Scribd Logo
Cargar

¡Te damos la bienvenida a Scribd!

  • Bases Del Psicodrama.

    Cargado por

    Yari Carrizo
    139 vistas232 páginas
    -

    Derechos de autor

    © © All Rights Reserved

    Formatos disponibles

    PDF o lea en línea desde Scribd

    ¿Le pareció útil este documento?

    ¿Este contenido es inapropiado?

    Denunciar este documento
    -

    Copyright:

    © All Rights Reserved
    Descargue como PDF o lea en línea desde Scribd
    Marcar por contenido inapropiado
    139 vistas232 páginas

    Bases Del Psicodrama.

    Cargado por

    Yari Carrizo
    -

    Copyright:

    © All Rights Reserved
    Descargue como PDF o lea en línea desde Scribd
    Marcar por contenido inapropiado
    de 232
    Bases, psicodrama ADAMBLATNER @ EL LIBRO MUERE CUANDO LO FOTOCOPIAN Amigo lector: La obra que usted tiene en sus manos es muy valiosa, pues el autor vertié en ella conocimientos, experiencia y afios de trabajo. El editor ha procurado dar una presentacién digna a su contenido y pone su empefio y recursos para difundirla ampliamente, por medio de su red de comercializacién. Cuando usted fotocopia este libro, o adquiere una copia “pirata”, el autor y el editor dejan de percibir lo que les permite recuperar la inversion que han realizado, y ello fomenta el desaliento de la creacién de nuevas obras. La reproduccién no autorizada de obras protegidas por el derecho de autor, ademas de ser un delito, dafia !a creatividad y limita la difusién de la cultura. Si usted necesita un ejemplar del libro y no le es posible conseguirlo, le rogamos hacérnoslo saber. No dude en comunicarse con nosotros. Eorrortat Pax MEXICO LORY Titulo de la obra en inglés: Foundations of Prychodrama Publicada por Springer Publishing Company, Inc., N.Y., E.U.A. ‘CoorpiNnacion eprroriat: Matilde Schoenfeld Portapa: Victor M. Santos Gally © 2000 Springer Publishing Company, Inc. © 2005 Editorial Pax México, Libreria Carlos Cesarman S.A. Ay. Cuauhtémoc 1430 Col. Santa Cruz Atoyac México D.F. 03310 Teléfono: 5605 7677 Eax: 5605 7600 Correo electrénico: editorialpax@editorialpax.com Pagina web: www.editorialpax.com Primera edicign ISBN 968-860-610-3 Reservados todos los derechos Impreso en México / Printed in Mexico Indice - Conjuntos de inserumestoe ; Aplicaciones Elementos constituyentes y terminologia Terminologia: la eleccién de las palabras. - Ejemplo upico de dramatizacién Copyrighted material ag yore eeerer™ aplej BaDESE epecoiiiber ce Conve A Copyrighted material Una contemplacién mds profunda_. Hicsdinsmniel ds Wagoaenaial Una energia no conservable Un estimulance de Te creatividad RD Cabdeamicnty ooo seen eee n nnn neeennrssrinnnnes 83 CarfruLo, 9, JUEGO, IMAGINACION, REALIDAD SUPLEMENTARIA. 87 87 Realidad suplementaria . 89 Implicaciones s+. = Una idée fixe de Moreno OR Reencantamiento ... 93 Vida en abundancia . - 93 CAPITULO 10, EXPRESION Y ACCION 4.02.0 ...,sssessesssssisesss 7 ‘Actuacién, representacién ¢ insight. ..sseeseetesseeseeeees 98 Shblimediie. asss eres ee OD Hambre de actos . Consumacién de actos Expansién del sentido del self’ . Caldeamiento fisico .... Modos de expresién del self Creacién y narracién de historias. Una expresién més plena del seif ... SCAPIMNG TD CATARSIS ee NO: Deschipaliri del aGene! 35. sec acsisdateadaunes vabed buds 108 Algo més que convocar emociones ......ss.seeseeeueeeeuees 112 Una perspectiva mds amplia ...2..0.0sssseseevsneeseesenes 113 CapfruLo 12. APRENDIZAJE DE HABILIDADES: viii_¢ hyoice Volver explicito el aprendizaje Inversin de roles y empatia Conciencia del seff wetness I aes rmecereraeemreerancnn te ma z Habilidades sociométricas 7 Cuatro tipos de aprendizaje Creacién de rituales y celebraciones _. CAPITULO 13. INTEGRACION CON OTRAS TERAPIAS 2... ............ 123 Una merateoria integradora 123 Coneiliacién con el psicoandlisis Integracién con otros abordajes Otras disciplinas Captruto 14, FACTORES TERAPEUTICOS 02. .22222.2........... 133 Factores terapéuticos de la psicoterapia a = Fortalecimiento del yo a = Facilitaci6n de las fases de la psicoterapi Roles y metarroles Un lenguaje accesible os Ue ieina Rie a iia eli IEG: Algunas dificultades de la teoria de los roles... . CapfruLo 16, TEORIA APLICADA DE LOS ROLES II: CONCEPTOS DINANICRS tap tk pen ee Circunstancias de los roles contra determinismo psiquico_........ 157 Profundidad de los roles. i. : .. 158 Otras dimensior rol Un modelo plural de la mente .......-. Integracién de la mente... . Adopcién de roles o role taking: una habilidad clave. Mutualidad en la adopcién de roles 0 role taking vos... sv. esses 165 Capfruto 17, TEOR{A APLICADA DE LOS ROLES JI: TECNICAS ESPECIFICAS 169 abaauae Diagramacién de roles v...ccssssecsseesesteustensseenss 170 Otros métodos sociométricos Eleccién de compafieros Eleccién de protago1 nists yo a alice x Socorientie en Sate y escult fen) He el oe nH El arte de Ta representacién Categorfas de técnicas... 218 Propésitos de las técnicas 219 Equilibrio de la comunicacién verbal y la accién 221 x ioe Pagina iv 10 ny 50 60 79 99 109 138 213 258 Lista de ilustraciones Zerka T. Moreno, 1998 El escenario en Beacon, Nueva York, 1936 J. L. Moreno, circa 1939 Boceto impresionista de Moreno, creacién del autor, 1967 Zerka T. Moreno, circa 1951 J. L. Moreno durante wna conferencia en su instituto en Nueva York J. L. Moreno invita a la audiencia al escenario, 1969 J. L. Moreno, 1951 J.L. Moreno, 1971 J. L. Moreno, 1972 “Moreno doblindose a si mismo”, 1960 (fotografia reproducida con autorizacién) Prefacio Las dos primeras ediciones de esta obra, de circulacién restringida, aparecieron a mediados de la década de 1980, como complemento conceptual de otro cono- ido libro mio, El psicedrama en la préctica (cuya tercera edicién en inglés y publicado por Editorial Pax México salié a la luz bajo el sello de Springer en 1996). Springer también publicé la tercera edicién de Foundations of Psychodrama en 1988. En cumplimiento de la prictica de esta editorial de actualizar sus texxos, para esta cuarta edicin reescribf la mayor parte del libro, afiadi mucho y supri- mf otro tanto, con el objeto de ofrecer argumentos més precisos para el empleo de mésodos psicodraméticos. Al avanzar desde las perspectivas generales hasta las implicaciones especificas, intenté dar a mis ideas una secuencia més légica. Durante los 12 afios transcurridos desde la edicién anterior han aparecido varios titulos sobre psicodrama, tema al que también han sido dedicados capftu- los de libsos de texto y arcfaulos en revistat. Al reflaxionar sobre mi trabajo a la vista de esas otras contribuciones, me propuse analizar, depurar, reorganizar y desarrollar més y en un nivel més profundo no sélo la teoria-o, mejor atin, las abundantes subteorias- de este campo de conocimiento, sino también la filoso- fia en la que se sustenta esa teorfa. Con tal propésito, incorporé asimismo a esta edicién la experiencia que he obtenido en los tiltimos 35 afios en la préctica de la peicoterapia, la docencia y la asesoria como peiquiatra de adultos y nifics diver- sos Ambitos. He contado, para mi fortuna, con el apoyo de numerosos maestros ¢ impul- sores, entre ellos Marcia Karp, quien alenté mis primeros pasos; Irv Yalom, quien estimalé mis indagaciones; Adele von Riist Deeths (més tarde McCormick), mi primera maestra formal; Lew Yablonsky; Leon Fine; Barbara Seabourne, de St. Louis, quien compartié conmigo los criterios précticos sobre los que habia escri- to, y Ursula Springer, quien promovié mi erabajo y el de otras colegas al ser la primera editora, después de Moreno, en difundir el valor del psicodrama. Zerka Moreno, a quien estd dedicado este libro, ha sido para mi, desde luego, constante fuente de inspiracién y, junto con ella, también muchos otros profesionales de este campo me han distinguido con su amistad y aliento. xiii xiv_¢ PREFACIO. El solo proceso de reflexionar sobre las ideas de espontaneidad, imaginacién y juego ha sido para mi una poderosa ¢ inagotable fuente de revelaciones. En el psicodrama sucede algo magico que se extiende hasta invadir la vida cotidiana. La espontaneidad y la creatividad se convierten incluso en aspectos de la espit tualidad. Hasta ahora a entender el sentido de la visién religiosa de Moreno. Estas ideas también son muy reconfortantes gracias a su capacidad para trans- formar al mundo. Si, como él mismo escribié, Zerka fue la musa de Moreno, la mia ha sido mi esposa, Allee, quien no aparece esta vez como coautora de este libro -a diferen- cia de la edicién anterior, en cuya redaccién, asf como en la de las ediciones pre- vias, patticipé directamente- dado que intervino en ferma limitada en su elabora- Gidn, pese a muestras diarias conversaciones sobre el tema. No obstante, deseo dejar constancia de su continua inspiracién y apoyo desde 1975. Dr. ADAM BLATNER GroRGETOWN, TEXAS, EUA Prefacio a la edicién en espanol E 1 propesito de este libro es ofrecer un minucioso examen de las bases tebricas del psicodrama, as{ como un amplio recuento de su historia y de mézodos afines come la sociomerrla, Representa el complemento navural de El psicodrame en la practica del que también soy autor. Aparecido en ediciones de autor de circula- ccién restringida en 1985 y 1986, la tercera edicign de Foundations of psychodra- ma fue publicada en 1988 por Sprin-ger Publishing Company de Nueva York, mientras que la cuarta -corregida, aumentada y con referencias bibliogrificas puestas al dia— aparecié en 2000. Tras la muerte en 1974 de J. L. Moreno, iniciador del psicodrama, éste no ha cesado de difundirse a escala internacional; segin ciertos célculos, en 2001 lo utilizaban diez mil profesionales del mundo entero. Este libro ya ha sido tradu- ido al finés, portugués, chino, coreano y turco. Los interesados pueden remitirse hoy en dia a la internet para disponer de cre- cientes notas informativas, contactos profesionales e incluso articulos sobre psi- codrama. La bibliografla actualizada de esta edicién incluye referencias de nume- rosos sitios web, Es para mi un honor que profesionales hispanohablantes consideren itil lo que escribo. Conffo en que habrin de corresponder a la red internacional del psicodrama y compartir con nosotros sus creativos descubrimientos. ADAM BLATNER Octubre de 2001 Texas, EUA sitio web: www.blatner.com/adam/ Introduccién: el alcance del psicodrama “Para ser realmente teil, cualquier procedimiento debe tener como objetivo nada menos que la humanidad entera.” Asf comienza el primer libro de Moreno, Who Shall Survive? Yo glosaria esa nocién de la siguiente manera: “un buen ins- trumento puede servir en muchos contextos en beneficio de la humanidad.” El psicodsama y los métodas ssociados a 4l son instrumentos psicosociales de vas- tas aplicaciones, Mientras que en mi libro El psicodrama en la prictica desctibs el psicodrama como método, en el presente volumen examinaré sus furddamentos conceptuales, los cuales enlazaré con las ideas de Moreno sobre sociometria y teo- tfa aplicada de los roles. Como el poderoso instrumento que es, el psicodrama constituye algo més que un tipo de psicoterapia. Sus principios, que se expondrin en este libro, permi- ten aplicarlo a la educacién, los negocios, la religién, el desarrollo comunitario, el hogar y muchos otros Ambitos. Asimismo, la perspectiva general de esta obra va mis alld del psicodrama, pues también considera los aspectos filoséficos, sociol6gicos y psicolégicos de la totalidad de los métodos de Moreno. Todo instrumento se asocia a una serie creciente de conocimientos sobre su uso, y la combinacién resultante de técnica y principios fundamentales recibe el nombre de “praxis” (Blatner, 1992). El psicodrama en particular implica cono- cimientos de psicologla y otras ciencias de la conducta, asf como el dominio de los medios adecuados para aplicar esos conocimientos en diferentes siniacianes, y requiere ademés cualidades sutiles, como gusto artistico, creatividad, sensibil- dad personal y madlurex Muchos de los conceptos que presentaré en estas paginas ~entre ellos los de espontaneidad, creatividad, realidad suplementaria, expresién del se/f, desarrollo de habilidades, catarsis, comunicacién no verbal, teorfa aplicada de los roles y sociomerrla~ cambién pueden ser valiotos para quienes opcan por no integrar a su labor la representacién psicodramdtica. Los verapeutas que siguen otros méto- dos, los dirigentes de grupos no clinicos y otras personas que “ayudan a los demds” por cualquier medio pueden beneficiarse de estas ideas. xvii xvili_@ Adam BLATNER La idea de “instrumento” Los instrumentos no se reducen a objetos materiales, como martillos o compu- tadoras; también pueden ser el mado como se realiza una tarea, las sécnicas utili- zadas para llevarla a cabo. En este sentido, el psicodrama es un conjunto de ins- trumentos para reflexionar sobre sentimientos y relaciones y comunicar 50s asuntos. Asi como el teléfono, la televisién e internet afiadieron a la correspon- dencia postal las dimensiones de la inmediatez y ef contacto visual, l psicodra- ma suma las dimensiones del espacio, la acci6n y la imaginacién a la “tecnolo- gia” convencional de la discusién racional en la terapia o la educacién. Estas dimensiones adicionales permiten improvisar, pensar en términos de escenarios opcionales, intercambiar roles y puntos de vista, disponer de oportunidades de redramatizacién y contar con otros elementos que abren a su vez nuevos cami- nos a la introspeccién y a la reflexidn individual. El efecto del psicodrama es comparable con el de la incorporacién de herra- mientas eléctricas a la carpinteria: acelera el proceso y facilita el trabajo. De igual forma, asi como las herramientas de la carpinteria pueden emplearse para pro- ducir una enorme cantidad de cosas, grandes y pequefias, los instrumentos psi- cosociales pueden servir para una gama de propésitos increfblemente extensa. Sin embargo, toda herramienta de alta potencia debe usarse con sumo cuidado, con especial atencién a la seguridad. Ademds, ninguna herramienta es capaz de suplir el buen juicio del artesano. En muchas operaciones, ya sea de carpinterfa © de trabajo con las personas -como planeacién de un proyecto, seleccién de las personas indicadas para ejecutarlo y organizacién de los procedimientos impli- cados-, la técnica ¢s secundaria. Nuevas maneras de pensar El uso de instrumentos cambia la manera de pensar de los individuos. En pri- mer término, da lugar a la transferencia del aprendizaje, puesto que cuanto mas tusamos un instrumento, més répidamente aprendemos a utilizar otros semejan- tes. Asimismo, los instrumentos permiten logros que dificilmente alcanzarfamos sin ellos, lo que aporta a la culcura nuevos horizontes ¢ ideas, El desarrollo de las habilidades necesarias para manejar un instrumento alienta la seguridad en uno mismo y motiva la biisqueda de mejoras, aplicaciones ¢ inventos. El riterado uso de un nuevo instrumento también enriquece el conocimien- to, el vocabulario y el acervo de conceptos. Este proceso transforma el modo de percibir y experimentar el mundo de los integrantes de una cultura. En una cul- tura civilizada, por ejemplo, incluso quienes no han aprendido a leet y escribir saben que les es posible hacerlo; su conciencia se ha acrecentado. Jaynes (1987) explicé que la conciencia “civilizada” moderna es producto de la gradual acu- mutlacién del lenguaje ~de la creacién de metéforas sobre metaforas, de concep- INTRODUCCION: EL ALCANCE DEL PSICODRAMA @ xix tos sobre conceptos~, lo cual da origen al relativo predominio de las facultades racionales asociadas con el hemisferio izquierdo del cerebro. Lacreatividad plena, sin embargo, supone una interaccién mas balanceada de Ja imaginacién y la intuicién con el procesamiento racional y del lenguaje, ast como un equilibrio de las funciones de los hemisferios derecho ¢ izquierdo del cerebro. Considerado como instrumento, el psicodrama favorece este proceso integrado, porque sus técnicas ~como la adopcidn de roles o role taking, inver- sién de roles, abandono de roles (pasar de actor a observador de uno mismo), improvisacién, amplificacién, maximizacién, redramatizacién y doble (expre- sién de niveles mds profundos de si)- implican un proceso creativo mds armo- nioso. Después de mucho tiempo de practicar la dramatizacién, las personas comienzan a pensar como actores, autores, directores, productores y audiencia, E] ejercicio de este cambio de perspectiva contribuye al desarrollo de la capaci- dad de la aucorreflexién, importante componente de la maduracién psicolégica. Asi pues, los beneficios del psicodrama no se restringen a la resolucién de un problema inmediato, pues también comprenden el desarrollo de habilidades de flexibilidad mental ¢ interactividad social (tema en el que profundizaremos en el capitulo 11). Conjuntos de instrumentos La reunién y el uso coordinado de numerosos instrumentos, tal como ocurre en un taller o laboratorio, multiplican notablemente los efectos. El psicodrama no es un instrumento sino un conjunto de instrumentos en cuya aplicacién segui- mos un método sistemitico, y por lo tanto podemos concebirlo como un labo- ratorio cientifico repleto de sustancias quimicas, instrumental de vidrio y apara- tos electrdnicos. Esta analogfa también sugiere la actividad de indagacién y experimentacién, de prueba y error, en un ambiente controlado. En psicodrama, ese control pro- cede del peculiar contexo del “como si” propio del juego. En una situacién como ésta, los errores no tienen el mismo significado que en la “realidad”, y por lo tanto las personas pueden someter a prucha respuestas opcionales de conducta. Un fisico eminente comentdé: “La ciencia no avanzaria si los cientificos no come- tidramos todos los errores imaginables... Lo importante ¢s cometer errores lo més pronto posible y darse cuenta de ello” (Wheeler, 1981, p. 26). Descubrir qué actitudes y conductas oftecen mejores resultados en situaciones sociales complejas es la funcidn cientifica de los métodos psicodramdticos. Quicnes corren el riesgo de asuumir este tipo de aprendizaje empirico estan protegidos por la especial condicién del psicodrama, el cual implica apoyo, no rechazo. La abundancia de formas dramiticas en la cultura actual, saturada de medios de comunicacién, facilita en gran medida la comprensién de la idea de la dra- wx + Adém BLATNER _ matizacién, “Basta con el escenario”: el solo hecho de imaginar una situacién como un juego despierta el interés por explorar la vida de nuevas maneras (Blatner y Blatner, 1997, p. xv). Pero en lugar de aplicar el drama por meto entretenimiento 0 con propésitos comerciales o politicos, las personas pueden usarlo para trabajar en comtin en el examen y resolucidn de sus problemas, por diversos que éstos sean. Aplicaciones Un buen instrumento tiene muchas aplicaciones més alld de su funcién inicial. Laescritura surgié originalmente para hacer cuentas; la poesia legs después. La computadora sirvié en un principio sdlo para “manipular niimeros” (realizar operaciones); su concepcién como recurso para el "procesamiento de informa- cién” represents un gran avance. También los mécodos de la psicoterapia trascendicron el contexto clinico y la pusieron a disposicién de personas que en sentido estricto no se hallaban en ¢l rol de enfermas. Conceptos y técnicas psicoterapéuticos se usaron en empresas y otras instituciones, se popularizaron enere la generalidad de los lectores y se difundieron por muchos otros medios. El psicodrama surgié con fines terapéu- ticos especificos, pero después fue adaptado a otras terapias y situaciones inusua- les: a parejas, individuos, la asesoria psicolégica, entre otras. Como tantos instrumentos de amplia utilidad, las aplicaciones del psicodra- ma abarcaron muy pronto diversas dreas: educacién, negocios, desarrollo de las organizaciones, direccidn de empresas ycapacitacién de personal, intervenciones in situ en cl patio de juegos o cn las calles, retivos espirituales, programas de supe- racién personal, desarrollo comunitario, creacién de celebraciones o rituales més significativos ¢ incluso la mera recreacién. |Asi, este libro estd dirigido desde luego a psicoterapeutas, pero también a todo aquel que desee conocer las bases para el uso de los métodos psicodramiticos, los cuales deben aplicarse con sensatez. E incluso quienes no descen utilizar estas técnicas se beneficiarin de la consideracién ¢ integracién de los principios que expondré en estas paginas. ‘Cualquier ejecutivo empresarial que tenga descos de ayudar a sus empleados a trabajar en conjunto de manera més eficaz obtendré gran provecho del empleo de principios sociométricos y psicodramdticos para el esclarecimiento de la dind- mica grupal. Las escuelas pueden usar la deamatizacién como el principal vehiculo para el cultive de las habilidades de “inteligencia emocional” descritas por Goleman (1998), indispensables para enfremtar las rensiones de un mundo en constante transformacién. Las comunidades pueden desarrollar procedimientos de trabajo mis eficaces en el dmbito de las relaciones interpersonales ¢ intergrupales (Danielsson, 1997). INTRODUCCION: EL ALCANCE DEL PSICODRAMA_¢ xxi (El “grupo T”, principal antecedente del grupo de encuentro, el entrenamiento de la sensibilidad y la mayorfa de los programas de superacidn personal, surgié precisamente de un proyecto de desarrollo comunitario.} Los métodos psicodramsticos complementan y profundizan muchas técnicas afines, como las del teatro interactivo, la dramaterapia, la educacién vivencial, la renovacién espiritual, los grupos de auroayuda, la detallada consideracién de problemas éticos o politicos (con el uso del sociodrama), y el desarrollo de habi- lidades personales y de la empatia. En ottos campos de estudio y a la manera de las simulaciones de los astro- nautas 0 las “pruebas beta” de programas de computacién, los métodos psico- dramaticos enriquecen el examen de estudios de comunicacidn, rendimiento, historia, desarrollo infantil, antropologia, lingifstica, etcétera. Nuestro campo puede y debe enriquecerse a sti vez con los continuos descubrimientos de esas disciplinas, Para ser verdaderamente titil, un instrumento debe ser interdiscipli- nario ¢ informarse de lo que ocurre en otras areas, ya que ha de contribuir al cumplimiento de sus metas. Un camino al “corazén” Una méquina puede servir como instrumento, pero un instrumento no necesa- riamente es una miiquina. Las maquinas carecen de espontaneidad, mientras que lo ideal es que la persona que usa un instrumento lo haga con gran creatividad, arte y en lo que se refiere a los instrumentos para la promocién del desarrollo psicosocial~ profunda sensibilidad y solidaridad. Un ejemplo de ello es el concepto de “encuentro” de Moreno, el cual invita a las personas a interesarse en la inversién de roles, hacer el esfuerzo de imaginar cémo serian si fueran el otro. Esto es empatia, y nada menos que una aplicacién practica de la “regla de oro” (Bischof, 1966, p. 15). Ota dimensidn del “corazén” presente en el psicodrama es la celebracién de la individualidad, en particular mediante las formas artisticas, para alentar a las personas a ser “mas” de lo que son en la vida diaria. Al valorar la creatividad, el psicodrama estimula esta elevada dimensién de la vitalidad. La amplificacién (0 maximizacién) dramédtica incita una mds aguda expresién individual (como se explicard en el capitulo 10). Esto confirma nuestra necesidad de ser realmente vistos y escuchados, y nos oftece la oportunidad de conceder genuina atencién a los demés. El psicodrama aspira a algo mas que la aceptacién, para promover el gozo de la plenitud individual y de los demds. Valora la alegria, el entusiasmo, la exalta- cién, la diversién, la vitalidad, la hondura de los sentimientos, la posibilidad de compartir y también la vinculacién de estas emociones con el vasto campo espi- ritual, El arte de la psicoterapia y su contribucién a realizar exploraciones inter- personales no puede reducirse a mera técnica, peto al mismo tiempo es mas que xxli_¢ ADAM BLATNER un arte y un vehiculo espiritual para la celebracién y la aventura, Es algo "sus- tancioso”, no estéril. Asi, aunque quizd en ciertas ocasiones yo insista en la dind- mica psicoldgica y social del psicodrama, el lector debe recordar que mas alli est el espiritu del “corazén”, el anhelo de un juibilo mds intenso y de mayor unién con los demas y con la totalidad del ser. Resumen Moreno escribié hacia el final de Who Shall Survive? (1934, p. 426): Si realmente el futuro de la humanidad puede “planearse”, la evolucién consciente por medio del entrenamiento de la espontaneidad abre entonces nuevos horizontes al desarrollo de la raza humana. Esto significa que, en combinacién con las demés técnica psicoldgicas y socia- les en marcha, el psicodrama colabora en el cumplimiento de una meta extraor- dinaria: la transformacién consciente, intencional, de la conciencia misma, Una ver expuestas las consideraciones anteriores, procedamos a examinar en detalle algu- nos de estos temas, Referencias Bischof, Ledford J., “Are we Climbing Jacob's Ladder?”, Group Prychotherapy vol. 19, nim. 1-2, 1966, pp. 10-15. Blatner, Adam, “Theoretical Principles Underlying Creative arts Therapies”, The Arts in Prchotherapy, mim. 18, 1992, pp. 405-409. —y Alle Blatner, The Art of Play: Helping Adults Reclaiming Imagination and Spontaneity, 2a. ed., Brunner/Mazel-Taylor y Francis, Filadelfia, 1997. Danielsson, Claire y Susanna Eveson, “The Community Educator ~A Call for a New Profession”, International Journal of Action Methods, vol. 50, niim. 1, 1997, pp. 4-16. Goleman, Daniel, Inteligencia emocional, trad. de David Gonzalez y Fernando Mora, Kairos, Barcelona, 1998. Jaynes, Julian W., El origen de la conciencia en la raptura de la mente bicameral, trad. de Agustin Barcena, Fondo de Culcura Econémica, México, 1987. Moreno, J. L., Who Shall Survive? A New Approach ta the Problem of Human Interrelations, Nervous and Mental Disease Publishing, Washington, 1934. “Traduccién: Fundamentos de la sociometrta, Paidés, Buenos Aires, 1962. Wheeler, John A., citado en John P. Wiley, Jr. “Phenomena, Comment, and Notes”, Smithsonian, 1981, p. 26. CAPITULO I Elementos basicos: descripcién general E, psicodrama es un método para explorar problemas psicoldgicos y sociales, animando a los participantes para que actien en los eventos relevantes de sus vidas, en lugar de simplemente narrarlos. Como expliqué en Ia introduccién, este método trasciende el contexto clinico de la psicoterapia. Aunque setfa con- veniente que el lector tuviera algunos conocimientos sobre este método, recurti- ré a El psicodrama en la prdctica u otro libro entre los incluidos en la bibliografia al final de este volumen, para describir, en términos generales, los elementos bisicos del psicodrama. Los problemas o situaciones que son explorados mediante la accién pueden ubicarse en el pasado -reciente 0 remoto-, presente o futuro. La dramatizacién debe plasmar no sélo la conducta externa, sino también y sobre todo los aspec- tos psicoldgicos de esos eventos, como ideas y sentimientos no verbalizados, encuenttos con personas ausentes, representaciones de fantastas sobre las ideas y sentimientos de los dems, prefiguraciones de posibilidades fucuras y otros, todos los cuales ofrecen medios para estudiar el problema. Lo primordial es que la dramatizacién permita una mayor autorreflexién. Esto es lo que distingue al psicodrama de otro tipo de montajes de cardcter estricta- mente teatral. El psicodrama esté pensado para tener un enfoque liberador y correctivo. Por ejemplo, cuando se utiliza la técnica del espejo, el flujo de la accién es interrumpido, como cuando el director de una escena de cine grita: “(Corte!”, lo cual Ileva al protagonista fuera de la escena para que la observe con otro actor en el papel de protagonista: ;De qué otra manera podrias responder en esta situaci6n?” Corregir malos entendidos Algunos periodistas llaman “psicodramas” a acontecimientos de intensa y com- pleja carga emocional ocurridos en el cine, ef teatro, las novelas o la realidad. Esto es indadecuado porque el psicodrama es bisicamente un proceso construc- 1 2» Apam BiaIner tivo que requiere un alto grado de reflexién, as{ como el interés por revisar patro- nes que involucran viejos habitos o reacciones. Mas que la tragedia humana o la clocuente exhibicién de imprudencias absurdas, el psicodrama implica pensar en lo que podemos hacer para ser més creativos en la conduccién de nuestra vida. De igual manera, el témino dramatizacién ha sido confundido con el hecho de sélo simular 0 fingir, como en una fiesta de disfraces, juegos de mesa y vide- juegos, actividades en las que adoptamos la personalidad de seres de ficcién, Ciertas revistas brindan asimismo la representacién de fantasfas sexuales. Este par de ejemplos, entre muchos otros, del uso incorrecto del término dramatiza- cién nos permite subrayar que en el presente libro nos referiremos a la dramati- zacién relacionada con la resolucién de problemas, propia del psicodrama. Elementos constituyentes y terminologfa El psicodrama puede ser tomado como una especie de laboratorio dedicado a la exploracién de problemas psicosociales, pero en vez de contar con un “equipo fisico”, los vehiculos para obtener los experimentos son los mecanismos de la dra- matizacién y la conducta de los participantes. Moreno utilizé términos de la dramaturgia, porque las personas que intervie- nen en la accién cambian posiciones y porque el psicodrama ¢s utilizado no sélo en psicoterapia. Asf, Iamé “protagonista” y no “paciente” al individuo cuyo pro- blema es el tema de fa dramatizacién. “Director” a la persona que coordina la representacién y “auxiliares” a quienes interpretan papeles secundarios. “Audiencia” a los espectadores y “escenario psicodramatico” al sitio donde ocurre la acci6n. * Protagonista. Este término designa el papel del individuo interesado en resolver un problema, adquirir cierto grado de introspeccién o desarrollar un nuevo patrén de respuestas, Este es el papel principal en una dramati- zacién y la experiencia de la persona implicada seré el foco de atencién del grupo. Curiosamente, durante una dramatizacién el protagonista puede intercambiar su papel con el de la persona con la que sostiene un encuen- tro; asumir el papel de doble para expresar ideas y sentimientos que nor- malmente permanecen ocultos; abandonar la escena (con la técnica del espejo) para convertirse en una especie de codirector y coautor, y cambiar posiciones para profundizar en las investigaciones. En una sesién grupal prolongada podria haber més de un protagonista y un psi- codrama. Incluso el lider del grupo puede ser protagonista, para resolver sus pro- blemas con uno o varios miembros. En este caso, delegaria el papel de director a un codirector, o a un integrante del grupo apto para aclarar y resolver el pro- blema. ELEMENTOS BASICOS: DESCRIPCION GENERAL ¢ 3 Esto tiene semejanza con la “teorfa de sistemas”. Moreno pensaba que todos los miembros de un grupo son por igual agentes de alivio o ayuda para los demés. Rechazé los conceptos tradicionales de “paciente” y “médico”. Crefa que ninguna de las personas involucradas en relaciones interpersonales y grupales disfuncionales es necesariamente “neurética” o victima de una patologta. En un sociodrama, el protagonista toma un papel més general, representan- dose no sélo a si mismo, sino también a todos los que se ubican en ese papel, como doctores y pacientes, policias y miembros de una minorfa comunitaria, hombres y mujeres en una cita romdntica, etcétera (vea el capitulo 20). En estas dramatizaciones, los diferentes miembros del grupo pueden actuar como prota- gonistas, entrando y saliendo del papel de manera fluida. * Director. Los psicodramas o sesiones de dramatizacién son orquestados por alguien que sabe aplicar el método para contribuir al proceso de explora- cidn. Este es su papel. Generalmente, ef director es el lider de! grupo o el terapeuta, pero también podria serlo un asesor visitante, caso en el que el terapeuta se suma a la audiencia. Asimismo, un codirector o director asis- tente podria colaborar en la coordinacién de los diversos papeles. La fun- cién del director es compleja y entrafia numerosas aptitudes (Karp, 1996; Bradshaw-Tauvon, 1998). Yo auxiliares. El protagonista experimentard més vividamente la sicuacién y seré mas espontineo si interactiia con otras personas, las cuales adoptan los papeles de los demas personajes de la escena 0 representan sus propios sentimientos no expresados (cl doble) o a objetos inanimados. De igual forma, en la técnica del espejo un auxiliar remplaza al protagonista para que éste contemple la escena (Holmes, 1998). Moreno llamé a este papel ‘yo anxiliar, término ahora simplificado; otros to llaman actor de apoyo. ‘Algunos directores utilizan auxiliares profesionales entrenados, cuyo papel en el grupo es ayudar al director con la produccién. Audiencia, Conforman a la audiencia todos aquellos que no ocupan el escenario, como protagonista, director 0 auxiliares. Los psicodramas se efectiian por lo general en un grupo de entre seis y 20 miembros. (Moreno realizaba sesiones abiertas con un puiblico de cientos de personas.) Ademds de presenciar la dramatizacién, el piiblico participa después en la sesién de comentario (a la que me referité més adelante), aporta auxiliares —quienes son escogidos de la audiencia~ y asume en ocasiones el papel de personaje colectivo, como el “coro” griego. Sus integrantes han sido o serin protago- nistas o auxiliares en anteriores o posteriores dramatizaciones. Excenario. Es recomendable reservar para las dramatizaciones un sitio espe- cial de la sala, a fin de evitar que el espacio del “como si” se confunda con el de la interaccién del grupo. Moreno disefié un escenario circular en tres niveles con objeto de que a los participantes les bastara dar unos pasos para entrar en accién, algo imposible en los escenarios teatrales comunes. 4 + Anam BiaTner Muestra de la aplicacién de la arquitectura a la psicologia, el didmetro del nivel superior era de 3.5 metros (Enncis, 1952). Conviene disponer de un escenario semejante, con iluminacién y utileria especiales (Casson, 1998). Sin embargo, la mayorfa de las dramatizaciones ocurren en lugares menos for- males: salas de reuniones o conferencias (en las que 3 posible mover mesas y sillas) o grandes oficinas, drcas de al menos 7.5 metros cuadrados. La simple pre- paracién de esta zona y la indicacién de su funcién podrian constituir una suge- rente actividad de calentamiento: “esté listo el escenario.” Asi pues, no se sienta restringido por falta de equipo o de un sitio formal Yo afiadirfa otros dos a los anteriores cinco elementos bésicos considerados por Moreno: * Técnicas psicodramedticas, Son 10 las més frecuentes, otras tantas las de uso ocasional y mas todavia las variantes y depuraciones. Algunas de las téc- nicas més comunes son: inversién de roles sustitutos redramatizacién 0 replay silla vacta espejo entrenamiento de papeles soliloquio corte de la accién doble sociometria de accién (0 “escultura”) ego miiltiple escenas de realidad suplementaria He detallado estos y otros elementos en el compendio de términos y técnicas incluido como apéndice en este libro. * Fases, El inicio, desarrollo y final de un psicodrama implican actividades especiales: * Caldeamiento, Combinacién de técnicas 0 actividades de dinimica de grupos para estimular la cohesidn y espontaneidad grupales, la confian- za en el director, el interés y preocupacién por el protagonista, la fran- queza, la seguridad en el grupo y el surgimiento de un protagonista cuyo problema concierne al grupo (Blatner, 1996; Taylor, 1998). + Accién, Aplicacién de la mayor parte de las técnicas psicodramsticas. + Sharing. Concluida la dramatizacién, los miembros del grupo compar- ten con el protagonista y con los demas los aspectos de su vida que la dramatizacién les hizo recordar, Los comentarios sobre la dinimica psi- coldgica no deben ser permitidos. El director les preguntard: “alguna vez les ha ocurrido algo semejance al psicodrama que acaban de presen- ciar?” Quienes participan como “yo auxiliares” pueden compartir cémo se sintieron desde el rol que desempefiaron, as{ como sus sentimientos después de su desrolizacién, como ellos mismos (Ruscombe-King, 1998). ELEMENTOS BASICOS: DESCRIPCION GENERAL @ 5 Estas fases son flexibles, pues dependen de la situacién de cada grupo. A veces €s conveniente cierto grado de anilisis 0 “procesamiento” después del comenta- rio, Los grupos de formacién en psicodrama también podrian evaluar la mane- ra en que el director y los auxiliares interpretaron sus roles (Jefferies, 1998). La sesién de comentario puede ser corta o larga. Habré ocasiones en las que una dramatizacién relativamente breve suscitard una sesién prolongada, pues dard lugar a numerosas revelaciones individuales. Por lo tanto, es necesario destinar tiempo suficiente a esta fase. También, algunos pueden caldearse para hacer otra dramatizacién basada en lo que acaba de pasar y algunos grupos pueden tener una serie de dramatizaciones con diferentes protagonistas que actiicn variantes del primer tema, Terminologia: la eleccién de las palabras Muchas personas consideran que el término psicodrama posce connotaciones seménticas negativas, ya que sugicre demencia, histrionismo, psicoandlisis y emotividad excesiva. Asf, prefieren el término dramatizacién como sinénimo neutro (vea el capitulo 20). Pero también hay quienes rechazan este nombre, que juzgan artificial o frivolo. Por tal razén, algunos colegas ~especialmente los que aplican métodos psicodramdticos fuera del contexto clinico, ya sea en empresas escuelas~ han optado por términos como método de accién, experiencia estruc- turada, simulacién de conducta, representacién, entre otros. También los elementos basicos mencionados reciben diversas denominacio- nes, con intencién de simplificar el argot de la disciplina y moderar su inclina- cién teatral. Ast, ejecutante principal o personaje principal sustituye a protagonista, y ejecutante de apoyo al auxiliar. En lugar de audiencia, lo Haman simplemente “grupo, y en ver de director (que se oye muy parecido a dictador y se asocia, asi- mismo, con produccién de cine o teatro), algunos prefieren el término fucilita- dor, lider del grupo, conductor, gufa 0, en el contexto clinico, terapeuta 0 consejero, Por ultimo, en este libro serd notorio el remplazo del término paciente por cliente 0 miembro del grupo, dado que hoy la mayor parte de las labores propias de la psicoterapia corre a cargo de individuos que no son profesionales de la psi- quiatrfa y es muy comin el uso de métodos psicodramdticos en contextos no clf- nicos. Ejemplo tipico de dramatizacién Para comprender la naturaleza del psicodrama, nada mejor que considerar la amplia variedad de escenas que es posible dramatizar en la psicoterapia. El siguiente caso servird de ejemplo. $ ¢ ADAM BLAINER Una persona, a la que llamaremos Janet, adopta el rol de protagonista para aclarar el significado de una compleja interaccién familiar, Para comenzar, monta el escenario: el comedor de la casa de sus padres durante el desayuno des- pués de una fiesta en familia. El director le pide elegir como auxiliares a algunos miembros del grupo (la audiencia) para que representen a los demas personajes como auxiliares, Luego le pide una breve inversién de roles con cada uno de ellos para mostrar su conducta y determinar quién es agresivo, quién conciliador, quien desentona u otros patrones. Antes de que Janet entre en escena para redramatizar los hechos que desenca- denaron el confuso conflicto que experimenta, el director le recuerda que debe actuar como si esos hechos estuvieran ocurriendo en el presente. Le indica ade- mAs que no debe narrar a la audiencia lo que “sucedié”, sino “mostrar” la situa- cién como si ocurriera en el aqui y el ahora. El propésito es recobrar la cercanfa de la experiencia y el sentido directo de los encuentros entre los personajes en escena, para evocar més eficazmente los sentimientos subyacentes. Una de las ventajas de la dramatizacidn es que permite recuperar no sélo lo que se dijo, sino tambign la conducta no verbal, queaporta mds informacién que un relato o un largo y detallado interrogatorio. (La narracién sucle ser muy vaga y contener demasiadas generalidades, o resultar pesada y aburrida si es minucio- sa; la dramatizacién, en cambio, da vivacidad a cualquier suceso. La curiosidad de saber qué hardn el director y los actores para que la improvisacién sea eficaz actecienta el interés.) Al terminar, los ejecutantes redramatizan la escena, pero esta vez con dobles o sustitutos, Esto equivale a la “voz en offo sobre la imagen” en una pelicula, con lo cual se enfatiza no sdlo lo que ha sido dicho, sino también eso acerca de lo cual no puede hablarse claramente; en el caso de Janet, lo que ella piensa pero no dice y lo que fantasea acerca de lo que los demas piensan o sienten. El director “corta” fa accién de tanto en tanto para dialogar brevemente con la protagonista, en una especie de “tiempo fuera” para reconsiderar lo dramati- zado. Esta reevaluacién ¢s la esencia del psicodrama: la puesta a punto de lo que en psicoanilisis es Hamado “el yo observador” y en la prictica espiritual “el testi- go”. En esos interludios el protagonista aclara la direccién que desea seguir. Lo ideal es que protagonista y director tomen en conjunto tales decisiones, pues es importante que este tiltimo no presuponga cudn lejos ni en qué direccién quic- re ir aquél. Asimismo, protagonista, director y grupo refuerzan su cooperacién en esos momentos. Una ver. aclarado el problema, es posible examinar algunas de sus facetas. ;Es irreal el problema o parece mayor de lo que es a causa de las expectativas, impre- siones o actitudes del protagonista? De ser éste el caso, el grupo puede dramati- zar situaciones y escenas previas a la originalmente representada para hacer un andlisis mas cuidadoso y esclarecer el origen de esas actitudes. Una dramatizacién puede seguir tantas direcciones como movimientos es fac- tible hacer en un juego de ajedrez, Una escena situada en un momento futuro EteMENTOS BASICOS: DESCRIPCION GENERAL @ 7” podria permitir la exploracion de perspicacias anticipadas o metas no expresadas. La redramatizacién de escenas puede perscguir a su vez una comprensién més profunda de las motivaciones implicadas. La inversién de roles puede manifes- tar proyecciones y desarrollar percepeiones mas precisas sobre la conducta de los demas. Una catarsis podrfa acompafiar a la toma de conciencia de sentimientos relegados (vea el capitulo 11). Ora estrategia comiin consiste en representar ef resultado més positivo, lo que contribuye a que el protagonista descubra y afirme sus anhelos mas intimos. Tales escenas “reparadoras” podrian ubicarse en el pasado remoto o el futuro y suclen implicar rotundas afirmaciones positivas del protagonista; su reivindica- cién; su solicitud o exigencia de conductas deseadas; muestras de apoyo y pro- teccién en su favor, o la expresién en referencia a él de comentarios titiles y res- petuosos, Estas acciones remplazan psicolégicamente a ciertas conductas, tal vez crueles o abusivas, ocurtidas en la realidad, El director guia entonces a Janet, la protagonista quien para ese momento posce mayor conciencia de lo que realmente desea~ a una escena en la que pueda desarrollar su capacidad para hacer valer de manera més activa y madura sus necesidades. Esto es “entrenamiento de roles", lo cual implica la prictica de demandar negociar en forma directa. A veces lo procedente es practicar un rol distinto, el de la aceptacién, para ayudar al protagonista a admitir que quienes Jo rodean sencillamente no quieren o no pueden darle el apoyo que necesita ni adoptar en reciprocidad la conducta que él desearia, a fin de que se dé cuenta de que, por lo tanto, debe buscar a alguien capaz de brindarle el apoyo que requie- re. En otras palabras, ef insight es a menudo insuficiente. El proceso general debe incluir cierto grado de integracién de nuevos tipos de conducta. Después, el grupo comparte con Janct no para ofrecerle agudas interpretacio- nes, por titiles que puedan ser, sino para describir lo que la dramatizacién le recordé acerca de su propia vida. Mi libro El psicodrama en la préctica y muchas otras obras sobre el tema con- tienen més ejemplos de psicodramas. Otros tipos de dramatizaciones Son muy abundantes las exploraciones que ¢s posible hacer a través del psico- drama: * Dramatizacién de suefios, en la que los yo auxiliates interpretan roles de personajes vivos o inanimados. La interaccién del protagonista con esos personajes o su inversién de roles con ellos dota de nuevo sentido a las imagenes oniticas. + Ensayo y desensensibilizacién de eventos anticipados. 8 + Avan Burner Uso de métodos sociométricos para descubrir dénde estd situado uno en relacién con el grupo y en funcién de un critetio dado (vea el capitulo 19). Examen de un dilema moral mediante la adopcién de los roles de las per- sonas involuctadas y la consideracién de sus predicamentos reales, los sen- timientos que podrfan no admitir ficilmente. Encuentro y didlogo con un “poder superior” personal, encarnado en una figura religiosa, ancestro, ente mitolégico, uno mismo con mayor edad y sabiduria, etcétera. Elaboracién de una pérdida por medio de la escenificacién de una “reali- dad suplementaria” para el encuentro con alguien que ha muerto 0 inac- cesible por cualquier otro motivo (vea el capitulo 9). Combinacién de métodos psicodramaticos y técnicas artisticas creativas para alentar la expresién de s{ mismo (vea el capitulo 10). Entrenamiento de roles para acrecentar la seguridad en uno mismo, la expresividad individual o el autocontrol. Desarrollo de otras habilidades de relaciones interpersonales y resolucién de problemas (vea el capitulo 12). Resumen En este capieulo describf algunos de los elementos y temas bisicos del psicodra- ma y expuse un ejemplo de lo que ocurre en una sesién habitual. La aplicacién de estos elementos puede también favorecer labores grupales permanentes de muchos tipos. Referencias Blatner, Adam, Acting-in: Practical Applications of Pychodramatic Methods, 3a. ed., Springer, Nueva York, 1996. Enneis, James M., “Establishing a Psychodrama Program”, Group Pychothenapy. vol. 5. iim. 2, 1952, pp. 111-119. Karp, Marcia, “An Introduction to Psychodrama’, The International Forum of Group Prychotherapy, vol. 5, vim. 2, 1996, pp. 8-11. En mi libro £l psicodrama en la prdctica me ocupé ampliamente de los temas referidos en este capitulo, pero también es posible hallar informacién sobre el particular en muchos ottos libros, como el siguiente: Karp, Marcia, Paul Holmes y Kate Bradshaw-Tauvon, Handbook of Pychodrama, Routledge, Londres y Nueva York, 1998. Las referencias que aparecen a continuacién son capftulos de este tiltimo volumen: Bannister, Anne, “The Group”, cap. 7, 1998. Bradshaw-Tauvon, Kate, “The Protagonist", cap. 6, 1998. Casson, John, “The Stage”, cap. 5, 1998. ELEMENTOS BASICOS: DESCRIPCION GENERAL ¢ 9 Holmes, Paul, “The Auxiliary Ego”, cap. 8, 198. Jefferies, Jinnie, “The Processing”, cap. 11, 1998. Karp, Marcia, “The Director: Cognition in Action”, cap. 9, 1998. Ruscombe-King, Gillie, “The Sharing”, cap. 10, 1998. Taylor, Susie, “The Warm-up”, cap. 4, 1998. Primer escenario psicodramatico, en Beacon, Nueva York, 1936. 10_¢ Apam BiArNer Doctor J. L. Moreno, 1939. CAPITULO 2 Historia I: Moreno y sus antecesores E i psicodrama fue inventado por el doctor Jacob Levi Moreno (1889-1974). Si bien se inceresé en los métodos del teatro espontineo desde 1921 (afio que refe- ritfa més adelante como fecha de nacimiento del psicodrama), no fue sino desde 1936 hasta principios de la década de 1940 cuando desarrollé la mayoria de las técnicas del psicodrama clisico. Pese a la originalidad del mérodo de Moreno -

    También podría gustarte