UNA CIUDAD LLAMADA

CONFUSIÓN

Lección 9 para el 27
de mayo de 2023
 “Pelearán contra el Cordero, pero el Cordero los
vencerá, porque es Señor de señores y Rey de reyes;
y los que están con él son llamados, elegidos y fieles”
(Apocalipsis 17:14)
En el contexto del conflicto cósmico entre
Cristo y Satanás, aparecen dos mujeres:
1. Una mujer vestida de blanco, de pie,
perseguida por Satanás (Apocalipsis 12).
2. Una mujer vestida de púrpura, sentada,
apoyada por Satanás (Apocalipsis 17-18).
El mensaje del segundo ángel hace referencia a
la segunda con estas palabras: “Ha caído, ha
caído Babilonia [Confusión]” (Apocalipsis 14:8).
Dos sistemas opuestos.
Dos tipos de vino.
Dos formas de pensar.
Dos líderes distintos.
Dos formas de adorar.
 DOS SISTEMAS OPUESTOS
“Otro ángel le siguió, diciendo: Ha caído, ha caído Babilonia, la gran ciudad, porque ha
hecho beber a todas las naciones del vino del furor de su fornicación” (Apocalipsis 14:8)
Cuando visitó Babilonia en el año 116 (poco
después de que Juan escribiese el Apocalipsis),
el emperador romano Trajano encontró solo
ruinas. Así que es evidente que Juan no se
refería a la ciudad física de Babilonia.
Según Génesis 11:9, Babilonia
significa “confusión”. En el tiempo del
fin, representa un sistema religioso
que mezcla verdad y mentira
provocando confusión.
Por el contrario, la mujer pura simboliza un sistema
religioso que se basa solo en la verdad. En el tiempo del
fin, el mundo sigue a Babilonia y acosa al remanente fiel.
Pero Babilonia caerá.
 DOS TIPOS DE VINO
“Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su
fornicación; y los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los
mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus
deleites” (Apocalipsis 18:3)
Babilonia ha “fornicado” con reyes y mercaderes. La iglesia ha
abandonado a su verdadero esposo (Jesús) y se ha unido de forma
ilícita con los poderes civiles.
Para conseguirlo, ha adulterado el vino puro del
evangelio de Jesús y ha ofrecido a las naciones el
vino de su propio pensamiento. Ha dejado de
seguir a Cristo para buscar el apoyo del Estado.
Pero la iglesia pura se ha mantenido fiel a su
Esposo. Solo sirve el vino puro, la sangre preciosa
de Cristo que limpia todo pecado (Mt. 26:28).
Por ello, Dios llama a sus hijos que aún están en
Babilonia a salir de ella (Ap. 18:3-4).
 DOS FORMAS DE PENSAR
“y en su frente un nombre escrito, un misterio: BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE
LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA ” (Apocalipsis 17:5)

Babilonia surge de una rebelión abierta contra Dios

(Gn. 11:1-4). La Babilonia actual se ha ido formando
sobre la misma base.
Al cambiar la Palabra de Dios por pensamientos
humanos y tradiciones, surge Babilonia y sus “hijas”.
Existen, pues, dos tipos de religión: la que
obedece la Palabra de Dios, confía totalmente
en Jesús, su gracia, su sacrificio y su expiación;
y la que sigue sus propias filosofías, confía en
la autoridad humana y depende de maestros
religiosos y tradiciones.
Durante toda la historia –y especialmente en el tiempo del fin–, Babilonia
ha intentado destruir a los que mantienen pura su fe (Ap. 17:6).
 DOS LÍDERES DISTINTOS
“Y me llevó en el Espíritu al desierto; y vi a una mujer sentada sobre una bestia
escarlata llena de nombres de blasfemia, que tenía siete cabezas y diez cuernos”
(Apocalipsis 17:3)

Babilonia está sentada sobre muchas aguas (Ap.

17:1, 15), y su fundamento es una bestia escarlata
(Ap. 17:3). Al estar fundamentada en un sistema
terrenal –humano– su líder también es una persona
o institución humana (2Ts. 2:4).
La iglesia pura, por el contrario, está fundamentada
sobre la Roca, el Mesías, Jesucristo nuestro
salvador (Mt. 16:16-18; 1Co. 3:11). Su líder, por lo
tanto, es Jesús (Col. 1:18).
En los últimos días de la historia de la Tierra, resurgirá un sistema de
Iglesia-Estado, la Babilonia espiritual, con un líder espiritual que
pretenderá hablar en nombre Dios y colocarse en lugar de Dios.
 DOS FORMAS DE ADORAR
“Sequedad sobre sus aguas, y se secarán; porque es tierra de ídolos,
y se entontecen con imágenes” (Jeremías 50:38)

Una de las razones de la caída de Babilonia fue su

idolatría. De igual modo, la adoración (veneración)
a las imágenes se introdujo desde muy temprano
en la iglesia (siglo IV), desviándola de la correcta
adoración a Dios.
La iglesia pura, sin embargo, obedece todos los
mandamientos de Dios (Ap. 12:17), incluido el
segundo, que prohíbe la creación de imágenes
y su adoración (Éxodo 20:4-6).
Al inclinarse ante una imagen, las personas
reducen la majestad de Dios a una estatua sin
vida, se degradan y se hacen semejantes a los
objetos que adoran (Ro. 1:23; Sal. 115:4-8).
 Tanto la iglesia pura como Babilonia aseveran servir a Dios y creer en Jesucristo.
¿Cuál es la diferencia?

La iglesia
Babilonia Vestida de púrpura y
pura Vestida del sol y adornada
escarlata, y adornada con la
con la gloria de la justicia de
falsedad humana y la
Cristo
tradición
Adornada con una guirnalda Adornada con oro, piedras
de estrellas, fundada en preciosas y perlas, confiada
Cristo y las enseñanzas de en su poder y fundada sobre
los apóstoles razonamientos humanos
Sentada sobre una bestia
De pie sobre la Luna,
escarlata, obtiene su poder
obtiene su poder de la
de los poderes políticos de
Palabra de Dios
la Tierra
Jesús y su Palabra son nuestra única salvaguardia en la crisis que se avecina. Las
falsificaciones serán tan parecidas a la verdad, que solo podremos distinguirlas llenando
diariamente nuestra mente de la Palabra de Dios y viviendo en comunión con Jesús.
“Las iglesias caídas son Babilonia. Babilonia ha estado
promoviendo doctrinas venenosas, el vino del error. Este vino
del error se compone de falsas doctrinas, tales como la
inmortalidad natural del alma, el tormento eterno de los
malos […]. Estos errores y otros por el estilo, son presentados
al mundo por las diversas iglesias”
E. G. W. (El evangelismo, pg. 268)

“A pesar de las tinieblas espirituales y del alejamiento de

Dios que se observan en las iglesias que constituyen
Babilonia, la mayoría de los verdaderos discípulos de
Cristo se encuentran aún en el seno de ellas”
E. G. W. (Eventos de los últimos días, pg. 170)