LOS DOS HORIZONTES
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ep mes ‘Trabajos presentados al
Spon Bre Primer Congreso Internacional sobre Ibn al“Arabi
Sioreetencs mene (Murcia, 12-14 de noviembre de 1990)
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Edin cargo de:
ALFONSO CARMONA GONZALEZCLAUDE ADDAS
LA VIDA POSTUMA DEL SAYH AL-AKBAR:
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Fara conn is nots was else erg (N- del odcion)tas evident a veces abirtamenteexhibida, con frecuencia pruden-
tementedisimolads, coscienteoinvoluntaria es omnipreseie-
La existencia de un vaso corpo literati, ls dispersion de cuyos
‘manusertes aestigus que ha creulado rapa y ampliamens, a co
‘mo las contoversias apasonadas que he suscitad, han favorecido
‘considerablemente sin ninguna dada eta tentacular peneracin de la
octrna akhut en el seno dels esprinunlidad isk. Sin embargo,
sotienen quienes siguen ls doctrinas del Sayhal-Akar, es también
‘Porque els ha sido alimentads por una presencia esprial tan activa,
‘como subterinea por lo quel inluencia de Iba ‘Arabi ha podido ex-
tenderse de manera ta prodigios,
‘Las manifestciones de esta presencia sui forman part, cera
‘mente de una histori, pero de uns historia que la mayor pate dels
‘eees se ocult ala curisidad del hstoriador. Por ota part, tales
manifestaciones han reverie, segin épocasy lugares formas muy
diversas. Una de ellas, sin embargo, parece muy reglarmene «Io
largo de los siete sigos y medio que han pasado desde la muerte del
Doctor Maximus me refer a esis visi inopinadas que Ibn ‘Arabr
ha realizado post mortem inaumerables disciples proximosy lj
‘omy cu el curso dels cuales esha prodigado cansjon exhowacio=
es y benicions.
Esta vida pSstuma dl Sayh l-Akbar en Jos suefos de sus fees
‘nunca ha sido esrudiads. Quis haya que ver en ello el efecto de ura
reocencia de esprit formados en hechos sidos ya los que descon-
era la fuidez de esos fenémenos onticos abundances. De menera
‘ever ls apaicones de ese génro, tan frecuentes y de tan gra im
orn na vid kos miscosmunlnanes obi so bjt
Jc invesigacionessufiientementeamplseysufcientemente prof.
das Sin embargo, estoy convencids de que, en este caso preciso y 2
pest de su caricterexrato dichas icervenciones en el mundo de los
vos presentan una cetacobereia,
Pero ante de examinar més de cere algunos ejemplos de tes
{encuentro visionarios entree autor de lar Fut y 2 erent pos.
‘eridad através de los testimoaiosesritos que nos han legado, qui-
sera recondarbrevemente el garde lara, def visi, ene Islam
de manera general y, de manera mis precisa que ocupa en la doct-
rade Ibn ‘Arabi
Como en todas ls ciilizacionestradconales, as sociedades
‘musulmanas han concsdido yconceden todavia hoy una gran impor
tancia ls perepcionesonivica; no se trata evidentemente de ese
smostico de imigenesincoherenter que emerge el epi del dur-
iene, sno del sueno premenitorio 0 ingprado, que se carscteriza,
entre otros signos, por su fuera su nites. El suefo es entonces
twansmisor de un mensaje que no + dvigenecesariamene al durmien-
te, sino que puede, dado ol eat, concern al destino de otos inv.
duos oincaso de toda una coletividad. Correctamente dercifrado, el
sucho proporcionainstruciones 0 indicaciones que corresponderi
las persona conceridas tomar en cuenta en lt orienacin de sus de
alone y de ws actos
‘Ampliamente exendida y pratsada en la ably, ln oniro-
mancia drabe hha sido legtimada y reforzada por Is revelacin de
Muhammad, que le ha dado st marco y so repos expects.
La fancin aibuds al suedoy al ubir, au interpreracin, ine
un Fundaaneaco ecritarario bien conocido en el Cerio, donde consi-
tye uno de los temas dela sura asafft (3702-107), que relts et
«episodio del sactifcio de Abraham, pero sobre todo ocapa en la sura
Yanf, que aera a historia de José y de sus hermano, gar pre-
ponderante Dos episodio, dicho sea de paso, que Iba ‘Arab ha co
‘mentado abundantemente en particular en lo Ft La ru ya deve
peta iqualmente un papel deerminante en la se nabastyya -fue,
Segin el estimonio de ‘A, Ia primera forma de reveacgn divina
corergada al Enviado de Dios y las compilaciones de hud propor