Reconstruye tu Muro

Nehemas 3 Cuando leemos sobre la reconstruccin del muro de Jerusaln, quiz podamos percibir la magnitud del proyecto que tenia Nehemas en sus manos, la misin que haba emprendido le superaba por mucho, las circunstancias en que se encofraba eran mucho menos que idneas, ademas tenia gente que estaba atacando la obra directamente, burlndose y menos preciando su esfuerzo; pero lo que me llama la atencin de esta porcin de las escrituras, no es la labor titnica de este hombre de Dios, la cual es por dems conocida. En lo que se centra mi corazn, es en el esfuerzo individual de la comunidad, cada persona toma como suyo una parte del proyecto, la meta era terminar los muros, pero cada quien toma una lo que estaba a su alcance, lo que Dios le haba mostrado. Podemos ver ante esto tres cosas que me gustara mencionar; primero, Dios pone en el Corazn de Nehemas la carga por levantar los muros de Jerusaln, y el pueblo pone su esfuerzo en este fin, nadie piensa en obstruir otra cosa o construir de una forma individual, siguen el diseo en tiempo y forma. En segundo lugar vemos la importancia del trabajo individual en un grupo: en muchas ocasiones escucho personas que no les gusta trabajar con otros porque se sienten cmodos trabajando solos o lamentablemente por que sus temperamentos no son compatibles, lo cual es sumamente triste ya que la palabra nos insiste en la diversidad de dones. pero si podemos observar que las individualidades se suman para lograr grandes cosas, si cada uno hace su parte. Adems vemos que unos reconstruan la parte de muro que quedaba frente a su casa, esto es nos muestra la importancia de trabajar en los grandes proyectos del Seor desde nuestro hogar, no hablo de un trabajo individual, sino de un trabajo colectivo, que sigue un plan en concreto, buscando un objetivo comn: el engrandecimiento del Reino de Dios. Nuestros hogares devn ser amurallados para rechazar los ataques del enemigo que quieren derribar lo que el Padre a construido y para unificar nuestros fe unindola con nuestros hermanos mostrando las murallas no como una barrera con otros, sino como muestra de las obras maravillosas que nuestro Salvador ha hecho con nosotros. Oremos para que nuestras individualidades se conviertan en una sola fuerza teniendo como cohesin el Espritu Santo y como motivacin la gloria de nuestro Rey.