Diseño del plan

Estrategia implica la creación de una posición única en el mercado

involucrando una serie de actividades. Para esto, las empresas deben
hacer un “trade off”, en dónde deben renunciar a mercados, productos
y estrategias de competencia. La definición de la estrategia y el plan
para ejecutarla ha sido el centro de trabajo de Robert Norton y David
Kaplan, dos de los autores más influyentes en las últimas décadas, en
cuanto al diseño de planes estratégicos se refiere.
Analizar el entorno
El primero consiste en entender el mercado. Un marco de referencia
útil es la herramienta PESTAL. Esta evalúa diferentes aspectos a tener
en cuenta.

Legal
Ambiental
Tecnológico
Social
Económica
Política
Definir enunciados estratégicos
Los enunciados estratégicos básicos son: la misión de la compañía,
dónde se define el propósito del negocio y el quehacer diario; la visión,
a dónde se quiere llegar en un horizonte de tiempo en términos de
mercado y por último; revisión de los valores corporativos.
Para James Collins y Jerry Porras en su artículo “Building Your Company
´s Vision”, las estrategias, metas e inclusive la visión de la compañía
pueden cambiar pero los valores y la ideología son inmodificables en el
tiempo. Es el pegante que mantiene la compañía en su devenir. Es algo
que se descubre en el interior.
Definir objetivos estratégicos
El primer paso para volver operativa una estrategia es definir los
grandes objetivos que tiene la organización. Estos objetivos se pueden
definir en 4 grandes temas:

Financieros

Clientes

Procesos

Personas
Formular las metas
Una vez definidos los objetivos, es necesario definir un indicador y una
meta para cada objetivo y su correspondiente periodicidad. Esto
permitiré saber si se está cumpliendo o no con el objetivo estratégico.
Cada objetivo debe tener un responsable encargado en su
cumplimiento.
Definir y priorizar las iniciativas estratégicas
Tener los objetivos, metas, indicadores y responsables no basta. Cada objetivo debe
contar con programas de acción que tengan un presupuesto asignado. Sin
presupuesto asignado es casi imposible ejecutar la estrategia ya que esta desarrolla
a partir de proyectos o programas enfocados en el cumplimiento de los objetivos y
las metas correspondientes. Previo al presupuesto se priorizar los programas y las
iniciativas con el objetivo de elegir las de mayor impacto y menor costo.
Ejecutar las iniciativas
Neilson, Martin y Powers, en su artículo “Los secretos para ejecutar una
estrategia exitosamente”, describen que una estrategia brillante puede
ubicar la compañía en competencia, pero únicamente una ejecución
sólida permite mantenerla allí. Ejecutar la estrategia implica desarrollar
a cabalidad las iniciativas y programas, midiendo su impacto en los
indicadores y el cumplimiento de las metas.
Aprender y ajustar
Toda estrategia debe ser cambiante y resiliente, ya que el mercado y las
necesidades de los clientes cambian, las regulaciones y normas varían,
diariamente nacen nuevas tecnologías y los intereses sociales
evolucionan. Es por esto que la ejecución de los planes estratégicos
pueda que requieran ser ajustados, las metas aumentadas, los
indicadores rediseñados si surgen nuevos mecanismos para medir
mejor, etc. La estrategia debe ser resiliente.
Al final del día la estrategia se ejecuta día a día. El resultado de un
negocio en el largo plazo es la sumatoria de las actividades que sus
empleados hacen diariamente.