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FUNDAMENTOS

BIBLICOS DE LA
MISION
EN QUE NOS FUNDAMENTAMOS CUANDO
HABLAMOS DE LA MISION

TRINITARIO

TEOLOGICO CRISTOLOGICO

ECLESIOLOGICO PNEUMATOLOGICO
FUNDAMENTO TRINITARIO -
BIBLICO

PADRE HIJO E.S.


• Jn. 10, 10 • Jn. 16, 5-
• Jn. 3-16 7
• Gn. 1 • Hc. 1.8
Estas relaciones misiones – misiones son tres:

EL Hijo responde también De esta unión total, infinita inimaginables


Dios comparte todo su ser de Dios:
eternamente al Padre con la en el amor absoluto, “procede” la tercera
“engendrando” eternamente al
donación total de su ser de Hijo persona que es la misma VIDA de Dios, el
Hijo. Esta primera relación – misión
“engendrado” en el amor. Esta vinculo de unión entre los dos y que es el
es de PATERNIDAD. Por eso Dios AMOR. Esta tercera relación – misión de
relación – misión es FILIACIÓN.
es PADRE. Dios es el ESPIRITU SANTO.
Por esta Dios es Hijo.
Dios Padre

VIRGEN
Dios Hijo Dios E.S. MARIA APOSTOLES IGLESIA
“Yo te envió al Faraón para que saques
de Egipto a mi pueblo los hijos de
Israel” Ex.3,10

También en la “Dijo a Abraham: Deja tu país, a los de


Sagrada Escritura tu raza y a tu familia de tu padre y anda
encontramos cuando a la tierra que yo te mostrare” Gn. 12,1
Dios hace algunos
envió por ejemplo: Envío de Dios a Isaías Is. 6. 8-9
Designio del Padre (A.G.)
• 2. La Iglesia peregrinante es misionera por su naturaleza, puesto que toma su origen de la
misión del Hijo y del Espíritu Santo, según el designio de Dios Padre. pero este designio dimana
del "amor fontal" o de la caridad de Dios Padre, que, siendo Principio sin principio, engendra al
Hijo, y a través del Hijo procede el Espíritu Santo, por su excesiva y misericordiosa benignidad,
creándonos libremente y llamándonos además sin interés alguno a participar con El en la vida y
en la gloria, difundió con liberalidad la bondad divina y no cesa de difundirla, de forma que el que
es Creador del universo, se haga por fin "todo en todas las cosas" ( 1 Cor, 15,28), procurando a un
tiempo su gloria y nuestra felicidad. Pero plugo a Dios llamar a los hombres a la participación de
su vida no sólo en particular, excluido cualquier género de conexión mutua, sino constituirlos en
pueblo, en el que sus hijos que estaban dispersos se congreguen en unidad (Cf. Jn, 11,52).
MISION DE JESUS
• El Hijo del Hombre no vino a ser servido, sino a servir y a dar su vida para
redención de muchos, es decir, de todos (Cf. Mc., 10,45). Los Santos Padres
proclaman constantemente que no está sanado lo que no ha sido asumido por Cristo.
Pero tomó la naturaleza humana íntegra, cual se encuentra en nosotros miserables y
pobres, a excepción del pecado (Cf. Heb., 4,15); 9,28). De sí mismo afirmó Cristo, a
quien el Padre santificó y envió al mundo (Cf. Jn., 10,36): "El Espíritu del Señor está
sobre mí, porque me ungió, y me envió a evangelizar a los pobres, a sanar a los
contritos de corazón, a predicar a los cautivos la libertad y a los ciegos la recuperación
de la vista" (Lc., 4,18), y de nuevo: "El Hijo del Hombre ha venido a buscar y a salvar lo
que estaba perdido" (Lc., 19,10)
Misión del Espíritu Santo
• 4. Y para conseguir esto envió Cristo al Espíritu Santo de parte del Padre, para que realizara
interiormente su obra salvífica e impulsara a la Iglesia hacia su propia dilatación. Sin duda, el
Espíritu Santo obraba ya en el mundo antes de la glorificación de Cristo. Sin embargo, descendió
sobre los discípulos en el día de Pentecostés, para permanecer con ellos eternamente (Cf. Jn.,
14,16), la Iglesia se manifestó públicamente delante de la multitud, empezó la difusión del
Evangelio entre las gentes por la predicación, y por fin quedó prefigurada la unión de los pueblos
en la catolicidad de la fe por la Iglesia de la Nueva Alianza, que en todas las lenguas se expresa,
las entiende y abraza en la caridad y supera de esta forma la dispersión de Babel. Fue en
Pentecostés cuando empezaron "los hechos de los Apóstoles", como había sido concebido Cristo
al venir al Espíritu Santo sobre la Virgen María, y Cristo había sido impulsado a la obra de su
ministerio, bajando el mismo Espíritu Santo sobre Él mientras oraba.
Redemptoris 1. La misión de Cristo Redentor, confiada a la
Missio Iglesia, está aún lejos de cumplirse. A finales del
segundo milenio después de su venida, una
mirada global a la humanidad demuestra que esta
misión se halla todavía en los comienzos y que
debemos comprometernos con todas nuestras
energías en su servicio. Es el Espíritu Santo quien
impulsa a anunciar las grandes obras de Dios: «
Predicar el Evangelio no es para mí ningún motivo
de gloria; es más bien un deber que me incumbe:
Y ¡ay de mi si no predicara el Evangelio! » ( 1
Cor 9, 16).
La misión de Jesús

Jesús concentró su misión primera hacia la comunidad de Israel.


Aunque hubo ocasiones en que Jesús se encuentra con los gentiles,
Jesús no tuvo un programa misionero explicito, en realidad el no
fue el primer misionero enviado a los gentiles. !os mandatos
misioneros en su mayor“ a se encuentran en un contexto post –
pascual: (Mt 28, 18-20;  Mc 16, 15-18; Lc 24, 46-49; Jn 20,
21-23)
Jesús se presenta como el enviado:

• Yo he venido para anunciar el evangelio Mc. 1,38


• A cumplir la Ley Mt. 5,17
• Traer fuego a la tierra Lc. 12, 49
• A llamar a los pecadores Mt. 9, 13
• Salvar lo que se ha perdido. Lc. 19, 10
• A servir y dar la vida. Mc. 10, 45
El Espíritu Santo protagonista de la Misión Rmi.
• 21. « En el momento culminante de la misión mesiánica de Jesús, el Espíritu Santo se hace presente en el
misterio pascual con toda su subjetividad divina: como el que debe continuar la obra salvífica, basada en el
sacrificio de la cruz. Sin duda esta obra es encomendada por Jesús a los hombres: a los Apóstoles y a la
Iglesia. Sin embargo, en estos hombres y por medio de ellos, el Espíritu Santo sigue siendo el protagonista
trascendente de la realización de esta obra en el espíritu del hombre y en la historia del mundo ».
• El Espíritu Santo es en verdad el protagonista de toda la misión eclesial; su obra resplandece de
modo eminente en la misión ad gentes, como se ve en la Iglesia primitiva por la conversión de Cornelio, por
las decisiones sobre los problemas que surgían por la elección de los territorios y de los pueblos. El Espíritu
actúa por medio de los Apóstoles, pero al mismo tiempo actúa también en los oyentes: «
Mediante su acción, la Buena Nueva toma cuerpo en las conciencias y en los corazones humanos y se
difunde en la historia. En todo está el Espíritu Santo que da la vida »
Espíritu Santo
• Viene para consolar
• Fortalecer
• Iluminar
• Guiar
Preguntas

• ¿Cuál es la base fundamental de la Misión?

• ¿Nos consideramos enviados?

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