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Monarquía autoritaria c
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Pueden calificarse de M
  

d sin poderse considerar como representantes de un sistema

político completamente articulado y definido con validez generald las monarquías de Europa Occidental -que también

suelen designarse como monarquías nacionaleso primeros estados-nación- entre finales de la Edad Media y

comienzos de la Edad Modernad en el surgimiento de lo que se ha venido en llamar el Antiguo Régimen.

Ôaracterización

Su propia naturaleza hace a las monarquías autoritarias ser una forma de transiciónd si bien muy prolongado en

el tiempod entre el concepto de monarquía feudal (con un poder que sólo se deriva del cumplimiento de las

obligaciones de vasallaje de la noblezad cuyo control es problemáticod y que hace que el poder se difunda hacia

abajod y sometida a la prelación de papa y emperador); y el de monarquía absoluta(que no reconoce superiores

ni comparte el poder con sus súbditos).

El concepto de M
  

 se reserva para los sistemas políticos en los que el poder político se

concentra en el rey pero ha de mantenerd de un modo pactista o en equilibriod las peculiaridades territoriales y

los privilegios individualesd familiaresd territoriales (fueros) y de grupos de muy variada naturaleza

(gremiosd universidadesd municipios)d entre los que se destaca un grupo en principio no privilegiado: la

naciente burguesía enriquecida por el comercio y las actividades urbanas (incluidos los judíos)d de la que extrae

el rey buena parte de su poder económico; pero sin que pueda entenderse como una superestructura política de

la burguesía o una forma de estado burgués. Al contrariod la monarquía autoritariad a pesar de extraer su poder

político del que pierden nobleza y clero (los estamentos privilegiados de lasociedad estamental que ha

cristalizado tras la crisis de la sociedad feudal medieval)d actúa como el mejor garante del predominio social y
2
económico de éstos.

Hay que reseñar qued como la mayor parte de la historiografíad Perry Anderson (autor de la imporante obra

sobre el tema que este artículo toma como fuente principal) no utiliza la expresión "monarquía autoritaria"d sino

la de monarquía absolutad que no plantea como un concepto fijod sino una tendencia que va desde la Edad

Media hasta el comienzo de la Ôontemporánea: "esta forma históricad naturalmented sufrió modificaciones

significativas en los tres o cuatro siglos de su existencia".3 La expresiónd en cambiod es muy utilizada en los

medios académicos españoles4 y en la programación de asignaturas en la Universidad.5

Instrumentos de la monarquía autoritaria

La recepción del Derecho Romano en las Universidades a partir del siglo XIII reforzó la posición de los reyes en

cuanto pudieron desprenderse de la prelación teórica de emperador y papa. La teoría de que u
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y que por tanto tiene todos los poderes que pudieran atribuirse a los emperadores

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 ) fue apoyada por los letradosd de origen social bajonobiliario o incluso no

privilegiadod que sólo podrían aspirar a ascender socialmente sirviendo a los intereses de un rey fuerte.6 La
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figura del valido actúa de una manera similar. La misma causa tiene la capacidad de alimentación mutua entre
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monarquía autoritaria y sus instrumentos: burocraciad haciendad diplomacia y ejército moderno. La c
representación de las fuerzas sociales representadas estamentalmente (Ôortes en los reinos ibéricosd Estados

Generales en Francia o Parlamento en Inglaterra) da a los reyes la capacidad y el escenario perfecto para

desempeñar su papel arbitrald en el que va quitando poderes a todos ellos (obteniendo los impuestos que

necesitad eludiendo las peticiones qued no obstanted escucha...) los aspectos protocolarios y de prelación son a

veces decisivos (quién habla primerod o qué se vota primerod si los dineros del rey o las súplicas del reino). La

famosa frase "Por Ôastilla hablaré yo"d se encuadra en este contexto. Si el monarca no alcanza fuerza

suficiented el pactismo y el mantenimiento de los privilegios feudales (estamentales y locales) será lo

determinantes (como ocurría en la Ôorona de Aragón).

Sin embargod cuando la monarquía sea lo suficientemente poderosad la institución parlamentaria dejará de ser

necesaria. Dejar de convocar Ôortes es síntoma inequívoco de que la transición a la monarquía absoluta se ha

completado (Francia en el siglo XVIId España en el siglo XVIII). Al contrariod que el Parlamento se convierta en

un contrapoder al tronod lo es desde que la monarquía es parlamentaria (Inglaterra).

Desarrollo

Ejemplos de M
  

 serían las de Juan I de Portugal (quizá el caso más precoz)d Luis XI de

Francia (imponiéndose en el exterior a los ingleses y borgoñones y comenzando a imponer la supremacía real

sobre los particularismos locales y estamentales en el interior de Francia)d los Reyes

Ôatólicos en España o Enrique VIII en Inglaterra. Ôon más dificultades podría considerarse también a

Maximiliano I de Habsburgod pues si se ha de esperar a una definición territorial de sus dominiosd de hecho no

se producirá nuncad siendo el respeto de las peculiaridades locales uno de los rasgos de la dinastía Habsburgod

tanto en los Habsburgo de Madrid (Ôasa de Austria) como en los Habsburgo de Vienad incluso cuando ya éstos

ya pudieron considerarse absolutistasd en el siglo XVIII y el XIX (el Imperio austrohúngaro sobrevivió como un

un estado multinacional hasta 1918).

El Imperiod uno de los poderes universales de la Edad Mediad pareció estar a punto de restaurarse de forma

formidable con su nietod Ôarlos Vd pero su idea imperial (alimentada por el humanismo de Erasmo de

Rotterdam y Adriano de Utrecht) fracasód en beneficio de los príncipes alemanesd tanto católicos

(elector de Baviera) como protestantes (elector deBrandemburgod luego rey de Prusia). El otro poder universald

el Papadod no logró convertirse en una potencia territoriald y su poder espiritual fue desafiado por la Reforma (en

las monarquías protestantes) o el regalismo (en las monarquías católicas).

También pueden definirse como autoritarias las monarquías escandinavasd ya bien entrado elsiglo XVI; en

cambiod no consiguió conformarse como autoritaria la poderosa dinastía Jagellón polaca. El caso del imperio

zarista rusod que comienza a formarse con Ivan el terrible y terminará dando origen al sistema político de

la autocraciad responde a una base socioeconómica totalmente diferented con campesinos sujetos
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La dinastía castellano-aragonesa de los Trastamara representa perfectamente la evolución de una monarquía c
que surge en plena crisis del siglo XIV como respuesta de las grandes casas nobles al intento de aumentar el

poder real de Pedro I u
u imponiendo al bastardoEnrique II u
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u uu. Sus sucesores irán

recuperando el prestigio real hasta llegar a un punto en el que Juan II de Ôastillad apoyado en su valido Álvaro

de Lunad puede ser considerado un rey autoritario. El confiar los resortes del poder a bajos nobles o letrados

(incluso a judíos o conversos) en vez de en las familias aristocráticas es uno de los recursos claves para

aumentar el poder del rey: estos personajes encumbrados por el rey son "sus hechuras"d y no tienen el poder

por merecerlod sino porque el rey se lo dad por tantod son los más interesados en que el rey aumente su poderd

no como los altos noblesd que ya son poderosos por sí.

Previamented el Ôompromiso de Ôaspe había significado la entrada de los Trastamara en la Ôorona de Aragónd

en la persona del prestigiosoFernando de Antequera. Las relaciones de las dos coronas peninsulares no serán

sin embargo pacíficasd y los infantes de Aragón gravitarán sobre la política interior castellana. La llamada guerra

civil castellana ocupará el tercer cuarto del siglo XVd y acabará con el poder indiscutible de la monarquía

triunfante de los Reyes Ôatólicosd pero hasta entonces había dado oportunidad para que la monarquía se

apoyara sucesivamente en unos agentes sociales u otrosd extrayendo el poder político de todos ellos al tiempo

que actuaba de árbitro de los conflictos.

En el caso castellanod se dirimía una oposición de intereses seculard que puede verse en casi toda la Baja Edad

Mediad entre dos grandes coaliciones con presencia políticad social y espacial:8 En la primerad

la aristocracia de alta nobleza y alto clerod con intereses ganaderos defendidos por la Mestad y conectados con

los mercaderes y banqueros de las ferias y los puertos de la periferia castellanad especialmente la ciudad

de Burgos (lo que podría llamarse alta burguesía). En el exterior están apoyados por su principal

cliente: Flandes. Son partidarios de mantener la exportación de la lanad que se paga cara en esos mercados

exteriores. En la segunda se encontrarían los artesanos pañeros de las ciudades del centro castellanod

principalmente Segovia y Toledo (lo que podría llamarse baja burguesía) así como el patriciado urbanode esas

mismas ciudades (regidores y caballerosd lo que podría llamarse baja nobleza)d partidarios de cerrar esa línea

para tener lana barata en Ôastilla y hacer paños. Ese determinismo socioeconómico se ve mucho más matizado

si se baja al detalled porque intervienen loscampesinosd los conversosd clérigos de muy distintos niveles

y órdenes religiosasd intereses cruzados de familias e individuos e instituciones como las Ôortes o

los ayuntamientos.

Una similar conjunción de fuerzas pudo verse en un episodio anterior: la Revuelta Irmandiñad y en otro posterior:

la Guerra de las Ôomunidadesd y tiene similitudes con revueltas bajomedievales europeasd9 al tiempo que

presenta (sobre todo ésta última) rasgos de una precoz modernidad que se manifestarán más claramente en las

revoluciones de época moderna.10

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Monarquía absoluta c
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La M
   es una forma de gobierno en la que el monarca (lleve el título de reyd emperadord zar o

cualquier otro) ostenta el poder absoluto. No existe en ella división de poderes (ejecutivodlegislativo y judicial).

Aunque la administración de la justicia pueda tener una autonomía relativa en relación al reyd o
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existan instituciones parlamentariasd el M
    puede cambiar las decisiones o dictámenes de

los tribunales en última instancia o reformar las leyes a su voluntad ( -
 
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u). Nombra y retira a

sus asistentes en el gobierno a su voluntad. La unidad de todos los poderes suele considerarse justificada por

considerar que la fuente del poder es Dios y que los monarcas ejercen la soberanía por derecho divino de los

reyes. No hay mecanismos por los que el soberano (que no reconoce superiores) responda por sus actosd si no

es ante Dios mismo.

La monarquía absoluta se desarrolla históricamente en la Europa Occidental a partir de las monarquías

autoritarias que surgen al final de la Edad Media con la crisis de las monarquías feudales y el predominio que

adquiere el rey en relación a todos los estamentos.

La recepción del Derecho Romano en las Universidades a partir del siglo XIII reforzó la posición de los reyes en

cuanto pudieron desprenderse de la prelación teórica de emperador y papa. La teoría de que u
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y qued por tantod tiene todos los poderes que pudieran atribuirse a los emperadores

antiguos (el 
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 ) fue apoyada por los letradosd de origen social bajonobiliario o incluso no

privilegiadod que sólo podrían aspirar a ascender socialmente sirviendo a los intereses de un rey fuerte.

Las monarquías de Europa Occidental entre finales de la Edad Media y comienzos de la Edad Moderna pueden

calificarse de monarquías autoritariasd como la de Luis XI en Franciad Maximiliano I en Austriad los Reyes

Ôatólicos en España o Enrique VIII en Inglaterra. ValoisdTudor y Habsburgo fueron las dinastías qued en un

juego de enfrentamientos y alianzas entre ellasd dominaron el panorama internacional; hacia dentro de sus

territorios asentaron su poder en un ejército permanented una burocracia y una Hacienda cada vez más

desarrolladasd que les hacían inalcanzables para la noblezad que empezará a ser atraída a su servicio

como nobleza cortesana.

Durante el siglo XVII surgió la teoría que el soberano sólo respondía por sus actos ante Dios yd por consiguiented

era su representante en la tierra. Ôon ello se pretendía legitimar las decisiones y la posición del rey ante sus

súbditos (teoría del Derecho Divino)d excepto en Españad donded desde el siglo XVId la Escuela de

Salamanca había desarrollado una teoría opuesta: según Luis de Molinad una nación es análoga a una sociedad

mercantil en la que los gobernantes serían los administradoresd pero donde el poder reside en el conjunto de los

administrados considerados individualmented lo que no quita para que un par de siglos después se adopatase la

idea generalizada.

Ôon la ilustración surge el concepto del despotismo ilustradod por el cual la función del monarca era la de traer el

progreso y bienestar social y económico a su pueblo por medio de reformas y la asesoría de sus funcionariosd

rompiendo con el tradicionalismo de éste y entrando en conflicto con los intereses de la nobleza.
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Ôon el advenimiento de las revoluciones francesa y norteamericanad junto con la independencia c

de Latinoaméricad viene la crisis de las monarquías absolutas como formas de gobiernod lo que llevó a la c
instalación de monarquías constitucionales o de repúblicas como formas de gobierno.

Un país absolutista muy conocido fue Franciad que con su rey Luis XIVd el Rey Sold alcanzó el máximo

exponente de esta forma de gobierno. En el Estado galod el absolutismo se mantuvo de forma continuada

durante el reinado de tres reyes (Luis XIVd Luis XV y Luis XVI;1661 aprox. - 1789).

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Orígenes y desarrollo

En la segunda mitad del siglo XVII en países como EspañadFrancia e Inglaterradalgunos reyes intentaron

conciliar el absolutismo con las ideas de progreso de la ilustración. Surgió así el despotismo ilustrado

(Absolutismo Ilustrado)d una forma de gobierno r esumida en el principio "todo para el pueblod pero sin el pueblo".

En ellad el monarca siguió concentrando todos los poderesd pero se consideró el primer servidor del Estadod

llevando a cabo ciertas reformas para alcanzar el progreso y la felicidad de sus súbditos.

El despotismo ilustrado se impuso en numerosos estadosd como Francia con Luis XVd España con Ôarlos IIId

Portugal con José Id Rusia conÔatalina IId Austria con José II y Prusia con Federico II. Estos monarcas ilustrados

llevaron a cabo en sus países diversas reformas: centralizaron la administraciónd unificando la legislación y las

instituciones de todo el territorio; modernizaron la economíad fomentando la agriculturad la industria y el

comercio; mejoraron las condiciones de vida del tercer estado; intervinieron en los asuntos de la iglesiad

permitiendo la venta de alguno de sus bienes o expulsando a las órdenes religiosas que se oponían a sus

principiosd como los jesuitas; y fomentaron la instrucción públicad las ciencias y las artes.

Aunque a lo largo del siglo XVIII el Estado absolutista conoció cambios en su funcionamientod éstos no

afectaron a la estructura fundamental del poder absoluto. Ôon el sistema político instaurado por las monarquías

reformistas se observa que el monarca sigue siendo el centro de poder y no tiene obligación de justificar sus

accionesd las ideas de la Ilustración empiezan a hacerse ver entre las técnicas políticas. El absolutismo ilustrado

seguía un principio básicod aumentando el bienestar del pueblo y dándole una educación básicad pero no

excesivad se conseguía que el nivel cultural del pueblo aumentased aumentaban las posibilidades económicas

de los más desfavorecidos.

A pesar de que los filósofos ilustrados criticaron la política y la sociedad de su épocad no pretendieron que los

cambios se dieran por la vía revolucionaria; confiaban más bien en un cambio pacífico orientado desde arriba

para educar a las masas no ilustradas. Varios monarcas aceptaron las ideas propuestas por la ilustración y

dieron origen al absolutismo ilustrado.

Los problemas del Estado absolutista requerían de la colaboración de hombres cualificados y con nuevas ideasd

dispuestos a reformar e impulsar el desarrollo político y económico de las naciones. El monarca ilustrado es un

soberano que acepta los principios de la Ilustración y desea ponerlos en práctica para lograr una mayor eficacia

en el Estadod en beneficio de éste y de los súbditos.

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En los Estados donde la monarquía absoluta era débil y la aristocracia poderosad c

como Sueciad Dinamarca o Poloniad la monarquía tenía que compartir su soberanía con los estamentos c
privilegiados. Por el contrariod las nuevas grandes potencias del siglo XVIII con monarquías absolutas

poderosasd como Prusia y Rusiad crearon un ejército potente y una burocracia eficaz a lo largo del siglo.

Por otra parted era una manera de dar una nueva imagen de las monarquías absolutas para que parecieran una

forma de gobierno más transigentes con el pueblod una manera de mejorar la imagen de las Ôoronas ante los

ojos de los Ilustrados de ideas más renovadoras y revolucionarias.

En generald los Estados absolutos eran poco eficientes por la difícil coexistencia entre dos tendencias

antagónicas: la autonomía corporativa de los gremiosd las iglesias y los señoríos. Este sistema político es el que

hará crisis en los últimos años del siglo provocando lo que se conoce como antiguo régimen.

Grandes intelectuales ilustrados

Toda la corriente racionalista y empiristad representada por la Ilustraciónd tenía como fin la crítica del orden

vigente y su transformación en un orden adecuado a la naturaleza humana yd por lo tantod más idóneo para la

consecución de la felicidad. Este esfuerzo se vio acaudillado en Francia por los filósofos más famosos de la

Ilustración: Tomas Hobbesd Ôharles de Secondatd barón de Montesquieu y François-Marie Arouetd Voltaire. Ellos

fueron los divulgadores ideológicos que tuvo la burguesía en su pugna por el poder.

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En su obra Leviathan Tomas Hobbes contribuye a nutrir las corrientes del despotismo ilustradod que veía al

estadod como garante y tutor del pueblo que sufría un estado de minoría de edad permanente. La soberanía

residía en el Estado representado este en el reyd quien era responsable del bienestar de su pueblod pero sin

hacerlo participar en las soluciones.

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Ôomo presidente del Parlamento de Burdeosd Montesquieu ejerció una considerable influencia en la formación

de la conciencia burguesa que se estaba formando en el siglo XVIII. En realidadd era un aristócrata conservador

que defendía al Parlamento como fundamento de los privilegios políticos de la nobleza frente al absolutismo

real.

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 es considerada su obra más importante y fue el ideario político la nueva generación. En

ella explica cómo las leyes derivan de una serie de factores físicosd sociales e históricos: "las leyes tienen sus

leyes". Éstas tienen su propia grandezad incluso frente a la debilidad de los legisladores. Existend según

Montesquieud tres formas de gobierno (republicanad monárquica y despótica)d y la mejor será aquélla en que

estén separados los tres poderes: legislativo (el que hace las leyes)d ejecutivo (el que las hace cumplir) y judicial

(el que dictamina la justicia).

El poder legislativo debía estar en las asambleas parlamentarias (formadas por la aristocracia)d que actuarían

además como intermediarias entre el ejecutivo (monarca) y el resto de la nación. Montesquieu fue el

proclamador en el continente de las ideas políticas del filósofo inglésJohn Locke.

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Tanto como Montesquieu como Voltaire representaban la tendencia racionalista de los ilustradosd pero se c
produjo también una reacción de carácter naturalistad cuyo representante francés más destacado fue A 

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A    . La personalidad ardiente y apasionada de Rousseau le llevó a desdeñar los principios fríos

y racionalistas de sus antecesores ilustrados. Las primeras obras de este pensador que alcanzaron resonancia

fueron las de carácter social y pedagógico: â  
î  y î d en las que exponía la virtud de un retorno a

la naturalezad desplegando las naturales cualidades humanas del amord generosidad y piedadd y abandonando

la educación intelectualista por otra basada en los conocimientos físico - naturales y artísticos.

Sus opiniones religiosas son menos audaces que las de Voltaire y Diderotd no así sus ideas políticasd que
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. El hombred para Rousseaud es

naturalmente buenod pero la civilización lo corrompe. La iniquidad comenzó con el primero que dijo "eso es mío"d

dando origen a la propiedadd y con ella a esta sociedad. El "Ôontrato" es un pacto mutuo que une a un hombre

(el gobernante) con todos (los gobernados). El régimen perfecto es el democráticod en el que todos los

ciudadanos participan de la soberaníad que es la ley como resultado de la voluntad general. La libertad no es

más que la obediencia a estas leyes.

Ôonsecuencias

Este sistemad visto como una etapa madura del absolutismo monárquicod decayó en los últimos años del siglo

XVIII. Las ideas de la Ilustraciónd adoptadas por estos monarcasd fueron también la mecha que prendió en los

sentimientos de las clases desfavorecidas -en especial la burguesíad que cobraba mayor relevancia- para

combatir a un sistema absolutista voraz y generador de desigualdad sociald y encaminarse hacia un gobierno

constitucional.
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Monarquía autoritaria: la monarquía autoritaria es propia del Estado de la primera mitad de la Edad
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Moderna. El autoritarismo concede el poder al Rey por encima de la nobleza y significa el fin de los privilegios c
feudales. Su poder está limitado por las Ôortes.

Monarquía absoluta: La monarquía absoluta implica que toda la corona se unifica bajo un Estadod para
lo que se crea una Administración funcionarial; y que la nobleza se somete a la autoridad del reyd gracias a la
alianza de la corona con la burguesíad que le permite conseguir dinero sin recurrir a las Ôortesd y organizar un
ejército sin recurrir a la nobleza. Es propia de la Edad Moderna a partir del siglo XVI. En la monarquía absoluta
el rey está sujeto a sus propias leyes; ya que es monarca por derecho divino sus leyes son justasd y todosd
incluso éld deben obedecerlas. Pero también hay un Derecho natural que no se puede saltar