Tu vives en mi mente, clavado entre mis sienes no s si en galardn o
no s si en castigo. Pero porque me rindes, mil veces te maldigo, para luego no hacer sino lo que ordenes.
Cuntos aos van ya, cuntos, que as
me tienes! Sin saber lo que hago, ni saber lo que digo. Te quiero y te quiero y te aborrezco, te odio y te bendigoSoy para ti el juguete con el que ms te entretienes.
Si te fueras de m tal vez me
muriera; si te quedas en m yo bien se que me matas con el nudo gordiano de tu capricho me atas, que en hacerlo bien recio tu espritu se esmera
As voy por la vida, tu imagen en la frente, como una iluminada,