural tu mist es lencows, pero uci: no tHenes no mos del hero is plats del iti as decoractnes el sabio, nicl aplauso dl ata; sas Cu labor e de cara, es como ae ens, de ame y de ha tlds por esa es grande ts labore imperecelera ts ob. ‘Benda sex México lntlocrual om, gnc 294. ‘Asi, como en a organizacin del ecto se hace una selec= cid de individuos yslo se ceptan parael servicio aquéllos que tiene una conformacién perfect, asi también en el cuerpo ‘docente yen las escuela noxmlesceberian exigise cients con tliciones (.). Veamos cules son estas exigencias, En primer lugar, la fomaleza fsica. “Supongamos a un mcstra con may buena voluntad para trabajar, pero debil y enclenaue, inept esostenerse en pie durante las horas de lise, cuya voz apenas se percibe y que revela en todo su aspecto la faa de Sal, 199 robustez y energia; a pesar de su magnifica voluntad har un fiasco y no pod imponers a los alunos’. Fortaleza y eneraia se justifican para mantener el principio de autoridad, “Puede ser tin maestro fuerte ysano sigue la descripeidn~ pero con la boc lida de lado, los 0408 desviados, las piemnas torcidas, jorobadio, fo con cualquier otra de esas deformidaces fisicas que no s6l0 hacen al individuo feo, sino que le dan un aspecto sible: con ‘es basta para que los ninos no le guarden el respeta debido a pesarde ser un buen maestro’. La deformacion fsica es conde~ bhable pant el oficio de maestro, no tanto en vitad de un entero testético, sino en razén de que “lo feo" puede Ficlmente conver tise en “rsible” a Hos oj de Tos alumnos, con el consiguiente Uebilitamiento del principio de autora. Pero no termina aqut teste“pliego de peticiones". Elaspirantea maestro “necesita tener buena vista para vigilar los nis hasta en sus mas insignfican tes movimientos, un ofdo fino paca pereibic todas las palabras los mis loves ruidos que se produzcan a su derredor; le movi- mnientos faciles para tasladarse violentamente « donde fuere necesarta su presencia (.)"™ Eleardetor material y externo de a disiplina dominante en cota époea hace que se dé gran imporancia a ls caracteristcas fsieas y de presentacion cle ls encargados de ejercera. La auto rida debe fasarse en a “energia’ la "sobustez”y, por ultimo, fen la fuerza. El maestro-vigilante debe poseet ls cuales & Tnculear y ademis debe esae en condiciones de reprimir eval: (quiee manifestacién de desorden que se presente en el al ‘Como las gueras clisias, la pedagogia discilinaria de la €poca se realizaba en un encuented “cuerpo a cuerpo” que exit del maestro destezas andlogas tls que cistinguéanal buen comba- tiente, La edueacion moral del akurmno, sin otra mediacidn que Ii persona del maestro, debia transcurse por la via del ejemplo, "Tener todas horas presente el valor incomparable del modelo” 2 onl Jose Me Dap exclu. Cociendo anaes Es a tron Primaria. To 6, 6, eer 1 le 19S, 25 ww sctibfa Dolores Correa Zapata 27 ate cimulo de exigencas del bfiio, que se firdamentan en Ia ereencia dle que el maestro Uehia tener mis de lo que debia incur, eercen una Fuerte pre Sn sobre fa persona de cada individuo cispuesto a tomar ests profesion, Est presion se hace mais fuerte cuando se agregan al perfil cldsico del maestro aquellas caracteriicas que se dervan bl desarollo de la ciencia y lx pedagogia moxlernas. 2. La“cientifizacion” relativa del officio Jurtocon estas cualidades morales, conductuaes y fiscas, el dis ‘curso pelagosico moderna inimdujo la necesidad de que el mmuestm, aclemis, tuviera “instruccion", "preparacion pedng®- era conocimientos cientificos. Aunque en una ict” esto es, taviert Ponicibn subortinads, las deserpciones de los naston iales ATesalguna manera siempre inclu agin componente racional. Es lamativo el hecho de que en una numeracin de 30 culidades de. seales en kos estudlantes de sormales, la primera de ea seal puntcldtad” ya “astencla as las piticas en ls Escuela _Anexa. En segundo lugar vee la "preparation pedaginies” De modo que, evtndo se sefalaba Ia necesidad Ge que el maestto, admis de vocacién, domine un conjunto de conc iminos, estos ng hacen tanto referencia al saber acumulado por fas cencias del metodo de easeRanza, Es indicative que la relacion ‘que & posta ene les y a ciencia muchas veces se define, tno en teminos de posesion o damini det saber, sino de “amor Inde” o “amor hacia la instruccicn”- Lo que el mexico parece : exsino un modo presetbirn es una apropiaciin profunda de saber tie weioon con d, una relacén de rspeto y de reconacimientn El macs no debe ser un "Sibi, sino cn asuntos de tori y rreaodos peelagigicos, yan aqui Gon cers espexifcaciones. Gomes Zara, Dolores ono de ev de profesor Br be ean Apna tose 81, Meo, eee 1 e196 "agi ago mods Ee tena, XUN, 190 we La acttud de los maestros frente al conocimiento cientifico, tal como se prescribe en la teoria pedaggigica, est fuertemente ppermeala de positivsmo, Si un rasgo distingue esta corriente floséifica es precisamente esa creencta, hoy un tanto cuestio- nada, en las vitudes del método y del Conocimicnto cientfico, Es una actitud de profunda veneracién la que los inelectuales profesaban hacia la ciencia (que a menudo se escribia con maydsculas) Bl maestro era el encargado, no tanto de difuncir «el conocimiento en si mismo, sina Ia creencia en sus potential Udades, el respeto por todo lo que esto significa. Ast como el sacerdote podia cumplir su misién de conversion y salvacion sin necesariamente ser un erudito en materas eoldgieas, el maestro rambién pociia cumplireficazmente su labor sin ser un sabio, Canto mas, deberian poser Ia instruccién minima como para constiturse en “obreros destinados a difundic y volgarizar las conquistas dela ciencia entre las masas analfabéicas”. Al mes two de educacién bisica se le asigna principalmente la funcidn, de vulgarizacin del saber cientifico. Hay que tomar en cuenta que en esta etapa consttuiva del sistema de educacién bisica los conocimientos ainculearse digi al desarrollo de habia des minimas en el campo del cileulo y la leto-escitur, unto con nociones minimas de cienclas naturales, Hl resto del saber tscolar (la fustora, Ix edueaciOn moral, et), estaba dingido 3 formar ciudaianos y no individuos instruides. Dada esta racio: ‘alidad histériea, se comprenden las lmitaciones impuestas al ‘conoimiento requerido para cl ejrcicio de la funcidn clocente, Esta contadiccion entre el sabio y el maestro era laramente per- cibid por los pedagogos del periodo que analizamos. Por un lado identificaban al “catedeitico” y por el ote al “maestro” El primero es “et erudito, el conservador de la ciencia, de a cual ‘conoce todo su proceso (..). Guarda las opiniones de autores antiguas y se encuenia en reac con los modernos, Present las verdades reveladas por sf mismas. Expone este t otto autor, sin decir tl vex a cual se adhiere, y procura, enfin, salvar en todos casos su responsabilidad”, Siempre su responsabilidad es 195 con el saber y no con otras personas. En cambio, ef maestro ‘puede aceptar para sus trabajos algunos cuadros 0 madlelos ya delineadios" en read debe tomar posicin, no puede ni debe Ser prescindente. Sus proplas creenclas deben ser explicias, debe creer en lo que v2 2 inculear. Al maestro no le compete ‘Sgumentar el caudal de noticias hist6ricas acerea de 1a Ciencia su proceso, sino de templar los caracteres para la vida? 'HLamor sin limites la clencia y una sabiduria minima le ba. tan al educador. El caricter de la funcida impone una adecuada Cdosificacin entre cienciay cualidades morales. a que definia ala prictica pedagogica como cientfica era no tan el contenido que ineucaba cuanto el método que usiizaba ‘Aqui si habia unanimkdad en reclamar el conocimiento dela Gencia pedagogies para hacet un buen maesto. El desarrollo incipieree ie un nuevo saber, la pedagogy el consecvente interés de los pedagoges, inflayen para que en la defnicn ciisca el maestro Fleal se incorpore esta nueva exigencia: el conocimiento dt metodo pedagigcn, “EL maestro necesita dos drdenes dle conoci- ‘mientos -escribia Gutiéez~ ls del sabioy ls del pedagogo”. El conocimiento de metodologia de la educacion y lt ense- fhanza tenia una especifcidad propia, stinta de la metodologia {elas ciencias, otentada a la procuccién de conocimiento cien~ tiico, Al menos esta es la posicién dominante en la Epoca, an “cuando algunos pedagogos se oponian a realizar esta dstincon. En realidad se trata de una cuestin de énfasisy de valoracion, Bs exe saber el que diferenciaba a las primeras Escuelas Norma~ Jes de los tadicionales Instituto literarios que ya existian en Republica. Castellanos decia que “la diferencia entre el maestro Yvericruzano y los demis maestros no estaba en la cultura pos tiva sino en la preparacidn pedagogica’ 1 ‘Mowe de Oca, F Maen y Catteni BsenunsaPrimari some il 8 a, 1 deme de 1508 "SiGe, Manuel op [St Covelanos Aha, opt pgs 1213. 194 tos pedagogos se encontraban entonces ante la necesidad de legiimar este nuevo tipo de saber formal objetivado, y no pocas woes tuvieron que Iuchar contra la incomprension de burs intelectuales tadicionales que erticaban ala insttuciones hhormales porque “se ensefaba mucha Pedagogia y Poca cies ‘Ga’, Bs precisamente este interés en justifiar un nuevo tpe de Saber, lo que explicalainsstenca y cl precominio que el mismo a veces legaa tener en el discurso de la época. No hay duda de {que es.agui donde comienzan adiferencars las pricticasorien- tidas = la producein (clencia) y reproduccion (ensefianza) del omacimiento, A partir de eatonces, las rlaciones entre centf- tos especilistas 7 Gentiicos pedagogos comienzan a ser con- ficivas El tema de las ariculaciones entre produccion de cono ‘cimiento y reproduccin del mismo no ha sido todavia resuelto tena aetualidad y es materia de discusion y propuestas perma- rents. ‘Yeamos con mls detalle eémo se presenta en este periodo la diseusi6n, El maestro pedagogo, a diferencia det maestro ‘empitica (por mis sabio que fuera éste) posee la “ciencia de tensear, Mientras que antes de la constitucién del campo de la pecagogia “se suponia ervGneamente que la preparaciéa cient fica es a sufciente” abora se tata de darle "la preferencia ala rmetodologia de la ensenanza y la educacion’. Esta diferencia “Supone una distineién o dvisién: no es lo mismo la metodoloxt dela eieacia que la metodologia de la educacion y la enseftanza Este timo es el nuevo saber en busea dela legtimacion. No es {que el maesto tradicional no "supiera ensefar”o no tuviera un ‘método”, lo que sucedia es que "sabia", esto es, “poscia” un suber prictico, no objetivado y codificado bajo la forma de axio- mas, prncipies y reglas explicias. Cuando este saber se forma~ Tize, necesita set aprendido mediante una prictca explicta de aprendizaje en un momento y espacio especiioos: la instit.io nes y edtedras de educacidn pedagosica Besde entonees, el buen maestt debe conocer el méxodo. Yano basta conocer el cootenido y el saber pedaogico prictico. 195 como consecuencia de ello, la vocacién se complementa con ta forma racional y *centifica” en materia de pedagogia. De nin. [guna manera esto significa una negacién de los elementos trai SSonales de la definiciin del maesto, En realidad, lo que sucede tes una agregacién de risgos cacionales al perfl “wocacional” y “moralizante” de la funcién docente. Est “innovacion’” intro duce una nucva contradiccién o tension en los elementos const tutivos de I definicion El buen maesim es una combinacidn historicamente variable de vocacién, cualidades morales, conocimiento pedsgégico y ‘onocimiento de contenido, Cada paradigma pedagégico y cada €poca historia “dosifican” de un modo diferente a cada uno de ‘estos components. Tas necesidades propias del momento de la leyiimacién cobligan a enftizar el "componente pedagSgico” conta el com> ponente “ce contenido”. Al mismo tempo, proponen una articu- Thoin inestable y contradictoia entre “conocimiento del metodo” e “intuicén”, En efecto, pese al ambiente de a époce, tan proclivea adjudicar a las eencias virudes y poderes extra0r- dlinaros, los pedagogos no renunciaban a adjuicartanta impor. tancla ala “personalidad del maestro" como al conacimiento de Josmétodos. Sila pedagogia era definida por esos clisicos como un “ane cientifico” el maesto, a su vez, también debia ser un ‘Gentifico y un anista, El "método” era constderado 0 tanto como un conjunto detalado de prescripciones que deberian determinar la prictica del maestro, sino como un instrumento ‘que, una vez colocado en la mano de cada maestro, era uilizado Seguin enterios y “estos” personales, as contradieciones ariba apuntadas se reflefan en el pisrao siguiente: “Del mismo modo, como cada esenitor tiene un estilo propio, cel verdadero maestro iene su método propio. El factor mis mporante en la ensefanza, cs siempre Ia personalidad del ‘maestro: su caricter, el grado de su cultura intelectual y moral {linterés que toma en su profesién, el cariio que le inspiran los 196 ifs, el eatusiasmo que siemte por su alto y noble minister, Este factor individual del método, que la pedagogia alemana ‘cesigna con e! nombre de tono o espintu de la ensenana, no puede naturalmente someterse a reglas y precepts, como Suede on lt aca y forma dela enseanza pero n0 por esto ja de influir poderosamente en los resultados dela misma”? De esta manera, aunque ciena dimensidn “teenie” (Ia deno- rminada “marcha de la ensefanza”) preseribe con cieto detale Toque hay que hacer", el maestro iene un amplio campo para cjercer la ceatividad. Esta posibilidad es tanto mas real cuanto {que se reconoia que “est todavia en pariales la ciencia que en primer lugar ha de guiar al edyeacor” Testa dlefensa de la irreducible autonomi del maestro en fa prictica escolar alquiece mayor elevancias se tienen en cuenta les embates ce eienas tendencias *metodologizantes” que pre: tencien hacer cel macsto "el simple instrumento mevinico Ge lun metodo que deta ss resultados [a naturaeza de sus proce dimientos y no ala habilidad del que to practique” 2 Por ell s¢inssta en que “en el verdadero educador existe algo como und intuiciéa, como una especie de inteligencia inconsciente que le thumina en los momentos mis difcles y fe hhace encontraf, como por vias de inspiracion, lo adecuado y fo bueno (..) el verdadero pedagogo tiene su genio protector 3 semcjanza del ‘demonio’ de Sderates”=4 Tir ceencia en la ciencia, en el caso de la pedagogia, tenia sus limites tanto en el hecho ya sefalado de! subdesarrollo ela tivo de la ciencia de ln educact6n, como en la persistenci ire tluctble de elementos tradicionales no racionales ya apuntados, Estos iitimos constituyen una barrera al proceso de racionaliza: CG de as prcticas pedagogicasy, hast cierto punto, difcultan cl proceso de unifermacion y homogeneizacion de métodos ¥ SS id, i 2 3 Be, 285.05 197 contenidos educativos que la politica se proponia lograr Porotra parte los particularismos y la ibertad itrinscea del arte de ense ‘ar se jusifican en la medida en que el maestro, en su prictica, se debe enfentar con “Ta indole particular de cada alumno” de lk que no se pueda considerar al maestro come un “simple cle- futor de un reglamento escolar que nunca puede prever todos tos casos" maestro “moderna” ya no ¢ el engranaje mecinico de un fordenamiento que, al gual que en la escuela Lancasteriana, {nica detalladay anticipadamente cada uno de los movimientos| del ofcio. El ofcio de ensefar, tal como To desenibe ! discurso pedagogico modrno, se va parecendo més aun juego, donde resistencia de reglas no impide que cada movimiento prictico del maestro obedezca a una “esratewia" elegida entre un con- junto de estrategias posibies. ‘Como consecuencia de lo anterior, la wéenica no es conce: bida como eficaz en sf misma, sino que es til en In media en. fque va acompafada de otras condiciones de realizacién que {hen fuera del marco de su propia especficdad, No basta seguir ‘eerupulosamente las indicaciones de un procedimiento para SGhtener el resultado deseado, “Aunque dos maestros observen Teligiosamente todo To que sobre el método prescribe la Fedago- fia los resultados sorén muy distincos: si el uno es entusiasta y tivo, el oer indiferente y apitico; el una es franco y el oD hipseita; el uno eaniRoso y cones, el oto spero y grosero” Ip que se observa, en Suma, e& que el predominio reivindl- cade por lo pedagégico” lo es sobre el contenido y no sobre Ta "vocacién” y las cualidades “lisicas" de oficio de enseda, Ta instruccion, aunque subordinada de racionaidad cient fica en el oficio del maestro, fundamenta la necesidad de inst tucionalizar la formacion de docentes. La génesis y expansion Uclsistema de Escuelas Normales que se registra en ese period = td. pie 5B dd, pas 205-304, 198 1 la discusin sobre la exigencia de tiullo para ejercer Ia profe Sion constituyen indicadores le una modilicacién profunda det oficio de ensefar. su vez, los nuevos procedimients de ingre- So al oficio redefinen al magisterio como estamento social y re= plantean et problema de las recompensas materiales y simbol fas que reclben de la sociedad 3, Lalucha por el reconocimiento social 1 magisteri, como todo grupo o case socal, tiene una existe cia doble2” El estamento magisterial ene un primer nivel de texistencia, que podemos denominar objetiva-material, Desde teste punto de vista pose una serie de propiedades que pueden medise a través de la estadisca socal: edad promedio, ingreso, Composicion sexual, escolaridad, lugar de residencia, propie dad, ec. Pero este nivel no agoea toa la realidad de un fend ‘meno social. ste existe tambien como representacion y como reconocimiento socialmente producido. De exe medlo, un ‘Objeto sociales tal come materialidad objetiva e independiente dela voluntad ya conciencia y como representacion social. Esta Siltina, si bien se construye a partir de la primera, no es simple~ ‘mente su ceflejy 0 su reproduceion en el plano cle Ia concienct [as representaciones sociales tienen su autonomia y eficiencia relativas. De esta manera conteibuye en la produccion del objeto representado. Por ello es importante inclilas en el aniss. A {raves del discursa de los propos maestros podemos inerir ei ce la posicion que la sociedad les asigna. En Tas paginas que Such mene sos mage epics ain ‘Examinaremos primero algunos hechos. ama la atencion cl divoreo entre Ia gran cantidad de reconocimiento simbslico {a pobreza de las recompensas materiales que el Estado (et ‘Gon espera concept de case sta aguas, ver Bout, Pe sre tacsietion Crug scald gemer. Les tun de Mino, gran empleador) le dispensa al magisterio, Cuando se trata de ‘cfnir ycalifiear la fancin social det magistero, tanto los fan. ‘comarios como fos ponavoces del magisterio no ahorran califie. tives, La contradiceiin se manfiesa en muchos diseursos de la {Epoea, Veamos un eemplo: (.) no hay palabras en el kenge Fomano que signfiquen toda la grandeza, tou la excelsid, fonds Ta abnegacion sublime del maestro de Escuela, y mis an Cando exe noble y Augusto ministerio se ejrce (..) 2s sin recompensa 2 {En realidad, aunque los maestros son conscientes de este con- fico y lo viven como tal, en términas puramente ideales no hay ontadiceién, En efecto, el maestro es mas digno de elogio, thus celebrado, cuanto mas grandes son su abnegacion,sacrifieio teesinterés. En realidad, el maesto es prisionero de a definicién octal que: se hace de su ofici. Y es al mismo tempo cémplice Cuando él misma compare esta creencia, $4 cl magisteno se efine como sicemocio, pretender recompensais materiales Conurprodacente si se quiere obtener prestiio. misma bi‘ ‘qua explicita de presigio es condenada Si mision es grande, cS precisemente porque “ninguna es tan penoss, ninguna re- “quiere tanta sbnegacion, tanto desinterés, tanto patiotsmo” 2 Por esta razon, cvalqier paso que déel macsio tras el Logo de mejoras materiales corre el nesgo de ser interpretido como tuna defeccién, como una debilidad ‘Pese a hi grandeza proclamada de su misién, el magisterio hha sido desde su onigen una profesi6n com bajo reconocimiento foal, Precsems: bajo recanacimiento de aquellos que tienen Th eapacklad de juzgar y hacer que sus juicios tengan un peso ‘specifica particular Por ello esta stuacién no es contradictoria fam el hecho cierto del respetoy reconncimiento que las comuni- tlades populates del campo y de la ciudad dispeasan al maestro, Scribe Pivtica del cao Meier... In. 2, ts tpi del mar. nar Sees Th $0.4, 19, st 7 200 T ‘Ya Diaz Covamubias mencionaba el “esprestigio" dela pro fesién docente; y que "ejas de considerarla digna de los hom bes selecos le relega a a gran masa dc kos que no se jzear iptos para otra cosa”? La misoa expresion "maestro- ene Congro Naclomal ede struc Pca Unico pt le stones mp ce“ Faro ber Meio IBS pl. as esate ‘prods en ea mae gaan e pigs 577 y 78 207 1996, se constituye en todo un acontecimiento, sta decisién det ‘gobernador del Estado se erige en “ejemplo que todos los gober- ‘nadores deberian seguie’. En un comentario de la época se sefala que “hoy (..) los maestros de escuela estin expuesios a perecer de hambre legidos a la vejez, 0 a ser sorprendidos en ln indigencia mas descarnada’. Con los 40 pesos de sueldo in cial, Jos maestros “se pueden mantener comicndo lechugas ‘como los coneios(.)¥ apenas les queda para cubrir sus necesi- ‘dads mas urgentes’27” Alas malas condiciones inci de trae bajo se agregaba la ausencia de carer, a ini esperanza de ascenso para el maestro que se iniciaba en el servicio era llega ‘a director, cargo al cual se accodia no tanto por la excelencia ddemosirada en el wabajo, sino por otros factores, Por ello se Ihicieron ofr voces que reclamaban ‘Sucesivos ascensos en fun ‘id del minima de anos de servicio”? El propio Secretario de Instruceién Piblica, en un discurso pronunciado en 1905, retera su voluntad de mejorar as condiciones de vida de los maestros. All es dice: “estis educados en el cumplimtento del deber, por €1 lo stcrifctis todo", pero al mismo tempo se compromete logeae para ellos "las Fecompensas merecidas” puesto que, aun- {que “vuestto nivel moral es bien alto", es preciso “levantar mais, mis wuestto nivel social" 2” a segunda gran via propuesta para elevar la condicion social del magistero era la frralizacin ce su formacién profe- sonal. La creacin de las Normales y la exigencia de tulo para jercer el oficio se inseniben parcalmenre dena de este ligica, “Alli donde las Escuelas Normales se han creado con mayor © menor acieno ~escribia un pedagogo~ af el nombre de esos mares del saber, de esos abnegados agricultores de la inteli- [FF fener, Cayetano mato de escuaubad, En Mico Inet tor Xl, 8 sary 3 de 198, pp 17817 {St he Olam y How ne Eo Lawman Noval. 1. 2 ag de 108, p19, ‘Sr, tl Et Lar awa Normal a1 N12 gt 9 de 1915, ig 7 208 {gencia al ser pronunciado con menes desdén es presta algunos Faris en la marcha fatgosa que rene que realizar através de ia ‘diferencia publics"? La escolatzacion del aprendizaie del ‘maestro y el titulo noemalista se ascician con su profesionaliza- tid, entendida como formacion de un “cuerpo independiente ¥y prestigioso". EI mismo autor afiemaba que el profesorado n0) ‘edste todavia como “una afectiva clase social”, como una "an pacién determinada y concreta. En efecto, recién comenzaban a presentarse algunas condiciones objetivas para la constinucion del “espinta de cuerpo” de los maestos, El magisteio no exist ‘como gremio de iguales, porque quienes lo ejercian no eran ‘quales. Esaban diferenciados por miliples factors culturales, religiosos, institucional, et, Lejos de estar consttuides por profesionales que viven de Ja docencia, ! campo de la edueacién preparatora y profesio- nal, al decir de la épaca, estaba también ocupado por s presi- puesto ~die un aniculsta~ que era preciso llevar a esa “meras figuras decoraivas'.Acaso faltaba una suma en todo trance, ¥ esta se hizo por medio de una citedra-). También se denun aba a esa especte de profesores constiuida por aquellos que toma @ las institueiones edueativas como “cuarteles de invll- dos, en donde van a tomar descanso cierto8 pro-hombres que, alefados de la vida publica, apelan a emprender el camino que siguieron les pocos sabios que en el mundo han sido" 3" "Heterogeneidad de formaciin, de condiciones de tabaio, de ingreso, ete, dficultaban todavia la constinucion de los maestros ‘como cuerpo social organizado, Con la creacion de las Escuelas Normales no sélo se perseguia profesionalizar al docente, sino también elevaslo soctalmente, En este sentido, el De. Ruiz compa ‘aba al antigo profesorado, “que no era ni én su esencia men ‘Su representacion social toda lo que hublera sido de desearse", 2 fees cancer, Meso pend. sta Bsc Moder, ‘ype i 399 dpi 0 con el nuevo edacador “itulado y de reconocida aptitud”. Por Tkimo,agregaba signficatvamente que ahora "no escasean en si Conjunto los profesores de verdadera imporancia social”? ‘Mediarte el mejoramiento de zs rebuciones materiales y sim- Dolicas de los maestros y la progresiva difusion del normalismo, se pretendlia lograr que “un niimero considerable de personas hhonorables y capaces" "se dediquen a tan noble profesion’ 2 4, La lucha por la obligatoriedad del titulo de maestro La disputa por los ttalas no es exclusiva del imbito magisterial Para una comprension mis exhaustiva del asunto es conve niente examina e problema desde una perspectva mis general El proceso de nacionalizacién de la vida politica, econdmica y ‘social se rele en forma conereta en los debates parlamentarios que en este periodo se desarollaron alrededor del problema de Jareglamentacin del ariculotercero de a Consttucion de 1857, cen especial en lo que hace laexigencia de tus para el ej co de las profesiones, 4a) HE eo y las profesiones =] objetivo de unifeacin nactonal exigia un mayor control por parte del poder ejecutivo central. Ba efecto, el increment dela ‘movilidad de las personas y la crculaci6n de los profesionales por todo el tertorio nacional, es decir, la constitucidn de un mercatlo profesional nacional, comienza a plantear la necesidad de un suievo modo de coor social de las hablidades indvi- Guiles. Mientras el mercado no trascendier los limites de las ‘comuniclades locales, pod sostenerse un procedimiento tradi ‘ional de centficacin de saberes. Ls relaciones sociales son pr ‘mtias y cada indviduo vale en tanto y en cuanto demostraba, ‘con Su prietica cotdiana, sus capackdades para resolver proble: BE tL Bop ct pin 30 28 Bae Gorath, op tp CXL 210 ¥ mas especificos, Se 6s soctalmente habilitado en virtd de una trayectora publica, conocida por todos los integrantes de la ‘Comunidad. Pero cuando las suaciones locales y comporativas Son parciaimente disuelia por el cesarollo le las comunicacio: ‘hes en el nivel nacional, os ceteris y estilo de aprendizaie par ticular tuvieron que serreemplazados porotros de valde mais ‘general, Este proceso supone wn aprendizaje formal y una ere ‘dencialzacion de los saberes y habilidades. Tn esta materia, el atculo 3#de la consirucin de 1857 todavia gual una cena conespondencia con una stuacion cartcterzads porla existencia de una pluralidad de mercados locales y elatva mnente cerrados. la iberad de ensefary aprender segin modal ads, contends, ritmos, et, diferentes que ali se consagra es fnginicarespecto a la pluralidad «ke mercados antes seialada. En 1857 Diaz Covarrbias era un ferviente defensor del princi pio de libertad de profesiones. Estas son sus principales razon Inientos: parte diciendo que no hay razén para confunci la ther tid de ensefianza con la ibenad de profesiones. Puede existir ina Sin la ofra. Hecha esta aclaraciin giea manifiesta su "inmens impati poros dos principles, pues “ambos estin encaminados {LTaaltarel desarrollo espontineo de a Ciencia cl uno en su pro- pagacion y el otro en ss aplicaciones’? Fsin supone que todo ‘Gudadano es hbre de ejercr Ia profesiOn de su preferencia, sin ‘que el Fado o cualquier otra instancia le exija ningin requisito particular para hacerlo, El mismo Diaz Covarrubis cia las ciicas §5u posicin "La autortzacon a todos para cere cualquier pro- fesin sin titulo ni diploma alguno que garantie de algin modo su competencia, no es mis que la autorizacinal charlatanensmo, ¥ylasancidn dle peligro constante de que ia vida, los intereses, kt hhonra de cada chicladano, queen a merced de la ignorancia ela aurlaca”. Ademis, entre otras cosas esa libertad no estima Ja adguisicin de conocimientes verdaderas, ‘proctuciéndose el doble peruicio del amnso de la ciencia misma, y de privar a un. Diaz Gov Jt, Op ct pg, CRIN au sociedad de os provechos que de las aplicaciones cientifcas ‘puede sacar’, Por ilkimo, “scl Estado no vigila el aprendizaj, los teximenes y la expedicidn de tiulos, la ensefianza seri siempre incompleta, podr ser muchas veces inmoral, y el ejrcico de Ia profesiin respectvallegara a ser alguna vez, lajecucion de ver ‘daderos crimenes'29 Para questo autor “todos estos raciocinios ‘deseansan en una flaca". Esta consiste en suponer que si n0 se texigen los titles se prodci el predominioy ain el monopolio {ela ignorancia y de todos los males que se le adjudican, Detris de ese rizonamtento hay un supuesto que Diaz Covarrubias rechaza; éste es “declarara la sociedad incompetente para cuidar de sus propios intereses” Como puede observarse, la bert profesional descansa en ‘tema instaneia en a teora cisica del mercado. Déjese libertad para que cada quien offezca sus servicios (0 productos) y siem- pre tiunfara lo mejor, lo més conveniente, merced 2 la sancion {el pablico, que ala larga nunca se equivoca. Mas abn, la misma, libertad es una condicion del progreso. “Et resultado de a liber tad a todos para ejercer un trabajo cualquiera, es precisamente ‘el que est trabajo se eerza mejor y por las mejores, pues en vez {le un monopolio anifical y ariteano, en favor de unos pocos, ‘s¢ consitirt el monopolio (sai se le quiere llamar) natural & indestructible del talento y del saber; monopolio que admit la {incorporacion de todo lo que es digno, y que no es mis que una aplicacién de a ley del progreso” 6 De alguna manera ls tess ce Diaz Covarrubias constiuyen ‘una manifestacin mis dela clésica oposicién liberal a todo tipo tle monopoli o control eorporativo de las actividades sociales, Por otro lado, son hasta cierto punto racionales y adecundas 3 CGetascircunstancias hisricas. Cuando los individues viven en ‘comunidades pequenas, donde las interacciones Son cara: aa, ¥ donde todos se conocen entresi,y cuando esta situaci6a coin 3 hd. pia CROC GOCE > fd, pag COR CIOORN, a2 ide con un estado prictico del saber, cada uno “aprende” Ios foficios en forma espontinea, no instiucionalizada y acredtado Su conocimiento en la prietica. Sin embargo, ya comencaban a insinuarse en el México de la época algunas transformaciones socivecondmicas que poofan en exsis tanto el estado de los Saberes como las priticas que nos conciernen, ‘Con elcorrer de los sos y & medida que se expandlian las condiciones objetivas de su emergencia (urbanizacion, desarto- lio de las comunicaciones, difusion del saber cientiico-edrico, te), se van consolidando los intereses y las argumentaciones te Ios partidarios de! ejercicio controlado de ls profesiones. La ‘conformacidn de un mercado nacional de profesionists, impul- ‘sada por la ereciente movilidad de la fuerza de wabajo, obliga 4 la homogeneizacion de las caiicaciones mediante fa unifor- ‘mation de los medios de aprendizaje y de los mecanismos de reconocimiento social (1 ttlo). A fines de la década de os aos sesent, la prensa dela capital se Iucia eco de fs stuaciones producidas por la creciente movill- ad de los profesonales en todo el temitorio de la Replica. Con respecto a una Escuela de Medicina que funcionaba en Pcbla afir- ‘aba que se ataba de una“ofcina de farmacia, en cuya wastiend, ¥ sin aparatos de ringura especie, se suclen aplicar lgerisimas pociones de las Gencias médicis. Basta que un individuo concurra lun af a aquella tema para que se le examine y aprucbe’, Pero Jo poor de tclo, lo mis crtcable, er que ese individuo, “armado ‘con es tuo, recore los Estudos y viene a México, donde e! Con- Sep la Junta Diectvarecenoce su tuo y ke pemite ejecer” 2” ‘Desde este momento comienzaa desarollarse una dialética centre [as tesis ¢inzreses de les partidarios de la libertad de eer Cicio de las profesionesy los partdarios de la reglamentacién y ‘exigencia de titulo homogeneos. [> onmoy, Guntaupe struct Pea Be Cosi Vlg, Dane i teva era de Men a pubs ecrack Vda Soca Ms Bue ov ies. Ea Heres 17, pl 735, os intentos reglamentarios de las profesiones en el nivel nacional busean legitimar un tipo particular de aprendizae y de Saber, frente ala pluralidad de saberes entonces existentes. Por festa raz6in la extensin de la legslacién en este campo, ademis ide acompanar la génesis de las profesiones modernas en ‘México, constituye un indicador del desarollo del control estatal de la cultura y de los procesos de inculcaciin legitimos en todo ‘el teritorio del Esado-Nacisn, Esta reglamentacién unifiada es lo que permite hacer inter- camiables los ttulos, otongindoes un valor nacional y no sola ‘mente local, Para ello se equiere de una instancia centaliza- dora, regiamentariay fscalizadora. Este es otro factor pexteroso {que impulsa hacia una creciente intervencin del Fstado en los asuntos pedagégicos, con la subsecuente “expropiacién’ de los pariculares como instancias radicionales de inculcaci6n. Con la Aparicion del curiculum y del titulo unificado, aparece también ‘una neva forma de capital, el capital escolar, garantizado ins tucionalmente y socialmente reconocida de saber 1a conformacién de un mercado nacional de tiulos fue el resultado dle un proceso lento y de avances parciales. El primer proyect parlamentaro de reglamentacidn de ls profestones es ppresentado por Hilarion Frias y Soto en 1879. En dicho proyecto Se proponia exgir titulo alos profesores de las escuela feviera Jes, alos notarios, los ingenieros de minas, ensayadores y spar. ‘adores de metales, farmacéuticos, médicos, dentists y partros. El proyecto fue aprobacto. En 1880 se insiste con otro proyecto; sin embargo, ls discu- siones se hacen complejas y prolongadas, lo cval impide legat 44 un resultado conereto. Todos estos’ fracasos y demons Cemestran que lo que caracteriza ala época es el debate acerca ela libertad de ensenar. Por una parte estin ls que objetiva mente defienden los inereses consttuides (los pardarios de la "RF Bound, ae, fas tated capstaelturel r-Actes db ecto chen Sconces Scie 3", nomen 1979 BS. 56. a4 libertad esta de ensefianza); porta otra, los intelectuales ong nicos de las “fuerzas del progreso”, que conskderaban que éste ose el resulkado automatico de histori, sino que necestaba {le Ia ayuda dela fuerza del poder piblico. En 1880, el proyecto Suscit cinco dias de debates continuos en el Congreso, All se tafrentaron los que opinaban que al lado de cada libertad habia {que establecer una limitaci6n, para haceraefectiva,y los que con Skleraban que esa tesis era un contasentido. Para estos times, ia exigencia de tiulos no sélo era inconstitucional, contaria ala vigeneia de ls liberades, sino que era un imposible material. Por ‘ira pate, como afm el delegado Bulnes ante el Segundo Con: lgreso de Instrucidn Publica, "Colin no tenia ttl, Vasco de Gama tampoco, Pasteur no tenia tiulo de médico, ni Io tenian tampoca Lesseps, Prinell, Stephenson, Corse ni Edison” 2 “Tal er la celacin de fuereas entre los grupos en pugna, que todavia en 1900 la diputaciin sinaloense propuso desempolvar el proyecto de 1880, que habia sido aprobado por la Cmara de Diputados en 1882, pero no por el Senado. EI nuevo proyecto, se fundamentaba en la necesidad de “combat la chariatanenia de quienes otecian en la prensa curarla esterlidad y los males secretes, en diez dias, mediante rayos X, © con aplicaciones durante el sueno de ‘cnturones chispeantes”.2° ‘Nuevament se solctaba la posesin de utulas para los abo- dos, notarios, ingenieros, médicos, arquitectos, parteros, den fstas y farmacéuticos. En 1901 se rechaz6 el proyecto con un fngumento clisico; "porque sus siete primeros artculos hacan hegatona la liberad de enseftanca al pretender reglamentara; { pese a declaar libre e} ejercicio profesional, era mayor el metas de excepciones que Ia regia") "Deb del seu Congreso de msc Piblca oi 196 3 Gontile Svar Moise reton Pua Conk Vege, Deni oer oder desks E pore, ida oct. Hees MES Tene Aer pas 53. oad pas 8. 25 Coo argumeno uilizado por la mayoria ae que “inva segimea inten de los eas Las hvala a a conser (eign del sans que mramente se mponian sobre is ferzas ‘imme norman, Oban der thos dcbtes, oslo scencucrtan los arguments ieolgicos $ consnacotales sho aningn sere agiels prof Zones sin tuo, que de alguna manersestin dispyestos 2 teconocer la emia de su saber ¥ despre, y sobre th, o esindspuestos 4 cer ss ponicone. irae la conisia dctaminadra de 1901 acont6 que cl ers de las pofetone seria ire en el Distt y Terno- sve patos deuce tin Sse eeria con tule ilo no pov a toren estos intents aralmente fracasados, mona desea el hecho de qelas rfesones se desrolaro sgn Ceram enone pane snc om Coal, cormuyendo asa genes de los eampes pote Sfonales moma. El patato pais jig papel muy impor fare on ete procs. Bs presamente en estat donde las profesones comenzur a exablecr, con Ex, ss props {ems de exchnlvdad Todo ete proceso costtuye ambien un imponanve indcador de buroertzicin de la administacion hat mismo emp cue cere una tnfuencapostva ene Sfesnollo del apartoedvatvo profesional >= nos son algunos delos epson lus argumertaciones de tun conao muy reveador de as raneforaciones que estaban cen vas de venieascen exe period, Yeamros aor, eon mor Slee, cs parcalr del debate en orn ala perinenca dl thule parse ero de Is decent [Al ape o ecaeaar eon alguns platens ue ce ‘Weber pepsin dela easin ene deo yl rpodo di einai Spc cin cen de aber ee “i rotenonatesy aria deepen duesedan ernest frome, Wet Max Bean y Sota. Mei, CE, 15. 216 by Maestros “empiricas" es maestros “ida” _Ato largo de dol perio que estamos considerando seis aan inmintensa y continuada discusion acerea cle a pertinencit “Te caigr titulo para el eeeicio dela funcién cocerte. Las pol aeseeficron casi sempre muy acusadas y oponian intertocuto uc aramente identificades. Nos corresponde aor analizar “igunos momentos relevantes de Ia dlscusion, deserbir 8 los aarrycs en puga, como también los sistemas ce arguments arin aizados. in embargo, esta descripein es cde algin modo ae) mental. En efecto, Io mas importante sera descubri sig ae pcacton de estas luchas, esto es, Klentifiear aque que stabs cara en los eonficios. 2Que es lo que se csputaba en eas olemicas? dina inerprtacion jreico-consttuctonal el Povs'y de ta constitycion dle 1857? ze monopolio de una activ: SN sociale lina expropiacion de cis Facultades de los macs: a aicionales? Aa impasiciin de un nuevo saber “tecxice ere on sabcres pricticos? En realidad se tata de todo «0 a! ‘mismo tiempo, Te disemson sobre la perinencia de titulo permite recons muir odos los enfuerzos"instituyentes” de una nueva legtimilad rear calturaly edicatva. Bs un campo de andisis prvi ‘Gad para comprender as estates Y 1s intcreses de os Prin, Spas seton de proceso de conformacion de un nuevo cimpo sie aber En realidad, ese proceso comporta distintas arenas de taba, distintas opesiciones analitcas y un mismo proyecto glo» tr trstuctonalizar fas pricicas pedagOnicas, e310 es, a7 Hannes precisos ene sabores legos y saberes no legitimos verre Pevjeadores legiimos ¢ inculcadores no legitimos: ifr, seta deconstnuirun campo de produccion y de crcl ss exaberes pedagogicas con todo efecto de dstincion qe cea aptiea, Camo en todo momento fundacional, es mis (ei) See aqui la Waa desnuda de las instinuciones que fa tra creas enearga hie de proteger bajo ls formas eufemizadas si iscurso ¥ bajo todas Ms formas prenectoras de los efectos 27 clenatralrcininstinconal. Hoy ena nadie cuestons ais ttc dl ul normal pare Geer a fanein de esto, tte consenso encraizido obsacizae ands de abi, edd hasta ce su fadimentos eno pales, ott fecodel orien, Como comecuenla, eas clones ad Churn contncci deo dad deo que samp cia Sten ora ptabis, "de lo acura Lis iscusones acerca de top enchant paso de un ngtinidad 1 or, 0 bien, de un moo degra foro. to supone uct sabes y agers de nelson Tegmos La expansion de un stra nacional de encianzay Ia consttoctn del campo dels sabres petagogos son los Soe poees fiers que condcinan serena, lel ser peagogico doa el estado pric par leaner cenos gras te fertizacon 7 olsen, deben cambiar fe todos de Sprenla.Ets dn de ser xponincsy stan 3 pla eos yalcades,antesbasabe aprender conten pars ‘Sher edo ensearon ahora req apices yun cone fume natucones (as Normal espscalad paren {Sc arene, Hl tber pcos domes ot pricica fort noes sufcene ls drain pice ara aranta I poses de xe aber pedo formal So "abe" quen puede ated, metarte una cefeactn instore {aher educate: Al pcp es ua pres Lego sr na topes de manopolo Enea prnsn scaly conga (ih capaci eduesivo meds woo un conlune de exateisY de luchas expropitras cons x poscdore el saber emp tio taticonal sustuchts se ean parealmente ens puts prlaexigenci de tulos par cece el agen. tr elas apumensciones etn lon nerese de sion bean por una pan lo pedagqos eSicon’, predictoes 0 Consumo de un cscs oly genet impotade, Y polos os masses rplncon Gt eee ar esp Waa y lichen por d matneninicn de sue prog 7 posloneseapectas ene campo de ls dca, 28 Analicemos ahora Tos angumentos y tratemos cle reeonsrut los interesesy las estaleglas Hisieas. De los aproximadamente 8,000 maestros en eerciclo que habia en 1857, dice Diaz Cova trubias que es dificil saber cuantos esti ttuladas o "merezcan teste nombre por haberse dedicado a extudios especiales y cle- ‘eadlisimos de esta carrera’.® Estos, segin el autor, serian unos 5.000, En esta época, slo sels estados enfan escuelas Noemales nla capital an no habia una escuela para formar maestros. Esta situacion era responsable de fa “falta de ciencia y método” de la ‘mayoria de los profesones. "i desde este momento comienzan a advertise las ventas dela insttucionalizaciin de los procesos de formaciéin de maes teos. Aun cuando es posible que el maestto pueda “formarse por mismo”, ls institciones especalizadas “abrevian el tempo ‘dc estudio” y “unen la teora ala prietica”. La “novedad” de las ‘Normales consiste precisamente en eso: enriquecer la pret fon el conocimiento te6rico, propio de la pedagogia moderna 8 segundo Congreso de Instruccin Piblica, que sesiond desde e 29 de noviembre de 1990 hasta el 28 de ebro de 1891, tliscutié ampliamente la eueston de la conveniencia y legit ‘dad juridiea dela exigencia de titulo para ejercer el magistero, Eltema provoct largos e intenso debates. En ello se reflejan las principales posicones y argumentaciones en compctencia $l tema de los tus sve como catlizador de toda una serie de conflctos y oposiciones de intereses que dividen al mismo lgrupo dominante de intelectuales. El enfrentamiento no s6l0 se Timito a la esfera "éenico-pedagogica’, sino que lego hasta ‘muterias de indole politico-ideologica més general, tales como Tn interpretaciin del Art. $8 de la Consuitucién de 1857 yel papel del Estado con respecto a Ia sociedad, {a pregunta que motivs el debate fue Ia siguiente: conforme: al An 3¥ de la Consitocién, el profesor de instruccion primaria ‘lemental necesita ttl para su ejercicio? Los congresistas acor- 25 pyar Gawaes Jse Ot ri. CV 219 dlaron que la pregunta contenia dos grandes aspevtes distintos ¥y complementaos. El primero es el "aspexto teenico-pedags- _sie", es deci, kt conveniencia del slo analizada a la hz de lo ‘que recomiendan las teorias 0 deologias educativas vigentes. 6 ‘tro aspecto concierne ala legal del veulo ala luz dela inter- pretacin de las disposiciones constitucionales. Pero ala inevitable existencia de los matices, el debate pola- ‘76 alos congresistas en dos grupos que se enfrentaron ea dos arenas de lucha, Por un lado estaban los que pugnaban por la leitimidad pedagdica y consttucional dl titulo, y por el ovo aquelles que Fh cuestionaban y la negaban. RELACION ENTRE ESTADOS DEL SATER FEDAGOEACO, -MODOS DE AFHENDIZAE¥ ACREDIEACION Swen scneo Exon erin (ete bajo forma de eapendeeneindc) (Ge recone al macs experince ber cer niacin, 2) (ene le forma de tees Seager en scr el el fis, leyen Genes cbs Mey enpeitas Laser saecen tere un (ics, ee, y ge cel pam ¥ Ul) Faimenie es exeto) dune peas pe ages omer a ce dng bs sets ‘Sern i ig hepa mates ‘Bins aun amu bbe (F Muna, geno ‘icy nc rs (hd ohn ss Fan ed stn vac ay pe i ae thea Peon aig, Pe une dena 9 alin Te ‘elon cay Antara ofelicaton and afc Ne ‘Conc Piety 9 ly Fs condos Paton ee ae, 17, Cin A Co poo nwt oy Mo an, London, 1979. ee 220 a euestion téenico-pedageigica VYeamos primero las argumentaciones mas inmedliatas, e510 3, las tGenico-pedagogicas. En este plano se registra una lucha ‘donde, por un lado estin los representantes de los intereses pevlagigicos, poseedores del nuevo conocimiento “literario” foerea de la educaci6n, y por el ouo estin los representantes de in tradicién, poseedores de un conocimiento educative empi- rico, Los primeros constituyen la fuerza emergente en busca de ‘econocimiento, son los que quieren modifica la realidad a s favor, por ello rewindican la fuerza de las ideas y el poder dela ciencia, Los otros aetna a defensiva, no estin persuadids de ia superioridad del conocimiento, pedagogico y reivindican la lesitimidad de la realidad tal como es, y la enigen en limite del {deal Son los pragmaticos, “realistas’ a los que como el ing Francisco Bulnes (representante dle Morelos) “les preacupa muy ppoco la euestion constitucional” y la subordinan a la “euestion ‘econveniencia’ a cual, a su vez est subordinada por "la eues- ‘adn de posibilidad’ 2 Los paridarios del utulo se amparan en tuna concepciGn de la ciencia yen una concepcion cientifiea le ta pedagogia. Ea es definca como “ciencia y arte de la educa- tidn’, que “estodia las leyes del desarollo fisico intelectual, ‘oral y esttico del hombre” 2® Como tal, es un saber cstinto Ul contenido que el maestrodebe inculca y del “saber ensetiar™ fempisico de Ios maestros, Este saber peulagogico formal es muy famplio y consiste “en el conocimiento ce todos los sistemas, imétodos y procedimientos empleados enlaensebanza,antiguos: yymeodernos, buenos y mals.) Elmaestro necesita saber ade fds cdmo se desempetta una cétedra, como se forma los pro- fpramas de ensefanza, Le es indispensable darse cuenta exacts ‘dela naturalera del nino en general, del carter especial de cada Tepid Cars Insc Pi 1890-1891 en aan elo ano Sonu Coraeso Ge ep ct i So" atan magenta ba Comin le Tu Segundo Comers de P pie 8 22 alumno, dll modo como se dessrollan sus facultades toa y le Ja manera de adaptar su ensefanza a esos datos”. Para que ede claro cl estatuto de este ctimulo de conocimientos, el dic- imen espccifee que debe ser “flosdlco, tedrico y pritieo” > Filosofico y esrico quiere decir objetivador, discursvo, “centi- Fico’, y que sélo puede ser aprendido meciante un aprendizaje fad hoc, 0 es, separdo de la prictica. Este conocimiento, resultaco del “progreso de la flosoiay la pedagogia moderna’, se considera superior toda forma de saber anterior El dictamen llega a afirmar que “és mejor un maesiro con un méttxo cul fquiera, por mis antiquo que éste sea, que sin metodo 0 con un ‘conoeimiento deficiente de los métodos modemnos". De modo ‘que “el titulo de capacitaci6n es una condicién impuesta al ‘cuerpo dlocente en nombre de la ciencia y de la eivilizacién” Las acversaros al rulo no profesan la misma aeimiracién y respeto por la clencia pedagogica. Contr la pretends exclus!- viddad de los pedagogos, Bulnes reivindica el clisico He et doce del evangelio y enfatiza:“Ensefar no ese aributo del pedagogo recompensido por el Esto, es el deber de todo hombre hon ado”. Ala exigencia ce conocimientoteérico Alosfico de las leyes y métodos dle la ciencia pedagogica oponen la voeacion, la moralicad y la pectica, ls cuales no pueden aprenderse en las Normales ni“comprobaese por medio de examen’. Manterol (representante de Txcala)afirmaba que “si es imporante que cl individuo tenga jnszruccion, es mis importante todavia que tenga prictica en la ensenanza y que teng:t-moralidad’ 2 ‘mismo Carlos Camillo, considerado como uno de los mas emi- rentes pedagoggos mexicanes de la época, pero marginado del grupo intelectual dominante, se declaraba en contra de los ‘monopolies iasituidos por los "gremios itearios © clentificns" Al ecorer la dstinelén entre conocimiento weéico y saber pric> 2 Net ane de. i 19 22 tico.en materia de pedagogia, dlecia que un buen autor de escr- tos pedagégicos no puede demostrar por medio de ellos "st ‘aptiud para la ensenanza’ 2 Su desvalorizacion del saber 6 Fieo-pedagogico se manifesta cuando jusifica el caso de un padre de familia que no tiene interés en que su hijo sea educado por un maestro ‘que sepa historia de ln pedagogia”o idiomas cextanjeros. ero el ataque mas agudo contra la pedagoxia cintitiea pro viene del Dr. Manuel Flores, delegado ce Aguascalientes Haciendo gala de un eazonamiento muy afinado y audaz, are ‘mete contra un cogma dela época que ls posiivstas aceptaban tin discusion: “creer que Genciay libertad son la misma cosa. Contra el sentido comiin de los inelectuales de entonces, s0s- tiene que "por diferencias del saber, viene la diferencia del poder” y “cl despotismo de las minorias”. Como ejemplo men- ‘ona el paso del crstianismo primitivo, comunitaio, donde el Saber religioso estaba “al aleance de todo el mundo” al crstia- histo organizado, centralizado y con un saber teol6ico, ciscur- ‘Sivo, euyo poseedor es el fale, més intligente, més conocedor, mis sabio que el pueblo’ 2” El pedagogo se asimila al frale en ‘hu pretension de ser el propietaro del saber legitimo en asuntos ‘ie edueaciOn, Flores denuncia crudamente este intento y seal fos peligros que entrafa este monopolio. La pedagogia, par él no es como la medicina o et derecho, porque “nunca tenemos Gpomtunidad, hasta que no vamos la escuela de medicina, de fprender medicina; nunca tenemos oporunidad de aprencler jisprudencia, hasta que no vamos ala escuela de Derecho" en ‘Cambio, “si aprendemos a pedagosia empirica desde que apren. ‘Jemos a leer Yo puedo, sihe tenido un maestro que me ence, tenscaar por los mismos procedimientos que se han empleado conmigo" 3" 2 ad i. 3 2d, gs 217-208 oo ie aes 23 Esta tess arma, en sintesis, que la distancia que separa la rmedicina cientifica del curanderismo es mayor que la distancia, {que hay entre pedagogia centifica y pedagogia empiric. Esa, fina es considerada viable y legitma, por ello es defendida, ‘contra Jos embates de lo cietiicos ‘Algunas declaraciones de los congresistas permiten identifi carlos infereses que estin detris de estas argumentaciones. in, realidad la lucha opone a los poseedotes de dos upos de saber. El hombre que adquiere ciera suma de conocimientos pedagé. sgcos ~re2a el dictamen de la Comisién de Titulos~ obtiene por Su trabajo un capital moral.) una propiedad para cuya seguri, ‘dad necesita de garantas,y si ésas han de dispensarse (..) se ‘mata el estimulo para el culivo de las ciencias” 2 Lo que an. ‘ulviente la Comision es que también los maestros empificos poscen un saber que para ells vale como capital ios tituladas ‘Guieren proteger ¥ valoraae su “eapial moral’, fo tienen que Tracer costa de la desvalonzecion del saber empirico, ¥ eto no se log en forma pacifiea, puesto que ex poco probable que los espeneidos consientan ei hecho de la desposesion, Por ello, el ‘delegado Ricardo Gémez propone, como una manera cle cone Tiara las partes en lucha, que se recomiende “con toda precision yy dlaridad que los maestros actuslmente en eercicio, conser ‘arin el derecho adquifido y suficientemente comproiado por Jos aios que evan de experiencia, Creia Gémez que sise hacia, ‘esta salvedad, “Tos sefores representantes que en este momento, festin dispuesos a votar en. conura del dictamen, lo aceptar El dictamen proponia en ss primer apartado que "la clencia vy lasintereses sociales eeclaman de consuno que se ex tila Al profesor de instruccin primara, fjndose por la ley los e808 de excepcidn forzosa”, Sin embargo, este monopolio ocupacio= hal en los consideranclos del dictumen se reforzaba por un 3 tha, pi 2. 208 ha pe 224 ‘monopolio de formacion. En efecto alse lee que "Las Escuelas [Normales dehen sr la Unicas autorizadas para calificar la apetud de los aspirants al tiulo de profesores de insraccidn primaria (C2) De este modo se evitari que los ayuntamientos Ww otras cor. jporaciones no docentes puedan habiltar profesores(.)".% Por flo, la defensa del utulo es la defensa del normalismo, En esa Gpoca dice Gomez que la Escuela Normal de México “puede considerarse desiena” y que “on gran trabajo llega a recibir un. hnimero eseaso de alumnos, yes necesario recurtiral pariotismo {le los yobernadores para que envien pensionados, casi puede Ueciese que no van espontineamente a pedir la instruccién para hacemse profesores”. cA que se debe esta situacién? Sucede que cl extudiante tiene derecho « preguntarse: ene penn been pot, kas code eaves ‘ional a atte totem | abner ate |S Sita deteeducon | 4 +e detest | afr dl tess pion geo coo voecn ar |p inporanc dea = ieceragemascen cs reine Scr praca ved mate, abu, sa a ae cer tesco | ee mot rc dela ib pe pends epnioco |" vatay elaine compen de de i eeactn oe 08 hid, i 8 25 saido la serie de estudio ysteificios que yo he sufidoY” Conciu- Sion, hay que “crear la necesidad de la escucla”.% Ya estamos muy lejos del discurso que define al maestro con la ideologia cle In vocacin y el desinterés, la €poca del apastolado ya no perte- neve al presente”, sentencia Gomez, “i socitiad necesita profe: Cores profesionales (,) y no esperar que vengan apéstoles de Te ensehanza que la rediman’ 5° Ahora la vocacion es secunda- a, “el futuro maest0, al pasar por tods la serie de pruebas 2 que Ube estar sujet (en las Normals), por mas que ao tenga vor ‘ida estari dotado de conocimientos indispensables (..) 2° Cer ‘antes Imaz iba més all, Talera su confianza en la ciencia peda- ‘popica que ctefa que las Escuelas Normales, “mediante a ciencia } la vied’, imprimirin en el maestro “el verdadero cardcter del Apdstol ce la ensenanza” 9 De modo que el apostolado y Ia Lbmegacin también se ensefan. Ambas exclsvidades, a labo- fal yl de formacién, persiguen tambien otro objetivo: elevar el Feconocimiento socal del maestro. Elan de dstineion provoca {que se lancen los mis dros calificaivos a los maestros empit- os. Estos son lamados “ineptos", “ignorantes", “rutinaros", Sadvenedizos de la instraccion”, aficionados’, “remendones de fa ensefianza’, “incompetentes”y hasta "sacristanes dela escue- Tn" qpata no abandonar, ni en este terreno, la analogiaeclestis- tica), Se esperaba que el titulo (al igual que un "vitulo de no- bless") dignifiear al maestro, "Dia vendri ~declaraba Aguilar, presidente de la Comisién de Titulos~en que se cespeten Ios fue Fos del macsto, y esto sera cuando el titulo dé acceso en tan digno sacerdocio sé alos escogidos y no ala escona, no alos ‘que por su ineptiud se fugan de todas las profestones, de todos [bs oficios, yd todo trabajo digno, para refugiase en la nica {que por hoy se puede eercer sin estudis, la profesién del macs to de escuela primar” 2 En cambio, les que se oponen al ed oe dad 2 ud, pa 29 fd, pi. 38 26 tuto reen que “apna a did yrascndenci del maestro no dependen de ques le exo nl ao respect, Sino deo gush cess fncones 2 Buln era mss crssico © itnico: Slow maestros Ge excela ben tener funcones Suguta deci deten ser soberanos ens pofen, yew se demuestra no con ello en a mano, sino on el sitema ne Mfoso en actividad, en su steno del profexorado’3 Cuando le arguments temic pedagogcos no erin men cionados, os que se oponian la olgatoiedad de titulo a ‘fan izones de tipo pricico para deme a inconveniencla € imposbilad de Gecuar una daposcin de exe Upo. En fern chn go ee gael eno ais er mycoses pa el rao pico, nto en oe ‘Prefereasufermacion como aa sreuneaconescomespon- dientes, puesto que a un profesor nomalst nose le podla arb mismo que see pga un “afionado", Con x ag tnenacién los opostores al uo eviciaban la pimacia de infin de i enefanea sobre su prfeconaminuo, “Hay 12 nllones dehambrentor de pan ntletal-lamaaBulnes- ¥ pa cos 1 llones hay slsmente 12 profesores ils Ee esel nuevo evento de los 12 panes" Alqunos represen: tanes nose oponfana que se exigier hula en as escula of tiles, pero de ninguna maner lo aeptaban en las parculres Cifos Carlo, Mantel, Lombardo cifundian, en nombre de laiberad de enseRaneayde ar inudes deal competes, tino cblgtoiedad dl pars la excucls parle. Be ffeme problemilco no es més que un pesto Indico dela Cueto de fos tls, Est cuestontrcende el campo de a pedagogia y revela is dviiin Keclogica que crates aL Enpo inteletal dla epoca tat. ve 17 30 at ig. 12 32 Bd, 198 ar a custo juridico-deolegica ecordemos qv a pregunta qu motive debate dit: con Peano aco de a Consul reso de instrvcin Feiss noses lo pars su jeri? Po sums formula ign aba por descontada su perinencla pelagic ¥ solo pom en tn segunda joi, propio minis Joagutn Barada, on su discus inaugural del res Congreso de instruct ble, dclara exc stan que la nseuecén para "no debien confasea mae serene, sino que quid fuera neces deca Ue el Trjccond pecestatulo par su gerio, decarcén que Uipeen a exage del teu dela Cnstiucon Fede” 6 ves que pra el mit, a exigencia de ilo 0 so ra Ce tite oide el puso de wea pedagoglc, sino que Teen“ en fa Concituion vig. Sn embargo. est tare amplamentecucstonaa en os Congress de ns ‘Son lanlclo de a Constucgn de 1857 cee "Laersehanza ihre tey ceterranara que resonesnecestan elo para SeeeeiGoy con que equstosdeben expels” Alededor de SAE ese td tipo de exegesis ieresadas. Para ore emachunea, en leas del profesone, es una protein, ir Toran es eo ex ul paras ico, Para os, Eeacnanzs noes une protein, ysl fare, como dei to Se etiicndo una posdn smerior, debi ser bre Sein Sesfecprtscton, "hs profesiones son bres on snl ey ia lems solo una cs entommente ie, Ta profeson Je traearos'3 28 Mis alld de las exégesis intepretaciones este dliber- cdamente enmarcadas en la “ciencia juridica’, nos iteresaclestacar ‘aguas principales opasicionesideoldagicas que se manifesta. De alguna manera, la exigencia 0 no del culo de maesteo pponta en jbego una determinada concepeiin del Estado y de su papel en a sociedad o, lo que es lo mismo, una manera particu- lar de entender Ia relactin indivi sociedad. ‘No pretendemos tratar aqui con exhaustividad una proble- initia que se encuentra en el cento del debate en el movi ‘miento liberal mexicano, sino analizar sus manifesticones con- ‘retas en esta coyuntura histérca, Eldicamen sobre ttulos sefala que “la misma escueta liberal se encuentra dividida acerea de la itezpretacin que deba dase a la libertad de enseftanza" >" En real, ls liberales se er teuentran divides respecto de concepta mismo de liberia. Exi- _sirttula para gjercer la docencia significa lmitarel derecho.a je ‘cer libremente una profesién. din virud de que razonamiento puede establecerse esta resin? Por ls “peligeos que ofrece”, Y los “Uafos ineparables” que pueden acarear a la nite Ios ‘maestros incompetentes. La libertad de enseranza no es absolut ‘sino condicionada por los interetes que tascienden al iniviuo, Elpegreso” y el "adelanto', segin los panidaros del titulo, son el resultado del “saerfcio de Ia liberal”. “Ningiin hombre consigue la verdad nie progreso, a ningéin beneficio en la vida vyenlatiera, sino es imitindose, sulfiendo y haciendo verdade: fos sacrificios” Estas limitaciones eran absolutamente condenadas por los ppaniclarios de I libertad si restrcciones. En esto seguian lac sca consigna de Frieto en la Consttuyente de 1856; “querer Iibertad de enseftanza y vigiancia del gobierno es querer luz y tinieblas(..) y tener miedo al Hbertad”. Bulnes era muy claro lrespecto: “ao ha habido stentado, oposicién o ult en conten ‘dela libertad, que no haya reconocido como oxigen un principio 6 Seguro Congron de. 1 preteetor adherido a la autordad. Ahora (.) Ia Comision (eT {los nos habla de que va a salvarnos de la mala ensenanza(.) hhablade tania, quiere favorecernos, quiere protegernos, quiere defendernos, quiere salvarnos; seri preciso ir preparando nves- tea conciencia para que sex marcaca como la piel de esclavo y ‘ciear en ese herradera, de las ideas (..) cuando nos hallemos “deniro del despotismo que en nombre de a libertad nos ha pro- tegido, démosle las gracias (..)°31° Sh este angumento Gémez Flores, defensor de los ttulos res pond“ libertad de los que nos impugnan es la nocién mixtii- {aa y romantica, cl concept abstruso, la dea en su period de sgestcion metafisica, mientris que nosotros raemos al debate el oneepto positivo de libertad (.).” Esta ibertad “metafsica’ tipiea de los encilopedistas del sgio XVII. "Hoy -sigue Gomez Flores- es un anacronisma, uta poetica anigualla¢.) Hoy que= femos ser libres, peto dentro de la ley, cle la armonia, de a cen: (Ga 31 Bate es el conceptacientfico y positivo de libertad, “lees te-seren modo algun incompatible con el orden real, consist {en seguir obedientes y sumisos a ls leyes propia y correspon ‘ientes del caso", De ello se sigue que ser libre es elec bien, ¥ elegir bien es hacerlo conforme a lo que dictan la cienciay tas eyes, Por eso es necesario que el Estado, a través del contol de Tostituloy fe diga al padre de fami: “lifhay una escuela donde tus hijos serin educados bajo los sistemas que como buenos ha pprociamado la moderna Pedagogla"3!* ‘Mientras unos encommiaban ala inicativa privada y te adjudl- ‘caban todas las maravillas que en of mundo han sido, los orros ten boca de Cisneros Cimara, afirmaban que "ta iniciauva n0 feiste en la Repiblica”, Mis atin, estaban persuadidos que “eas todos los adelantas se ccben alos esfuerzos del Gobierno: Ios ferocarles, los telégratos, los vapores, los progresos de a ins i, pig 197 3 a ie 200 3 tad, pag. 21223, 230 z teueeidn’, Concluye saristico Cisneros Cimara: "Die que aésta (a iniisiva privada) hasta hoy no le dlebemos nada; pero me Tre equivocal; le debemos wes cosas: as plazas de toros, los gatos y las casas de tolerancia’ 39 ‘Junto con el tema del ibera se pone en dscusion et. con- ?” Bata insistencia en los fundamentos personales de la autor clad, que Max Weber resume en el concepto de carisma, consti- tuycott indicador del predominio, enesteperiodo, ce una def- hiclén tradicional del maesto. Sin embargo, predominio no “quiere decir exclusividad ni tampoco elimina el conflict, sino {que seentiende como pute de un proceso de lucha donde incet- Vienen no s6lo argumentaciones y conceptos, sino interests ¥ posicines de poder, {5 Con eapauoa ee problema segvinnsas inane ttn de Pee Soul em el tapas) eed Ts sud peice dle io La epraeton Flements our ne ri dsysome ersgnerert Ls i igs de Mit at, 1970p. 2646 » 70, SP scan, Abhay och pi ONS 239

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