La revelacin de mi hijo mayor fue un golpazo aunque no lo haya expresado convenientemente, un renovar lo sucedido, y un acompaamiento con pena por

el sufrimiento de los hijos, indignacin hacia el autor y satisfaccin por las acciones que haban decidido enfrentar. La valiente aparicin de mis hijos en TV en diversas notas, junto al dolor que ocasionaba la presentacin nos llen de orgullo, entre otras razones porque a su coraje se asociaba la intencin de ocasionar una alerta sin espritu vindicativo. A mis hijos Luis y Juanqui les digo que doy gracias a Dios por lo que son, por la valenta que tuvieron en hacer esto pblico - admiro su hombra de bien-, por querer luchar para que a otros no les pase lo mismo. Quiero pedirles perdn. Treinta aos con esta carga tan grande!, es mucho sufrimiento. Quisiera que supieran que mi manera de proceder fue porque cre que realmente era lo mejor para Juanqui, eso me decan. Mis hijas mujeres me comentaban que despus que sali todo esto a la luz ellas tambin sentan que se les quitaba una carga de encima; que muchas veces hubiesen querido hablar del tema con Juanqui y tambin con Luis sin saber que tambin Malenchini haba abusado de l, sino porque el profesor que tanto admiraba haba abusado a su hermano- para preguntarles cmo estaban, tratar de acompaarlos ms de cerca, etc. Pero esos temas no se tocaban ni en la familia. Fue sano para todos poder hablar ahora de esto en familia. Hijos, quiero felicitarlos porque a pesar de la flojedad de sus padres ustedes fueron fuertes y valientes, tuvieron el coraje de la verdad y supieron hacer lo que deban: JUSTICIA. Su madre Piruja.