Con un "te lo dije" bien alto y claro el duende se puso mas rojo que su seta, y prefera estar en cualquier

sitio menos ah mismo, sabiendo que haba destrozado el su eo de Duendelcharo, y acordndose de que era un sueo se quit su gorro, de repente tod o se oscureci y se silenci. Vuelta a la realidad haba descubierto algo fantstico, no poda creerlo, haba estado dentro de otro sueo y asta haba interactuado como en la v ida real.