CARACTERIZACIÓN: Capa delgada de la atmósfera terrestre: Tropósfera. Espesor: 15 Km., a nivel del Ecuador y 9 Km., en los polos. Aire: Mezcla de gases cuya composición varía con la altura, pero se mantiene más o menos estable para el conjunto de la tropósfera. Por su cantidad, los gases principales son el O y N. Otros gases, como el anhidrido carbónico o el vapor de agua, son muy importantes por su naturaleza. Tiene 3 constituyentes principales: O, CO2, N. Estos gases constituyen, las reservas a partir de los cuales se realizan los numerosos ciclos biogeoquímicos, en los diferentes ecosistemas. Importante, desde el punto de vista ecológico, la presencia del agua en el aire. El O del aire no existió siempre: Apareció con los organismos clorofilianos. Se transformó en OZONO formando un ecran protector contra las radiaciones ultravioletas . Facilitó el desarrollo de más organismos clorofilianos , en especial el fitoplancton y así la proporción de O creció hasta alcanzar, hace unos 20’ooo, ooo de años, el casi 21 % que representa en el aire. Sin embargo, la mayor parte del O de la biósfera esta fijada en los carbonatos, materias orgánicas y óxidos ferrosos y férricos. CARACTERIZACIÓN: Parece haber equilibrio entre el O producido y el consumido por el hombre y por los fenómenos de fotosíntesis y respiración. Científicos: Plenamente convencidos que el O molecular en la atmósfera y en los oceanos no está amenazado en un futuro próximo. Existe la evidencia de que el O no es un factor limitante en el aire, sí lo es, en cambio, en el agua. Debido a los fenómenos de la fotosíntesis, el CO2 esta estrechamente asociado al O; se le encuentra en el aire y también en el agua, constituyendo la mayor parte de la reserva movilizable de C que sirve para elaborar la materia orgánica. Pero el C está, como en el caso del O, esencialmente en las rocas y minerales. CARACTERIZACIÓN: Actualmente tenemos 340 ppm de CO2 en el aire que respiramos. A comienzos del siglo pasado había sólo 290 ppm y en el año 1970 ya eran 321 ppm. El ciclo del C en la biósfera se cierra gracias al CO2 previa intervención del suelo, de los vegetales y animales. El CO2 en el agua no parece constituir un factor limitante para el crecimiento de los vegetales como lo es en el aire y allí interviene en complejos equilibrios con el Ca, produciéndose la precipitación abundante de carbonatos. El N, que representa al 78 % del aire, es otro de los elementos indispensables para la vida como los precedentes. A diferencia de aquellos, el N no puede ser utilizado directamente por la mayoría de los seres vivos y previamente debe ser fijado por organismos especializados o por procesos químicos naturales o artificales. CARACTERIZACION: Aportes de N por procesos de fijación biológica podrían ser del orden de los 92’000,000 de TM/año para toda la biósfera y las pérdidas por el fenómeno de desnitrificación pueden evaluarse en 83’000,000 de TM, siendo el saldo de 9’000,000 de TM de N fijados en el suelo, ríos, lagos y oceanos. Los procesos electroquímicos y fotoquímicos fijan de 4 a 10 TM de N nitroso o nítrico/ha./año. Las bacterias del suelo fijarían unos 25 Kg y las raíces de las leguminosas unos 150 a 400 Kg. La vida depende del aire no sólo a través del O para la respiración sino que también gracias a éste y al CO2 y al N para la formación de materia orgánica. El O, además contribuye a través del O3 a hacer posible y proteger la vida y lo mismo hacen otros componentes de la atmósfera y ésta en su conjunto, en relación a la Tº que podría generar el sol de no existir éste. Por último, el rol del aire: Transmisión de sonidos, determinación de clímas y fuente de energía no despreciable.