Está en la página 1de 1

Demasiado verano.

El destino quiso que me cruce con mi amiga aquella tarde de verano en que mi
cortadora de csped se negaba a prestarme sus servicios. Parado, transpirado, medio
ciego por el sudor que corra porfiado por mi frente y hera mis ojos, mir
detenidamente como aquella fila de hormigas se haca ms grande y de pronto una
hormiga enorme me deca en un lenguaje sorprendentemente entendible: - no te asustes
pero tu corazn se par, ests muerto, ac est tu amiga que quiere llevarte a tu prximo
destino. De tu cuerpo nos encargamos nosotras.
Carlos Ariel Genco, 2015-03-27
Viedma, Ro Negro

También podría gustarte